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mtroducción

Materiales para una


estética del diseño
Arma Calvera (ed.)

I .

; .
1. Lo estético en el mundo cuantificado: actualidad de la estética
para el diseño

A pesar de que. por lo general. siempre ha parecido dificil y resbaladizo hablar


de estética en el mundo del diseño. algunos acontecimientos han vuelto a
poner sobre la mesa la cuestión. aunque le han conferido un nuevo cariz.
Por una parte. hace ya algún tiempo que las cliscipllnas sobre gestión y técnicas
organizacionales barajan los fenómenos estéticos como Jactares determlnantes
en sus propuestas para definir y desarrollar productos: es el caso del markttirts.
o de las técnicas de mercadeo. para las cuales. lo estético. sinónimo por lo
general de un estilo, constituye un medio para clasificar estilos de vida. o sea.
pautas consumistas. y por lo tanto. definen repertorios formales como punto
de partida para conseguir ubicar socialmente en un nicho de mercado los
artículos y servidos nuevos. Conviene reconocer que han tenido mucho éxito
en su planteamiento porque. en esos térmlnos o en términos muy parecidos,
lo estético -al el cliseño· ha entrado en la legislación y en las directrices: econó-
micas relativas a políticas de I+D+I (Investigación. Desarrollo e Innovación)
en su aspecto mer=til y fiscal Vale la pena concretarlo con algunos ejemplos.
En 1998, la VE, gracias en buena parte a los esfu=os del BEDA, I aprobó
una directiva para la protección jurídica del diseño industrial con vistas a la
armonización comunitaria en esta materia. La oficina que ha de velar por su
cumplimiento y ayudar a empresas y cliseñadores a proteger sus activos en
Los objetos qu" Ilustran la cubiena ylas portadillas de e<te libro son unos peines japoneses que se diseño para toda Europa está instalada de momento en Alicante. Es la OAMl
utilizan en d pelnado de las mujeres cuando ~stas visten Jos atuendos tradicionales. Cuando
uno d. estos peines se desgasta o rompe no es costumbre desemarlo sino enterrarlo con toda
Esa directiva ha inspirado la ley española de protecdón jurídica del diseño
",remollla en un monast"rlo. igual que ocurre con los pincel.,; de los calfgta fos y otras abjeros industrial y. probablemente. también la de otros países de la Unión. La ley
que hayan prestado su servicio a lo largo de mumos ailas . española entiende por diseño industrial lo siguiente:

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la Anna Calvera Introducaón. Matmales para una estética del diseño 11

la aparienda de un productn O de una pane ligada a las características de La separabilidad de la forma y la función es lo queJlennlte que la forma
línea, color, tonna, textura O materlales del producto en sí o de su decoración. e'....
tema de un productn utilitario pueda ser protegida como diseño, cuando Jas
Se excluyen aquellas características de la apariencia de! producto dictadas O caractelisticas de apariencia revisten además novedad y Singularidad. (.ul
derivadas directamente por la función técnica. Par producto se entienden todos La relerenda al grado de libertad de! diseñador no implica necesariamente que
los arúculos indusniales o artesanales, incluyendo todo lo que sirve para mostrar la e,,--tensiónde la protección sea inversamente proporcional a la funcionalidad
un producto complejo, su embalaje, la presentación. los símbolos gráficos y los del diseño ya que lID: diseÍio puede ser altamente creativo y funcional a Ja vez.
caract"r~ tipográficos (.ul. Los requisitos san la novedad y el carácter singular.' Hay que tener en cuenta que la industria del diseño incluye sectnres muy diversos
y que no pocas veces Ja creatividad de los diseñadores se mueve en el seno de
Nn cabe duda de que la ley comporta una definición de lo que es el cliseño. tendencias a márgenes de sensibilidad compartida, común a los gustos o modas
al menos, su definición legal. la cual, nos guste o no, establece unas reglas de la época.
del juego para la identificación social de la profesión dé los diseñadores.
En efecto, establece una separación tajante para con la.irrpovación tecnológica En ese punto, la estética y lo que esta disciplina implica socialmente tienen
o los aspectos té micos y remite la tarea del diseño a las Cuestiones propias entrada en la definición del problema desde el mismo núcleo, pero, como
de ia apariencia de los objetos y artículos aunque pretenda no hablar en viene siendo habitual. se pasa por ella como de puntillas. No 'es que se rrate
absolmo de estética. de pedir la protección legal de las aportaciones estéticas, sino de poner en
Más adelante, el texto de la ley pone de manifiesto cuán complejo es 'evidencia cuán importante va a ser a partir de ahora tener elementos para
intt!Iltar definir la aportación del diseño y lo difícil que es afrontar legalmente comprender y hablar con serenidad de aquellos factores estéticos que influyen
aspectos que tµdicionalmente han sido los caracteristicos de la reflexión en la identificación de un cliseño concreto.
estética en. sentido fuerte. A mi modo de ver. refleja perfectamente la Un segundo acontecimiento para tener en cuenta es la definición de los
complejidad de los debates habidos en el mundo del cliseño con respecto nuevos indicadores establecidos en los últimos años para medir el papel de la
a la naturaleza de su actividad y su razón de ser. En este sentido. lo que innovación en la economía de un país. El dato más relevante: aquí y ahora es
más destaca es el esfuerzo por deIinir con objetividad aquello que sí puede la incorporación del cliseño como un factor de innovación aunque se siga
ser protegido legalmente y. por lo tanto. es demostrable. Así aparece en la entendiendo el diseño como un recurso del marketing. en el caso de la inno-
Exposición de motivos Ir: vación no-tecnológica, o de la ingeniena de desarrollo de producto, en el caso
de la innovación tecnológica. Sin embargo. y a pesar de los pesares. no cabe
Tamo la nOlUla comUIÚtaria como esta ley se inspiran en el criterio de que el duda de que esta conceptualización constituye un verdadero acontecimiento,
bien jurídicamente prot"gido por la propiedad Indusnia! del diseño es. ante todo. algo que celebrar desde la perspectiva espeáfica de la profesión de diseñador.
el valor añadido por el diseño al producto desde el punto de vista comerciaL Los datos llegan desde dos fuentes principal'es, por una parte, del European
prescindiendo de su nivel est¿t!co o a:rtfstico y d" SU originalidad. El d1seño Innovation Scoreboard (EIS) de 2004 y de sus actualizaciones para 2005,
indusa!al se concibe como un tipo de innovación formal referido a las características 2006 Y 2007. y. por la otra, de la tercera edición revisada del Manual de Oslo,
de aparienda del producto en Sl o de su ornamentación [.ul. Las condiciones de publicada on-fine el 25 de octubre 2006. preparada conjuntamente por la
protección del d1seño industrial son por ello puramente objetivas: la cobenura OCDE y Eurostat.'
lega! alcanza a los diseños dotados de novedad y singularidad (u.l. En aplicación En conjunto. la propuesta quiere promover la investigación en todos los
de estos criterios se registran los diseños que producen en el usuario informado ámbitos empresariales y pone un fuerte acento en la necesidad de eA1lerimentar
una impresión de conjunto diferente a la de los demás diseños [u.l. e investigar nuevos modos de comercializar, poner en el mercado. distribuir y
promocionar, pero también promueve la investigación encaminada a renovar
Por lo que concierne' espeáficameme a la estética, lo que sulP-ere el texto y ampliar la gama de productos y servidos en los mercados correspondientes.
es que la valoración estética, sea ¿sta artística o no, comporta también un Muchos de estos aspectos han sido afrontados a ~enudo tanto desde la práctica
Juicio sobre la calidad del diseño obtenido. lo cual no deja de ser aún más del disel10 como del marketing y arras técnicas organizacionales. De hecho,
complejo de tratar de lo que era antes. Desde esta perspectiva, las nuevas aunque en este contexto se siga definiendo e! diseño como una innovación
reglas del juego están claras; en las cosas del diseño, sólo es objetivo lo del marketing -Mrclerido a la forma y la apariencia de los productos y no a
que se puede definir en términos comerciales, es decir, según el marketing. rus especificidades técnicas u arras características funcionales o de uso N
_,

Ahora bien. a medida que va desarrollándose la argumentación. también desde el Manual de Oslo se aconseja entender el diseño como una parte
en lo comercial hay aspectos resbaladizos y de difícil concreción. Así. por integrante del desarrollo y la implenlentación de productos y también de la
ejemplo, en los apartados II y IV de la Exposición de motivos se observa el innovación de procesos. Hay que tener en· cuenta que se puede iunovar de dos
esfu=o hecho por describir el modo de rrabajar de los cliseñadores y lo que, formas, en el producto o en el proceso: Mla innovación de producto se refiere
en este caso concreto, podría interpretarse como aquello que enrre cliseñadores a un bien o servicio, mientras que la de proceso implica cambios en la función
se considera "creatividadM: de producción en aspectos como el equipamiento. los recursos humanos o los
12 Anna Calvrra Introducción. Matmal!s para llna atEnea dd dis(ño 13

