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Hacia una visión geográfica propia de

nosotros mismos. Reflexión sobre el


eurocentrismo en los mapas

Victoria Vaca Narvaja


Córdoba, Suramérica

“El mapa, que nos achica, simboliza todo lo demás. Geografía robada,
economía saqueada, historia falsificada, usurpación cotidiana de la realidad del
llamado Tercer Mundo, habitado por gentes de tercera, abarca menos, come menos,
recuerda menos, ie menos, dice menos!. "Eduardo Galeano#

¿Nos hemos preguntado alguna vez cuál es el srcen y validez de los


mapas y planisferios que habitualmente reproducimos y usamos como material
pedagógico en nuestras escuelas, universidades y medios gráficos en general?

¿Cuál es nuestra propia “imagen geográfica del mundo?, ¿!ui"n la


produce? ¿#n qu" nos basamos para representar y representarnos la dimensión
de nuestros territorios, de sus recursos natur ales, de su geograf$a humana,
cultural, económica y hasta epist"mica? No será que nos miramos a trav"s de
o%os a%enos que nos dicen quienes y cómo somos, dónde estamos, cuánto

“valemos, al amparo de una supue sta certidumbre proporcionada por un


saber denominado “cient$fico&

'a construcción de una imagen del mundo, un planisferio por e%emplo,


descansa en un con%unto de prácticas institucionales, pedagógicas, culturales
y pol$ticas que al igual que diversos sistemas de clasificación de territorios y
poblaciones humanas son parte fundamental de las llamadas ciencias sociales
“modernas& Categor$as tales como “(rimer )undo , “*egundo )undo,
“+ercer )undo “pa$ses desarrollados, “en desarrollo y “subdesarrollados
“modernos y “tradicionales, “perif"ricos y “centrales etc&, etc&, dotan
de sentido interesado al espacio geográfico as$ representado y le confieren un
determinado orden y %erarqu$a&

1
#ntendámonos- la “imagen geográfica del mundo, tal como hoy y
desde hace más de .// a0os se nos ense0a 1por e%emplo a trav"s del
(lanisferio )ercator1 es una t$pica y escandalosa representación colonial
“euroc"ntrica que nos muestra como ellos nos ven y como ellos quisieran que
nosotros mismos nos veamos&

!uizá haya llegado la hora de plantear la e2istencia de otras miradas,


otras concepciones, otras imágenes, persuadidos como estamos de que hay
un mundo para todos y todos tenemos nuestro mundo, el propio, , no
e2cluyente, para nada 3nico y mucho menos impuesto& !ue el mundo es uno
pero son millones las miradas& 4 que la geograf$a o la cartograf$a, que es el
caso que nos ocup a, no se reduce a una mera cuestión de orientación y
ubicación en el espacio geográfico, sino que sirve de base tambi"n, para la
construcción de nuestra propia imagen identitaria& #s decir, va
necesariamente acompa0ada de una perspectiva geo1pol$tica del lugar que
ocupamos en relación a los demás pa$ses y continentes que componen el
globo, lugar que implica una posición en el espacio geográfico y tambi"n en el
espacio histórico, cultural, epist"mico y económico mundial&

#n s$ntesis, en el conte2to de esta problemática nos proponemos

abordar el contenido y continente claramente colonial empleado hasta ahora


en la construcción de los denominados “planisferios o “mapas al uso desde
hace tiempo, contraponiendo la visión del mundo que nos ofrece el (lanisferio
)ercator de fines del *567 con la que en el *55 propone 8rnold (eters en
homena%e a la igualdad, fraternidad y soberan$a de todos los (ueblos del
mundo&

2
La representación del “espacio geográfico”
en la istoria

9na de las caracter$sticas que compartimos con el reino animal es la


del sentido de la “orientación espacial& 8 trav"s de "ste y de la observación
del entorno, analizamos el espacio y trazamos las rutas y lugares de
referencia& *in embargo, lo que nos diferencia de ellos, es nuestra capacidad
de ampliar considerablemente este sentido mediante la creación y utilización
de “sistemas o códigos de orientación abstractos que nos permiten
representar simbólicamente nuestro entorno pró2imo y le%ano, delineando no
solo los contornos de nuestro “mundo conocido sino tambi"n las relaciones
de la comunidad con sus divinidades, con la naturaleza, entre la propia
comunidad o incluso con e2tra0os a ella&

