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Gftidíte

El Don de Profecías en las Escrituras

Edgardo D. Iuom o
Editor
ASI DICE
EL SEÑOR
El Don de Profecía en las
Escrituras

Maestría en Teología 2014


Edgardo D. Iuorno, Editor

DESCUBRA EDICIONES
Libertador San Martin, Entre Ríos
2015
ASÍ DICE EL SEÑOR

PREFACIO

El don de profecía es un fenómeno tan


antiguo como la necesidad que tiene Dios de
comunicar al hombre su mensaje redentor. Toda
la Escritura palpita con manifestaciones del don
de profecía, gracias al cual las ideas divinas
llegaron a personas comisionadas para transmitir
verdades salvadoras en cada época, lugar y
circunstancia.

Quien desee entender el don de profecía,


debe comenzar a indagar en las expresiones
bíblicas de este regalo maravilloso. Dios es
coherente, y siempre se comunicó con sus
mensajeros de manera consistente, poniendo a
disposición de ellos la luz del cielo en términos
que pudieran entender, aunque no por ello
eximiéndoles de realizar sus mayores esfuerzos para
poner en las palabras más apropiadas a sus oyentes
las realidades vislumbradas.

Esta pequeña obra, si bien no es


exhaustiva, representa los trazos fundamentales del
profetismo bíblico. Al leerla hallarás renovada
certeza en el ¡“Así dice el Señor”!

2
ASÍ DICE EL SEÑOR

ÍNDICE

El Llamado Profético en el libro


De Éxodo: Un Acercamiento
Teológico-Pastoral 5
E. Samuel Hengen

El Don Profético en el Salmo 119 15


William Castañeda

Jeremías, Baruc, y el Don


De Profecía Ayer y Hoy 27
Edgardo D. Iuorno

El Don de Profecía en Zacarías 53


Adrián Peralta Caballero

Jesús y el Profetismo
Veterotestamentario en Marcos 63
Fabián D. Marcos

El Modelo del Don Profético en


El Evangelio de Lucas: Una Revisión
Bibliográfica 72
Eduardo M. Velardo

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ASÍ DICE EL SEÑOR

El Don de Profecía en el Libro


De los Hechos 86
Javier A. Holm

El Don de profecía en
1 de Corintios:
Teología y Aplicaciones Pastorales 96
Daniel A. Vergara

El Don Profético en Colosenses y


1 de Tesalonicenses 107
Emilio D. Mettner

Teología y Efectos del Profetismo


en las Cartas de Juan 116
Javier A. Badano

Bibliografía Selecta 126

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ASÍ DICE EL SEÑOR

El Llamado Profético en el libro de Éxodo: U n


Acercamiento Teológico-Pastoral
E. Sanuel Hengen
“Y hablaba a Moisés cara a cara, como habla
cualquiera a su compañero” Exodo 33:11
El primer registro bíblico de un llamado
profético a un autor literario se encuentra en el
libro de Exodo, Moisés, autor no solamente de
este libro sino de todo el Pentateuco1.
Aunque su llamado no es precisamente a
escribir, él lo hace durante su largo ministerio,
principalmente en Madián y durante el Éxodo
hacia Canaán2.
Resulta importante analizar la manera que
Dios se acerca, los mensajes que otorga a Moisés y
el resultado que se aprecia de este vínculo.
Desde la zarza ardiente Dios lo llama:
¡Moisés!, ¡Moisés!, él respondió heme aquí. Y dijo:
No te acerques, quita tu calzado de tus pies,

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2 Ibíd.

5
ASÍ DICE EL SEÑOR

porque el lugar en que tú estás, tierra santa es (Ex.


3: 4,5)3..., y luego de presentarse como “el Dios de
tus padres” y ante el temor de Moisés (3:6),
procede a darle su mensaje, su pedido de ayuda
para liberar a Israel del yugo de faraón. Ante el
pedido, Moisés se siente disminuido, incapaz y
presenta la primera de una serie de objeciones:
“¿quién soy yo para presentarme ante el faraón?
(3:11), “le respondió Dios, 'Yo estaré contigo' (3:
12)”.
“Además Dios le dijo a Moisés: diles esto a
los israelitas: el Señor el Dios de sus antepasados,
el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, me ha
enviado a ustedes... se me apareció y me dijo...” y
Dios procede a explicarle a Moisés la manera que
debía presentar el plan a los dirigentes del pueblo
(3:15-22). Aquí Moisés expone otra objeción más:
¿y qué hago si no me creen ni me hacen c a so ., si
me dicen el Señor no se te ha aparecido? (4:1

3 Dado que en este artículo solamente se tratará el


libro de Exodo, cuando se mencionan referencias bíblicas
sólo se pondrán los números de capítulo y versículo, excepto
cuando se mencione otro libro bíblico.

6
ASÍ DICE EL SEÑOR

NVI)4. Es entonces cuando Dios con paciencia


muestra su poder y hace dos milagros para que su
profeta crea, a) la vara que se convierte en
serpiente y luego de tomarla vuelve a ser vara y b)
su mano, que se vuelve leprosa al ponerla en su
seno y al sacarla vuelve a estar sana; además le
dice: “si con la primera señal milagrosa no te
creen, tal vez te crean con la segunda” (4:8)”. Y por
las dudas agrega una tercera, el agua del Nilo que
derrame en presencia de Faraón se convertiría en
sangre (4:9). De todas maneras Moisés objetó
nuevamente:” Señor yo nunca me he distinguido
por mi facilidad de palabra...Francamente me
cuesta mucho trabajo hablar” (4:10), es aquí
cuando Dios nuevamente le pregunta “¿y quién le
puso la boca al hombre?...anda, ponte en marcha,
que yo te ayudaré a hablar y te diré lo que debas
decir” (4:11). Moisés insiste: “te ruego que envíes a
otra persona” a lo cual Dios responde que Aarón
su hermano le haría de portavoz (4: 15 y 16)
Dios le dijo “tú hablarás con él y le
pondrás las palabras en la boca, yo los ayudaré a

4 En este artículo se utilizará la versión Nueva Versión


Internacional de la Biblia (NVI)

7
ASÍ DICE EL SEÑOR

hablar, a ti y a él, y les enseñaré lo que tienen que


hacer. El hablará por ti al pueblo, como si tú
mismo le hablaras, y tú le hablarás a él por mí,
como si le hablara yo mismo” (4: 15, 16). Se
observa aquí la dinámica del mensaje de Dios.
Moisés era el profeta escogido a pesar de sus
objeciones e insistencia en sus limitaciones; su
hermano Aarón era un instrumento en manos de
Dios para ayuda del profeta. En toda esta
interlocución entre Dios, Moisés y Aarón hay un
solo mensaje directo de parte de Dios para Aarón:
“Anda a recibir a tu hermano Moisés al desierto,”
es decir que aunque Dios les enseñaría a ambos
“lo que hayan de hacer” (4:15) en el difícil
momento de entregar el mensaje, el mensajero o
profeta escogido por Dios era Moisés. Aarón a
pesar de ser un “levita... muy elocuente” (4: 14),
recibiría de parte de su hermano Moisés “las
palabras como si le hablara Dios mismo” (4:16)
Después de eso Moisés y Aarón se
presentaron ante Faraón. “Así dice el Señor, deja
ir a mi pueblo (5: 1 ) . ” “¿Y quién es el Señor -
respondió el faraón- para que yo le obedezca?...”,
Ni conozco al Señor ni voy a dejar que Israel se
v a y a .” Muy significativas estas palabras dichas por

8
ASÍ DICE EL SEÑOR

faraón,5 rechazo rotundo y deliberado a Dios y


aunque existiese, el haría su voluntad.
Luego de presentar su pedido de adorar en
el desierto y que “el Dios de los hebreos les había
entregado ese mensaje” (5:3), reciben la orden de
retirarse y dejar trabajar al pueblo (5: 4,5).
Precisamente el pueblo sufrió debido a este pedido
y es entonces que le culpan a Moisés y Aarón de su
calamidad. Moisés se volvió al Señor y le dijo: “...
¿para esto me enviaste? (5:22). Desde que me
presenté a faraón y le hablé en tu nombre no ha
hecho más que maltratar a este pueblo, que es tu
pueblo. ¡Y tú no has hecho nada para librarlo!
(5:23) El Señor le respondió: Ahora verás lo que
voy a hacer con el faraón ., sólo por mi mano
poderosa va a dejarlos ir del país. (6:1).
En otra ocasión Dios habló con Moisés y
luego de presentarse como el Dios de sus
antepasados le dice que a ellos no se les había

5 Egipto y sus dioses siempre estuvieron en puja con


Israel y
Jehová.https://onedrive.live.com/view.aspx?cid=4268BDFF
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9
ASÍ DICE EL SEÑOR

presentado como el “Señor”, algo que estaba


haciendo en ese llamado, le recuerda el pacto que
había hecho con ellos y la promesa que va a
quitarles de encima la opresión de los egipcios,
librarlos de la esclavitud, haría de ellos “su” pueblo
y el sería su Dios, les llevaría a la tierra que
prometió darles a Abraham, Isaac y Jacob.6
Es decir el portavoz de Dios, Moisés su
profeta se constituye en un canal de bendición
para la humanidad, un vocero de buenas noticias.
No es de extrañar que por primera vez Moisés no
rehúye el llamado, no otorga excusas
simplemente obedece la orden de entregar el
mensaje.
Pero es entonces que el profeta habría de
encontrar reparos, y ahora es el quien pasa a ser
objetado por el pueblo: “por su desánimo y las
penurias de su esclavitud ellos no le hicieron caso”
(6: 9)
Nuevamente Dios se comunica con Moisés
para que hable con faraón “ve habla con el
faraón, dile que deje salir de su país a los israelitas”