métodos de tnIbajo, entre otros'. Según indica un informe sobre ll! innovadón mostrar, cuán diferente era y podía ser la aponación real del cliseño, como por
en España (2005) en e:!marco de:!Manual de 05102005 (Zozaya 2005: nota 2), ejemplo, poniendo de relieve esa capacidad que tienen los cliseñadores para
Ul1ñ innovadón en producto, si es de gran magnitud, tiende a persistir mucho darse cuenta y observar los cambios qu¡::constantemente vienen produciéndose
más que las hIDovaciones de procesos, dado que éstas son más fácilmente ell las funciones. o sea, en la manera de vivir de la gente, en sus usos,
imitables por los competidores. VIStoasí. no cabe duda de que, en el contexto cost1m1bres y valores, no sólo en sus gustos y maneras de ver. Si ahora hay
de la innovación. se está abriendo un marco nuevo de trabajo para el diseño que entender el diseño en términos de i=ovación, puede ser muy bien que
en todas sus modalidades, especialmente para aquel cliseño que quiere ser convenga volver a hacer un eSfuerzo similar para que el diseño se comprenda
una innovación en profundidad'y de 'hondo calado, aquella que inIluye real- a sí mismo, su labor, sus saberes y conocimientos y la finalidad de su interven-
mente y se integra en los modos de vivir de la gente y su cultura. dón a la hora de proponer y lanzar nuevos productos y servicios. Si .se pone
Siglúelldo con el mismo estudio, un poco más adelante afuma que el la vista en esas i=ovadones de gran magnitud para que persistan a largo
diseño industrial constituye en España tillO de los campos prioritarios en plazo, para conseguirlo, el diseño y las competencias propias de los diseñadores
cienda y teOlología. ¿Cuáles son los aspectos innovadores que se esperan del deben ser reformUrados de forma que sirvan, se comprendan y se respeten
diseño en este caso? En la página 31 afinna que 'las actividades innovadoras en las acdones encaminadas a la innovadón y se incorporen como una
introducen cambios en la estrategia, direcdón. organización. comercialización aportación que tiene mucho que decir desde el comienzo, y a lo largo del
y aspectos estéticos de los productos'. Es más, 'en España, han sido los aspectos proceso completo, en el desarrollo e Implementación de productos y servicios.
estéticos, a menudo detenninantes en la decisión del comprador, los que más Aun en el caso de que sólo competa al diseño la innovación en los "aspectos
se han desarrollado por encima de la media europea", Son datos para tener estéticos', ¿es que se puede hablar realmente de una innovación estética?
en cuenta aunque el paisaje cotidiaoo del país más bien lo' desmiente: De y, si así fuera, ¿en qué consiste?
todos modos, no hay en dicho estudio ninguna indicación sobre' qué se . Sea por motivos estéticos, sea por motivos de diseño slmplemeate, lo
en tiende por innovadón estética: si se remite a cuestiones de moda y,. por lo derto es que desde la estética, entendida como reflexión sobre la natUraleza
tanto, de puesta al día del aspecto de los productos, o si. en cambio, a través de lo bello y sus manilestaciones, son pocos los recursos que llegan para
de ellos se ha desprendido una nueva propuesta estética. una opción que comprender en qué sentido se debe abordar y comprender la innovación
afecta a los modos culturales en sentido hondo y antropológico. estética en los objetos de uso y en la cultura visual dominante, en ese mundo
En este aspecto, es probable que la estética, la innovación estética, sea pues prosaico de cada ella. Poco o muy poco ha dicho la estética moderna de ese
una cuestión de marketing y de las témicas organizacionales, pero, incluso mundo que queda fuera de lo artístico, cuáles son sus leyes y sus posibles
aceptándolo así. no cabe duda de que la expresión y la toma de decisiones fines. A lo largo de la historia, se ha hablado de gecoración. y también del
estéticas corresponden al diseño, incluso tal como lo define el m<rrkding decoro como valor, y de los procedimientos ornamentales para resolver los
-y la ley de protección jurídica del diseño industrial confirma-o En este problemas de estética de muchos objetos, incluso de los aparatos técnicos y
contexto, cuando lo estético del diseño está en el primer plano de la actividad las herramientas; también han llegado otros modos de abordar la cuestión.
económica y empresarial. seria bueno empezar a prestarle mayor atención y como la lógica de las proporciones aplicándolas a la normalizadón de formatos
dedicarle por lo menos algún que otro estudio para comprender cuán grande y componentes industriales, las leyes de la forma o la psicología de los colores,
es la responsabilidad del diseñador en ténninos estéticos y en qué medida para decirlo sólo en térmlnos habituales entre profesionales y profesores
son las decisiones estéticas que toma las que le permiten seguir ejerciendo de diseño. Ahora bien. si aceptamos como punto de partida para una
una l'lbor cultural en el sentido más amplio y fuerte del término. Puede que reflexión acercá de la estética del diseño esa separación entre función y
no sea más que una hipótesis, pero la cuestión que toda estética comporta forma, literalmente afumada por la ley como fundamento de lo objetivo
es una pregunta por la calidad y sus límites. Lo que ahora preocupa es la en la labor del diseño -<:oncebldo ahora como un lntangible cuya aportación
calidad en el diseño en cualquiera de sus especialidades. es una innovación formal referida a la "apariencia del producto en sí o a
su omamentadón'-, vuclye a centrar la discusión sobre el diseño en los
procedimientos de foanalizadón y sus problemas.
2. De lo bello como innovación Esto conecta también con la estética como disciplina, al menos con aquella
interpretación de la estética que, por herencia de la estética kantiana, la
Entre diseñadores, es habitual mirar con cierto recelo este tipo de definicio- entendía como comprensión de la forma y de todo lo sensible. Así pues, no
nes y explicaciones sobre lo que hace y aporta el cliseño. Son especialmente cabe duda de que, por lo menos popularmente, entre forma y estética hay
sospecl1osas esas diferenciaciones sin .más explicación como la que el texto una conexión muy fuerte; la cuestión es saber si diseñar se reduce exclusiva-
de la mencionada ley establece entre función y forma, entre componentes mente al papel de resolver innovadoramente las formas para mejorar las
técnicos o innovación tecnológica y su presentadón en sodedad mediante un apariendas en pos de un efecto estético. Tambíén en términos estéticos ésta
vestido, o éarcasa, su puesta-en-forma al materializarse en algo que, según se puede ser una mera operación de maqulllaje lo cual siempre se ha considerado
cree, es lo que compete al diseño. Siempre se había luchado por demostrar, y un procedimiento de stylinS pero no necesariamente de diseño.

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Para decirlo en los términos propuestos por este libro, lo estético, lo bello 3. En torno a! potencia! de lo estético en el p.royecto moderno
de las cosas, ¿es algo que se puede añadir superficialmente a los objetos y
grafismos como si se tratara de dar una mano de pintura, o se trata de algo A estas alturas, después del largo e intenso debate sobre la modernidad y su
más estructural? Nos topamos una vez más con la vieja pregunta socrática ·proyecto emancipador, ha quedado perfectamente de manifiesto cuán fuerte
que Yves Zimmermann comenta en su texto, ¿qué es la belleza? Lo que fue el pape! rese.rvado a la estética en e! proyecto de la modernidad. Vale la
parece desprenderse de la ley mencionada o de la definIción comerda! del pena recordar en ese sentido el periodo casi fundacional de la estética corno
diseño, éste -la noción de cliseño aceptada públicamem:e- ya no es un clisdplina, allá por el siglo XVIII, cuando se plantearon cosas como los motivos
modo de ser de los objetos que comporta un criterio axiológico para descubrir de la variedad de gustos existente, el problema de la educadón del gusto,
la calidad de las cosas, sino que ha quedado convertido en un ornamento o los factores de manifestación del lujo en los objetOs de uso así como
superfidal y exterior, un embellecedor sin otra función que la de mejorar e! su incidencia económica. BeIDard de Mandeville primero, pero también
aspecto exterior de las cosas; en deñnitiva, un acabado. De ese modo, ambos, Hume, Hoganh, Burke y Voltalre, Diderot, Rousseau, Condillac o el propio
el hecho de diseñar y la comprensión estética de lo que se diseña, quedan Mon.tesq,!ie~ participaron en el debate fijándose en la capacidad educativa
convertidos en simples operaciones de cosmética y, por lo tanto, es lógico que la experiencia estética tenía para el desarrollo de las facultades humanas,
que aparezcan objetos con un estilo deddido por un plan de marketing_ Sin desde la percepción sensible a través de los placeres de los sentidos -como
embargo, cuando se proyecta sobre la base de estos supuestos, ¿son suficientes en el caso de la gastronoIDÍa- hasta las capacidades intelectuales de apredación
para lograr verdaderas innovaciones, innovadones de gran magnitud y de de las obras de arte, incluyendo edificios y objetos de uso, especialmente si
hondo calado? . se trataba de arúculos de lujo, o sea, los productos de una artesanía muy
Preguntas de este tipo establecen un cieno parentesco entre las muchas sofIsticada. Eso ocurría justo antes de que nadera la estética como tal, que no
reflexiones hechas por el cliseñopara comprenderse a sí mismo y las que ha el discurso estético o el discurso sobre la belleza que viene de muy antiguo;
desarrollado la estética desde que adquirió carta de naturaleza mediando el en definitiva, antes o contemporáneamente a Baumgarten, autor que dio
siglo XYDl para hacerse un hueco en el sistema del conodrniento. No quiere nombre a este campo del pensanliento, la estética filosófica, que se ocupa del
decir eso que la preocupación de los pensadores por comprender el fenómeno conocimiento sensible, o estético}
estético, desde la belleza de las cosas hasta la razón de ser de! arte, no Fácil es ver cuán cerca estuvo el ideal de persona formulado por la reflexión
hubiera estado presente en la filosoña anterior. Bien al contrario, lo bello y su estética con respecto a muchos de los ideales que la cultura del diseño ha ido
apreciadón han constituido un tema de reflexión conSIaIlte para la filosofía esgrimiendo en los últimos dos siglos. Así. por ejemplo, tal como lo defendieron
incluso ames de que la estética y el arte se hicieran autónomos. Lo propio del Shaftesbury primero, Hume después y tantos otros a principios de! siglo xvm,
siglo xvm fue precisamente articularlo como dos investigaciones paralelas e la calidad estética de los objetos de uso era vista como el resultado de los
independientes entre sí. Ahora bien, desde la revolución cienúfico técnica y el muchos esfu=os que la humanidad había heCho para mejorar sus condidones
fuerte desan'ollo experimentado por las ciencias naturales, todos los fenómenos de vida y, por lo tanto, les pareóa ser la demostración palpable del progreso
de los que se ocupa la estética conocieron un cierto menosprecio puesto que humano en pos del bienestar. Desde su p1.rntode vista, poder llevar una vida
quedaban a! margen de lo que realmente ocupaba y preocupaba a la mayoría confortable exige a una persona haber puesto todo su empeño tanto en el
de la gente. lCuántos esfuerzos hicieron los pensadores decimonónicos para cultivo de sí misma como en su formación culrural. "en el cuidado de su jardín,
probar que lo estético era fundamenta! para la vida y el desarrollo de las 'en vestir con elegancia y en la delicadeza de su casa". Aunque las palabras
facultades humanasl; Ipara probar que el arte no era un ornamento de la usadas suenen muy pasadas de moda, no cabe duda de que, en esa época,
vida, sino todo lo contrariol los asuntos de los que ahora se ocupa el diseño tenían un lugar importante
Es fácil establecer un cierto paralelismo entre ambos discursos, entre, por en el ideal de progreso humano, el cual estaba· basado fundamentalmente en
un lado, la lucha del cliseñopor demostrar que no es un mero ornamento, el refinamiento y cultivo de los placeres de los sentidos gracias a la mejora del
ese acabado "estético· de los objetos que les permite inserirse en el mercado, entorno inmediato. De todo ello, vale la pena su\lrayar que se consideraba lo
encontrando un lugar para sí en un nicho cualquiera; y, por el otro, en la estético, es decir, el goce y fruición de lo bello, como un factor de humanización
constante afirmación de la estética por demostrar la importancia de la calidad importantísimo, tan importante como lo es desde entonces el arte para el
y la densidad cultural de las obras de arte para el desarrollo de lo humano y cultivo del espúim humano. .
de las formas de culrura de la humanidad. Habrá que ver si la posibilidad de Si, a las puenas de la modernidad, el cultivo de la sensibilidad constituía
ilmovación real no depende precisamente de la posibilidad del cliseño para un elemento clave para la formación de las personas civilizadas, a medida que
apoyarse en esa densidad estética de los objetos prosaicos, ta! como se apuntaba la Ilustración y su cultura fueron imponiéndose social y culmraIrnenre no
al principio de esta introducción. En este sentido, una de las hipótesis que ha perdió ese carácter. Probablemente haya sido el poeta alemán Schiller quien,
inspirado eSTelibro ha sido la convicción de que existen muchos elementos después de Kant, haya conferido a la estética un lugar más importante para el
compartidos entre el cliscurso de la estética y el discurso del diseño y que se progreso de la humanidad, como puede leerse en sus famosas cartas sobre la
apoyan perfectamente el uno al otro. educación estética del hombre, en las que considera lo estético el fundamento
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16 Anna Calvera Introducción. Mat~riales para una !stitica del disma 17

