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Dificultadesaprendizaje
Dificultadesaprendizaje
Otoño 2007
INDICE
Introducción
2. El sistema escolar.
2.1 Salud mental en la escuela
2.2 Las comunicaciones escritas en el ejercicio profesional
Algunas recomendaciones generales.
La ficha
Los informes
BIBLIOGRAFíA
ANEXOS
Introducción
Las dificultades escolares del niño superan el ámbito del aprendizaje e invaden el de
los afectos y el comportamiento, del mismo modo que sobrepasan el espacio de la
escuela comprometiendo a la familia y al entorno social. El manejo integral de estas
dificultades requiere de la participación de un equipo de trabajo en el que colaboren
psicólogos, profesores, psicopedagogos, neurólogos, orientadores, fonoaudiólogos,
psiquiatras infantiles, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales, en la búsqueda
de cambios y readecuaciones en todos los sistemas involucrados: el niño, la familia, la
escuela y las redes de apoyo social.
Otoño 2007
1. Los trastornos del desarrollo
Los trastornos del desarrollo comprenden una amplia gama de alteraciones o retardos
en le desarrollo infantil que ocasionan la mayor parte de los problemas de
rendimiento escolar. La desviación en el cumplimiento de los patrones de
desarrollo considerados como normales están a la base del concepto de
Trastornos del Desarrollo
emocionales del niño estará siempre presente. Por ejemplo, las interferencias en
destrezas académicas determinan necesariamente dificultades en adquisición del
conocimiento, ajuste social y desarrollo de la personalidad. Otras áreas interferidas
pueden ocasionar trastornos en el control de esfínteres, en los patrones de
maduración del sueño, etc.
El colegio es sin duda uno de los principales derivantes a la consulta del psicólogo y a
los centros de diagnóstico educacionales y el bajo rendimiento escolar, uno de los
motivos de consulta más frecuentes, junto con los problemas de adaptación y
comportamiento.
Las dificultades escolares, se manifiestan dentro del contexto escolar y allí tienen su
máxima expresión. Un adecuado diagnóstico y abordaje de las dificultades, se
dificulta porque las dificultades del niño, ya sean emocionales, cognitivas o de
conducta, deben considerar paralelamente el contexto familiar, escolar y sociocultural.
Por otra parte, hay que distinguir con claridad entre los déficits cognitivos y sus
concomitantes emocionales, y entre éstos y los factores familiares, escolares y/o
socioculturales que pudieran estar interfiriendo en el rendimiento.
Las expectativas de los padres y las exigencias de la escuela, también son motivos
que dificultan la intervención, ya que muchas veces el bajo rendimiento depende de
esos factores más que de dificultades del niño.
Las dificultades del aprendizaje escolar, como su nombre lo dice, son dificultades de
aprendizaje escolar, lo que no implica necesariamente que el niño tenga problemas
para aprender en otros ámbitos. Es el caso del niño marginal, que puede ubicarse
perfectamente dentro de las coordenadas geográficas de la ciudad, o del niño
campesino que reconoce gran variedad de insectos o calidades de suelo, y que sin
embargo, enfrentados a esos mismos aprendizajes dentro de la sala de clases y a
partir de información escrita, no los logran.
Bajo rendimiento escolar. El bajo rendimiento escolar, junto con las dificultades de
adaptación y comportamiento, sumado a las dificultades emocionales: ansiedad, baja
autoestima y desmotivación, son los motivos de consulta más frecuente en los niños y
adolescentes escolares.
Los problemas que originan el bajo rendimiento escolar, pueden clasificarse (para
efectos de la presentación) como sigue:
b) Aprendizaje Interferido
Déficit atencional
Alteraciones emocionales
Alteraciones conductuales
Déficits sensoriales o motores
c) Factores socioculturales
d) Factores familiares
e) Factores del colegio
Trastornos específicos
a) Trastornos verbales
Dislexias
Disfasias
Disgrafías
Discalculia
b) Trastornos no verbales
Del desarrollo motor
Del desarrollo no verbal
De coordinación motora
Los trastornos que interfieren el aprendizaje escolar y que constituyen uno de los
principales motivos de consulta, corresponden en primer término a lo que podría
llamarse niños de aprendizaje lento. Estos niños, se ubican en términos de
rendimiento en pruebas de inteligencia, en la categoría de normal lentos o muy
cercanos al límite inferior del rango de normalidad promedio. Hay que recordar que los
programas están dirigidos al niño normal promedio en cuanto a rendimiento en
pruebas de C.I.
El aprendizaje lento no configura un cuadro clínico en sí mismo, aún cuando los niños
requieran de una atención pedagógica especial o incluso de adecuaciones
metodológicas dentro de la clase común. Para estos casos, la repitencia (con la
hipótesis de que el tiempo ejercería un efecto nivelador) no produce el efecto buscado.
Inmadurez escolar.
Los límites de edad en que el niño alcanza la madurez escolar, son naturalmente
arbitrarios y dispersos, por lo que l
a entrada a la escuela no debería depender de la edad, sino de una evaluación
individual Es frecuente
confundir madurez escolar con inteligencia.
Muchas consultas sobre problemas para aprender en niños de primer año básico,
tienen a la base una inmadurez escolar, concepto complejo que debe ser considerado
ya que una intervención en esta línea es diferente de cualquiera derivada de otro
diagnóstico.
Retardo mental
El retardo mental representa un problema general para aprender, que afecta al niño en
todas las áreas, tanto cognitivas, como también relacionales y afectivas.
En este grupo se ubican los niños con R. M. en cualquiera de sus grados: leve,
moderado o severo. Pero nos preocuparemos de los niños cuyo rendimiento en
pruebas de C.I. oscila entre los 70 y 80 (rendimiento limítrofe) o entre 80 y 90 (normal
lento) En estos dos últimos tramos, se ubican niños que pueden asistir a colegio
común y que aunque rindan bajo el rango de normalidad en pruebas de C.I. no son
considerados como dentro del grupo con R.M.
El límite superior del período del desarrollo, puede fijarse alrededor de los 18 años.
Según Bloom el 40% del desarrollo intelectual y cultural del niño ocurre entre 0 y 4
años, el 30% entre los 4 y los 8 años; un 20% entre los 8 y 11 años y un 10%
posteriormente (Montenegro, 2000)
Diagnóstico y clasificación
De todas las características que acompañan a las personas que viven en la pobreza,
hay dos que no se pueden desconocer: ellos tienen un promedio de rendimiento
inferior en los tests psicométricos de inteligencia y alcanzan niveles educacionales
inferiores en relación a los individuos que no son pobres.
