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CAPITULO XVIII

DERECHOS Y OBLIGACIONES DERIVADOS DE LA


CAPACITACióN Y EL ADIESTRAMIENTO

l. La capacitación y el adlestramiento como derecho de los tra-


bafadores.-2. Obligaciones de los trabajadores.-3. La obligación
patronal: su naturaleza condicional.-4.· Los convenios de capaci-
tación y adiestramiento.-5. El objeto de la capacitación y el
adiestramiento.-6. Cof!diciones legales de los planes y progra-
mas.-7. Instructores, horarios y lugares.-8. La negativa del tra-
bafador a recibir capacitación.

l. LA CAPACITACIÓN Y EL ADIESTRAMIENTO COMO DERECHO DE LOS


TRABAJADORES

En la frac. XIII del Apartado "A" del art. 123 constitucional, la


capacitación se plantea como obligación a cargo de los patrones,
pero específicamente con relación a los patrones empresarios. Por
el contrario en la ley el art. 153-A declara taxativamente que "todo
trabajador tiene el derecho a que su patrón le proporcione capaci­
tación o adiestramiento en su trabajo..."
Esta diferente manera de establecerse la fórmula obliga, desde
el punto de vista sistemático, a una toma de posición. Nosotros he­
mos preferido considerar la capacitación y el adiestramiento, en
primer término, como el derecho subjetivo de carácter social que la
ley menciona y, en segundo lugar, en la perspectiva de la obliga­
ción .Patronal.
Una primera cuestión surge a propósito de los alcances del de­
recho: ¿Es un derecho de todos los trabajadores? ¿Es un derecho solo
de los trabajadores que laboren al servicio de una empresa?
Si atendiéramos solamente al esquema del art. 153-A, el derecho
correspondería a todos los trabajadores, inclusive a aquellos que no
boran en empresas, como son, v. gr.: los domésticos y los traba­
- dores al servicio de un sindicato. Sin embargo, esta conch sión se
320 DERECHO DEL TRABAJO DERECHOS Y OBLIG¡

contrapone con la clara limitación constitucional, que enfáticamente Es clara la in


refiere a las empresas Ia obligación respectiva y ál sentido general
no se les cargue, s'
de la le¡ que ubica la obligación precisamente'en el ámbito em- trarse, de no ace¡
presarial, Así pueden invocarse como ejemplos los arts. t5B-B y
mente claro que
153-D. El primero menciona que la capacitación o adiestramiento
es hora de que t
deben proporcionarse "dentro de la misma empresa o fuera de ella", bre con resPonsat
en tanto que el segundo indica que los cursos y programas podrán endeble, incaPaz,
formularse 'iespecto a cada establecimiento, una empresa, varias de oermanente. Si el
ellas o respecto a una rama industrial o actividad determinada". 'incremente la
Prc
Es importante advertir, sin embargo, que el precepto constitucio- preparen y no se
nal acusa una concepción subjetiva de la empresa que evidente- d¡amáticas exiger
mente no se compagina con las mas modernas corrientes a propósito Por otra Parte
de esa institución. Al indicar que "Las empresas, cualquiera que sea borales, la conüt
su actividad, estarán obligadas a. . ." convierte a la empresa en un esto es, el eierci«
sujeto de derecho, olvidando que la empresa es nada más que la difícilmente se P
unidad económica donde preferenternente se producen las relacio- nos generales- u
nes laborales, A la empresa concurren, como elementos subietivos, dorechos Prefere
los empresarios y los trabajadores (ver t. I, cap. XXVII, núms. 7 y antigüedad de ot
8), quienes son titulares de los derechos y obligaciones respectivoi, tas de meioría e
oero la empresa no es, por sí misma, un suieto de relaciones jurí- resado convencer
dicas. El que tiene ese carácter y al que debió referirse la irac. Ies puede Produ
XIII,.es el empresario. Inclusive esa conce¡rción de la empresa eomo En última int
"ambiente de las relaciones laborales" es lá que paradó¡ióamente se si los trabajadore
considera en el art. 153-8 ya invoc-ado, cuando menciona que Ios tramiento un fac
cursos deben proporcionarse dentro de la misma empresa o fuera tos de nueva crl
de ella. ilor más antiguc
Al perfilar la capacitación y el adiestramiento como derecho de para lograr esos-
los trabajadores el legislador colocó en situación compromeüda a en el que los ió
toda la institución por cuanto condicionó el aspecto obligatorio a quienes Ya no
ende toda la carga que supone para el patrón- a la buena dispo-
-y por Con ello detiene
sición de los tlabajadores para capacitarse. De esa manera montó la productividad
todo un aparato espectacular, un hermoso edificio de múltiples pi- a nuestro desar
sos, en una precaria columna, punto único de apoyo: la buena dis-
posición del trabajador, inclusive a nivel individual, para aceptar ser
capacitado o adiestrado.
2. On¡-rclcro¡re
En mi concepto cabría preguntarse si no estaremos de nuevo en No obstante
presencia de un excesivo afán tutelar que tan pernicioso puede re-
lador se atrevid
sultar y que se produce en los casos en que el legislador demuestra
bs trabaiadores
un celo social, favorecedor del establecimiento de derechos sub¡eti- de su derecho a
vos sociales, a pesar Ce clue en el mundo actual lo que debe plan-
se indica, Preci
tearse con énfasis mayor son las responsabilidades iociales.
P'¡r'ta caPacitac
Es clara la intención del legislador de que a los trabajadores
se les cargue, sobre la tarea de trabajar, la de capacitarse o adies-
se, de no aceptarlo ellos de manera voluntaria. Pero es igual-
nte claro que no se va a ninguna parte con tales criterios. Ya
hora de que también el trabajador sea considerado como hom-
con responsabilidades sociales, mayor de edad, y no un sujeto
deble, incapaz, que exige una protección enfermiza y una tutela
anente. Si es necesario, porque lo es, que en nuestro país se
emente la productividad, oblíguese a los trabajadores a que se
paren y no se sigan adoptando actitudes incongruentes con las
áticas · exigencias del tiempo en que vivimos.
Por otra parte, en el malicioso mundo de nuestras relaciones la-
les, la condición para el nacimiento de la obligación patronal,
o es, el ejercicio del derecho subjetivo por parte del trabajador,
· 'cilmente se producirá. No tiene mayores atractivos -en térmi-
generales- una solución que conduce a la meta final de unos
echos preferenciales, subordinados a los mejores derechos de
tigüedad de otros trabajadqres y no a realidades concretas y cier-
de mejoría económica. Ningún trabajo costará al patrón inte-
ado convencer a los trabajadores de lo precario del beneficio que
puede producir su capacitación.
En última instancia, habría tenido mayores atractivos el sistema
los trabajadores pudieran encontrar en la capacitación y el adies- _
iento un factor de preferencia para ocupar las vacantes o pues-
de nueva creación. Sin embargo, no es así, ya que el trabaja-
r más antiguo no requiere ser más capaz sino solamente capaz,
a lograr esos puestos. Por eso resulta absurdo que en un mundo
el que los jóvenes son una aplastante mayoría, la ley beneficie
quienes ya no lo son, por solo el hecho de su mayor antigüedad.
Con ello detiene el progreso de los trabajadores nuevos; obstaculiza
productividad y, en última instancia, le hace_ 'Una pésima jugada
nuestro desarrollo económico.

