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EALIDAD ES TODO lo que existe. Parece sencill 4verdad? Pues no lo es. Hay algunos problemas. Pe ejemplo, los dinosaurios, que una vez existieron per? no existen. O las estrellas, que estan tan lejos que ©? © tiempo que tarda sui luz en alcanzarnos y podemos ¥“" Tas, quiza ya se hayan apagado. Mas tarde volvere™®* Gon los dinosaurios y las estrellas. Pero en cualqu 250, c6mo salemos que las cosas existen, incluso”! Presente? Bueno, nuestros cinco sentidos —vista, 0!!*"° ies Y guSto— nos ayudan a convencernos ae au ae a Son reales: las piedras y los camel a al norte y el café recién motido, la lia}. » las cataratas y las campanas, el a7 - la sal. Pero solo vamos a denominar «real» a aquello que podemos detectar directamente con uno de nuestros cinco sentidos? ;Qué pasa enton- ces con las galaxias distantes, tan lejanas que no a simple vista? jY las bacterias, tan que necesitamos un potente microsco- pio para verlas? ;Deberiamos decir que estas s no existen porque no podemos verlas? No. Obviamente, podemos mejorar nuestros sentidos mediante el uso de instrumentos especiales: teles- copios para las galaxias y micro bacterias. Sabemo microscopic pueden vers pequei ‘opios para las, que los telescopios y los s funcionan y sabemos cémo lo hacen, por eso podemos utilizarlos para ampliar elalcance de nuestros sentidos —en este caso el sentido de la vista— y con ello convencernos de que las galaxias y las bacterias existen. ;Qué gcurre con las ondas de radio? ;Existen? Nuestros ojos no pueden detectarlas, tampoco nuestros oidos, pero una vez mas unos instrumentos espe ciales —por ejemplo, los televisores— las convier ten en seftales que podemos ver y ofr. Por tanto, aunque no podemos ver ni ofr las ondas de radio, sabemos que son parte de la realidad. Al igual que con los telescopios y los microscopios, sabemos cémo funcionan los televisores y los aparatos de radio. Nos ayudan a construir una imagen de lo que existe: el mundo real, la realidad. Los radio- telescopios (y los telescopios de rayos X) nos muestran estrellas y galaxias a través de lo que parecen ser unos ojos diferentes: otra forma de ampliar nuestra vision de la realidad NOME TS eMC toe Ui MeO USS CRG N mE Se one ROC OMT SUS COTO Tra Tats ato cee ctu Conte conte POTD CBRE Cn OR Cnr sen te wt aes los en directo. Pero tenemos un tipo Creo SCRE nen OOO Sona SS oe arc Ree Ta Ret nt SoU ake one na ome matey ee Rett Reret teem recat OS afios. Podemos entender cémo el agua, con mine- rales disueltos en ella, se introduce en cadaveres eS te ook aches caw Ell COR nn Se rere te kOe ay ony Neem ete a ete ea ae rt) Poe oem rut eee Ce CER CH ER ence original del animal impresas en la piedra. Por tan- to, aunque no podemos ver directamente a TSS soca PL Cou teme celta tecageattee ron utilizando pruebas Pr ecae ee tee Vea teeny RON SR Ca Cond ere Teena . a ae — SCR utce rma tido distinto, un lores Pennants eo cn eke ei Puta tan etn Rca EL cone MECN _ i Ce Preteen ice eat tame eee Poe rape CUUCAC TCR Ren eka eta th, Ree en eee tein aa Po ao ee ac eae CoS CR eo ee BS ec ean nae nea RS SON Leaner eae SRS O nck Oka totam Cr Ounce cnt ae Re Ser sen alas On Cee ot naan -do de su hacha golpeando el arbol. La luz visi. are nan tee ae CO enc ee ee instante en que lo vemos. Pero con las estrell POU Da eR c er eC a necro Rot + explotara, ese suceso catastrofico no seria parte de nuestra realidad hasta ‘ocho minutos después. ;Y ademas, seria nuestro fin! En el caso dela siguiente estrella mas cercana, Proxima Centauri sila miras en X 2011 lo que vers ocurrié en 2007. Las galaxias son un con- FOr i om Oceans galaxia llamada Ia Via Lactea. Cuando miras hacia la SIS CORES Cnn ete tom nn eet at ea OURO CO UC RRC nem el Cok ae DES Onn Rane ae ee tee tees) UO cee ne en ene aces aie teen ea __ vera través del telescopio Hubble chocando Povee tran Trac “otras, Peto las estamos viendo chocar hace 280 millones de aiios. _ Si hay alienigenas en alguna de esas POC ER mtn) OS