Entre las hipótesis que explican este fenómeno está, por una parte, el efecto
acumulativo de experiencias deprivadoras y por otra la función del lenguaje que
aparece después del segundo semestre del segundo año de vida. Conocido es el
hecho de las características peculiares que tiene el lenguaje en la cultura popular,
tales como vocabulario restringido, presencia de la comunicación funcional más que
analítica o reflexiva, gramática alterada, etcétera.
Se sabía que las tasas de RM en los países desarrollados, como U.S.A., fluctuaban
entre 3 y 5% de la población, pero al comenzar a efectuarse estudios epidemiológicos
más finos, se vio que en este país la distribución por clase social era significativamente
mayor en los estratos socioeconómicos más pobres (15 veces más).
El RM de origen biológico es probable que ocurra tanto entre niños de clases sociales
altas como de clases sociales bajas. En el 75% de los casos, no es posible encontrar
factores biológicos específicos del RM. En ellos el grado de retardo es generalmente
leve (CI 50-70) y el diagnóstico se hace comúnmente no antes de entrar a la escuela.
La clases sociales más bajas están sobre representadas en estos casos de RM el
significado de lo cual no está claro. A menudo hay un pattern familiar de grados de
severidad similar en padres e hijos.
Con frecuencia los niños que se crían en la pobreza, son producto de embarazos no
deseados ni planificados, concebidos en forma accidental y a menudo por madres
solteras.
(Montenegro, 2000)
Evaluación del RM
Pueden realizarse mediante los diversos tests de inteligencia en uso o aquellos que
permiten diferenciar trastornos orgánicos que produzcan RM.
Existen muy pocos tests estandarizados para medir los diversos grados de adaptación
social en el retardo mental. (Por ejemplo, el Vineland Social Maturity Scale). En una
situación ideal estas escalas debieran utilizarse paralelamente al juicio clínico sobre el
grado general de adaptación. Si no se dispone de ellas puede basar este último
considerando la edad, trayectoria y los conocimientos culturales de la persona.Como
cualquier otro medio que ayude a un diagnóstico, la determinación del CI debe
juzgarse en el contexto general del cuadro clínico. No debemos olvidar que el
rendimiento de un niño frente a un test determinado puede estar influido por varios
factores ajenos a su potencial de inteligencia. Basta mencionar en este sentido la
competencia del examinados, su habilidad para establecer una buena relación con el
paciente, la variable cultural que la mayoría de los tests no contempla. Por otra parte,
el niño puede llegar a ser evaluado en condiciones de temor, fatiga, hambre,
negativismo frente al examinador, etc.
Escolarización
Los niños cuyo C.I. no supera los 70 puntos, asisten a colegios especiales. La
Reforma Educacional de acuerdo a los principios de inclusión, plantea que estos niños
deberían asistir a escuelas comunes con adaptaciones curriculares que les permitieran
permanecer dentro del sistema. En cuanto a los niños que se ubican en el rango de
inteligencia limítrofe, entre 70 y 80 puntos, desde siempre han constituido un problema
para el sistema escolar, ya que los programas no están destinados a atender a sus
necesidades y fracasan reiteradamente.
Los niños con un rendimiento normal lento, grupo en el que se incluye una gran
cantidad de niños, (especialmente aquellos cuyas dificultades son originadas en la
pobreza y en la marginalidad) constituyen un gran desafío para la educación, ya que
los programas no responden a sus necesidades, ni les entregan las herramientas para
superar o para compensar sus dificultades. Dentro de este grupo ocurre la mayor
cantidad fracasos y deserciones dentro del sistema escolar.
...
...
El sistema nervioso inmaduro (típico del niño con SDA/H) en comparación con uno
adulto, presenta un número de neuronas activadas (y activables) relativamente bajo.
La activación neuronal y el aumento de las conexiones sinápticas, determina
diferentes niveles de madurez en el niño.
Paralelamente, los procesos neuronales inhibitorios del adulto, tienen gran desarrollo,
lo que permite que las funciones desarrolladas por grupos neuronales sean más
especializadas. Se puede realizar una función sin interferencias en otras
Los diferencias sexuales son más consistentes para los movimientos asociados que
para la velocidad motora.
En todo caso, los varones son más veloces que las niñas, pero e n todas las tareas
las niñas tienen menos movimientos asociados que los niños.
La impresión de que las niñas son más coordinadas que los niños se basa en que
ellas se desempeñan mejor que los niños en tareas motoras complejas y adaptativas
y en que muestran menos movimientos asociados durante todas las tareas motoras y
eso determina que sus movimientos parezcan más armoniosos.
Lateralidad . Los niños con disfunciones del sistema nervioso central desarrollan una
lateralización más tardía o más débil. El logro de la lateralización depende del
desarrollo neurológico, por lo tanto, representa un índice a considerar
Otros niños muestran una lateralidad mixta con combinaciones de preferencia de ojo,
mano y pie. Hay algunos que estrictamente prefieren usar su mano derecha y que
están tan lateralizados que no pueden usar su mano izquierda: este grupo recibe el
nombre de hiper-lateralizados patológicos.
Los signos neurológicos sutiles o “signos blandos”. Su presencia o ausencia constituye
un importante indicador de inmadurez y de orienta al neurólogo en el diagnóstico del
SDA y otros trastornos del desarrollo. Sirven no sólo como marcadores de
alteraciones leves en el desarrollo motor, sino que se relacionan con trastornos
conductales tales como
hiperactividad, impulsividad, trastornos de aprendizaje, conducta agresiva antisocial,
trastornos psicóticos, ansiedad y depresión y Sindrome de Déficit Atencional-
Hiperactividad ( SDA / H)
Subtipos de SDA
Etiología
Perspectiva Neurológica
.
A diferencia de lo que ocurría hace un par de décadas, en que los diagnósticos se
realizaban cuando el niño había iniciado la escolaridad, en la actualidad se realizan
diagnósticos en forma bastante más precoz, dado que el inicio de la sintomatología
puede ser pesquisado desde los 3 años.
