lanubes otra vera certaree sobre ti? ;Ah!Peroahoraquete has
aparecdo a nosotros, te conoeemos. Not has dado una prueba
segura, un destello de misma, que espera all como en todas
pares tiempo. El tempo de este retomo ibaa ser, sin em:
arg, muy arg.
Capitulo 12
UN BALANCE DE LA POCA DEL LIBERALISM
iéndela
smonarqus, no hataron pars evita queaeabaranprodaciéndo-
Los ambios introducidos en 1874, conla restau
se dos eatistrofeslagatnenteanunciadas,cuyo orgen hay que
buscar en lo fos anteriores: a pérdid de las colonia ltrs
‘marina, que puso en evidencla la debilidad military Is inca
pciad poitin dela metropoli ya crisis agraria de finales de
‘glo, que mostrabs los mites de un modelo esonémico ineli-
‘lente y que hubo de resolverse con una emigraein en masa a
utramar.
Seexplica asi queen torno a 1898, aa hora de hacer balan
ces del siglo que seababa, cobraran era la voces que habla
ban de un fracao nacional en esta época del iberaismo. Una
‘voces que no slo eran, como te suele deci, as de unos euantos
esertores desorientados y de unos politinsarbtrss, sino
que ncllana algunas de a cabeza ms Micidas de tempo,
como Joaquin Costa o ome un Santiago Ramin Cajl que re
‘lamabs,sbiend que era poco menos que imposible sleansar~
lo, oque el pase que pga, tea y calla e organiza politics
‘mente, hablar impusiera au voluntads,
‘Se nilé con elo el intento de averiguar ls cass que po-
dian expicar este supuesto fracas politic del liberalism es-
pol, Undebateal que laderecha aportlaretéricadewnacon-
‘lena hipéerita del eaiquisme, dl que te seguia benefieiando
‘tn nlogin repro, y una eer laquierda ls epeculacionesseereade as eareneas de una revolicionburguess, como sila
‘burguesi le hubise quedado ago por ganar en esto aos.
En el campo del crecimiento econdmico se anlizaron los
rls del desarrollo agrario, atribuidos« ls superivencas
fexdalesy sla rémora del atifundio, siendo asi que una gran
pare de latifundio no databa de los tempos feudales, sino que
habia enido su origen en apropiaein de as errs comuna
Jes 0 sen que era hijo de a propia eevolueon burguests.Y de
sa debilda de a agricaltra, qu otros achacarian aa fatali-
ld del eli, ve dedyjo una expliscin coherent del fraato
dels industraiacién audetons
Enos times afios dl siglo sin embargo, hacurgidouna
corrent revsionista que sostiene que no hubo al fracas his
‘6rico del siglo sino quel genesis de a Espana contempo-
res fue enormal: la earenia de demoerai, la falsifcaion
del parlamentarismo, la quichra dena agricltrasviabeo el
‘aquitio del desarrollo ndstrilhabrian sido -normales.
Silo que snormale es un temino que tiene poco sentido si
no ex para aro en la comparscin conunos valores questo
‘man como referencia. Ya esta referencia hemos de bascalaen
lospalses de auestoentorno durante periodo de 1808.4 1874
resulta dif aeptar esta normalide, como lo revel la propia
falta de los datos que habria que comparar
asestadistica expasola dea ¢poca del liberalismo tienen
una caracteritea singular hecho de dejar medio siglo pret
‘amenteenblanco, entre las henas estimaciones dela segunda
‘ita del sgl vy las primera vldas de medias dl xi
Algo que no sued en ning ozo pat del oceidenteeuropeo.
Noresula fel explcar por qué hubo qu esperar sesenta aos,
‘de 1797 1857, para volver tener un censo de poblacén fia-
ble, mientras te sueedianintentos aberrantesdecusntificaruna
poblacin que una estadsio oficial de 1826 etimabs en 13.7
millones, mientras que ora de 1831 lahaciadescender 1121
sin preccuparse por averguar endl hubiese sido la etitrofe
‘quchabia hecho desnparecer dos mllonesy medio de espanoles
‘em-ineo aos; o que ota de 1850 djs en 10.94, hasta que el
cenao de 1857, el primero aeplable del siglo, hizo aparecer
‘ciatro millonesy medio mds de espanols que haan escapado
that entonces al epacidad de contar dels funsionarios del
ewtado liberal
Las pocascomparsciones que podemos hace con elle
bles de los kimos aioe de esta 6poca nos muestran uns espe
rana de vide sl nacer de 30 afos(cusndoenlos pases de mues-
‘eo entorno era ya de40), una moralidad infantil may elevada,
uu bajo grado de urbaninacién, una proporién de pobacion
sctiva dediada al grealara de 66 por 100 (cuando incluso
‘enuina Francia suporstamente no industrialiada era de poco
‘is del 40 por 100), un notable retraso en materia de extol
rinaci o unas cifras de produceién indutral de compleja
Jnterpretacin, dado que mais de la mitad procedia de I ali-
‘mentacion(mayortariamente de Is moleracin de cereals y
secitunat)y que slo permiten estableceragregados fables 8
partir de 1850. Alo que hay que afadir que las investgaciones
‘recientes muestra en alguna regiones heshos como wna dis-
‘minuelén dels estaura de ae generacionesnacidas entre las
‘cas de 1850 y 1880, sino indice de wn retzoeeso en
Incalidad de vida
Sinsimos como indicador de progresolavancedelaeducs-
in, los datos resulta reveladores. En 1855 habia en Expaia
‘nd de seis il pueblos sin escuela en 1858 exinan 53 nati
tos de segunda entetanza, con unos der mil etadiantes (en
Franca, con algo més del doble de poblacia, eran unos ein
‘euenta mid y habia 6.104 aluminoe en las dics universidades
‘espatolas (dos de as cuales, a de Oviedo y Salamanes pentsobrepasabanloscienestdiantesparaelconjunto desuscuato
{aeultades). Mis dela mitad de estos extudiantes wniversitario
(6.742) eaaban inserts en ls fculades de Derecho, algo que
lamaba I tencién de ls complladores del anuaria de 1888,
que sealaban que eran aqui easel triples, en proporeidn, que
‘las universiades de Francia ode Alemania,
Tampoco puede desiree que el esto de los equipamientos
caltualeseetuviese sla altura roquerids. En 1859 habia en
‘span un total de 56 biblioteca plies, ineuyendo las pro-
‘vincales, que eran el inico punto de aceso libro que tenian
smichosdesushabitantes, Pero qué se podiacsperar de biblio:
tecasprovinciales como la de Billo, con un total de 854 voli
‘menes; lade Santander, con 610, lade Segovia, con 194, oa de
Huelva, con tansolo 60 volimencsimpresos? Sehace difillen-
ontarsignos de normalidad en los pocos datos euantitativon
segurosde que disponemos.
