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MODELO DE NEGOCIO

Turismo Aventura: Utiliza el entorno o medio natural  como recurso para


producir sensaciones de descubrimiento, las actividades que aquí se pueden
realizar son variadas y dependen de cada ambiente natural donde se realicen.
INTRODUCCION AL BUCEO

Desde el comienzo de su historia, el hombre ha sentido curiosidad por


descubrir que es lo que se oculta en los fondos marinos. Han sido muchos y
muy variados los inventos y artefactos que se han intentado utilizar a lo largo
de los siglos con este motivo, pero es sólo a partir de mediados del siglo XX
que se ha masificado la práctica de este deporte.

Prehistoria y Antigüedad.

Hay indicios de la práctica del submarinismo en la prehistoria en los grandes


yacimientos de conchas de moluscos (muchos de los cuales viven varios
metros por debajo de la superficie del mar) que se han encontrado en el Báltico
y en las costas de Portugal. Esto prueba que el hombre primitivo, salvo que
esperara las grandes bajamares para juntarlos, se veía obligado a bucear hasta
los lugares en que estaban enclavados. Las tribus de la Polinesia también
practican el buceo desde tiempos inmemoriales. Estas tribus usaban unas
primitivas pero prácticas lentes submarinas, formadas por un armazón de
madera sosteniendo una lámina transparente de carey u otra caparazón de
tortuga marina.

Entre los pueblo de la Antigüedad, las primeras noticias que se tienen de la


práctica de la inmersión son del año 168 A.C., cuando se utilizaron buzos para
recuperar el tesoro que Perseo, último rey de Macedonia (Grecia), lanzara al
mar los tesoros de su palacio. En los "Problemas" de Aristóteles se mencionan
dos tipos de aparatos de inmersión. Uno de ellos es la "levita", un antecedente
de la campana de buzo, que consiste en un gran recipiente metálico que se
coloca invertido en el agua, lo que permite aprisionar en su interior el volumen
de aire que su capacidad admita. Uno o más buzos se acomodan en su interior,
desde donde realizan salidas al fondo del mar. El otro instrumento mencionado
es un tubo respirador muy parecido al actual snorkel.

Edad Media y Renacimiento

Aunque la Edad Media vivió de espaldas al mar, es en esta época tan poco
marinera donde se encuentra al extraordinario buceador Nicolás, conocido
como "el pez", y cuyas proezas submarinas fueron inmortalizadas por Federico
Schiller en su balada del "Buceador", y como personaje del "Quijote" de
Cervantes con el nombre de "Peje Nicolao".

En el Renacimiento, el polifacético genio Leonardo da Vencí diseñó un par de


aparatos de buceo. El primero consistía en un simple tubo, similar al actual
snorkel. Otro diseño muestra un casco completo con antiparras y un tubo
respiratorio en una especie de capuchón con púas, que hacían de defensa
natural contra posibles depredadores. Una variante representa un voluminoso
recipiente de aire sobre el pecho del buzo conectado a una máscara que le
cubre parte del rostro. El más perfecto de sus diseños consiste en un traje
completo de buzo, clasificado por otros autores como "equipo que cubre todas
las necesidades vitales y las exigencias especiales que un hombre puede
necesitar bajo el agua".

Época Moderna.

A partir de mediados del siglo XVIII comienzan a sucederse los


descubrimientos e inventos que permitirían a los buceadores sumergirse a una
mayor profundidad y por más tiempo. Es en este período que ganan aceptación
las campanas de buzo, como la "Patache" de Jean Barrié (1640), o la de Halley
(1690), que recibía suministro de aire desde la superficie.

La posterior evolución de la campana se debe a Augustus Siebe -a quien


algunos nombran el "Padre del Buceo Moderno"-, que reduciría su tamaño
hasta convertirla en un casco que recibía aire de una bomba desde la
superficie. El mismo Siebe, en 1837, le añadiría un traje impermeable que
dejaba "en seco" el cuerpo del buzo, y a la que llamó escafandra. Así nació el
equipo de buzo clásico, que con algunas modificaciones ha llegado hasta
nuestros días.

En 1860, un oficial de marina francés, Augusta Denayrouze, y un ingeniero de


minas, Benedict Rouquayrol, se unieron para construir un aparato mas ligero
que la escafandra de buzo, que consistía en un depósito metálico que contenía
aire a 30 o 40 atmósferas de presión, con un regulador elemental y una
manguera que suministraba aire desde la superficie y que se podía
desconectar por breves periodos de tiempo mientras el buceador seguía
respirando de la reserva de su depósito. Le darían el nombre de "Aeróforo".

Este aparato no llegó a utilizarse masivamente ya que permitía escasa


autonomía y no disponía de un sistema de visión adecuado. Henry Fleuss
desarrolló en 1879 un equipo de buceo que funcionaba con unas mezclas de
50% a 60% de oxígeno. La primera inmersión duró una hora y tras el éxito de la
misma convenció a Siebe Gorman and Co., de Londres, para que fabricara su
equipo.

Siglo XX
En la década del 30 se crean elementos fundamentales para el desarrollo del
buceo moderno como las aletas o patas de rana (1935), el tubo respirador
(1938) y la máscara que abarca ojos y nariz, patentada en 1938. En 1933 un
investigador francés, Le Prier, patenta la escafandra que proporciona al
buceador una autonomía real, gracias a la botella con aire a alta presión (150
atmósferas), y una buena visión, con el empleo de una máscara facial. Pero
este aparato no disponía de un sistema de control del consumo, lo que limitaba
mucho su autonomía.