ÜBLIGACIONES DE LOS TRABAJADORES

No obstante el sentido tutelar de la ley en este capítulo, el legis-


dor se atrevió a tocar con pétalos de rosa la dura epidermis de
trabajadores al imponerles unas relativas obligaciones correlativas su
derecho a la capacitación y al adiestramiento. En el art. 153-H
indica, precisamente, que aquellos trabajadores a quienes se im-
a capacitación y adiestramiento están obligados a:
DERECHOS Y OBLTGA
322 DERECHO DEL TRABAIO

rídicas contenidas r
'I. .bfotir püntualmente a los cursos, sesiones de grupo y,|el1rá" ción. tan ambigual
aetividades q..i fot*"., parte del Proceso de capacitación o adiestra-
Én el fondo la
miento;
-IL Atender ,o indicaciones
las le¡ personas 'que impartan
dp las
in¡:linoninnpc de la ca- rarse la violacióa
pacitación o adiestramiento, y cumplir ryn 19: pr:gramas.rTPe.:tivos;,I guna de las causa
^ TII. hesentar los exáménes dé evaluación de conocimientos y de Contestar la Pr
apütud que sean requeridos." ciones, a saber: l
rante la jornada d
La ley es omisa, al menos en este capífulo, respecto de las con' de la jornada. A
,""rÁ"ií. q,r" podtí, producir el incumplimiento-por parte de los impone al Patrón
'1", obligaciones prwis_tai en las dos frac-
iiuUu¡raor"r'd" -primeras la iornada, aunqu
ciones. Tampoco ," pr"ái* dentro del propio capítulo cual será el ." il"u" a cabo I
efecto de q,re el tra6a¡ador se abstenga de los exámenes trata de PreParar
de evaluaci¿" ¿" y de aptitud-presentar
que sean requeridos. habitual (art. 15
"orroóimi"otos
Es claro que estamos en presencia de una legislación de apoyo. De Producirse
oue deia a loi interesados la tarea de precisar en los contratos co- mera de las hiPc
t'""tirror de trabajo o en los convenios directamente celebrados con baiador se entien'
iá, ár¡+dores,'los términos en que se producirán las responsabi- las ina§istencias :
lidades áutuas. Estas disposiciones claman, pues, por una regla- tardos, a las situ¡
mentación a cargo de los propios interesados. Pero nos parece que mento Interior d
á"d; abiertas rliversas "o"itidt "t que exigen, por lo menos, algun capacitador o la
comentario. diencia resPecto
Todo el art. 153-H parte d.e la hipótesis de que el trabajador En ese sentido se
haya aceptado ser capacitado o adiestrado. La pre-gunta -que surgc
^adhesión
nestación, suspen
es
lsi esa volúntaria tiene o no un camino lícito de regle§q' la causal esPecíf
una vía de arrepentimiento. En mi concepto -no debe de ser la frac. XV del
"rto "r,
así. El trabajador que aiepta se vincula a determinadas obligaciones las previstas en
áá'm Ñ¡ig poara sustráerse en forma unilateral salvo, claro está" Si el incumP
una razón justificada. la situación será
La cuestión se plantea, de hecho, respecto a las dos primeras fica recursos ec
tación en tiemPc
fraeciones, ante la posibilidad del incumplimiento. ¿Qué consecueD
cias traerá para el trabajador?: La sanción habr
la oportunidad
a) No asistir a los cursos; ello trae consig
b) No asistir, Puntualmente; ascenso.
c) No atender Ias indicaciones de los instructores; Con resPectt
d) No cumplir con los programas respectivos' trabaiador no ¡
Al analizar este problema Amado R. Díaz estima con .criterio tos y de aPtitut
sospechosamente paúonal, que el incump_limiento "generaría pa.
-sanción
perderá su den
i; ;p;;; el deiecho de disciplinaria- o. rescisión, segrh para caPacitarx
h imf,o*ancia y gravedad del caso conforme a las disposiciones i6- terminada Ia rt
TRABA. ER ECHOS Y OBLIGACIONES . 323

