1. Empatía
Para ser una buena persona es importante ser capaz de ponerse en el lugar del
otro. Intentar pensar cómo se sienten las otras personas y anticipar cómo
nuestras acciones pueden afectar a los demás.
2. Paciencia
La paciencia es una actitud que nos empuja a soportar posibles contratiempos o
dificultades a lo largo de la vida. Las personas pacientes saben que cada cosa
lleva su tiempo y son capaces de entender mejor las situaciones y las relaciones
personales.
3. Confianza
Una buena persona debe ser alguien en quien los demás puedan confiar. Tanto
a la hora de compartir confidencias como a la hora de estar presente en los
momentos clave. Las personas confiables son aquellas que saben transmitir su
capacidad para actuar correctamente en cualquier circunstancia.
5. Optimismo
Los resultados de nuestras acciones pueden tener mucho que ver con la actitud
con la que afrontamos la vida. El optimismo procura ver el lado positivo de las
cosas y centrarse en él antes que los aspectos negativos. Por eso el optimismo
en su justa mesura es una cualidad deseable en cualquier persona.
6. Altruismo
Una buena persona debe ser capaz de realizar acciones que beneficien a los
demás aunque requieran de un sacrificio personal. Por supuesto, eso no
significa siempre poner por delante las necesidades de otras personas, pero sí
ser capaz de valorar cuándo nuestras acciones van a contribuir a un bien mayor
aunque no nos aporten un beneficio directo a nosotros mismos.
7. Humildad
La humildad es la capacidad para reconocer las debilidades y limitaciones
propias. Una buena persona debe ser capaz de reconocer sus errores y defectos
y no tener la necesidad de exagerar sus logros y virtudes. Es importante no
creerse por encima de otras personas sino verse como iguales, cada uno con
sus virtudes y defectos.
8. Generosidad
Compartir con los demás es una de las acciones básicas que debe desarrollar
cualquier buena persona. No se trata exclusivamente de generosidad material o
monetaria, sino en la capacidad de compartir con otras personas nuestro
tiempo o nuestras habilidades sin esperar nada a cambio.
9. Respeto
El respeto hacia los demás se puede demostrar a varios niveles. Todas las
personas, solo por el hecho de serlo, merecen nuestro respeto. Cada uno puede
tomar sus decisiones, tener unas creencias o unas costumbres concretas que
deben ser respetadas y no ser juzgadas por los demás. Además, otros aspectos
culturales y materiales también deben merecen todo el respeto.
10. Honradez
Las buenas personas deben actuar siempre de buena fe, de manera recta y
justa y siempre guiándose por lo que es correcto a nivel social y personal. Una
persona honrada no debe mentir ni engañar a los demás, se debe regir por
valores morales tanto a la hora de actuar como a la hora de pensar.
Fuente: https://www.caracteristicas.co/buena-
Las 5 cualidades de
persona/#ixzz515ohIeqf
un excelente empleado
05 de octubre de 2017 0
1. Entusiasmo
Si quieres demostrar que eres la persona idónea para ocupar tu puesto de
trabajo es necesario que realices tus tareas con entusiasmo. Aunque muchas de
las obligaciones laborales puedan parecer aburridas o monótonas, siempre
existen formas de hacerlas más llevaderas. No dudes en plantearle tus
proyectos e ideas a tu jefe.
2. Eficiencia
Esfuérzate por ser la persona más eficiente de tu equipo. Esto no quiere decir
necesariamente que tengas que convertirte en un robot de productividad, pero
sí que puedas cumplir con tus tareas en tiempo y forma. Además, debes poder
demostrar que tienes la capacidad de ser proactivo en la resolución de
problemas inesperados.
3. Excelencia
No te conformes con hacer las cosas a medias. Si quieres superarte en tu
carrera es esencial que siempre apuntes a la excelencia en todo lo que hagas.
Esta es una actitud que seguramente te hará destacar del resto y demostrará a
tu jefe que eres un empleado valioso.
4. Puntualidad
Los empleados eficientes entienden la importancia de llegar puntualmente al
trabajo. Esto no sólo demostrará responsabilidad de tu parte, sino que también
hará que aproveches mejor las mañanas que suelen ser el momento más
productivo del día.
