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Nombre: Anthony Romero Fecha: 26/01/2018 Hora: 9:30-11:30

La Soledad en la vida y la Muerte

Tras el sucumbir de nuestra vida las acciones quedan vivas, la soledad nos impulsa a
conseguir objetivos y el caso del iraní que vive 16 años en una soledad parcial

Al culminar la vida de una persona, se dirige tumba, se lleva consigo recuerdos


experiencias, conocimientos, su forma de pensar y ser. En cambio, otorga las obras que
realizo en su paso por este mundo, todas aquellas acciones plasmadas en el presente y en
nuestra memoria, permite conmemorar, saber como fue, lo que quería y hacia donde se
dirigía. Nuestro legado es el que define cuanto mas viviremos, si en vida realizamos
acciones honorables, fuimos personas extraordinarias, cambiamos el entorno de manera
muy notable sea para bien o mal, no quedaremos sepultados pues la historia registra
nuestros actos extraordinarios y vivirá hasta el fin de la humanidad. Personajes como
Hitler, Albert Einstein, Isaac Newton, a juzgar por sus acciones, siguen vivos en nuestras
mentes y nuestro presente. Por ello mientras vivimos nadie quiere morir olvidado.
La soledad de nuestra tumba nos asusta por ello se trabaja para sacar provecho a nuestra
vida, marchar hacia un objetivo donde realicemos algo que no perezca, e
independientemente de lo que hagamos cada detalle queda registrado, así como el relato
de Clavito del libro El alero de las palomas sucias, donde este personaje muere
accidentalmente en estado de embriagues dentro de una protesta, la gente pensó que
también era un protestante y fue enterrado como héroe.
El aeropuerto donde un iraní queda atrapado por su estatus legal vive 16 años en un
aeropuerto, rodeado de gente que iba y venia, incluso no hablaba con nadie por un mes,
hizo de su diario vivir una rutina hasta que un día cayo enfermo y se marchó. Huilo tuvo
la oportunidad de conocerlo y relata que este haya tenido tiempo para observar el
manicomio que es el mundo, gente que va y viene, en su entrevista el iraní dice: Mire
detrás de usted, somos muchos cada vez más.

Independiente de la vida o la muerte queremos estar acompañados, esta se determina por


nuestro legado y nuestras acciones en vida.

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