Un buen proceso diagnóstico debería considerar todas o varias de las etapas que se
señalan a continuación. Dado que el SDA/H, tiene una indiscutible base neurológica,
es quizás el neurólogo quién puede tener la última palabra, pero cualquiera sea el
profesional que maneje el caso, debe considerar la opinión de todos los agentes
involucrados.
La intervención
Los antecedentes y los recursos familiares, también deben ser tomados en cuenta no
sólo en cuanto recursos económicos, sino también su disposición para administrar el
fármaco en forma oportuna y también su disposición a persistir en el tratamiento.
Las características y recursos del sistema escolar son otro punto a considerar, en el
caso de la terapia farmacológica. Si el niño está en un curso de 45 alumnos, en un
espacio reducido y sin posibilidades de una atención personalizada, es difícil encargar
al profesor la tarea de administrar el medicamento el niño (independientemente de
hacerlo aparecer como dependiente del fármaco más que de sus recursos)
.
Los psicoestimulantes son un tema controversial en cuanto son el centro de prejuicios,
creencias y opiniones encontradas entre defensores y detractores. No obstante, son
el tratamiento de elección desde la edad preescolar hasta al adulto.
La
experiencia acumulada en relación a su eficacia es definitiva, con resultados de
investigaciones que avalan su efecto positivo en el corto plazo, siendo por sí solo el
tratamiento con mejores resultados. Respecto de su eficacia al largo y mediano plazo,
hay
dificultades metodológicas para evaluar
Las formas de SR (liberación sostenida) parecen ser menos eficaces, no obstante que
tienen ventajas comparativas en cuanto permiten la administración una vez al día, en
vez de dos (una de las cuales debe ser en el colegio)
Hay niños que simplemente no responden a los tratamientos farmacológicos. En estos
casos el neurólogo e debe evaluar si las dosis indicadas son las adecuadas. Pero
independientemente, puede ocurrir que la familia atribuya efectos secundarios
negativos al medicamento, que la lleven a suspenderlo o a administrarlo
irregularmente.
Otro punto que puede influir en el efecto, son las expectativas de la familia y sistema
escolar, las que pueden ir desde esperar efectos mágicos inmediatos (lo que los lleva
a frustarse y no apreciar pequeños cambios) o a tener expectativas nulas respecto del
efecto (profecía autocumplida) lo que puede llevar a desestimar los efectos del
medicamento, atribuyéndolos a otras causas. En ambos casos, es posible que la
familia no reporte cambios atribuibles al medicamento y el niño aparezca como no
respondedor.
Pronóstico
Dado que excederían los límites de este trabajo, no vamos a incluir las relaciones
entre el colegio y la familia cuando se trata de familias muy disfuncionales, situación
en que las relaciones familia-escuela pueden ser casi inexistentes o adquirir
características muy especiales.
Las familias son diferentes, como también lo son sus expectativas respecto del rol del
colegio y son diferentes también los proyectos educativos de cada colegio y los
proyectos de cada familia para sus hijos. Qué espera la familia del colegio y qué
espera el colegio de la familia, son temas en que no siempre hay acuerdos.
La falta de acuerdos entre los padres sobre lo que esperan del hijo, sobre la ayuda
que se le debe proporcionar, sobre lo que constituye una exigencia desmedida y lo que
no lo es, impide brindarle la ayuda necesaria y llevarlos a que se culpen mutuamente
de los problemas del hijo en el colegio. Esta situación de mutuas atribuciones de
responsabilidad, puede complicarse aún más, cuando la familia acusa al colegio y el
colegio acusa a la familia de no cumplir a cabalidad sus roles.
La imagen de una familia estable, que protege pero a la vez fomenta la autonomía,
constituye una base a partir de la cual el niño y más tarde el adolescente y el adulto
joven se aventura en exploraciones del medio ambiente cada vez más amplias. La
inestabilidad en la familia, causará, consecuentemente, inhibición en todos los
procesos involucrados en el buen rendimiento escolar. (Gorostegui, 2006)
Por otra parte, la infraestructura de los colegios, también puede ser un factor de
interferencia, en la medida que las clases deban realizarse en salas pequeñas que
deben albergar a más niños que lo que su espacio permite. Se puede agregar la falta
de laboratorios, tecnología, apoyo computacional, espacios para actividades
deportivas, etc. etc. Aunque ha habido un mejoramiento real, todavía no se logra que
estos avances alcancen a todos los niveles y dependencias educacionales.
Un tercer factor que depende del colegio, es el que se refiere a las características,
calificaciones y condiciones personales del profesor. El profesor sigue constituyendo
un elemento central en el proceso de aprendizaje del niño.
.....
1.3 Trastornos específicos del aprendizaje (TEA)
Los TEA, sin duda diferentes a los problemas generales para aprender, pueden
coexistir (lo que sin duda, complica el tratamiento y el pronóstico. Puede darse el caso
de un niño con aprendizaje lento, pero además, disléxico y con déficit atencional.
Diversas hipótesis respecto del origen de los trastornos de aprendizaje de LNV, tratan
de explicar también la concomitancia con alteraciones emocionales y conductuales. En
esta línea se pueden identificar dos grupos de explicaciones diferentes, pero no
excluyentes: a) una hipótesis neurológica propuesta por Rourke et al. (en Bravo, 2000)
que apunta a alteraciones en estructuras neuronales del hemisferio derecho,
especialmente en las fibras que conforman la sustancia blanca y b) la hipótesis
cognitiva, que postula una insuficiencia perceptiva para reconocer claves sociales
tanto visuales como verbales. Esto último daría cuenta de las dificultades de
adaptación social y de la inadecuación de algunas de sus reacciones.
La conducta evasiva frente a las demandas escolares favorece que sean etiquetados
por los adultos como flojos y oposicionistas, más que considerarlos niños con
dificultades que ameritan ser ayudados. Cuanto más demandante de conducta
psicomotriz sea la tarea, más difícil les resulta la adaptación y más evidente resulta su
discapacidad, lo que explica el hecho de que con frecuencia presentan trastornos
disgráficos
Por estas características, también han sido diagnosticados como niños con trastornos
del aprendizaje del hemisferio derecho . Sus scanners cerebrales muestran ligeras
anomalías en el hemisferio cerebral derecho y sus historias clínicas muestran en su
desarrollo historias de lesiones en esa localización cerebral. Estos trastornos que
tienen una frecuencia menor que los trastornos del aprendizaje verbal, constituyen un
1% de la población general, versus un 10% de frecuencia de trastornos de
aprendizaje verbales.
