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 4 aspirinas

 El jugo de 1 limón
 1 cucharada de agua (10 ml)
 1 piedra pómez
 Toma las cuatro aspirinas y colócalas en un mortero para pulverizarlas. En
caso de no contar con un mortero puedes usar un tenedor o un objeto pesado.

Coloca el polvo de aspirinas en un vaso o recipiente limpio y reserva. Corta el limón


por la mitad y extrae la totalidad de su jugo.

Mezcla el limón con el polvo de aspirinas y agrega un poco de agua para formar una
pasta espesa.

Modo de aplicación
Limpia los pies de todo tipo de suciedad y extiende el producto sobre las zonas
afectadas por las durezas.
 Cúbrelos con unos calcetines ajustados o una toalla.
 Déjalo actuar 20 o 30 minutos y enjuaga con agua tibia.
 A continuación, toma la piedra pómez y frota con cuidado las zonas afectadas
para facilitar la eliminación de las durezas.
 Seca bien los pies y repite el procedimiento dos veces a la semana.
 De forma inmediata sentirás unos pies más suaves y sanos.
 Limpia los pies de todo tipo de suciedad y extiende el producto sobre las zonas
afectadas por las durezas.
 Cúbrelos con unos calcetines ajustados o una toalla.
 Déjalo actuar 20 o 30 minutos y enjuaga con agua tibia.
 A continuación, toma la piedra pómez y frota con cuidado las zonas afectadas
para facilitar la eliminación de las durezas.
 Seca bien los pies y repite el procedimiento dos veces a la semana.
 De forma inmediata sentirás unos pies más suaves y sanos.

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