rancy y Mario no se conoc�an hasta que la inseguridad en la capital los uni�.

Regresaron al sitio del robo, reconstruyeron los hechos y se dieron las gracias.

Mario, el guardaespalda que abati� a un delincuente en el norte de Bogot�, record�

que su instinto de ayuda sali� a flote cuando vio la escena.

�En el momento que yo estoy dentro de la camioneta y yo veo qu� hay dos personajes
dentro del carro, pues yo me bajo sin saber qu� era una mujer, yo me bajo a
auxiliar...�, explica el hombre.

Reconoce que el delincuente se abalanz� hacia �l e intent� advertirle que se

detuviera. Primero le grit�, pero al ver que no tuvo efecto, hizo un disparo hacia
el piso. Como el sujeto no se deten�a, opt� por dispararle.

�Mi familia, mis hijos, van a estar siempre, siempre, siempre van a estar
agradecidos�, le dijo Francy en el sitio. Lo abraz�, se le escaparon las l�grimas y
expres� que no tiene c�mo pagarle por haberla auxiliado cuando era v�ctima de la
inseguridad.

Una semana despu�s del hecho, Mario solo recuerda haber recibido muestras de afecto
y cari�o, como la de una mujer en estado de embarazo: "me dec�a, �hey, joven, yo
estoy embarazada y estoy esperando un ni�o y le estaba buscando nombre. Quiero que
sepa que se va a llamar Mario�".

Por muestras como estas asegura con orgullo que no dejar� de ser escolta y volver�a
a reaccionar de la misma manera si debe hacerlo.