Se describen también como trastornos del aprendizaje no verbal (CIE-10 (F82) y DSM-
IV (315.4)
Corresponden a una disfunción del hemisferio cerebral derecho.
Se caracterizan por déficit en la atención, trastorno en la percepción viso-espacial,
fallas en la maduración de la coordinación, dispraxia constructiva y dificultades
variables en aspectos pragmáticos de la comunicación.
Se incluye una gran gama de problemas que afecta el desempeño escolar del niño,
no obstante que se trata de un área poco considerada
Algunos niños van superando sus dificultades motoras con la edad, sin
que se haya realizado ningún tipo de intervención. Sin embargo, datos más recientes
han sugerido que, en un grupo de niños con TDC, el problema no se resuelve
espontáneamente y persiste hasta la edad adulta
Aún aceptando que puede existir un TDC que corresponde a una variante de
la normalidad y a un retraso madurativo, no por ello debe excluirse la existencia de
un síndrome persistente de dificultad motora, que causa problemas en la edad
infantil (Forster, J. 2006)
Estos niños consultan por su torpeza, mala coordinación y facilidad para caerse.
Suelen tener una historia de retraso en las adquisiciones motoras y refieren haber
tenido más dificultades que un niño no torpe para los aprendizajes motores.
Muchos de ellos presentan dificultades para organizarse no sólo en actividades
motoras, sino también en otras actividades.
Conviven con su problema evitando aquellas actividades en las cuales son necesarias
las capacidades motoras
. En el entorno familiar tienen dificultades en las actividades del día a día, como
vestirse, comer o anudarse los cordones de los zapatos.
En el juego, suelen ser niños solitarios, que participan poco en las actividades
deportivas o juegos físicos.
Son menos populares y frecuentemente reciben burlas de sus compañeros.
T
ambién es relativamente frecuente que los niños con TDC tengan asociado algún
problema de aprendizaje, con lo cual la probabilidad de que se sientan marginados y
con una autoestima baja es considerable.
El aspecto social, se ha detectado que los niños con TDC son menos competentes y
que presentan un nivel más elevado de ansiedad, se perciben a sí mismos como más
torpes y tienen una baja autoestima (Skinner & Piek, 2001)
TDC y los llamados “signos blandos” (soft signs). Los signos blandos representan una
evidencia sutil de alteración del sistema nervioso, que inc
luyen diversas disfunciones motoras tales como
a) movimientos anormales,
b) alteraciones de los reflejos,
c) movimientos asociados,
d) retraso en las adquisiciones motoras,
e) mala coordinación y torpeza en general.
TDC y Trastornos del habla. El TDC puede expresarse también como Dispraxia o
torpeza motora del habla
, que consiste en un déficit en la expresión de la palabra por una lengua poco
coordinada o torpe.
Existe escasa agilidad y velocidad en los movimientos linguales, lo que conduce a la
imposibilidad para repetir el mismo movimiento de la misma forma y a un lenguaje
disfluente y peculiar.
En general,
los niños con trastornos de la articulación tienen más problemas en su coordinación
motora y más signos neurológicos “blandos” que los niños normales.
No perder de vista que toda intervención dirigida a mejorar las capacidades motoras
tendrá una repercusión exclusiva sobre ellas
, pero además, en el tratamiento de los problemas de aprendizaje asociados, y de
otros cuadros comórbidos.
Retraso de Lenguaje
. Manifestación común: dificultad global en el uso del lenguaje y en la comprensión de
relatos cuyo impacto
académico se manifiesta en dificultades variadas en lecto-escritura y en escasa y
deficiente participación en actividades mediadas por habla.
1.3.2
Trastornos verbales del aprendizaje
La dislexia
Estos errores, aparecen también en la escritura, por lo que el dictado es una buena
herramienta para pesquisar dislexias más o menos encubiertas, especialmente en
adolescentes y adultos. Estos errores, no obstante, no deben confundirse con errores
disgráficos, ya que éstos se refieren a la forma, al gesto grafomotor, y no al contenido
o a la capacidad del niño para codificar haciendo la correcta correspondencia entre
fonema y grafema.
En la lectura se usa la fovea (porción de la retina) que no tiene visión, de manera que
durante los movimientos sacádicos, se suprime la percepción, (que ocurre durante el
período de fijación)
Variables del lector, tales como habilidad para reconocer letras y combinaciones de
letras fuera del campo visual central, la dificultad del texto y la longitud de la palabra
, determinan diferentes calidades de lectura
Lector principiante realiza fijaciones largas y frecuentes regresiones (el doble en
promedio) Luego, decrece el tiempo de fijaciones, disminuye su numero y
especialmente, las regresiones.
Niños entre 9 y 12 años. Se espera un adecuado nivel comprensivo del lenguaje oral y
escrito
Y ciertas destrezas a nivel de expresión escrita que le permitan un desempeño
escolar eficiente. A esta edad, comienza a ser ya un problema la disortografía,
omisión y confusión de letras, escritura en carro, disgrafías asociadas, mala redacción
En el plano emocional, se afecta la autoconfianza y la autoestima. Puede haber
intolerancia a la frustración
problemas conductuales, impulsividad, falta de atención y atención/concentración
(secundarios o asociados)
Claves de riesgo en niños: Fracaso en tests que evalúan conocimiento del nombre de
las letras.
Claves para descubrir secuelas en adultos: historia infantil como la descrita. Lectura
cuidadosa, pero no automática, bajo rendimiento en tests con tiempo y básicamente
en tests de elección múltiple
Algunas formas simples de evaluar el nivel de conciencia fonémica son las siguientes:
Identificación de las letras, del alfabeto. Asociación letra sonido. Juntar palabras que
comienzan con la misma letra, desde una lista : mar, más, mal, maleta (entre varias
escuchadas) .Identificar cómo suenan si se le saca una letra o se le agrega. Casa,
asa, sal. Memoria verbal: relatar una historia recién escuchada. Nominar series de
objetos, letras, colores (que empiecen con una letra). Nombrar objetos dentro de un
cuadro
........