ydem dicas contenidas en la LFT" ( Ob. cit., p. 79). Creemos que la solu­
adiestra- on, tan ambiguamente planteada, es más parcial que fundada.
En el fondo la cuestión se reduce a lo siguiente: ¿puéde equipa­
la arse la violación a las obligaciones previstas en el art. 153-H a al­
ctivos· ;una de las causales de despido incluidas en el art. 47?
tos y Contestar la pregunta anterior exige que se distingan dos situa­
nes, a saber: la capacitación y el adiestramiento prestados du­
. nte la jornada de trabajo y la que debe recibirse antes o después
_ la jornada. Al respecto debe recordarse que la regla general
pone al patrón la obligación de impartir la capacitación durante
jornada, aunque por excepción, previo acuerdo entre las partes
lleve a cabo fuera de ella, lo que en todo caso ocurrirá si se
xámen
ta de preparar ál trabajador para una actividad distinta de la
erido
bitual ( art. 153-E).
apo
De producirse el incumplimiento de las obligaciones en la pri­
atos
era de las hioótesis. creemos razonable que la conducta del tra­
dos O'"
ador se entienda realizada con motivo de su trabajo, por lo que
onsal
inasistencias se equiparan a las inasistencias al trabajo; los re­
reg dos, a las situaciones análogas previstas, en su caso, en el Regla­
oto Interior de Trabajo y la desatención a las instrucciones del
pacitador o la no realización del programa aprobado, a la desobe­
encia respecto del trabajo contratado o a la falta de probidad.
bajad ese sentido se podrán aplicar sanciones menores o mayores (amo­
e sur stación, suspensión hasta por ocho días, rescisión) de acuerdo a
regres causal específica. Esta equiparación podría tener fundamento en
.de frac. XV del art. 47 que hace reterencia a las causas análogas a
acioc previstas en las primeras catorce fracciones.
o e Si el ü cumplimiento tiene lugar fuera de la jornada de trabajo
situación será, en nuestro concepto, otra. Aquí el patrón sacri­
recursos económicos pero no el tiempo de trabajo. La apor­
ión en tiempo del trabajador coloca las cosas a un nivel distinto.
sanción habrá de ser, simplemente, que el trabajador perderá
oportunidad de capacitarse, con las consecuencias relativas que
trae consigo en orden a la pérdida de las oportunidades de
enso.
Con respecto a la frac. III del art. 153-H, nos parece que si el
bajador no presenta los exámenes de evaluación de conocimien­
criten
y de aptitud que sean requeridos, o resulta reprobado en ellos,
a par­
derá su derecho a los ascensos. Si el trabajador fue contratado
segú:: -a capacitarse, su evidente inhabilidad permitirá al patrón dar por
nes j inada la relación laboral, sin responsabilidad, con apoyo en la
DERECHOS Y OI
DERECHo DEL T
324
de la ley. f,
fracciónlVdelart.Ss.SobreestovolveremosenelCapítulo patronai si, e
guiente. piden -o no,
La modali
§U NATURAI;EZA CONDICIONAL
que los emPr,
3. L,T OSfTCICIÓX PETNON¡.T: respecto a las
153-F aclara,
La nueva frae. XV del art' 182 indica- que lglpatrones tier por obieto, er
b ;lig";io, .""
¿" propo:cionar -a- ry f+"135o,t-* ,"1p-Tt^t"Sl1 habilidades d
;dñ;;;;; io, iér*ioo, del capítulo rrr-bis de este Tíl
obligación sometida a reglas concretas iador para ot
6;;tq-e;ó d" "", Creemos,
presenta diversos matiees.
eapacitación'
Podrlamos intentar presentar en una relaeión los
aspeetos
convenio. Dt
la¡es de esa obligación. Serlan los siguientes:
señala el art,
¿) Proporcionar a cada trabaiador cap-acitación o del sistema ¡
* ,ú ttub^"io que !e perrrita etevg supatronales
rr, {vet * T11 qle Id ne, necesariat
ü D*ih; " 1*^ de-capacitación
t"ptutentantes
y- adiestr".Ti"llo'
ca el sistema,
-" á*isioies
hs mixtas
;i"ñ;;ip*;1";;iú;;-i"'tr" comités Nacionales de cr
pií."ió" t i&qt "*,Ttl Po'*l""uuos
t%;;;li;il;;;io§
- IT.T -"i:g*"?
de trabaio L.las:"1il11?,1"T
cláusulas "". 4. Los coNv
tivas'a
- su obligación de eapacitar y adiestrar' r¿-- :-..:^^-.
.n," ta STñS, dentro de los quince.dlaspl,tisiguientes r Al hacer,
J Pr"r"nrí colccrivo'
celebración, revisión p¿iÁgt del contrato
-.'^1f:: actos jurídic
"
:ffi :'ffiiü;ü; üJpi.'"l-v-p rosramas d e ca paci tac ió n v ad i entonces qu,
miento que hubieren sido acordados' r- ^ L--L:--^ anr+or resulta del r

;i"biP;l#:*s:**s'"'r;-üi:f"ü:"'f x6¡l#;; brado, a su


XXVIII, ne
;;#t"' ili;;";;;.'"'r-iur tiab"¡'' denüó de los Prirrc
jurídicos en
iesenta dlas de los años imPares'
"- de los desti
p.i' tu registro v.control' listas de las con
gl E;;i;r a la STPS
No hay t
cias"qre hubieren expedido a sus trabajadorcs'
to deben dt
sujetas a una partir del d
Consideramos que estas obligaciones están
153-A, la le
*"'i..iy a r¡na modalidad.
eión r__-:r^J ^^-.io+ir.( en planes-f Pr
;r"d;ró" _yr expresada-i""¿tcon anterioridad- consistirá
los trabaiador"r, por*ri-o''" á" t" T:p1:,t::ti:YL sindicato o
',ll liTifi.-rlii,5"ü. 's; il; i; ;" -*1",*'
sitriación análoga a la deben de s
ih;:";i'ir.-áli, qt a
Lurgu-a tos patrones ":l"b'T-"oil
sindic-ato-que represen-te a sus tra
Es imE
Ia teoría d
*f*tl"* ¿" t "U"¡á áon
"1
il; b; G-t'"lr¡"áo'* no se sindiealüan ","1
-:119iTt:^11.L::
a) Eler,
;';"ilffi;á;i;,;-i't;
;"ii{*"*, obtener el contrato colectivo
del derecho, Ia obligación paü
a) 7. St