En 1943, el equipo formado por el Teniente de Navío francés Jacques-Yves


Cousteau, el ingeniero Emile Gagnan, y un joven deportista Frédéric Dumas
probarían en aguas de la Costa Azul un aparato que habría de convertirse en
aquel con el que tantas generaciones habían soñado. Se trataba de la
escafandra autónoma, cuyo elemento fundamental era un regulador que
suministraba al buceador aire a presión ambiente, que se encontraba
comprimido a gran presión en una botella.

Este sistema daba la oportunidad de bajar a unas superficies nunca


imaginadas por el hombre y con un sistema de respiración bastante aceptable.
En realidad la escafandra es solo una parte del invento, pues Cousteau
utilizaba una máscara que cubría ojos y nariz, unas aletas de goma, y
compensaba la flotabilidad natural del cuerpo humano con un cinturón con
pastillas de plomo.

Desde ese entonces, los avances en el entendimiento de la fisiología y la


técnica que permiten al hombre respirar mezclas gaseosas han permitido que
los buceadores lleguen a descender hasta los 400 metros de profundidad.

TIPOS DE BUCEO

Buceo autónomo.- El buzo se desplaza libremente en el agua sin conexión


con la superficie. Es el caso más frecuente en todas las modalidades
deportivas, donde se alcanza una profundidad máxima de 30 metros.
Buceo autónomo · Buceo a pulmón o Apnea

En este tipo de práctica, el buzo aguanta la respiración sin ningún aparato de


ayuda y sale a la superficie para volver a tomar aire. La apnea se divide
básicamente en seis grandes categorías (sin contar con las diversas variantes
de cada una), que son muy diferentes entre sí y que se desarrollan a partir de
diversas técnicas y capacidades físicas.

1. Apnea estática
La apnea estática consiste en medir el tiempo que el participante pue-de
permanecer bajo el agua habiendo inhalado aire normal.

2. Apnea dinámica.
En esta categoría se mide la máxima distancia que se puede recorrer bajo el
agua. Una submodalidad es realizar el recorrido con aletas o sin aletas. Es una
modalidad muy poco conocida, y no tiene la importancia y los seguidores de
otras.

3. Apnea libre
Consiste en realizar el descenso sin aletas impulsándose mediante una cuerda
para descender y ascender. Tampoco es una modalidad muy conocida.

4. Peso constante
Consiste en alcanzar la máxima profundidad posible con la única ayuda motora
de las aletas y con un lastre fijo. Es decir, se debe subir con el mismo peso con
el que se inició la inmersión. Debido a esto, los deportistas suelen utilizar muy
poco lastre, lo que dificulta enormemente el descenso, sobre todo durante los
primeros metros.
En esta categoría hay que tener muy presente la profundidad y sus múltiples
consecuencias, que suponen un gran aumento en la dificultad. Durante los
primeros veinte metros se gasta una enorme cantidad de aire para lograr
descender, así como también resulta muy costoso ascender hasta alcanzar una
flotabilidad aceptable.

Por esta y otras razones se considera al peso constante la modalidad más


competitiva y difícil. Se suele realizar la inmersión siguiendo la trayectoria de un
cable tenso en cuyo extremo se encuentra una pequeña placa metálica
indicando la profundidad.

5. Peso variable
En esta modalidad se permite descender con un peso diferente al del ascenso.
Es posible dejar en el fondo un total de treinta kilos, para conseguir realizar un
descenso más rápido y una subida a superficie más fácil, aunque siempre con
la única ayuda de las aletas. Aquí cobra una especial importancia la adaptación
al medio y a la profundidad, que constituye el principal problema a batir.

6. No limits
Esta es, sin duda, la más espectacular, peligrosa y controvertida de las
modalidades de apnea. El nombre mismo indica cuales son las reglas a seguir:
sin limites, todo vale con tal de alcanzar la máxima profundidad en una sola
inspiración de aire normal.

El apneista puede sumergirse con la cantidad de peso que desee y subir libre
de tal peso. Además están permitidos globos inflables que lo suban a gran
velocidad. El lastre suele tener forma de una pesada barra metálica en la que
los deportistas se pueden sujetar fácilmente y que baja por un cable que llega a
grandes profundidades. Basta con quitar el freno para comenzar el descenso, y
una vez abajo, inflan unos grandes globos que suben velozmente despidiendo
aire con los profundistas agarrados a ellos.

Esta modalidad, debido a las grandes profundidades en las que se trabaja,


conlleva grandes peligros que varias veces se han cobrado victimas. Además,
las diversas organizaciones que promocionan y organizan las actividades
apneísticas no han homologado el no limits, ya que no estaban dispuestas a
afrontar el peligro consiguiente, y lo han declarado actividad experimental.
Buceo no autónomo
El buzo se desplaza conectado a un equipo de aire que se encuentra en la
superficie usando la clásica escafandra. Se aplica con fines comerciales o
científicos; si bien la manguera limita los desplazamientos del buzo, permite
mayor tiempo de permanencia bajo el agua. Puede realizarse con la
escafandra clásica Helmet o con equipo Hooka.
Buceo autónomo · Snorkelling
Quien no se anime a sumergirse muchos metros o desee explorar debajo del
agua sin alejarse de la superficie puede practicar el snorkeling, en el que se
respira a través de un tubo snorkel de treinta centímetros de longitud.
Buceo deportivo

Se puede definir como el Buceo Autónomo que se realiza con fines no


comerciales, sino puramente recreativos. Comprende las disciplinas de caza
submarina, fotografía submarina, orientación, recolección de especies, etc.
Buceo adaptado

El Buceo adaptado es el conjunto de actividades subacuáticas, en apnea o


escafandra autónoma que realizan individuos con discapacidad. Precisan por
ello una serie de adaptaciones de material, técnicas o de logística. Todo ello,
para poder practicar el buceo con la misma seguridad que el individuo
estándar. En condiciones normales, como es evidente, estos discapacitados no
podrían efectuar el "buceo autónomo".

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