'os dibu%os o inscripciones resultaron fundamentales para tal fin&


'as primeras representaciones conocidas se realizaron mediante
inscripciones grabadas sobre rocas, arcilla, talladas en madera o hueso s y
pintadas sobre piel o tela& 'a más antigua de la que se tiene noticia es una
placa de arcilla que data apro2imadamente del a0o :/// a& C& encontrada en
el norte de 7ra;& #n nuestro continente americano, tambi"n poseemos formas
srcinarias propias de representar nuestro “domicilio e2istencial <=usch>, tal
como quedó registrado en diversas pictograf$as, geoglifos y en las propias
crónicas de los espa0oles tras su arribo a nuestras tierras- seg3n indica 8rno
(eters, ernán Cort"s recibe de manos del emperador azteca )octezuma un
mapa de la costa de 8m"rica Central, pintado sobre tela&
'os primeros mapas basados en la percepción y en la e2periencia eran
circulares, 'os antiguos cartó grafos part$an del propio territorio y basaban
sus representaciones en el conocimiento que les brindaba la e2ploración de
los territorios más le%anos a los que pod$an acceder, de forma tal que al
concluir "stos siempre en una costa mar$tima, imaginaban a la tierra como
una superficie circular rodeada por agua&
#l filósofo griego #ratóstenes llevó a cabo en el a0o @@A a&C& una
medición por la cual demostraba que la tierra era redonda y creó la primera
red de coordenadas geográficas, compuesta de nueve meridianos y ocho
paralelos& #sta representación se basaba en cálculos matemáticos y se

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representaba en una plano rectangular, lo cual supon $a una avance en
relación con el criterio anterior,&
#n el a0o BB d& C& se publica el planisferio de )arino de +iro en su
obra este geógrafo recomienda tambi"n la construcción de mapas
rectangulares y sienta las bases del m"todo actual de proyección
cartográfica&
)arino, seg3n indica (eters, logró crear un planisferio que respetaba
las cualidades de fidelidad de e%e y de posición, siendo "ste uno de los
aportes fundamentales para el desarrollo de la cartograf$a&
*in embargo, en los primeros B&:// a0os de nuestra era, la imagen
geográfica que se impuso fue principalmente la de +olomeo, quien recopiló
en 8le%andr$a las fuentes del saber de toda la cultura grecorromana& #ste
griego construye una red de coordenadas geográficas basada en una
proyección de carácter cónico, cuyos meridianos curvos converg$an en el polo
norte, el cual era a su vez el punto de confluencia de los paralelos, tambi"n
curvos&
Decordemos que durante el siglo 57, las imágenes del mundo tambi"n
estuvieron fuertemente influidas por la concepción religiosa de la "poca, de
forma tal que en el “centro geográfico del planisferio ya no se ubicaba a la
propia comunidad histórica sino al centro espiritual religioso, Eerusal"n para
los católicos, o 'a )eca para los musulmanes por citar sólo dos e%emplos&

#n este sentido, afirma (eters-

“$espu%s, la Edad Media cristiana emplazó &erusal%n en el centro, mientras


que los árabes situaban en %ste 'a Meca. $e este modo se llegó a un
momento ideológico( en el centro del mapa )a no se encontraba como hasta
entonces la propia patria, sino aquella parte del mundo alrededor de la cual,
en sentido ideológico ) religioso, se consideraba que giraba el resto! & <'a
nuea cartografía, 8rno (eters>

#n el siglo 5777, con la e2tensión de la corona de 8ragón hacia el mundo


árabe <*iria, )arruecos, #gipto>, comenzaron a necesitarse cartas marinas
mas precisas que facilitaran la navegación&