‘Yeto evtando hacer meneién de otroeaspestos mas icil-
‘mente coantificables, como los dela Hacienda pablis.en quel
dlesastrossstuacion de la eepaila no admit comparseén:
‘Qué paride entre a prosperdad dela Prancia cone estado
de externaciny de misera de Espaas,exclamaba Figueroa
enlas corte consttayentesde 1869.
Delo que estamos hablandoaqu, convene que quede lao,
es de atraso, que es un término que se refiere los rtmos de
vance comparados,ynode fracio, que slo puede definive en
relacén con un proyecto coletivo, Como lo revelan michos
sspetos dea historia de esta épocs del iberaimo en Espada,
algunos de esta arasoe fueron condiciones necesarias, 0 con
secuencias inevitable, del éxito lean porlas clases dom\-
antes ens intento de imponer un modelo sci,
dala felt de hacer aloraciones acerca de etosatra
sosapartr de una cifea eacaatenteguras,prefiero conse
‘algunos de los problemas fundamentales que hemos visto
lalarg dea historia de eeton ais
LUN DeDIL PROCESO DE NAGIONALIZACION
Para I tori polities dominante en Espada hasta 1873 la
nacién ers simplemente una estructra unitars organisada
desde arriba eimpuestaporlale. que odebiaargumentarsen
Alicutice, Estabs claro, sin embargo que construir una nacion
debia significa algo me que centrlizacién administrative y
orden pli,
Loentendia asi Antonio Alclé Galiano cand, nla esi
del estamento de procaradores de 12 de marzo de 1835, dijo
‘node los objets prinelpales que nos dehemos proponerno-
fotru8 es hacer ala nacionespatolauna nacén, que no loesm
Joa ide hasta shorss {Qué significa paral hacer wna na
‘im? Lo aelarsban las palabras que aad continasein
‘Una dele ventas que gan los goblernos representativos es
1a proporeén que tienen de hermanar lo intereses reunién-
dolosenun solo centro,
sHlermanar los intereses,reuniéndols en wn sal centro»
ceruuna condiciin neceeari, pero en modo alguna aufeiente,
{el proceso denacionaliacién,porlo menos tal eomo podiaen
tenereedende unas ortes que hablan sido elegidasporansslo
18,000 cudadanos de un total de msde doce millones de abi-
‘antes, y que no representaban, por tanto, mss que alos grupos
dominant delasocedad
stabs claro que la vnacionaliacién de Joe doce millones
restantes, a qulenes ae aeguba el derecho a la participacién 3‘eanés del voto, debiaaleamase por otros medias, en especial
porlosdeuna edueacioncivea, que debiaemperaren aestucla
_yprolongaree mi alls della por el dseuro pablic integrdo
porlaorstorapolitia lo artieulo de os periddios, ls flle-
5 ypasquine, le mnonumentos, las conmemoraionespatr6
tian et, Una edueaeiin que debiainfundiren los espatolesla
conviecion de perteneee. aunque fuese como miembros de se
ind clas, carents de derechos
{orjads com producto de una historia elaborsda con mitosét-
nico pateitens
Por divers razones, sin embargo la tare de nacionalia-
inno parece aberse realizado satsfactoriament en ningsno
Aeestos dos aspects: nse seers shermanarlosinteretess de
los grupos dominantes,nise apo ura escuela como inst
mento de forties de una cultura compart.
La fata de senatbildad coletva ante la pérdid del imperio
continental amercano es una muestra evidente de Ia assencia
desentdo de macién antes de 1833. Tar so la guerra de Arica
4 1859-1860 fe eapazdesuscitar una respuesta patties po
too, a una comidad
pula, alimentadsen parte por prejuicos rligiosos y racists,
‘ero incluso ésta presenta Limitaciones que demuestran el
fracas del estado liberal enlataresde rear sustrat cata
‘omén.
Un sintoma de ets débilnacionalizacin lo tenemos en lt
rapidex con que el movinento obreo aept a partir de 1868,
Jos postulados del internscionalismo, hart el punto que en
1869 Ia seein de a Internacional de Madrid haa un Iama~
rmiento aos trabajadores para que se negasenacelebrarla fies
‘adel 2de mayo, enuin texto que condliadieiendo: a ides de
patria una dea menquina, indigaa de a robutsinteligeneta
delosteabjadores... Lapatriadel obrero es sutllereltallerde
loshijos del trabajo es el mundo enteros
[Los LIMITES DEL enecrnieNTo AGRARIO
Ea ls Espana del iberalismo el predominio de los itereses
graroscondujo a optar por potenlaroe a rave de ae med-
das de a reform sgraria liberal. Fue psiblemente en este te
reno donde se aleanzaron los mayores its de sistema, pero
alacaharel sil a crsiagravia puso en evidencass limites
‘Laconseeueneia mts importante dea reforma ager lie
‘alfuelaampliaroturaeindetierrashastaentonces neal, yt
fuse porlavia de las ventas miso menos gales, yaporladelas
invasiones campesina. Lo deciaen ls cores de 1839, cuando
no podian notre an oe efectos de In desamortiacin eee
stistin de Mendis, Sura y Rall, quien afirmaba que fue el
crecimiento de a poblaion expala lo lrgo del siglo satel
(que obligé as ronuracones; «No ha hubido tats remedio que
arojase a abrir nuevos terres, aumentar el clive pars ob-
tener mayores productos, yay que notarque en 25 fos can
do antes eceitbarac maportar del etranjero a terera parte
de oe granos que contumniamos, hoy no slo no inportamion
ada, sno que, al contrario, exportamios ceca de dos millones
defanegss
Enefecto, una Espatiadonde a superficie sgrariparee hi
ber pasado en los setent primeroe aos del silo xx de 10216
nllones de hectiess consigué precinde de as importiclo-
‘es de cereals, alo en periodos puntuales de difieutades,y
‘mantener un crecimiento de la pobacion qu rompis el estan~
camino del siglo xy laslimitacones del, sobrepasando
ltope de lo diex millones de habitantesy liminando a gran
destatabrunae,
‘Sin embargo la expansion de eultivo de cereals, que en
1860 oeupshael 80 por 100 del slo agricola espatl, estabaproduciendo al propio tiempo que eecian Ins grandes explota-
‘ones triguerasdel oto lado del Antico yqueladaminacion
dean arf del transporte marino perma que os cereals
‘merianos —froto de una agriculura extensiva mecanizada
conbajos costes de produccién-Iegasen alos puerts curopeos
1 precios con los que no podia competes produc lea, lo
aque ibaa dar agar a ana grave crs on as ddcadas finales del
sig.