Evaluación de adultos
Desarrollo del cuadro presenta un curso no bien descrito, pero está claro que persiste
y no remite espontáneamente. Si una persona tiene diagnóstico de DX no necesita ser
rediagnosticada para confirmar que persiste. La habilidad de decodificación puede
mejorar, pero no se torna automática como en los buenos lectores, quienes no
requieren contexto para identificar la palabra: las secuelas del déficit persisten y el
esfuerzo para leer, también. La observación clínica del esfuerzo para reconocer las
palabras y el déficit de automaticidad, en el caso de los adultos, debe además
acompañarse con medidas de tiempo. Ellos pueden haber compensado bien los
déficits de decodificación, pero fallan en tiempos cortos, por déficits en la
automatización de la lectura, lo que compromete la velocidad
Para los adultos, la historia es el elemento más sensible (palabras mal pronunciadas,
dificultades fonológicas, lenguaje marcado por dudas y disfluencias) o problemas para
leer palabras no familiares, dificultades para deletrear y requerimiento adicional de
tiempos para leer, de acuerdo al nivel educacional logrado.
Una batería central para el diagnóstico debería estar compuesta por tests de lectura,
deletreo, lenguaje y habilidades cognitivas. Otros tests de rendimiento, por ejemplo en
matemáticas, lenguaje o memoria, pueden utilizarse como parte de una evaluación
más global de funciones académicas lingüísticas o cognitivas. No hay puntajes
patognomónicos de DX, sino que el diagnóstico corresponde a la interpretación de
muchos parámetros, observaciones, datos de tests, etc.
Lo que ve el clínico, debe ser coincidente con los otros datos aportados por los tests.
La dislexia se diferencia de otros desórdenes que pueden afectar a la lectura, por el
problema central del déficit fonológico. Podrían también incluirse evaluaciones
sensoriales, especialmente en los niños, también estudios de imagen, encefalografías,
o tests genéticos, pero sólo si hay indicaciones clínicas. A pesar del avance de los
estudios de imagen para funciones cognitivas, sólo se reservan esos estudios para
casos de investigación.( Shaiwitz, S. (1998)
El diagnóstico diferencial entre los problemas generales para aprender y los trastornos
específicos de aprendizaje, debe ser hecho por un equipo interdisciplinario que debe
considerar la multivariedad de factores intervinientes, desde una perspectiva sistémica
ecológica que evalúe tanto al niño como su entorno familiar, escolar y social. El
psicólogo deberá evaluar aspectos cognitivos , capacidad intelectual, además de los
concomitantes emocionales, conductuales y familiares. Los profesores especialistas y
psicopedagogos, deberán abordar tanto el diagnóstico diferencial, como la
rehabilitación o reeducación en especial cuando se trata de trastornos específicos
tales como la dislexia, disgrafías o dificultades específicas del cálculo.
El SDA puede afectar a la lectura de niños tanto como de adultos, pero es un desorden
totalmente diferente de la DX en todo. Sin embargo, el 12 al 24% de los pacientes con
DX, son también portadores de SDA. Si hay sospecha de que el SDA afecta, hay que
investigar también en esa línea.
Retraso lector simple: aprendizaje lento de la lectura por problemas generales para
aprender. En general, se aprecia lentitud, falta de eficiencia y fluidez, pero no se
aprecian errores específicos
Tratamiento
En primer término, el niño debe descubrir que las palabras habladas pueden
descomponerse en sus sonidos componentes y que las letras sobre la página
representan esos sonidos, en la la misma secuencia en que las escucha. Por lo
general, ese logro corresponde al final del primer año, en que la mayoría ha
descubierto los principios del alfabeto y han dominado el código escrito. Los DX no lo
logran esa habilidad que es prerrequisito para la lectura, por lo tanto, esa conciencia
fonemática debe ser enseñada explícitamente.
Hay muchos tratamientos alternativos, pero con poco soporte científico sobre su
efectividad: optométrico, medicación para la función vestibular, intervenciones
quiroprácticas, suplementos dietéticos, etc.
Trastornos de la escritura
Alteraciones asociadas a DX. Los trastornos de la edscritura que se agrupan bajo este
título, corresponden a una especie de trasferencia de errores esp[ecíficos de la lectura,
a la escritura: rotaciones, inversiones, confusiones, secuencias alteradas, omisiones,
agregados, dificultades para unir y separar palabras. Estos errores no corresponden a
los de tipo disgráfico, ya que el niño puede cometerles con una calidad gráfica sin
problemas (no tiene que ver con la calidad gráfica del trazo)
Disortografía.
Corresponde a una
dificultad específica para escribir correctamente conforme a normas y reglas
convencionales y de acuerdo a escolaridad. Depende de memoria visual, motora y de
conciencia psicolingüística en relación con el significado de las palabras y de la
sintaxis. Corresponde a un contínuo entre niños (y adultos) de lo que habitualmente
se denomina como mala ortografía hasta una dificultad que afecta el significado del
texto escrito
Disgrafía
Alteraciones específicas del gesto grafomotor. El gesto grafomotor, es decir, toda una
cadena de coordinaciones, disociaciones de movimientos, etc. conducentes a la
escritura, incluye posiciones y movimientos defectuosos, movimientos de disociación
no logrados, movimientos de progresión/inscripción interferidos, esbozo de calambre:
crispación y dolor que provocan paradas forzosas
Alteraciones desarrollo intelectual: las alteraciones en este nivel, no en forma directa,
pero sí indirectamente, producen problemas de escritura que se asemejan mucho a la
disgrafía en cuanto a calidad de la escritura. Estas dificultades interfieren en la medida
que le impiden comprender valor simbólico y significados del signo, por alteraciones y
retrasos en el desarrollo de lenguaje y por factores afectivos: mal estilo motriz
asociado a factores afectivos. Ej. crispación, bloqueo, impulsividad, etc.
En un primer momento, salvo excepciones, los niños muestran un tipo de letra que
podría calificarse como disgráfica, si no se supiera su edad. Tal como en cualquier
trastorno del desarrollo, el conocer la etapa evolutiva, hace la diferencia al momento
de hacer un diagnóstico.
Los trastornos del cálculo continúan siendo menos frecuentes (en cuanto trastornos
específicos) que los otros grupos de trastornos.En la población escolar la prevalencia
de discalculia oscila entre 3-6%, una frecuencia algo inferior a la dislexia y el SDA/H.
Un estudio realizado por Shalev, Auerbach, Manor & GrossTsur (2000) muestra que la
distribución del cuadro en relación a género, es similar entre niños y niñas. El 26% de
los discalcúlicos presentó síntomas de SDA/ H, y un 17% presentó también dislexia,
lo que afecta el pronóstico. Un 42% tenía un familiar de primer grado afectado de
algún trastorno del aprendizaje.