4
'a cartograf$a moderna se funda, en parte, por esta necesidad y
tambi"n por el impulso srcinado en el vertiginoso proyecto de e2pansión
colonial europeo& 'as e2ploraciones hacia Ffrica y 8m"rica serán un factor
fundamental en la transformación de la cartograf$a y de la visión cristiana
tradicional del mundo #n este sentido, dice (eters-
“El hallazgo del marino ) comerciante de *uremberg Martin
+ehaim fue quizás más importante que los descubrimientos de olón
para difundir la nuea imagen del mundo. - partir de sus iaes de
e/ploración a la costa de 0frica, +ehaim constru)ó un globo. Esa re1
presentación fidedigna de la esfera terrestre asestó el golpe de muerte
a la imagen cristiana del mundo mantenida durante siglos!
#se globo terráqueo creado por Gehaim se convirtió en el s$mbolo de la
nueva imagen pos1cristiana del mundo que se impuso en #uropa hace ://
a0os, aunque reci"n :/ a0os despu"s ser$a plasmada cartográficamente& #s ya
conocido que cuando Colón llegó a nuestro Continente creyó encontrarse en la
7ndia, incluso murió con esa idea& 8 su vez, las rivalidades entre el imperio
portugu"s y el espa0ol por la hegemon$a del espacio e2tra1europeo dieron
lugar a un con%unto de intrigas y desinformaciones entre ambas coronas que
obligaban a los navegantes a informar sobre las rutas transitadas sólo a los
cartógrafos de sus respectivas coronas& 'a pu%a por el control de la
información y la construcción de cartas de navegación cada vez más e2actas

será un factor de conflicto permanente durante la "poca colonial& #s reci"n


en el a0o que Colón muere <B:/H>, cuando aparece el planisferio de Iiovanni
)atteo Contarini con la representación de un cuarto continente al que un a0o
despu"s el cartógrafo alemán )artin JaldseemKller le dar$a el nombre de
“8m"rica en honor a 8m"rico 6espucio, a quien atribuye haber sido el
primero en afirmar su e2istencia&
'a irrupción del nuevo Continente supuso necesariamente la creación
de una nueva imagen del mundo& Ierardo )ercator, allá por el a0o B:HL, se
servirá de los aportes de #ratóstenes y de )arino para la construcción del
nuevo planisferio& #ste planisferio hará historia y prefigurará la nueva imagen
“global desde el siglo 567 hasta la actualidad,&

5
Imagen Planisferio de Mercator
!l planisferio de "ercator

!l surgimiento de la cartograf#a moderna$ emos referido


anteriormente que la representación del espacio geográfico y simbólico ha
sido una práctica com3n a las diversas comunidades humanas& *in embargo,
con el surgimiento de la cartograf$a como disciplina cient$fica, todas estas
formas otras de representación serán consideradas como pre1cient$ficas,
simbólicas o ideológicas, y por tanto, carentes de validez epist"mica& #s
decir, el carácter “cient$fico que adquiere la cartograf$a <%unto con el resto
de disciplinas modernas> descansa en el supuesto de que "sta se funda en un
con%unto de criterios epistemológicos uniersales y en este sentido, los 2nicos
criterios álidos de conocimiento&
#ntonces- ¿!u" pasa cuando una 3nica forma de representación del
espacio se impone sobre tod as las demás? +ras la conquista de 8m"rica se
inicia un proceso de e2pansión mundial de la civilización europea que dará
lugar a lo que hoy se conoce como “globalización dibu%ando una geograf$a
económica y pol$tica mundial estructurada en “centros y periferias& #sta
e2pansión y hegemon$a mundial occidental será %ustificada simbólica y
discursivamente a trav"s la producción de sucesivos metarrelatos

pretendidamente universales <proyecto de la cristiandad, civilizatorio,


capitalista,socialista, etc&> que impondrán una “visión hegemónica del
mundo y de la “historia en la que serán subsumidos todos los pueblos y
comunidades humanas de todo tiempo y lugar& #n esta dirección, afirma
#dgardo 'ander-
“Con el inicio del colonialismo en 8m"rica comienza no
sólo la organización colonial del mundo sino 1simultáneamente1 la
constitución colonial de los saberes, de los lengua%es, de la
memoria y del imaginario& *e da inicio al largo proceso que
culminará en los siglos 56777 y 575 en el cual, por primera vez, se
organiza la totalidad del espacio y del tiempo 1todas las culturas,
pueblos y territorios del planeta, presentes y pasados1 en una gran

