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BODAS DE SANGRE:

Acto primero: Cuadro primero

Novio: Madre me voy

Madre: ¿Adónde?

Novio: A la viña

Madre: Hijo, coge el almuerzo.

Novio: Déjalo. Comeré uvas. Dame la navaja.

Madre: La navaja, la navaja, malditas sean todas y el hombre que las inventó.

Novio: ¡Vamos!

Madre: Que me gustaría que fueses una mujer. No te irías a la viña ahora y bordaríamos las dos.

Novio: Me voy

Madre: Anda con Dios.

(Se va el novio. La madre se sienta en la puerta. Aparece una vecina)

Vecina: ¿Cómo estás?

Madre: Ya ves.

Vecina: Ay, ¿Y tu hijo?

Madre: Salió. Oye, ¿Tú conoces a la novia de mi hijo?

Vecina: Buena muchacha, vive sola con su padre. Está acostumbrada a la soledad.

Madre: A mí me habían dicho que la muchacha tuvo novio hace tiempo.

Vecina: Tenía ella quince años. Él se casó hace dos años con una prima de ella.

Madre: ¿Quién fue el novio?

Vecina: Leonardo.

Madre: ¿El de los Félix?

Vecina: Sí

Madre: (se altera).

Vecina: Me voy que pronto vendrá mi familia del campo.


Madre: Adiós.

Acto primero: Cuadro segundo

(La mujer y la suegra le cantan nanas al niño)

Leonardo: ¿Y el niño?

Mujer: Se durmió.

Leonardo: Voy a verlo.

Mujer. Ten cuidado, está dormido.

(Entra de nuevo a la sala, después de ir a ver el niño)

Mujer: ¿Sabes que piden a mi prima?

Leonardo: ¿Cuándo?

Mujer: Mañana. La boda será dentro de un mes.

Suegra: La madre de él creo que no estaba muy satisfecha con la boda.

Leonardo: Y quizás tenga razón. Ella es de cuidado.

Mujer: No me gusta que penséis mal de una buena muchacha.

Suegra: Cuando dice eso es porque la conoces. ¿sabes que fue tres años novia suya?.

Leonardo: Pero la dejé.

(Entra una muchacha a informar de que el novio y su madre, van a comprar las mejores telas y flores que hay
en la tienda. Con los gritos despiertan al niño y para volver a dormirlo la suegra y la mujer vuelven a cantar
las nanas).

Acto primero: Cuadro tercero

Están en la casa de la novia

Madre: ¿Traes el reloj?

Novio: Sí

Madre: Tenemos que volver a tiempo. Esta gente vive muy lejos.

Novio: Pero las tierras son muy buenas.

(Entra el padre de la novia. La madre y el novio se levantan y se dan las manos en silencio).

Padre: ¿Mucho tiempo de viaje?


Madre: Cuatro horas.

Padre: ¿Habéis visto que buena cosecha de esparto?

Novio: Buena de verdad.

Madre: Pero ahora da, no te quejes.

Padre: Tú eres más rica que yo. Las viñas valen un capital.

Madre: ¿Sabes a lo que vengo?

Padre: Sí, ¿Y qué? Me parece bien, ellos lo han hablado.

Madre: ¿Cuándo queréis la boda?

Novio: El jueves próximo.

(Pasa la criada).

Padre: Dile que ya puede entrar.

Madre: ¿Estás contenta?

Novia: Sí, señora.

Madre: Aquí te traemos unos regalos.

Novia: Gracias.

(Todos están de pie)

Novio: Mañana vendré

Novia: Vale, aquí te espero.

Criada: Vayan ustedes con Dios.

(La madre besa a la novia y salen en silencio).

Criada: Tengo muchas ganas de ver los regalos.

Novia: Quita.

Criada: Está bien, parece como si no quisieses casarte.

Novia: Ay.

(La luz va desapareciendo de la escena).

Criada: ¿Sentiste anoche un caballo?

Novia: Sería un caballo suelto de la manada.


Criada: No, llevaba jinete.

Novia: Quizás fuese mi novio, algunas horas ha pasado a esas horas.

Criada: No, lo vi era Leonardo.

Acto segundo: Cuadro primero.

La novia sale con las enaguas blancas. La criada lo mismo.

Criada: Aquí te acabaré de peinar.

Novia: Ahí dentro hace mucho calor.

Criada: No te pongas triste. ¿Es que no te quieres casar? Todavía te puedes arrepentir.

Novia: Son nublos. Un mal día lo tiene cualquiera. Yo estoy segura de que quiero casarme.

Criada: Venga, démonos prisa. Te voy a poner la corona

Novia: Date prisa, deben ir llegando.

(Los primeros invitados llegan cantando. Llaman a la puerta y abre la criada)

Criada: ¿Tú?

Leonardo: Yo. Buenos días.

Criada: Siéntate. Todavía no se ha levantado nadie.

