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Limites de exposicion profesional a los metales pesados que se recomiendan por razones de salud Informe de un Grupo de Estudio de la OMS. Organizacién Mundial de la Salud Serle de Informes Técnicos 647 Organizacién Mundial de la Salud, Ginebra 1980 ISBN 92 4 320647 8 (© Organizaci6n Mundial de Ia Salud 1980 Las publicaciones de ia Organizaciéa Mundial de Ja Salud estin acogidas a la proteceiin prevista por las disposiiones sobre reproduccién de originales del Pro- {ovolo 2 de In Convencion Universal sobre Derecho de. Autor. Las entidades inte resadas en reproducr o traducit en todo 0 en parte alguna publicacion de la OMS Seberin soliewar Ia oportuna autorizacion de Ia. Oficina de Publicaciones, Organi- zacién Mundial de la Salud, Ginebra, Suiza. La Organizacion Mundial de a Salud Ger a esas solicitudes consideracion muy favorable. ‘Las denominaciones ompleadas en esta publicacin y la forma en que aparecen presentados los datos que contiens no implican, de parte de la Seoretaria de Ia Grgnnizactén Mundial de la Salad, juicio alguno sobre la. condicién juridica, de paises, teritorios, ciudades 0 zonas, 0 de sus autoridades, ni respecto del trazado Se sis fonternso limites. ‘La mencion de determinadas sociedades mereantiles © de nombres comereales de ciertos produotos no implica qu la OMS los apruebe o recomiende con referencia § otros analogos. Salvo error w omisién, las marcas registradas de aticulos © pro- ductor de esta naturaleza se distingven en lis publicaciones de la OMS por una letra inical mayiscala. PRINTED IN SPAIN 80/4811 - Gries Reunidas- 1800 INDICE Pigina Introduccién. F 1 1.1 Estado actual de Jos limites de exposicion 8 1.2 °Criterio para la seleocin de as sustancas de maxima providad. 10 1.3. Evaluacidn periiea, uw 1.4 Méiodo bifisioo para el establecimiento de limites de exposicidn pro- fesional a 1.5. Relaciones expossin-tecto y exporsn-eopuestt. ws. 2 1.6. Efectos adverss. 4 1.7 Evaluacién de la exposiion.... 6 41.8 Problemas analitics.. es 7 119° Aplicacién dels limites de exposicibn profesional a 1.10 Posibilidades de investigacion.. 20 Bibliogafia, a Cadmio. roorreioorretiocn oR 2.1 Resumen de los datos de metabolismo y toxicidad......... 2 22 Relacin entre exposicién y efectos sobre la sal. 6 23. Posibilidades de investigacién, coecsesennsee ea) 24 Revomendaciones....--..cececsecseee vesneesveneseseee 37 ‘Bibliogratia.. » ‘lomo inorginico... eee 9 3.1 Resumen de Tos datos de metabolismo y toicigad...... 6.5 » 3.2 Relacién entre exposicion y efectos sob la salad, : 8 3.3. Posibildades de investgacion..... RB 3.4 Recomendaciones. é a ‘ibliografia. 4 Manganeso.... een cos cece 4 Resumen de los datos de metabolism ¥ toxicisad. 87 42. Rolacion entre exposieidny efectos sobre Ia slid. ose es esos 98 43 Posibilidades de investignciOn..... 2.2.20. 107 44 Recomendaciones. : 108 Bibliografia 108 Ffectos ticos. Relaci6n entre exposicin y efectos sobre la salud. Posibilidades de investigacion.... Recomendaciones . 110 10 ur 4 116 12 123 124 Rs GRUPO DE ESTUDIO DE LA OMS SOBRE LIMITES DE EXPOSICION PROFESIONAL A LOS METALES PESADOS QUE SE RECOMIENDAN POR RAZONES DE SALUD. Miembros Dr. L. K. A. Derban, Médico Jefe, Organizacién del Rio Volta, Acra, Ghana (Wicapresidente) Profesor M. H. Noweit, Diestor del Departamento de Higiens del Trabajo, Instituto de Salud Pablica, Universidad de Alejandria, Egipto Profesor W. O. Phoon, Jefe del Departamento de Medicina Social y Salud Pabtica, ‘Universidad de Singapus, Singapur Profesor P. K, Suma’mur, Director, Instituto de Higiene del Trabajo, Departa- ‘mento de Recursos de Personal, Vakartz, Indonesia Profesora I. P. Ulanova, Instituto de Higiene Industrial y Enfermedades Profe- slonales, Mosed, URSS Profesor R. L. Zielhuis, Laboratorio de Higiene dl Tratajo, Universidad de ‘Amsterdam, Paises Bajos (Presidente) Representantes: de otras organtzaciones Programa de las Nociones Unidas para el Meso Ambiente Dr. $, Milad, Funcionario Cientico, PNUMA/RIPOPT, Nairobi, Kenya Sr. S. K. Satkunananthan, Jefe del Programs Genttico, PNUMAVRIPOPT, Ginebra, Suiza Organizactén Internacional det Trabajo Dr. D. Djonijevic, Servicios de Seguridad © Higiene del Trabajo, OIT, Ginebra, ‘Suiza Comision de las Comunidades Ewopeas Dr. A. Berlin, Diteceiin de Salud y Seguridad, Luxembsreo Comisién Permanente » Asoeiacién Internacional para la Mesicna del Trabajo Profesor R. Truhast, Laboratoire de Toxicologle et e'Hygitne industrielle, Université de Paris, Francia United States National Institute for Occupational Safes» and Health Dr. K. Bridborg, Director of the Office of Extramural Coordination and Special Projects, Rockville, MD, Estados Unidos de Amériea Secretaria Dr. M. A. El Batawi, Médico Jefe de Higiene del Trabajo, OMS, Ginebra, Suiza (Secretario) Dr. EJ. Fairchild, Especiaisa en Higiene del Trabajo, OMS, Ginebra, Suiza Profesor L. Friberg, Jefe del Departamento de Higiene del Medio, Instituto Karo linska, Estooolmo, Suecia (Asesor temporero) Dr. $, Heenberg, Director Cieatfico, Instituto de Higiene del Trabajo, Helsinki, Finlandia (Asesor temporero) Profesora F. Kaloyanova, Ditectora. del Instituto de Higiene y Medicina del ‘Trabajo, Academia de’ Ciencias Médicas, Sofie, Bulgatia (Asesora temporera) Profesor R, Lauwerys, Jefe de la Seocién de Toxicologia Industrial y Médica, Universidad de Lovaina, Bruselas, Rélgice (Asesor temporero) Profesor M. Saric, Divostor del Instituto de Investigaciones Médicas ¢ Higiene ‘del Trabajo, Zagreb, Yugoslavia (Asesor temporero) LIMITES DE EXPOSICION PROFESIONAL A LOS METALES PESADOS QUE SE RECOMIENDAN POR RAZONES DE SALUD Informe de un Grupo de Estudio de ln OMS Del Sal [1 de junio de 1979 se reunié en Ginebra un Grupo de Estu- dio de la OMS sobre Limites de Exposicién Profesional a los Metales Pesados que se recomiendan por razones de salud. El Dr. M. A. El Batawi, Médico Jefe de Higiene del Trabajo, abrié la reunién en representacin del Director General y declard que el Grupo de Estudio tenfa la misién de recomendar limites de exposicin profesional al cadmio, plomo, manganeso y mercurio que fueran admisibles desde el punto de vista de la salud. La reunidn tenia también por finalidad uni- formar los métodos de aplicacidn de los datos existentes en la adopcién de decisiones sobre lo que se pudiera considerar como niveles admisibles de exposicién a las sustancias t6xicas y establecer una politica que pu- diera ser objeto de ulterior elaboracién en los paises para llevar a cabo sa labor. El Dr. El-Batawi afiadié que en el programa de la OMS sobre los limites internacionalmente recomendados de exposicién profesional, basados en criterios sanitarios, se prestaba especial atencién al estudio epidemiolégico de la mano de obra industrial y se concedia una conside- racién secundaria a los estudios experimentales llevados a cabo en mo- delos animales. 1, INTRODUCCION Este informe sobre metales pesados es el primero que se publica en cumplimiento de la resolucién EB60.R2, adoptada por el Consejo Eje- cutivo en 1977, en Ia que se pedfa al Director General que pusiera en préctica lo antes posible el programa propuesto con el fin de establecer niveles admisibles intemnacionaimente recomendados, basados en crite- ios sanitarios, de exposicién profesional a las sustancias téxicas (1). Conviene advertir gue los niveles de exposici6n recomendados en este informe no son en modo alguno obligatorios para ninguna autoridad administrativa de ningtin pafs y que su tinica finalidad es servir de refe- rencia a las autoridades competentes, que debersin establecer sus propios limites operativos en esta esfera. JA Estado actual de los limites de exposicién Una de las finalidades principales de los programas de higiene del trabajo es la prevencidn de los trastornos de la salud que puede ocasionar la exposicién a Tos agentes nocivos del medio laboral; para conseguir esa finalidad, uno de los medios més importantes consiste en establecer «ai veles admisibles» de la sustancia nociva en el aire del lugar de trabajo; dicho en otras palabras, determinar el nivel en el que una sustancia no- civa no causa efectos adversos sobre la salud durante toda la vida del trabajador. En 1976 un Comité de Expertos de la OMS en métodos uti- lizados para establecer niveles admisibles de exposicién profesional a los agentes nocivos (2) definié la expresién «nivel admisible» como una norma cuantitativa de higiene para un nivel que se considera inocuo, expresado como concentracién en funcién de un promedio de tiempo concreto. El presente Grupo de Estudio ha preferido utilizar la expresién «li- mite de exposicién profesional recomendado por razones de salud», en lugar de «nivel admisiblen. Esa expresidn esta en armonia con el Con- venio Internacional (148) adoptado por la Conferencia General de la Organizacién Internacional de! Trabajo en 1977 (3). (En ese Convenio se utiliza la expresién «limite de exposicién profesional» al referirse a las concentraciones admisibles de agentes nocivos en el aire de los locales, de trabajo.) La expresidn «limite de exposicién profesional recomendado por razones de salud» representa, a juicio del Grupo de Estudio, los niveles de sustancias nocivas en el aire de los locales de trabajo que no entrafian un riesgo importante de consecuencias sanitarias adversas (véase la pig. 11); como no se tienen en cuenta consideraciones tec- nolégicas ni econdmicas, estos limites se han de distinguir de los limites de exposicién profesional operativos. ‘Ademas de limites de exposicidn en el aire del local de trabajo recomendados por razones de salud, en este informe también se reco- ‘miendan los correspondientes limites bioldgicos basados en considera- ciones sanitarias (es decir, el nivel sin efectos nocivos a que pueden llegar las sustancias t6xicas © sus metabolitos en productos biol6gicos hhumanos). Estos indicadores de la exposicién admisible han sido esta- blecidos hace relativamente poco tiempo. En algunos casos se recomienda ‘un margen en vez. de una cifra determinada. Para mayor seguridad, el Grupo recomienda limites de exposicién y biolégicos que estén por de- bajo de los niveles adversos de efecto/respuesta detectados. 