5. Trato agradable
A nadie le gusta trabajar con personas antipáticas o desagradables. Intenta no
quejarte todo el tiempo y ayudar a tus compañeros de trabajo cuando lo
necesiten. Aunque parezca mentira, la amabilidad y solidaridad no abundan en
los ambientes laborales, por lo que tus buenos modales harán que seas
apreciado por los que te rodean.
Fuente: Universia Chile
2
No seas bondadoso solo para conseguir lo que quieres. Ten cuidado con la
bondad engañosa. La bondad no se trata de tener una cortesía egoísta, una
generosidad calculada, ni un aspecto superficial.[3] Ser amable con las personas solo
con el objetivo de manipularlos para obtener lo que deseas en la vida o como una
forma de controlarlos, no es ser bondadoso. Tampoco eres bondadoso si finges
preocuparte por alguien mientras reprimes tu ira o desprecio. Ocultar la rabia o la
frustración detrás de cortesías falsas no es ser bondadoso.
3
Sé bondadoso contigo mismo. Muchas personas cometen el error de intentar ser
bondadoso con el resto pero no se concentran en ser bondadosas consigo mismas.
Esto puede deberse a que no le gustan algunos de sus aspectos, pero generalmente,
se debe a la falta de conocimiento que las personas tienen de sí mismas. Y por
desgracia, cuando no te sientes tranquilo contigo mismo, tu bondad hacia los demás
corre el riesgo de convertirse en el tipo de bondad engañosa que describimos en el
paso anterior. También puede llevar al agotamiento y la desilusión ya que piensas en
todos menos en ti.
Conocerse a uno mismo permite ver qué es lo que genera dolor y conflicto y te da la
posibilidad de aceptar tus inconsistencias y contradicciones. Te brinda el espacio para
trabajar en cosas de ti con las que no te sientes feliz. Además, conocerse a uno mismo
es importante para evitar que proyectes tus aspectos negativos hacia el resto,
permitiéndote tratar a las personas con amor y bondad. [4].
Tómate el tiempo necesario para que puedas ser más consciente de ti mismo y utiliza
este aprendizaje para poder ser más amable contigo mismo (recuerda
que todos tenemos debilidades) como con los otros. De esta forma, te estás ocupando
de tu angustia interior en lugar de alimentar tu necesidad de proyectar daño y dolor.
Evita ver el tiempo que inviertes en convertirte en alguien más consciente de sus
necesidades y limites como un acto de egoísmo; lejos de eso, este tiempo es una
precondición fundamental para llegar a las otras personas con fuerza y conciencia.
Pregúntate qué crees que significa ser bondadoso contigo mismo. Para muchas
personas, ser bondadosas consigo mismas implica detener los pensamientos
negativos y controlar las charlas negativas que provocan desánimo.
4.
4
Aprende a ser bondadoso gracias a los otros. Piensa en las personas
verdaderamente bondadosas que conoces y en cómo te hicieron sentir.
¿Experimentas una sensación cálida cada vez que piensas en ellos? Probablemente
lo sientas ya que la bondad perdura, dándote fuerzas incluso en los momentos más
complicados. Cuando otras personas encuentran la forma de amarte solo por quien
eres, es imposible olvidar esa confianza y esa confirmación de dignidad, por lo que su
bondad perdura para siempre.
Recuerda cómo la bondad de otras personas "alegró tu día". ¿Qué tiene su bondad
que te hacer sentir especial y querido? ¿Puedes copiar alguna de sus actitudes desde
tu propio corazón?
5.
5
Cultiva la bondad por tu propio bien. Ser bondadoso es un estado mental positivo,
por lo que pensar de forma positiva mejora tu salud psicológica y te brinda felicidad. Si
bien la bondad implica dar y abrirse a otras personas, cuando ofreces tu bondad a
otros obtienes a cambio una sensación de bienestar y conexión contigo mismo que
mejora tu estado mental y tu salud.
Realiza un acto bondadoso por alguien todos los días. Toma una decisión consciente
cuando comience el día sobre cuál será el acto de bondad que vas a realizar y tómate
el tiempo necesario para llevarlo a cabo.