de toda actividad humana y de! bien moraL' Poco a poco, primero en el Sin embargo, el cliseño y los objetos de uso nunca fueron de mucho interés
Romanticismo y después en otros muchos movimientos hasta llegar al esteti- para la reflexión estética y la filosofía a lo largo de esta época. Forman parte
asma de finales de siglo XIX. los fenómenos artísticos en particular, y lo bello de lo cotidiano, del mundo prosaico y, por lo tanto, también del universo de
en general, fueTOn ocupando ese lugar reservado a lo propiamente humano lo criticado por el pensamiento. Pero, además, el legado. kantiano había
que otros campos del saber habían ¡do dejando de lado. sea por su materia- dejado lo útil y lo necesario fuera del universo de la belleza, lo útil convertido
lismo crematístico, sea por su voluntad de saber a toda costa. y. de ese modo. en la antinomia de lo bello y sus cualidades. La estética, pues, o se ocupaba
lo estético dejó de ocuparse sólo de lo sensible para tratar también de lo de comprender el arte y sus manifestadones, o bien trataba del conocimiento
sentimental y de lo emocional mientras que lo sensorial iba quedando poco a que nos llega a través de los sentidos, pero el placer o la experiencia ante
poco en un segundo plano. Pero. al mismo tiempo, en ese proceso, el interés las producciones humanas, ~speciaimente si tenían una fuerte componente
de la reflexión fue situándose cada vez más en el arte comiderado como el tecnológica.. quedaron totahnente al margen de las preocupaciones d~ la
lugar de lo belló, mientras que lo bello propiamente dicho iba desdibujándose estética. Vale la pena recordar aquí cuán intensa y frecuente ha sido la critica
sustituido por lo sublime y otras muchas categorías estéticas. De ese modo; a la razón instrumental en el pensamiento del siglo xx. desde Max Weber
algún que otro camino se había cerrado para la reflexión estética cada vez hasta Theodor W. Adorno pasando por Walter Benjamin y Martín Heidegger
más vinculada con una filosofía del arte. Lógicamente, aquellas artes menores hasta Wolfgang Frit:z Haug y su denuncia del diseño como apariencia seduc-
y útiles que habían interesado antafto a la reflexión estética fueron quedando tora de la mercanóa, una estética manipuladora al se~ióo de los intereses
al margen localizadas como estaban en el lugar de lo útil lo prosalco y coti- del capitalismo y su preservación. Desde esa perspectiva, el arte, o sea, el
diano, e incluso de lo banaL' arte verdadero --que no el arte menor o el arte aplicado o decorativo, pero
., En este contexto, cuando la necesidad del diseño se planteó en términos tampoco las manifestaciones del arte popular o las mejores creaciones de la
estéticos a mediados del siglo XIX'enInglaterra. la misión que le cayó en suerte cultu.ra de masas, mucho menos la producción de imágenes cotidianas para los
como profesión venía cargada con muchas obligaciones morales imponantes. medios de comunicación social-- ha sido propuesto a menudo como el único
entre las cuales, una de las más importantes era predsamente velar por la refugio de lo verdaderamente humano. ¡Cuán dificil es entonces encontrar en
mejora estética de las cosas cotidianas fabricadas industrialmente, así como la filosofía de la modernidad elementos suficientes como para dar cuenta y
también el cuidado de la belleza del paisaje. Desde entonces, el concepto de comprender lo que ha hecho el cliseño por satisfacer su dictado fundadonal, a
diseño comporta esa nota de calidad --axiológica, que no de lenguaje ni de saber. contribuir activamente y hacerse cargo de la mejora estética del mundo
estilo- que diferencia a unos productos industriales de otros sencillamente contemporáneo tomándolo un medio habitable y un paisaje que satisfaga
porque en unos hay una voluntad de diseño y de calidad desde buen y cultive lo más humano de las personasl Por lo general el pensamiento
comienzo. Desde esta perspectiva, no cabe duda de que la historia de la idea estético ha tendido siempre a ver en la estetización propuesta por el diseño,
de diseño. asf como también los escritos de muchos diseñadores aparecidos o por las demás manifestaciones de lo estético en la cultura visual de los
desde entonces, pueden releerse como una reflexión de carácter estético, medios de comunicadón sodal, la propuesta de una estética empobrecida.
como una investigación en pos de los criterios y fundamentos sobre los cuales de una estética de segunda mano que viene a compensar la imposibilidad de
podía basarse una estética en sentido fuerte. adecuada a los procedimientos una experienda estética en sentido fuerte y verdadera.'
industriales como llueva forma de producir y hacer propia de las personas Conviene recordar aquí y ahora que la antigua utopía del cliseño fue de
en la época industrial. También e! funcionalismo puede verse como. una naturaleza estética. Subyacente a la teoría alemana de la Buena Fonna, por
concepción estética -lo que fundona mejor, es lo más bello--, una teoría ejemplo, además de una estética de la mercancía propuesta con relación al
que quiso superar la oposición antagónica entre belleza y utilidad propuesta mercado y con vistas al consumo masivo, había también un ideal democrático.
por la ~stética moderna y sistematizada por Kant, la cual había de inspirar Se proyectaba según un modelo de calidad, pero pensando que, a través del
todo el siglo XIX y buena parte del xx. Algo similar puede predicarse de un diseño de calidad. todo e! mundo, el total de los consumidores, tendria la
principio metodológico tan importante como el "menos es más' de Mies van oportunidad de rodearse y utilizar objetos con una gran dignidad estética,
der Rohe, el cual. además. responde' a una preferencia ~stética determinada y participar así del progreso de la estética por el simple hecho de usarlos
-la vieja y tranquila austeridad del decoro de dásico abolengo--. En esta época, normalmente.' Al igual que el fundonalismo inspirador del primer Movimiento
bien avanzado el siglo xx, muchas cosas habían cambiado con ~especto al Moderno comporta y es una concepdón estética, también la Buena Forma O
periodo fundacional de la estética. pero también del diseño, y el prindpio de la concepdón italiana del diseño posteriores a la II Gu= Mundial p;;'eden
Mies respondía también a un deseo de calidad que compartir colectivamente, ser releídas en los términos de la estética filosófica. Por lo pronto, en el caso
todo un proyecto de gran alcance social! A la larga, el principio se convirtió del diseño alemán existió un momento en que se llevó a cabo un gran esfu=o
en una teoría dellujó mooerno fundamentada en la concepción elitista aristo- por abordar la estética y convertirla en algo objetivo, para incorporarla
cratizante del arte y de la cultura heredada d~ épocas pasadas y justificada también a la fundamentación del diseño en clave objetiva y científica."
por una sociedad de clases. Cómo superar la vertiente elitista sin renundar Eso fue lo que recogió la cultura española del diseño desde su comienzo,
a la calidad estética es el reto que se ha heredado después del diseño popo aliá por los años sesenta.
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la Anna Calvrra Introducción. Materiales para una estrnca del diseño 19

