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Introducción

El principal instrumento de cualquier músico es su cuerpo. Cuando se está


tocando, varios músculos entran en juego siendo así una actividad Física. Por
lo tanto, debemos fijarnos y poner la misma atención en este aspecto como lo
hacemos con los dedos de nuestra mano izquierda, o como tomamos nuestro
arco, obteniendo así una mayor conciencia de nuestro cuerpo.

Desde la Antigüedad se ha relacionado a la música con lo espiritual. Se ha


usado para prácticas, ceremonias, rituales pero también para apreciarse como
se hace en una sala de concierto, incluso para diversión en alguna fiesta. Ya
sea sagrada o profana, “académica” o folclórica, para un concierto o para una
fiesta, el músico está bajo una rutina de estudio para poder dominar su
instrumento. Esto significa que pasan algunas horas en determinada posición
repitiendo movimientos, accionando músculos del cuerpo que de no realizarse
con cierto cuidado, puede provocar dolores en distintas partes del cuerpo o
consecuencias negativas a la larga.

Realizar una rutina de ejercicios para calentar y estirar puede, además de


evitar dichas afecciones, mejorar el rendimiento a la hora de tocar. Con estos
ejercicios podemos liberar ciertas tensiones y estar más dispuestos físicamente
para estudiar, pudiendo de esta manera, concentrarnos en cuestiones técnicas e
interpretativas.

El objetivo que se pretende alcanzar con ésta investigación es implementar un


programa que pueda ser impartido en cursos, conferencias o talleres para
músicos consiguiendo de esta manera mejorar su práctica instrumental.

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Los temas a abordar son los siguientes:

- Conceptos básicos de anatomía. Es importante conocer los distintos


componentes anatómicos que funcionan a la hora de tocar.

- Recomendaciones para la práctica instrumental. Algunas veces se


pasan por alto detalles aparentemente sin importancia que en realidad
repercuten considerablemente a la hora de estudiar. Aquí se enlistan
algunos consejos para mejorar los tiempos de estudio.

- Ejercicios para mejorar el rendimiento. Hacer ejercicios de respiración


así como calentar y estirar nuestros músculos nos prepara para estudiar
y/o tocar.

- Beneficios del ejercicio físico. Realizar una actividad física como bailar
o practicar un deporte, trae beneficios a los distintos sistemas de nuestro
cuerpo.

Las obras en las que se basó esta investigación se encuentran al final.

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1. Conceptos básicos de anatomía

A la hora de practicar un instrumento, se echa a andar un complejo proceso en


el que intervienen los músculos, el sistema nervioso y las articulaciones, con
el fin de lograr movimientos requeridos por la ejecución de un violín o viola.

Sería de gran ayuda saber cómo estos elementos interactúan en tal proceso y
entender las posiciones que el cuerpo adopta, muchas de las veces forzadas.
La Fisioterapeuta Esther Sardà Rico, en su libro “En forma, ejercicios para
músicos” explica por separado dichos elementos con la finalidad de conocer
un poco mejor nuestro cuerpo:

1.1 Posición anatómica: ejes y planos

Se llama posición anatómica a aquella en la que el individuo se encuentra de


pie, con los brazos a un lado del cuerpo, las palmas de las manos mirando
hacia adelante; los ojos y la cabeza miran hacia el frente y los pies con sus
puntas levemente separadas.

De igual manera, Esther sugiere una forma de dividir al cuerpo en tres planos:

- Plano Sagital: el cuerpo se divide en dos partes, izquierda y derecha.

- Plano Transversal u horizontal: el cuerpo se divide en una parte


superior o craneal y una inferior o caudal.

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- Plano Frontal: divide al cuerpo en una parte anterior o ventral (para
entenderlo, comprende la nuca, la espalda, los glúteos etc.)y una
posterior o dorsal (pecho, abdomen etc.)