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narrativa universal& #n esta narrativa, #uropa es 1o ha sido siempre1
simultáneamente el centro geográfico y la culminación del
movimiento temporal <'a colonialidad del saber( eurocentrismo )
ciencias sociales,#&
#uropa se constituye de esta forma en “norma o “patrón del resto de
las sociedades humanas, que ahora son remitidas al “pasado y definidas
como “subdesarrolladas, “primitivas o “salva%es& #n el marco de este
proceso, se instaurarán y legitimarán tambi"n sus formas locales de
producción del conocimiento, de forma tal que las mismas servirán de patrón
o medida de referencia para la clasificación y %erarquización de la diversidad
de saberes y de sistemas simbólicos que las diversas comunidades humanas
desarrollaron a lo largo de su e2istencia histórica& *e inicia as$ un proceso de
“subalternización de los saberes no1occidentales &
8hora bien ¿Cuáles son los fundamentos epistemológicos de la ciencia
moderna? #n t"rminos muy resumidos podr$amos decir que se funda en una
concepción de la “verdad seg3n la cual un enunciado es cient$fico cuando
corresponde o representa fielmente la “realidad e2tra1discursiva& *obre la
base de "sta, se busca sentar las bases de un conocimiento “ob%etivo y
“universal& #s decir, un conocimiento que no dependa del su%eto que conoce
<de su corporalidad, de su cultura, de su historia> sino de un “m"todo
cient$fico <sistema de reglas que pueden ser aplicadas por cualquier su%eto

“racional> y que sea válido en todo tiempo y lugarM(ero para que ese
conocimiento sea posible será preciso postular la e2istencia de un “su%eto de
conocimiento universal, independiente de todo condicionamiento cultural,
pol$tico, histórico, social, se2ual, etc& 9n su%eto que no est" localizado en
“ning3n lugar y por eso sea capaz de observar la realidad en su ++8'7O8O&
8hora bien, la “des1corporización y “des1historización del su%eto de
conocimiento no será suficiente ya que garantiza sólo parcialmente el acceso
a la verdad- para ello será preciso tambi"n reducir la Naturaleza a mera
“cosa o materia mensurable, cuantificable, carente de sentidos previosM
reducirla a un con%unto de variables cuantificables interpretables desde el
lengua%e f$sico1matemático& Oe esta manera, la naturaleza es despo%ada de

7
toda su riqueza simbólica y reducida a mero ob%eto de conocimiento cuyas
leyes podemos conocer y manipular a voluntad&
'a ciencia moderna descansa en un con%unto de “separaciones
ontológicas& #n este sentido, afirma nuevamente #& 'ander-
“9n hito histórico significativo en estos sucesivos procesos de
separación lo constituye la ruptura ontológica entre cuerpo y mente,
entre la razón y el mundo, tal como "sta es formulada en la obra de
Oescartes& 'a ruptura ontológica entre la razón y el mundo quiere decir
que el mundo ya no es un orden significativo, está e2presamente muerto
<M> #l mundo se convirtió en lo que es para los ciudadanos del mundo
moderno, un mecanismo desespiritualizado que puede ser captado por
los conceptos y representaciones construidos por la razón& <M> #sta total
separación entre mente y cuerpo de%ó al mundo vac$o de significado y
sub%etivizó radicalmente a la mente& #sta sub%etivación de la mente <M>
colocó a los seres humanos en una posición e2terna al cuerpo y al
mundo, con una postura instrumental hacia ellos <M> *ólo sobre la base
de estas separaciones Pbase de un conocimiento descorporeizado y
desconte2tualizado1 es concebible ese tipo muy particular de
conocimiento que pretende ser des1sub%etivado <esto es, ob%etivo> y
universal <3bid, pág>
#sta escisión ontológica sienta las bases de un con%unto de oposiciones

binarias y e2cluyentes- *u%eto Q b%eto Dazón Q Cuerpo *ociedad Q


Naturaleza& *e constituye en patrón de conocimiento eurocentrado,
patriarcal y racista& #uroc"ntrico porque oculta al su%eto histórico1cultural de
conocimiento e invisibiliza el lugar geo1pol$tico y geo1histórico desde donde
realiza sus observaciones, universalizando su propia particularidad y
e2cluyendo toda otra forma de conocimiento que no se su%ete a las formas
instituidas por la ciencia moder na occidental& *e impone as$ la idea de una
“verdad universal accesible 3nicamente a trav"s de la “ciencia moderna
occidental& (atriarcal porque con la escisión razónQcuerpo, se establece que
la verdad acontece 3nicamente en el ámbito de una “razón universal
independiente del cuerpo que la porta& (ero no todos los seres humanos son
portadores de la razón en un sentido plenoM 'a mu%er está enraizada en el

