Materia: Filosofía de la cultura. ID:3411818. Profesor: Christian Duecker García “Comentario sobre la Marcha” En el contexto que se pudo vivir en la marcha que tenía por nombre o lema “justicia y paz” pues causo mucha indignación entre los miles de personas jóvenes que cursamos la universidad, ya que nuestra compañera había sido privada de su libertad y aparte de su vida. Fue un hecho que marco a toda la comunidad universitaria de todas las universidades. Durante la marcha se veía un ambiente pues triste, de empatía, de sentir por el otro, me movió el sentir que los jóvenes que fueron pues fueron por su propia cuenta y no eran mandados ni nada de eso. Nuestra generación sintió dolor y no se dejó llevar por esta antipatía que poco a poco nos está ganando. Y cada paso que se daba en la marcha era un signo de ¡ya basta! que se dirigía hacia el gobierno, fue un momento de unidad y un momento de sentir empatía por nuestra compañera. Se vivió un momento también religioso ya que nuestra universidad comparte esta espiritualidad católica y también se dejaron ver estos momentos de solidaridad hacia la familia de nuestra compañera. Me pareció que fue un buen impulso de los jóvenes que la organizaron, pero siento que la universidad pudo haber organizado mejor y haber dado un mensaje más claro hacia los universitarios. El mensaje que compartían los que estaban en el estrado pues era un mensaje que motivaba y que seguía dando impulso a seguir de pie ante las mil adversidades que como jóvenes estábamos viviendo. Me gusto uno que otro mensaje que compartían algunos compañeros de la facultad de ciencias políticas, en donde nos hacían sentir culpables, no por el hecho de “mara” si no por el sentido que todos tenemos culpa de alguna vez corrompernos y de tener una mejor toma de decisiones, una mejor vida, una vida más responsable y no por hacer de menos a nuestra compañera fallecida si no que a veces esto nos ayuda a llevar una vida más tranquila y claro más segura, aunque en el contexto que vivimos nada nos asegura nuestra seguridad. Como jóvenes tenemos este peligro de poner en riesgo nuestra vida y nuestra juventud.