Con todo, se puede afirmar perfectamente que no se ha llevado a cabo Sea por la irrupción del minimal como denominador común a muchos diseños
ningún esfuer:z:oimportante por comprender la utopía estética del diseño desde mediados de los noventa, sea por la proliferación de tanto discurso en
desde la filosofía o la estética filosófica, sino que más bien ha ocurrido todo lo tomo al diseño -desde el eco-diseño hasta la consolidadón del movimiento
contrario. Woligang Fritz Haug es probablemente el ejemplo ·paradigmático.JI Design for All, los debates para la recuperadón de la dimensión ética en el
A partir de su pensamiento, la acdón del diseño perdió cualquier posibilidad proyecto de cliseño, o el activismo gráfico presente en tantas propuestas
de ejercer Una práctica cultural para quedar redudda a una actividad cóm- hechas con voluntad de ser alternativas- o el énfasis puesto recientemente
plice del sistema cuyos efectos derivaban de su capacidad seductora y, ¿por en la capacidad para investigar sobre el futuro del cliseño, lo cierto es que
qué no decirlo?, tan engañosa como lo que no puede ser auténtico por haber parece claro que estamos vivil:ndo en una condidón post-posmoderna.
sido fabricado a máquina y de acuerdo con los intereses crematísticos dI: los De hecho, en la actualidad más inmediáta lo 'que realmente preocupa son
productores. La autenticidad constituye, y ha constituido, un cóncl::pto clave cosas como la virtualidad. y la estética en lo virtual. las consecuencias de la
para la valoración dJ:!arte y de las conductas dI: las pc:rsonas esgrimido a globalización y sus conceptos derivados, o la candencia de los límites reales
menudo por la filosoña. La comparten Heidegger y Adorno, así como actual- del planeta y su capacidud de resistencia a las agresiones a parte de los modelos
mente también la maneja el marketing con toda naturalidad." Sin embargo, de desarrollo compartibles por todos los habitantes del planeta, que superen
leídos en ténninos de cliseño, tanto en el caso de Heidegger como en el de los desequilibrios entre las poblaciones e integren las diferendas culturales.
Adorno, dertos ecos de Ruskin y su vindicadón de la artesanía artística Ahora bien, si de lo que se trata aquí y ahora es considerar el papel de lo
-única práctica productiva auténtica y capaz de obtener algo bello por ser estético. y de la pcrvivenda de la capacidad crítica de la estética y la cultura
la prueba patente de la acción huma:na llevada a cabo sintiéndose fl:liz- en el mundo contemporáneo, el discurso debe tener en cuenta el legado de
resuenan también en esta idea de autenticidad tal como, por otra parte, han la etapa claramente postnoderna y sus consecuencias sodales y culrurales.
resonado siempre que se ha llevado a cabo una critica del sistema industrial A estas alturas, de los muchos caracteres que identifican lo posmodemo
y del modelo de modernidad correspondiente. en general, los que son más relevantes para.eI diseño y su estética son
Después de Haug, con la crítica a la sociedad de consumo propia de los de dos tipos: en primer lugar, el fenómeno de la estetizadón de la vida
sesenta, el diseño ha dejado de ser una acción culta posible en el ámbito de cotidiana, un tema ampliamente tratado a lo largo del último cuarto del sigloxx,
lo que afecta a redos para quedar convertido en un ejemplo más de la banali- ya anunciado por Dorfles hace mucho tiempo y por otros muchos aurores,
zación de la cultura en general derivada y característica de la sociedad de y, en segundo lugar, que la difusión de lo estético y de los comportamientos
masas." La aportadón de los situadonistas franceses en general, y de Guy estéticos en todos los planos de la cotidianidad, o sea, fuera del mundo del
Debord en particular -----,!ueGae y Ramón Benedito comentan en uno de ane, han colocado al diseño en el primer plano del debate, junto a la moda
los textos seieccionados-, consolidó aún más esa visión de lo cotidiano como y a la comunicación mediática, siendo ahora considerado uno de los fenóme-
espectáculo según la cua1la estetización pasa a ser sinónimo de espectacula- nos que mejor veruculan este comportamiento estético difuso. El corolario
ridad. Los cliseñadores llenediro muestran muy biJ:n cómo, en realidad. ese lógico ha sido la incorporación del diseño en la práctica y en la teoría al
punto de vista se adecuaba pl:rfectamente a cienas maneras de hacer y pensar mundo económico; se lo ha convertido en un facror de valorización: es decir,
el disl:ño. pero ¿SI:puede aplicar siempre a todo tipo de diseño? La pregunta que el diseño actúa como un intangible que confiere valor --cualitativo y
sigue abierta y constituye un reto para la reflexión. La posmodernidad, por su cuantitativo- a los productos y mercanóas cualquiera que sea su carácter.
pane, ha venido a confirmar para algunos todos los temores, y ei cliseño Por ese mecanismo, las decisiones de diseño también son consideradas
como fenómeno parece haberse convertido en la cultura banal de la imagen decisiones de marketing en la doble vertiente de commúcadón con el usuario
para las grandes masas, su único y omnipresente vehículo estético. De ese y de desarrollo del producto. De ese modo, se ha cumplido .finalmeme lo
modo, una vez finalizado el siglo xx y también el movimiento moderno y sus que venía siendo una idea clave del diseño como actividad desde los tiempos
ecos, la práctica del diseño se encuentra todavía carente de una reflexión que de Ulm y de la Escuela de la Buena Forma, a saber, que el diseño no es
se ocupe de comprender y explicar en qué consiste su actividad como·práctica una actividad final, ane-finalista, que se ocupa .de dar forma y apariencia
estética y cómo puede, porque de hecho ha podido muchas veces, desempeñar estética ~so era estilismo en buena teoría del diseño-, sino un proceso
un papel de liberación de lo humano sin entorpecer la vida de cada día.' complejo que participa en la decisión de un producto desde su misma
esencia, desde el planteamiento inicial." Es una actividad estrucrural estraté-
gicamente decisiva en una econoIlÚa,como la actual. donde los facrores clave
4. El presente: de la estética de la IDc:rcanCÍa a la cotidianidad van más allá del carácrer funcional o servidal de los utensilios y lo que
estetizada y el gusto de las masas se compra y vende son sensaciones, experiencias, valores e incluso signos
lmaginarios. .
Si hay algo que caracterice el momenre presente es el hecho de ser muy Ahora bien. si para los ({¡senadores el- carácter estructural del diseño no
fugaz. Al menos, eso parece a la vista de lo que se desprende de las últimas tiene nada de novedoso, ¿qué es lo nuevo en el legado posmodeulO? Lo que
tendencias en el diseño y la cultura de estos primeros años del siglo XXI. cambió es la esencia de los productos, que el propio diseño puede ser visto
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20 Anna Calv~ra Introducción. Mat~riallS para una estitica dd disei'ío 21

ahora como la esencia del objeto. Ésta ya no necesariamente deriva de de fábula. subyacen claramente en cualquia discurso sobre la marca (brand.
una innovadón o novedad ternológica, sino que puede partir de un sistema que no trade-mark) y su gestión en la actualidad. Es otro modo de llamar a
complejo de ftmcion.es entre las cuales cabe contar las simbólicas, las de esa economía basada en los intangibles.
mayor carácter sodal -las que afectan a los usos y costumbres-, y, por lo Para decirlo en sencillo, vale la pena retomar las palabras que una vez
tanto, al sistema complejo que supone un estilo de vida entendido no sólo Woifgang Welsch publicó en la web para describir los caracteres de esa época .
como una cuestión de gustos en [a lógica de las identidades sodales de las estetizada. Según este autor alemán. hay en el mundo contemporáneo al
personas, sino también en las prácticas, actividades, aficiones y, en definitiva, menos dos tipos de estetlzación igualmente relevantes. Uno de ellos, la esteti-
del conjunto de funciones qu~ definen lo que una persona hace con su vida zación más superficial característica de la globalización. se da en fenómenos
globalmente. Pero lo verdaderamente nuevo sigue siendo, en el contexto de de tipo global. Consiste, o bien en "el embellecimiento o engalanamiento
la estetización difusa fuera del arte y, por lo tanto, en todos los doririnios de estético de la realidad', o bien en la conversión al "hedonismo como nueva
la cotidianidad, la reflexión sobre qué tipo de estética es la que corresponde maulz de la cultura", o bien en "una estrategia económica"." Esta última
a este dominio del diseño y qué se entiende ahí por la billeza. Así es, .el propuesta conecta directamente con lo que se explicaba al inicio de este
fenómeno de la estetización de la cotidianidad constituye por lo menos una escrito y plantea directamente la apropiación de lo estético por parte de la
esperanza para comprender desde la teoría estética fenómenos sodoculturales economía y las técnicas de mercadeo. Constituye una de las definiciones
tan importantes como el propio diseño. habituales a la hora de mostrar el carácter estratégico del diseño, p~ro se
Vayamos por partes. corresponde directamente con la concepción que ve en el diseño un mero
Para resumirlo a grandes trazos, el fenómeno de la estetización de lo coti- valor añadido, un valor puesto mediante ornamentos al final del proceso.
diano se resuelve en una serie de rasgos de lo cont=poráneo perfectamente: Otros muchos autores, los principales representantes del Design Management
individuados como tales e incluso' definidos en su funcionamiento. El dato inclusive, han retomado este tipo de cliscurso y sus implicaciones para redefinir
más significativo para la historia' de la estética filosófica es la corroboración el lugar del cliseño y su actividad en el mundo contemporáneo. Lo' que viene
del hecho de que la mayoría de fenómenos de estetización se dan en ámbitos es un ejemplo tomado al vuelo en la bibliografía actual:
extra-artísticos, lo cual supone un giro importante con resPecto a aquella
concepdón de la estética segtlll la cual uno de sus principales objetivos es Los objetos en la sodedad actual se han vuelto súubolos, ya no son signos 1-
explicar el arte o, me:jor dicho, lo arústico' de las Bellas Artes. por lo tanto, su significadoes cada vez más de tipo estético,no cognitivo... el objeto
El acento ahora se ha puesto en lo estético y en los comportamientos concreto cons=entemente ha de ser juzgado como una experiencia estética,
estéticos de productores, o creativos en general. y de usuarios, tanto si son como parte de un acontecimiento, por pane de un sujeto singular y no un hecho
meros consumidores como receptores, en cualquier Caso, eso sí, siempre univenal. El sujeto que experiencia conoce las cosas rn los términos de la ontología
interactuando con el producto de¡' que se sirven. Lo propio de la actualidad. estruauraJ,propia de las cosas. El sujeto está entre las cosas. Los sujetos ya no
pues, es que lo estético exista y se desarrolle fuera del mundo del arte; es conocen las cosas; conocen que:las están experimentando."
más, püra muchos autores la estética ha pasado a ser lo que constituye la
realidad circundante, sea ésta real o imaginaria, o sea, un dato antropológico De este tipo de afirmaciones se desprenden varias cosas para la comprensión
que define el presente y, de 'ese modo, ha quedado perfectamente asociada de lo estético; son parecidas a las que recuperó el pensamiento posmodemo
con lo económico. Un autor como Fulvio Carmagola hipotetizó tan pronto al hablar de los saberes y el conocimiento científico al tratar de la condición
como en 1989 que se había dado un Mgiroestético' de acuerdo con el cual posmodema. ,,' Son factores como la asimilación de lo estético a la experiencia
los fenómenos estéticos habían pasado a ser el modelo ~interpretativo de la subjetiva, particular e individual. o más bien. local; como la facilidad para
~poca. la posmodemidad, puesto que la estética supone una forma muy juzgar sin conocer, o sin necesitar conocer cuáles son las reglas que justifican
espeófica de la construcdón de sentido." Poco tiempo después, en el siguiente d juido, tal como parece que opera el gusto de las personas; la fascinación por
libro -yen cierto modo, polemizando también con Heidegger-, ese autor el caso, por lo individual. diferente o específico de las cosas o las situadones ...
fue mostrando cómo las mercancías habían evoludonado hasta superar En efecto, cabe recordar que lo estético, y muy espedalmente la manera
definitivamente sus valores tradicionales de uso y de cambio 'transfigurándose" como se conduce -¿o razona?- el juicio estético, constituye en la actualidad
en algo distinto, "más allá de sí mismas": la necesidad constante de diferen- un referente importante para muchos otros discursos sean retóricos o no,
dadón entre productos y servicios había ido incorporando, precisamente a desde la dencia más dura hasta las cliscipllnas prácticas o de gestión
través de [as mercancías y sus cualidades estéticas específicas, el pensamiento (Carmagnola, 1989). En este sentido, el concepto de experiencia estética,
cualitativo en la dinámica económica. Por eso, con los años, el mismo autor ya tal como se ha venido tratando por la estética filosófica, ha aportado un
hablaba de una economía de la ficción, de una econoIlÚa basada en lo imagi- modelo inmejorable para explicar ese tipo de experiencia de los consumidores
nario (fiction economy) en la cual la actividad económica fundona sobre la base que, según el marlatin.s de las emociones y la economía basada en el juego
de tos bienes simbólicos, las =odones, la posibilidad de disfrutar de expe- de las imágenes, se ha utilizado a la hora de explicar cuál es la finalidad del
riendas determinadas." En el fondo, esas ficciones imaginarias, con carácter cliseño en la dinámica empresarial de captación y fidelización de los clientes .
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22
Anna Calvera Introducción. Mareriales para una estética del diseño 23