8
cuerpo, en ella prima la sensibilidad sobre el pensamiento abstracto& *e
subordina as$ lo femenino a lo masculino y se sientan las bases de un patrón
de conocimiento patriarcal& Dacista porque tampoco todos los grupos
humanos son portadores de esa razón universalM 7ndios, negros, orientales, y
demás pueblos, ligados tambi"n al cuerpo y a sus instintos, no son su%etos de
conocimiento en el sentido pleno de la palabra& 'as poblaciones de color se
subordinan epist"micamente a la población blanca europea y devienen en
“ob%eto de conocimiento para la ciencia moderna occidental&
#ntonces, sobre la base de la oposición su%etoQob%eto se construirán el
con%unto de categor$as que darán lugar a los nuevos campos disciplinarios o
“del saber& 'a cartograf$a, como disciplina moderna, se fundamenta en este
mismo patrón de conocimiento&& *erá preciso preguntarnos entonces- ¿Cuáles
son los fundamentos epistemológicos de nuestra imagen geográfica actual del
mundo y qui"nes la construyen? ¿!u" lugar ocupamos en ella? ¿Cómo nos
vemos en relación a las demás regiones del mundo? ¿Cuál ha sido el conte2to
histórico1pol$tico de su producción?

%cerca del concepto de pro&ección$ #l globo terráqueo es la 3nica


representación fidedigna de la superficie terrestre al poseer fidelidad de
forma, de distancia, angular, de superficie, de e%e y de posición& *in
embargo, no nos permite observar simultáneamente toda la superficie

terrestre y comparar territorios le%anos entre si& (ara que esto sea posible, se
ha creado un artilugio matemático a trav"s del cual se traslada la superficie
del globo <que es una figura esf"rica o tridimensional> a un plano <que es una
figura bidimensional>& 'lamamos as$ mapa o planisferio a la representación
plana de la totalidad de la esfera terrestre& 'a transformación de un espacio
tridimensional en uno bidimensional se denomina pro)ección. Rsta es un
sistema de representación gráfico que establece una relación ordenada entre
los puntos de la superficie curva de la +ierra y los de una superficie plana& *e
basa en cálculos matemáticos que trasladan los datos de una determinada
posición geográfica en el esferoide Platitud y longitud1 a una determinada
posición geom"trica en el plano, operación para la cual se crea una red de
coordenadas geográficas en forma de malla 1meridianos y paralelos1 que en el

9
plano se identifican por las coordenadas / e )& Como es conocido, la +ierra es
un geoide, es decir, no es una esfera perfecta sino achatada en las zonas
polares y ensanchada en la zona ecuatorial, lo que geom"tricamente la
aseme%a a la figura del elip soide& 'a dificultad de hacer mediciones con
coordenadas esf"ricas ha generado la necesidad de que los datos geográficos
se proyecten a un sistema de coordenadas planas& Oe esta forma, para la
realización de la proyección, se dibu%an sobre un plano dos e%es o
coordenadas centrales- uno horizontal <e%e /# y uno vertical <e%e )# que
servirán de valores de referencia a los meridianos y paralelos proyectados por
encima y por deba%o de los mismos, los cuales adquieren un valor positivo o
negativo seg3n su ubicación en la parte superior o inferior del plano& Cada
posición tiene dos valores que la referencian a esa posición central, uno
especificando su posición horizontal y la otra su posición vertical
<coordenadas / e )>& Oe esta forma, los cuatro cuadrantes representan las
cuatro combinaciones posibles de coordenadas / e ) positivas y negativas&
#sta transposición conlleva necesariamente distorsiones que afectan
fundamentalmente a la “forma, la “superficie <conservación de todas las
áreas en la misma escala>, la “distancia y la “dirección de los territorios
representados& Oependiendo de cuál sea el punto que se consid ere como
centro del mapa, se distingue entre proyecciones polares, cuyo centro es uno
de los polos ecuatoriales, cuyo centro es la intersección entre la l$nea del

#cuador y oblicuas o inclinadas, cuyo centro es cualquier otro punto& 8l


trasladar una superficie esf"rica a una plana se pierden necesariamente las
cualidades de fidelidad de forma, angular y de distancia, pero pueden
conservarse otras tres cualidades fundamentales- la fidelidad de superficie,
de e%e y de posición