8 En un nimero de paises cada vez mayor se hian establecido limites de exposicién profesional. En este aspecto, los dos paises principales son [os Estados Unidos de América y la URSS. Los limites de exposicién varian considerablemente de unos paises a otros, y sas variaciones son con frecuencia mucho mayores de [o que se podria esperar toniendo en cuenta la informacién cientifica disponible, En 1968, en una reunién del Comité Mixto OIT/OMS sobre Higiene del Trabajo (4), se observé que de 600 sustancias s6lo habfa 24 que tenfan aproximadamente unos limites iguales de admisibilidad en los Estados Unidos y en la URSS. La informacién actualmente disponible indica que se esti llegando a cierta convergencia en relacidn con los limites. Sin embargo, sigue bubiendo grandes diferencias que preocupan mucho a is organizaciones interna- cionales tales como la OMS, la OIT y la Comisién Permanente y Aso- ciacién Internacional para la Medicina del Trabajo. Estas organizaciones han tratado de ctiminar las diferencias en los limites de exposicién pro- fesional admitidos en distintos paises con el fin de establecer unas normas similares para todos los trabajadores industriales del mundo. La mayor de las diserepancias en cuanto a los limites de exposici6n profesional se pueden atribuir a los distintos métodos para el estableci- miento de normas, en los que se pueden tener en cuenta o no los factores, tecnolégicos y econémicos. Si bien la mayoria de los paises basan sus limites de exposicién profesional en la prevencién de los efectos nocivos ppara a salud, hay algunos paises que tienen también en cuenta factores de orden tecnoldgico y econémico. En ol plano internacional no puede haber ningin mecanismo para incorporar los factores econdmicos y téenicos en la adopcidn de deci- siones relativas a los limites de exposicién profesional, ya que esos fac- tores varian considerablemente de unos paises a otros. La OMS puede cestablecer, sin embargo, recomendaciones basadas en razones de salud para que sean examinadas internacionalmente, dejando a cargo de las autoridades nacionales 1a tarea de encontrar el procedimiento para utilizar esas recomendaciones. Los objetivos basicos del establecimiento de los limites de exposicién profesional son muy similates en los Estados Unidos de América y en la, ‘URSS, asi como en otros paises. En los Estados Unidos la ley sobre seguridad e higiene profesional (Ocupational Safety and Health Act) de 1970 (5) dice que los limites de exposicién son necesarios para con- seguir que ningtin trabajador sutra trastornos de salud o funcionales, ni vea disminuida su esperanza de vida, como consecuencia de su tipo de trabajo. En la URSS se entiende como limite de exposicién profesio- 9 nal aquel que en los casos de exposicién diaria durante ocho horas de ‘trabajo (excluidos los dias de descanso), 0 durante cualquier otro tiempo, pero sin exceder de 40 horas a la semana, no cause en el individuo, du- ante su vida laboral ni durante toda su vida o la de sus descendientes, ninguna enfermedad o trastorno del estado normal de salud que se pueda detectar por los métodos actuales de investigacién (6). Se debe sefialar que recientemente tanto la URSS como algunos otros ‘paises han incluido la prevencién de los trastornos de salud en los hijos ‘como criterio para la. determinacién de los limites de exposicién. 1.2. Criterio para Ia selecciGn de las sustancias de méxima prioridad Son tantos los agentes industriales nocivos y tan escasos los conoci- mientos actuales acerca de ellos que resulta précticamente imposible establecer limites de exposicidn profesional para todos. Es necesario, en consecuencia, seleccionar ciertas sustancias prioritarias sobre las que se dispone de informacién suficiente. Los cuatro metales pesados & que se refiere este informe fueron seleccionados sobre las siguientes bases — Ia distribucién y abundancia del agente y la frecuencia de la exposicién (0 posible exposicién) a él; — Ia capacidad del agente para causar trastornos funcionales gra- — Ia disponibilidad de prucbas cientificas convincentes basadas en estudios epidemiolégicos y experimentales. ‘Los cuatro metales presentan también grandes disparidades respecto a los Ifmites de exposicién profesional establecidos en diferentes paises. A continuacién se enuncian algunos de los principales casos de exposi- ign profesional a estos metales. 1). Lacexposicién al eadmio se produce en las industrias primarias del cadmio y del plomo-cine. El eadmio ¢5 un componente comiin de las aleaciones de bajo punto de fusién; el uso de materiales de soldadura puede exponer a los trabajadores a concentraciones elevadas de emana- iones de éxido de cadmio. Entre otras fuentes de exposicidn se pueden citar la industria de revestimientos metilicos, la produceién y utiliza in de pigmentos de cadmio y de estabilizadores plisticos con contenido de cadmio y la fabricacién de pilas de niquel-cadmio. 10 2) El plomo se usa mucho en la manufuctura de pilas eléctricas, en Ja industria del caucho y en Ia fabricacién de bamnices, vidrio y esmaltes. A medida que avanza el desarrollo técnico se van encontrando con fre- cuencia otros usos; por ejemplo, ahora se utilizan compuestos de plomo como estabilizadores en la manufactura de polimeros. 3) El manganeso tiene tres usos principales: a) como un componente importante de ciertos aceros y como agente reductor en las acerfas; 8) en la produccién de pilas eléciricas secas, y c) en Ia industria quimica, para In producciéa de importantes compuestos de manganeso tales como cl permanganato potisico, La extraccién de minerales de manganeso es también una fuente importante de exposicién profesional. 4) Elmercurio se utiliza, entre otras cosas, en la producciéa de kim- paras de vapor de mercurio, de rectificadores, de plas, de conmutadores eléctricos y de relevadores de equipo electrénico. Desde 1947 ha aumen- tado sorprendentemente lz cantidad de mercurio utilizado en la fabrica- cidn de hidréxido de sodio, hasta el punto de que hoy representa esto la éxima utilizacién de mercurio en la industria, Algunos compuestos inorginicos y organicos de mercurio se utilizan en la agricultura como plaguicidas; tal es el caso del fenilmercurio y dal metoxietilmercurio. 1.3 Evaluacién periéaica ‘Los limites recomendados en este informe no representan la politica oficial de ninguna organizacién internacional. No son sino las conclusio- nes a las que leg un Grupo de Expertos después de haber examinado Jos documentos preparados por los centros de colaboracién de la OMS. Se recanace que estos limites tienen cardecter temporal y estén sometidos ‘a.una evaluaciGn periddica a la huz de la nueva informaciéa, 1.4 Método bifisico para el establecimiento de limites de exposicién profesional EI Comité de Expertos de la OMS en métodos utilizados para estable- cer niveles admisibles de exposicién profesional a los agentes nocivos (2) reconocié que entre toxicdlogos de higiene del trabajo, médicos e higienistas, se habia llegado a un acuerdo de principio sobre los criterios ¥ métodos requeridos para obtener Ia informacién cientifica bésica que mn resulta indispensable con el fin de recomendar, fijar, evaluar y revisar niveles admisibles de exposicién profesional». Se sefial6 que ese acuerdo era un paso importante para formular recomendaciones internacionales sobre niveles admisibles. Pero se dijo que existian «diferencias en la forma de interpretar los Estados Miembros los niveles admisibles de exposicién profesional basados en consideraciones sanitarias para tra- ducirlos en medidas educativas, ténicas y coercitivas encaminadas proteger la salud del trabajadory. El establecimiento de limites de exposicién profesional requiere la aplicacién de un método bi el establecimiento de limites recomendados de exposicién profesional recomendables desde el punto de vista de la salud, sobre 1a base de Ia informacion cientifica disponible que los expertos juzguen apropiada; la segunda etapa consiste en traducir esos limites basados en considera ciones sanitarias en limites o requisitos operatives, tras un examen de la cuesti6n hecho por el gobierno y por representantes de los empleadores y de los trabajadores. Hecho esto, los limites operativos