El Clavecín

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El clavecín

En los instrumentos de la familia del clavecín, la cuerda es punzada con un pequeño plectro,
originalmente de pluma o cuero. La diversidad de matiz sonoro de estos instrumentos no se
consigue a través de una pulsación más o menos fuerte, sino más sutilmente con el fraseo y la
articulación. La variedad de timbres se puede obtener con una buena elección de los registros.

El clavecín se utilizaba tanto para tocar en solo como para acompañamiento de las orquestas
de cámara y conjuntos mayores de la época. Tenía generalmente dos juegos de cuerdas por tecla,
afinados al unísono o a la octava superior (registro de 4 pies). En los instrumentos más tardíos
se podía encontrar un registro de sordina (o de arpa) con efecto de pizzicato. Los registros se
manejaban con mandos manuales sobre el teclado. Algunos grandes instrumentos tenían dos
teclados, en cuyo caso tenían tres juegos de cuerdas. Otros nombres del clavecín son: clave,
cémbalo, y clavicémbalo.

El clavicordio

En los siglos XVII y XVIII el instrumento doméstico ideal para practicar o ejecutar en solo era
el clavicordio, cuyo sonido sólo aporta la intensidad suficiente como para tocar en una pequeña
habitación. Aquí, la cuerda es percutida por un macillo de latón llamado tangente. A pesar de su
moderada intensidad de sonido, ofrece la ventaja de variada pulsación y dinámica, obtenidas
merced a un sutil manejo de la presión de los dedos.

Los instrumentos basados en el principio del clavicordio se conocían en el siglo XIV, y parece
que fueron populares en toda Europa. Hacia el siglo XVI se usaban poco en Inglaterra y los Países
Bajos, pero se pueden encontrar muchos ejemplos en España, Italia y Alemania. Se estableció
como principio general el que hubiera dos cuerdas por nota, golpeando la tangente a las dos al
unísono.

El clavicordio puede ser ligado o no ligado, siendo ligado cuando un mismo par de cuerdas
sirve a dos o más notas adyacentes del teclado, al ser golpeado por las tangentes en diferentes
lugares. Existen ejemplares primitivos de clavicordios ligados. Eran evidentes las limitaciones de
un clavicordio ligado en determinados pasajes musicales, y como consecuencia el clavicordio no
ligado se impuso en el siglo XVIII. Se aumentó la extensión del clavicordio hasta alcanzar las cinco
octavas necesarias en la música galante de C. P. E. Bach. La cualidad expresiva de su música pide
las sutiles variaciones de timbre, dinámica y vibrato (o bebung), que sólo existen en el
clavicordio.

"Clavecin" o clavicémbalo . Si bien tienen diferencias con el clavicordio, son de la misma familia
y ambos antecesores del "pianoforte" o piano,( en el final del Clacisismo) y surgen en el período
Barroco. El clavicordio es la forma más antigue del clavecín propiamente dicho, que a su vez
deriva del "monocordio" que era un instrumento de una sola cuerda y en general tuvo menos
cuerdas que teclas. El clavecín o clavicémbalo es un instrumento en que las cuerdas son
punteadas (como la guitarra o el arpa) en lugar de percutidas y se encuentran tensadas dentro
de una caja de forma parecida al piano de cola moderno. En su forma definitiva posee dos
teclados y numerosos registros. El clavicordio es un instrumento de tecla en el cual las cuerdas
son percutidas a través de un mecanismo pero sin control de la intensidad o fuerza del sonido.

Entre el clavicordio y el clavicémbalo existe una marcada diferencia, pues él clavicémbalo es fruto
de un perfeccionamiento, consistente en que, en la extremidad posterior de las palancas, en
lugar de las tangentes que frotaban las cuerdas, había colocados unos finos vástagos de madera
en los que estaban fijados unos tallos duros de plumas recortadas, que hacían sonar las cuerdas
sin dividirlas. Como es natural, se debía dar a cada tecla una cuerda propia, cosa lograda por el
clavicémbalo, en tanto que en el clavicordio, esto constituía una rareza En definitiva y si no me
equivoco el "clavecín" tiene varias teclas con una misma cuerda y el "Clavicordio" una cuerda
para cada tecla,

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