6 La promesa o parte del “Pacto de Dios con Israel”


en cap. 6: 2-8

10
ASÍ DICE EL SEÑOR

(6:11), en esta oportunidad el desánimo hizo su


efecto en el profeta y le respondió: “¿y cómo va a
hacerme caso el faraón si ni siquiera los israelitas
me creen?”, parecería una deducción lógica y
acertada. Argumenta nuevamente su problema de
comunicación (6:31). Sin embargo Dios que está
más allá de toda lógica le recuerda: “Te pongo por
Dios ante faraón. Tu hermano Aarón será tu
profeta. Tu obligación es decir todo lo que yo te
ordene que digas (7: 1,2); tu hermano Aarón, por
su parte, le pedirá al faraón que deje salir de su
país a los israelitas. Los hermanos “cumplieron al
pie de la letra las órdenes del Señor” (7:6).
Dios llamó a Moisés no tomando en cuenta
sus aspectos negativos, sus defectos y sus miedos,
sus talentos o sus limitaciones sus dones o su
incapacidad, tampoco la edad; para ser profeta no
se puede ser muy joven, como Samuel, o muy viejo
como Moisés. “Cuando hablaron con el faraón
Moisés tenía ochenta años y Aarón ochenta y tres”
(7:6). Sencillamente obedecieron.
Desde Exodo cap. 7:6 en adelante Dios
habla a Moisés y Aarón pidiéndoles que vean a
faraón, y si él les solicitara, hagan una serie de
milagros delante suyo (7:9). Aparentemente su fe

11
ASÍ DICE EL SEÑOR

se fue fortaleciendo pues dice que “fueron a ver al


faraón y cumplieron las órdenes del Señor”, en
ocasión de las varas convertidas en serpientes (7:
10-13), la plaga de sangre, la orden se repite, “el
Señor le dijo a Moisés”, y ellos obedecieron:
“Moisés y Aarón cumplieron las órdenes del
Señor” ( 7:20). Con la plaga de las ranas: “el Señor
le ordenó a Moisés” (8:1): dile a Aarón que
extienda su vara...para que todo Egipto se llene de
ranas... y Aarón extendió su brazo y las ranas
llegaron a cubrir todo el país.
Se sucedieron los milagros: El Señor
ordenaba, ellos obedecían y las plagas caían (8:16,
20; 9:1,18, 22; 10:1,21 y 11:1) lo mismo sucedía a
la inversa, cuando faraón les decía que rueguen a
Dios por las plagas, las plagas cesaban.
“El Señor habló con Moisés y Aarón y les
dio toda la directiva respecto a la celebración de la
Pascua, esa misma noche cayó la última plaga, la
muerte de los primogénitos, luego de lo cual
faraón accedió a dejarles ir (12:29-36), es entonces
que se registra una de las liberaciones más
poderosas de la Biblia (12:37-50) e Israel salió
rumbo a Canaán.

12
ASÍ DICE EL SEÑOR

El proceso de comunicación entre Dios y el


profeta se dio durante todo el peregrinaje: Dios
comunicaba sus mensajes de instrucción y de
advertencia (13:1,2; 14: 1,2) (14:15) y Moisés y el
pueblo obedecían.
Este proceso de obediencia, aunque penoso
al principio, dio sus frutos en la vida del profeta.
Lograron cruzar el Mar Rojo como “sobre tierra
seca” (14:29), vencieron enemigos, consiguieron
agua donde no había, Dios les proveyó de
alimento en pleno desierto; pero sobre todo, el
gran privilegio que tuvo este primer profeta
veterotestamentario literario fue recibir de manos
de Dios mismo, las dos tablas de piedra con los
mandamientos escritos con el dedo de Dios. Su
voluntad revelada en Diez leyes eternas que rigen
el universo por la eternidad.
El ejemplo de la vida del profeta Moisés
debiera inspirar a quienes les cuesta obedecer los
designios del Señor. Si decididamente se aceptan
sus directivas y principios se llegará a un final
dichoso y feliz. Si se siguen sus planes y se obedece
a sus profetas, “ni las mayores naciones de la tierra

13
ASÍ DICE EL SEÑOR

pueden desbaratar sus propósitos”7. Israel llegó a


Canaán porque a pesar de sus errores Moisés
decidió dejarse utilizar por Dios entregando sus
mensajes y obedeciéndolo en todo: “Cumplió las
órdenes del Señor” (Exodo 7:20). Y lo hizo “al pie
de la letra”.

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14
ASÍ DICE EL SEÑOR

El Don Profético en el Salmo 119


William Castañeda
De la misma manera como en los demás
escritos bíblicos, Dios se revela también por los
Salmos a la humanidad. En ellos, se presenta un
dialogo compartido entre Dios y el hombre. La
estructura del salmo 119 está “dividida en 22
estrofas de 8 versos cada una, y cada línea de cada
estrofa comienza con una misma letra del
alfabeto”.8 Su autor no se menciona, pero algunos
creen que fue David como lo menciona Spurgeon:
“es davídico en tono y expresión”.9 Se puede
considerar este Salmo como una ingeniosa
meditación en forma de acróstico sobre la ley.10 Al
igual que los demás salmos acrósticos, su
estructura combinada con música, permitía la
repetición y memorización de sus temas en la
mente del adorador. Este tipo de salmos acrósticos

8 Francis D. Nichol, ed. Comentario bíblico adventista. 7


vols. (Estados Unidos: Publicaciones Interamericanas, 1978­
1990), 3:631.

9 C.H Spurgeon, El Tesoro de David, vol.2 (Barcelona:


Editorial Clie, 1990), 252.

10 Nichol, ed. Comentario bíblico adventista, 632.

15
ASÍ DICE EL SEÑOR

“estilísticamente se caracterizan por la riqueza de


expresión”.11 Crisóstomo, Ambrosio, Agustín y
Lutero dejaron un alto tributo a su valor.12
Es interesante cómo Dios en medio de la
poesía hebrea revelaba su voluntad y se
comunicaba con sus hijos por medio de los
salmos. También se le ha llamado a este salmo “el
salmo por excelencia” porque describe, ilustra,
magnifica y expone la ley de Dios, representando
sus excelencias y su preciosidad.13 “El nombre de
Jehová ocurre veintidós veces en el Salmo. Su tema
es la Palabra de Dios, que menciona bajo uno de
estos diez términos: ley, camino, testimonio,
precepto, estatuto, mandamiento, juicio, palabra,
dicho, verdad, en cada uno de los versículos,
excepto uno, el ciento veintidós”.14

11 Ibid., 631.

12 Jaime C. Quarles, Joyas de los salmos. Tomo 2


(Argentina: Casa Bautista de Publicaciones, 1968), 45.

13 Pablo Hoff, Libros poéticos (Estados Unidos:


Editorial Vida, 1998), 173.

14 Spurgeon. El Tesoro de David, vol 2, 254.

16
ASÍ DICE EL SEÑOR

James Luther recrea el Sal. 119 en un


escenario de aprendizaje. Presenta a Dios como el
maestro, la creación como el aula de clase, los
siervos de Dios como los estudiantes, la ley de
Dios como la lección y el camino de la vida como
el aprendizaje.15 En base a esta particular alusión,
se describirá a continuación cómo Dios se revela al
hombre en el Salmo 119.

DIOS COMO MAESTRO


Enseñando
En los versículos 12, 26, 33, 64, 66, 68,
124 y 135 el salmista manifiesta la necesidad de
ser enseñado por Dios en sus estatutos, caminos,
sabiduría y buen sentido. Aunque Dios no se
manifiesta en estos textos como agente directo en
la enseñanza, el salmista deja claro que el único
maestro seguro que puede guiarle en esta vida es
Dios. Reconoce “la incapacidad de percibir ciertos
tipos de información mediante sus propios

15 James Luther Mays, Interpretation. A Bible


commentary for teaching and preaching. Psalms (Estados Unidos:
John Knox Press, 1994), 381.

17
ASÍ DICE EL SEÑOR

recursos o por su propia observación”.16 El énfasis


se da en el anhelo ser estudiante de la escuela de
Dios. En pedir esto y confiar en recibir las
instrucciones y respuestas del gran Maestro.
Hablando
En los versículos 9, 11, 16, 17, 25, 28, 38,
41, 42, 43, 49, 50, 57, 58, 65, 67, 74, 76, 81, 82,
89, 101, 103, 105, 107, 114, 116, 123, 130, 133,
139, 140, 147, 154, 158, 160, 161,162, 169, 170 y
172 los términos “Palabra (s)” y “dicho (s)” en su
totalidad se atribuyen exclusivamente a Dios. El
salmista las describe como apropiadas en la vida
del hombre para: limpiar, guardar, dar vida, celo
de su palabra, calmar, dar seguridad, testificar,
confiar, alentar; tienen poder para cambiar, dar
paciencia y salvar; consuelan, guían, evitan caídas,
protegen, alimentan, proveen respeto, verdadera
justicia y ordenan la vida. Traen gozo y dulzura,
entendimiento y libertad. Una vez más, de manera
abarcante el salmista deja claro en su experiencia,

16 Roger Coon. La dinámica de la inspiración y la


revelación (Entre Ríos, Argentina: traducido por Centro de
Investigación White, 1989), 5.

18
ASÍ DICE EL SEÑOR

que a Dios le complace comunicarse con el


hombre por medio de su Palabra.

SUS SIERVOS: LOS ESTUDIANTES


En los versículos 17, 23, 38, 49, 65, 76, 84,
122, 124, 125, 135, 140 y 176, el salmista se
complace en reconocer su posición de “siervo”
delante del Gran Dios y maestro al que exalta en
todo el Salmo. Como siervo, manifiesta
disposición en aprender, obedecer y dejar que
Dios lo use como instrumento. Se complace en
meditar y confiar en Dios. Manifiesta gratitud por
las bendiciones prodigadas inmerecidamente.
Anhela que su vida entera sea iluminada por la
presencia divina y sea colmada de amor por la
Palabra de Dios.