se aplicarén coercitivamente si asf fuere necesario. Los limites admisibles que se recomiendan en este informe han sido convenidos por expertos de varios paises y representan la primera etapa de un método bifasico. Se confia en que esto facilitari las decisiones politicas en la segunda etapa. LS Relaciones exposicién-efectozy exposiciOn-respuesta Al examinar los efectos de las sustancias t6xicas en la atmésfera, es conveniente tener en cuenta los conceptos de «exposicién-efecto» y ‘exposicién-respuesta». Ambos corresponden a lo que en farmacologia y en toxicologia experimental se denomina «dosis-electo» y «dosis- respuesta», casos en los que las dosis de exposicidn se conocen con toda exactitud. En cambio en la exposicién profesional las dosis individuales sélo se pueden conocer aproximadamente, ya que la absorcidn cutiinea ¥ los efectos de Ia actividad fisica no se pueden calcular con precisién. ‘Aunque en los textos sobre Ia materia se usan en muchos casos ambas expresiones indistintamente, el Grupo de Trabajo cree que se deben emplear con distintos sentidos, como se hace con otros documentos de la OMS (2, 7). Se entiende por relacién exposicién-efecto la relacién que existe entre una exposicidn cuantificada y la importancia cuantitativa del efecto que 12 produce en la salud de un individuo o de un grupo. Por relacién expo- sicidn-respuesta se entiende fa relacién que existe entre una exposicién cuantificada y el porcentaje de individuos con un efecto de una impor- tancia determinada. Se encontrarin ejemplos de las relaciones exposi- ciémefecto en el capitulo sobre el plomo, en el que se relaciona la acu- mulacién de porfirinas en los hematies y el aumento de la excrecién de AAL (4cido 3 aminolevulinico) en la orina con el nivel de plomo en la sangre. Por otra parte, se encontrar un ejemplo de relacién exposicién- respuesta en el Cuadro 6, donde se muestra el porcentaje de individuos ‘con exposiciones > 1 0 > 2, ¢s decir, la respuesta a diversos niveles de exposicién. Es importante distinguir entre los dos conceptos. La relacién exposi- cidn-efecto muestra el efecto medio que en todos los individuos producen Jos mismos niveles de exposicién, lo que sugiere que todos los individuos se pueden considerar mis o menos homogéneos. Ahora bien la relacién exposiciSn-respuesta tiene en cuenta la variacién de susceptibilidad den- tro de un grupo de individuos; indica la proporeién de personas afecta- das, De lo dicho anteriormente se desprende que la proteccién de los trabajadores se debe basar primordialmente en los datos sobre exposi- cidn-respuesta. En otras palabras de lo que se trata no es de progeter al trabajador «medion, que es un ser imaginario, sino a aquellos individuos que tienen’ una mayor sensibilidad a Ja exposicién. Al aumentar la exposicién aumentan también la gravedad y el ntimero de los efectos nocivos; asimismo, al disminuir la exposicidn se llega a un limite por debajo del cual no se obscrvan efectos 0 respuestas nocivos. En él se determinan tos niveles de efecto no adverso 0 de respuesta no adversa, Sin embargo, como estos niveles se basan en observaciones de tun niimero limitado de personas, no se puede tener munca la seguridad de que otras personas en condiciones similares no resultarfan afectadas. Por eso se legs al concepto del nivel de efecto/respuesta adverso no detectado, El Grupo de Estudio bas6 sus recomendaciones en este con- cepto. La relacién exposicién-respuesta demuestra que cuando los niveles de exposicién son bajos no todas las personas responden, pero la probabi- lidad de la respuesta y el mimero de diferentes efectos son mayores ‘cuando aumenta Ia exposicién. Es importante tener en cuenta que los limites de exposicién recomendados solamente indican la posibilidad de que un individuo sufta efectos adversos, pero el hecho de que una per- sona esté expnesta a un determinado nivel de una sustancia téxica no supone necesariamente que esa persona vaya a suftir una enfermedad. 13 En consecuencia, estos limites no se deben utilizar indiscriminadamente para el diagnéstico clinico. 1.6 Efectos adversos El Grupo de Estudio sobre deteccién precoz del deterioro de la salud debido a Ia exposicién profesional a determinados riesgos (7) sefial6 ‘que «un efecto estadisticamente significativo no cs, en si, lo mismo que un deterioro de la salud». Es més, «do que se considera inaceptable (no tolerable) es una cuestidn de interpretacién y, en iiltima instancia, de opcién. Los efectos no adversos han sido definidos por la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos de América (8) como: 1) os cambios que se producen por una exposicién prolongada y que no resultan en un trastorno de la capacidad funcional ni de la capa- cidad para compensar una nueva sobrecarga; 2) os cambios que son reversibles cuando cesa la exposicién, si se producen sin disminucién perceptible de la aptitud del organismo para ‘mantener 1a homeostasis, y 3) Ios cambios que no aumentan la susceptibilidad del organismo 4 los efectos deletéreos de otras influencias ambientales, tanto si son de ‘orden quimico como fisico, microbiolégico o social. “En una reciente publicacién de:la OMS (9) se ha definido el efecto adverso © «anormal» como el objeto de una medicién que queda fuera de los limites de 1o normal. Sanockij (10) considera como efecto adverso la desviacidn de los valores «normeles» en los siguientes eas0s: 1) silos cambios que se observan quedan estadisticamente (P < 0,05) fuera de los limites generalmente aceptados como valores «normales>, 2) si dentro de los Kites normales perssten los cambios durante un tiempo conside- rable después de haber cesado la exposicién, o 3) si se manifiestan des- Viaciones de los valores considerados generalmente como «normales> en casos de sobrecarga funcional o bioquimica Los crterios para distinguir los efectos adversos de los no adversos no se deben basar tinicamente en alteraciones patoldgicas manifestas, Muchos toxicélogos han propuesto diversos criterios.basados en las alteraciones metabslicas y biogulmicas que se producen en el organismo como resultado de la exposicién a las sustancias téxicas, Entre esas alteraciones figuran las siguientes: disminucién de la eficiencia de los 4 procesos metabilicos y exerecién andmala de ciertas sustancias, inhi~ Dicién de enzimas importantes, aumento de la concentracién de sustratos naturales inducido por la inhibicidn enzimitica y/o por la menor capa- cidad de metabolizar sustratos especificos, as{ como el cambio en Ia actividad respectiva de diferentes sistemas de enzimas. Sc espera que los limites recomendados en este informe contribuyan @ prevenit no sélo la enfermedad declarada sino también los efectos adversos sobre Ia salud de los trabajadores expuestos a agentes nocivos durante toda la vida laboral, as{ como sobre la salud de sus hijos. En ef Grupo hubo un consenso general en cuanto a Jas intensidades y efectos que deben ser considerados como «adversos», a pesar de que atin no se ha establecido de una manera inequivoca la importaneia clinica de mu- chos de esos efectos adversos. EI Grupo consideré como «adversos» los siguientes tipos de efectos: efectos que indican fases iniciales de una enfermedad. clinica; — efectos que no son ficilmente reversibles e indican una disminu- cién de la capacidad corporal: para mantener la. homeostasis; fectos que hacen al individuo més susceptible a las consecuencias nocivas de otras influencias ambientales; efectos que dan ugar a que las mediciones pertinentes queden fuera de lo «normal», si se considera que son una indicacién precoz de disminucién de la capacidad funcional, y efectos que indican cambios importantes de orden metabdlico 0 bioguimico. Para mis detalles sobre deteccidn precoz de trastornes de la salud causados por exposicidn profesional, véanse las citas bibliogrificas 2, 7y 9 La evaluacién de los efectos adversos de la exposiciéa profesional debe basarse en una serie completa de datos sobre el trastorno fisiold~ ico. Las evaluaciones que tienen una base ast son de capital importancia para la adopcidn de decisiones sobre los niveles de exposicién admisibles desde el punto de vista de Ia salud (limites de exposicién profesional recomendados desde el panto de vista de la salud). La distincién entre efectos «no adversos» y efectos «advarsos» exige un conocimiento pro- fundo de los cambios reversibles que entrafian ligeras desviaciones de lo «normal» cn la fisiologia y le morfologéa de los tafidos; en esas dis- tinciones se ha de tener en cuenta la capacidad del cuerpo para adaptarse a cambios sutiles. 