Junto al rgo el otro gran protagonist de a expansion de
prodcein agri espatola fue la vd, que se conven no
delos captilos esenciales de ns exportaciones (a meiados de
tig lo productos vteoasaportban un tereio dee valor o-
ta) Pero tal ver fuee todavia mis importante. en la medida en
qe contribayS.a mejorar la alimentscién de loa campesinos la
Aisin del eutivo del matey, sobre todo, de a ptata, qu ps
rece haber entrado en muchos hares a integrase en a deta
ampesina como consecuenela de ae difteltades dela guerra
dela Independencia
En canto ala gunadera la fate de cifras fables nos hace
Ail valorarsuevoluciinen estos aos, Noseonstaquelose=
fos sfreron un grave quebranto como consecuencia de las
depredaciones dela guerra dela Independencia yn hay moti
‘vos para auponer quel ao de lo conflicos ait les fue-
+n fivorabes, Disminayeron los reba rashumantes por la
‘qiebrs dels exportaciones de lana espaol, ante la compe
tencia quele hicieron eno mereados internacionales lslanas
snjonas, de modo que al abolirs lot pivlegios de a Mest, en
1836, los grandes reba trashumntesestaban y en franea
decadencia, Alo que hy que aad que las roturaciones red
jeronlat superficie destinadasa patos.
ero la imagen global que sunge dela comparacién entre las
cifras dela cabans de 1750 y de 1865 no et tanto de retroceto
‘como de cambio, Siento el ganado vacuno, como el lanar yet
‘cabrio retrcedieron, aumenté en cambio el porcino(eriado
omesticamente como una fuente de carne queer posible con
servartodo eat). ylohicierontamabién el eaballar, mulary a
al reflejo, sin dda, de a mayores demandas de trabajo para
‘una superficie eultivada mayor. y dela progresiva eusttuién
delbueyporla malaenel trabajo dela tier,
Junto ls rasgospositivos que se han setalado, y muy en
‘special el del recimiento dela produccin, nodebe dejaracen
clolvidoquela forma en que relia reform arava liberal
‘mplioé a rstracion dena gran masa de campesinos, que
smenzaron viendo proletarizados en 1860 Ia proporcin de los
jommlerosenlapoblaionseivaagrariners den 4 por 100en,
1 conjunto de Eopana y superabs e175 por 100 en provincias
como Cid y Sevilla y acabaronexpulados dea tera en
‘aso del pss, como les sucedié alos muchos que hubieron de
‘migra a América entre 1887 y 1914, a consesuencla de una
criss grariacyos efectos pueden peribirseenlosmilaresde
‘embargos de pequenasexplotcione efertados por lahacien~
apr ata de pgo de la contribuciones
En 1928 Julio Senador Gomer denonciaba el mito de a vi-
‘ion establecida de a reforma agrari liberal: eno e cierto que
losnoblesycurasfuesenjamstansbeoltamenteductos dels
tierrs como se pretendia hacer erers. Quien st raajshan
vivian mal, peo vivian. Pero cuando lo golernos las cedieron
‘uma ligarquia de quien esperaban colaboraconesy compl
‘eidades,todala masa de ultivadoresen preeaiofuelansadaala
ners en nombre dela consists liberles, mientras los
Deneficiarios del dspojo proclamaban vel rexpeto aa sagrada
propiedad ala misma propiedad que no les pareci savas
Insta el diaenque fe sus.FEL.IED0 ALA INDUSTRIALTACION
Latarea de constrirunestado-nacion modern la ancio-
nulaaine de quienes hasta entoncesno habian sido mis que
stbditos de un monarea de derecho divino, requis para em
penarqu el estado se convirtiese en el representante de los in
tereses de los grupos econémicos dominantes de Ia sociedad
‘nacional, arbitrando sie posbles contadiceiones con wn
program que fuese ceptable parse conjunto de ellos. La pol
ticabritinica se mantuvo ao largo del silo xx tena alas de~
‘manda dels fabricantesde Manchester (a qulenesaranti6e
seceso alos mereados latinoamericanos), de los terzatenientes
roductores de cereale (protegdos on las com-lous) y de lot
Imeresesfinancierosdela Giy,y se esfors en coneiliaeos
Bato no sucedia en la Bop de Is primera mitad del siglo
1 un pas desartiulado, donde el detarzllo industrials
‘aba produciendo en la periera sobre todo en Catauna, con
{ocot puntuslesen otros lgares como Malaga, Sevilla, Vallado
lid, BejaroAleoy- por obra deunos grupos de empressrioa que
‘otenlancapacidad algunadeinfliren la setsacién demos
rigentes que no slo no prestaban apoyo as industraieacion,
sno quelaveian con desconfiansa
[Las nevas formas dela industria de fibres habiancomen-
zado a susitarrecelos politics en los dirigenteseepailes en
Jus décadas finales del siglo x Lo que parece abeurdo ex que
‘staprevencin contrala industria moderna mantuvieseen|a
primera mitad del siglo xx
‘Uno de los argumentos delospartiario del brecambisne
era preiaamente la conveniencia de impedir el desarolio in-
Austria ya qu ese germen revolucionario que se sbriga ens
taller legardalgn da a ser de sale consecuencins para
‘ocaaeaner ta frog mL IMERALANO
los pueblos manufatureross, Los aconteclmientos de 1848 pa
recieron darts la rzsn. Un flleto, Europa y Expat, enlzaba
entonces la condena dela industraliaein com el tipo, que
‘haa mantenerse durante tant tlempo, del felizoontrant-ente
Europa Espa A diferencia delo que nucediaen Europ, de-
‘a, en Bapaia sa ndstrin fabri no progresa, es clerto, pero
‘estono esun sintoma de deeadenci alos ojosdeun cconomista
Aespreocupado [estoes, sia pejucios). Porque enprimerlugar
‘suatrato nos evita el dolorosoeapectéala que freee los dis~
‘witos manufatreros de Ingltera, Belgica y Francia: eas fa-
langes de seresraguiticos, himbrientos,enfermizo, que vive
cn la anmésfera emponzatada de las factria,resprando en
ellalos ms actives gérmenes de degradaci Fisica y moral, En
‘segundo lugar, lalentitud y eseasz con que lo eaptalesseden
alestablecmientoyfomento delas fabrics es una prueba
fable de que el interés privado, jue inapelable en estas mate
"as sabe desea drles aplicaciones mis provechoss
laut, quesecalifiebaa si miamo de economist ycits-
‘baa Adam Smithenapoyo de eusidessssteniaademss que sen
tiempos ordinarog..e dinero produce més en Expaa queen
cualquiera de loe grandes meres de Buropas, La que eras
‘rurosamente cert en eustose eferiaslostipos deinteré, en
Ihuena meld com consecuencls dels insalvenia de unos go
biernos obigndo «pagar caro el eéito, pero no ea precia-
mente un signo de salud cconémica, puerto que desaninabs ls
inversin producti
‘Ain, sin embargo, tes estos raznamientos econémicos,
pareca el motivo supremo dl rechazo dela industriinaion
‘moderns: elmiedo ls revolcién, «Acabamos de vera patearse
‘en luafoportodalaparteclta del aniguo contnente, lo que
‘no ha sucedido en Expats: «;por qué no nos preservremoso:
losnosoros dl torrentede snaryuiaydesorden que manda hoyata fooa we ennasio
las naciones de Europs?s Lapa wcll vali para eet genteel
precio del atraaoeconénaleo
‘Sumopla es imped ver que las consecwenvias sociales de
1a indstrilzaion eran menos negativs de lo que pensabaa,
CCaecin de sentido condenar Is mieria del entorno industrial
‘earopeo yeerarlos otal del medio rural espaol.