Sé bondadoso, amable y compasivo cuando interactúes con alguien, en especial
cuando esa persona suele hacerte enojar, estresar o preocuparte. Haz que la bondad
sea tu fortaleza.
Convierte tus pequeños actos de bondad en actos de compasión más grandes. Actuar
como voluntario para aquellas personas que lo necesiten y tomar la iniciativa para
aliviar el sufrimiento son actos de compasión muy grandes.[7]
Medita para ayudar a difundir la bondad. Lee este artículo para obtener más detalles.
7.
7
Sé amable con todos, no solo con las personas "en necesidad". Expande tu
círculo de bondad. Puede ser muy sencillo ser amable cuando inconscientemente
haces lo que Stephanie Dowrick llama "bondad condescendiente".[8] Esto se refiere a
la bondad que se tiene con las personas que sentimos que se encuentran realmente
en necesidad (los enfermos, los pobres, los vulnerables y aquellos que comparten
nuestros ideales). Ser bondadoso con las personas cercanas a uno mismo,
emocionalmente (como sucede con la familia o los amigos) o de otras formas (como
personas del mismo país, del mismo color, género, etc.), es más sencillo que ser
bondadoso con aquellos que el filósofo Hegel llama "los otros". Puede resultar más
complicado ser bondadoso con aquellas personas que ves como tus iguales, pero sin
duda valdrá la pena.
El problema de limitar nuestra bondad solo a los casos "convenientes" es que fallamos
en reconocer que debemos ser bondadosos con todos, sin importar quienes sean, sus
niveles de riqueza o fortuna, sus valores o creencias, sus comportamientos y
actitudes, sus lugares de origen, si nos agradan o no, etc.
Al ser bondadoso solo con quienes creemos que merecen nuestra bondad, estamos
contradiciendo nuestras bases y juicios y solo estamos practicando una bondad
condicional. La bondad verdadera abarca a todos los seres y aunque surgirán retos
que tendrás que enfrentar cuando intentes poner en práctica esta noción de bondad
mayor, nunca dejarás de aprender sobre la profundidad de tu habilidad para ser
realmente bondadoso.
Si evitas ser bondadoso con alguien solo porque crees que puede salir adelante sin tu
apoyo o comprensión, entonces estás practicando una bondad selectiva.
8.
8
Deja las críticas de lado. Si realmente quieres ser bondadoso, entonces debes dejar
de juzgar a las personas. En lugar de perder tu tiempo criticando a todos, trabaja para
lograr una actitud positiva y compasiva. Si sueles pensar mal de los demás, deseas
que los otros tengan más talento o sientes que las personas que te rodean están
necesitadas o despistadas, entonces nunca aprenderás la bondad verdadera. Deja de
juzgar a la gente y comprende que nunca podrás entender completamente su situación
a menos que te pongas en su lugar por al menos un día. Concéntrate en ayudar a los
otros en lugar de juzgarlos por ser como son.
Si eres crítico, chismoso o vives hablando mal de las personas que te rodean, nunca
podrás ser una persona realmente bondadosa.
Ser bondadoso significa darle a las personas el beneficio de la duda en lugar de
esperar la perfección.
Parte 2
Desarrolla cualidades bondadosas
1.
1
Sé compasivo con los demás. Es importante tomar en cuenta esta frase, "Sé
amable, pues cada persona que conoces está luchando una batalla difícil". Atribuido a
Platón, este dicho es el reconocimiento de que todos enfrentan retos en sus vidas y a
veces es muy fácil olvidarse de esto cuando estamos envueltos en nuestros propios
problemas o enojados con ellos. Antes de realizar una acción que podría ocasionar un
impacto negativo en otra persona, hazte esta sencilla pregunta: "¿Esto es ser
bondadoso?" Si no puedes dar una respuesta afirmativa, es un recordatorio de que
debes cambiar inmediatamente tu enfoque y tu forma de actuar.
Incluso cuando te sientas en tu peor momento, recuerda que las otras personas
también sienten incertidumbre, dolor, dificultad, tristeza, decepción y pérdida. Esto de
ninguna manera le quita valor a lo que tú sientes, pero te permite darte cuenta de que
las personas a menudo reaccionan desde su propio dolor en lugar de hacerlo desde la
totalidad de su ser. Por este motivo, la bondad es la clave ya que te permite ver más
allá de las emociones negativas y conectarte con la persona que se encuentra detrás
de este dolor.