OURO a carcntcnty etek cae FY eee nace do en la Tierra, en Cocco einen cs SOR e Mee ote cents PSS rocer goes RTRs retonccr ean tte Oe hemos visto ni oido. Son parte de la rea- lidad? Nadie lo sabe; pero lo que si sabemos es el tipo de cosas que quiz algiin dia nos digan si lo son. Si Se ree ocr aerate Organos sensoriales podran hablarnos sobre él. Quiz alguien invente algdn dia un telescopio tan PS UR CSC aa CORRS ene tme) Cry DSS Tea eu une cel y DSSS rao (a) CU aCe TCE cele renee eee ee realidad no solo consiste en las cosas que ya conoce- DUES cent a eet eet hen PUN Ooi o Cent tate CS ey conocer, quiza cuando hayamos construido mejores emo! 4 maravilla y el enc cia: avanzar cada dia y descubrir cos nuevas. Esto no significa que debamos creer todo lo que alguien Je cosas que haya sofiado alguna vez: hay millones de cosas qu‘ podemos imaginar, pero es muy improbable que sean reales, como hadas, duendes, gnomos 0 emos tener la mente abie! hipogrifos. Siempre del ta, pero el tinico motivo razonable para creer que algo existe es que haya una prueba real de ello. Modelos: pongamos a prueba nuestra imaginacion Los cientificos utilizan un método menos cercano para determinar si algo es real cuando nuestros cinco sentidos no pueden detectarlo directamen- te. Consiste en utilizar un «modelo» de lo que podria estar ocurriendo, y que después puede ser comprobado. Imaginamos —o suponemos— qué puede ser. Esto se denomina el modelo. Después deducimos (normalmente, mediante calculos matemiticos) lo que deberiamos ver, ofr, etc. (a menudo con la ayuda de instrumentos de medida) si el modelo fuera real. Por ultimo, com- probamos si eso es lo que realmente vemos. El modelo podria ser literalmente una répli- ca hecha con madera o plistico, o podrfa ser una serie de célculos matemiticos en papel, o incluso una simulaciOn en un ordenador. Observamos con detenimiento el modelo y predecimos lo que deberiamos ver (0 escuchar, etc.) con nues- tros sentidos (quiz4 con ayuda de instrumen- tos) si el modelo fuera correcto. Después obser- vamos para determinar si las predicciones son correctas 0 erréneas. Si son correctas, se incre- menta nuestra confianza en que el modelo representa a la realidad; después seguimos crean= do mas experimentos, quiz4 ajustando més el modelo, para probar los siguientes descubrimientos y confirmarlos, $1 16 uuestras previsiones son erréneas rechay modelo, o lo modificamos y lo volvemog Veamos un ejemplo. Actualmente que los genes hos de una materia denominada ADN, las unidades de herencig hee bastante sobre ADN y como funciona, Pay podemos ver qué aspecto tiene el ADN, nig con un potente microscopic. Précticamente ody que sabemos sobre el ADN procede de mod recto de modelos inventados y probados, De hecho, mucho antes de que nadie, oido hablar del ADN, los cientificos ya sabjgs muchas cosas sobre los genes gracias a prich, con modelos. En el siglo x1X, un monje austria llamado Gregor Mendel realizé experimentos en el jardin de su monasterio, cultivando grandes cantidades de habichuelas. Con- t6 el ntimero de plantas que tenfan flo. res de distintos colores, o las que daban habichuelas lisas 0 arrugadas, y asi generacién tras generacién. Mendel nunca vio ni tocé un gen. Todo lo que veia eran habichuelas y flores, y podia usar sus ojos para contar los distintos tipos. Mendel invent un modelo que trabajaba con lo que ahora Ilamariamos genes aunque él nunca los denominé asi), y calculé que si su modelo era correcto, en un experimento con creto de cultivo deberia haber tres veces mas habi: chuelas lisas que arrugadas. Y eso es lo que descu brié cuando las conté. Dejando a un lado los detalles, el hecho es que los «genes» de Mendel fueron una invencidn de su imaginacién: no podia verlos con los ojos, ni siquiera con un microscopio. Pero podia ver las judias lisas y las arruga- das, y al contarlas descubrié pruebas indirectas de que su modelo de herencia era una buena representacin de algo en el mundo real. Afios después, otros cientificos