En diciembre de 1850, yen respuesta aun dscurso apoea-
pico de Donoso Cortés, que anunciaba un porvenr pvoroso
ante In amenaza inminente del socalsmo y del comunismo,
Martner dela Ro Ie tranquiiaba. Fata ideas no pod pe
netraren Espa porque rs ena nacin eminentemente agri
‘tori, donde ls indutra ents poco desarrllada lo hay a
‘gunos centros de produecion industrial. como Barcelona y
‘otros: per en lo general la poblacién esis. arece dee
tosgrandes entrosde produceiény de consumo y no slentees
tae neceidades facil, que asatan a los habitantes de la
‘grandes cidade, Alo que atadia que, ademése pueblo espa
‘ol ser ms sobre, lo queen si opin seria para explicar
«qe sla malas doctrinas que sublevan lat lates inferiores, no
‘stin difandidas, po fortuna, como enoteas naioness
Hay algo que reultaplenamente revelador del desinterés de
los politicos erpaile porlaindustrainacion una exploracion
‘fondo dels indies del diario de tesiones del congreso dels
Aiputados revel que de 1834 a 1854, lo ago de veintewstr>
legilaturas, no se encuentra en elos ninguna entrada por los
conceptos de sindutriae ode emanufacturt (ealvo la breve
ferencia,enlade 1836-1837, alzesablecimiento del deeretode
bert de industria de 1813), lo que significa queen todos
aquellosatosnohsho enlas cores espaol nina sola discs
‘on aceres de los problemasdelandastei
Esteslenco se mantiene hasta octubre de 1855, cuando se
resent alas cortesun -Proyectodeley sobre cjeciciopoics,
socledaes juradiecioneingpeceidn de a industria mana
turer, nace de lt preceupacin eusitada por los confictos
obreroe que se estaban produciendo en aquellos momentos en
Barcelona, como puede verse ens extensa part expostivs, Ie
1 de alusiones los vexeesos que, conmoviend los alleres y
las brian con eigen yqusjs inmotivadas alteran y 6
pend us trabajos perturba el pblico sosiegor.
Beésteunproyectoenqueporprimeraverungobiemoespe
‘ol expresa sus ideas sociales sobrela industria, con a afm
‘in tajante de queel patono esibre de fjarlos contrat, sin
«qu autordad,corporaién o persona extra pueda interven
‘nla tau del slario o cantidad de servicio nl en a ond
cones de tiempo, medida, destajoo cualquier otra denomine
cn con que sea conocida la prestacin de obras o servicios»
Conel nico limitedequelosnitiosynitasapartirde ocho sos
so puedan wabsjr porla maana oporla tarde, para que les
qede tempo de dediarse seu inetruceine, Una muestra de
concieneasocil.enriquecidacon aafirmacidndequelosninos
_rnitssde doce adieiocho ator «s6lopodrintrabajardierhorss
iri entre las sede a maa yl seis dela tardes, que re
‘uliab intrascendente alo erstiinapectores quevigienan
aplicaion (ni suficientes esculasparaeducaraestosninos).
EL segundo mv y con toda seguridad el mis importante,
de esta ley rae de regular ls asociaciones de aya mutua de
lostrabsjadores, que slo podian sr locals, no debian superar
Jos 500 afiads y tenian prohbido pretar ayuda en casos de
Inuelg, Se trata de luchar conta el erecilento dels sind
catos,enmomentosen quelas cores reebian la peticionde un
considerable nimero de individsios de toda clases de obreros
elas provinist de Catala, Madd, Sevilla, Grama, Valen
a, Marea, Valladolid, Mila, Cirdoba, Cora y Santander,
telicitando que sles concediereel derecho de asociacins‘trace ne anasto
Anadamos quenelproyectodeley industria nesta pt
‘én delostabjadores nj otra posterior de abil de 1856, de
lasociedad de iladores de algodn, ejedoresdetelaes mcs
nico y peones de extmpado dela cindad de Barelons, que
jindose de os procedimientos de que habian sido objeto ag
‘os obrerose,recibieron en nlnyin momento lsatenciindelos
Aiputads. Noe lleg6 ni siquiera a hablar de estos temas, aun-
que Fgueres clams quese les prestige atencion antes de que
se cerrasen definitvamente las ortes de progresemo,
Deloquesise habia habladoampliamentehastacntonecsen
lascorteseradelosarancles deaduan, que era con freon:
‘tan elemento de presion sobre una burguesiaque n siempre
aceptaba de buen grado un estilo de politica nadecusdo para la
‘onvivencia en una sociedad industrial. Los arencelesservian,
salemis, para dsfazar la hostidad l industrials, como en
1a grosera carcaturade CaelaBarzanallana que en 1842 (tenia
or entonees veintcino aftos, yay que alarar que mis ade
Jane modifiarasustancislmente ests idest),en un artenlo
sobrelaCuestionalgodoners, pinta una Catt de abe
‘antes qu sarin cotonls ina piquésertranjeroe, qa eng
Janardn asus mujeres hijs con muselinasextranjerss, porque
‘en Catalans casinos fabrcan y obrerosy hombres de las la
ses pobre, que wsarén, como shor, lrgos amplisimos vesti-
os entero de pana ingle, y todos se pasearin muy horondos
(Gio) porla Rambla de Barelonas.