2.
2
No esperes la perfección. Si tienes una tendencia hacia el perfeccionismo, la
competitividad o un sentimiento impulsivo de urgencia, la bondad para contigo mismo
a menudo puede ser víctima de tu ambición y de tu ritmo acelerado, así como de tu
miedo a que la gente te vea como alguien flojo o egoísta.[9] Recuerda que debes
perdonarte y actuar con calma cuando las cosas no resulten como querías.
Aprende de tus errores en lugar de castigarte por ellos o compararte con los
demás.[10] Es a través de la compasión contigo mismo que puedes empezar a ver las
necesidades de las demás personas desde una perspectiva compasiva.
3.
3
No te olvides de estar siempre presente. El mayor regalo para demostrar tu bondad
con otra persona es estar a su lado en todo momento, escucharla con atención e
interesarse de forma genuina por ella. Para que las personas no te vean como alguien
que vive apresurado, planifica tu día de forma diferente. Estar presente significa estar
disponible y solo puedes estarlo si no estás apresurado pensando en otras personas o
actividades.
Facilita los medios técnicos de comunicación con los demás. La comunicación técnica
impersonal y apresurada como los mensajes de texto o los correos electrónicos son
alternativas válidas, pero no deben de ser tu único medio de comunicación. Tómate el
tiempo necesario para conectarte con las personas cara a cara o a través de una
llamada telefónica ininterrumpida. Envía una carta en lugar de un correo electrónico y
sorprende a alguien con la amabilidad de haberte tomado tiempo de tu día para
agarrar la pluma y el papel.
4.
4
Sé un buen oyente. En nuestro mundo acelerado, donde estar apurado u ocupado
parece ser una virtud, donde lo normal es dejar de hablar con alguien por estar
"ocupado" o tener que llegar corriendo a todos lados; el acto de escuchar no es algo
tan sencillo como parece. Sin embargo, convertir esta forma de actuar en un hábito no
es excusa para no ser bondadoso. Cuando hables con alguien, aprende
a escucharlo con todo tu ser y préstale sincera atención hasta que termine de contarte
sus pensamientos o historias.
No siempre es fácil ser optimista, sobre todo cuando tienes un mal día. Pero con la
práctica suficiente, cualquiera puede cultivar optimismo concentrándose en los
aspectos positivos en vez de en los negativos, pensando en las cosas felices que
vendrán y viviendo una vida que tiene más alegrías que tristezas. Además, ver el lado
positivo de las cosas no cuesta ni un solo dólar.
Mantener una actitud optimista y positiva no solo te ayudará a ser bondadoso, sino
que también serás una razón de alegría para aquellos que te rodeen. Si pasas mucho
tiempo quejándote, será más difícil traer felicidad a las personas que se encuentran
contigo.
Lee los artículos Cómo ser feliz, Cómo ser gracioso y Cómo ser agradecido para
obtener más información sobre cómo cultivar el optimismo.
6.
6
Sé amigable. Las personas bondadosas también suelen ser amigables. Esto no
significa que sean las personas más extrovertidas de la habitación, pero sí que hacen
un esfuerzo para conocer gente nueva y hacerlas sentir en casa. Si hay alguien nuevo
en tu escuela o lugar de trabajo, puedes intentar hablar con él y explicarle cómo
funcionan las cosas e incluso invitarlo a un evento social. Incluso aunque no seas muy
extrovertido, una simple sonrisa y una pequeña conversación pueden ser de gran
ayuda para que seas amigable y estos actos de bondad no pasarán desapercibidos.
Si observas con más atención todas las cosas amables que otras personas realizan
por ti, entonces estarás más preparado para hacer cosas agradables por otros. Serás
más consciente de cuán bien te hace sentir la bondad de los otros y te sentirás más
propenso a difundir ese amor.
Parte 3
Entra en acción
1.