utiliza- ron una modificacién del método de Mendel —con otros seres vivos, como la mosca de la fru- taen lugar de las habichuelas— para mostrar que Tos genes estén ordenados de una forma concre- ta, en unas hileras Ilamadas cromosomas (los ‘humanos tenemos 46 cromosomas; la mosca de Ja fruta tiene ocho). Incluso fue posible detectar Tmediante modelos el orden exacto en el que los {genes estaban colocados a lo largo de los cromo- ‘somas, Todo esto se hizo mucho antes de que r que los genes estin hechos de ADN. Ahora ya lo sabemos, y sabemos exacta mente como funciona el ADN, gracias a James Watson y Francis Crick, junto con otra gran can tidad de cientificos que les siguieron. Watson y Crick no pudieron ver el ADN a simple vista Una vez mas, realizaron sus descubrimientos imaginando modelos y probandolos. En su caso, construyeron literalmente modelos de cartulina y metal del aspecto que deberia tener el ADN, y calcularon qué medidas tendrian si esos modelos fueran correctos. Las predicciones de un modelo, la denominada doble hélice, coincidian exacta- 17 ee ih ood o Rs ry 7 mente con Tice Wilki Rosalind Franklin y Mau- s especiales como rayos X d istales de ADN purificado. Proyectados Watson y Crick también se dieron cuenta de inmediato de DN podia producir exacta- jos observados por Gregor Mendel en el mente jardin de su mo: 0. Por tanto, tenemos tres form: de saber si algo es real. Pode- mos detectarlo directamente utilizando nuestros cinco sentidos; 0 indirectamente utilizando nuestros sentidos con la ayuda de instru- mentos especiales como los telescopios y los microscopios; incluso de forma aiin més indirecta, creando modelos de lo que podria ser real y después probando dichos modelos para ver si predicen cosas que podemos ver (u oir, etc.) con o sin la ayuda de instrumentos. En definitiva, de una u otra forma todo depende de nuestros sentidos. 3Significa esto que la realidad tan solo contiene cosas que pueden ser detectadas —directa 0 indirectamente— por nuestros sentidos y por los métodos de la ciencia? ;Qué hay de cosas como Ia alegria 0 los celos, la felicidad o el amor? ;No son también reales? Si, son reales. Pero dependen para su existencia del cerebro: sin duda del cerebro humano, y probablemente de los cerebros de ‘otras especies animales avanzadas, como los chimpancés, los perros ylas ballenas. Las piedras no sienten alegria ni celos, y las montafias no aman. Estas emociones son intensamente reales para aquellos que las experimentan, pero no existian antes de los cerebros. Es posible que emociones como estas —y quiz4 otras en las que ni podemos sofiar— puedan existir en otros planetas, pero solo si dichos planetas contienen también cerebros 0 algo equi- valente a los cerebros: quién sabe qué tipo de érganos extrafos © maquinas de sentir puedan existir en algin lugar del universo. La ciencia y lo sobrenatural: la explicacion y su enemigo Asi que esto es la realidad, y asi es como podemos determinar si algo es real o no. Cada capitulo de este libro estd dedicado a un aspecto concreto de la realidad: el sol, por ejemplo, o los terre- motos, 0 el arco iris, o los muchos tipos diferentes de animales. Pasemos ahora a la otra palabra clave del titulo: la magia. Magia es una palabrada escurridiza: suele usarse de tres formas dife- rentes y lo primero que debemos hacer es distinguirlas. Llamaré ala primera «magia sobrenatural>, ala segunda, «magia de esce- nario» ya la tercera (que es mi favorita, y la que traté de utilizar en el titulo), «magia poética». La magia sobrenatural es el tipo de magia que encontramos en Jos mitos y los cuentos de hadas (también en Jos «milagros», aunque por ahora dejaré estos, para retomarlos en el ultimo capitulo). Bs la magia de la lémpara de Aladino, de los hechizos de las brujas, de los hermanos Grimm o de Hans Christian Andersen y J. K. Rowlin. Es la magia ficticia de una bruja que recita un hechizo y convierte a un principe en una rana 0 de un hada madrina que convierte una calabaza en un carruaje