Partiendo de estos tres planos se definen tres ejes respectivamente, eje


transversal, longitudinal y sagital. Estos sirven de referencia en todos los
movimientos articulares, es decir, aquellos movimientos que realiza cada
articulación. Dichos movimientos son flexión (doblar) o extensión (estirar),
abducción (separar) o aducción (juntar) y la rotación externa e interna. No
todas las articulaciones realizan tales movimientos. Por ejemplo, el codo solo
puede doblarse (Flexión) o estirarse (extensión), pronar (palma hacia abajo) y
supinar (palma hacia arriba), mientras que el codo realiza la flexión –
extensión, la abducción – aducción (en separar y juntar los brazos) y las
rotaciones (como si se llevara la mano a la nuca y a la espalda). Estos
movimientos son los que intervienen en la práctica instrumental y es
importante saberlo porque muchas veces son movimientos combinados.

La posición anatómica, los ejes y los planos descritos, permiten entender el


espacio tridimensional de nuestro cuerpo sobre el cual nos movemos.

1.2 El Aparato locomotor

Locomotor proviene de las palabras latinas locus que significa “lugar” y motor
“el que mueve”. Esqueleto (refiriéndose a los huesos y a sus articulaciones) y
sistema musculoesqueletico son otras formas de denominar al aparato
locomotor.

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Los elementos que lo conforman son los huesos y las articulaciones formando
el esqueleto y los músculos que permiten que los segmentos corporales se
muevan.

Con segmentos corporales se hace referencia a las partes del cuerpo que por sí
mismos son una entidad. Por ejemplo los brazos y las piernas.

Esther define al aparato locomotor como “un sistema de palancas donde la


fuerza motriz serían los músculos, las articulaciones los puntos de soporte y
los huesos los diferentes brazos de palanca donde se apoya el peso de los
diversos segmentos corporales.”

1.3 Los huesos y las articulaciones

El esqueleto se compone de unos 208 huesos y su función es darle rigidez al


organismo así como también proteger órganos vitales como son cerebro y
corazón. El punto de unión entre dos huesos da lugar a las articulaciones. No
todas tienen la misma movilidad. Por ejemplo, la articulación del hombro es
de las más móviles del cuerpo humano, mientras que las que se encuentran
entre los huesos del cráneo casi no tienen movilidad.

Las articulaciones comúnmente se conforman de:

- Las superficies articulares, que son las partes óseas que se relacionan
entre sí. Están recubiertas por el cartílago articular, que protege y evita
el roce directo entre los dos huesos.

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- La cápsula, en donde se produce el líquido sinovial, que se encarga de
lubricar los cartílagos para facilitar el movimiento.

En las articulaciones también se pueden encontrar los ligamentos, que son en


su mayor parte fibras de colágeno y que tienen una capacidad de estiramiento
limitada, por ejemplo en la rodilla.

Se puede decir que este es el modelo de articulación más común. De esta


manera en una mano tenemos más de veinte articulaciones con su respectiva
cápsula y su sistema de ligamentos para dar solidez pero a la vez movilidad.
Son las articulaciones las que tienen una intensa implicación a la hora de tocar
el instrumento.

1.4 Los músculos y la contracción muscular

Los músculos son unas estructuras fibrosas que gracias a su capacidad de


contraerse permiten el movimiento.

El sistema muscular se compone de 400 músculos llamados esqueléticos o


estriados y representan el 40% del cuerpo. Otro 10 % es músculo liso y
cardiaco. Se usa el término estriados porque cuando son observados bajo el
microscopio se aprecian estrías. Los músculos lisos son de contracción
involuntaria y los estriados, de contracción voluntaria.

El músculo está formado por fibras musculares. Este tipo de células son
alargadas, cilíndricas y se agrupan para formar el músculo. La fibra muscular
a su vez, se conforma por miofibrillas. Son éstas las que permiten la
contracción del músculo y están compuestas por dos tipos de filamentos, unos
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más gruesos, que son de miosina, y otros más delgados que son de actina.
Ambos están intercalados.

Cuando estos elementos son accionados por un estímulo nervioso, los


filamentos delgados se deslizan sobre los gruesos reduciendo su longitud. La
contracción simultánea de los elementos hace que se acorte la fibra muscular y
esto da como resultado la contracción muscular.

El sistema musculoesquelético, bajo el control del sistema nervioso permite el


movimiento del cuerpo. La interacción entre varios grupos musculares, huesos
y articulaciones es la que permite mantener cierta postura, así como coordinar
los movimientos voluntarios.