1s 1,7 Evaluacién de Ia exposicién Las concentraciones de sustancias quimicas en el aire, utilizadas como indicadores de exposicién profesional, se suelen medir por muestreo zonal (estatico), recogiendo las muestras en determinados puntos del Iugar del trabajo. Un pequeiio mimero de datos tiene como base el muestreo personal, en el que se calculan las concentraciones de agentes nocivos en cl aire inhalado por los trabajadores. A pesar de los recientes adelantos en los instrumentos y en las téenicas del muestreo personal, los datos sobre exposicidn personal siguen sin ser suficientemente fiables porque no se suele tener en cuenta la absorcién oral y cuténea de los agentes nocivos. Los cuatro metales que se refiere este informe pueden pene trar en el organismo a través de alimentos y bebidas contaminados, mientras que el hecho de fumar tiene relativamente gran importancia en. Ia absorcién de cadmio. Estos aspectos merecen especial atencién porque Ja familia del trabajador puede verse afectada también por la contamina- ccién de las ropas de trabajo. ‘Como Ia exposiciGn total no se suele reflejar en la simple medicién de los niveles en el are, el presente informe dedica considerable atencién a la evaluacidn bioldgica de la exposicién; ademés, siempre que ha posible se han indicado los limites biolégicos recomendables por raz0- nes de salud. Hasta hace pocos atios los datos relativos a la exposiciéa profesional se solfan referir alos niveles medios de un grupo (nivel medio de una sus- tancia nociva o de sus metabolitos en un grupo de individuos). En el caso de algunos metales (por ejemplo, el mercurio) se ha observado una rela~ cidn entre los niveles del metal en el aire y losniveles medios obtenidos en cl grupo. Sin embargo, hoy es més corriente referirse a los niveles de ex- posicién individual, ya que se han establecido limites bioldgicos para e Juar Ia exposicién del individuo. Se considera que la salud de los trabaja- dores se puede proteger mejor apoysindose en los limites biol6xicos indivi- duales basados en razones de salud que en tos niveles medios de grupo. Uno de los inconvenientes de Ia medicién de niveles de un metal en el aire es que s6lo da indicaciones sobre la exposicién respiratoria y, hasta cierto punto, sobre el estado de limpieza del lugar de trabajo; sin embar- 0, los efectos de la absorcién oral y/o eutinea s6lo se pueden apreciar determinando el nivel biolSgico. Ademés, en el nivel biol6gico se expresa también la exposicién al medio ambiente no profesional, Por estas razo- nes, en todos los casos posibles, se da gran importancia a los limites biol6gicos individuales basados en consideraciones de salud. Los limites 16 de exposicién profesional basados en los niveles de sustancias nocivas en el aire son muy titles para Ios higienistas y teon6logos industriales cuya misibn es planificar y disefiar complejos industrales en los que el medio de trabajo sea mas seguro y mAs sano. Sin embargo, como es preciso respetar la higiene personal, habré que evitar la absorcién de sustancias nocivas de fuentes profesionales y no profesionales adoptando ‘medidas tales como la instalacién de lavabos en los lugares de trabajo y vestuarios para cambiar frecuentemente la ropa de trabajo contaminada. 1.8 Problemas analiticos Las relaciones exposicidn-efecto y exposicién-respuesta que se pre- sentan en las cuatro secciones siguientes se basan en estudios del medio Iaboral y/o en analisis de muestras de sangre y de orina. Si bien en ambos casos se plantean problemas analiticos, estos problemas son mayores en el segundo caso, que exige Ia medicién de los niveles de metal en Ia sangre 0 en la orina centro de un margen do 1 a> 1000 yagi. En los iltimos aflos se he trabajado mucko on estudios comparativos entre laboratorios, con el propésito de lograr que los datos de In inves- tigacién sean fidedizmos. Estos estudios han demostrado que los datos s6lo se pueden considerar fidedignos si se pueden reproducit dentro de los margenes de una desviacién estindar. Los métodos utilizados para obtenerlos deben ser aceptables tanto ea sensibilidad como ea previsién, Uno de los problemas bisicos en el anilisis del aire de los lugares de trabajo es el de la estimacién certera de la verdadora exposicién. Para ‘medir la exposicién hay que tener en cuenta, no s6lo la concentraciéa, goncral de motal en el aire, sino, en el caso de Jos aerosoles, el tamatio y distribucién de las particulas. También hay que prestar atencién a las ‘eparticulas respirables» cuyas concentraciones pueden variar mucho de un tiempo a otto y de un lugar a otro. También es preciso tener en exenta la solubilidad de los agentes nocivos. La interpretacién de !2 exposicidn evaluada quedaré probablemente bajo Ia influencia indirecta de los métodos de muestreo y andlisis que se adopten; hay que tener en cuenta este hecho al interpretar los datos de la exposicién. 19 Ay cin de los limites de exposicién profesional 1.9.1 Finalidades coneretas Las decisiones sobre Ia politica que se debe seguir en cuanto al esta- blecimiento de los limites de exposicién operativa, que constituye la a segunda etapa en el procedimiento en dos etapas de que antes se ha hhablado (véase pagina 11), pueden variar de unos paises a otros. Los — para planificar nuevas instalaciones que utilicen la tecnologia cexistente 0 que hayan de desarrollar una tecnologia més avan- zada que proteja mejor la salud de los trabajadores; — para proyectar los sistemas de ventilacién y nuevas miquinas, cuando se trate de reconstruir las instalaciones existentes; — para aplicar medidas de control sanitario, y — para evaluar los riesgos sanitarios de cada trabajador. 19.2. Los paises en desarrollo y los limites de la exposicién profesional Las diferencias en los limites de exposicién existentes han conducido a la incertidumbre en la eleccidn de los valores que se han de aplicar en ‘muchos paises en desarrollo, y pudiera haber influido en el retraso de la proteccién de los trabajadores ante los agentes nocivos. Con el estableci- ‘iento de unos limites de exposicién profesional aceptados internacio- nalmente debe mejorar esta situacién. Los trabajadores industriales estin especialmente expuestos a los trastomos de salud porque, ademas del riesgo de suftir las enfermeda- des prevalecientes en la comunidad, estan sometidos a los riesgos profe- sionales. Cuando por razones técnicas o econémicas no es posible intro- dducir medidas de prevencidn, tales como In sustitueién de las sustancias lustrales tOxicas por otras inocuas la mecanizacién de los procesos industriales en los que se utilizan agentes nocivos, es esencial establecer limites de exposicién profesional. Hay que reconocer que las condiciones prevalecientes en los paises cen desarrollo imponen a veces restricciones a la aplicacién de los limi- tes de exposicién y pueden influir en las autoridades en lo que respecta ‘a su adopcidn. Los planificadores sanitarios seftalan la necesidad de proteger a los trabajadores frente a los agentes industriales nocivos, debido a su gran vulnerabilidad, pero otros planificadores arguyen que una legislacién muy severa podria incrementar los costos de produc- cin considerablemente, Esta situacién prevalece también en gran medida en los paises desarrollados. ‘Como norma general, los trabajadores de los paises en desarrollo que suften enfermedades parasitarias y matnutricién no deben quedar expuestos a agentes téxicos en el medio laboral ya que esto Gnicamente 18 agravaria sus problemas de salud. Las grandes industrias y las empre- sas multinacionales en tos paises en desarrollo pueden permitirse el Iujo del examen médico anterior al empleo y al tratamiento de aquellos trabajadores en los que se observe que sufren una enfermedad. El des- cubrimiento de una enfermedad en el examen anterior al empleo no debe utilizarse como una razén para denegar el trabajo sino como una opor- tunidad para tratar a los pacientes y asegurarse de que trabajen como personas sanas, 1.9.3 Limites operativos o limites de exposicién profesional recomenda- dos por razones de salud Los limites de exposicién profesional que, desde el punto de vista de In salud, se recomiendan en este informe son mas rigurosos que los limites operativos que actualmente se aplican en la mayoria de los paises. Permiten a las autoridades la estimacién de la importancia del riesgo que asumen si adoptan unos limites operatives de exposicién superiores a los propuestos por consideraciones de tipo sanitario, No quiere decir esto que se vaya a producir forzosamente un aumento en las enfermedades profesionales manifiestas, pero si que puede significar Ja produccién de efectos nocivos en cierto niimero de trabajadores y/o en sus descendientes. Si la aplicacién de los limites de exposicién que aqui se recomiendan por razones de salud como limites operativos no resulta factible a corto plazo, es0s limites basados en consideraciones sanitarias se deben considerar como objetivos que se deben conseguir lo mas pronto posible 19.4 Limites de exposicién profesional y duracién de la exposicién Para los casos de exposicién en los que no se producen efectos inmediatos y para los agentes cuya vida media bioldgica es relativa- mente corta, los limites de exposicién profesional se pueden expresar, en. relacién con el tiempo, como limites medios de exposicidn por turno de trabajo, Habida cuenta de las fluctuaciones en la exposicin industrial, puede haber necesidad de introducir un limite méximo que no se debe sobrepasar en la aplicacin de los limites operativos de exposicién pro- fesional; sin embargo, este aspecto no se examina en el presente infor- me. Si las fluctuaciones no se apartan demasiado del nivel medio estable- cido por unidad de tiempo no existe un riesgo inmediato para la salud. rt En cuanto a ciertos efectos en la salud debidos a la exposicién local directa de las vias respiratorias, como en el caso del cadmio, del mercurio y del manganeso, puede ser necesario establecer otro limite de exposicién breve, basado en razones de salud, a fin de proteger a los trabajadores contra el riesgo de una exposicién accidental de alto nivel (por ejemplo, en las soldaduras de cadmio). Estos limites de exposi- ciones de corta duracién deben tener en cuenta el limite propuesto de exposicién media por unidad de tiempo. 