Este sistema está ubicado dentro de los lóbulos parietales y es responsable del
reconocimiento de números y de la memoria de procedimientos matemáticos
Una disfunción en el sistema de reconocimiento y procesamiento visual de números y
símbolos, al igual que fallas en este sistema nuclear universal, puede dar origen a la
discalculia
Para hacer el diagnóstico se requiere que el niño tenga un nivel de inteligencia que no
impida el aprendizaje de la aritmética, es decir, que las dificultades no sean
secundarias a ese déficit primario
Aumento de la falta de
autoconfianza y de la fragilidad
frente a la frustración.
Problemas conductuales:
impulsividad, margen corto de
atención-concentración
El síndrome persiste en la Tendencia a la escritura descuidada
adolescencia y la adultez a veces incomprensible.
Baja autoestima
....
2. El sistema escolar.
Las acciones destinadas optimizar las intervenciones en Salud Mental Infantil deben
orientarse de acuerdo a un modelo de integración horizontal a programas ya
existentes, en especial a programas materno infantiles de preferencia en niveles de
atención primaria, y para el caso de los escolares, en programas de salud mental
escolar y preescolar.
Dentro de esta línea, el niño no puede ser enfocado individualmente, sino dentro de su
contexto familiar. En esta línea, la identificación de familias de riesgo para la salud
mental del niño es una tarea central en la edad preescolar y escolar. De allí deberán
desprenderse intervenciones en prevención primario y secundaria.
Vagancia infantil
Abuso y maltrato
Padres ausentes (cárcel, abandono, enfermedad, etc.)
Deserción escolar temprana
Adicciones.
Aunque el correo electrónico sea una vía rápida de comunicación y en algunos casos,
menos formal, esto no exime al profesional que la utiliza de cumplir con normas
ortográficas, semánticas y sintácticas mínimas. Un informe con faltas de ortografía y
mal redactado, le resta credibilidad al contenido.
La ficha
Las fichas permiten hacer derivaciones de pacientes sin tener que repetir exámenes,
disponer de los resultados de evaluaciones anteriores, tipo de tratamientos, si han
resultado exitosos, características especiales del paciente y la familia, etc. etc.
La información básica que debe consignar una ficha (no necesariamente debe
contener todos los puntos) es la siguiente:
a) Todos los datos de identificación del paciente (fecha de nacimiento,
escolaridad, estado civil, ocupación, hijos, etc.etc. Actualmente se utiliza
también el genograma para mostrar el contexto familiar.
Los informes
Entre los posibles receptores de los informes, están (además de los propios
interesados) los padres de los menores, profesores y otros miembros del sistema
escolar, tribunales, etc. etc, Además de la capacitación profesional de la persona a
quien se destina el informe, también hay que considerar la respuesta emocional a la
información en el caso de un padre o de un profesor. La relación emocional que tiene
con el niño puede interferir con la aceptación racional y objetiva de la información.
Se debe tener claro por qué y para qué estamos informando. A veces las peticiones de
informes esconden motivaciones no explícitas (segundas opiniones, dirimir diferencias
entre el colegio y la familia, etc.)
¿Qué se informa? Aquello que sea pertinente para el solicitante, a fin de que pueda
decidir adecuadamente lo que conviene hacer con el paciente
¿Cómo informar? De la manera más clara, usando las palabras más comprensibles,
incluyendo la información que permita optimizar la decisión que se tome.
Los informes que con mayor frecuencia solicita el colegio, son los siguientes:
psicopedagógicos, psicológicos, fonoaudiológicos y neurológicos. Los motivos
más frecuentes de solicitud de informes son el bajo rendimiento escolar, la falta de
atención y concentración, problemas específicos de aprendizaje, problemas de
lenguaje, de conducta y adaptación al colegio, rechazo escolar, etc.
Sólo de ese modo se podrán intentar estrategias compartidas (colegio, hogar, equipo
profesional), que se potencien y actúen sinérgicamente en beneficio del niño.
Los informes son los documentos escritos más utilizados para comunicarse entre los
distintos profesionales. A modo de ejemplo, a continuación aparece un diagrama de
posibles comunicaciones entre diferentes profesionales que pueden atender un caso.
Informe Psicológico
1. Datos de identificación
Se acostumbra anotar los datos en forma de listado. Puede ir subtitulado. Los datos
mínimos son:
-Nombre completo del niño
-Fecha de nacimiento
-Curso
-Escolaridad (no es lo mismo que curso: puede estar en 2º básico, p.e. y tener
x años de escolaridad.
-Establecimiento. Conviene señalar si el colegio es particular, subvencionado,
industrial, especial, etc.
-Fecha en que se realiza el proceso de evaluación. Si las sesiones han sido
varias, anotar el mes y el año y el número de sesiones
-Solicitado. Anotar la entidad (colegio u otra) o el nombre del profesional que
solicita el informe
-Areas evaluadas.
2. Motivo de consulta
Ejemplo:
“Derivado por el colegio para evaluación (se anota lo que corresponda) por
presentar bajo rendimiento escolar, dificultades en lectura y falta de atención y
concentración”
3. Antecedentes relevantes
Ejemplo
“Los datos aportados por el padre (la madre no asiste a las sesiones) indican
embarazo de alto riesgo por hipertensión arterial y problemas tiroídeos de la
madre durante la gestación. Parto normal de término, desarrollo psicomotor
normal. Dislalias y tartamudez tratadas. Asistencia a jardín infantil con
rendimientos normales. Las dificultades coinciden con el inicio del aprendizaje
de la lectoescritura. Antecedentes familiares de dificultades en lectoescritura
(padre y hermanos mayores). Actualmente repite curso. Escasa motivación y
dificulatdes de concentración. Problemas en hábitos de estudio”
4. Intervenciones anteriores
En este punto se consignan los resultados (si los hay) de intervenciones realizadas en
relación al motivo de consulta.
Ejemplo
“se realiza evaluación psicométrica en junio del año xxxx, con los siguientes
resultados: capacidad intelectual correspondiente a normalidad superior con
rendimientos interescalares heterogéneos. Desarrollo psicomotor normal.