Volviendo al 'lanisferio "ercator( Ierardo )ercator es considerado


el cartógrafo más importante de la #dad )oderna- su proyección determinará
la imagen geográfica actual del mundo, a3n .// a0os despu"s de su creación&
8 este respecto, nos dice 8& (eters-
“- medida que las potencias europeas fueron dominando el
mundo, diulgaron su religión, su filosofía, su moral ), con ellas,

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su concepción geográfica, de tal modo que, tras 455 a6os de
dominio colonial, los mapas europeos e/tendieron por doquier su
isión euroc%ntrica del mundo! <'a nuea cartografía, 8rno (eters>

#s decir, es un planisferio que e2presa la perspectiva de una "poca


signada por la hegemon$a mundial europea y la e2poliación y e2plotación
colonial& Srente a los mapas circulares propios de la concepción b$blica de la
+ierra, el )ercator ofrece una imagen rectangular de gran utilidad para los
navegantes, pues a trav"s de su sistema de coordenadas geográficas permite
una fácil navegación por los mares, constituy"ndose en un instrumento
fundamental para la e2ploración de las nuevas tierras “descubiertas por los
europeos& (ara su construcción, el holand"s se basó en el mapa de )arino de
+iro y lo adaptó a la forma rectangular de los mapas de #ratóstenes,
introduciendo una modificación importante al alterar la equidistancia de los
paralelos- partiendo del #cuador, agrandó cada vez más la distancia entre
"stos en dirección a los polos, de forma tal que los territorios más pró2imos a
las zonas polares se ven altamente distorsionados, es decir, se ven mucho más
grandes que los que están cercanos al #cuador&
#ste planisferio tiene fidelidad de e%e, es decir, sobre cualquier punto
del mapa, el norte se localiza en la vertical y el sur tambi"n pero deba%o, lo
que facilita la orientación en la navegación& +iene tambi"n fidelidad de

posición, es decir, todos los puntos que tienen la misma insolación se localizan
en el mismo paralelo, permitiendo reconocer las zonas climáticas con
e2actitud& #l planisferio )ercator localiza a 8lemania Psu patria adoptiva1 en
el centro del planisferio, desplazando a la periferia del plano al resto de los
territorios all$ representados
*in embargo, este planisferio no respeta una cualidad cartográfica
fundamental- la fidelidad de superficie& 'a “fidelidad de superficie es un
criterio cartográfico básico para la construcción de una representación
fidedigna de la superficie terrestre& Conforme a "ste, un planisferio respeta
esta cualidad cuando dos áreas cualesquiera seleccionadas guardan la misma
proporción entre s$ que en la superficie terrestre& #l planisferio )ercator, en
lugar de dividir la superficie del planisferio en dos mitades iguales, desplaza

11
el #cuador hacia la parte inferior del mapa, utilizando dos tercios de la
superficie del plano para representar el hemisferio norte y un tercio para el
hemisferio sur& #s decir, este planisferio distorsiona de tal forma la imagen
geográfica del mundo que los pa$ses ubicados al norte ocupan el doble del
espacio del plano respecto de los que están ubicados al sur& #sto se ve
claramente si consideramos que #uropa <con L,T millones de ;m@> está
representada en el mapa )ercator tan grande como Ffrica <que tiene /
millones de ;m@> siendo este 3ltimo tres veces más grande que el primero o
bien que 8m"rica 'atina abarca menos espacio que la suma de #stados 9nidos
y Canadá, cuando en realidad es bastante mayor que ambas&

Imágenes comparativas

8l no respetar el criterio de fidelidad de superficie, el planisferio


)ercator nos ofrece una imagen sumamente distorsionada de la superficie
terrestre, y %unto con ella, de la magnitud de los territorios, recursos
naturales, establecimientos humanos, etc&, de aquellos pa$ses y regiones que
son ubicados en la parte inferior del mapa& #s decir, esta representación
geográfica del mundo construye a las que fueran las potencias coloniales
europeas y “blancas mucho más grandes de lo que en realidad son y a los
territorios ecuatoriales y del sur, habitados por gente de “color , como
mucho más peque0os&
#l planisferio )ercator se devela as$ como una de las e2presiones más
plásticas y contundentes de la mirada colonialista europea sobre las regiones
que estaban ba%o su dominio y e2plotación colonial& *i bien es comprensible
que haya sido hegemónico en la "poca en que fuera concebido, hoy constituye
un claro anacronismo y una manifestación escandalosamente colonial que
debiera ser prontamente subsanada&
La pro&ección de %rno 'eters$