1.9.5 Interpretacién de los limites recomendados por razones de salud ‘para casos de exposicién profesional 1Los limites de exposicién profesional recomendados desde el punto de vista de la salud, en este informe, no se deben interpretar como niveles absolutos por encima de los cuales se hayan de producir efectos nocivos ¥y por debajo de los que esos efectos no se produzcan. No solo son muy ‘grandes las variaciones en la susceptibilidad individual, sino que hay también inexactitudes en el anilisis de los especimenes bioldgicos. Cuando se interpretan los resultados de las pruebas biol6gicas en mues- tras de sangre y de orina de los obreros, se debe prestar especial aten- cién a la tendencia observaca en los niveles biol6gicos durante un cierto periodo y se debe examinar si existen indicadores tempranos de tras- tornos de salud. ‘La exposicién individual no se debe juzgar sobre la base de un solo indicador sino que, siempre que sea posible, se deben utilizar todas los indieadores recomendados. La disparidad entre los niveles en el aire y en la sangre, por ejemplo, puede indicar una exposicién que no se deba direc- tamente a la inhalacidn de aire del Ingar de trabajo. Es mis, en algunas regiones la exposicién oral no profesional a los metales, como el plomo y el mercutio, puede ser relativamente alta debido a In contaminacién atmosférica o de los alimentos o del agua. En casos asi, en las muestras de sangre se observari continuamente una elevada exposicién y en conse- cuencia los limites de exposicidn profesional basados en consideraciones sanitarias habriin de ser inferiores a los recomendados en este informe. 1.10 Posibilidades de inyestigncién Las cuatro secciones siguientes sobre el eadmio, el plomo, el mangane- so y el mercurio informan sobre los trabajos de investigaciGn presente futuros. Lo que se protende en este caso es poner de relieve las cuesti 20 nes que en la actualidad se esti estudiando en relacién con fos limites de exposicin profesional establecidos desde el punto de vista de la salud. También se incluyen algunas recomendaciones en cuanto a futuros trabajos de investigacién para llenar fas lagunas que actualmente existen. Se ha sefialado que los limites de exposiciéa profesional no sélo de- ‘ben proteger la salud de los trabajadores sino también Ia de sus fami El hecho de que se produzcan efectos nocivos en la funcién reproductiva de hombres y mujeres (efectos gonadotéxicos), en el desarrollo del feto (Cfectos embriotéxicos), en la produccién de deformaciones 0 desviacio- nes de Ia estructura normal on la descendencia (efectos teratogénicos) y en el desarrollo y ta salud postnatal de los hijos de los trabajadores, ‘tanto hombres como mujeres, debe ser estudiado con urgencia. Lo mismo se puede decir de los efectos carcinogénicos especialmente cuando el cadmio esté presente en el medio. Los efectos relacionados con el com- ortamiento y con la disfuncién det sistema nervioso deben ser investi- gados también, La seccidn sobre el manganeso es un ejemplo que de- muestra claramente Ia actual escasez de datos sobre la exposicidn y sobre Tos diversos tipos de respuesta Muchos de los efectos observados no son especiticos de una exposi- cin determinada; la evaluacién de las relaciones exposicidn-respuesta exige, en consecuencia, una labor de investigacién compleja, y es urgente ue esos efectos se estudien, Se invita a los expertos en higiene industrial y en toxicologia pro- fesional a que dena conocer a la OMS toda la informacién complemen- taria que posean sobre exposicién-efecto y exposiciOn-respuesta en los casos de exposicién profesional al cadmio, al plomo, al manganeso ¥ ‘al mercurio. Esta informacién se tendré en cuenta por la OMS en lt reevaluacién periddica de los limites de exposicidn profesional recomen- dados por razones de salud. BIBLIOGRAFIA 1, OMS, Manual de Resoluciones y Decisiones de Ja Asambles Mundial de la Salud y del Consejo Ejeutivo, Volumen I, 3 ed, 1979, pag. 38 2. OMS, Serie de Informes Téenicos, N* 601, 1977. 3. Oncantzacén IyreRNAciONAL pet Tranaso. Convenios y recomenduciones. OFT Documento N° D 15, Ginebra, 1979. 4. OMS, Serie de Informes Téenios, N° 415, 1969. 2 5, Conousso or 108 Estanas Unibos. Occupational Safety and Health Act of 1970, ‘Washington, DC., US Government Printing Offioe (Public Law 91-596, Ninety= First Congress, 2193, December 1970). 6 Gosupansryenny Staxnant Sovoza SSR (12.005-7. Mosed, Comité Extatal de Normalizcion, 1976. 7. OMS, Serie de Informes Téenioos, N* S71, 1975. 8, Conpirrrtz 108 THE WORKING CONFERENCE ON PRINCIPLES OF PROTOCOLS FOR [EVACUATING CHEMICALS IN TIE ENVIRONMENT. Report, Washington, DC, Na- tional Academy of Sciences, 1975. 9, OncANIZACt6N MUNDIAL DE LA SALUD. Environmental health crtera, 6, Princle ‘ples and methods for evaluating the toxicity of ehemicals, Part I, Ginebra, 1978. 10, SaNOCKH I. V. En: Sanocki I. V., ed. Metody opredeleniia toksignost i opasnost! imesh veléest. Mosei, Medicina, 1970. 2, CADMIO* 2.1 Resumen de los datos de metabolismo y toxicidad 21.1 Metabolismo Vias de exposicién. En la industria, la exposicién al cadmio se pro- duce principalmente por via pulmonar, pero en algunas circunstancias también es importante la ingestidn de polvo de cadmio. El cadmio puede ingerirse directamente a partir de las manos contaminadas (sobre todo ‘cuando los trabajadores comen o fuman en los lugares de trabajo), 0 indirectamente tras la expulsién de grandes particulas depositadas en las, vias respiratorias. superiores. Sélo pueden penetrar en el compar mento pulmonar particulas de hasta 5 um de didmetro aerodinamico. EL hibito de fumar hace que aumente la cantidad de cadmio depositada en cl pulmén, Un cigartillo puede contener de 0,9 a 2,3 ug, y se ha cal- culado que se inhala aproximadamente el 10% de esa cantidad, Absorcién, La cantidad de cadmio absorbida por los pulmones depende de la cantidad retenida en ellos (la depositada menos la desalo- jada por los mecanismos de expulsién), asf como de la forma quimica de las particulas retenidas, que influye en la velocidad con que se solu- 2 sta secon se basa en gran parte en las obras citadas en Ia bibliogafia com los rnameros, 4 5 y 8. 2 bilizan en 10s tejidos. Son muy escasos los datos sobre la importancia de estos factores durante la exposicién crénica al cadmio. Segin céleulos twéricos basados en la cantidad de cadmio detectada en los tejidos orgi- nicos ce fumadores, cabe pensar que puede absorberse un 50% del cadmio depositado en los pulmones (probablemente como éxido de cad- rio) Asi, pues, cuando la mayor parte de las particulas son de didémetro respirable, el sujeto puede absorber del 20 al 30% del cadmio inhalado. Esta proporcisn disminuye al descender la solubilidad de las sales de cadmio. Fl sulfuro de cadmio, por ejemplo, tiende a quedar retenido en el pulmén, La absorcién gastrointestinal en el hombre no suele legar al 10%. Diversos factores dictéticos, como deficiencias de proteinas, hierro y calcio, pueden acelerar la absorcién gastrointestinal (J), Ia cual puede depender también de ta solubilidad de las sales de cadmio en el pH gastrointestinal. La absorcién percutinea se considera insignificante. Distribucién. Mas del 70% del cadmio que circula en la sangre se encuentra en Ios hematies. Fl cadmio es un agente t6xico acumulativo con una vide media bioldgica de varios afios. La carga de cadmio en el organismo aumenta con la edad y es mayor en los fumadores que en los que no fuman. Las principales zonas de depésito son el higado y los riflones. La importancia respectiva de estas dos zonas de almacenamiento dopende de la intensidad y duracién de la exposicién, asi como de la funciéa renal. En los tejidos del cuerpo el cadmio se encuentra casi siempre unido a la metalotioneina, proteina de bajo peso molecular gue se combina con los metales y cuya sintesis esté inducida por el cad- mio. Las estimaciones de la carga corporal en adultos sin exposicidn, profesional residentes en zonas que no estin demasiado contaminadas con cadmio fluctian entre 9 y 40 mg, mientras que las concentraciones medias en la corteza renal van de 10 a 50 mg de Cd por kg (peso en Inimedo). Se han encontrado Valores mis elovados en trabajaciores indus- triales expuestos al cadmio. El rifién es especialmente vulnerable en caso de exposicién a largo plazo (véase mas adelante), y cuando sobreviene la disfuncién renal desciende el nivel de cadmio en el rifién a consecuen- cia de la mayor excreciOn, Excrecién. Fl cadmio se exereta fundamentalmente en Ia orina y en grado mucho menor en Ia bilis, las secreciones gastrointestinales, el sudor, la saliva, cl pelo y las ufias. La transferencia transplacentaria yy la secrecién en Ia leche son muy escasas. 