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UNA CIENCIA ELUSIVA

La historia preocupante de la Investigación de la Educación
POR ELLEN CONDLIFFE LAGEMANN
CHICAGO: UNIVERSITY OF CHICAGO PRESS, 2000. 302 PP

¿Cómo ha llegado la investigación en educación a tener tal bajo estatus en el mundo académico y tan poca
influencia sobre la política y la práctica? Ellen Condliffe Lagemann, una historiadora de la educación y la actual
presidenta de la Fundación Spencer, se propone responder a esta pregunta en su libro profundo y esclarecedor,
una Ciencia Elusiva: La historia preocupante de la Investigación de la Educación . Ella relata cómo surgió la investigación en
educación como un campo de estudio en los Estados Unidos a finales del siglo XIX, cómo ha evolucionado a lo
largo del siglo XX y cómo varias personas, instituciones y las circunstancias históricas han contribuido a esta
evolución. Aunque organizado más o menos cronológicamente, una ciencia difícil de alcanzar es una historia
interpretativa y, como tal, Lagemann está menos preocupada con ser integral que con la presentación de un
análisis bien argumentado que pueda informar acerca de los problemas actuales que enfrenta la academia en la
educación.

Al contar su historia, Lagemann discute muchas de las principales figuras que ayudaron a dar forma al
campo - Stanley Hall, John Dewey, Edward L. Thorndike, Ellwood P. Cubberley, Lewis M. Terman, Ralph W.
Tyler, Jerome Bruner y James S. Coleman, entre otros. Las simpatías de Lagemann claramente descansan con
John Dewey y su visión de la educación y la investigación educativa como fundamentalmente social. Ella considera
como una oportunidad perdida que el fracaso de las ideas de Dewey de hacerse popular en el campo de la
investigación en educación y se pregunta qué habría pasado si hubiera permanecido en la Universidad de Chicago
y de manera sistemática analizó su trabajo en la Escuela Laboratorio que allí funcionaba. Lagemann también
documenta el papel que algunas instituciones centrales - por ejemplo, la Universidad de Chicago, profesores
universitarios, la Fundación Russell Sage, la Fundación Rockefeller, la Fundación Carnegie y el Instituto Nacional
de Educación - jugaron en la configuración del campo.

Varios temas se ejecutan a través de la historia de la educación de Lagemann. Una de ellas es la conexión
entre el estatus bajo de la investigación de la educación y la feminización de la enseñanza durante la segunda
mitad del siglo XIX. Gran parte de la baja condición de la investigación en educación, Lagemann afirma, se debe
a su asociación histórica con el “trabajo de mujeres” (p. 3). También, como un campo aplicado, tenía un estatus
menor en las instituciones de educación superior que los campos puros o teóricos.

Un segundo tema es el papel que tanto la búsqueda de estatus y de dinero jugaron en la formación del
carácter de la investigación en educación. Estas dos actividades sacaron investigadores de la educación (o
“educadores”) en diferentes direcciones. En la práctica, la búsqueda de estatus requería intentar hacer el campo
más “científico”. Esto llevó a un énfasis en la medición, el análisis cuantitativo y concepciones estrechas y
conductistas de la enseñanza. Investigadores de la educación también trataron de obtener estatus mediante la
promoción de un modelo de arriba hacia abajo de la transmisión del conocimiento. En este modelo, se produjo
una separación estricta entre los que producen el conocimiento acerca de la educación y los que lo utilizaban. Los
investigadores podrían generar el conocimiento y luego dispensarlo a los administradores, que luego lo utilizarían
para entrenar a los maestros en lo que deben hacer. Esta disposición jerárquica fue también de género, ya que la

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mayoría de los investigadores y administradores eran hombres y la mayoría de los profesores en servicio eran
mujeres.

Con el fin de pagar las cuentas, muchos investigadores de la educación, que trabajaban en una disciplina
mal financiados, también tuvieron que buscar financiación. Una forma de hacer esto era trabajar como consultor
para los distritos escolares y sus administradores. Oportunidades para este tipo de trabajo abundaba, ya que
durante la primera parte de los sistemas escolares del siglo XX se enfrentó la explosión de la matrícula de
estudiantes y el reto de educar a una población estudiantil cada vez más diversa. Algunos investigadores de la
educación de este modo se involucraron en asuntos más prácticos, aunque, curiosamente, esto también llevó a
estrechar actividades de investigación. En lugar de llevar a cabo la investigación que condujo a una visión
profunda de los problemas de la práctica educativa, educadores, inspirados en las ideas de gestión científica que
estaban en boga en la época, tendían a participar en la “contabilidad social”, o la colección censo-como de los
datos de las condiciones de la escuela. Este tipo de investigación fue más descriptiva que analítica.

Un tercer tema en el libro es el papel que los grandes acontecimientos históricos - Primera Guerra Mundial,
la Gran Depresión, la Segunda Guerra Mundial, la Guerra de Vietnam - jugaron en la configuración del curso de
la investigación educativa. Las dos guerras mundiales, por ejemplo, estimularon el interés en las pruebas de
inteligencia y de clasificación. Más tarde, la ampliación del papel del gobierno federal en la educación de la Gran
Sociedad creó una demanda de evaluación del programa.

Una ciencia Elusiva: La historia preocupante de la Investigación de la Educación no es perfecta. Por ejemplo, Lagemann
utiliza el término ciencia con poco rigor y no proporciona una clara definición de trabajo. Además, mediante la
organización del libro en torno a las carreras de algunos de los investigadores y los roles de las instituciones
particulares, Lagemann oscurece un tanto cambios más amplios en el campo que podrían no haber sido atribuible
a, o ejemplificado por, nadie en su reparto de personajes. El libro no explora, por ejemplo, la influencia que la
tecnología podría haber jugado en la evolución de la investigación en educación. ¿Cómo los cambios en las
herramientas disponibles para los investigadores han influido en los tipos de investigación que ellos han llevado a
cabo? En el libro tampoco, sino hasta en el final y más bien superficialmente, se discute cómo los cambios en las
concepciones del conocimiento afectaban la educación y toda la investigación en ciencias sociales. Por último, en
ciertos momentos el lector puede sentir que el análisis se basa en un grupo relativamente pequeño de personas o
instituciones. Quizás estos eran de hecho los líderes que dieron forma al campo durante sus primeros años. Sin
embargo, uno se pregunta qué habría resultado de un análisis de temas de tesis o artículos de revistas y cómo
cambiaron durante las décadas. ¿Qué tipo de investigación se estaban llevando a cabo fuera de las pocas
instituciones de élite?

Por supuesto, escribir cualquier historia consiste en hacer selecciones y trazar límites. Como Lagemann
misma reconoce, podría muy bien haber escrito una historia diferente de la investigación educativa. Las personas
interesadas en la historia de las disciplinas académicas, en la historia de Estados Unidos en general, o en la historia
de la educación superior deberían estar agradecidos de que ella escribió la que ella hizo.

EPL

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