reluciente. Se trata de historias que todos recordamos de nuestra infancia y muchos de nosotros seguimos disfrutando cuando las vemos representadas en una obra teatral navidena, pero todos sabemos que este tipo de magia es simple- mente ficcién y que nunca ha ocurrido en realidad. La magia de escenario, por el contratio, si existe, y puede ser muy divertida. O al menos, sucede algo real, aunque no es lo que los especta- dores creen. Un hombre en un escenario (normal- 20 mentees un hombre, por algtin motivo, por eso lo escribo en masculino, pero puedes usar el femenino silo prefieres) nos convence de que pense- mos que algo alucinante (incluso podria pare cer sobrenatural) ha sucedido, cuando en realidad lo que ha ocurrido es algo ligeramente distin Los paftuelos de seda no pueden convertitst conejos, al igual que las ranas no pueden convert en principes. Lo que hemos visto en el escenst® uinicamente un truco. Nuestros 0j0s 10S han eng jiado, o quizé el iusionista ha engaiadoa mes ojos, utilizando palabras para distraerno® & que realmente est haciendo con las manos Algunos ilusionistas son honestos Y esfuerzan para que su piiblico sepa aves? a a mente han realizado un truco. gente como el «maravilloso» Randy, o Penn y Teller o Derren Brown. Aun asi, estos admirables actores no suelen decirle al publico cémo hacen exactamente su truco —podrian ser expulsados del Circulo Magico (el club de los ilusionistas) si lo hacen—, tan solo se aseguran de que el publico sepa que no hay magia sobrenatural en lo que hacen: Otros no lo dicen tan claro, pero no exageran sobre lo que han hecho; simplemente dejan que el publico sienta que algo misterioso ha ocurrido, sin mentir directamente sobre ello. Pero por des gracia hay algunos magos que son deliberada- mente deshonestos, y que pretenden hacernos creer que en verdad tienen poderes «sobrenatu rales» 0 «paranormales»: quizé afirman que mente pueden doblar metales o detener relojes solo con el poder de la mente. Algunos de estos farsantes deshonestos («charlatanes» es una bue- na palabra para definirlos) cobran grandes canti- dades de dinero a empresas mineras o petrolife- iciéndoles que pueden utilizar sus «poderes psiquicos» para encontrar un buen lugar de perforacién. Otros charlatanes se aprovechan de gente que esta sufriendo y les aseguran que son capaces de contactar con los muertos. Cuando ocurre esto, ya no se trata de diver- sidn ni entretenimiento, sino de alimentarse del suftimiento y la ignorancia de las personas. Para ser honesto, puede que no todas estas per- sonas sean charlatanes, Puede que algunos de ellos crean sinceramente que estén hablando con Jos muertos. oy pensando en numero estoy pensando? 21 PROC SO a A RSD titulo: la magia poetica- PUSS CURLS Om Nosa de mnisica y describimes el concierto ROR CeO aR TONS Ce cu cman POMS CRS ey ines RSS R USE RUSS Ua Pode- RO EIS ne Lan Rite Russa eR ccm nn ee ee CoCr csc On ean este sentido, «magico» significa algo ara ; ten rors wi Poss Rota Cea hc oer tag entre ea kee ere SR oC CeO mc an erent kas od PRR res Roa Us ee Pcie ences viv SLU Cnc an ran Pah sobrenatural y demostraros por ney SROs EMS sy rears Cece eee hres gue vemos en el mundo y en el universo que DOU a SLOSS tnt SCOUTS RI Se in eae ica- Bort Se SAO Ree en a tar nee quier posibilidad de que pueda ser explicado. PLS ro Soeur net eT eae ReneS raree ee tuan Tren mis alli del aleance de una explicacién natu- Pre OTe ere tan ST Meco Bed enacts os Co Crmmomntnnnmerenticn ict tac PSEC MSM SS OL Ca co On enormes avances en el conocimiento que hemos disfrutado en los ultimos 400 aios, Drm Cecil ca ens tir irs forma sobrenatural no es solo decir «no lo entendemos», sino decir «nunca lo entende- SPOUSES RL CORT Ce 23 Laciencia utiliza exactamente el planteami&® to contrario, La clencia prospera gracias a Su CaP” srlo todo, y la utiliza como ando posibles Jad para explis aliciente vara seguir haci¢ndose preguntas, cre amos haciendo cami , mano de la verdad. Si ocurrie- a de nuestro entendi P modelos