(Cuando lo queen 1842 hacian esos sobreros y hombres de
lus clases pores, en garde pasearchorondose porla Rambla,
era organiza sindisto ylehar por nas abjetivos de mejora
‘social vidos para todo loeexpaiols, al como lo expresaron
‘enlosprogramasdelarevoluein centelista
Noe tata de leita el eprobibcionisos, expresion
‘goltay limita delosinteresende grapodeunsestor de fabri
‘antes, sino dedenuneiarlaarenca por parte del estado liberal
‘xableiesen facltades de Ciencia o de Medicina, que ante
ian porst cuenta,
Peroelteao de los planes ylaeyes nos dice poco dela rea-
tidad dela ensehanaa en especial en cuanto se refine al apt
to fundamental del primaria. EL mie grave de los defectos de
sistema, en especial se queria enacionalzay las caps popu”
fares eraclabandonodelsprimersensefanenmanos-delos
espectivos pueblos, lo que en muchos casos significa que o
to habia eatuclaso que sts ue entablecian en eificis aren
tesde condiiones, eon mal equipsmientoy con maesto8 poco
preparados
Ta relidd esque hacia 1855 habia 6.336 pueblos sin e5-
ucla, que se eaeulas que cera dels cuatro quints partes de
qos locate eaolaes eran deficient y que ode 11.143 maes-
trom lo 5.643 estaben califieados de scsn inane, locus
—————— OT
tenia eierta igi tratindose de un colectivo miserablemente
‘etebuido, de donde nals la expresion popular de stener mss
‘hambre que un maestro de escuela en diciembre de 1836, por
jemplo, los maestro de ost eseulaspublieas de la corte
(Tuejeban ade estar eareciendo ioe dier meses del mexquino
‘hello de seis reales diarioe que teen). Fernando Garedo
tosdice de los maetros que ley quelos obliga aexgi direc
tamente la etribucén obligatoria qu pagan os contibuyentes
por la ensehanra de aus ios, les acarrea, con frecuencia, di
fistoay hasta enemigos, por ser michos ls padres ignorantes
‘toe sehen el pagon Lo que significa quelapretendida grata
{da pars quienes no podian pagar Ia escuela eran los propios
‘maestros guienes la sumian en ceasones. Alo que afd que
‘figuran en itis eral entre elestado mayor dela aldeasy
‘pebloa pequetosr, ders no lo delatealde,eleura, el medio
el boticari,ssino que asta el sseristin pasa on feevencia
fntes que lamest de escuela»
Taley Moyano de 1857 babiadedaradolsprimeraensetian
‘a clemenal sobigatora para tds los espatoles, pero dies
thos después la asa brut de escolarzacién no pasaba det 40
por 100 (en Francia eraporentonces del 70 por 100) teinta
“Tos mis ade, en 1887, cuando ya debiahabers aplicadople~
‘mente, lataadealfabetzaclonespafolaeradel 37 por 100:0
ea que bastante mis de la tad dela poblacén era analfabeta
{Gen algunas zonas lo era tes de cada cuatro abitantes). En
‘marzo de 1866 habia en los ayuntamientos espanol 13:405,
‘once (csi uno de cada cinco), ieluyendo 467 alealdes
(que nosabianleer ni escribir
“Tanto de las universiades como delasescueassuperioresy
profesionales se decia ue erin sotenidas por el estados,
pero ello no sigifiaba que éteasumiese la finaneiaeién, que
‘bia basare evencialmente en las tsasacadémicas que pga‘an los estudiantes yen los recursos propos de las entidades
Adocentes y el estado te limitabs » complementation con sa
sportacin Las sumas de gato unlversitario que sparccen en
los presupuestos del extado no eoresponden por ella ls re
cursos portados po la adminietracién, sno que sume ota
‘dos ingress de las univesidades, cay componente ms im
‘porane era lo que pagaban los estudiantes, de acuerdo oa lo
‘que deciala propia ey: lainsrvciéneuperir debe ser costes
‘daporlosquelareabeny han deuilizarlaen provecho propios
Segin uncileuoreferidal curso aeadémio de 1878-1879, un
95 por 100 del gastounversitrio ge financié com los ingresos
elas propia nstitaciones, de mode que de los 2.602.413 pe
seta presupuestadas paralasuniversdades, clestado noapors
ada que 16.145,
ley Pidal de 1845 deters
‘do universtario habia de eseogerse por eoncareoy or oposi-
también quel profesors-
‘dn, Braumna medida ncesti, si pensamos queen este mismo
ao el jefe politic de Breelona hacia uso de sus sribuciones
‘volviendo a colocar (en la unversdad a personae que tenian
‘una reputacin bien aeredtada ena ensefansa, ynombrando a
‘otras de notoraeelebridads, por su cuenta yreego. De todos
‘motos la capacidad de interven contol deolgico dl go
Diernoveniaasegurade pore ariulo170delsey Moyano, que
sutorizaba a expulsarde la universidad aos profesores que en-
feasen doctrinsspericioaas,
Hacia 1860 estaba surgendo en los mediosuniversitarion un
rupo de docentesformadoentormodeSaadel Rio, que defen
ian un ideal liberal basado en el krasiano, Ello sucedia al
‘empo que la publicacion por Pio IX del Syllaur estaba faore
‘endo una reacin nenstia ue lev al ministo Orovio a
soxcod
en 1866 una serie de modificscionesregresiva ela
ley Moyanoy2imponeren 1867 trabas a Ubertad de citer,
‘xigiendo manifesaciones de adhesin la eina que acabaron
‘ona expusin dea universidad de este profeorado kr
esula evdente que el sistema educativo del ibe
‘cspatl estaba més interesado en guratiarlacentraliaciny
contol, queen a reforma y mejora dela ensefanza.Y que
‘queria conseguir ss objetivo jo cose. Como dicen os her
manos Pese, ol instrceion pblicaen sus primeros ramos
provocaba desembolsos a diputalones y ayuntamientory la
‘universitaria se financiabs con sue rentas ingrsos,
Hl reniltado de semejantedespreocapacin queda reflejado
‘eno datos lobes acerca del nivel educativo delosespsioes,
nop aos finales del periodo que estamos considerando, ras
todas as mejoras que se habian realizado porlo menos sobre el
papel, desde el runfo del iberalsmo lanlfabetimo ea en
‘érminostotles dealededor deun70 por 100 (de mis deun 50
or 100enloshombresy més de un 80 por 100 en as mujeres)
Tres de ead cuatro espatols de a generac nacda en 1833
(os quteniancuarentaaosalproclamarselaprimerarepibli-
a) no tenia ningé estudio, ni siqueraprimario, meats
‘que entre los nacids en 1853 (os que tenian entones veinte
os) la proporeidn de loe que careian totalmente de etudios
‘rade dos de cada tre, Los qu habia realizado eetioe me
dios superiresnopasabandel I por 100,
‘Una routrica ste ragricieaciox
Loe progress reaizados en Espa durante el sigl actu
ston obra de ous revolucionese, exeribia Fernando Garrido en
1867 encl discureoprelimina La Espana cotemponinea uno{de los mejores intentos de hacer un blance dela Papa de st
tiempo. Por revolucionesentendia una serie de cambios socia~
les eariter lal, como elretrocesodel pote dela gea
on del faatisnns) 0 la desdenca de la avstoraca, en
‘ontaste con el progreso dela pblacin y dela riquera que se
babianexperimentado en Expana desde comienrosdel seo
Perolsevolucin dela Espana de esto fis no permitaba-
lances optimists acerea de otra clase de eevoluionesy, ls de
‘naturale polities, sno que abocab Carido a una isin er
ties de sla excesiva prolongacién de este priodo consttayente
‘nel que desde hace medio siglo estamos empenados, viendo
_scederse evalulonesefimerasypromunciamientoso reaco
esque péatin menos, yleyes que pasan como pildasombra.