1
Ama a los animales y a todos los seres vivos. Amar a los animales y preocuparse
por las mascotas es la bondad en acción. Nada te obliga a cuidar a seres de otras
especies, especialmente en una época en la que las herramientas de dominación
humana son muy poderosas. A pesar de esto, el mero acto de amar a los animales y
respetarlos por su propio valor es una expresión de profunda bondad. De igual
manera, ser bondadoso con el mundo que nos sostiene y nos nutre es un acto sensato
y bondadoso, por lo tanto, debes asegurarte de no envenenar los elementos que nos
brindan una vida sana.
Adopta o cuida una mascota. Tu bondad será recompensada por dejar que otro ser
vivo entre a tu vida, trayéndote alegría y amor.
Dile a un amigo que puedes cuidar su mascota mientras él esté de viaje. Dale a tu
amigo la tranquilidad de que alguien amoroso y cuidadoso se encargará de su
mascota mientras esté ausente.
Respeta a las especies que tienes bajo tu cuidado. Los humanos no son "dueños" de
los animales, más bien, tenemos la responsabilidad de su bienestar y cuidado.
Tómate el tiempo necesario para restaurar las partes de tu entorno con la comunidad
local. Sal a dar un paseo por la naturaleza con tu familia, amigos o solo. Únete al
mundo del cual eres parte. Comparte tu amor por la naturaleza con los demás para
ayudar a despertar su sentido de conexión con la naturaleza.
2.
2
Comparte. La gente bondadosa se siente feliz por poder compartir. Puedes compartir
tu suéter favorito, la mitad de tu comida favorita o incluso consejos de orientación
profesional con alguien más joven que tú. Lo importante es que compartas algo que
verdaderamente te importe, en lugar de deshacerte de algo que no necesitas. Es
mucho más significativo dejar que tu amigo use tu suéter favorito que darle ropa usada
que nunca usas. Compartir con otros te convertirá en una persona más generosa y por
lo tanto, con más inclinación a la bondad.
Sonreírle a las personas hará que se sientan más cómodas y te verán como alguien a
quien se pueden acercar, lo cual es otra forma de ser bondadoso. Ser amable con
quienes te rodean y darles a los desconocidos el beneficio de la duda al sonreírles,
son otras formas de ser bondadoso.
4.
4
Interésate por los demás. Las personas verdaderamente bondadosas sienten un
interés genuino por el resto. No son bondadosas solo para obtener algo o porque
buscan un favor. Lo son porque se preocupan de forma genuina por cómo se
encuentran las personas y desean que quienes la rodean sean felices y sanos. Para
ser más bondadoso, trabaja en desarrollar un interés por los demás y muéstrales que
te preocupas por hacer preguntas y prestarles atención. Estas son algunas formas de
demostrar interés en las personas:
6
Dona tus cosas. Otra forma de ser bondadoso es donar alguna de tus pertenencias a
la caridad. En lugar de tirar tus cosas viejas o venderlas por 50 centavos en una venta
de garaje, dona las cosas que no necesitas a una buena causa. Si tienes ropa, libros o
cualquier otro artículo para el hogar que se encuentre en buenas condiciones, haz el
hábito de donar estas cosas a la caridad en lugar de guardarlas o tirarlas. Esta es una
gran forma de difundir tu bondad.
Si tienes ropa o libros que alguien que conoces podría llegar a querer, entonces no
seas tímido al respecto y dona tus cosas a esa persona. Esta es otra forma de ser
bondadoso.
7.
7
Realiza un acto de bondad al azar. "Realiza un acto de bondad al azar, sin ninguna
expectativa de recompensa, con la certeza de que un día alguien podría hacer lo
mismo por ti". Estas son las palabras que la princesa Diana dijo una vez. La práctica
de actos de bondad al azar persiste como un esfuerzo consciente de difundir más
bondad; incluso se han creado grupos para realizar este deber cívico
esencial.[11] Estos son algunos grandes actos de bondad al azar que puedes realizar:
8
Transforma tu vida mediante la bondad. Cambiar la forma en la que vives y tu punto
de vista del mundo puede ser algo intimidante. Pero toma nota de la prescripción de
Aldous Huxley sobre cómo transformar tu vida; "Las personas a menudo me preguntan
cuál es la técnica más efectiva para transformar sus vidas. Es un poco vergonzoso que
después de tantos años de investigación y experimentación, tenga que decir que la
mejor respuesta es simplemente ser un poco más bondadoso."[12] Toma los años de
investigación de Huxley con el corazón y permite que la bondad transforme tu vida,
para trascender todos los sentimientos y acciones de agresión, odio, enojo, miedo y
auto desprecio y recuperar la fuerza perdida por culpa de la desesperación.