1.5 El Sistema nervioso

Es una red de estructuras especializadas que controlan y regulan el


funcionamiento de órganos y estructuras corporales y, a su vez, coordinan su
interrelación con el entorno. En el se encuentra el sistema nervioso central y
periférico. El central está protegido por el cráneo y la columna vertebral:
encéfalo y médula espinal y se encarga de las acciones voluntarias. El
Periférico está constituido por nervios que se distribuyen en todo el cuerpo.
Las acciones involuntarias están a cargo del sistema autónomo.

Continuando con la definición de Esther, si los músculos proporcionan la


fuerza para mover las palancas del sistema esquelético, el sistema nervioso es
el que determina el tipo de palanca y la duración de la fuerza que es ejercida.

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El sistema nervioso juega un papel imprescindible a la hora de practicar o
tocar el instrumento, ya que, a través de la vista, el oído y el tacto se recoge
información y se coordina con la de los receptores musculoesqueleticos.

2. Recomendaciones para la práctica musical

Lo primero a tener en cuenta a la hora de practicar nuestro instrumento, es que


la principal herramienta es el cuerpo. También se debe estar consciente de
algunos elementos como lo son la postura, el equilibrio, etc. Todo con el fin
de mejorar el rendimiento físico y disminuir el riesgo de lesiones.

A continuación se presentan algunas recomendaciones para una mejor


práctica instrumental:

- Realizar ejercicios de calentamiento. Al principio sin instrumento para


que el cuerpo se prepare. Dichos ejercicios se verán con más detalle en
el tema siguiente.

- Iniciar con ejercicios suaves. Pueden ser escalas para que el cuerpo se
vaya habituando. También puede ayudar incluir ejercicios de
respiración.

- Dedicar tiempos de descanso. Pueden ser 10 minutos de descanso por


50 de estudio, o 15 de descanso por 45 de estudio, esto depende de cada
persona. En estos tiempos es útil cambiar de posición, moverse y
realizar ejercicios de estiramiento.

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- Repartir horas de estudio. Por ejemplo: si se estudian 4 horas, estudiar
2 en la mañana y 2 en la tarde. Esto ayudará a la recuperación muscular.

- No estancarse en un pasaje. Esto quiere decir que si no sale bien un


fragmento musical se evite repetirlo y repetirlo. Esto se convierte en
esfuerzos mal dirigidos ocasionando fatiga y deterioro neuromuscular.

- Incremento progresivo del tiempo de práctica. Si se ha tomado un


periodo de descanso, se puede empezar a estudiar de 15 a 30 minutos
(podría ser menos, depende de la persona) el primer día e ir aumentando
poco a poco. De igual manera, si es necesario incrementar horas de
estudio, se recomienda no hacerlo bruscamente sino progresiva.

- Incorporar progresivamente los cambios. Si se va a modificar la


técnica, se va a agarrar de manera distinta el arco, cambiar de apoyador,
acomodar la mano izquierda en el diapasón etc., se recomienda hacer
gradualmente y así evitar varios problemas.

- Realizar ejercicios de estiramiento al final. Cuando se acaba de estudiar


se recomienda estirar para que los músculos se puedan recuperar.

- Practicar alguna actividad física. Las actividades que se pueden


realizar sin afectar la elasticidad, agilidad o fuerza en las manos se
explicarán más adelante. Es recomendable realizar como complemento.

- Tener una alimentación equilibrada y una hidratación óptima.

- Respetar un mínimo de horas de descanso. Pueden ser 7-8 al día.

- Tomar un día de descanso.

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3. Ejercicios para mejorar el rendimiento

Cuando se practica, el músico realiza una actividad física en donde intervienen


distintos factores como son flexibilidad, fuerza y coordinación. Entrenarlos
ayuda a mejorar el rendimiento, incrementar el conocimiento corporal y evitar
lesiones. Para esto, Esther Sarda Rico propone distintos ejercicios
dividiéndolos en cuatro grupos, ejercicios de respiración, calentamiento,
estiramiento y coordinación.