io formmlado porn hombre de ideas avanza
nt lo compartian en buens medida otros de las mis di-
as tendencas politica. Un conservador como Bermejo de-
‘nunciaba en 1872la faved del prlamentarismo espaol: «En
spats no ha habido elocein eno realtado aya sido conta
sol gobierno quelas ha hecho lo cual ptentaaqued sistema
clectoral ha sido siempre ul uns farsay un monopoliotorpey
desearad del poder. Como explicaba Orense en las cores de
1869, se i [al Ministerio dela Gobernacin a pretender ser
iputado, ni mas i menos qu fuera un empleo del gobierno,
yloquealisedisponi everificabs enue provincias.
lasdensncas de caos de falseamiento yeorrupeiénelecto
ral ve repten constantemente, como muestra de una pritia
tan arraigida que ni siquiera se intentahs dsimalae- Ela or
tes de 1853 Prim denanié el eto excandaloso de Pontevedra
donde el goberndor dijo aque estaba muy reaeltaquetriun-
farael candidat del goberno y que porlotantoal qu se ate
vieveavotar uno de los de a oposcin le mandariapresidi,
que al efecto llevaba dos barcos pars rasladarlos a Canarias,
‘Lo normal era, sin embargo, que las cota se arreglaen sin ne
cesida de exhibiciones de fuera de est tipo. Ea 1854 Gonzalo
Morén contaba, por ejemplo, la forma en que se habian dese
srollado ls stimas leeciones en la provincia de Valencia, con
etlles como que ene distrito de Catarrojs se animaban los
teflores que componta a mesa de exon euande con unos to
rele de aguardiente que poral estabaney que seabaron mar
‘hando a comer sin molestarse ni siquiera en hacer el escrt
tio jemplos de este tipo sedemunciahanconstanementeenel
congreso 0 en la prenea, sn que nadie se excandalizate dema-
lado, ea, como le dio Sagas & Amadeo Ila forma en que las
cleotiones a haclan en Expat
‘Una ver obtenidas nt actas, el gobierno hacia, como dijo,
Bermejo, seantratosimpliits con los elegidos,enlos que el
‘init scordaba con ello; «Vowotos votaréis huildesy sin
examen cuantoyo oe mande volar, yencambloyoseré con vo40-
troscomplacenteeneuantome pds
Enelterreno dela cha porlasliberadesdemocritiaspo-
ce die eacapar ala coelunin de que la historia de Expaia
entre 1808 y 1874 ela hatoria de un fraato, La de una sue
‘én de intentos de avanaar pore camino de democracia—en
1808, 1820, 1840, 1854y 1873 frstrados por otrostantose-
trooeto8 en 1814, 1823, 1844, 1856 y 1874- que vendrian a
arroja.en sums un balance de poco mis de quince ao de n-
tentos democratiadores contra 66 de contrarrevolucén. Una
‘experiencia que iba inspirar aun viejo republieano come Jost
Maria Bonilla modo de sntesis de més de enarena aos de
aca, ets amanga reflsin: Todo cuanto existe en Exp es
contrarioalaexstencia dela libertad
‘Ningin ore pala de nuestro entornotuvo en esta paca unt
secuencia comparable de revolucione y contrarrevoluiones,
ni tanas consttucones promulgedas,reformadas,abolidas ygeneralmente no observadas Junn hijo ms. o menos tberat
del pretendiente Carlos Maria Isidro lo atibuia en 1860 aque
‘bo habia sido eaceptada franca yleslmente po a corona las
Insttuciones representstivas. De aul triste eopeetical de
‘08 ministerios que se suceden en Expt en tan cortos perio
os, no elegids despues de conocda ln pinion de los pueblos
‘ino nombrados para haereleeciones, com un carkter deter
‘minado,y para formarse una mayoria que deilmente los sign
‘endo el itimo resltado esa eerie no interrumpida de suble-
‘acionesy promunciamlentos,
Pronunciamientos que impliesban la interferencia de wns
asta militar enquistadaenlasinatitaciones~Bravo Murillo de
‘la: sreparen ustedes queelsenadose ha convertdo enn cua
‘ele, que usurpabelafuncién que ubleran debido cumplirlos
representantes elegidos pore voto popula. En 1877 Las Vi-
dart deca: fie nos seriademostrar que, en tino término. 1
rogreso del iberta en muestra patria sin as intervenciones
nilitares,aun deaquells que chat sealizadoconlabanderade
lu evolucin, habia conseguio triunfo ini segurosy. sabre
‘odo, mis pemanentesy dfiitivos,
De Rego a Tejero misde cineentaintervenconesdesalia-
lores armas de a patria, con reaultados tan snietros como
los centos de miles de muertosylasdécadas de atravo que pro-
orb lade 1936, han mareadoel curt delaistoria de a Eapata
ontemporsnea, donde cada intento de avant hacia la demo
«raciaha venido generalmente seuido a muy corto plazo por
‘una vuelta la normalided dela ese,
La resiauraién mondequion de 1874 parecé poner érmino
‘esta secuenciaespatmédiea: durante eincuenta aos, hasta
1923, hubo gobiernos de predominio civ ycesiron los pro-
‘aunciamientos, lo que no sigaificaa que hubiera un avance de
| democraia, sino que quienes ae ereian con derecho adeten
‘arel poder haan egado aun aeverdo pars
‘tarno paifico
epartisalo en un
Prosiguié portant el flceamiento del sistema palamenta-
io que deja la mayor parte de a poblacii.al margen de una
politic gestionada por una minoria de profesionsles sgrupados
en partidos de cuasos, sin miitancia ni programas que ace