ESCENARIO DE SU ENSEÑANZA
Los versículos 27, 64, 73, 89, 90, 91abren el
camino hacia el escenario donde Dios desea que
sus siervos también le contemplen y le conozcan.
Al meditar en las maravillas de Dios, se pueden
percibir sus múltiples bendiciones. Se puede
contemplar que en toda la tierra abunda la

19
ASÍ DICE EL SEÑOR

misericordia de Dios, reconocer que las manos de


Creador son formadoras del ser humano, ver que
la constancia de la naturaleza es considerada como
garantía de la fidelidad de Dios. Contemplar cómo
toda la naturaleza obedece al Dios Creador y
meditar en la Palabra de Dios al alba y en las
vigilias de la noche como propicias para esta obra.
Aunque limitada, esta es una forma de Dios para
auto revelarse al profeta, para que este proclame su
poder, sabiduría y gloria.
Dios en búsqueda de sus hijos
En la contemplación del escenario natural
de Dios, el salmista también alude a un cuadro
pastoril, donde la seguridad que brinda el pastor y
el aprisco no están presentes para la oveja
descarriada. Necesita que el Pastor la busque y la
lleve a lugares seguros. “Buscar” (heb. Biqquesh) se
encuentra en el Antiguo Testamento 225 veces.
En el libro de los salmos, “la búsqueda es una
actividad progresiva e inacabada. Tan sólo en una
ocasión este verbo tiene a Dios como sujeto, pero
en un sentido que anticipa maravillosamente la
parábola del buen pastor: “Me extravié como oveja

20
ASÍ DICE EL SEÑOR

perdida: busca17 a tu siervo, que no olvida tus


mandatos” (v.176)” .18

OBJETO DE SU ENSEÑANZA
Hasta el momento se ha visto que a Dios le
complace hablar y enseñar. Sus preceptos han sido
dados con el fin de que al guardarlos, se
conviertan en delicia y en seguridad para el
hombre. Que sus enseñanzas sirvan de orientación
para evitar el peligro de desviarse del camino
verdadero. La palabra hebrea “Ley” (heb. Torah)
enseñanza o instrucción , se encuentra
ampliamente difundida en el salmo 119. De las 36
veces que se emplea en todo el libro de los salmos,
25 se encuentran en el salmo 119.19 También los
siguientes términos se presentan en este salmo:
“mandamiento” (heb. piqqudim y mitswah), que
significa “ordenes”, “preceptos”, es decir,
mandatos específicos que expresan nuestro deber

17 El énfasis es nuestro

18 Jean-Pierre Prévost, Diccionario de los salmos (1991.),


ver “buscar”.

19 Prévost, Diccionario de los salmos, ver “ley”.

21
ASÍ DICE EL SEÑOR

para con Dios. “Estatutos” (heb. joq) que significa


“lo prescrito”. Y “testimonio” (heb. eduth) el cual
es un vocablo que se usa con frecuencia para
designar el Decálogo”.20 Los anteriores términos
presentes en el Sal. 119 se relacionan mucho con
el Sal. 19, mostrando que Dios da a conocer su
naturaleza, su carácter y atributos por medio de su
Ley.
Ya que Torah significa toda la voluntad
revelada de Dios, o cualquier parte de ella,21 se
destacará en este escrito el término “ley”, el cual se
encuentra en los siguientes versículos: 1, 18, 29,
34, 44, 51, 53, 55, 61, 70, 72, 77, 85, 92, 97, 109,
113, 126, 136, 142, 150, 153, 163, 165, 174. La
ley, que es presentada siempre en relación con el
sujeto, el cual es Dios (“tu ley” o “la ley de Jehová”)
proporciona al hombre un medio eficaz en la
escuela de Dios que le ayudará a ser perfecto,
admirar las maravillas eternas y guiarle siempre a la
verdad. Da firmeza y libra del temor al meditar en

20 Nichol, ed. Comentario bíblico adventista, 683, 908,


909.

21 Siegfried H. Horn, Diccionario bíblico adventista


(1995), ver “ley”.

22
ASÍ DICE EL SEÑOR

ella. Proporciona paz, gozo y delicia. Provee un


verdadero sentido de riqueza en los tesoros
celestiales. Enseña el verdadero amor y la
verdadera justicia.
Cabe mencionar lo siguiente, si bien es
cierto que todos los beneficios anteriores
provienen al obedecer los mandatos de Dios, no
suceden dos cosas: (1) que el hombre pueda
obedecerlos por su propia voluntad y (2) que
provean en sí mismos la salvación anhelada. Dios
usa su Ley como un instrumento para mostrarle
su verdadera condición al hombre pecaminoso y
señalarle el camino correcto. Se ve una y otra vez
cómo el salmista pide que se le enseñe, dice “no
dejes que me desvíe” (v.10). Por la propensión
natural del hombre a desviarse del camino
verdadero, es que se necesita de la ayuda del
Espíritu Santo para mantenerse por el camino
correcto. De lo anterior, cita Elena G. de White lo
siguiente: “El Espíritu es el que hace eficaz lo que
ha sido realizado por el Redentor del mundo. Por
el Espíritu es purificado el corazón. Por el Espíritu
llega a ser el creyente partícipe de la naturaleza
divina. Cristo ha dado su Espíritu como poder
divino para vencer las tendencias hacia el mal,

23
ASÍ DICE EL SEÑOR

hereditarias y cultivadas, y para grabar su propio


carácter en su iglesia”.22

EL APRENDIZAJE: ANDAR POR EL


CAMINO DE LA VIDA
La Biblia presenta claramente el único
camino que conduce a la salvación. Dios mismo
señaló a su pueblo cual era el camino a seguir:
“Porque yo te mando hoy que ames a Jehová tu
Dios, que andes en sus caminos, y guardes sus
mandamientos, sus estatutos y sus decretos, para
que vivas y seas multiplicado...Os he puesto
delante la vida y la muerte, la bendición y la
maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas
tú y tu descendencia”23 y Jesucristo dijo de él
mismo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida.
Nadie viene al Padre, sino por mí”.24 De la manera
como en toda la Escritura se refleja esta gran

22 Elena G. de White, El Deseado de todas las gentes


(Argentina: Asociación Casa Editora Sudamericana, 1986),
625 .

23 Deuteronomio 30:16, 19

24 Juan 14:6

24
ASÍ DICE EL SEÑOR

verdad, el salmista como profeta, entiende cómo


Dios revela su voluntad para con el hombre al
señalar el peligro de seguir los propios caminos
humanos. Así, hay solo dos caminos, el de la vida y
el de la muerte y cada ser humano hará su propia
elección de la cual dependerá su destino eterno.
Los versículos 1, 3, 9, 14, 15, 27, 30, 32, 33,
37, 105 indican los caminos de Dios, los cuáles
son señalados como los únicos seguros para que el
hombre ande por ellos. Se hallan en relación
directa con su ley, sus mandamientos, estatutos,
palabra y verdad. Y proporcionan gozo al que
anda por ellos. Los versículos 5, 26, 29, 59, 101,
104, 128 y 168 indican los caminos del hombre
los cuales contrastan claramente con los de Dios.
Son caminos de maldad, mentira, iniquidad, de
desviación, inestables y confusos. Al meditar en
ellos y compararlos, no queda más que reconocer
como únicos, verdaderos y fieles los caminos de
Dios y pedir ser enseñado y encaminado por ellos.

CONCLUSIÓN
No cabe duda que Dios se comunicaba con
el salmista. El Salmo 119 muestra claramente que
Dios no guarda silencio. Impresiona la mente del

25
ASÍ DICE EL SEÑOR

profeta de tal manera para que exprese con sus


palabras y en su estilo literario25 la grandeza de
Dios y de su ley. Se da por sentado que Dios se
revela a sus siervos de una manera especial. Señala
el camino correcto por medio de su santa ley y ésta
es presentada como la norma moral a seguir.
Finalmente, muestra que Dios interactúa con sus
hijos por medio de la gran “escuela de la verdad”,
su Palabra.

25 En este caso la poesía hebrea con todas sus


características.

26
ASÍ DICE EL SEÑOR

“Jeremías, Baruc y el Don de Profecía Ayer


y Hoy”
Edgardo D. Iuorno
El don de profecía es un regalo enviado por
Dios a la Iglesia como cuerpo, y no a un individuo
o familia en particular26. No siempre intervino una
sola persona en el hecho de transmitir el mensaje
del cielo. Entre otros ejemplos, los casos Jeremías y
Elena de White revelan cómo Dios permite la
participación y colaboración de otras personas en
el proceso de comunicar la verdad revelada.
Ahora bien, ¿hasta que punto puede un
profeta aceptar colaboración? ¿Dónde comienza y
termina la participación de sus asistentes? Este
artículo se propone responder estas preguntas al
comparar la dinámica profético-literaria que existió
entre Jeremías y Baruc y Elena de White y sus casi
veinte colaboradores editoriales.
La Asociación Profético-Literaria entre
Jeremías y Baruc

26 Valentine, Gilbert. The Struggle for the Prophetic


Heritage. (Thailand: Institute Press Muak Lek, 2006), p. 74.

27
ASÍ DICE EL SEÑOR

Jeremías, es el autor de su libro, pero la


tarea de redactarlo le fue confiada a Baruc27, su fiel
secretario, hijo de Nerías (cap. 36: 4, 27-28, 32).
Baruc también pudo haber redactado, compilado y
preservado el material del libro, y haber
contribuido en las narraciones biográficas que
contiene. Su puesto como "el escriba" y secretario
de Jeremías implica que Baruc era muy culto.
Según Josefo (Antigüedades x. 9.1), Baruc
descendía de una familia distinguida de Judá. Es
probable que su hermano fuera el principal
intendente de Sedequías, quien acompañó al rey a
Babilonia (ver com. Jer. 51: 59). Su noble carácter
e influencia se manifiestan por el hecho de que el
remanente, el resto, los pocos que quisieron huir a
Egipto acusaron a Baruc de haber influenciado al

27 “El sello personal de este funcionario judío,


descubierto hace algunos lustros, fue publicado en 1978 por
Avigad. Una de las inscripciones dice: "Pertenece a Seraías
[hijo de] Nerías". Aunque se desconoce dónde se hizo este
descubrimiento, es interesante saber que apareció en
Jerusalén más o menos al mismo tiempo que las impresiones
del sello de Baruc”. “Seraías” en Nichol, Francis D.
Diccionario Bíblico Adventista. (Buenos Aires: Asociación
Casa Editora Sudamericana). Biblioteca de la Esperanza.