A través de la bondad, adoptas una posición al afirmar que el cuidado de las personas,
de nuestro ambiente y de ti mismo es la forma correcta de vivir la vida.[13] No se trata
de una efectividad inmediata; la bondad es un estilo de vida, un zumbido constante y
un ritmo que acompaña a todas las cosas que piensas y haces.
Al ser bondadoso, dejas de preocuparte por si otras personas tienen más que tú, se
merecen más o menos cosas que tú o se encuentran en una posición de superioridad
o inferioridad con respecto a ti. En lugar de esto, la bondad asume que todo el mundo
es digno, incluyéndote a ti.
Al ser bondadoso, reconoces que todos los seres vivos son uno. Que lo que haces
para dañar a otro, te daña a ti. Y que lo que haces para ayudar a otra persona, te
ayuda a ti. La bondad brinda dignidad a todos por igual.
Consejos
Los actos de bondad crecen de una persona a otra. Por lo tanto, debes ser bondadoso
sin esperar nada a cambio. Sin embargo, la bondad que entregues regresará a tu lado.
No pienses solo en el corto plazo; los actos bondadosos que realices hoy quizás le
enseñen a alguien a hacer actos bondadosos por los demás y ellos aprenderán de tu
ejemplo como el destinatario de tu bondad. Por otra parte, la bondad tiende a producir
efectos más allá de su punto de contacto inicial; muchas personas se sienten
sorprendidas cuando descubren que después de varios años un acto de bondad ayudó
a una persona al punto tal de inspirarla para hacer algo increíble o creer más en sí
misma. Ten en cuenta que los actos de bondad perduran en el tiempo.
Haz una cena para un amigo que esté atravesando un momento difícil.
Visita un asilo y pasa una hora jugando a las cartas con alguien que no reciba muchas
visitas.
Ayúdale a cargar las maletas a alguien que tenga dificultades para hacerlo.
Si alguien a quien no conoces te sonríe, no dudes en devolverle la sonrisa; esto es un
gesto de bondad.
Advertencias
No sientas la necesidad de presumir tus buenas obras, sé humilde. Hacer algo
agradable solo para congraciarte con las personas que te rodean no es un acto de
bondad. Ayudar a alguien de forma desinteresada puede generar el mismo placer.
Si estás muy enojado o molesto con alguien, ten en cuenta que la bondad crea un
endeudamiento mayor que los malos actos. Las personas pueden crear todo tipo de
justificaciones para actuar con maldad, pero ser perdonado con la bondad es algo de
lo cual nadie puede huir.
Referencias
1. ↑ Piero Ferrucci, El poder de la bondad, p. 8 (2007), ISBN 978-1-58542-588-4
2. ↑ Piero Ferrucci, El poder de la bondad, p. 9 (2007), ISBN 978-1-58542-588-4
3. ↑ Piero Ferrucci, El poder de la bondad, p. 7 (2007), ISBN 978-1-58542-588-4
Mostrar más... (10)
En las redes sociales, la imagen de nuestro perfil será parte de nuestra marca.
Por eso es importante cuidarla, mimarla, tanto como nuestros contenidos u otros
aspectos importantes de la gestión de comunidades, ya que esta imagen será
determinante para nuestra marca y la percepción que las personas que nos siguen
tienen sobre ella.
10 puntos las pautas, que a nuestro juicio, hay que tener en cuenta a la hora de
elegir la foto de perfil profesional:
2-FONDO NEUTRO
Es importante evitar fondos que distraigan la atención. Aquí lo importante eres tú, tu
imagen, tu rostro, tu expresividad. Si distraemos la atención con elementos, las
miradas van a centrarse en objetivos que no nos interesan, y no en nuestra imagen.
3-CERCANÍA.
