La socialización e interacción con los diversas personas que se
encuentran dentro de nuestro ámbito de trabajo, es importante para realizar un excelente trabajo de equipo. No obstante, es importante respetar las portencialidades y habilidades de cada sujeto para que con ello todos puedan interactuar y contribuir al éxito de la tarea encomendada. Por ello es importante que todos estén conscientes de las metas para lograr en el mayor porcentaje posible.
De igual manera es importante gestionar las habilidades
comunicativas, relaciones simétricas y reciprocas en el equipo de trabajo con el firme propósito de darle solución a las tareas o proyectos explícitos con antelación pro el grupo de trabajo. Para ello, se debe de tener identificada la responsabilidad de cada individuo, su marco de acción así como el proceso a seguir, con ello, identificar los recursos establecidos para poder optimizar el trabajo colaborativo dentro del equipo de trabajo.
En consecuencia, se debe de identificar las habilidades y
potencialidades de cada integrante, para poder tener un equilibrio en el trabajo a realizar, y así evitar una sobrecarga de trabajo para los integrantes que más sobresalgan, con ello las tareas planeadas serán equitativas y productivas para la empresa en discusión.
Sin embargo, es importante hacer énfasis que la dedicación personal
de cada sujeto así como la entrega del mismo beneficiara de manera loable al trabajo colaborativo. Por ello, el equipo de trabajo debe de tener en mente las metas ya sean a corto, mediano o largo plazo con objetivos similares para culminar los trabajos de manera asertiva y correcta.
Cuando uno comparte sus ideales y formas de pensar, empapa a los
demás de manera positiva, si es en beneficio de la comunidad en general, con base a un mismo pensamiento de equipo, los resultados no solo serán notorios, si no también gratificantes y visibles ante los demás sujetos que conforman un grupo social.