“- lo largo de cuatrocientos a6os de hegemonía europea se ha


desarrollado una teoría cartográfica basada 2nicamente en la imagen

12
geográfica euroc%ntrica del mundo, que se atrinchera contra toda
modificación sustancial de la misma! "-rno 7eters#

)"%*!N 'L%N)S+!)- '!.!S

#n BLT. 8rno (eters presenta un planisferio basado en un principio


fundamental- la igualdad de los pueblos& *u proyección nos provee de una
representación fidedigna de las proporciones relativas entre las superficies
terrestres continentales, es decir, respeta el criterio fundamental de
“fidelidad de superficie& #sto hace posible, a su vez, que se respete otra
cualidad fundamental de los planisferios- la de la “fidelidad de escala& 9na
proyección posee fidelidad de escala cuando e2presa num"ricamente la
misma proporción entre la imagen y el modelo srcinal en todos los puntos del
plano, es decir, cuando en cualquier punto de "ste un cent$metro representa
la misma superficie terrestre que en cualquier otro punto del mismo&
#n el planisferio (eters, la equidistancia entre los paralelos no se
agranda desde el #cuador hacia los polos sino que, al tomar como punto de
referencia el paralelo H/, si bien las zonas ecuatoriales aparecen
distorsionadas, los territorios ubicados en las zonas templadas aparecen
representados de manera más apro2imada a su forma real& #ste nuevo criterio
de proyección responde a la necesidad de representar lo más fielmente
posible a los territorios más densamente poblados& Oe esta mane ra, las
dimensiones representadas en la proyección (eters son más apro2imadas a la
realidad, mientras que en la proyección )ercator la distorsión es mucho
mayor& #n esta 3ltima, en cuanto se agranda la equidistancia de los paralelos
a medida que se apro2iman a las zonas polares, los territorios pró2imos a los
mismos aparecen con dimensiones e2ageradamente mayores& Oado que en el
hemisferio sur, los territorios pró2imos a la 8ntártida son escasos, priman all$
las masas oceánicas& (or el contrario, los territorios pró2imos al polo norte

son numerosos, de manera tal que ##99 y Canadá, parte de #uropa y de 8sia,
aparecen mucho más grandes en relación a las zonas subecuatoriales&

13
tra de las cualidades fundamentales del planisferio (eters es que
permite desplazar el centro de la representación a trav"s del principio de
“suplementariedad& #sta cualidad hace posible que un continente situado
%unto al margen izquierdo pueda separarse y ser a0adido al margen derecho o
viceversa& #s decir, permite “mover los continentes, ubicar a cualquier
continente en el centro del plano, de forma tal que se puede componer el
mapa de diversas maneras sin modificar la red de coordenadas geográficas&
'a operación de modificar la composición del plano es sumamente importante
en la medida en que nos permite desnaturalizar la imagen geográfica del
mundo que nos ha sido legada como universalmente válida, poniendo de
manifiesto as$ que las posiciones relativas de los continentes ParribaQaba%o,
derechaQizquierda1 son siempre arbitrarias o conencionales y no lugares
naturales en el planeta&

)"%*!N C-N %"!)C% %L C!N.-

'a imagen geográfica del mundo que nos es transmitida a trav"s del
planisferio )ercator, conlleva, como hemos referido reci"n, la internalización
de una imagen del mundo en la que #uropa aparece ocupando una posición
central, el oc"ano (ac$fico es representado de forma discontinua, y
*uram"rica en una posición marginal del plano y empeque0ecida& 8demás de
esto, la 8ntártica apenas aparece representada Pcuando no es directamente
suprimida1 #n este sentido, afirma (edro Iodoy-
“Con tal cartograf$a, los esfuerzos tendientes a generar conciencia
oceánica y antártica son est"riles& (or el contrario, el alumno
internaliza una sensación de le%an$a& !ueda reforzada la noción de
habitar un área perif"rica del planeta <M> +ambi"n, +ancredo (inochet 'e
Grun <M> e2horta a suprimir la e2presión “#2tremo riente para
referirse a 8sia& 8rgumentaba que para un criol lo, ese es el #2tremo

ccidente, pues no contemplamos el mundo desde 'ondres o (ar$s& *e


trata de opiniones se0eras que incentivan a favorecer una renovación de
la cartograf$a, en particular, la de uso escolar <(edro Iodoy, El libro