28
ASÍ DICE EL SEÑOR

profeta en contra de ellos (cap. 43: 3), y también


porque algunos escritos espurios aparecieron más
tarde bajo su nombre. Uno de ellos, el libro de
Baruc, se halla entre los libros apócrifos. Siempre
leal a Jeremías28, fue con éste a Egipto cuando se
obligó al profeta a que acompañara al remanente
de Judá a ese país (cap. 43: 5-7)29.
Baruc fue un hombre clave en el ministerio
profético de Jeremías. En el cap. 32:12 se deja ver
como Jeremías incluía y daba participación a su
escriba, haciéndolo testigo de importantes
declaraciones o representaciones proféticas.

28 La asociación de Baruc con Jeremías duró casi 20


años y no fue meramente profesional, el jugó su suerte con el
profeta y la palabra de Jehová que recibía. Holladay, William
L. Jeremiah, vol.2. (Minneapolis: Fortress Press, 1989), p.
309.

29 Nichol, Francis D. Comentario Bíblico Adventista,


tomo 4. (Boise, Idaho: Pacific Press Publishing Association,
1960), p. 379.

29
ASÍ DICE EL SEÑOR

Además de esto fue comisionado como


custodio y preservador30 de los documentos
proféticos31 con los cuales Jeremías anticipaba la
obra restauradora de Dios para con el pueblo
(32:12,13).
Baruc, además de ser escriba de todas las
palabras que Dios habló a Jeremías (36:4,5), en
ocasiones fue el encargado de difundirlas32, en

30 Los documentos que Baruc debía preservar


llegarían a ser de valor cuando las circunstancias cambiasen.
Thompson, J.A. The Book of Jeremiah. (Grand Rapids,
Michigan: William B. Eerdmans Publishing Company,
1980), p. 589.

31 Es razonable suponer que durante todos los años


en que estuvieron vinculados Baruc desempeñó abundantes
tareas editoriales en relación a las palabras y actividades de
Jeremías. Ibid, p. 626.

32 Jeremías acostumbraba confiar documentos escritos


para que los leyeran donde el no podía ir (29:3; 36:6; 51:59).
Keown, Gerald, et.al. Word Biblical Commentary. (Dallas,
Texas: Word Books Publisher, 1995), p.154

30
ASÍ DICE EL SEÑOR

ausencia del profeta33 (36:6). Dada la estrecha


colaboración con el vidente, no es extraño que
haya sido acusado por sus enemigos de influir en
lo que Jeremías declaraba34(43:6).
No obstante los privilegios de su misión al
lado del profeta, Baruc también recibió
exhortaciones personales y directas por parte de
Dios35(45:1-5). El no se ubicaba en una situación

33 Como Jeremías no podía ir a la "casa de Jehová", le


pidió a Baruc que no sólo fuera su secretario, sino también
predicador de los mensajes divinamente inspirados que el
profeta había recibido Ibid., p. 513

34 “Los príncipes sentían muchos deseos de saber


quién era el responsable del mensaje del profeta. ¿Habría
Baruc empleado sus propias palabras para expresar las ideas
del profeta, o se trataba de palabras textuales de éste? La
respuesta de Baruc reveló que las palabras eran en verdad las
de Jeremías”. Ibid. p. 514

35 El cambio de escena de Jeremías a Baruc quizá no


tenga que ver con el escriba en sí mismo sino que llame la
atención a las palabras de Jeremías, fielmente registradas por
su escriba, las cuales seguirían hablando y llevando esperanza
más allá de la vida del profeta. Mc. Conville J.G . Judgement
and Promise. (Leicester, Inglaterra: Apollos,1993), p.122

31
ASÍ DICE EL SEÑOR

ajena a la voz profética, ni estaba exento de sus


amonestaciones36. Ante el desánimo y la
frustración37 que sentía por su ardua tarea, por la

36 Cuando Jeremías fue encarcelado y el rey y sus


consejeros no prestaron oído a sus mensajes, Baruc se
desanimó. Su ambición de ocupar un puesto importante en
el Estado judío una vez que se restableciera (vers. 5), parecía
haberse frustrado por el aparente fracaso de los esfuerzos de
Jeremías. El profeta fue capaz de simpatizar con su
amanuense o secretario, comprenderlo, y por lo tanto pudo
ayudarlo, pues él también había experimentado amargas
decepciones (cap. 15:10-21; 20:7-18). A Baruc, como a todos
los seres humanos, le hacía falta aprender que es necesario
aceptar lo amargo y lo dulce, el fracaso y la prosperidad”.
Ibid p. 534

37 Solo en el cap. 45 se puede apreciar el costo que


pagó Baruc por ser escriba de un hombre como Jeremías.
Thompson, p.684. “Baruc enfrentó la prueba de seguir
adelante ante el aparente fracaso de la obra de la vida”.
Hastings, Edward, (ed.). The Speakers Bible, The Book of
Isaiah, (vol. 2). (Grand Rapids, Michigan: Baker Book
House, 1978), p. 118.

32
ASÍ DICE EL SEÑOR

que enfrentaba la misma oposición que Jeremías38,


Dios le promete protección39 y salvación40.
Es interesante notar el dinamismo del
proceso de revelación e inspiración en la
experiencia de Jeremías. Cuando el rey quema el
primer rollo con las profecías de Jeremías, éste
toma otro rollo, y se dice que Baruc, "escribió en él

38 “A pesar de que algunos de los príncipes "rogaron


al rey que no quemase aquel rollo, no los quiso oír."
Habiendo destruído la escritura, la ira del rey impío se
despertó contra Jeremías y Baruc, y dio inmediatamente
órdenes para que los prendiesen; "mas Jehová los escondió",
White, Elena. Profetas y Reyes. (Mountain View, California:
Pacific Press Publishing Association, 1957), p. 320.

39 Cualesquiera fueran las aspiraciones de Baruc, las


había abandonado por su lealtad a Jeremías. Pero en la hora
del desastre todo lo que importaba era la preservación de la
vida, y Dios le garantizó eso. Thompson, p. 684.

40La experiencia de Baruc o Jeremías es secundaria en


el marco de los grandes propósitos de Dios. Es el Señor
quien cumple lo que ha determinado. Keown, Gerald, p.
273.

33
ASÍ DICE EL SEÑOR

de boca de Jeremías todas las palabras del libro


que quemó en el fuego Joacim rey de Judá; y aun
fueron añadidas sobre ellas muchas otras palabras
semejantes." (36: 28,32.) La ira del hombre había
procurado suprimir las labores del profeta de Dios;
pero el mismo recurso por medio del cual Joaquim
había intentado limitar la influencia del siervo de
Jehová, le dio mayor oportunidad de presentar
claramente los requerimientos divinos”41. Esto
revela que la literatura profética no se veía como
un todo cerrado o sellado sino como pasible de
modificaciones y añadidos, los cuales no alteraban
sino que profundizaban el mensaje previo.
Pero el fenómeno profético-literario que
protagonizaron Jeremías y Baruc no fue un caso
único, ni aislado, sino que muchos de los
principios y experiencias que emergen del
ministerio de ambos vuelven a advertirse en la
interrelación entre Elena G. de White y su equipo
editorial.

41 Ibid, p. 322.

34
ASÍ DICE EL SEÑOR

La Asociación Profético-Literaria entre Elena


de White y su staff editorial.
Para mantener el ritmo de la demanda de
artículos y libros que tenía, Elena de White
desarrolló una eficiente organización de asistentes
literarios remunerados y voluntarios. Ya lo había
sido Jaime White al inicio de su ministerio. Ella
empleó asistentes literarios por las mismas razones
que lo hicieron los profetas bíblicos, puesto que
reconoció sus propias limitaciones literarias y de
tiempo42.
Elena de White escribía muy temprano,
tan rápidamente como podía, a fin de registrar las
amplias y relampagueantes escenas que le eran
reveladas. Por esa razón solía escribir de varios
temas en un mismo manuscrito, sin detenerse en
el aspecto gramatical, en puntaciones, etc. Los
asistentes debían descifrar sus manuscritos, y

42 Asi como Jesús decidió no sacarle las vendas por


milagro al resucitado Lazaro, sino que pidió que lo desaten
otros, tampoco quiso darle a Elena de White capacidades
gramaticales de manera milagrosa, porque otros podían
ayudarle en esta tarea. Nichol, Francis D. Ellen G. White
and Her Critics. Takoma Park, Maryland: Review and
Heralds Publishing Association, 1951. p. 474

35
ASÍ DICE EL SEÑOR

usando las palabras de la autora darles forma para


su publicación. Los manuscritos eran divididos
por temas. Una vez tipeados Elena de White los
leía y corregía para luego ser enviados al público43.
Las tareas de los asistentes literarios eran
básicamente dos: transcribir los manuscritos a
máquina y compilar esos escritos ordenándolos
por temas, para la preparación de cartas, sermones,
artículos y libros.
Las orientaciones que estableció la autoria
para sus asistentes fueron las siguientes:
1. Corregir errores gramaticales y
repeticiones innecesarias.
2. Agrupar párrafos y secciones en su mejor
orden lógico.
3. No introducir pensamientos personales.