Indicadores emocionales normales”
Este punto es importante ya que permite ponderar los resultados de las pruebas y del
diagnóstico. “Su rendimiento se vio interferido por....lo que permite hipotetizar que su
potencial puede ser mayor que el expresado por el niño en las pruebas”
6. Pruebas aplicadas
(La inclusión de este punto depende del destinatario del informe y de su objetivo)
7. Análisis de resultados
Este punto sólo se justifica si se envía el informe a algún colega que maneje la
información teórica correspondiente a las pruebas aplicadas. Por lo general, conviene
pasar directamente a Conclusiones.
8. Conclusiones
En este punto se anotan los resultados del proceso de evaluación, ya sea sólo en
forma descriptiva o bien con el diagnóstico con las respectivas especificaciones si
corresponde. Conviene usar una forma directa, clara y precisa. Se sugiere
personalizar , comenzando con el nombre del niño:
Ejemplo:
“De acuerdo al resultado de la evaluación, Juan Carlos presenta dificultades
específicas en el aprendizaje de la lectoescritura que interfieren
significativamente su rendimiento escolar...
9. Sugerencias
En este punto el profesional debe indicar cuál es el tratamiento que conviene al niño,
considerando las posibilidades y recursos con que cuenta la familia. (Terapia,
rehabilitación, recomendación de cambio de colegio, apoyo pedagógico, evaluación
diferencial, indicaciones para el profesor, derivación a otro profesional, indicación a la
familia en cuanto a formas de apoyo, etc. etc.
Este último punto es clave como aporte a la familia, a los otros profesionales y el
colegio.
Nombre y firma
Tan importante o más, que un buen diagnóstico y evaluación de las dificultades del
niño, es entregar sugerencias sobre la manera en que el colegio y el hogar puede
contribuir a mejorar la situación. Estas sugerencias, que por lo general van al final de
los informes, deben responder al diagnóstico y también a la realidad del niño en
cuanto a sus recursos, los recursos de la familia y los del colegio. Importante
preocuparse de la factibilidad de las soluciones que se propongan.
Se incluyen algunas sugerencias:
Hábitos de estudio
Disponer de un espacio físico adecuado, sin muchos distractores, para que realice
diariamente sus tareas escolares(televisor, radio, ruidos, conversaciones, etc. No
obstante, en ocasiones, un ambiente artificialmente deprivado, puede hacer que el
niño se predisponga negativamente hacia las tareas escolares. Más importante que un
ambiente demasiado austero, es una actividad atrayente.
Las rutinas de trabajo deben ser claras, conocidas y predecibles, sin variaciones
imprevistas
Brindar apoyo a las actividades escolares tales como pruebas, trabajos, tareas,
revisándolas y/o solucionando dudas (en ningún caso, impacientarse y hacer las
tareas por él..
Mostrarle sus errores y enseñarle a partir de ellos: señalar el error y estimularlo para
que autocorrija.
El contacto permanente con el profesor es clave para el éxito. Los padres no pueden
darse cuenta de cuáles son los aspectos más deficitarios del aprendizaje de su hijo. El
profesor debe indicar cuáles son las actividades más eficaces para ayudarlo a lograr
los objetivos del curso o nivel.
Aspectos afectivos
Realizar entrevistas periódicas con los padres a fin de analizar avances y/o retrocesos
en el aprendizaje
Crear al interior del curso grupos de apoyo escolar en donde los alumnos de mejor
rendimiento interactúen con los que tienen más dificulades
Dentro de la sala de clase, ubicarla cerca del profesor, del pizarrón y alejada de
elementos distractores tales como la puerta, la ventana, niños de comportamiento
disruptor, etc.
Orientar la atención del niño hacia el problema o la tarea que se le plantea, ayudarle a
descubrir y seleccionar la información relevante y a organizar y sistematizar esa
información
Tratamientos (ejemplos)
........
Informe Psicológico
2. Pruebas aplicadas
3. Antecedentes relevantes
4. Resultados
Al analizar cualitativamente estos resultados se aprecia que posee un muy buen nivel
de conocimientos adquiridos automáticamente a partir del ambiente, buena
coordinación y tolerancia ante tareas rutinarias y poco atrayentes, poseyendo también
una buena capacidad para utilizar su experiencia pasada y aplicarla adecuadamente a
las situaciones sociales cotidianas, buena capacidad de clasificación,
conceptualización y riqueza de vocabulario; su capacidad de concentración y
resistencia a la distracción disminuye conforme aumenta la dificultad de la tarea que
enfrenta. Las funciones de planeamiento, análisis visual y discriminación en forma
jerarquizada, así como su capacidad analítico/sintética, rapidez y precisión para
abordar un problema se encuentran en un nivel normal
5. Conclusión
6. Sugerencias
Nombre y firma
La interconsulta
Se trata de una comunicación entre profesionales, en que uno solicita al otro una
evaluación, una intervención especializada, un tratamiento, un informe de evolución,
instrucciones de manejo, etc. para un paciente en tratamiento.
El caso del niño con SDA que es enviado al neurólogo por el psicólogo, puede ser
ilustrativo de las situaciones no deseadas que se producen al enviar a los sin
comunicarse con el profesional:
Que no vayan
Que no sepan informarle al médico, cual es el motivo por el cual están ahí “nos
mandaron del colegio”, “el psicólogo nos dijo que nos tenía que hacer un
informe”
Que el neurólogo indique fármaco, pero que el psicólogo no se entere. La
familia decide no darle medicamento por temor, prejuicio u otro motivo
Que efectivamente le administren el fármaco y consideren que eso arreglará el
problema. No regresan donde el psicólogo para manejo ambiental del síndrome
Que el médico no indique medicamento, entonces la familia considere que el
niño “no tiene problemas”
Estos y muchos más son los que se originan al no haber vías de comunicación entre
los profesionales. Se espera que el profesional a quién se envía un paciente en
interconsulta, responda con una nota, un informe diagnóstico u otra forma. Aún cuando
no hay normas formales para redactar una interconsulta, e incluso puede ser
reemplazada por una simple nota escrita, o por un llamado telefónico, el tener un
esquema pre impreso, organiza de mejor manera la información que se quiere trasmitir
y se formaliza una vía de comunicación con el otro profesional
Ejemplo
MEMBRETE
Nombre o institución
que pide la interconsulta
Interconsulta
Si se trata de un adulto, los datos deben incluir estado civil, ocupación, etc.
