No es coincidencia que partiera al cielo un 14 de febrero. Siempre que un ser querido abandona su cuerpo terrenal nos cuestionamos si en verdad existe el cielo, porque tenemos miedo de no poder encontrarnos de nuevo en algún lugar. Pero a donde más podrían ir personas tan hermosas como ella, el cielo tiene que existir, “existe” ella Ángela un ángel. No es coincidencia el nombre Ángela su nombre predestinado para que eternamente sea un ángel quien será cuidada en el cielo y a su vez ella los cuidará a ustedes su familia. El cariño, el amor de sus familiares y amigos, sobre todo el amor de sus padres. NO es coincidencia que partiera al cielo un 14 de febrero reflejo de esa amistad y ese amor que nos brindó. Pero más que nada del cariño que ella recibió. Señor, señora padres de nuestra querida Ángela. Pueden estar tranquilos, dieron hasta lo imposible por su pequeña, que aunque ella ya dejo de sufrir, eso no consuela su ausencia. En lo personal, ella se ganó nuestro cariño, al llegar a nuestra escuela daba ternura, se veía indefensa, pero nunca imaginé lo fuerte que era por dentro. Una guerrera, una luchadora un ejemplo de vida quien siempre estará en nuestros corazones.