Además, Elena de White, previo a la


publicación, enviaba manuscritos para ser
examinados por personas de buena experiencia
cristiana y habilidad. Asimismo cuando escribía

43 White, William. Literary Process. May 13 1904.


Q & A 43-C

36
ASÍ DICE EL SEÑOR

sobre salud hacia examinar la obra previamente


por médicos44.
En una carta que William C. White
transmite a un colega lo siguiente:
“El fundamento para establecer la fe
en los mensajes que Dios ha enviado a su
pueblo, se encontrará en forma mucho más
fácil en el estudio de la manera en que
Dios trató con sus profetas en siglos
pasados. Me parece que el estudio de la
vida, las labores y los escritos de San Pablo
ayudan más, y son más iluminadores, que
ninguna otra clase de estudio que podamos
sugerir; y yo no creo que podríamos
obtener gran ayuda al establecer confianza
en los escritos de Pablo estudiando una
lista de sus ayudadores y la historia y las
experiencias de ellos. Es fácil para mí creer
que Jeremías fue dirigido por Dios en la
selección que hizo de Baruc como copista;
también Pablo tuvo sabiduría divina al

44 Douglass, Herbert. Messenger of the Lord. (Nampa,


Idaho: Pacific Press Publishing Association, 1998). p. 111

37
ASÍ DICE EL SEÑOR

elegir a los que iban a ser sus amanuenses


de vez en cuando, de acuerdo con sus
necesidades.
Yo creo que la Hna. Elena G. de
White tuvo la dirección divina para elegir a
las personas que actuarían como copistas y
las que ayudarían a preparar artículos para
nuestros periódicos y capítulos para
nuestros libros.
Estoy bien relacionado con las
circunstancias que la indujeron a
seleccionar a algunos de estos obreros, y sé
del ánimo directo que ella recibió con
respecto a sus calificaciones y su
confiabilidad para tal obra. También sé de
casos en que ella fue inducida a instruir y
decir palabras de cautela, y a veces a
despedir a algunos de sus empleados que
carecían de espiritualidad, y por lo tanto
estaban descalificados para un servicio
satisfactorio45”

45 William C. White a L.E.Froom, carta del 9 de


enero de 1928. Ver además White, Arthur L. The Work of
Literary Assistants, DF Q & A 43-C-1 “En Jeremías 36:2 se ve

38
ASÍ DICE EL SEÑOR

En las importantes declaraciones previas


Wlliam C. White, quien coordinaba el staff
editorial de su madre, deja claro algunos asuntos
fundamentales.

1. La mecánica del don profético en


el pasado ilumina la manera
como éste don se manifiesta en lo
reciente.
2. Dios está interesado en que el
profeta tenga ayuda, y le da
sabiduría para que elija bien sus
colaboradores46.

que Dios le ordena a Jeremías escribir todos los mensajes


que había recibido desde el tiempo del rey Josías. Allí
convoca a Baruc quien escribe de boca de Jeremías todas las
palabras del Señor. También lo hicieron Pablo y Tercio,
Pedro y Silvano o Silas”.

46 En algunos casos Elena de White fue instruida


acerca de las personas a ser empleadas, y las razones por las
cuales podía confiar en ellas la tarea. White, Arthur L. Work
of Editors. May 9 1935. DF 43-C-1. Elena de White recibió
una visión en la que Jesús le decía que Fanny Bolton era su
adversaria, algo que ya sabían algunos de sus colaboradores a
quienes Bolton aseguraba escribir lo que Elena firmaba

39
ASÍ DICE EL SEÑOR

3. La asistencia editorial del profeta


no es una mera tarea gramática
secular, sino que requiere
consagración y espiritualidad47.

como propio. Webster, Cleora. Fanny Bolton. May 1967.


D.F. 445

47 Ibid. Sara Mc Enterfer sentía que tan solo era un


canal por el cual la luz del cielo fluía hacia la gente, y esto
mantenía su vida fresca y verde como una planta bien
regada. Por el contrario, Fanny Bolton, quien fuera asistente
editorial de Elena de White, no concordaba con algunos
usos literarios de Elena de White, y reconoce que las razones
de su discrepancia eran su distorsionada visión de la verdad
respecto de la sagrada obra en la que colaboraba. Ella
consideraba que White debía dar crédito a cada fuente que
citaba y a cada asistente que la ayudaba. Ella anhelaba el
crédito que recibía Elena por una obra para la cual trabajaba
tanta gente. Declara que la inspiración profética supera por
mucho la obra de un autor humano, y por eso reconoce que
a Elena de White no se la puede juzgar por los criterios que
se aplican a la literatura secular. Reconoce que su falta de
discernimiento espiritual la inhabilitaron para la tarea.
Bolton, Fanny. A Confession Concerning The Testimony of
Jesus Christ. D.F. 445

40
ASÍ DICE EL SEÑOR

En todo esto vemos la importancia de la


asistencia al mensajero de Dios, quien debe ser
ayudado para que su carga sea lo más llevadera
posible.
Pese a todo, aunque parezca indiscutible la
necesidad de ayuda humana que posee el profeta,
esta necesidad suscitó dudas en algunas personas48,
quienes suponían que el profeta debía ser capaz de
hacerlo todo, y no debería necesitar ayuda de
nadie en su misión. Pero adentrarse en el corazón
del staff editorial de Elena de White permite ver
desarrollos similares a los de los profetas y escribas
del pasado, y entender mejor la dinámica del don
profético.
William C. White colaborando con Elena de
White
Al morir Jaime White, Dios alentó a Elena
diciéndole que capacitaría a su hijo para sostenerla
en su ministerio. De hecho, con el tiempo William

48 La credibilidad del ministerio profético de Elena de


White ha sido discutida desde sus inicios, y no debe
conmovemos. Lake, Judd, Ellen White Under Fire. (Nampa,
Idaho: Pacific Press Publishing Association, 2010), p. 41

41
ASÍ DICE EL SEÑOR

llegó a ser su principal consejero, editor, vocero e


intérprete de sus escritos. Algunos no
comprendieron este vínculo entre la profeta y su
hijo, y acusaron a Elena de ser influenciada por
William. Por cierto, como se ha visto, Baruc era
acusado de lo mismo que W. White. Sin embargo
de no haber contado con la valiosa ayuda de su
hijo es muy probable que el ministerio de Elena se
hubiera acortado mucho49.
Desde 1881 William White comenzó a ser
el coordinador de los asistentes editoriales para
que su madre, cuando estuviera de viaje o
escribiendo, no debiera lidiar con detalles de este
tipo. Luego ella leería y aprobaría todo antes de su
publicación. Marian Davis y otros colaboradores
podían realizar cambios menores, W. White
contestaba inquietudes mayores, y Elena de White

49 Moon, Jerry. W. C. White and Ellen G. White:


The Relationship Between the Prophet and Her Son.
(Berrien Springs, Michigan: Andrews University Press:
1993). pp. 439-450. Sobre las acusaciones a Elena de White
de ser influenciada por William ver p. xv.

42
ASÍ DICE EL SEÑOR

tomaba las decisiones finales después que la parte


de estos dos niveles de tarea ya estaba realizada50.
Pero, más allá de la valiosa supervisión de
cargo de W. C. White, el trabajo literario
detallado era hecho por un staff de casi veinte
asistentes que trabajaron a lo largo de los años51. A
manera de ejemplo, nos enfocaremos en la tarea
de la más destacada de sus ayudantes, Marian
Davis.
Marian Davis, la más destacada asistente
editorial de Elena de White
A través de la dirección del Espíritu Santo
y los esfuerzos editoriales de Marian Davis, Elena

50 Ibid, p. 110.

51 Trabajaron 19 asistentes junto a ella. 95. Ella


recibió instrucción acerca de quienes eran confiables y
quienes no lo eran. Olson, Robert W. “ 101 Preguntas
acerca del Santuario y Elena de White”. (Buenos Aires:
Asociación Casa Editora Sudamericana, 1982). p. 96

43
ASÍ DICE EL SEÑOR

de White pudo cumplir su gran anhelo de contar


la historia del amor de Jesús52.
Acerca de la asistencia de Marian Davis en la
preparación de libros, Elena de White declara que
Davis encuadernaba los artículos de los periódicos
denominacionales, y tenía copias de las cartas que
Elena escribía. Cuando Davis estaba preparando
un capítulo para un libro, si recordaba algún
material ya escrito que reforzara las ideas lo
añadía. Elena reconocía mucho la habilidad de
Davis para acomodar el material ya escrito53. Una
vez que ella reunía cada jota y tilde, si le quedaban
huecos en el material, Elena completaba
escribiendo lo que faltase54. Algunas de las
sugerencias de Marian Davis, por ejemplo, eran
aceptadas, pero otras no. Elena de White
solamente decidía sobre que tópicos escribir para

52 Anderson King, Marcella y Morgan, Kevin, L. More


Than Words: A Study of Inspiration and Ellen White Use of
Sources in The Desire of Ages, (Berrien Springs, Michigan:
Honor Him Publishers, 2009), p. 165

53 Douglass, p. 116

54 Ibid p. 117.

44
ASÍ DICE EL SEÑOR

llenar los huecos que iban quedando al armar la


compilación de materiales55.
Era notable y proverbial la reverencia con
la que Marian Davis trataba el material. Elena de
White comenta que Davis se resistía a asumir
minúsculas responsabilidades sin la expresa
autorización de ella o William56, pese a que Elena
ya le había indicado a Davis que resolviera los
asuntos menores por sí misma sin consultarles
todo. Hasta llegaba al punto de fastidiarlos por
consultar cada pequeño cambio de palabra que
debía hacer. Elena consideraba innecesario que se
le consultase cada minucia siendo que de todas
maneras leería todo antes de la publicación57.
Marian Davis asistió a Elena de White por
25 años, hasta su fallecimiento en 1904. Poco
antes de su muerte, evocando su fiel ministerio
Elena de White declaró que Marian era “fiel y

55 Olson, Robert W. How The Desire of Ages Was


Written. May 23 1979. D.F. 393, p. 4

56 Moon, p. 113

57 Ibid p. 114

45
ASÍ DICE EL SEÑOR

sincera en su trabajo como la brújula al polo. Ella


está muriendo, y es por devoción al trabajo”58.
Elena de White, secundada por su hijo
William y el sólido staff editorial que organizó,
logró ser aliviada, preservada, y así multiplicó la
producción de literatura profética, que extendió su
legado hasta la actualidad. A continuación
destacaremos algunas decisiones editoriales que
arrojan más luz a la manera como ella entendía y
desarrollaba el don profético.