Hay que recordar que, como ha explicado repetidamente Fulvio Carrnagnola,'o


entre ese managemmt y pensando en las experiencias que promueve eso de] No es una operadón, reservada sólo a una categoría_particularment" caIlficada de
diseño "centrado en el usuario"," hay muchos componentes que lo asimilan los productos sino que se extiende hasta :r:nodificar las cualldades perceptibles
a los antiguos análisis sobre el gusto y sus modos de decidirse. de toda la producclón. El diseño también se ha 'vuelto una condidón difusa;
ya no qu"da nada que no esté dUerendado, firmado, calificado; cada Jlroducro
Para los detractores más furibundos de la estetización difusa, la principal
es una star.1
'¡' •

crítica a este tipo de planteamientos proviene precisamente de las categorías


estéticas que se manejan. Si en la tradición del diseño se hablaba de cuestiones
como lo agradable -del diseño-- frente a lo sublime -de las Bellas Artes--, Ahora bien, si el hecho de diseñar ya no es un hecho diferencial entre
incluso de lo decorativo frente a lo impresionante --caso de la reflexión de productos, sí lo puede ser la calidad del diseño, ese concepto cualitativo que,
en realidad, establece diferencias de grado entre los productos. Con todo, hay
Williarn Morris, pero también en última instancia de todo modernismo esteti-
que reconocer que, en un mundo de cliseño difuso y omnipresente, la pregunta
cista de Prindpios del siglo XX-, en la actualidad, consolidada definitivamente
la idea de una experiencia estética falseada -la crítica de Adorno a la industria por la calidad sigue planteada, visto que ya no sirven los antiguos modelos
relativos al diseñar bien. La esperanza ah.ora está puesta precisamente en la
cultural y a lo popular en el ane, pero también de Re¡degger a toda vida no
estética corno discurso y como propuesta. A raíz de su último libro. Filosofía
auténtica en el mundo Tecnificado COntemporáneo--, la categoría estética que
ahora está sobre la mesa es el entretenimiento, la diversión, el diSfrute por d'esrar per casa (2004), Xavier Rubert de Ventós recordaba recientemente que
ll

entretenido. Con todo, no necesariamente las propuestas del diseno caen en no había que olvidar que la "cultura es todavía aquello que transfonna la
el ámbito de lo divertido ni mucho menos. Bien al contrario, en los análisis realidad dura y opaca en una forma simbólica" y que "corremos el peligro de
sobre la estética difusa hay elementos suficientes sobre los que empezar a olvidar que para que una pieza cultural sea legítima, o bien ha de poder ser
fundamentar una estética que explique realmente cómo opera el diseño en falsa, o bien ha de poder ser bella". Lo mismo vale para la práctica del diseño
lo estético y, lo que es lo mismo, en qué términos se puede hablar de calidad en tanto que actividad con una fuerte dimensión cultural, o potenda cultura-
en este dominio tan concreto de la cultura materia!. Otros muchos autores, liza dora, que viene a ser lo mismo. Habría que reconocer sin en1bargo que las
los complacidos con esta estetizadón drcundante y sus placeres, abogan por mercanáas, o los productos reificados en mercanáas, tienen también múltiples
"una sensibilidad intelectual capaz de captar la parte de poesía de la que está dimensiones; para dedrlo con Carmagnola, y también con Marx. "las mercanáas
lleno lo cotidiano·, parafraseando a Michel Maffessoli," "aprovechando el siempre son algo más que meras mercanáas: rehuyen y superan su carácter
placer de la existencia en tanto que algo positivo, afirmando incluso la virtud inmediato, banal; siempre muestran aspectos insospechados'." En definitiva,
avica de un hedonismo de lo cotidiano". no cabe duda. de que la estética difusa actual ofrece un campo ilimitado para
Welsch. por ejemplo, dejaba una puena abiena a otro tipo de estética la reflexión estética siempre que se tome en serio y acepte como punto de
más profunda cuando la propone en ténninos epistemolÓgicos, es decir, como partida que lo estético es una dimensión socio-antropológica del ser humano y
una vía para la adquisición de conocimiento fundamental desde el momento que, por lo tanto, forma parte del modo de ser de las personas, los occidentales
en que ésta responde "a la transformación de los procesos productivos inclusive. "
conducidos por las nuevas tecnologías y la constitución de la realidad por En este sentido, hemos aceptado aquí los retos lanzados hace ya algunos
los medios de comunicadón". La combinación de ambos tipos como si se años, sea por Alain Findeli,l7 sea por Fulvio Carmagnola, y queremos contribuir
tratara de dos dimensiones de un mismo fenómeno SUpone una posibilidad a esa línea de investigadón que podria resumirse en los térmlnos siguientes.
para una estética del diseño en sentido pleno. De acuerdo con Findeli: contribuir a esa reconsideración profunda de 10
En la perspectiva específica del diseño y su filosofía, lo dicho hasta ahora estético que precisa la filosofía actua! del cliseño; de acuerdo con Carmagnola:
tiene también sus consecuencias. La primera y más importante es la de trans-
ferir a1.diseño la mayor parte de atributos dichos de la estética: en un mundo de lo que ahora se trata es de delinear un conjunto de rasgos, 'la figura de
estetizado, en una economía basada en las diferencias estéticas, el cliseno una estética posible que tenga en cuenta producdón, comunicadón y consumo
compane con la estética esa misma condición difusa. Eso vuelve a poner sobre refiriéndolos a las múltiples modalidades de la peIcepdén. El acento hay que
la mesa la pregunta por la calidad en diseño y sus elementos determinantes. ponerlo ahora en el consumo, lugar de operadones perceptivas complejas que
En efecto, a! haberle sido reconocida su partidpación global en la definición están referidas al disú11te estético y el usq de las meIcanaas. Una estética del
de los productos ya desde la constitución del hardwart, para utilizar los términos consumo debería por lo tanto ser también una estética de la comunicadón y
de Carrnagnola, ya no constituye un elemento diferencial específico, un del discurso; [basada] en una fruidón capaz de dotar de s"ntido, de CIllturalizar
lenguaje determinado y Ieconodble que excluye a los que no son iguales nuestro cotidiano."
o comparables a él:
En definitiva, comprender cómo a través del diseño, de su uso, consumo y
producción se puede seguir conmlmyendo a la producción y la experimentaáón
de sentido allá donde interviene conscientemente.
~-_. ...,. --
24 Anna Ca/vl!:ra 111troducrión. Materia/es para una est¿rica del diseño 25