y probandolos, y no, metro a metro, dela ra algo que fuera en contr to actual de Ja realidad, los cientificos lo verian Jo actual, y tendrian andonarlo, o al menos cambiarlo, Gracias @ amos acer- como un reto a nuestro mode que ab estos ajustes y posteriores pruebas nos v cando cada vez mas a lo que es verdad. ‘as de un detective que, abruma- ato, fuera tan perezoso que ni siquiera lo investigara, y en lugar de ello lo califica- ra de «sobrenatural»? La historia de la ciencia nos ha demostrado que aquellas cosas que algiin dia esultado de algo «sobrenatural» causado por dioses (tanto buenos como malos), demonios, brujas, espiritus, maldiciones o hechi- z0s— en realidad tienen explicaciones naturales: explicaciones que podemos entender y probar, y en las que confiamos. No existe motivo alguno para creer que aquellas cosas para las que la ciencia atin no tiene {Qué pense do por un asesin: creimos que eran 1 explicaciones naturales tengan sobrenatural, igual que los volcay co las enfermedades no estan we ser deg Ne, los ter Provog, enfado de los dioses, como la ang Bente creys en Pte Como es l6gico, nadie cree req sea posible convertir a una rana en (o era un principe en una rana? Nut acordarme) o una calabaza en un carne! jos habéis parado a pensaralguna vez pe sas son imposibles? Hay varias formas carlo. Mi favorita es la siguiente. * oa Las ranas y los carruajes son cosas co das, con un montén de partes que necestan se de un modo especial, segiin un patron gone (ni por mover una varita magica). Esto ¢s jp : significa «complicado». Es muy dificil crear, tan complicado como una rana o un ae Para construir un carruaje necesitamos capeg todas las partes en su orden correcto, Necestamas la habilidad de un carpintero y de otros atesan, Los carruajes no surgen por casualidad o fr tando los dedos y diciendo «abracadabras. Un carruaje tiene una estructura, una complejidad, partes funcionales: ruedas y ejes, ventanasy Imente Un pring; 24 allestas y asientos acolchados. Seria facil convertir algo complicado n carruaje en algo simple, como ceniza, emplo: la varita magica del hada madrina ia incorporar una antorcha, Es facil vertir cualquier cosa en ceniza. Pero nadie coger un montén de ceniza —o una calaba- y convertirla en un carruaje, porque un carruaje es demasiado complicado; y no solo complicado, sino complicado en una direccién en este caso uitil para que la gente viaje en él. Vamos a ponérselo un poco mis ficil al hada na, suponiendo que en lugar de utilizar una alabaza hubiera utilizado todas las piezas necesa- rias para construir un carruaje, todas metidas en una caja como uno de esos kits para construir un avin a escala. El kit para construir un carruaje incluye de madera, paneles de cristal, varillas y barras de metal, esponja y piezas de cue- ro junto con tornillos, tuercas y botes de pega- mento para unirlo todo. Suponed ahora que en lugar de leer las instrucciones y uni las piezas en una secuencia ordenada, simplemente lo metiera todo en un gran bolso y lo agitara. ;Qué posibili- te cientos de lis ones LN) ra 2) SS SS > SS aS Y aN “) dades hay de que las partes se unan entre sien el modo exacto para construir un carruaje que fun- cione? La respuesta es: absolutamente ninguna, Y parte del motivo es el inmenso mimero de posi- en las que podriamos combinar todos os elementos y piezas que no darian como resul- tado un carruaje que funcionara, ni nada que funcionara. Si cogéis un mont6n de partes y las mezclais de forma aleatoria, quiz en ocasiones caigan en un orden titil o que simplemente reconoceriamos como algo especial. Pero el niimero de formas en el que esto puede ocurrir es minimo: infimo, de hecho, comparado con el ntimero de formas en el que caerian en un patrén irreconocible, poco més que un montén de basura. Existen millones de formas de ordenar y reordenar una serie de elementos y piezas: millo- nes de formas de transformarlo en... otro montén de elementos y piezas. Cada vez que las volvemos a mezclar obtenemos un montén tinico de