cualouier vicisitud *
H1ffi;;;i;á""; ; ililb'á"i'"¡"i"fci"o producido incumplimiento al
DERECHOS Y OBLIGACIONES 325

de la Jey. De la misma manera, tampoco habrá responsabilidad


patronal si, en las mismas hipótesis de conducta, los trabajadores no
piden -o no pueden conseguir- el convenio de capacitación.
La modalidad -que la ley no expresa con claridad- consiste en
que los empresarios solo están obligados a c,apacitar y adiestrar con
respecto a las actividades de la propia empresa. Precisamente el art.
153-F aclara que la capacitación y el adiestramiento deben de tener
por objeto, entre otros "actualizar y perfeccionar los conocimientos y
habilidades del trabajador en su actividad..." y "preparar al traba­
jador para ocupar una vacante o puesto de nueva creación".
Creemos, inclusive, que la integración de las comisiones mixtas de
capacitación y adiestramiento está sometida a la previa existencia del
convenio. De otra manera no podrían entenderse los fines que les
señala el art. 153-I, esto es, vigilar la instrumentación y operación
del sistema y de los procedimientos que se implanten, lo que supo­
ne, necesariamente, la existencia de un convenio previo que establez­
ca el sistema.

4. Los CONVENIOS DE CAPACITACIÓN Y ADIESTRAMIENTO

Al hacer, en el Primer Tomo de esta obra, la clasificación de los


actos jurídicos laborales, mencionamos a los actos debidos. Pijimos
entonces que acto debido es toda manifestación de voluntad que
resulta del cumplimiento de una norma legal o de un pacto cele­
brado, a su vez, en cumplimiento de una norma legal (t. I, cap.
XXVIII, n9 3). Después aclaramos que se diferencian de los negocios
jurídicos en que su celebración constituye una obligación para alguno
de los destinatarios de la norma (t. I, cap. XXVIII, n9 4).
No hay duda de que los conven i os de capacitación y adiestramien ­
to deben de inscribirse en la misma categoría de los actos debidos. A
partir del derecho individual a la capacitación mencionado en el art.
1 53-A, la ley remite a las condiciones en que deba de prestarse a los
planes-y programas formulados, de común acuerdo por el patrón y el
sindicato o sus trabajadores, con la particularidad de que, además,
deben de ser aprobados por la STPS.
Es importante hacer la· disección de estos ·convenios a la luz de
la teoría del acto jurídico laboral.
a) Elementos esenciales.
a) l. Sujetos.-Puede haber dos versiones desde el punto de vista
DEREcHo DEL TRABAJo DERECHOS Y C

326
bajo Pena de
delosüabajadores,sibiendesdeelladopatronalsrermpreexistirá
colectiva' por Io menos' de los contr¿
-"-f*
una persol]¿t física " ;;;;;"';a iurídica foma escrita
t,ua j acl,res i;.'F':ltt -" "::::i:,Si:,.##ffi :::::B "' T; No Puedt
celebrados d
fl,,rf Xx""lilÍ,ixi::,r,'f"ü:"l'H;;m'*i'"'aracoarición
misma tl"bo' cle celebrarse dí- alto el requi
Es factible que en una "-*ptlt" en los casos en que posibilidad
acliestramiento'
versos convenios ¿" (v' gr': en
"'p."il;iá' colectivos de trebajopreciso cele- uartes ante
uueden coexistir. ¿i*iro, contratos serí quier otra ft
ias hipótesís del art' 388)' Cree*o'
q'-rJ'-
"á"*á''
o las coalicio""s de los embargo, qr
brar convenio, ",p"'"i;ñ';o",, .,^ti,-,ti*..t"t expresamente excluidos brarse Por e
éstos q""Juto"
empleados d" "ooiio*a' si rtlan c)
colectivos de trabajo que
Requ
cle las clisposiciones de ios co,t'atÑ La efica
en la empresa, de u"t'"'do a
lo previsto en el ¿rt' 184' nes o Plazo
Para acred"*' i'-á'i'iencia
te la coalición de los del
trabajadores
derecho del que los cor
s"¡"to
la que hemos'at"i'"'á"á conlitul'J'"" sometidos ¿
-de será preciso q1? se celebre
trabaio (ver t. I, ;;';dvr, "¡ s1-' ef""lto se expida por algu- pliures / PI
que al
-á"u"ian
una asambl"u, pr"uiu'"onvocatoria plesas ( art
nos trabaiadores, ;'""i;'[t*
co'c"'ri'' poi lo menos' ,a los conveni
p^¡u partiiipar en ella' EI
mavoría de los nl"""rftr';gi;;;J;, pia ieY lle'
;:lñ.il piil",p"rt^¡; ;;'""1u designa^cíón de
"'epresentantes 11f 1;
en su. caso aprobar y firrnar los cottvenros
c) 1.-P
trr"á* f,r'u ii"'tir y durante el
,"tp""1tí*1o,, lu rep'resentaclón patronal' c) 2.-P
a) 2. o t t e, . p " ioi'' -p i ;!i : t *ii*: ii,' T' :"#ffi
'
i ",
lml " ?' :l rnlectivos
,rr"rí" acorcl¿rr" lo necesario para ""Jf
que srg ,.e hacemos rreral bien'
;;;il;;,,to ü' t'"t"¡uáore¡t !n el núnrero
'1" cacla año
i"
*" particular de dicho objeto'
salarios Po
^ri¿litit
irJ- rtrtiPuestos de oalidez'
espcciar dc estos ¿Podríz
b\ 7. La capuciclad.*No existe regra 'espe_cto sobrc ca- dit¿rra a u¡
Por lo ;;;i; remitimos íi""=gi"t'generales
"'
pacidad laboral qi" "*-'1amo'.u'te'
"onvcrios. (Vei-t' I'
cap' XXIX' na 3) inconvenit
expresiÓn queremos significar'
se- dente: v.
b) 2. ELlibre al'tltedtío'-Con esta (llle no se han p-roducido vi- trataciór-r
gún ya lo expusÍnros en stt ntonlento' positiva' cle identificar la constru
cios .el -d"-tt'o'forma v el adies
a este pr".,.p.'"'tl;; tü;i;;'la folma riegativa tradicional en
"o*r"nti''til'tJ''S"-t'"tu
l'
que
la inscriP'
suele presenta-rse' Ños remitimos a
Io dicho antes (Ver t' cap'
nable Per
si no haY
determi,ada-por la propia fi-
^*'ñ'rl r,1'rr",ruo en el-obieta-Está un acto debido integra' dentro
Un Pt
rltrlidad qrrc Ia l#f"''ü.]U"ti"' ff ser que altorr
cle Io lícito, su objeto esencial' su derecl
prccis¿ corno debiera serlo so-
b) 4. La ¡o"'i'-L" le1'no es tan paralela al art' 390 fique. ¿[
brc este prrrlictrlar' No eriste' \ ' gr': li" 'lot*^
los contratos colectivos de trabajo' por
escrito'
;;;;;";;'""i"t"o'
ERECHOS Y OBLIGACIONES 327