Es importante que la persona nos diga algo, nos trasmita cercanía, que de la imagen
se desprenda buena sintonía. Si la imagen no engancha o produce rechazo, nos
alejaremos de nuestro objetivo, es decir, causar una buena imagen.
La fotógrafa, Idoia Telleria, intentó en todo momento conseguir que me relajara, para
captar así mi propia esencia y personalidad. Son muchos los puntos que debe tener en
cuenta el profesional de la fotografía, e Idoia consiguió, a pesar de la tensión del
principio, que me llegara olvidar que estaba siendo fotografiada, consiguió así su
objetivo. De esta forma, el resultado final fue un retrato en el que me reconocí
fácilmente, o como me dijo la fotógrafa, “he conseguido una imagen que eres muy tú”.
7-LUZ CORRECTA.
Es importe que los ojos tengan el punto de luz especial. ¿Qué podemos hacer para
conseguirlo? Podemos trabajar a contra luz, con la ayuda de un reflector iluminar los
ojos y la cara. Si estamos trabajando en estudio, emplearemos flashes que cubriremos
con ventanas o paraguas difusoras, de tal manera que la luz sea mucho más
agradable y difusa, y conseguiremos así la naturalidad que buscamos.
9. IMAGEN RECIENTE.
No sirve de nada una imagen de un tipo de 20 años, muy sonriente, cercano y natural,
y coincidir en un evento y ni siquiera reconocerle porque estamos frente a un señor de
50 años. Aunque es de sentido común, me ha ocurrido en varias ocasiones
sorprenderme y ni siquiera reconocer a la persona que conocí en redes y a la que
tenía en persona. Tenemos que ser reconocibles, y que la imagen online y la offline no
estén tan alejadas.
10. APUESTA POR PROFESIONALES.
Un profesional, o aficionado a la fotografía, puede sacar más partido e inmortalizar esa
imagen tan difícil de conseguir. Siempre un experto en fotografía consigue ese toque
profesional, aportando ese valor añadido y esa calidad que te distingue.
La cámara con la que tomas la foto, también dice mucho de tí. No es recomendable
realizar la foto con un móvil o un selfie, con poca calidad. Elegir un fotógrafo
profesional, seguro que te ayudará a mostrar tu mejor imagen.
Hemos intentado que mi foto de perfil resuma los 10 puntos claves para una foto de
perfil profesional y estoy encantada con el resultado.
Espero que os guste mi nueva imagen para redes sociales profesionales, así
que AÑO NUEVO, IMAGEN NUEVA, en 2016 me encontraréis en las redes
profesionales con esta nueva imagen.
10 características de las
personas inteligentes
17 de julio de 2017 11
Descubrí algunos de los rasgos que tienen en común las personas más
inteligentes
Las personas inteligentes tienen un gran sentido del humor | Autor: | Fuente: Shutterstock
89
Las personas inteligentes no solo nos generan admiración, sino que nos dan
ganas de ser como ellos. A continuación, te contamos algunos de los rasgos
más característico de las personas inteligentes.
1. Saben escuchar
Para aprender la clave está en saber escuchar. Esto lo tienen muy claro las
personas inteligentes, que siempre están dispuestos a escuchar a quienes
tienen algo realmente interesante para compartir.
2. Son curiosas
5. Perfil bajo
En las reuniones de trabajo, aunque muchos reconocen estar ante una persona
inteligente inteligentes, no hacen alarde de eso. Por el contrario, intentan que
el resto de los presentes sean reconocidos y considerados como profesionales
destacados. Saben que sus capacidades deben ser utilizadas para trabajar, no
para reconocerse como mejores ante el resto.
7. Son procrastinadores
Este tipo de personas suele postergar las cosas y dejarlas para otro momento.
Según investigaciones, existe una relación entre la procrastinación, la
indecisión y la creatividad. Son personas que se toman mucho tiempo para
pensar las cosas y analizarlas desde distintas perspectivas. Como veremos en
el siguiente punto, este comportamiento es coherente con la capacidad de
autocontrol que tienen.
8. Tienen autocontrol
Las personas inteligentes se caracterizan por tener un gran sentido del humor.
Se ríen mucho y también hacen reír a los demás.
Fuente: Universia Argentina
VIRGINIA CARBAJO
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