5. Algunos materiales para una estética del diseño cual basar una estética del diseño. Pero además, había que seguir siendo fieles
a las advertencias hechas por Rubén Fontana en <::1 libro anterior: 'el cliseño
En otro lugar, los progenitores de este libro -Auna Calvera e Yves Zimmer- no tiene demasiadas trascendencias', pero' ¿cuál es la manera en que el
ma=- ya seüalamos la necesidad de incorporar lo estético y la estética como diseño puede trascender si es que tiene que trascender?',
disciplina y como facrores para tener en cuenta urgentemente por la refle..'Uón El libro se inicia, ¿cómo no?, con los griegos. Yves Zimmermann comenta
sobre la teoría y el discurso del diseño. En Arte¿?Diseña (Gustavo Gili..Barcelona, el que José M' Valverde calificó como uno de los primeros textos funciona listas
2003) mud10s autores propusieron aspectos relevantes para situar una inves- de la historia de la estética filosófica. En él van apareciendo todos y cada
tigación sobre la estética del diseño. Con este segundo libro, hemos intentado uno de los conceptos que desde entonces han servido para bablar de diseño,
emprender aquel camino e ioidarlo con toda humildad, utilizando una fórmula incluso el desprecio por lo vulgar de las cosas útil<::sy cotidianas que mani-
parecida. Nos hemos propuesto seguir la sugerencia con la que Fernando fiesta tan claramente el interlocutor de Sócrates en el diálogo. También se
Martín Juez cerraba aquel libro al establecer una dicotomía entre lo ordinario puede encontrar una primera visión de! ornamento, del decoro y de lo
y lo extra-ordinario para hablar de lo propio de la estética y, así, nos hemos adecuado, de la importancia de elegir bien los materiales. Pero el diálogo
dedicado a comprobar qué se ha dicho sobre lo ordinario como fenómeno comentado puede leerse también desde la perspectiva del diseño gráfico y
estético a lo largo de la historia .. comprender cuán difícil, y cuán necesario también. ha sido siempre la visua-
También esta vez hemos preferido proponer un libro colectivo y trabajar lización de conceptos abstractos, tan abstractos y a la vez tan sensibles como
conjuntamente con colegas y amigos. Lo que sí ha canlbiado es la pregunta la belleza. Sin ir más lejos, ha sido el problema con que nos hemos topado
con la que les invitamos a parncipar. Esta vez les pedimos que comentaran sus progenitores a la hora de elegir una imagen para la cubierta de este libro.
un texto de la historia de la estética cuyo autor fuera un filósofo importante Un libro de estética que se quiere actual y contemporáneo no puede ser
que les hubiera impresionado profundamente y les hubiera servido en su emocéntrico, sino que debe dar paso a la diversidad de tradiciones. Fernando
trabajo profesionaL No ha sido tan ·difidl aunque, lógicamente, haya lagunas Martín Juez propone esta vez un comentario sobre el pensamiento del
importantes y muchos autores clave para la historia del pensamiento hayan México prehispánico. También ahí lo estético incluía valores de verdad. y el
quedado fuera del libro. Es el caso de Kant. por ejemplo, o de otros muchos arte, además de producir, representaba. Hay muchos dementas en común
pensadores del idealismo alemán. o de Nietzsche a quien debemos esa dife- con la reflexión de los griegos entre los cuales está la capaddad trascendente
rendación tan útil entre las claves apolfnea y dionisíaca de la producción de lo estético en el sentido de que hablaba Rubén Fontana. De hecho, Martín
estética. Ello no qukre dedr que no se les considere relevantes para el Juez explica perfectamente esa componente metafísica de la belleza a través
discurso acerca del proceder est~tico' del diseüo; ha pasado simplemente que de la cual se divinizaba todo. El universo entero, su peculiar cosmogonía,
nadie los ha elegido. En este sentido, 'y dada la invitación, lo que sí destaca se definía en términos estéticos en gran parte porque la estética era algo que
es el predominio de los autores del siglo xx. muy especialmente de aquellos se vivía con toda normalidad. No está bien explicar el final en la introducción
que más directamente han sido utilizados en el debate sobre el fin de la pero esa idea de que la acóón del diseño pueda volver a consistir en 'poner
modernidad y las perspectivas actuales. rostro a las cosas' es muy sugerente, espeóalmente si se lee la noción de
La idea no es tan origlnal como pueda parecer a primera vista. Una vez. diseño en términos de interfaz.
buceando en la Encyclopédie de Diderot y D'Alembert, Antoni Mari se topó Del México pre-colombino se salta a la universal y cosmopolita modernidad
con la voz 'negligée' y leyó profundamente interesado. Empezó a investigar del siglo xx. Jordi Maña se ha fijado en el retrato del constructoc. del arquitecto
entonces a través de las pinturas de la época cómo so!veía lá gente cuando se y del diseñador que traza Paul Valéry en un texto situado también en la Grecia
vestía de manera negligÜ, pero también se topó con las muchas' implicadones clásica como si de un diálogo platónico se tratara. Centrado en la creación,
cultm.1Ies y soóales que suponía el solo hecho de que e..'tistierauna producción el diálogo sirve para abordar eso tan difícil de explicar que es en realidad el
informaL externa y alternativa a la etiqueta de la corte, que servía para concepto de cliseño que rige cada proyecto. Supone una aportación importante
. andar por Casa vistiendo de manera más cómoda. Las pinturas, sin embargo, a la hora de comprender. e historiar, los objetos del cliseño, los productos,
no parecían demostrar que esos vestidos en negligÜ fueran realmente más resultado de la voluntad de diseño. Por su parte, Emilio Gil retoma un antiguo
cómodos; al menos, vistos desde nuestra época, no lo pareóan en absoluto. libro de don José Ortega y Gasset. escrito en la época de la vanguardia histórica,
Con todo, se abría una línea de reflexión estética acerca de la producóón de y analiza fenómenos como la comprensión del público o la importancia de
cosas útiles y cotidianas, paralela y complementaria a la reflexión sobre el la autoría en el proceso de diseño. Su reflexión busca nuevos referentes para
arte. Cuando pensamos este libro y estuvimos discutiendo su oportunidad, dilucidar eso de la calidad en el diseño y su comprensión sociaL
teníamos <::nmente algunas de estas investigaciones sobre aspectos considerados Pátima Pombo aborda a través del pensamiento de Merleau-ponty cuestiones
marginales con respecto a la corriente principal del debate que se han desarro- que han sido tan importantes en la teoría del diseño como los procesos de
llado aquí y allá en todas las épocas. Pareóa totalmente posible, e incluso percepción. Subyace a la reflexión esa idea del diseño según la cual su quehacer
interesante, repetir el experimento con otros muchos autores releyéndolos consiste en dar sentido a las cosas. Se atisban en él los primeros indicios
en clave de diseño y construir de ese modo una pequeña tradición sobre la de ese pensamiento constructivista que tan influyente habrá de ser en las

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]t.

26 Anna Calvera lntroducdón. Mate'riales para una estética del diseño 27

últimas décadas del siglo: consiste en poner en tela de juicio la realidad de estética en smtido fuerte para el cliseño y recup.erar la posibilidad de diseñar
lo percibido a pesar de la realidad de la percepción. El cliseño en ese caso con la vista puesta en la larga duración, en lo perdurable. Teniendo en
supone, además de uD. procedimiento para dotar de sentido al mundo circun- cuenta que el movimiento situacionista data de los años 1960, la cuestión de
dante, la ocasión para experimentar algo, una idea que posteriormente ha fondo a'nte la situación actual sigue siendo si se ha superado el diagnóstico:
explotado la teoría del diseño según el marketing más actuaL A continuación, ¿continuamos en una sociedad del espectácul07 ¿Hay algún cliseño que pueda
Auna Calvera analiza el pensamiento de Heidegger desde una doble perspectiva, resolver cuestiones íntimas y personales, necesidades particulares y personales
los motivos de su actualizadón por el pensamiento posmoderno y su crítica a que vayan más allá de la constante denuncia de los simulacros? J9
la razón tecnológica en el sentido apuntado niás arriba. El motivo de estUdio Por lo que respecta al futuro, los dos. últimos textos apuntan, aunque
es el carácter instrumental de todo eso que llamarnos las cosas y cuáles son sutilmente, hada éL Son complementarios entre sÍ. Uno trata de dar un
las expectativas del usuario frente a ellas. Supone un buen instrumento para 'panorama del pensamiento actual y lo que éste supone para la ·evolución
resituar lo que ha venido a llamarse una experienda en la perspectiva del futura ¿"el diseño, su implicación en el mundo' de las nuevas tecnologías y
diseño centrado en el usuario, tan en boga actualmente. su capacidad para definIr sistemas de objetos, servicios y nuevas prestaciones
Jordi Pericot lleva a cabo un resumen del pensamiento de Ludwig en el mundo de la virtualidad tecnológica; acepta sln más la necesidad de
Wittgenstein y de su teoría sobre los juegos del lenguaje desde la perspectiva repensar el cliseño en el contexto dibujado por lo que viene llamándose el
de su aplicación para la construcción de imágenes inteligibles de acuerdo desafio de la complejidad. El segundo, mucho más cauteloso ante lo que eso
con los lntereses del cliseño gráfico. Constituye una muy buena introducción supone, concentra su reflexión en la experiencia estética según la perspectlva
para comprender cómo funcionan las imágenes en tanto que medios de propia de un usuario del cliseño. De ese modo, el profesor mexicano Enrique
comunicación y son comprendIdas por el público según las situaciones prácticas Ricalde ofrece un panorama ordenado de las principales aportaciones nechas
en que. aparecen y se difunden. Wittgenstein, como Heidegger y otros muchos recientemente desde el paradigma de la complejidad y el pensamiento cons·
pensadores, ha sido uno de los autores más influyentes en esa corriente del n-uctivista y sus implicaciones para el quehacer del diseño en el nuevo
pensamiento que se ha llamado el giro lingüístico y que pone su centro mundo. Surge ya lo que a veces se llama la teoría evoludonista y cómo se
de atención en el lenguaje. Por su patte, Ana Herrera, siguiendo un párrafo la aplica al diseño. Basada en las ideas de los biólogos chilenos Humberto
extraído de un cuento de Borges, reflexiona sobre la visualización de infor- Maturana y Francisco Varela, esa corriente de pensamiento está siendo muy
mación tal como la lleva a cabo un cliseñador gráfico al enfrentarse a un influyente en el diseño de herramientas informáticas. La considera David
mapa. Si el texto original ponía en entredicho la rigurosidad de la ciencia, Gracia, quien se centra muy especialmente en la concepción de la eJ..':periencia
del mapa como fuente de conocimiento, el comentario considera las muchas estética según Maturana y la compara con un tena de Jauss, prindpal repre-
decisiones que hay que tomar para llevarlo a· cabo y que sea realmente útil. sent,wte de la estética de la recepción. Este; último es probablemente el único
Lógicameme, cuestiones como la objetividad del mapa -problema propio de texto escrito con la perspectiva propia de un usuario sobre la recepdón estética
los cartógrafos-- quedan subsumidas bajo los problcm.a:s de comunieabilidad, del diseño y ocupa así e11ugar que le corresponde de acuerdo con la teoría
adaptadón y comprensibilidad que interesan a los diseñadores gráñcos aunque que comenta, la de la recepdón.
no se pueda soslayar la cuestión ciave de la selección de infoITIlación a la En definitiva, la imención de este libro ha sido la de contribuir al debate
hora de construirlo. En muchos aspectos, retoma los temas que Emilio Gil sobre la comprensión que el cliseño tiene de sí mismo. Se trata de un libro
ha tratado en su texto desde la perspectiva ética y la actitud con la que los para leer en la intimidad, compartir con' los autores las interpretaciones que
diseñadores afrontan el hecho de diseñar. ellos han hecho de los textos y volver a situar esas filosofías entre las preocu-
El debate actual queda de relieve en los textos comentados, uno, por paciones actuales. Pero además, confiamos en que el libro ~ea también una
Raquel Pelta y, el otro, por Gae y Ramón Benedito, El diseño considerado en invitación a leer los textos comentados en su versión original y clisfrmar de
ambos casos es el estadounidense. Raquel Pelta analiza los textos de Jacques ellos. Deseamos que también sirva como herramienta a los diseñadores y les
Derrida sobre la deconstrucción y cómo ha sido adaptada por parte de los ayude a sentirse lo que de hecho ya son, unos expertos en fenómenos estéticos
diseñadores gráficos en el periodo en que se superó el cliseño de ascendencia que hablan de estética con toda naturalidad.
suiza, la modernidad. y se adoptó la tecnología digital durante el proceso de
creación del cliseño, lo cual permitió reflexionar de nuevo sobre las herra-
mientas discursivas del diseño gráfico. Por su p.llte, Gae y Ramón Benedito,
siguiendo a Debord y el movimiento situacionista francés, analizan ese cliseño
que basa su novedad en la espectacularidad de lo tecnológico y sus súnbolos.
Reflexionan sobre el papel social del cliseño, sobre la constante antinomia
entre una cultura de masas y una cultura elitista, y buscan qué hay en el
diseño que permita verlo como el lugar de una esperanza para superar esa
dicotomía desde fu misma cotidianidad. Pero eso supone reivindicar una
1 r:
~.