ajo pena de nulidad. Sin embargo, si estos convenios forman parte


e los contratos colectivos, sin duda alguna que les tocará la misma
rma escrita
No puede llegarse a la misma conclusión respecto de los convenios
_ lebradas directamente con los trabajadores. El art. 153-0 pasa por
to el requisito de forma escrita. Podría concluirse lícitamente en la
sibilidad de presentar convenios mediante comparecencia de las
rtes ante la autoridad, grabados, filmados o reproducidos en cual-
..Iier otra forma permanente, v. gr.: un video-cassette. Es obvio, sin
:nbargo, que el legislador supuso que el convenio tendría que cele­
arse por escrito. Lo negativo e imperdonable es que no lo dijo así.
e) Requisitos de eficacia.
La eficacia de los actos jurídicos se hace depender de condicio-
o plazos pactados por las partes. La ley nada dice respecto de
1e los convenios de capacitación y adiestramiento puedan quedar
:netidos a dichas modalidades. Por el contrario se indica que los
anes y programas deberán ser aplicados de inmediato por las em-
·esas ( art. 153-Q). Sin embargo creemos que nada impide que en
convenios se establezcan condiciones o plazos. Inclusive la pro­
ia ley lleva a esa conclusión por las siguiente razones:
e) l.-Porque fija una. duración máxima de cuatro años al periodo
.. rante el cual deberá capacitarse a todo el personal ( art. 153-Q).
e) 2.-Porque vincula a los convenios a la revisión de los contratos
lectivos de trabajo. En nuestro concepto se trata de la revisión ge­
ral bienal ( art. 399) y no a la excepcional que se lleva a efecto
da año ( art. 399-bis) con relación específica a los tabuladores de
larios por cuota diaria.
¿Podría convenirse que la vigencia misma del convenio se supe­
ttara a un plazo o a una condición suspensiva? Creemos que no hay
nconveniente para . ello, siempre y cuando se invoque una razón evi­
lente: v. gr.: el establec miento de los locales adecuados o la con­
atación de los instructores; la compra <;le los equip<?s especiales o
:1 construcción de nuevas instalaciones. Es obvio que la capacitación
·el adiestramiento están sometidos a múltiples contingencias, v. gr.:
inscripción misma de los trabajadores en los cursos. No sería razo-
able pensar que pueda ser exigida una cierta instalación tecnológica,
i no hay trabajadores que se comprometan a usarla.
Un problema de mayor envergadura, pero íntimamente ligado al
ue ahora nos ocupa, deriva de la posibilidad de que la STPS ejerza
-u derecho a la crítica y rechace de plano el convenio o lo modí­
fique. ¿En qué sih1ación quedará lo acordado y eventualmente ya
DERECHOS Y OB
DERECHO DEL TRABAJO
328
Pü último,
tendrá el convenio tos del convel
cumplido por las partes? ¿Qué nahrraleza iurídica
jurídicos produciría, res-
a oartir de la -o¿i'fiá"i?Ii ¿a;¿ efectoi troducir modi
""!tou""io" po;' I'u - autoridad' Estado habrá
o"tto d"l *rrr".,i,,'iffi;;
t##rJ;nr"u""¿"'ti"it; "*p'"tu
dentro del término de
;f #'"' objetada
sesenta díasi Nos tememos que
"'""ilI-'"fri*a de esta problemática es enorme' 5. Er, oo¡mo
átt"ai'o especlfico y completo
su desarrollo integral podria exigir ""
áá f" t*t-1" genelal del acto
en el que habrán de aUorda's" t"*a' En elart
ád-i"istrativo y de garantías
iurldicó hboral, d"'Lt;;;ía del ""to adiestramienl
'iodividuales, evidentemente muy atractivgr P"Io que-escapan a
los
sin embargo, presentar .I. Ad
alcances de esta
;;;;i"d" ,íot"tit, "b;;.'ar;;;;Lairp"*"rte,-
nuestros punto: de vista' trabaiado
to$ por parte de la Secretaría del la aplicac
La posibilid"¿ áJ-'""n"-
ji'""1i'""i¿o a" il'¿i"ión resolutoria legal' "II..P
Trabaio constituye "i"
;t* expresar 9l grado de in- nueva c¡e
vna*óo¡ú,itia hrrr§.nt*áodi"io*,
gl;oor*io-g"á-t" sin efecio y además 1II.]
tervencionismo d"f Eirülo. TV. l
r""ix"tJffi-::::'* que atribuirá
"v. E
consütuirá un aero administrativo - a un tercer
al convenio ,"". rJ,,rñi.áili.t",
r" habrá dado entrada No des¡
eI Estado' que en eier-
elemento srb¡etivo le f"ti"rO" n'eeminente' qtie estime op-ortunas' Es
rita quiá s
cicio de su imp"rio'"dtü#"úr';;f;;; mero fV: a
Creemo
ilfil,t,;;::r#s:'.:tltir"t'xr;"T'H:liiiiti'itdi:
-rir,o
decisión que tendrá q"" rüá*re
y motivarse debida- sistema. M
tanto Par&
de una que
requárirá áe estrdíos con-cienzudos nuestras cÍ
mente. Además f"'á"ai,r"ión de los tra-
den a conocef el "^.iááo de
la eirpr; ; Ias necesidades del Regla- tiva, como
io' ftu"- VI
baiadores. A esta r'"JriJt" '"fiá'"';"tt' de- listas comr
Interior d" il sd; ;;"-;i *t"Jü]"álá que'Ia Dirección
-oicha'at' y pro- productos:
mánto el caio' los planes entonces,
berá "Aprou*', "'o;*i""' '"gú' t

