 El matrimonio tiene importantes consecuencias biosociales en adultos y niños

(conclusión 8).

El estudio demuestra que el matrimonio tiene consecuencias biológicas en adultos y niños.

Por ejemplo, los hombres casados, especialmente si son padres, cuentan con menores
niveles de testosterona y cortisol lo que hace que su comportamiento sea más social.
Adicionalmente un estudio realizado por algunos psicólogos, entre ellos Bruce Ellis,
concluyó que las adolescentes cuyos padres no son casados son más propensas a tener
una menstruación temprana, actividad sexual prematura y embarazos adolescentes. De
igual forma el estudio pudo encontrar que las adolescentes que viven con un hombre que
no tenga algún vínculo familiar con ella tienden a tener una menstruación aún más
temprana, esto se debe a que las feromonas masculinas del entorno de la adolescente
aceleran (si el hombre con el que vive no es el padre) o retardan el desarrollo sexual de la
misma. A partir de esto también se pudo concluir que estas asociaciones están
influenciadas por la genética de la estructura familiar.

 Las madres casadas tienen tasas más bajas de depresión que las madres
solteras o unidas. (Conclusión 25).

Estudios demuestran que las mujeres casadas son más fuertes en cuanto a los trastornos
de depresión u otras enfermedades ya que cuentan con el apoyo de su pareja para superar
cosas tales como la crianza de sus hijos u otras cosas familiares como deudas o variedad
de problemas, además, estas cuentan con un bienestar mental y emocional. En cuanto a
las mujeres solteras, en su mayoría llegan a manejar un nivel de estrés muy alto que
produce diversos trastornos depresivos, además la ausencia de un apoyo sentimental como
lo son los hijos o el esposo, puede traer como consecuencia diversidad de problemas tanto
en la salud como en la parte psicológica. Por otra parte las madres solteras, llegan a tener
diversos problemas en la crianza de sus hijos en cuanto a la parte económica.

CONCLUSIÓN
Se puede concluir que con cierta probabilidad, los divorcios o separaciones de los padres
en un matrimonio pueden afectar la calidad de vida de los hijos y de la pareja misma. Es
así como el divorcio, tiene consecuencias a nivel familiar, social, emocional y mental en
cada individuo. Está comprobado que las personas que no forman parte de un hogar
estable, son más propensas a verse involucradas en problemas de diversa índole, además,
de que su probabilidad de éxito personal se ve seriamente afectada.

Por otro lado, es evidente que los niños que se crían en medio de sus padres son menos
propensos a enfrentar situaciones de abuso y situaciones que están contra la dignidad
humana. Dado que la familia bien constituida representa un fundamento para el desarrollo
de la sociedad, las personas que constituyen un núcleo familiar fuerte, son menos
propensas a enfrentar condiciones de pobreza extrema, a pasar por situaciones de conflicto
fuertes y tienden a llevar una vida emocional muy estable y esto se debe a que las personas
viven más tranquilas y llevan actividad emocional más satisfactoria.