28 Anna Calvera
t Introducción. Mat~rial,s para una estética dd dismo 29
!
Notas , Me remIto aquí a la versión considerada recientemente por Jord! Berrio con relación a los Ideales
comprendidos en la nodón de diseño a lo Jargo de su historia. Con respecta al diseña del
, BGOA son los ,i¡¡la. de U," Bu",ou 01 European De5Ign As.odations. Se traTO d~ una asociadón movimiento moderno en su última fase, cuando Ja HfG de UIm. el autor recordaba ele Ideal
de nsociadones de d1seiladores profe51onales, fundada en 1969, cuyo cometido el acupane democrático que tamblm inspiró al dlseño gráfico eu su evaludón: "El consumidor de objetos
y promover medidas palítiClS que adopte la UE para que esttn vigentes en todo su territorio y indUStriales tenfa Ja oponunldad a trav6 del diseña de introdudr en su casa una gran .uma de
sirVan a touos los proCesionales dc:l sector para la defensa de sus derechos como proIc:slonak:s. objetos nuevos que tenían una gran diGnidad formal y de disfrutar de sus ofertas fundonal<s
Wasc: www.beda.org [... ] el diseño se había convenIdo en una herramienta democrática y, por 10 tanto, dignificante.
'LeylO/1003. de 7 de Julio. de.ProteeclónJurldlca del Diseño IndtlStrlal. ROE núm. 162, 8 de julio ya que igualaba a los dudadanas en las dominios [armales-. Véase: Berrio. JardL -El disseny •
1
de 2003, págs. 26348-26368. DirectlvHuropea 98nl/CE del Parlamento Europeo y del l'tpoca de la desaparidó deis grans relau-, Temes de disstny. Barcelona, núm. 16, f.brero de
~,.
Con.ejo. de 13 de octubre de 1996, sobre la protec:dón Jurídica de los dibujos y modelos, DO L 2001, pág. 114.
núm. 189. 28 de octubre de 1998. póss.18-33. ~. Hay rdativamente poca bibliografía disponible sobre la HlG de Ulm y lo que <sta Institución
, Ministerio de Industria. 1\Jrisma y Comeroo, Secretaría General de Industria. Dirección General r'{ slgn!f!cd para la historia del diseño: lo más habitual <s encontrar re{erendas y va ¡oraciones
de Política de la P'-queña y MedIana Empresa: La Inltov"ción tmprrsarialtn EspaJia. informe sobre dlstintas aspectos dispersas en las escritos más variados, la cual se debe en buena medida
elaborado por Iféboa Zozaya. Madrid. 2005. URL: al hecha de que Ulm simbolt:za lo moderno en diseño y constituye el referente contra el cual el
hnp://www.ipyme.orgINRlrdonlyresI3l93719A-SB05-4C6C-AB46- diseño posterior discute y establece en qu¿ consiste la novedad que aporta. Véase al respecto:
EF9A97CD5C88/0Ilnnovadon2005.pdl (última consulta: (ebrera de 2007). Bilrdek. Bernhard. Dluno. HislDria. /toña y prddica dtl disolo industrial, Editorinl Gustavo Glll.
, Flle a partir úe Alexandcr GouJleb Baurngartcn cuando la est~tica se independizó como una Barcelona. 1934. págs. 39-69,168-214 .
dL,cipllna Iilosóñca que trata de Jos fenómenos artísticos j' de Jo bello. que es lo que s. .. Se trata de l. corriente de la Estética lnIarmadonal defendida par Max Bense, pro[<sor en Ulm.
considera modernamente Ja e>t¿tlca. Su obra de refer.nda son las dos volúmenes de la y continuada en un primer momento por Abraham A. Moles. El neoplasticismo y el arte
Üs/h.tica (1750-1758). concreta, la teoría matemática de la Información y l. cibfinétlca contribuyeron por igual en
'Smlller. Friedrich. Cartas sobrt ft¡ tducadón tstllÍCd dtl hombrt, Aguilar. Buenos AIres, 1981. Hay otras el planteamiento de esra linea de Investigadón de la estótlca filosófica al aporrar un modela
mudlas edIciones dlsponibles. d. refercilcla sobre cdmo proceder. El descubrlmlento progresivo de las valores simbólicos en
• Probablemente, una de las expllcaclone, más claras y simples relativas al despreda de la filosorIa los objeto. de uso encaminó la Investlgación hada otras campo. de trabajo, como la semiótica
y la estética por el mundo cotIdiano se encuentt"c en Cannagnola. Fulvto. Luoghi ddla qJ.lalitd, o la ret6rica de la imagen. dejando la estética del diseno en una vía muerta que sólo fue
DOlOUSAcademy. MIlán. 1991. págs. 13.31; y tambl,;n en Ilcoruumo delle immagini, Bruno retomada críticamente por Haug en términos de <Stética de la mercancía y compromiso del
Mondadori. Milán. 2006. pág, 158. Según este autor. correspondió precisamente a SchiUer Jo diseño con el mllagra económIco alemán. Sobre la inOuencia de Haug en la cultura alemana.
rormulaclón de eta condldón fundacional de la es,,;tlca moderna según la cual la estrnca. y el del dls.ña, v,;ase Bürdek. Berohard. Vis"-;o. Historia, ttona y ¡mídlca dtl distr10 industrial, dI.,
arte, eran ".1 lugar de la utopía; de la lIberadón con respecto a los vínculos de la raclonalldad págs. 172-173.
económica yendentc.... . " los textos más Influyentes de WaUgang Frlu: Haug para el dlsel1a alemán fueran: 1(ritik dtr
Para una elaboración teóricadel concepto de banalidad en el arte y el diseño, los textos WttrrnijestbttiJ:. Franldurt. 1971; -Zur Ae.thetIk van ManlpuJatlan' en: Vas Arswnmt, 25. 1963;
detemllnante. son los escritos de Mendlnl apareddos en varias revistas de arquitectura y diseño "Wnrenliesthetlk und Angst- en: Den Arsumtnl. 28, 1963: "Zur Kritik der Wareniesthetlk' en:
a Jo larga de los años ochentll dd siglo xx como fundam=tadón del Nuovo Deslgn de aquella /Qmbudl. 20, 1970. En castellano se puede encontrar: Publiddad y ''''UUnTO. Crúica tÚ la mitien de
época. También MaIfessoU ba reivindicado en sus e:scrlta. la banalidad: -Hay una poética de mm:>%nCÚls.Fondo d. Cultura Económica, México. 1989. Para una opUaclón de las teoóas de
la banalidad". MaUes.oli. MlcheL El ftUI4/IU {kmo. Paldós. Barcelona, 2001. pág. 86: edición Haug y del pensamiento crítico de la escuela de Pranldurt al dlsciio alemán de posguerra, v¿ase
original: L'Inmmt '/tnud: le "mur du tragique dans 1.. sod,t& postmodemes. Dena<L París. 2000. Selle, Gen. Ideología y UIDpÚl tÚl ¿1St/too Editorial Gustavo GilL Barcelona, 1975.
Para un anállsls est~rico de la tematizaci6n de la banalidad según Mendini véase: Calvera, u Véase: Goldsmltil Salomon. Karen lisa. "D<slgn in cultural exchange: lssues on identlty poli do.
All11a. -la dimensión simbólica de los objetos de uso-o en Romero de Solfs. DIego y Dfaz authentlficatlon and ownenhíp·. en: Pride and Pre-Derign. Tht rultur"l Htriiast and tht Sama 01
Unneneta, Juan Bosco, S(mó,lol aliricos, Unlver,ldad de Sevllla, Sevilla. 2001, págs. 321-345. Design. Proceedings Book. Spring ConIerence. CUMULUSIIADE. lisboa, 2005. págs. 447-455.
1 En algunos GISos. 6a ha sido una versión ~noad.a por la historia del arte aunque raramente haya "Una postura característica con respecta al hacer del diseño y su papel' en sociedad. heredada. por
tenido consecuendas para Ja refl""ión e<tética. Es el casa, por ejempio, de un TextO de 1. Jim¿ne:z una parte. del p~amienta crítico pera tambitn de la <st¿tica de la mercaná8 en clave
con relación a lo ocurrido en dos Oltnbios de siglo. el que va del XIX al ;oc y el que va del xx al XX" marxIsta, es la que utillz¡¡ el diseño en sentlda popular. es decir.. la acrivldad responsable de las
- A p'rtlr de la B.ubaus. Monis y la~ Wiener Werkstáte. Ja moda, el moblllado. la decoracióu apariencias que liaman la atención. características de lo posmodemo. o del Nuava Design
d. huerior<s y las objetos domésticos se convierten en espacias de cristalizadón del gusto de difundido durante la década de 1980. Sirva de ejemplo el sigulcnte comentario: "la estética de
las masas, veh(culas de = aue"" sensibilidad est,;tica no ligada al elitlsmo aristocratlzante del la mercancía O. a la Inversa. mercantillzadón de lo <Stl!tico, can la exaltaci6n del diseno y su
difusión telemática en detrimento del contenldo-. Véase: Duque. Félix. -In!onne sobre la
orte tntdidonal-. Y~lLSe:J1ménez. Jos~, í'ransfoonadone> del arte moderno-o en V'Art: Rcvi1ta
del V<partal1lint d'Hlstoria d. I'Art. Unlvet>ldad de Barcelona, núm. 12, 1996, pág. 83. posmodemldad: oscura la historia y dara la pena-, en Muguena, Javier y Cert:zO, Pedro. edl.,
• EJ argumento continúa en gran parte las tesis defendidas por Walter B~njamin sobre las nuevas LafilosoJfa huy, Crítica. Barcrlona, 2000. pág. 127, prlmera edIción: '1997 .
(armas d. la expmenda empobrecida. Ortega y Gasset. por su parte •.tar:nbl¿n a~ord.ó en su u "En est.1 versión es'erizada. el diseno deja de ser una condldón sabreestructural. o sea. una
..
momento la euestlón al habJar tanto de la rebell6n de las masas corno de Ja deshumanlzaci6n illterveiidóxi final'que añaae belieza a la función. un vestido suave' que se pllega para rodear
del arte. en un texto que Emilio Gil comenta más adelante. Los estudiosos del mundo actual un hardwart de [annas preconstituidas, para convertirse en una condidón estructural d. la
y de la herencia posmoderna ban retomado .1 argumenta. pero para poner en evidencia la proyeaación que innuye en las caracttrlsticas del hardwart propiamente' dlcho-. Cannaguol ••
componente ldeológica de gran parte de esas ide.as. De entre los mucho, autores Fulvlo. Luoghi dtlla qwJlita. cit .. pág. 138. Todo el capItulo 6 trata <Sta cuestión.
repr<sentatlvos de la cuestión. v<l.lgacomo ejemplo la siguiente dta de Michd Maffessoll: " Carmagnola, Fulvlo. LA viribilita. Ptr Ult·esuriat. dti lenonltlti romplwi. Angelo Guerr!nl, MIlán,
-La aíliaJ n la vida cotidiana es justamente la no trágico por excelenda: los objetas kitsch. 1989, pág. 44.
la organizad6n de los interior~._ SOn como tantas fortalezas trazadas contri1 el scndrnfrnto l
t
,. "lo Imaginarlo. (la. imágen<s) constituye actualmente la forma <st,;tica soponante de una
de la trágico. es decir, contra la concienda de la muerte y lo ineluctable", MaUessoli. MicheL l' ecollomÍ.i1 fundada en la comunicación de mASas .... Can::n...agnola. Fulvio. 11consumo delle
l.
El illSianle cUma, dt., pág. 57. Immaginl.EsttIICJlt btnirimbalidneIlafidion ecorwrrty. Bruno Mondador!. MUán. 2006. pág. l.

