Muchas veces la diferencia entre alcanzar una meta o
fracasar es nuestra actitud hacia la tarea emprendida. Una actitud correcta al principio determinara un buen resultado al final.
La fe y la actitud van de la mano. Una persona con una fe
correcta tendrá una actitud correcta. ¿Cuál es la diferencia entre un obstáculo y una oportunidad? Nuestra actitud, o mejor dicho nuestra fe.
Por ejemplo, la fe de Pedro hizo que viera el mar como
una oportunidad para hacer lo mismo que su maestro: caminar sobre las aguas. Pero cuando su fe decayó, su actitud también cambio y entonces el mar se convirtió en un obstáculo.
Ahora que comenzamos este ayuno, tu actitud es muy
importante. Este ayuno puedes ser una oportunidad o un obstáculo. Subir la montaña era una oportunidad para Moisés de encontrase con Dios; pero para el pueblo la misma montaña fue un obstáculo, al grado de que su temor les hizo desistir de hablar con Dios directamente.
Nehemías dijo que el gozo del Señor es nuestra fuerza. Si
nuestra actitud (por la fe) es de gozo en nuestro Señor, Su fuerza nos ayudara a terminar este ayuno. DLB