dian al poder gravis a unas elecciones amatadas ¥ la login
conseeuencia de esta continuidad fue que ve mantavier lade
hilidad el proces de nacionalizcion
‘Yno lo digo porque aparecieran finales de siglo x dis
encias en Catalunao enel Pala Vato, que eran mis bien inten
tos de conseguir reformas sustanlalesenla politi comin que
ropueta separatists, como erelan ofingian creer, los pat
aris delinmoviio, Lo que ponsaal deveublertols debildad
de la acionalizaion ers la prsstencia del inguletu cil
de las barreadas yas Bombas en Barcelona de las revues y
los incendios de cosecha en Anda, como conseeuenca de
‘un slstema que habia ido ineape de ntegrar ena vida politica
as apas populares, nchso despus de adoptar una icin de
sufragio univer
LANECESIOAD DE UNA REVISION
Peto si todas estas consideraciones apuntan a mgeri que
hbo atrato en elacién comlos paises de nuestro entorno eal
leshabrin sido su casas? Porlo que he esritoen estas pigh-
nas pudiera parecer que sostengo que In esis principal fue el
eficitde democraca, que es tnto como hablar den deficit de
Itegralon social ~nacional te prefiere—por parte de un biafimea pe enaatne
helio que temia lo efectos de a bert y que se estore,
porello, en! mantener aa mayor parte del pa al margen dela
arsicpacin polities aunque susdiverssfactiones apelaran al
spoyo de as masa en los momentos punuale en que neces
‘ban movlinarias para sceederal poder.
[nerénicadelos retocesos dla democraiapudierlerse
‘como una deseripeién vlda de a historia de Expaia en estos
nos, pero no rv de poe sno le sgregamos una expiccion
desu causus at elar, para empenar. que sta no deen bas
carve ni en el miedo ala revolulén de Fernsndo VI, ni en las
{aterferencias plitcas dels camarillas de smantes, fries y
‘monjat que odeaban a sabe I, nen Ia cerril ambicin de los
«aulls, porque na hubieran podido sn ontar con un a
plio apoyo por parte delas clases dominates. Si he querido a-
‘ar aa la oe desastres cometidos por ests personajillos ha
sido preisamente para mostrarlainsgnficanei de aquellos
«quienes a vision tradicional delahistoia sel consagrar como
sus protagonists, que sgravaron sin dudalos males de pais con,
sau errore, pero noloseausaron,
Para combatiresta isin miope me he esforeido con poco
‘to, porque una sntesie slo puede contrarve a partir de las
Investigaciones preexstentes~en buscar el puso dels de aba
jo, en desvelar las lchas, trabsjos, sufrimientos y suenos de
‘sos hombresy mujeres que no suelen aparecerenlavisin tr
dlicional de la historia mas que como tetigos paves de lox
seontecimientos, casi siempre como sus vetimas. Lanarracion
dela historia de Espana enestosattos ests hecha también, y 0
bretodo, de silencios.
Son éstos unos prtagonistas que no consiguieson realizar
susambciones colecivas, pero qu tampoco puede devise que
fueranenteramente derotado, porque impidieron con sure
leteneia que sus antagonists obtwieran una ietora completa,
‘oeaazaner foc nt amrRLaM0
ea que la poea que va de a guer de a Indepen
lent a a primera republics haya sido siempre revindicada
‘orlos demerstsy condensda por sue enemigos como el ge-
neral Franco, que abominaba en 1950 del esiglo x que nowa-
trom hubiéramos querido horrar de nuestra historiae-, cons
lentes de que sua victoria de 1874, 0de 1939, no eran més que
‘riunfosprciales enn enfrentamient amy largo plaza,
Si pretendemos hondar en ls caus de esta situacinten-
{remos que irms lejos, patiendo del hecho de que mucho de
lo sucedida estaba ya determinado por I mala situcion ene
‘nici, ants inclso de a invasion Francesa. Nadel dijo con
tanta auoridad como la comin dejfes militares que, en-
‘argida por Fernando VII de escribir una historia epoliics-
‘mente corretae de I guerra de la Independencia, deseribié
en 1818 la siuacion en que se halla el pais der aos antes
con ena palabras, que he citado yal comienso de ete Libro
‘sen mayo de 1808 ni tenSamos naves, ni ejércitos, ni armas, nt
tesoro, ni erédito, ni fonterat, ni gobierno, nl exstencia po
Tikes, Lo ena significa que la modernizacin que nuestros
‘evaionlata soatenen que se estaba desarollando con plena
normalidad en 1808, arestrss un grave rtras en sus mis
ara explicrl baba, in duds, que mirar mds até Para
sniuna de as stones fundamentals debi erel resultado dela
qurzachilde 1705 01714, queimplicéeltriunfo deunabsola~
‘emo etgrado-todosheolatiemoloes, comotoda dictadurs—
sobre wn proyecto de nacionalizacién bas en el estblet-
riento de formas de gobierno repretentatvas, por l camino
‘que evtaban sguiendo en aquellos momentos Holanda o Ing
terra que eralo que representaba en sumac] eastriaismos.Deralisme que tema lox efectos de Is ibertad y ques esorus,
por ello, en mantence la mayor part del peal margen dels
participscin polite, aunque ous dversafacsionesspelaranal
apoyo de ss mass en lor momentos puntalesen que necesita
ban moviizarlas para accederal poder.