3.1 Ejercicios de respiración

Son importantes ya que pueden mejorar la oxigenación de los tejidos. Se


pueden realizar en cualquier momento y se recomienda antes de la práctica
con la finalidad de prepararse físicamente. Se recomienda también realizar
cinco veces cada ejercicio. Al principio puede causar un mareo a causa de la
hiperventilación, por eso es mejor comenzar de manera suave los primeros
días e ir incrementando el número de respiraciones conforme pasen los días.

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Para realizar dichos ejercicios el músico se debe colocar boca arriba y con las
rodillas flexionadas, para favorecer la distensión abdominal y facilitar el
patrón diafragmático.

- Patrón adbominodiafragmático. Se coge aire por la nariz y se lleva al


abdomen. Éste se infla como un globo por las vísceras que el diafragma
empuja hacia arriba. El aire se expulsa lentamente por la boca
entreabierta regulando su salida con los abdominales.

- Patrón costal inferior. Se toma aire por la nariz y se dirige a las


costillas inferiores. La espiración se hace igual que el patrón anterior.

- Patrón costal superior. En éste patrón, el aire se lleva la parte superior


del tórax.

- Respiración global. Consiste en realizar una respiración lenta, profunda


y sin interrupción pasando por los tres patrones. Se coge aire por la
nariz, se lleva al abdomen, se pasa a las costillas más bajas y finalmente
a la zona alta del tórax. La espiración se lleva a cabo de igual manera.
El abdomen desciende, luego se cierran las costillas inferiores y por
último se baja parte alta.

3.2 Ejercicios de calentamiento y estiramiento

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La finalidad de estos ejercicios reside en preparar físicamente (articulaciones y
musculatura) al músico, con el propósito de aumentar la efectividad y reducir
el riesgo de lesiones.

Con una rutina previa de calentamiento se podrá:

- Aumentar la temperatura muscular interna.

- Aumentar el flujo sanguíneo.

- Preparar el sistema musculotendinoso para poder realizar tensiones


máximas y prolongadas.

- Adecuar el sistema musculoesqueletico a la rapidez de ejecución que el


instrumento requiere.

Estos ejercicios se hacen antes de tocar el instrumento y se puede hacer de


ocho a diez veces cada uno. Los ejercicios se deben hacer de manera suave y
no deberían provocar dolor ni cansancio.

1. Subir y bajar los hombros. Los dos al mismo tiempo y alternativamente;


arriba – abajo, arriba – abajo.

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2. Con el codo completamente estirado; la mano izquierda se coloca sobre
la palma de la mano derecha tirando hacia atrás los dedos y la muñeca;
el pulgar se mantiene separado. Se puede descender hasta tirar de la
punta de los dedos. En este ejercicio también se debe notar el
estiramiento en la cara
interna del antebrazo, de la muñeca
y de los dedos. Repetir en el lado
contrario.

3. Se estira completamente el codo derecho con los dedos cerrados y con


la ayuda de la otra mano se flexiona la muñeca. Esta vez el estiramiento

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se puede sentir en la cara externa del antebrazo, en la muñeca y en los
dedos. También realizar en el lado contrario.

4. Con las palmas mirando hacia arriba y los brazos a 90° con respecto a la
vertical (los codos pegados al cuerpo), llevar el dedo meñique al interior
y el pulgar hacia el exterior.

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5. Cerrar los dedos de las siguiendo este orden: primero, flexionar las
llamadas falanges proximales, segundo, los nudillos y tercero las
últimas falanges. Éstas últimas son llamadas articulaciones
interfalángicas distales. El pulgar queda separado en cada flexión. Para
desdoblar los dedos se puede seguir el orden inverso.

6. Girar los dedos cinco veces en cada sentido con la ayuda de la otra
mano. Este ejercicio es bueno para poner a punto las articulaciones de
los dedos.

7. Con la palma de la mano mirando hacia arriba y la ayuda de la otra


mano jalar hacia abajo cada uno de los dedos. Es importante notar el
estiramiento en cada dedo

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8. Cruzar los brazos por detrás del cuerpo con los codos estirados e
intentar tirar suavemente hacia atrás notando el estiramiento en los
pectorales y los brazos.

9. Se sitúa la cabeza en posición recta, mirando al frente, se gira a la


izquierda y se inclina con el mentón pegado al cuerpo para después
girar a la derecha y finalmente volver a la posición inicial.