Decisiones Editoriales de Elena de White


Cuando su equipo editorial se halló
especialmente ocupado en la preparación de libros
ella proveyó a las casas publicadoras de sus
manuscritos para que fueran editados y publicados
sin su supervisión final. Con esto demostraba la
confianza que tenía en el uso sabio de los
materiales que producía. Se autorizó a los editores

58 Olson p. 112. Arthur L. White a L. E. Froom, Febr.


4 1957. Q & A 43-C-1 Elena de White agradecía mucho la
ayuda que le prestaban sus asistentes.

46
ASÍ DICE EL SEÑOR

a quitar las alusiones personales y según lo que


juzgasen publicar lo que mejor atendiese a la causa
de Dios59.
Además aceptó la idea de Eduardo Forga,
concuñado de su hijo William, quien sugirió
agregar en “El Gran Conflicto” un capítulo sobre
“El despertar en España” de manera que el libro
tocara más de cerca al público hispano. El capítulo
fue escrito por los asistentes literarios C. Crisler y
H. Hall, con la aprobación de la autora60.
Esto revela que Elena de White estaba
abierta a las sugerencias, y las aceptaba si
contribuían a dar mayor claridad y elocuencia al
mensaje que ella debía presentar. Era conciente
tanto de sus limitaciones académicas como de las
majestuosas verdades a ser comunicadas en el
mejor lenguaje humano posible, por lo cual
procuró la ayuda de asistentes editoriales. No
quería empequeñecer el plan de salvación por usar
palabras inadecuadas. Deseaba que los rayos de luz

59 Moon, p. 118.

60 Pereyra, Elbio. Eduardo Francisco Forga. (Buenos


Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana, 2004), p.
87,91.

47
ASÍ DICE EL SEÑOR

del cielo brillaran sobre los demás tan nítidamente


como sobre ella. Se consideraba una pobre
escritora como para comunicar los grandes y
profundos misterios de Dios que se le revelaban.
Siendo que Dios no le dictaba lo que debía
expresar, ella debía luchar por encontrar las
mejores palabras a fin de comunicar lo que se le
mostraba61.
Además, al recibir nuevas visiones, se
añadían detalles a las anteriores, que requerían
reescribir textos ya publicados para adicionarles
nuevo material62.
Sin embargo, más allá de la confianza y
apertura que manifestaba Elena de White, era
celosa en marcas bien los límites de la ayuda que
solicitaba.
Límites a la Tarea de los Asistentes
Editoriales

61 White, Arthur L. The Work of Literary Assistants.

62 Ibid, Work of Editors. May 9 1935. DF 43-C-1

48
ASÍ DICE EL SEÑOR

Hay abundantes testimonios en la


correspondencia de Elena de White acerca de que
sus asistentes trabajaban sobre lo que ella escribía,
pero no escribían para ella63.
Los asistentes literarios tenían prohibido64:
1. Agregar pensamientos personales
2. Llenar huecos entre párrafos
3. Escribir un testimonio en base a una
instrucción oral
Si sus escritos hubieran sido manipulados de
más por sus asistentes, se hallarían muchas

63 Fagal, William. “ 101 Questions”. (Nampa, Idaho:


Pacific Press Publishing Association, 2010), p. 34

64 White, Arthur L. The Work of Literary Assistants. A


Fanny Bolton, una asistente que consideraba sus propias
habilidades como desaprovechadas al hacer la mera obra de
correctora gramatical, Elena de White le argumentó que ella
podía editar hasta la misma Biblia y lograr que exprese sus
ideas personales, pero el resultado, aunque fuera agradable
para ella, sería desaprobado por Dios. Ver Nichol, p. 480

49
ASÍ DICE EL SEÑOR

variaciones entre los diferentes libros, pero no son


tales65.
Su desarrollo literario no puede ser atribuido a
sus asistentes sino al estudio diligente con el que
se proponía expresar cada vez mejor las verdades
que se le confiaban. Su ávida lectura de obras
religiosas la ayudó a expandir su vocabulario.
Si sus ideas hubieran procedido de otros no
hubiera logrado mantener enormes audiencias
atentas durante una larga disertación presentada
sin la ayuda de notas66.
Hay muchas maneras de expresar el mismo
pensamiento, y Elena de White luchaba por

65 White, Arthur L. Work of Editors. May 9 1935. DF


43-C-1

Si el pasaje no era del todo comprendido, el asistente


debía preguntar por sentido completo. Se hacía la menor
cantidad de retoques posibles, para preservar el estilo de la
autora.

66 White, Arthur L. Beauty of Language. Oct 3 1956.


DF 43-E-6, Nichol, p. 474.

50
ASÍ DICE EL SEÑOR

encontrar la mejor de todas. No se violenta la


verdad al expresarla de diferentes maneras. Ni
siquiera Jesús citó a los profetas palabra por
palabra67.
Por otra parte, nadie critica a los
traductores de la Biblia por hacerlo de una manera
directa y clara, aunque el original sea confuso en
algunas ocasiones. Tampoco se puede criticar la
tarea de los asistentes literarios por hacer algo
similar68. En verdad, no hay pulido que convierta a
un guijarro en una piedra preciosa. El pulido solo
evidencia la real sustancia de algo. Esa fue la obra
de los asistentes literarios de Elena de White69.

Conclusión
El don de profecía, ayer y hoy, ha sido un
regalo notable de Dios a la iglesia, y el Señor
estableció que se colaborara en todo lo posible con

67 White, Arthur L. Work of Editors.

68 Nichol 471.

69 Ibid. p. 486

51
ASÍ DICE EL SEÑOR

el ser humano frágil y limitado elegido como


mensajero del cielo. Más allá de que algunos
vieran en la ayuda prestada al profeta una señal de
alarma, o un motivo para la duda, la asistencia al
profeta revela que Dios condesciende con la
debilidad de sus portavoces, les envía personas
capaces y consagradas para asistirle, y les advierte
cuando alguno no califica para esta delicada tarea.
Así como lo fue Baruc en su momento, la
Iglesia Adventista del Séptimo Día ha sido
comisionada por Dios para testificar, preservar,
custodiar y difundir la palabra profética en este
tiempo. Si es fiel a su cometido, cobra aliento en
las promesas anunciadas, y escucha las
amonestaciones y exhortaciones que se le envían,
podrá participar de la misma recompensa que
Baruc (Jeremías 45:5).

52
ASÍ DICE EL SEÑOR

El Don de Profecía en Zacarías


Adrián Peralta Caballero

El libro de Zacarías lleva el nombre de su autor,


tal como lo dice el mismo texto en 1:1. El mismo
versículo lo ubica en el tiempo en el segundo año
de reinado de Darío el persa, lo que sería el año
520 a.C.70
El nombre Zacarías, rp"]51 significa “Yahweh
recuerda” o “Yahweh se ha acordado”,71 por lo que
su nombre está relacionado con el contenido del
libro, ya que en numerosas oportunidades
recuerda conceptos dados por Dios a los
antepasados por medio de otros profetas.
Zacarías era levita y sacerdote72 nacido en el
cautiverio babilónico.73

70 William MacDonald, Comentario Bíblico (Editorial


CLIE, 2004), 1135.

71 Francis D. Nichols, Comentario Bíblico Adventista,


vol. 4, 7 vols. (Boise Idaho: Publicaciones Interamericanas,
1978), 1107.

72 C. F. Keil and F. Delitzsch, Commentary on the Old


Testament (Peabody, M A Hendrickson, 2002).

73 Nichols, Comentario Bíblico Adventista, 4:1107.

53
ASÍ DICE EL SEÑOR

El libro de Zacarías tiene una gran cantidad de


citas directas e indirectas en el Nuevo Testamento,
especialmente en las secciones de los evangelios
que relatan la última parte de la vida de Cristo,
pero también en todo el evangelio según Mateo y
en el Apocalipsis.74
La mayoría de los comentadores concuerda en
que el libro se puede dividir en dos partes, la
primera parte comprende los capítulos 1 al 8 y
presenta profecías condicionales para el pueblo de
Israel. La segunda parte, los capítulos 9 al 14, que
tienen un contenido mesiánico.75
Si bien hay diferentes opiniones respecto a la
unidad literaria del libro, el estilo ontológico, la
estructura compacta y bien trabada de todos los
capítulos son una evidencia para sostener que el
autor de todo el libro es el mismo profeta.76

74 James C. Pakala, “A Librarian’s Comments on


Commentaries. 31, Zechariah,” Presbyterion 37, no. 1 (March
1, 2011): 50.
75 Ralph Smith, “Word Biblical Commentary”
(Waco, Texas: Word Books, Publisher, 1984), 169, 170.

76 Alonso Schokel y J. Mateos, Nueva Biblia Española,


Profetas Comentario II (Madrid: Ediciones Cristiandad, 1980),
1176.

54
ASÍ DICE EL SEÑOR

E l contexto de Zacarías
Zacarías se unió al profeta Hageo como profeta
de Dios para Judá, para animar y exhortar al
pueblo en la reconstrucción del templo77 18 años
después del regreso del pueblo del cautiverio
babilónico.78La primera visión recibida por
Zacarías ocurre entre el segundo y el tercer
mensaje del profeta de Hageo.79 Esta dupla “tuvo
éxito profético en cuanto al regreso del exilio
Babilónico, la construcción del templo y de las
murallas.”80 En Esdras 5 se menciona que ambos
fueron profetas en la época del escriba. Cuando el
pueblo Judío tenía la necesidad de entender el
plan de Dios para ellos y para la salvación de la
humanidad, llamó a dos profetas para lograr su
objetivo. Por lo tanto,

77 MacDonald, Comentario Bíblico, 1135.

78 Bryan Jesse, Harry Byrd, and César Caruachín,


Comentario Bíblico Mundo Hispano Oseas-Malaquías, 1st ed. (El
Paso: Editor Mundo Hispano, 2003), 315.