basu- ra nunca visto antes, pero solo una infima minoria de esos millones de posibles montones llegaria a ser algo util (capaz, por ejemplo, de llevaros al baile) o de alguna forma interesante. bles forn 25 ra Suponed que el crupier bara. [f= ja las cartas y las reparte a cuatro {fa jugadores, de manera que cada uno reciba 13 cartas. Yo miro mis cartas y me quedo boquiabierto {Tengo una mano completa de Estoy dem: asustado como pe seguir con el jug muestro mi mano resto de jugador sabiendo que est tan alucinadoscom Pero después, uno por uno los otros tres jugadores muestran a Sus cartas sobre la mesa y la sot Presa aumenta con cada mano. Todos tienen una mano «perfec ta»: uno tiene 13 corazones, ol! 13 diamantes y el ultimo, 30° 7 boles. i que haya aparecido! La probabilidad de alquier mano concreta de 52 cartas es de una entre 536 447737 765 488 792 839237 4400000 por- ese es el miimero total de manos posibles. lemente, no vemos ningiin patron particular en la gran mayoria de manos que han salido, por tanto, no nos resultan extraordinarias. Solo nos fijamos en aquellas manos que resultan llamativas por algiin motivo. Hay miles de millones de cosas en las que podrias convertir a un principe, si fueras lo sufi- cientemente brutal como para reordenar sus ele- mentos en miles de millones de combinaciones al azar. Pero la mayoria de esas combinaciones serian un desastre, como los miles de millones de manos de cartas aleatorias, sin sentido, que hemos repartido. Solo una infima minoria de esas posi- bles combinaciones de mezcla aleatoria de ele- mentos de principe podrian ser reconocibles 0 buenas para algo, desde luego no para convertirse en una rana. Los principes no se convierten en ranas y las calabazas no se convierten en carruajes, porque las ranas y los carruajes son cosas complicadas cuyos elementos podrian haberse combinado en un némero practicamente infinito de montones de basura. Y sabemos, de hecho, que cada ser vivo —cada humano, cada cocodrilo, cada mirlo, incluso cada arbol y cada col de Bruselas— ha evolucionado de otra forma originalmente mas simple. Por tanto, sno sera esto una especie de azar o un tipo de magia? jNo! {De ninguna mane- tal Este es un error muy comtin, y por eso quiero explicaros ahora mismo por qué lo que vemos en Simy uerte o de cual jotamente igica supuesto, en el sentido estrictamente poé! ico de algo que na de sobrecogimiento y deleite). La lenta magia de la evolucion Convertir un organismo complejo en otro orga nismo complejo en un tinico paso —igual que en un cuento de hadas. es algo que supera los limites de lo proba ble. Pero los organismos complejos existen, Enton. ces, ;como han aparecido? 2Cémo es posible que existan cosas tan complicadas como las ranas y los leones, los babuinos y los arboles banane- ros, los principes y las calaba- zas, incluso tit y yo? Durante la mayor parte de la Historia, esta ha sido una cue: concertante, que nadie ha podido responder con pro- piedad. Por tanto, la gente ha % inventado historias para tra- tar de explicarlo, O Oo fue contestada —y lante— en el siglo xix, Jos mayores cientific, haya existido: C Voy a utilizar el tulo para explic: forma breve y con palabras distintas a las del pro- s que los organismos comple- jos como los humanos, los cocodrilos y las cales de Bruselas— no aparecieron de repente, como. caidos del cielo, sino de forma gradual, pasito a pasito, y después de cada paso solo eran ligera- mente diferentes de lo que habian sido antes, Imagina que quieres crear una rana con patas langas. Una buena forma de hacerlo seria comenzar con algo muy parecido a lo que quieres conseguir: por ejemplo, una rana con patas cortas. Lo primero sera observar a tus ranas de patas cortas y medirles. las patas. Después debes escoger a unos cuantos machos y a unas cuantas hembras que tengan las patas ligeramente mis largas que el resto, y dejar que se apareen, impidiendo que otras ranas de patas mis cortas puedan aparearse con ellas. Los machos y las hembras de patas mas