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10. Se gira la cabeza hacia la derecha mientras con la mano derecha al
nivel de la barbilla ayudamos suavemente a girar un poco más la
cabeza. Se hace lo mismo para el otro lado.

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4. Beneficios del ejercicio físico

Muchos músicos pueden creer que al realizar una actividad física pueden
entorpecer sus músculos como son perder flexibilidad en sus manos y brazos,
o rapidez en sus dedos. Pero no es así. De hecho, la práctica de la actividad
física puede dar bastantes beneficios en los distintos sistemas del cuerpo.
Esther Sardá dividió estos beneficios en dos apartados: beneficios generales,
que son para cualquier persona independientemente de la profesión a la que se
dedique, y beneficios específicos al músico.

4.1 Beneficios generales

- Mejora de la salud y de la calidad de vida en general. La persona se


puede llegar a sentir más optimista en el trabajo, en sus relaciones
sociales etc.

- Influye positivamente en el metabolismo y en los sistemas


cardiovascular, respiratorios, nervioso y locomotor.

- Refuerza el sistema inmunológico reduciendo el riesgo de enfermarse.

- Disminuye el estado nervioso y las tensiones.

- Refuerza la capacidad de concentración y agudiza la capacidad


intelectual, nos sentimos más vivos y despiertos.
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- Mejora la condición física y motriz puesto que hay un incremento de las
cualidades físicas básicas.

- También ayuda a conservar un buen aspecto físico.

4.2 Beneficios específicos en el músico

Con respecto al aparato locomotor:

- Disminuye el riesgo de lesiones y patologías específicas del sistema


muscoesquelético del músico, puesto que refuerza las diferentes
estructuras: huesos, articulaciones, ligamentos, tendones y músculos.

- Disminuye los efectos de: la sedestación excesiva, la carga del


instrumento así como también la posición ergonómica que exige. Esto
es porque el cuerpo está más preparado para soportar cargas externas.

- Se optimizan los movimientos. Se puede estar tocando por más tiempo


y con mejor calidad de movimientos, economizando energía. La
ejecución será más fluida y fácil, porque se habrá aumentado en
resistencia, fuerza, flexibilidad y velocidad.

Con respecto al aparato cardiovascular:

- Recuperación más rápida del cansancio. Las adaptaciones que se


consiguen con el ejercicio físico provocan una disminución de la
frecuencia cardiaca. La explicación a esto es que hay un aumento de las
paredes y cavidades del corazón, que tiene más fuerza y más capacidad
para impulsar sangre al organismo. En consecuencia hay una mejora en
la distribución del oxígeno y de sustancias nutritivas. Para el músico,

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estas adaptaciones permitirán aumentar su capacidad de resistencia y
recuperación.

Con respecto al sistema nervioso:

- Disminución del Trac. Esther define al “Trac” como el aumento de la


tensión muscular, alteraciones en la coordinación, disminución en la
concentración, temblores, boca seca, sudoración, pulso acelerado,
náuseas, etc. El ejercicio actúa sobre el sistema nervioso disminuyendo
la tensión nerviosa y los síntomas de ansiedad que pueden aparecer en
estar en un escenario.

- Aumento de la calidad y del tiempo de concentración. Eso se debe a la


distribución más ágil de oxígeno dentro del organismo y al hecho de
que los pulmones tengan más capacidad de ventilación.

- La técnica se puede ver beneficiada. El ejercicio, al incidir sobre el


sistema nervioso mejora la coordinación, la agilidad y la velocidad de
reacción, con lo cual la técnica se refuerza y consolida.

Otro beneficio es que al estar en mejores condiciones, mente y cuerpo son


más receptivos y se encuentran mejor preparados para recibir una educación
corporal, es decir, mejora la conciencia corporal.

4.3 Deportes y actividades recomendadas

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A continuación algunas actividades físicas recomendadas con el objetivo de
obtener y/o mantenerse en forma.

- Pueden practicarse deportes como natación, caminar, correr o ciclismo.

- Se puede obtener el mismo beneficio bailando. Baile folclórico, jazz


entre otras.

- Realizando actividades de gimnasia suave como el yoga, técnica


Alexander, taichí o antigimnasia.