79 MacDonald, Comentario Bíblico, 1135.

80 Eduardo Calaza Schenkel, “‘Mensajero Del Señor’:


Lecturas Sobre El Don Profético En Malaquías,” DavarLogos
11, no. 1 (2012): 20.

55
ASÍ DICE EL SEÑOR

Es posible inferir que el


surgimiento del don profético es -
primeramente- de carácter
situacional y local. Es decir, no
surge debido a la súbita
inspiración individual de un
profeta, ni se trata de un
ministerio institucional
hereditario, sino que surge por
parte de Yhwh respondiendo a
situaciones de necesidad
específicas del pueblo de Israel
(1:1), y en momentos
determinados.81

O rigen del mensaje


El profeta Zacarías reconoce que no es él
mismo el originador del mensaje, sino que “vino
palabra de Jehová al profeta Zacarías”82. Frases que
reconocen la autoría divina del mensaje son

81 Ibid., 21.

82 La versión utilizada es “Biblia Reina-Valera”, 1960.

56
ASÍ DICE EL SEÑOR

utilizadas por Zacarías seis veces en los primeros


cuatro versículos del libro.
A demás de reconocer que Dios le dio el
mensaje que está transmitiendo, también dice que
ese mismo Dios habló por medio de profetas a los
padres de quienes estaban recibiendo el mensaje
en ese momento. La Biblia usa la palabra padres
no solamente para los progenitores inmediatos,
sino también para cualquier antepasado no
importa cuán lejano sea.83 El libro de Zacarías
evidencia un Dios que interviene en la historia del
mundo y se comunica con su pueblo por medio de
los profetas.

M edio de comunicación
El profeta al escribir el texto menciona que
“vino la palabra de Jehová”, en hebreo rpn
n in p n i evidencia no solo quién origina el mensaje
sino también la forma en la que Dios se comunica
con los profetas conocida como audición, que es
cuando el profeta escucha sonidos o palabras de
parte de Dios.

83 Siegfried Horn, “Padre,” Diccionario Bíblico


Adventista (Buenos Aires: Casa Editora Sudamericana, n.d.).

57
ASÍ DICE EL SEÑOR

La palabra “l?N que en sus diferentes tiempos


verbales y personas es traducida como “diciendo”,
“dice” “dijo” “dije” es utilizada 110 veces en el
libro de Zacarías, lo que evidencia el amplio uso de
las audiciones.
Por otro lado en 1:8 Zacarías presenta otra
manera de comunicación de Dios, en este caso el
profeta introduce el texto con el verbo “vi” y
se presenta a Dios mostrándole una visión. La raíz
de esta palabra (nX“l) es utilizada 20 veces por el
profeta Zacarías en todo su libro, de las cuales 18
veces se da en los primeros 6 capítulos y 16 veces
lo hace para referirse a algo que Dios le muestra al
profeta o le pide que mire algo específico en la
visione que le está dando.
Al hacer referencia a quien “dirige” o le
“muestra” la visión, el profeta usa las palabras
“Jehová” o “Señor” (en hebreo HIH’)84, “Ángel” (en
hebreo ^R??) y “Ángel de Jehová” (en hebreo

84 Para mayor información sobre el tetragrámaton mn1


consultar Ernst Jenni, “Diccionario Teológico Manual Del
Antiguo Testamento” (Madrid: Ediciones Cristiandad,
1978), 967-975.

58
ASÍ DICE EL SEÑOR

Hin’" ^ 1??)85 indistintamente, como si esos tres


términos se aplicaran a la misma persona.
El profeta interactúa con quien lo guía en la
visión. En 1:9, 11 y otros textos más se registra
que Zacarías habla en la visión, siempre en torno a
una pregunta; 10 veces lo hace para preguntar y 2
veces para responder negativamente a la pregunta
que ¿qué es lo que ves? una vez más respondió a la
pregunta “¿qué ves?”. Por todo eso se puede
evidenciar que la revelación no solamente es lo
que Dios quiere mostrar, sino que también busca
satisfacer las dudas de quien recibe el mensaje, ya
que después de la pregunta hecha por el profeta se
registra la respuesta de Jehová y hay una
interacción entre el profeta (receptor del mensaje)
y Dios (o el emisor del mensaje).

El M ensaje
El mensaje contenido en el libro de Zacarías fue
dado para motivar al pueblo el plan de confirmar
el pacto que tenían antiguamente con Dios y que
por falta de cumplimiento del pueblo se había

85 para mayor información sobre la palabra “ángel”


(literalmente mensajero) y “ángel de Jehová” y sus usos en el
texto bíblico y ver Ernst Jenni, 1227-1237.

59
ASÍ DICE EL SEÑOR

visto afectado el cumplimiento también de parte


de Dios86 y señalar al Mesías que habría de venir.
Las visiones que recibe el profeta forman una
estructura quiástica, donde la primera se
corresponden con la octava (caballos, Dios
airado/contento), la segunda tiene relación con la
séptima (cuernos y artesanos/mujer en un canasto
y mujeres aladas; además un vocabulario muy
similar), tercera presenta similitudes con la sexta
(la semejanza mayor está en el vocabulario, aunque
en español no se note tanto) y la cuarta con la
quinta (son las visiones principales, donde las
figuras de Josué, Zorobabel y el Retoño son
preponderantes).87

86 Para mayor información sobre profecías


condicionales y por qué muchas de ellas no se cumplieron
ver Hans LaRondelle, The Israel of God in Prophecy (Berrien
Springs, Michigan: Andrews University Press, 1983).

87 Bryan, J., Byrd, H., Caruachm, C., Carroll R., M.


Daniel, Connerly, R., Gomez C., A., Light, G., Martínez, J.
F., Martínez, M., Morales, E., Moreno, P., Rodríguez, S.,
Ruiz, J., Samol, J. A., Sanchez, E., Sewell, D., Tiuc Sian, R.,
Welmaker, B., Wilson, R., Wyatt, J. C., Wyatt, R., &
Editorial Mundo Hispano (El Paso, T. (2003). Comentario
bíblico mundo hispano Oseas-Malaqmas (1. ed.) (317). El Paso,
TX: Editorial Mundo Hispano.

60
ASÍ DICE EL SEÑOR

Pero a los fines del don profético, Zacarías


presenta como evidencia de autenticidad del
mensaje que se cumplan las profecías. Dice en
2:11 “entonces conocerás que Jehová de los
ejércitos me ha enviado a ti.” Y en 6:15
“conoceréis que Jehová de los ejércitos me ha
enviado a vosotros.” Si bien las dos frases están en
un contexto de profecía condicional, las profecías
mesiánicas que presenta en los capítulos 9 al 14 se
cumplieron tal como las adelantó.

C onclusiones
Al analizar el libro del profeta Zacarías
podemos llegar a las siguientes conclusiones
respecto del don de profecía:
El don profético es originado por Dios cuando
hay una necesidad específica y, como dice Pedro
“nunca la profecía fue traída por voluntad
humana, sino que los santos hombres de Dios
hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.”
(1 Pedro 1:21)

61
ASÍ DICE EL SEÑOR

Según Zacarías, el pueblo puede saber que el


profeta es auténtico y el mensaje es de Dios
cuando lo que predice se cumple.88
En este libro profético se puede ver también
que Dios se comunica con los profetas por medio
de visiones y audiciones.89

88 No se niegan otras características que son


necesarias para saber si un profeta es o no verdadero, por
más que en el presente estudio de Zacarías no se las vea.

89 No se descartan otros medios por los cuales Dios le


pueda transmitir un mensaje a los profetas por más que en el
presente estudio de Zacarías no se las vea.

62
ASÍ DICE EL SEÑOR

Jesús y el Profetismo
Veterotestamentario en Marcos
Fabián D. Marcos

A través de este estudio queremos mostrar el


uso que hace Jesús de los escritos de los profetas
en el Evangelio de Marcos.
En Marcos 2:2 el autor del evangelio consigna
que Jesús “predicaba la palabra”. La pregunta que
nos hacemos es: ¿Cuál es esa palabra predicada? La
respuesta más clara es que Jesús estaba predicando
las buenas nuevas que el reino de Dios se
acercaba.90 Pero sus palabras siempre estaban
acompañadas por la acción, lo cual le daba una
fuerza especial a su mensaje.91
El hecho que Jesús predicara la palabra también
implica que conocía bien lo que habían escrito los
profetas en el Antiguo Testamento. Eso es lo que
queda demostrado en los diferentes usos que Jesús
hizo de ellos en el evangelio de Marcos y en todos
los demás evangelios.

90 Brown, Raymond Bryan, Marcos Presenta Al Salvador (El


Paso, Texas: Casa Bautista de Publicaciones, 1978), 31.

91 González Ruiz, José María, Evangelio Según Marcos


(Estella, España: Verbo Divino, 1988), 84.

63
ASÍ DICE EL SEÑOR

En este evangelio encontramos varias


referencias a los escritos del Antiguo Testamento,
pero en el presente trabajo nos proponemos hacer
un breve análisis de las que el autor cita a Jesús
aludiendo a escritos proféticos de forma específica,
para determinar cuáles fueron los usos que les dio.