II Antecedentes relevantes
Ej:
Inteligencia normal con rendimiento interescalar homogéneo
Mal rendimiento escolar desde el inicio de su escolaridad
La madre informa que el niño tuvo un desarrollo de lenguaje tardío y que
comienza a hablar después de los 3 años, aunque comprendía más de lo que
hablaba
Actualmente cursa segundo año básico y no ha aprendido a leer
Familia funcional
III Se solicita
En este punto se anota el motivo del envío del niño a interconsulta. En este caso,
podría ser:
Evaluación fonoaudiológica
Indicaciones de manejo
Informe de resultado de la evaluación
Otra forma:
IV Hipótesis diagnóstica
En algunos casos, resulta útil consignar en este punto cuál es la hipótesis de trabajo
que se maneja sobre la dificultad del niño, porque puede ser de utilidad para la
interconsulta. Se acostumbra ponerla con signos de interrogación.
El informe escolar
La comunicación con el colegio debe ser fluida y expedita de manera de sumar los
esfuerzos para mejorar el rendimiento y el bienestar psicológico del niño. En especial,
cuando se está realizando un diagnóstico, la opinión y la información que podamos
recabar desde el colegio, es un punto clave para realizarlo en buena forma.
Membrete
INFORME ESCOLAR
Señor profesor:
Curso...........................................................................................................
Nivel de rendimiento (respecto del grupo curso) (Marque con una cruz lo que
corresponde)
Fecha...........................................................................................................
Por favor, refiérase a cualquier problema o cualidad que tenga el niño y que no
aparezca en el
cuestionario---------------------------------------------------------------------------------------------------
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-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
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Si es posible, anote cuál considera usted que es la causa principal de los problemas
del niño
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3. Evaluación (INFORMAL) de Trastornos Específicos del Aprendizaje
Sin duda, esta pauta sólo puede diferenciar buenos de malos lectores (siempre en
relación a lo esperado para la edad) y describir ordenadamente las dificultades
lectoras que presenta el niño, pero no podría ser utilizada o interpretados sus
resultados en vías a hacer un diagnóstico diferencial de Dislexia.
Una vez que el niño ha leído en voz un trozo adecuado para su edad, se sugiere que
lea un trozo en voz baja, ya que esta actividad también entrega información importante
Nota: la palabra miscue (error) es considerada un buen error, cuando el niño sustituye
la palabra leída, por otra que tiene el mismo significado, por ejemplo, sustituye “zorzal”
(palabra difícil de deletrear) por pájaro, y continúa leyendo, sin perder la comprensión
de lo leído. Un error malo es el cometido por el niño que, por ejemplo, en vez de
zorzal, lee salsa, lo que está indicando que no está comprendiendo el texto.
Para seleccionar un trozo de lectura cuya complejidad sintáctica y semántica esté al
alcance del niño, se sugiere utilizar el libro de lectura o lengua que usa en el colegio
de acuerdo a su curso.
Se trata de una prueba clásica para detectar trastornos de lectura. Tiene la ventaja de
que puede evaluar nivel lector, en términos de que presenta las letras y combinaciones
de letras en una sucesión de complejidad creciente, y por lo tanto, el nivel al que
llegue el niño, será el máximo nivel del código que maneja (hasta el ítem 15)
La prueba tiene varias limitaciones. Entre ellas, se puede señalar que para poder
aplicar la segunda parte, el niño deberá manejar el código alfabético completo. En
segundo lugar, las palabras y sílabas se presentan descontextualizadas, por lo que el
niño no tiene oportunidad de autocorregir basado en la comprensión del contexto que
está teniendo.
En todo caso, la prueba es coherente con el sustrato teórico en el que se basa, y que
corresponde a la concepción teórica de la Dislexia, como resultado de un problema
perceptivo y de discriminación visual. La idea es que esta prueba se utilice como
complemento de la Pauta de Observación
Modo de usar:
Se le presenta al niño la página que comienza con las consonantes básicas del
alfabeto y se le pida primero que diga cómo suenan las letras de la primera línea y
luego, cómo se llaman las de la segunda.
La prueba consiste en pedirle al niño que copie, primero a velocidad normal y luego
pidiéndole que lo haga con la mayor velocidad que pueda, las frases que aparecen en
el encabezamiento de la hoja. La ejecución con exigencia de velocidad, no le permite
al niño corregir o emplear demasiado tiempo en la escritura, recurso que podría utilizar
para enmascarar errores.
Los puntajes obtenidos permiten situar al niño dentro de un puntaje estándar, lo que
permite comparar su desempeño con el de sus pares.
Se debe tener en cuenta que los errores asociados a dislexia (confusiones de letras,
omisiones, escritura en carro (con problemas en la unión o separación de palabras) no
se contabilizan como errores disgráficos
......
3.4 Evaluación de expresión escrita, calidad de la escritura y comprensión
Una forma simple y efectiva de evaluar las competencias de lectura y escritura del
niño, es pedirle que lea un texto de contenido simple (puede ser tomado de algún
texto de estudio del curso correspondiente). Un par de párrafos es suficiente. Mientras
lo lee en voz alta, se puede evaluar la calidad de la lectura oral. A continuación, se le
pide que cuente lo que recuerde de lo que leyó (se sugiere anotar literalmente lo que
dice). Una vez que concluya el relato, pedirle que lo escriba.
El análisis del relato que el niño hace de lo que leyó, al compararlo con el texto, me
informa de manera directa de cuánto es lo que comprende y retiene de lo leído. El
comparar el relato con lo que escribe, me permite evaluar cuanta información pierde al
expresar por escrito sus ideas.
Más que obtener resultados numéricos, lo que se busca es conocer los procesos
cognitivos del niño, la forma en que soluciona los problemas a los que se le enfrenta,
la forma en que explica lo que ha hecho, etc. Interesa fundamentalmente conocer las
explicaciones que el niño ofrece sobre los errores que comete, la fuerza de sus
argumentos, la capacidad y flexibilidad con que puede cambiar de opinión, la
capacidad de descentrarse y de tener un pensamiento reversible.
Las desventajas. Gran variabilidad entre las edades en que se alcanzan las diferentes
estructuras cognitivas. Pueden alcanzar hasta 3 y 4 años en algunos casos,
dependiendo de los niveles culturales y las experiencias vividas.
Bibliografía
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Adolescente. Santiago de Chile: Mediterráneo
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