Leonardo: ¿Y la novia?

Criada: Ahora la voy a vestir.

(Aparece la novia, todavía a medio vestir)

Novia: ¿A qué vienes?

Leonardo: A ver tu casamiento.

Novia: Yo no debo hablarte siquiera. Vete y espera a tu mujer en la puerta.

Leonardo: ¿Es que ya no podemos hablar?

Novia: Yo tengo orgullo. Por eso me caso y me encerraré con mi marido, a quien tengo que querer por
encima de todo.

Criada: ¡Debes irte ahora mismo!

Leonardo: No me quedaba tranquilo sino te decía estas cosas. Yo me casé, cásate tú ahora.

Criada: Ya está aquí la gente.


(La gente ya está en la puerta cantando, aparece la novia, las guitarras suenan y las muchachas besan a la
novia)

Madre: Hay muchas gente aquí.

Padre: Son familia, hoy es día de perdones.

(Los novios ansiosos porque llegue la hora, y toda la gente comienza a salir).

Acto segundo: Cuadro segundo

Exterior de la cueva de la novia.

Madre: Por fin.

Padre: ¿Somos los primeros?

Criada: No. Hace rato llegó Leonardo con su mujer.

Padre: Ese busca la desgracia. No tiene buena sangre.

Madre: ¿Qué sangre van a tener? La de su familia. Su bisabuelo empezó matando, manejan cuchillo y tienen
falsa sonrisa.

Padre: Hoy no es día para que recuerdes esas cosas. Ya están aquí.

(Van entrando los invitados en grandes grupos. Entran los novios cogidos del brazo. Sale Leonardo).

Madre: (A la novia) ¿Qué piensas?

Novia: No pienso en nada.

(Se marcha Leonardo por la derecha)

Novia: (al novio) Ahora vuelvo.

Mujer: Que seas feliz con mi prima.

Novio: Estoy seguro.

Criada: ¿No tomáis nada? Te voy a envolver unos roscos de vino para tu madre.

Novio: un día es un día.

Mujer: (A la criada) ¿Y Leonardo?

Criada: No lo vi.

Mujer: Voy a ver.

(Salen. Se oye un gran ruido. Sale la novia. Por el lado opuesto salen dos muchachas corriendo a
encontrarla).
Novio: ¿Qué tienes? ¡Estás como asustada!

Novia: No tengo nada. No te vayas. Solo me duele un poco en las sienes.

Novio: Vamos un rato al baile.

Novia: No. Quisiera echarme un poco en la cama.

Novio: Yo te haré compañía.

Novia: Nunca, no puedes dejar a toda la gente aquí. A la noche estaré mejor.

(Se ve al fondo a la criada corriendo).

Padre: (entrando) ¿Y mi hija

Novio: Está dentro.

Padre: (Va a mirar) ¡Aquí no está!

Novio: ¿No está?

Padre: No.

Mujer: ¡Han huido! Ella y Leonardo. En el caballo.

Novio: ¡Vamos detrás!

Madre: ¡Anda! ¡Id detrás!

Acto tercero: Cuadro primero

Bosque. Es de noche. Ambiente oscuro. Aparecen tres leñadores, hablan sobre como la luna los va a guiar.

Novio: Por aquí.

Mozo 1: Creo que se han ido por otra vereda.

Novio: Calla. Estoy seguro de que los encontraremos aquí.

(Aparecen Leonardo y la novia).

Leonardo: ¡Calla!

Novia: Desde aquí yo me iré sola.

Leonardo: ¡Calla, digo! Nos persiguen y te he de llevar conmigo.

Novia: ¡Pero ha de ser a la fuerza!

Leonardo: ¿A la fuerza? ¿Quién bajó primero las escaleras?


Novia: Yo las bajé. ¡Te quiero! ¡Te quiero! ¡Aparta! Que si matarte pudiera, lo haría.

Leonardo: Viene gente.

Novia: ¡Huye! Es justo que yo aquí muera.

Leonardo: Cállate. Ya suben.

Acto tercero: Cuadro segundo

Muchacha 1: ¿Vienen ya!

Suegra: No sabemos.

Mujer: ¿Qué habrá pasado?

Suegra: No importa.

(Se queda la escena sola. Aparece la madre con una vecina. La vecina viene llorando).

Madre: No llores.

Vecina: No puedo.

Madre: Tus lágrimas están solo en los ojos, las mías vendrán cuando yo esté sola.

Vecina: Vente a mi casa; no te quedes aquí.

Madre: Aquí quiero estar. Ya están todos muertos.

(Aparece la novia, viene con un manto negro).

Madre: ¿Quién es?

Vecina: ¿No la reconoces?

Madre: Por eso pregunto quién es. ¿Dónde está tu honra? (Golpea a la novia. Ésta cae al suelo).

Novia: Déjala he venido a que me mate.

Madre: Llora pero en la puerta.

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