23 2.1.2 Importancia de la concentracién de cadmio en los productos Bioldgicos Las concentraciones anormales de cadmio en la sangre constituyen ‘un indicador de exposicién reciente a ese metal. No existen, sin embargo, bastantes datos para establecer con exactitud la relacién entre la expo- sicin al cadmio en el aire de fos lugares de trabajo y su concentracién en la sangre. Cuando Ia exposicidn es leve (por ejemplo, en la generalidad de la poblacidn), no estd claro hasta qué punto la concentracién de cad- mio en la sangre refleja la carga corporal y Ia exposicién reciente, Sobre una base de grupo, se encuentra una buena correlacién entre Ja concentracién de cadmio en la orina y la carga corporal hasta cierto nivel de excrecién urinaria. Cuando la exposicidn ha sido tan intensa que satura todos 10s sitios de combinacién en los tejidos, el cadmio de In orina puede ser més un indicador de exposicién actual que de carga corporal. La concentracién en la orina correspondiente al estado de saturacién tisular parece situarse entre 10 y 15 ug de Cd/g/ creatinina. ‘Se ha propuesto la determinacidn del cadmio en el pelo para medit la carga corporal de ese metal. En Ia préctica, sin embargo, la dificultad de distinguir cadmio endégeno del depositado a partir de fuentes exte- riores hace que este método no resulte seguro, El cadmio excretado en las heces constituye un indicador satisfacto- rio de ingestacién oral diaria, ya que la cantidad absorbida o exeretada iariamente por el tracto gastrointestinal representa una fraccién peque- fia definida de ta ingesta. Niveles normales, En los sujetos que no fuman y no estan profesio- nalmente expuestos, la concentracién de cadmio en la sangre entera no suele llegar a 5 ug/l, mientras que en los fumadores ¢s mas elevada. La concentracién en la orina aumenta con lat edad, pero en las personas que no han llegado a los 60 afios y que viven en zonas no contaminadas rara ver excede de 3 jg la cantidad diaria excretada en [a orina. 2.3 Efectos téxicos del cadimio Efectos agudos. Enel hombre, las principales manifestaciones agudas inducidas por el cadmio son la aparicién de trastornos gastrointestinales tras Ia ingestion y Jas neumonitis quimicas consecutivas a Ja inhalacién de humos de Gxido de cadmio. 24 En animales, 1a administracién aguda de cadmio (principalmente por vias parenterales) puece producir efectos tSxicos en muchas partes del organismo (rilén, iigndo, testieulos, ovatio, sistema nervioso, éncreas, sistema cardiovascular y placenta). También se observan sarcomas en Tos puntos de inyeecién y efectos teratogénicos. Efectos erénicos, En el hombre, tos principales efectos tdxicos re- sultantes de la exposicién a largo plazo son la disfuncién renal y los trastornos pulmonares. También se han sefialado otras alteraciones de origen t6xico, como modificaciones seas, anemia leve y anosmtia, ‘Aunque la administracién parenteral a la rata puede provocar cinceres en el punto de inyeccién y tumores testiculares de células interstciales, por ahora se carece de pruebas de que el cadmio administrado oralmente a los animales sex earcinogénico. Conviene sefalar, no obstante, que fos, ‘studios realizados hasta la fecha se centraron mis en la toxicidad que en la accién carcinogénica. ‘Algunos estudios epidemiolégicos sugieren que la exposicién al cadmio puede aumentar la incidencia del cncer de la prdstata (2) y del pulmdn. Un estudio de Lemen y cols. (3) indica la posibilidad de un mayor riesgo de ciinceres del tracto respiratorio. Otros datos, en cambio, iuestran que el peligro de cfincer es pequefio y qu? los resultados de los cestudios que acaban de mencionarse reflejan un grado muy alto de exposicién profesional al cadmio en el pasado. A juicio del Grupo de Estudio, las encuestas epidemiolégicas sobre carcinogenicidad del ccadmio no son concluyentes porque en la mayoria de ellas sdio se estu- dig un mimero reducido de trabajadores, Por otra parte, algunos inves- ‘tigadores no han podido descartar la posible intervencida de otros agentes (por ejemplo, el tabaco) en sus resultados. Por estos motivos, no se puede tener en cuenta la accidn carcinogénica del cadinio al establecer limites admisibles de exposicidn profesional basados en razones de salud. Los datos publicactos son contradictorios en fo que respecta a la apa- ricién de anomalias cromosémicas en linfocitos cultivados de trabajado- res expuestos al cadmio. Algunos estudios (en general, necrépsicos) sobre grupos de Ia poblacién general han indicado que el cadmio es un agente etioldgico de enfermedades cardiovasculares, en particular la hipertensidn. Esta relacidn no se ha observado en trabajadores de la industria del cadmio. En los animales, Ja administracién reiterada de cadmio puede ocasio- nar una disfuncidn hepitica, y en algunas tazas de ratas tiene un ligero efecto hipertensivo. En la exposicién profesional a largo plazo el rifién 25 suele ser el érgano més vulnerable, pero en algunos individuos puede manifestarse antes Ia afectacién del pulmén. 2.2 Relacién entre exposicién y efectos sobre Ia salud 2.2.1 Indicadores biolégicos e indicadores ambientales de la exposicién La eleceién entre indicadores bioldgicos y ambientales de Ia exposi- ‘cién depende del Srgano que se desee estudiar. Como los trastornos pulmonares agudos y erénicos inducidos por el cadmio se deben proba- blemente a una accién téxica local, su intensidad hay que relacionarla con factores externos, tales como la concentracién en el aire y la dura- cin de la exposicién. También es evidente que el efecto agudo del cad- mio en el tracto gastrointestinal esté en relacién directa con la cantidad ingerida. Como el efecto sistémico erénico sobre el rifién proviene de una acumulacién progresiva del metal en ese érgano y habida cuenta de que 1a exposicién industrial al cadmio a largo plazo se opera por inhalacién ¢ ingestién, cl andlisis del aire es el método mas itil para evaluar el riesgo pulmonar. Este método puede servir también para identificar las fuentes de emisién y para evaluar Ia eficacia de los métodos preventivos. Sin ‘embargo, Los efectos sistémicos erénicos del cadmio, se evahian mejor mediante mediciones complementarias de sus concentraciones en la san- ‘gre y en la orina, que reflejan sobre todo la exposicidn reciente y Ia carga corporal, respectivamente, 2.2.2 Repercusién de los problemas analiticos en la interpretacion de datos publicados El anilisis de los resultados expuestos en la bibliografia plantea tres dificultades fundamentales. En pocos documentos se dan datos sobre Ja precisién de los métodos utilizados para determinar el cadmio en los productos bioldgicos, lo cual constituye un inconveniente grave Porque, como se sabe, el anilsis del cadmio en la sangre y en la orina es dificil y puede entraitar muchos errores (contaminacién, pérdidas du- rante el tratamiento preliminar de las muestras, etc). El empleo de ‘miétodos imprecisos puede explicar en parte las grandes disparidades cexistentes entre los valores «normales» obtenidos por distintos autores. 26 Otra dificultad estriba en la diferente scnsibilidad de fos métodos aplicados para detectar un efecto bioldgico del cadmio sobre of riaén. (por ejemplo, proteinuria total o concentracién de determinadas protefnas en Ja orina). Por iiltimo, los datos sobre concentracién de cadmio en el aire de los lugares de trabajo son muy fragmentarios por distintas razones (¥. 8, tiempo limitado de muestreo o falta de informacin sobre el tamafio de las particulas), lo cual da lugar a muchas imprecisiones en el célculo de la exposicién ambiental. 22.3 Relacién exposiciéneefecto Se han comunicado casos de neumonitis quimica, con disnea, tos, expectoracién, molestias tordcicas y disfuncién pulmonar, en trabajado- res expuestos durante varias horas a humo reciente de Sxido de cadmio en concentraciones superiores a 0,5 mg de Cd/m* (4) Si la concentracién pasa de 5 mg de Cd/m* durante ocho horas puede sobrevenir un edema pulmonar tardio de cardcter mortal. El polvo de cadmio no es tan agudamente téxico para los pulmones como los humos de éxido de cadmio, Se ha caleulado que una exposicién de ocho horas una concentracién de polvo de cadmio «respirable» superior a 3 mg/m? es capaz de ocasionar sintomas respiratorios agudos. ‘La administraci6n de una sola dosis oral de 10 mg de cadmio puede originar trastornos gastrointestinales (néuseas, vémitos), pero la dosis oral aguda con efectos mortales para un adulto se sitia probablemente por encima de 350 mg. Se ha afirmado que la exposicién excesiva y a largo plazo al cadmio puede provocar inicialmente proteinuria 0 trastoraos pulmonares. En la bibliografia no se deduce claramente si estos tiltimos provienen de la exposicidn a largo plazo a una concentracién en el aire superior al punto aritico, © bien de exposiciones subagudas episédicas que provocan lesiones pulmonares permanentes. Esta situacién se debs fandamental- mente a que en las investigaciones iniciales no siempre se presté suficiente atencién a los efectos de! humo del tabaco en los pulmones Se han deserito diversos tipos de disfuncién pulmonary. ., enfisema, neumopatia obstructiva crénica y fibrosis pulmonar). Sin embargo, en ausencia de episodios subagudos de neumonitis quimica, los