- También sirven las actividades en la naturaleza como lo son el


senderismo, paseos en bicicleta. Viviendo en la ciudad puede ser
complicado pero si se tiene la oportunidad debería hacerse, ya que
también se acerca a la naturaleza.

Cada una de estas actividades, como ocurre con el instrumento, requiere de


grupos musculares distintos, porque somete al cuerpo a esfuerzos diferentes,
sin embargo todas estas actividades tienen una particularidad en común y
benéfica para el músico: son actividades globales, implican un gran volumen
de masa muscular y contribuyen a la tonificación muscular.

Para las personas con exceso de peso, con problemas de desviaciones en la


espalda, que se estén recuperando de alguna lesión, la natación y la bicicleta
son recomendadas porque ofrece la posibilidad de ejercitarse sin soportar el
peso.

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4.3.1 Recomendaciones generales para la práctica de la actividad
física

- Escoger una actividad que sea estimulante, que sea de nuestro agrado, e
incluso considerar la opción de realizarla en grupo.

- Es importante que la actividad a realizar se ajuste a las características


personales, edad, morfología del cuerpo, etc.

- La práctica debe ser regular. Unas tres veces por semana y sin largos
periodos de inactividad para no perder los avances.

- Aumentar gradualmente las exigencias de la actividad según se vaya


adaptando el cuerpo evitando llegar a una fatiga excesiva que no
permita la recuperación total.

- Procurar una buena técnica en la actividad. Con esto, se obtienen


mayores beneficios y en ningún momento será nociva.

- Calentar antes y después del ejercicio. No empezar ni parar de golpe.

- Hidratar muy bien el cuerpo con agua o preparados isotónicos.

- Para llevar a cabo los puntos anteriores de la mejor manera, se


recomienda consultar antes a alguien que sepa acerca de la actividad
elegida, como puede ser un guía, profesor o entrenador.

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Conclusiones

Como músicos tenemos que entender que tocar nuestro instrumento requiere
del funcionamiento conjunto de aparatos y sistemas de nuestro cuerpo. De
igual manera que un bailarín o un deportista cuida de su cuerpo, el músico
también debería empezar a tener conciencia corporal, el hecho de que el
estudio no requiera de actividades como son correr o saltar no significa que no
sea un esfuerzo físico el que se realiza a la hora de tocar.

El ser músico no tiene que ser sinónimo de sedentarismo, complementar


nuestro estudio con una actividad física puede reforzar aquellas zonas que
ocupamos para sostener el instrumento o para tener una buena postura por
ejemplo.

La investigación logro el objetivo inicial; el de conocer y formar una rutina de


ejercicios enfocados a violinistas / violistas.

Bibliografía y fuentes consultadas

- Fábregas Molas, Silvia; Rosset Llobet Jaume

o A Tono: Ejercicios para mejorar el rendimiento del músico.

o Ed. Paidotribo.

o Barcelona 2005.

- Sardó Rico, Esther.

23
o En Forma, ejercicios para músicos.

o Ed. Paidos.

o Barcelona 2003.

- Suárez Rivera, Rafael.

o El calentamiento; Juegos y ejercicios motivantes para empezar


las clases y los entrenamientos.

o Ed. Gymnos.

o Madrid.

Índice

Introducción.......................................................................................................1

1. Conceptos básicos de anatomía...................................................................3

1.1 Posición anatómica: ejes y planos............................................................3

1.2 El Aparato locomotor................................................................................4

1.3 Los huesos y las articulaciones.................................................................5

1.4 Los músculos y la contracción muscular..................................................6

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1.5 El Sistema nervioso..................................................................................7

2. Recomendaciones para la práctica musical.................................................8

3. Ejercicios para mejorar el rendimiento......................................................10

3.1 Ejercicios de respiración.........................................................................10

3.2 Ejercicios de calentamiento y estiramiento............................................11

4. Beneficios del ejercicio físico....................................................................17

4.1 Beneficios generales...............................................................................17

4.2 Beneficios específicos en el músico.......................................................18

4.3 Deportes y actividades recomendadas....................................................19

4.3.1 Recomendaciones generales para la práctica de la actividad física.....20

Conclusiones....................................................................................................21

Bibliografía y fuentes consultadas...................................................................22

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