o"uái"'tt"*i""tZ qt'" los patrones presenten


trabaiadol
drAmas ¿" "'"';il;;
;'i#; i;' ""pu"'lJiil
corresPondientes"'
que la Dirección deberá fundar
y En rig
En ningún ;;;ú"^iodi"" cebido dr
*JJ;;;-i"'ol'"io-o""rylo-i'^flen et I
'*"#r?Ht3i:1"",T:"r"á':Jl tiza esas
cumplimiento de lo dispuesto suPeriore
tn'il"rllrr quedar supeditado a Ia pre-
constituci
este acto de autoridad.debe baiadores
áJi""J;ñil;¿iui¿t""t"r v sociales de las partes, taáo "A"
eisa observ"""r" ;;;;;-;"i"tos de la relación la-
de
ouestas de relieve en ügneji-cio constihrcional' En atribucior
Loral en lu u*poJi"ioote Motivor.ü'il;"fJrma cipacióu
caso contrario
iuicio de garantías" de la ec
"i;;;t"'poner
DERECHOS Y OBLIGACIONES 329
.)?Qr último, la aprobación expresa y la tácita convalidarán los efec-
tos- del convenio, cesando a partir de ella el derecho estatal para in-
troducir modificaciones o invocar el rechazo total. El derecho del
Estado habrá precluido.

5. EL OBJETO DE LA CAPACITACIÓN Y EL ADMINISTRATIVO

En el art. 153-F se precisan los objetos de la capacitación y el


adiestramiento. Son los siguientes:

"1. Actualizar y perfeccionar los conocimientos y habilidades del


'a del trabajador en su actividad; así como proporcionarle informaci6n sobre
legal, la aplicaci6n de nueva tecnología en ella;
de in- "11. Preparar al trabajador para ocupar una vacante o puesto de
nueva creaci6n;
demás "111. Prevenir riesgos de trabajo;
"'V. Incrementar la productividad;
"huirá 'V. En general, mejorar las aptitudes del trabajador."
tercer
ejer- No despierta mayores dudas lo dispuesto en el art. 153-F. Ame-
. Es rita quizá sólo un comentario respecto del objeto marcado con el nú-
mero IV: aumentar la productividad.
Creemos que éste es, en rigor, el objetivo fundamental de todo el
sistema. México requiere, exige, un incremento de su productividad,
os que tanto para lograr la creación de mayor número de satisfactores para
os tra- nuestras crecientes necesidades demográficas: productividad cuantita-
Regla- tiva, como para competir en mercados internacionales, tanto capita-
ón de- listas como socialistas, mucho más exigentes con la calidad de los
>: pro- productos: productividad cualitativa. La productividad se entiende,
senten entonces, como un concepto plurivalente: beneficio económico para el
trabajador, para el patrón y para la economía nacional.
dar y En rigor aquí aparece, respecto del mundo sólo bilateralmente con-
lo en cebido de las relaciones laborales, el interés de un tercero que ma-
cons- tiza esas relaciones, condicionándolas a otros valores que se estiman
superiores. Ya había ocurrido antes cuando se dictaron las reformas
constitucionales y legales que· introdujeron la participación de los tra-
bajadores en las utilidades de las empresas. En la frac. IX del Apar-
tado "A" del art. 123 constitucional, el inciso b) al determinar las
atribuciones de la Comisión Nacional encargada de fijar la parti-
cipación, ordena que se tomen en cuenta Jas condiciones generales
de la economía nacionaL la necesidad de fomentar el desarrollo in-
330 DERECHOS Y OBLIG¡
DERECHO DEL TRABAJO

e, inclusive, el interes razonable que debe percibir No nos parece


eI capitaltry Ia
1r":*l ¡aís
necesaria reinversión de capitales. cia y que constitu'
La productividad, cación de los planr
.concepto reiteradamente invocado por nuestros ral de su vinculacir
_empresarios, se introduce entonces como meta del de.eiho del tra_
bajo. ¡Bienvenida si Iogra realizar los propósit* qu" Iu determinan! dicho que su rcvisi
nes y prog-ramas o

6. Co¡vorcroNrs LEcArJs DE Los pLANEs y


b) Eúensi,ón I
pnocnAMas debe extenclerse a
sa. Surge, sin emb,
Los requisitos que se fijan en er art. IEB-e son ros siguientes:
representantes del
"I. Referirse a- períodos no mayores de cuatro años; Si se atiende ¿