sintomas de disfuncién renal aparecen probablemente antes que los del trastorno pulmonar. Py Entre los sintomas de trastorno renal detectados en trabajadores expuestos al cadmio figuran: el aumento de la proteinuria total; el mayor aclaramiento renal de ciertas proteinas (8 2-microglobulina, proteina ligada al retinol, albimina, transferrina, IgG); el aumento de la urea y de Ia creatinina en el plasma; y la perturbacién de algunas. pruebas Tuncionales, tales como las de aclaramiento de la ereatinina, la inulina y el Acido trico, la sobrecarga de dcido, Ia medicién del tiempo de reab- sorcién tubular del fésforo y del calcio y Ia prucba de la eapacidad de concentracién de la orina. En algunos trabajadores intoxicados con cadmio se ha observado también una elevada prevalencia de célculos renales. La proteinuria, cuando se determina con una técnica suficientemente sensible y cuantitativa, precede a los demas sintomas de lesin renal. En general se debe a una lesidn tubular que origina una mayor exerecién de proteinas de bajo peso molecular, pero en algunos casos puede obedecer una disfuncién glomerular precoz en cuyo caso se excretan proteinas de peso molecular clevado. Se han sefialado trastornos del metabolismo cilcico y lesiones dseas (osteomalacia y/o osteoporosis), principalmente en trabajadores que llevaban mucho tiempo expuestos al cadmio. Sin embargo, también se hha observado algtin caso que otro de lesiones dscas en trabajadores con un periodo de exposicién inferior a cinco afios. Aunque Ia patogenia del trastomno todavia no esti del todo clara, se ha comprobado que la ma- yoria de los trabajadores que suften este tipo de lesiones presentaban Previamente sintomas de disfuncién renal. Se han observado asimismo sfntomas de disfuncién det sistema ner- vioso central en trabajadores de una fbrica de acumuladores, pero no se dispone de datos sobre la relacién con la intensidad de la exposicién. 2.2.4 Efectos adversos eriticos Segiin los datos disponibles, en los trabajadores erdnicamente expues- tos al cadmio los efectos criticos son los trastornos de las funciones renal y pulmonar. Esta conclusidn habré que reconsiderarla cuando se obten- an més datos sobre el efecto carcinogénico del cadmio en el hombre. ‘Los trastornos pulmonares s6lo se pueden prevenir manteniendo por debajo de cierto nivel critico Ia concentracién de polvo de cadmio en cl aire 0 en los humos. En cambio, para prevenir lesiones renales debe tenerse en cuenta la absorcién del cadmio por cualquier via (pulmonar y oral), La tinica manera de evaluar el efecto de Ia exposicidn combina- 28 da es determinar la concentracién de cadmio en la sangre y en la orina, En consecuencia, es necesario mantener la concentracién de cadmio en estos humores biolégicos por debajo del nivel en el que sobreviene una disfuncién de Srganos vitales. 225 Relaciones exposicién-respuesta y efectos criticos Ffecto en Tos pulmones (Cuadro 1). Son escasas las investigaciones efectuadas sobre Ia funcién pulmonar en trabajadores expuestos durante mucho tiempo al cadmio y por desgracia no estén basadas en pruebas idénticas. Muchos estadios epidemiolégicos hacen pensar que, cuando no ha habido episodios agudos de exposicidn elevada, las alteraciones causadas por ls inhalacién de cadmio en tos pulmones suelen ser leves.. Conviene subrayar, no obstante, que la mayorfa de dichos estudios se realizaron con trabajadores en activo, lo eual quiz supone un sesgo cial de la investigaci6n al utilizar exclusivamente trabajadores «resi tentes». La escasez. de datos sobre la relacién exposicién-respuesta respecto a Ia accién del cadmio en tos pulmones no permite ir mis alié de una propuesta provisional de «nivel de respuesta no adversa a fargo plazo». ‘Al parecer, para prevenir efectos nocivos en el sistema respiratorio, la exposicién media ponderada por el tiempo a los humos de éxido de cadmio o a polvo de cadmio respirable no debe exceder de 20 us de Cam? (duracién de ta exposicién: 40 horas por semana durante toda la vida laboral). No seria prudente basar el imite de exposicién profesional en Ia concentracién total de polvo. Se carece de datos suficientes para distinguir entre las diferentes formas quimicas del polvo de cadmio. 29 Cuadro 1, Estudios clinica sobre el efecto ergnico del cadmlo en los pulmones Numero y Condiciones Autor y referencia sexo de lot ‘Observaciones frabojadores 4 &xpesicién Princ, F 2hombres Humosy polvo de _—Radlografia de térex Indes, Hyg 29: Sxide de cadmio:, sin elferaciones as a9m) 40-1440 wai: 0.5 0 22 afos de exposicion (promedio = 8 afos) Hordy, HL y Skinner, Humos y polve de Radiografia de rex 18. Sxido de Eadmio; pro- sin clleraciones 4. Indust, Hyg. 29 ‘medio = 100 gi’: aa 947) ‘£8 alos de exposieién Friberg, 4Shombres Polvo de éxido de Pruebas de fundién de tndusit. Hyg 30: cdmio en fébriea acu- pulmonar anormales ee Muladores alealinos;, en 1/3 de lor sujtor S515 mgim'; 9-34 ofos expostlén (prome= io = 20 oF) Friberg, L. 1Shombres Menot de 4ofosen lo Prucbat de_funclén ‘Acta ed. Scand, {brica antes mencio- pulmonar sin tras 4158: Suppl. (1950) nada’ formes’ Baader, W. Bhombres Polvode éxido de _Radiografis de trax. isch. Med. Weck cadmio en fdbrica acu- sospechosas’ de ene 16: 484 (1951) ‘muladores alealinas:sema en 6 sujetos B49 ahos deexposiién Bonnel, J. 100hombres Humes de dxido de Pruebasanormatesde ‘Brit J nd, Med, cadmio1=fdbriea: —funcién pulmonar y 128781 (1955), 15-89 agin? (prome- radiografias de torax dio 40-50 agin") sospechosas de enfle Kazantas, 6. 2s Fabrica: 1-270 ugin* sema on 21 sujetor ‘Brit. Jind. Med (promedio = 132 ugin?) 13: 30 (1956) (ero condiciones labo- rales peores anterior Buxton, R ments). Briel Ind Med, 13:36 (1956) Boone, J.A.y cos ‘Brit J. Ind, Med 16: 135 (1959) Cvadro 1. (Continvacién) Nomero y Autor y referencia sexodela — 2MMIOMEE——Obseryaciones trabeladores pe Kozoniit,G.y cole, 1Zhombres Fabrica de pigmentos_Radiogratia de trax “Quart Med, 3: Ge cadmio; 0531 ahor sn aleracionss en Festa) mponiién (expen €cbreroe con mss do ciéna poly sumer’ 25 afore’ expos deGnide de cadmioen Gin: tenian: Shor oneriores) dlnea de esuerzo r = Pruebas onorma- Feed toncion pol Potts CL Tohombres Polvode éxdode __Enflsma y Bronquits ‘nn, Occup. Hyg 8 fadmio.en fabrics acu- erica ta 4 Irabaj: 1305) Imuloderesclelinons does, fata 193 06236 maj desde 950) 05 male's S00 Stor de expo- Survkl, Sy cols, 19 hombres Polvo de etearatode Pruebas de funcién ‘nde Pi 3 admio; 30590 ug)m*j_ pulmonar nermoles Bans) promedio de expesin Peter Tuchiya,K {3hombres Fondicléadesleaciones Radlogratia de trax ‘ich Emin, Ht deplsiaycodmios snaheracones 445678 096) SEA gine (prome- diam 138 gin) Ope2 cbos de tepon Adams, R.G.ycols. hombres. Polvode éxdode __Prueboranormalesde ‘Quark od 38 Cedmio.en fGbrica ace (onion pulmoncr en BScs369) mmuladeresolesiinon 8 setor desde 1957 "zone, 03-5 msi one, Octo mgmt 53+ zone, 0650.2 mgm Stator de exposcion Teculeey, D.B.y 1 hombres Humor polvo de xi- Pruebas de funcén “Stnescs, B.C do de chdmiss Polmoner normales arched, $2135 maine 26:35 (970) Tat ates de exposcén aL Lavwerys y cole, “rch, Environ. Health 2B: 145 (1974) Moterney cos Cah. ed. Travail, 12: 40975) (los dos documentos se consideran glo Salment) Smith TJ. cola "amer Rev. Resp. Dis, 14:61 (1578) Stonescu, D.C. y cols Scand. J Resp. Dis. (6: 289 1978), 2 Cvadre 1, Nomero y exo de lo ‘abejadores 26 mujeres 6 mujeres 21 hombres 25 hombres 66 hombres 17 hombres 48 hombres = (Continvactén) ‘Condiciones de exposicion Mezela de polvo de Sxldo y do sulfoto do cadmio; 68-48,6 ugimn® Arespicable <4 ugh); 20 aos (promedio = 32 ‘os. CObservaciones Sin trastornos en prusbes de funeién polmone Prucbet _de_funcién pulmoner ligeramen- fe alteradas en” los hombres (premedios diferentes de Tos fer Yigos, pero sin mayor Prevalencia de prue- as enormales) Prucbes de funcién pulmoner ligeramen= fe cheradasten 6 tre: bojadores Prucbes de_funeién pulmonar ligereme fealteradas Pruebas de funcién pulmonar anormales Fadiografia. con brosie en 5 trabajar ores Pruebas de funcién pulmener ligeramen- fe alteradas; radio- grafia. de térax sin ateraciones Cuedro 1. (Contiaueeis) Nomero y Condiciones Avtory referencia texo de lot 5 ‘Observacionas , re eect, de exposicion Gil, PF Sthombres Polvo y hume de Sxido Prucbes de funclén ‘ital Bulli Umited, de cadmio, pulmoner sin allera- Londres, 197 045-31 agin: Elones; en el grupo pag. 207 G-37 afosde exposi- mas expuesto (Cd an (Proceedings of the en) claire: 19-31 agi); Firs International ‘mayor prevalencia de Cadmium Conference) Ja dianea de. esfver- 70 (24 frente a 41/34 en los testigo) mayor prevalencia de Infecciones resprato- Efecto en los rifones. En In exposicién profesional leve, pero a Jargo plazo, los rifiones suelen acusar los efectos del cadmio con mayor frecuencia que los pulmones. En general, el primer signo de disfuncién renal es el aumento de la proteinuria. También en cierias zonas del Japén contaminadas con cadmio se han registrado casos de trastomo renal, asociado a veces con alteraciones seas (enfermedad tai-tai) en la poblacién general. En 1977, un grupo de trabajo de la OMS (5) lleg6 a la conclusién de que una ingestién diaria de 300-480 ug de cadmio