Lacrnica dels retrocesos dels democrasa piers eee
como una detripeién ilida de la historia de Espa en estos
Atos, pero nos sieve de poco si noe agregumos uns expicaion
esas casas, et claro para emperar, que Gta no deben bus
‘arse ni ene miedo ala revoluein de Fernando VIL nen las
Interferencia plitins de las camarilst de amanes, fale y
‘mons que rodeaban label nina cert ambien de los
‘xuillos, porque nada hubiran podido sn contar con un an
plo apoyo por parte de as clases dominates. ihe queria
cara lu los desasrescometidos por estos pervonajillos ha
ldo preisamente para mostrarlainsgnificancia de aquellos a
‘quienes avin tradicional delahistoia uel coussgrar como
‘sus protagonists, que gravaron sin dudalos males de pais con
sus errores, pero nolos eausaron,
Para combatiresta iain miope mee esforetdo con poeo
‘ato, porque una sintesie lo puede construire a partir de
Investigaciones preesstentes~enbuscarel puto delsde aba
jo, en desvelar las lucha, trabajos, sufrimients y suefios de
‘sos hombresy mujeres que n suelenaparecerenla isin tr
Aiconal de Ia historia mas que como tstigos paivos de los
sconteimientos, eas siempre como aus vietmss. La narracion
delahistora de Fspaaa en exo aftos et ec también, yo
bretodo, desllencios.
protagonists que no consguieron sei
sus ambiciones colectias pero que tampoco pede devise que
fueran enteramente drrotads, porque impidieron con 6
Son éstoa un
sistenca que eu antagonists obtuveran una vietoriacomplet
‘oeaazance oe toca at arntisuo
Local expla que a époce que va dela guerea de la Indepen:
enca ala primera repablca haya sido siempre revindicada
porlos deméeratasy condensda por sus enemigos -como ele
neral Franco, que abominaba en 1950 del ego m% que noeo
‘wos hubidramos quero borrar de nesta historia, cons
lentes de quesu victorias de 1874, de 1939, no eran mis que
‘riunfosparcalesenvn enfrentamiento army lrgo plano
‘Si pretendemos shondar en las causa de esta situsci6n ten
‘remos que ir més lejos, purtiendo del hecho de que mucho de
lo sicedio estaba ya determinado porla mala stain en el
Ineo, antes incline de a snvasin francesa. Nadie lo dij con
‘tanta autoridad coma la comisdn de jefes militares que, en
‘argada por Fernando VII de ese
mente correcta» de Ia guerra de la Independencia, describis
‘en 1818 la sitacion en que se halla el pats dir aos antes
‘om estas palabras, que he eitado ya al comienzo de este libro
en mayo de 1808 niteniamosnaves, i ereitos, ni armas,
tesoro, ni erédito, a fronteray, al gobierno, ni existendiapo-
leds, Lo cual aig que Ia modernzacién que nuestros
revisionists sostienen que se estaba desarrollando con plena
normalidad en 1808, arrasraba un grave retrao en sus mis
tuna historia epoitcn
Para expert haba, an duds, que mar me stra Para
smjuna delat stones fundamentals debiserel resultado dela
suerracvilde 17051714, queimplis el triunfo deunabsolu
tismo retr6grado—todo absolutismolo es, como toda ditadura—
sobre un prayeto de nacionaliacin arado en el etableci-
tniento de formas de gobierno repretentativa, por el camino
«qe estaba sguiendo en aquellos momentos Holanda o Inga
terra, que eralo que representaba en suma el saustriacsmos.Mss alls todavia, sunqueextendiendo ss efestos hasta 1824,
‘tray muy importante tara deriva del don envenenado de ste
soros de Indi, que permiteronsostener la monarqula de los
Austriag como una potenela mundial, scrfieando el desarrollo
‘econémicohubo un tiempo, antes de quelosmetales peciosos
‘de Améries rsjeran aparjeds la desindustrialieaion cael
na, enqueenelcomercio internacional se consdersbanlaseda
‘de Granadaylostejidon de Segovia comolos de mayor calidad de
urop-y,sobretado, police deuna Coronade Casilla que vio
desnatualzadas us cores desde el sigo x1, Lo cual nos levaa
larelacin que sabemos que existe entre epresentatividad po-
lea y ereeimiento econdmico. Noes mi propésio, sin embar~
‘0, adentrarne por esta vereda, porque ello no reaponderia a
los propéstos de estlibo,
Enloque quisiers insist, finalmente,esenel hecho de que
sande aplicamos conceptos come los de snormalidads o de
sHracatovalahstria dela epoca del berdliama en Eapaia, par
timos, aunque no siempre seamos conslentes dell, de nues
‘ratviionesglobals de a sociedad, de nuestra forma deen
tender el mundo, lo cual ns leva a legit entre los sucess de
passdoloshitos—losshecho histéricos>~queseBalanuncami-
‘ho que conduce hacia un futuro posible que ae eatablece como
‘normal: hala una cnormalidads que ve le aparece a ada uno
comolaculinaci6n\égiadelahistora
Est claro, por ello, que no usamos el mismo erterio acerca
dels normalidad de a socedad espafiola quienes lamentamos
lu frustracin del sue popular del federal y quienes eele-
rants estabildad politica conseguida porlasrestauraciones de
1843, de 1856, de 1874, de 1923 de 1939
[No parece, sn embargo, que tenga sent seguir conser
vando en la srtualidad el canon conformists que ha wiizado la
bitora de Expaiaen el siglo x ocomo una forma de deslegiti-
smacion de a democraca (Si par otros puede constitu el
fimen democritio, inonginicey de partidos una felicidad, 0 8
lomenos unsistemallevadero,yaseveloque para Expat cons
tity y lo que ha representado staves de la historian, dria
Franco, ailzando ea peculiar vein dela historia para conde
‘arla demoeraca, en undiseurso alaseares, en 1957).0como
lnlegititnaion deun estado liberal fraudulento, antevedente de
sunsistemade democracilimitada
nla medida en que este canon no respond yas neve
ades de a sociedad espaol actualy que edo puede resultar
‘il al conservadurisno ms inmoviiets, convene que eomen
‘cemos la trea de remplanarlo desbronando el terreno de los
ritosyfalcias de que esti cargadalavisin radicioal que
nosha ensefadoenlacseuelay qucha seguido perpetando dia
ode lahistora como herramienta de confor-
dia ewe pi
rmiemo sci
EL primer paso ba de ser, lgieamente, una incitaion no
sceptarsin critica lo que sens sigue ontand, una ieitaciéna
repensarel pasado con el finde, para decielo con lasinguitan-
tes palabras de Walter Benjani, edescubrie a fuerte oscuras
4 las que nuestra vida ha sid rometida». Slo de este modo, a
pattirde una isin depurada de pico, podremos comensara
labors entre todos, na neva interpretacin del pasado que
respond alosinterrogantes que hemosdeformularhoyanues-
trahistoria,conelfin de que no ayude entender nuestro pre
senteyaconstrui un futuro mejor