'Tr. comprendár todos Ios puástos y niveres existántes dente que los repr
en ra em-
Presa; en el extremo obl
"III. Precisar.las etapas dura'te_ras cuar"-" se impartuá Ia capaci-
que, in_clusive, la
tación adiestramiento ar totar de ,ros trabajadr;É; ;; u
"rv._y señalar
-el el procedimiento de serección'a través crer"*fi"ro;
cül sá ción hasta el nivel
establecerá el orden- en,que sean capacitados los t áu"f"aoro
de rrn dente: pese a que
mismo puesto y categoría. su frac. IX el de
, ,'Y. Especificar
del y -el-nombre- y_ número de registro e, la Secretaría
Preüsión sociar de las entidades"instructoras.
cipar en las utilid
-'Iiabajo
'vI' Aquellos otros que establezcan ros criterios generares de ra que con dudosas
^
secretaría del Trabajo y previsión que se pubriquen en er Diario tantes del Patrón t

Oficial;' capacitar a esos r


.'* dernás personas
Es conveniente analizar por separado cada una de estas con- ción en Ia emPres
diciones. tar: ¿Con quién I
a) Duración se ha discutido acer.ca del alcance de la disposición capacitación?
contenida en Ia fracción I. ¿Limita Ia vigencia de los convenios o En realidad n
se refiere solamente al ciclo de capacitacián en cada empresa?
resolverse imPeral
creemo-s que el período de cua-tro años se refiere, en'rigor, sora-
proveer por cuen'
mente- al tiempo durante el cual Ia totaridad de los íraba¡aáores ha-
sidad de instrumt
b1án dp s.er cap-ac]fados.-El problema se plantea, ,ir, a Ia
vista de .la p_osibilidad de una capacitación cliviclida "*É*rgo,
por p"eriodos,
c) EtaPas. La
compre,ndiendo, cada uno de elloi puestos o categorías diferentes. Ia capacitación el
¿Qué debe de anteponer-se? ¿La obligación indiviáuar respecto de berán ponderarse
cada t'abajador o Ia absoluta necesidal de establec". el adiestramiento
adiestramiento por grupos? En otras palabras: dada Ia"upu"ltrción' deberá resolver c
,r^uto.ol urrti-
tución individual de los trabaiadores y el incremento natural de las nes de exPansiór
plantas de, trabajo, podría ocurrir ,¡r" Ior nue'os trabajadores ingre- dad cle conseguir
sen después de que s, categoría haya sido ya capacitáda. creeáos la instntmentacic
que esa hipótesis predominarán los valores coleátivos sobre los in- denlhs técnicas i
-en
dividuales. EI trabajador de- recíente ingreso tenclrá que esperar, en no sotr los aboga
última instancia, a que se abra un nuevó ciclo.
DERECHOS Y OBLIGACIONES
331
. No nos paree que el término de cuatro años atienda a la vigen-
Cia _Y que constituya un plazo obligatorio de espera para la modifi-
caciÓn e l_os plas Y programas. Esto rompería con el efecto natu-
ral de su vmculacwn a los contratos colectivos de traba·o , h
d" h · ·, b" , J } ya emos
IC o que su rcvisiOn 1enal sera el momento para introducir los pla-
nes Y pro ramas o para modificarlos.
b) Extensión humana. La disposición es clara. La capacitación
debe exten erse a todos los niveles y puestos existentes en la empre-
sa. Surge, sm embargo, una pregunta: ¿Es obli&atorio capacitar a los
representantes del pah·ón?
Si se atiende a la concepción bilateral del derecho, resulta evi-
dente que los representantes del patrón, por serlo, estarán ubicados
en el extremo obligacional y no en 'el de los derechos. Recordemos
que, inclusivela Recomendación 117 de la OIT limita la capacita-
ción hasta el nivel de capataz. Hay, en nuestro derecho, otro antece-
dente: pese a que el art. 123 constitucional, Apartado "A", plantea en
su frac. IX el derecho de los trabajadores, sin excepción, a partí-·
cipar en las utilidades, el legislador ordinario, con buen juicio aun-
que con dudosas facultades, excluyó de ese derecho a los represen-
tantes del patrón ( art. 127-I) . Por ello creemos que no será obligatoriq
capacitar a esos representantes (directores, administradores, gerentes\
y demás personas que ejerzan funciones de dirección o administra-
ción en la empresa o establecimiento) . Por ob·a parte cabría pregun-
tar: ¿Con quién pactarían los representantes su propio convenio de
capacitación?
En realidad no existe, en el caso, una necesidad social que deba
resolverse imperativamente. Los representantes del patrón cuidarán de
proveer por cuenta de la empresa a su mejor capacitación, sin nece-
sidad de instrumentos legales que los obliguen.
e) Etapas. La definición de las etapas en que deberá efectuarse
la capacitación es uno de los problemas de logística más agudos. De-
berán ponderarse múltiples factores que ubican a la capacitación y
el adiestramiento como un problema verdaderamente complejo que
deberá resolver coordinadamente las necesidades de producción, pla-
nes de expansión, horarios adecuados, lugares convenientes, necesi-
dad de conseguir instructores idóneos, etc. . . todo lo cual representa
la instmmen tación de rutas críticas, administración por objetivos y
demás técnicas indispensables en la empresa moderna. Ciertamente
no sO!l los a bogados Lle empresa los que deben realizar esa tarea.
DERECHOS Y OBLI
33? DERECHO DEL TRABAJO

