TEMA:
El mango (Mangifera índica l.) constituye unos de los frutales más difundidos en el
país.Tomando en consideración los lineamientos del Plan Frutícola Nacional tendientes
a la intensificación y el aumento inmediato de las plantaciones existentes en las regiones
donde está comprobada la adaptabilidad y rendimiento de las especies allí cultivadas , se
hace necesario, incrementar la información básica para su implementación.
Mango
Los mejores resultados se obtienen asperjando la mezcla sobre los brotes vegetativos
sazones que tengan más de seis meses de edad. Generalmente es necesario realizar 2-3
aplicaciones poco antes del período normal de floración (octubre). Durante la fase de
llenado del fruto, el K es también muy importante, y si no se cuenta con riego, la
fertilización foliar es la mejor alternativa. La aplicación foliar de fuentes con sales durante la
fructificación puede ser riesgosa sin no se toman precauciones para prevenir la quema de
frutos. El uso de quelatos de EDTA, ácidos húmicos y aminoácidos es preferible en esta
etapa por su menor efecto fitotóxico.
Niveles foliares apropiados de nutrientes para mango:
Para que los análisis foliares sean de utilidad se deben hacer muestreos sistematizados
durante varios años en árboles bajo un determinado programa de fertilización. Las muestras
deben contener de 30 a 60 hojas del crecimiento nuevo de julio u octubre y deben tomarse
cuando tengan de 4 a 7 meses de edad, preferiblemente a mitad del brote, evitando la yema
terminal (de acuerdo con los datos obtenidos por Pochner en su tesis, las hojas que dan
resultados más consistentes son las del segundo flujo de crecimiento de afuera hacia adentro
en las ramas) Se pueden tomar cogollos que no fructifican o de los que sí fructifican (cada uno
con resultados que pueden variar), con tal de que el muestreo sea siempre semejante. El
número de hojas debe ser de 60 hojas por cada 4 hectáreas. Un solo muestreo se debe
confinar a un área de árboles de apariencia uniforme de la misma variedad en el mismo tipo
de suelo y bajo el mismo programa de fertilización. El muestreo se debe distribuir por toda la
periferia de los árboles, tomando una hoja por árbol a una altura que oscila entre 1 a 2.5 m. Es
mejor distribuir el muestreo uniformemente entre los árboles, en un patrón definido que
incluya árboles representativos del bloque entero.
Las muestras de hojas se deben de entregar al laboratorio tan pronto como sean recolectadas,
trasladadas en bolsas de papel especialmente si van a requerir lavado antes del análisis, ya que
pueden venir impregnadas de polvo, residuos de plaguicidas, excrementos de aves o materia
extraña (entre menos contaminadas son más adecuadas). Es inútil analizar el zinc, cobre,
manganeso o hierro en hojas a las que recientemente se les ha aplicado estos elementos, pues
es imposible remover todos los residuos, por lo que se obtendrán lecturas erróneas.
El Análisis Foliar para el Diagnóstico Nutritivo de
Plantaciones de Mango. Toma de Muestras
Pero, ¿en qué momento se deben tomar las muestras?, ¿qué hojas debemos seleccionar?,
¿qué número de hojas compone una muestra?, ¿cómo se envían las muestras al
laboratorio?. Éstas y otras cuestiones son determinantes en la calidad de los resultados
obtenidos de un análisis foliar y su respuesta variará según el cultivo. En este
documento se tratará de dar respuesta a cada una de las cuestiones planteadas para el
cultivo del mango, y se indicarán valores
de referencia que servirán en la interpretación de los resultados.
Antes de proceder a tomar las muestras, se deben diferenciar dentro de cada parcela
zonas en relación a las características del suelo (textura, profundidad, fertilidad, color,
etc) y de la uniformidad del arbolado (combinación variedad/patrón, edad, porte, color
del follaje, producción, etc). El número de muestras a tomar será el mismo que el
número de zonas diferentes observemos dentro de la parcela.
A continuación, dentro de cada zona diferenciada se seleccionaran los árboles que serán
objeto de muestreo. Éstos no deben presentar daños por plagas, enfermedades, haber
sufrido encharcamiento o sequía o haber sido abonados recientemente pues, los
resultados pueden verse alterados. Se debe muestrear como mínimo un 2% del área que
ocupe cada zona de muestreo.
Para poder comprobar los resultados del análisis con los de años sucesivos, lo ideal es
que las muestras se tomen de los mismos árboles siendo por tanto recomendable
tenerlos identificados.
Una vez seleccionados los árboles a muestrear, las hojas deben tomarse a una altura que
corresponda a la mitad de la copa. Se tomará una hoja por cada punto cardinal (4 hojas
por árbol). Éstas deben tener una edad comprendida entre 6 y 7 meses lo que suele
corresponder a la hoja más baja de un brote nuevo (Figura 2). Las hojas muestradas no
deben proceder de brotes fructíferos.
CONCLUSIONES
1) los niveles foliares determinados para el cultivo del mango se encuentra en general
ubicado entre los rangos considerado como "adecuado" por algunos autores.
2) los bajos rendimientos observados por los cultivos se deben entre otros factores; a la
falta de un adecuado sistema de riego y la carencia de cortinas rompe vientos, afectando
este último mas severamente el cultivo de aguacate.