lar- gas generarin renacuajos, y quiza les crezcan las patas y lleguen a convertirse en ranas. Ahora debes volver a medir a esa nueva generacién de ranas y, una vez mds, seleccionar aquellos machos y aque- Mas hembras que tengan las patas mas largas que la media, y volver juntarlos para que se reproduzean. Después de hacer esto durante unas 10 generacio- nes, quiza empieces a observar algo interesante. La longitud media de las patas de tu pobla- cidn de ranas podria ser ahora considerablemente mayor que la longitud media de las patas de lt poblacién inicial, Incluso puede que descubras que todas las ranas de la 10* generacién tienen las pats mis largas que cualquiera de las ranas de la prime: ra generacién, Quiza 10 generaciones puedan 0° ser suficientes para conseguirlo: tal vez necesites 20 generaciones o incluso mas, Pero al final pods asegurar con orgullo: «He creado un nuevo tipo dé Tana con las patas mis largas que las anteriores’ No has necesitado varita magica. No his necesitado magia de ningiin tipo, Lo que tenet aqui es el proceso denominado cria select" Se basa en el hecho de que las ranas varian wi de otras y de que dichas variaciones tienden 8 heredadas, es decir, transmitidas de padres : | in 2 través de los genes. Simplemente seleccionando cuales son las ranas que hay que criar y cudles no, podemos crear un nuevo tipo de rana. Sencillo, sno crees? Pero hacer que las patas sean mas largas no es demasiado impresionante. Al fin y al cabo, has empezado con ranas, con ranas de patas cortas, Supon ahora que comenzases no con un tipo de rana de patas cortas, sino con algo que no tiene nada que ver con una rana, digamos algo como Un triton. Los tritones tienen las patas muy cor- tas comparadas con las patas de las ranas (con las Patas traseras de las ranas, al menos), ¥ no las uti- lizan para saltar, sino para caminar. Los tritones tienen una cola larga, mientras que las ranas 0 Uenen cola, y los tritones son mas largos y strechos que la mayorfa de las ranas. Pero supon- 80 que eres capaz de imaginar que, tras algunos miles de generaciones, puedes convertir una de tritones en una poblacién de ranas, nente seleccionando de forma paciente en sna de esas millones de generaciones, machos y hembras que sean ligeramente mas parecidos a una rana y dejar que se reproduzcan, evitando que sus amigos menos parecidos a las ranas lo hagan. En ningtin momento del proceso observarias un cambio radical. Cada generacién se pareceria muchisimo a la generacién anterior, no obstante, a medida que avanzaran las gene- raciones, irias notando que la longitud media de la cola era ligeramente mas corta y la longitud media de las patas traseras, ligeramente mas larga. Después de un buen mimero de generaciones, los individuos de patas largas y colas cortas podrian empezar a utilizar sus largas patas para saltar en lugar de andar. ¥ asi con todo. Como es légico, en el escenario que acabo de describir nos estamos imaginando a nosotros mismos como criadores, seleccionando aquellos machos y hembras que queremos que se repro- duzcan para conseguir el resultado final que hemos elegido. Los granjeros han estado utilizan- do esta técnica durante miles de aos para produ- cir ganado y cosechas ms abundantes, resistentes 29 ades, ete. Darwin fue la primera der que esto funciona incluso sin eT la seleccién, n observ que todo esto podia ocurrir de como una casualidad, por el simple algunos individuos sobreviven mis 2 poder reproducirse, y otros no; y os que sobreviven lo hacen porque estin ejor equipados que los demis, Por tanto, los hijos de los supervivientes heredan los genes que han ayudado a sus padres a sobrevivir. trata de tritones como de ranas, de erizos o de dientes de le6n, siempre habri algunos individuos que sobreviven mejor que otros, Si resulta que las patas largas son titiles (a ranas y saltamontes para huir del peligro, o a guepardos para cazar gacelas, a gacelas para huir de guepardos), los individuos con patas mas largas tendrin menos posibilidades de