fadores Y menos
d,) Procedimientos de selección para fiim el orden de capacita- iadores a su
sen
ción. La solución de este problema, de haberse resuelto previamente capacitaciÓn cor
el de la fiiación de las etapas, no parece difícil. Lo importante es b) Howiu
fijar la atención en que se trata de un orden de preferencia y no de mos denomina<
un sistema de excluiión. En la hipótesis de que todos los trabaia- de la iornada d
dores se quieran capacitar, no será lícito excluir a -algunos por no iadorei Y el Pa1
pasar, v. gr.: ,o previo de conocimientos o de aptitud' Estos áiendo a la ns
""r,ir"r,
serán váüáos pÍua determinadas capacitaciones pero no para impedir como vía de a(
el derecho general a Ia capacitación. dó al mismo lnt
e) Regñro de las irutluctores. Este registro será necesa¡io sóIo En realidad
en loS caiot et que se utilicen instructores externos. Si se reCurre con el desemP
únicamente a instructores intemos eI registro no será necesario. nación de inst
f) Otros requisitos. La nueva Dirección General de Capacita- generales, ügi
ción y Productividad tiene señaladas las atribuciones que aparecen aconseiar a l«x
en el Reglamento Interior de la STPS que resumen, en términos g-e efectuar su tr¡
nerales, I", q.," antes correspondían a UCECA (art. 16 del Regla' aDrobados, Il€
mento ). táórico-Práctit
y maneiaf me
La calnci
7, INsrnuctonss, HoRARros Y LUcAnEs dad que al i
micas Y de v
Es oportuug examinar por separado cada uno de estos probleuus:
crificio Patrot
a) lnstruc'toros. De acuerdo a lo dispuesto en el art. 153-8 b¡ c) Lugan
instructores pueden ser los propios trabaiadores de Ia empresa; pú
oue la caPa«
fesores especialmente contratados o institueiones, escuelas u organir
mos especlalizados. Se admite también la posibilidad de que se efe fr"tu. No Pt
túe la instrucción mediante sistemas generales establecidos y registrc
dos en la STPS. En el art. 153-C se precisa que las instituciones o 8. LA NEGA'
escuelas que deban impartir capacitación y adiestramie-nto, así com
t.
.r. p"rrorrl"l docente, áeberán estar autorizadas por la propia Se En la fo
"'"Bt'á"to que al no exigirlo así la ley, se-debe de entende'1't
cretaría.
miento de I
los instructorás propios de las empresas no deberán ser autorizadq. estos. Ahon
gicamente t
¡ecesariamente, por la propia STPS. Quedará a cargo de las partes
oacitación ¡
:.1 en Ia celebraciór, de Iós óonvenios respectivos, matizar sus conñ
ciones de eleeibilidad.
t aU"¡ad'
"t
baiador 1n
Respecto de la posibilidad de que sea la sTPS ta que establezce
sistemai generales de capacitación y adiestramiento, en nuestro cc- mientos ne
;;pi; "r""", el objetivoiun tanto encubierto, si se advierte que & rior Y acre
¿t est¿rdísticas más o menos actuales, el sesenta por cieÜ
presenta Y
aci
de las empresas mexicanas cuentan con un máximo de cuatro trab
"rdo cia que se
TRABAJO
DERECHOS Y OBLIGACIONES 333

pacita- jadores y menos del seis por ciento tienen más de cincuenta traba­
jadores a su servicio. Parece difícil que se puedan lograr sistemas de
·ante es capacitación con tan escasa población laboral.
no de b) Hiirarios. En el art. 153-E se indica que lo que nosotros he­
trabaja- mos denominado adiestramiento debe efectuarse durante las horas
de la jornada de trabajo. Se acepta, como excepción, que los traba­
por no
jadores y el patrón convengan que se imparta de otra manera, aten­
?·Éstos diendo a la naturaleza de los servicios. La capacitación, entendida
impedir como vía de acceso a una actividad distinta a la habitual de acuer­
do al mismo precepto, deberá realizarse fuera de la jornada de trabajo.
'o sólo
recurre En realidad es lógico que así sea. El adiestramiento es compatible
con el desempeño de la labor ordinaria. Puede pensarse en la desig­
nación de instructores que tendrán a su cargo, bajo ciertas normas
pacita­
generales, vigilar el trabajo individual, de manera que les permita
arecen
nos ge- aconsejar a los operarios demostrándoles cuál es la mejor manera de
Regla- efectuar su trabajo. Ello no' obsta para que, de acuerdo a los planes
aprobados, periódicamente se realicen reuniones colectivas de tipo
teórico-práctico, mediante las cuales los trabajadores podrán conocer
y manejar mejor las instalaciones, equipos y·herramientas a su cargo.
La capacitación, por el contrario, atiende menos a la productivi­
dad que al impulso del trabajador por obtener condiciones econó­
lemas: micas y de vida más convenientes. Es lógico que no se haga con sa-
· -B los crificio patronal del tiempo de trabajo. .
a; pro­ e) Lugares. En el art. 153-B que ya hemos comentado, se indica
ganis- que la capacitación puede proporcionarse dentro o fuera de la em­
efec­ presa. No puede ser más clara y más amplia la disposición.
gistra-
8. LA NEGATIVA DEL TRABAJADOR A RECIBffi CAPACITACIÓN

En la forma en que está planteada la capacitación y el adiestra­


,r que miento de los trabajadores, la ley lo concibe como un derecho de
ados, estos. Ahora bien, a partir de la celebración de los convenios -y ló­
partes, gicamente en la medida en que los convenios lo determinen- la ca­
condi- pacitación y el adiestramiento pueden convertirse en obligatorios para
el trabajador. Sin embargo la obligación será relativa, ya que el tra­
blezca bajador podrá negarse a recibirla si considera que tiene los conoci­
b con­ mientos necesarios para desempeñar su puesto y el inmediato supe­
¡ue de rior y acredita esa circunstancias documentalmente o, en su defecto.
ciento presenta y aprueba ante la entidad instructora el examen de suficien­
traba- cia que seí'íale la STPS. Esto es lo que se dispone en el art. 153-U.

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