14
negro de nuestra educación ) la reolución ping8ino, pág L/, )ataquito
ediciones, @//H>
'as observaciones del profesor Iodoy son relevantes en la medida en
que nos advierte sobre otras de las consecuencias de adoptar el planisferio
)ercator como imagen del mundo “propia& 'a supresión de la 8ntártica y la
representación escindida del oc"ano (ac$fico impiden la formación de una
conciencia oceánica y captar la importancia económica y geoestrat"gica de la
cuenca del (ac$fico y de su pro2imidad con nuestro “#2tremo ccidente
<Eapón, China, 8ustralia y Nueva Uelanda>
'a propuesta de (eters es un detonante fundamental para cuestionar
una representación geográfica del mundo que nos ha sido transmitida como
correspondiente con la realidad. *i pensamos que, le%os de esto, en el
planeta no e2iste en verdad ni un “arriba y “aba%o, ni una “derecha e
“izquierda obetios sino siempre relatios a la perspectiva de quien
construye esas representaciones, se vuelve más clara la necesidad de
cuestionar una imagen del mundo que ubica al mundo perif"rico e2 colonial
“aba%o de los pa$ses europeos Pgenerando con esto una idea de inferioridad y
de marginalidad respecto de los que están ubicados por encima de ellos1 y de
dimensiones mucho menores de las que en realidad les corresponden& Nos
preguntamos entonces- ¿!u" nos impide, por e%emplo, invertir el mapa y
situar a 8m"rica 'atina y a Ffrica en la parte superior del plano? ¿ situar el

continente americano en el centro del planisferio?


Consideramos que al no haber lugares ni posiciones naturales en el
planeta, las diversas representaciones que construimos para proveernos de
una imagen geográfica del mismo remiten siempre y en 3ltima instancia a la
perspectia del observador& #s decir, remiten siempre a una perspectiva
particular, histórica y tambi"n geo1política. #sto e2plica claramente
porqu" en el planisferio )ercator #uropa está situada en el centro del plano y
por encima del sus entonces colonias de ultramar& +ambi"n e2plica que las
potencias colonialistas “blancas se hayan representado como mucho más
grandes que los territorios habitados por la gente de “color& 8rriba y aba%o,
centro y periferia, remiten necesariamente a sistemas de clasificación y
%erarquización en la que unos aparecen naturalmente como “superiores y

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otros como “inferiores& 8hora bien, ¿podemos seguir aceptando sin más esta
imagen geográfica del mundo? Consideramos que no, que es preciso
cuestionarla y fundamentalmente, construir imágenes alternativas& #l
planisferio (eters es una posibilidad válida para 8m"rica 'atina en la medida
en que nos provee de una imagen más fidedigna de las dimensiones de
nuestros territorios y, a su vez, nos permite ubicar a nuestro continente en el
centro del plano& *in embargo, es preciso aclarar que "sta es una posibilidad
y n o l a 2nica, de manera tal que siempre es posible elaborar nuevas
alternativas y propuestas cartográficas&
#2pusimos anteriormente que la universalización del patrón de
conocimiento moderno1occidental supone la e/clusión y subalternización de
todos aquellos saberes que no se su%etan a los criterios epist"micos as$
establecidos& 6imos tambi"n que este patrón se funda en un sistema binario
y e2cluyente que subordina el cuerpo a la razón, lo femenino a lo masculino,
la población “de color a la población “blanca y finalmente, el mundo “no1
occidental a “ccidente& #n este sentido, si bien el planisferio (eters tiene
cualidades sumamente 3tiles y rescatables para nuestro continente, mantiene
un sesgo euroc"ntrico en la medida en que sigue fundándose en dichos
patrones de conocimiento y su particular manera de representar el espacio&
!uizás es hora de valorar y reactivar nuestros propios legados culturales y
proponernos, tambi"n, alternativas epist%micas a la actualmente

hegemónica& Rsta es, entre otras, una tarea pendiente que está en nuestras
manos desarrollar&

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