:f~t
30 Anna Calvua

El libro oscl dedicado a considerar' qué pasa con la estética ruando el reinó de l. bcll= Y de
los símbolos se ha vuelto una fueme directa de valor económico· (ibfd.. pág. 7J.
" Aunque los escritos de Walfgang Welsth son aún difidles de encontrar en castellano, existen
varias páginas web en las que consultar algunos de sus articulas y ponendas. Vtase, por
ejemplo, •Aesrhetics Beyond Aesthetics', Procudings of Ihe X1I1rh [nl<mar;ona! Cun!f1'<SSof
Aath~tia~ Lahti. 1995. voL ID: PTaaical.A~szhaics in Practia andThl!ory, ~d. MarnI Honkanen.
Helsinld, 1997, págs .. 1B-37. Revisado: noviembre 2002 en: hnp://WWW2.unl-jena.de/weJsch/
" Ulsh, Scon. Anoth.,- Mod<mily. A Diffmnt lWti.nalily, Black:wcll. Oxford. 1999: ·Objects In our
pr<senr condltJon oí sodery have become sigus, na longer symbals, and cheretore cheir
ffieanlng Is Increasingly aestbetlc. nOI coguitlve ... tbe panicular obJect tberdore has to be .
Judged as aesthetlc experience, as pan ol an event, by a subject as singular, no Ionger as
universaL The experkndDg subJect knows thlngs in terms oi the antological muctures propeI
to tblngs chemsclves ..SubJcct is in the world among objects. SubJ<ets na longer know objects
--they know experien~ tbem--. Con relación a una economía basada en la producción de
experiencias de usuarios/consumidores, vtase: Pine, B. Joseph y Gilmare, Jam., H., The
Experimct EcDnomy. Work is Thtaru a EYtry Businm a Sragt, Karvard Business Sthool Pn:,s,
Bastan. 1999. Traducción del .utOI. TIene en ruema que, respecta al inglés, en castellano
los slgIÚficados de siguo y símbolo están Invertidas.
l· Elllbro clásico en este sentido es de Franc;ois Lyotard, La ccndid6n pomtDdlma (La amdition
pomrwdernt: ra"oTl SIlT ¡,savoir, Les Édltions de Minult, París, 1979; edición en castellano:
Cátedra. Madrid, 1986). Otras muchos libras al respecto se ban publicado y las más Indicados
aquí son los que han·lntentado expUcar las consecuencias del paradIgma de la complejidad.
Para un resumen en la perspectiva de la esltIlca de lo cotidiano, véase Carmagnola, Fulvio, LA
visibiliJiJ. Ptr un atttUa deifm.mmi armp/tSSi, c:it. Af!nna, por ejemplo, que ·la dimensión e5tttiOl
se ha converúdo en un elemento discrlmirumte para cljuicio tanIO en sede científica como en
las elecciones de los consumidores O las políticas de las industrias' (pág. 13). En su
aproximación, la aparidón de Jo estético en la vida social <S lo que permite la visibUldad, el que
las cosas se hagan visibles y, por lo tanta, mediátlcas.
lit Cannagnola, Pulvio. 11 consumo dt/lt immaginL Estttica t btni simboliá ne/la ficrion (CfmDmy~ de,
capftuJo ,.
" Según Jardl Mai\~, cl Us.,- CmltTf!d Dmg" <S una esrrategla wtpresarlal que presupone una
metodología, dcnornlnada co-design. consistente en convocar al usuario-diente a partidpar en
las fases Iniciales del procesa de inna\'adón para que apone su punta de vista.
Dlsdplinarmente, ha dado lugar a un ámbito de investigación vinculado al Dm!1n MAlIag"","r y
su funw.mc:ntadÓn disdplinar pero slcndo tomado d<sde distintos puntos de vista científicos.
n Si bien la bibUograíla al respecta es bastante amplia a estas alturas, para un buen análisis escrito
en castellano véase: Norbono eh.ves, El discio invisible, Paldós, Buenas AIres, 2005,
" MaflessolL Mlc.'lel. El instante tUrno, cit., pág. 57,
" earmagnola, FuMo, Lwghi d,lIa qualiril, dI., pág. 139.
,. Carmagoola. Fulvio, Vczzi im"uhieframm~Tf(i di nonoa unjwrsalt: rrnde:nzt autícht ntlrtconomia dtl
simbo/iCD, SosselJa, Roma, 2001, pág. 149.
u Utilizamos aquí las pal~bI3s de Pulvio Cannagnola (Vazi insumO t fTamm~71ñ di sUJria uniVCTSal~.__,
dI .. pág. 162) quien. a su vez. cita. Maria Pernlola (Contra la comuniCCllione, Elnaudi, TUrfn,
20M, pág. 64J.
D' Aesthetlcs [...] (or It is doubtl<ss ane al the areas oi des!gn phlJosophy Ihat has been less
understoad during che 20th Century and whlth c:aUs for smous fundamental reconslderatJan·.
Flndcll. Alain, 'Ethlcs, Aestbetics and Design', Daign Issuu, 10.2, verano de 1994, pág. 68.
" Cannagnala, FuMo, Luoghi dtlÚJ qua/ira, cit., pág. 201-
,. Carmagnola propuso esta misma pregunta en los ttnninas siguiemes: • ¿Estamos aún en una
sociedad del espectáculo o podemos utilizar las simulacros para vivir roeJor?', Luoghi dtll.
qualir.a, cit., págs. 56-57.

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