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El reacondicionamiento de un pozo petrolero son todas las labores que

se llevan a cabo para cambiar o transformar el estado de un pozo productor,


esto sucede cuando se presentan situaciones donde se tenía un pozo
productor por flujo natural, pero que al tener un decrecimiento muy alto y
rápido de la presión necesita que se le aplique algún mecanismo de empuje
para que siga y se mantenga la producción, o en el mejor de los casos
aumente la producción.

Por ejemplo, un pozo se inició como pozo productor por flujo natural, pero al
pasar del tiempo se a convertido en un pozo a flujo por levantamiento
artificial por gas o bombeo hidráulico o mecánico, lo cual implica una
modificación del pozo, es decir, un reacondicionamiento.

Es importante mencionar que, este reacondicionamiento trae consigo


numerosos estudios y evaluaciones que resultan ser muy costosas y de una
manera u otra afectan la rentabilidad económica.

Por consiguiente, es necesario preparar programas cronológicos de


operaciones que describen la selección y la ejecución apropiadas de diversas
tareas, ajustadas a una secuencia técnica y seguridad requeridas para evitar
accidentes.

El reacondicionamiento propuesto puede ser sencillo o complejo, según las


condiciones y estado físico del pozo y el contenido del programa a seguir,
pero cabe destacar que un reacondicionamiento sencillo puede tornarse
complicado por imprevisiones.

Tareas para el reacondicionamiento de pozos:

• Estudio detallado y cuidadoso del archivo del pozo, para apreciar y dilucidar
sobre aspectos:

– Geológicos.
– Perforación original.
– Terminación original.
– Trabajos posteriores de limpieza, estimulación o reacondicionamiento.
– Estado físico actual y disposición de las sartas y otros aditamentos en el
pozo.

• Proposición y detalles del programa de reacondicionamiento y/o cambio de


estado del pozo, que deben incluir:

– Nuevos objetivos y razones técnicas y económicas que apoyan el programa.

– Detalles de las operaciones:

Tipo de equipo requerido, tiempo de las operaciones, inversiones y/o costos,


estado físico y condiciones mecánicas de las instalaciones dentro del pozo,
tipo y características de los fluidos requeridos para la limpieza,
reacondicionamiento o perforación, control del pozo, extracción de sartas y
otros aditamentos del hoyo, circulación del fluido y limpieza, recañoneos,
inyección de fluidos, forzamiento de arena cementación forzada,
taponamientos, corte y extracción de revestidor, abandono de la parte
inferior del hoyo original, desportillar el revestidor, perforación direccional,
(de largo alcance, horizontal o inclinada), registros, núcleos, revestidores,
cementación, pruebas y por último conclusión de las operaciones.

• Solicitudes previas de permisos ante los organismos gubernamentales, y


participaciones, reseñas, notas o informes posteriores sobre el resultado de
las operaciones.

Los trabajos, mencionados anteriormente, modifican las condiciones del:

– Pozo: entre estas actividades se encuentran el cañoneo, control de arena,


gas y agua, apertura o cierre de arenas, perforación de ventanas horizontales
o verticales, profundización, lavado de perforaciones, cambios de método de
producción, conversión de productor a inyector y viceversa.

– Yacimiento: entre estas actividades se encuentran las estimulaciones con


inyección alternada de vapor, acidificación de zonas, bombeo de químicos,
fracturamiento y recañoneo.
Cabe destacar que estas actividades se pueden realizar con o sin taladro,
esto dependerá de si el trabajo necesita el manejo de la tubería o si solo se
necesita hacer uso de una guaya fina.

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