morir. Tendran mas posibilidades de vivir lo suficiente para reproducirse. Ademis, la mayoria de los individuos disponibles para reproducirse tendrén patas largas. Por tanto, en todas las gene- raciones habra mayores opciones de que los genes de patas largas puedan pasar a la siguiente genera- cién. Con el paso del tiempo, comprobariamos que cada vez mas individuos de la poblacién tie- anto si se nen los genes de las patas largas, Por tanto, el efec to sera exactamente el mismo que si un disefador inteligente, como un criador humano, hubjiera ee: gido individuos de patas largas para la cria, salvo alta dicho disefiador: todo ocurre de forma natural, como la que no hace onsecuencia autorAtica de qué individuos sobreviven mAs para poder reproducirse y cules no, Por este motivo, el pro ceso se denomina seleecién natural. A partir de un nimero suficiente de genera- ciones, antepasados con forma de tritén pueden convertirse en descendientes con forma de rana. Dadas atin mds generaciones, antepasados con forma de pez pueden convertirse en descendientes con forma de mono. Y con mas generaciones atin, antepasados con forma de bacteria pueden con- vertirse en descendientes con forma de humano. Y esto es exactamente lo que ha sucedido. Este es el tipo de cosas que han ocurrido en la historia de todos los animales y plantas que hayan vivido jamds. El nimero de generaciones necesarias es mayor de lo que tt 0 yo podamos imaginar, pero cl mundo tiene millones de afios de edad, y sabe- mos por los fosiles que la vida comenzé hace mas de 3500 millones de afios, por lo que ha habido tiempo mas que suficiente para la evolucién. Esta es la gran idea de Darwin, y se denomi- na evolucién por seleccién natural, F a de las ideas més importantes que jams se le haya ocurri- do a una mente humana. Explica todo lo que sabemos sobre la vida en la Tierra. Por el hecho de ser tan importante, volveré a ello en proximos capitulos. Por ahora basta con entender que la evolucién es muy lenta y gradual. De hecho, es es gradualidad de la evolucién la que le ha permitido crear cosas complicadas como ranas y principes El cambio mégico de una rana en un principe podria no ser gradual, sino inmediato, y eso es lo que lo excluiria del mundo de la realidad. La evo- lucién es una explicacién real, que funciona, y tie- ne pruebas reales para demostrar su verdad; cual- quier cosa que sugiera que las formas de vida complicadas aparecieron de golpe, sin mas (en lugar de evolucionar gradualmente paso a paso), es simplemente una historia pobre, no mejor que la del hada madrina. En el caso de las calabazas que se convierten en carruajes, los hechizos magicos son tan intitiles como en el caso de las ranas y los principes. Los carruajes no evolucionan, 0 al menos no de for- ma natural, del mismo modo que lo hacen las ranas y los principes, Pero los carruajes —igual que los aeroplanos o los picos, los ordenadores o las puntas de flecha— estan hechos por humanos que shan evolucionado, Los cerebros humanos y las manos humanas han evolucionado por selec- cién natural, igual que lo han hecho las colas de los tritones y las patas de las ranas. Y los cerebros humanos, una vez evolucionados, fueron capaces de disefiar y crear carruajes y coches, tijeras y sin- fonias, lavadoras y relojes. Una vez més, no hay magia. Una vez més, no hay trucos. Una vez més, todo se explica de forma simple y maravillosa. En el resto de este libro quiero mostraros que el mundo real, tal como se entiende cientifica- mente, tiene magia por si solo, el tipo de magia que yo denomino poética: una belleza inspirado- ra que es la mas magica porque es real y porque podemos entender como funciona. Comparados con la belleza y la magia del mundo real, los con- juros sobrenaturales y los trucos de ilusionista se ven baratos y vulgares, La magia de la realidad no es sobrenatural ni es un truco, pero —asi de sim- ple— es maravillosa. Maravillosa y real. Mara- villosa porque es real

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