podia elevar la prevalencia de proteinuria. En el Cuadro 2 se han reunido datos sobre la exposicién al cadmio atmosférico y Ia prevaiencia de la proteinuria. Como puede verse, aun ‘en cl supuesto de una ingestién insignificante de cad:nio, conviene man- tener el nivel de polvo de cadmio o de humos de dxido de cadmio muy por debajo de 20 ugim* a fin de evitar que aumente la prevalencia de la proteinuria en caso de exposieibn a largo plazo. Sin embargo, como ya se ha sefialado, esa recomendacidn puede resultar equivoca por no tener en cuenta todos los factores que influyen en la dosis de cadmio absorbida por el trabajador (v. g., la solubilidad de las particulas de cadmio, y particularmente, la absorcién oral directa). Los estudios basados en la evaluacién de las concentraciones de cadmio en la sangre y Ia orina aportariin datos mis exactos sobre la respuesta a la exposicién. El grupo de trabajo de la OMS, basindose en estudios necrépsicos, Megé a Ia conclusin de que el nivel critico de cadmio en Ia corteza renal 33 ° @ we coca soyas | % i crwor opptetcnme Oe & es oves o & Hrs tooseoe ee ut cusses ae ® no vee ° o a yi compos (os) on ‘Sod déng_ op osonay) € cveamed crs) on pn Sock "pos “PW BEY "T “iogLs ORPP |9P ope o BT ccosvoor “Popaniou (ciuoy a codopeune co us co = iad (961) o88-s78 6w oor < oO +> van vomeg ‘pH ONDA opetunl ep opsaw 8 sett, we 8 e< 3 a 6 pepe soo Coc sspomunys oye ue onupes ‘ouisd” apace Ee epouswon 9p odwayy Lian ‘sosandwoy seuoposuesue3, “Pos fap TpeFogou Fy we BEAUBeId By wp BF jena *t OpOAD 34 ‘opopounuoid rou op 4 op 9p * L {eqvodol us) 7294 sou onto ope ¢ & = ‘eg woposry aso 9 Se oor ‘ ethuny 3 "otras Ay polor| ——_sHasojupoye oy & oopras (ors secs 1 ome (9p ts oo -¢ "wuet -usmpy “soo KS nang no opotn a mt os x ° fi (yon) sero :e8 pons 3 % soy wong “oo A “tsgamy-oynounwiietpas ¥e a a = a a (ros) Bhbsth 280 “MIE ia suasaig py See seat it opus sopounrs epomunn, (eppemuyuen) -z e4pena 2 uo> sopologo.s uo npojn2o vipous uprisodya sojpowoud ust {osjeupip ep ur § > fojno|y0d spi 3p oybusD) ofgoutdses UpI90 14 ‘trajpuod eave sovsuipu #97 Ugtoayésas 9p Buoz Uo BpIpOW 5 wes s1> copo> 9p Wes ‘toss sh> pik ap onlod ‘pao op Eon 108) oeroe epenog ue 0s oe % oo 08 obi ° 10 oF 1 9 2 09) ve soyo us oqwipes ugotodie 2 °° Spd SPM soomauoD 35 para la aparicién de proteinuria se sitéa entre 100 y 300 mg/kg (peso en Inimedo) (5). No obstante, una investigacién reciente en la cual se midié por activacién neutrénica la concentracién de cadmio en los Tifiones de 309 trabajadores de la industria de ese metal, evaluando al mismo tiempo la funcin renal, ha revelado que la concentracién critica cn la corteza renal varia entre 200 y 250 mg/kg (peso en hiimedo) (6). La correlacién entre el cadmio renal y el cadmio urinario indica que el nivel ertico (nivel de efecto adverso minimo) en la orina es de 10-15 yg de Cg de creatinina urinaria. Esta estimacién concuerda con los resulta- dos de algunas observaciones clinicas recientes (7), segiin las cuales cuando exvede de 10 ug/g de creatinina urinaria ta concentracién de cadmio en los trabajadores expuestos, el aumento de la exerecién uti- naria de diversas proteinas (8,-microglobulina, albémina, transferrin, IgG, ef.) es mas frecuente que en grupos testigo equiparables. Los If mites biol6gicos recomendados en este informe se basan en los estudios clinicos mencionados y corresponden a los umbrales biol6gicos obtenidos por aplicacién del modelo de Friberg para el metabolismo del cadmio en el hombre (8). La relacién entre nivel de exposicidn y concentracién de cadmio en la songre no esti todavia bastante clara para que se pueda establecer con precisién aceptable un limite biol6gico para la sangre. Sin embargo, el Grupo de Estudio acordé que podia aceptarse como nivel provisional de efecto no adverso el valor de 10 ug de Cdl de sangre entera propuesto por Bernard y cols. (7). 2.2.6 Conchusiones Una exposicién de menos de una hora a humos y polvo de éxido de cadmio en una concentracién que mo exceda de 250 ug de Cd/m* no debe originar ninguna reaccién pulmonar en los trabajadores con una funcién pulmonar normal. Para prevenir cualquier efecto pulmonar del cadmio en Ia exposicién profesional a largo plazo, la concentracién media en el aire (ponderada por el tiempo) de polvo respirable o de humos de dxido de cadmio no debe exceder de 20 ug de Cd/m? (en el supuesto de una exposicién semanal de 40 horas durante toda la vida laboral). Con objeto de prevenir la disfuncién renal, la cantidad de cadmio almacenada en la corteza renal debe mantenerse por debajo de 200 mg/kg, (peso en hiimedo). Ese nivel corresponde a una excrecién urinaria de 10 ug de Ca/g de creatinina (confirmada por determinaciones repetidas 36 a intervalos de pocas semanas). Para la sangre se propone un valor de 10 pg de Cd/I de sangre entera como nivel de efecto no adverso en la exposicion a largo plazo. Ademis, la concentracién de polvo respirable debe estar muy por debajo de 20 ug de Cd/m', 2.3. Posibilidades de investigacién Habra que realizar nuevos estudios sobre la relacién entre la exposi- cién al cadmio, la carga corporal y de cadmio en la sangre. Debe comprobarse también [a validez del limite biolégico para el cad- mio en la orina, propuesto por razones de salud, examinando a mis gru- pos de trabajadores expuestos al cailmio, Los resultados obtenidos jus- tifican un esfue-zo continuo para perfeccionar la eomparabilidad de los, métodos de determinacién det cadmio en los productos biol6gicos. ‘Una mejor estimacién del nivel de efecto no adverso para los pulmo- nes del cadmio atmosférico requiere nuevos estudios epidemiolégicos, 0s y retrospectivos, en los que se conozca con més exactitud Ia exposicién (concentracién y duracién). El importante y urgente problema de la carcinogenicidad del cadmio para el hombre justfica nuevos estudios retrospectivos en gran escala sobre grupos de trabajadores con diferentes intensidades y tipos de expo- sicién, La finalidad de esos estudios debe ser doble: deducir si en algunas condiciones el cadmio acta como carcindgeno para el hombre y evaluar Jas condiciones de exposicién prevalecientes en los ilitimos veinte afios pueden aumentar el riesgo de céncer. eben estudiarse los factores que modifican el metabolismo y Ia toxicidad det cadmio en cl hombre para determinar si el aumento del riesgo de toxicidad del cadmio justficaria una propuesta de limites de exposicidn profesional basados en razones de said mis restrictivos para ciertos grupos de poblacién, 2.4 Recomendaciones Para prevenir efectos pulmonares, tanto agudos como erénicos, se recomiencia el empleo de limites de exposicin a largo y corto plazo. Los efectos renales pueden prevenirse controlando la concentracidn de polvo de cadmio y de humos de éxido de cadmio en el aire y cercionindose periddicamente de que los niveles de cadmio en la sangre y la orina de los trabajadores no rebasan Ios valores eriticos. 37 Limite de exposicién profesional a corto plazo recomendado por razones de salud. Para prevenir las reacciones puimonares agudas se recomienda un nivel de 250 ug de Cd/m? en la exposicién a corto plazo a polvo res- pirable y humos de dxido de cadmio, a condicién de que se respete el promedio en funcién del tiempo. Limite de exposicin profesional a largo plazo recomendado por razo- nes de salud. Para evitar los efectos pulmonares y renales adversos de Ia exposicién profesional a largo plazo, Ia concentracién media de cad- so en humos 0 en polvo respirable, ponderada en funcién del tiempo, debe ser inferior a 20 ugim*. En el estado actual de los conocimientos, se recomienda un valor provisional de 10 wg/m*. ‘Ahora bien, afin de evitar una acumulacidn excesiva en el rifén deben considerarse al mismo tiempo los niveles de cadmio en la sangre y en Ia Limites bioldgicos de eadmio en la sangre y en la orina recomendados ‘por razones de salud. Por lo general, la concentracién de cadmio en Ia sangre ¢s sobre todo wn indicador de la exposicién en los itimos meses. Como nivel eritico individual se propone un valor de 10 ug de Ca/l de sangre entera si la exposicién es sistemitica y a largo plazo. ‘La concentracién de cadmio en la orina puede utilizase para caleular Ja carga corporal. No hay que permitir que la concentracién urinaria individual de cadmio Uegue a 10 ug de Ca/e de creatinina, ya que por encima de ese nivel hay cierto riesgo de disfuncién renal, ‘Como las mencionadas concentraciones representan niveles en los que se han observado efectos sobre el rfién y, dada la prolongada vida ‘media del cadmio, se recomienda aplicar medidas de control en cuanto Jas concentraciones individuales de cadmio en la orina y/o en la sangre excedan de 5 ug/g de creatinina y de 5 yg/l de sangre entera, tespectiva- mente, En consecuencia, esos niveles deben considerarse como limites bioldgicos desde el punto de vista de la salud. En vista de la actual incer- tidumbre acerca de la actividad carcinogénica del cadmio en el hombre, hhabré que revisar los diversos niveles propuestos en este informe cuando se conozcan los resultados de los estudios epidemiol6gicos en curso sobre Jas propiedades carcinogénicas del cadmio. 38

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