REFERENCIAS AL PENTATEUCO
En Marcos 7:10 Jesús cita: “Porque Moisés dijo:
Honra a tu padre y a tu madre; y el que maldiga al
padre o a la madre, muera irremisiblemente.” En
el mismo texto se encuentran dos referencia; la
primera a Éxodo 20:12 y la segunda a Éxodo
21:17. Jesús deja bien en claro que acepta la
autoridad mosaica del Pentateuco.
El contexto en el cual Cristo utiliza la referencia
al pentateuco, es la confrontación con los fariseos
porque estos daban más importancia a la tradición
que a las Escrituras. En este caso refuerza sus
argumentos con las referencias antes mencionadas.
En tiempos de Jesús el término ley tenía dos
significados: Primero, los diez mandamientos, y en
segundo lugar los cinco libros de Moisés, llamados

64
ASÍ DICE EL SEÑOR

Pentateuco.92 Jesús aquí cita una referencia de


cada una de esas acepciones para demostrarles que
la ley estaba sobre la tradición.
Más adelante, en Marcos 10:3-6 encontramos a
Jesús en una nueva confrontación con los fariseos.
En este caso le preguntaron “si era lícito al marido
repudiar a su mujer”, una pregunta referente al
divorcio para tentarle, citando Deuteronomio
24:1-4. Esta pregunta era un debate constante
entre los fariseos.93 Jesús, en su respuesta,
nuevamente les demuestra que acepta la autoría
mosaica del Pentateuco. Cristo consideraba que la
ley mosaica sobre el divorcio fue dada para una

92 Knight, George R, Exploring Mark: A Devotional


Commentary (Hagerstown, MD: Review and Herald,
2004), 142.
93 Para una explicación más completa sobre estas disputas
ver: Barclay, William, El Nuevo Testamento Comentado Por
William Barclay, vol. 3, 16 (Buenos Aires: La Aurora,
1973), 248-250. y también: Lane, William L, The Gospel
according to Mark (Grand Rapid, Michigan: WB
Eerdmans, 1974), 353, 354.

65
ASÍ DICE EL SEÑOR

situación determinada, y que no debía


considerarse como obligatoria.94
El argumento final de Jesús se encuentra
primero, en el versículo 6 citando Génesis 1:27, y
luego, en los versículos 7 y 8 citando Génesis 2:24,
donde los lleva a la misma creación, indicando
que consideraba al matrimonio como establecido
por Dios, permanente, y por lo tanto indisoluble.95
Un último caso aparece en Marcos 12:26
donde Jesús cita “el libro de Moisés”, haciendo
referencia a Éxodo 3:6. Esta cita aparece en el
marco de una nueva confrontación, en este caso
con los saduceos, “que dicen que no hay
resurrección” (vers.18).96
En este caso, el dilema que se presenta a Jesús
fue hecho con la intención que explique la
resurrección. Luego de presentarle el problema, la
respuesta que recibieron los saduceos nuevamente
fue sacada de los escritos proféticos.

94 Barclay, William, El Nuevo Testamento Comentado Por


William Barclay, 3:250.

95 Ibid.
96 Para mayor información sobre el contexto y el
pensamiento de los Saduceos ver: Lane, William L, The
Gospel according to Mark, 426, 427.

66
ASÍ DICE EL SEÑOR

REFERENCIAS A ISAÍAS
La primer referencia que Jesús hace del Antiguo
Testamento aparece en Marcos 7:6-7. Allí cita
Isaías 29:13, enfatizando que Isaías profetizó.
El contexto en el cual se utiliza la cita está
enmarcado en una acusación que los fariseos
hicieron a Jesús porque sus discípulos no se
lavaron las manos antes de comer. Como
respuesta Jesús citó un texto de la Escritura para
confrontar a sus acusadores con su hipocresía, al
poner la tradición por sobre la Palabra de Dios.
La otra referencia a Isaías aparece en Marcos
11:17 y allí Jesús cita Isaías 56:7 diciendo “¿no está
escrito: Mi casa será llamada casa de oración para
todas las naciones”; y concluye: “mas vosotros la
habéis hecho cueva de ladrones”. En este caso,
Jesús utiliza una referencia a la Escritura para
justificar su acción de “purificar el templo”.
Indirectamente Jesús está haciendo una acusación
a los responsables de lo que estaba sucediendo en
el Templo, que eran los líderes religiosos.
Al citar Isaías, Jesús les hace notar el verdadero
sentido profético del templo. Debía ser casa de
oración, y no meramente casa de sacrificios, y

67
ASÍ DICE EL SEÑOR

debía ser para todos los pueblos, no sólo para los


judíos.97
Se expusieron aquí dos referencia explícitas que
hace Jesús del profeta Isaías, no obstante, existen
en Marcos otros usos que Jesús hace de dicho
profeta. Algunos estudios revelan que solo en los
primeros ocho capítulos del evangelio se
encuentran por lo menos 20 citas o alusiones al
libro de Isaías, alguna de las cuales fueron hechas
por Jesús, en algunos casos interpretando o
usando las mismas palabras del profeta.98

REFERENCIAS A LOS SALMOS


En Marcos12:10-11, Jesús cita Salmos 118:22-
23 llamándola “esta escritura”. La referencia
aparece en el contexto de una parábola que Cristo
hizo como respuesta a los principales sacerdotes,

97 Henry, Matthew, Comentario Bíblico de Matthew Henry:


Obra Completa Sin Abreviar (Barcelona: Clie, 1999), 1238.

98 Klingbeil, Gerald A, “Contextualizaciones de Isaías en


San Marcos,” DavarLogos, 2003, 142, 143. El autor cita el
estudio que hace Richard Schneck, Isaiah in the Gospel of
Mark, I-VIII (BIBAL Dissertation Series 1; Vallejo, Calif.:
BIBAL, 1994), 252s.

68
ASÍ DICE EL SEÑOR

los escribas y los ancianos que demandaron su


autoridad (Mc. 11:27, 28).
Al citar Jesús el salmo hizo una aplicación del
mismo a su persona demostrando a sus oponentes
que conocía sus intenciones secretas de matarlo.99
Una nueva referencia a los Salmos se encuentra
en Marcos12:36, donde se menciona a Jesús
diciendo: “David dijo por el Espíritu Santo”
Encontramos aquí una referencia explícita al
carácter profético de David al escribir los Salmos.
Jesús citó el Salmo 110:1 para demostrar a sus
oponentes el poco entendimiento que tenían los
fariseos al interpretar las escrituras. Jesús les
demuestra que el mesías no sería solamente
humano, sino que a través de los escritos
proféticos, también se podía comprender que
tendría naturaleza divina.100

CONCLUSIONES
Luego de haber analizado algunos textos donde
Jesús cita a los profetas del Antiguo Testamento, se
puede percibir el conocimiento que él tenía de las

99 Knight, George R, Exploring Mark: A Devotional


Commentary, 218.

100 Ibid., 234.

69
ASÍ DICE EL SEÑOR

escrituras y su capacidad de aplicarlas en todo


momento. Jesús no solo conocía sino que regía su
vida por sus enseñanzas, y las utilizó para enseñar a
otros el plan de Dios.
Es interesante notar que las referencias usadas
por Jesús se encuentran en el Pentateuco, Isaías y
los Salmos, escritos conocidos por los judíos de ese
tiempo como la Tanaj101. En Lucas 24:44, Jesús
hace referencias a estos escritos como la forma de
interpretar las profecías mesiánicas.
En el estudio se visualiza que Jesús, en todos los
casos, citó las escrituras del Antiguo Testamento
como argumento frente a los ataques de los líderes
religiosos. Así como venció a Satanás con un

101 La Biblia hebrea comprende veinticuatro libros (o treinta


y nueve, si los libros combinados originalmente como 1 y
2 Samuel se cuentan por separado) y se divide en tres
secciones:" Torá "(Cinco Libros de Moisés o Pentateuco),"
Profetas "(Nevi'im), y" Escritos "(Ketuvim). La colección
completa se designa con el acrónimo resultante Tanakh
(Tanakh) " Cf. Frederick E. Greenspahn, “Bible”, en The
Cambridge Dictionary of Judaism and Jewish Culture (ed.
Judith R. Baskin; Cambridge: Cambridge University
Press, 2011), 62.

70
ASÍ DICE EL SEÑOR

“escrito está”, de la misma manera enfrentó a sus


oponentes.
Es notorio que Jesús, siempre, resaltó la
autoridad de los profetas y de sus escritos al decir
que fueron inspirados por el Espíritu Santo.
Jesús también alerta contra el peligro de
interpretar mal las escrituras y trasmitir el error
(Mr. 12:24), así también enfatiza sobre el peligro
de poner las tradiciones humanas sobre la palabra
revelada de Dios (Mr. 7:1-13).102 En este contexto
Elena de White advierte:

Las tradiciones de los hombres, como gérmenes


que circulan, se aferran de la verdad de Dios, y
los hombres las consideran como una parte de
la verdad. Satanás se afianza y cautiva la mente
de los hombres mediante falsas doctrinas,
haciendo que sostengan teorías que no tienen
fundamento en la verdad. Los hombres
atrevidamente enseñan como doctrinas los
mandamientos de los hombres, y a medida que

102 Por mayor información aquí se encuentra un interesante


estudio: Simposio Bíblico-Teológico Sudamericano
(3:2000: Chillán , Chile), Marcos: El Evangelista Del
Tiempo Cumplido (Lima, PE: Theologika, 2003), 147-157.

71
ASÍ DICE EL SEÑOR

las tradiciones se transmiten de un siglo a otro,


adquieren poder sobre la mente humana.
(Carta 43, 1895).103

El ejemplo de Jesús de sujetarse a la Palabra de


Dios es digno de ser imitado por cada cristiano
que busca hacer su voluntad y desea compartirla
con otros.

103 Nichol, Francis D, ed., Comentario Bíblico Adventista Del


Séptimo Día (Buenos Aires: ACES, 1995), 5: 1070.

72
ASÍ DICE EL SEÑOR

El Modelo del Don Profético en el Evangelio de


Lucas: U na Revisión Bibliográfica
Eduardo M. Velardo
Al hablar de revelación104 e inspiración105 en las
Sagradas Escrituras, el tercer evangelio presenta

104 “El sustantivo ‘revelación’ y el verbo ‘revelar’ se usan


tanto en el lenguaje teológico como en el secular. El
significado básico del verbo, que deriva del latín revelare,
es ‘quitar una cubierta’, ‘descubrir o destapar algo que está
oculto’; por tanto, ‘dar a conocer lo que es secreto o
desconocido’. El sustantivo puede referirse al acto de
revelar, pero también a lo que ha sido revelado. En
lenguaje común se usan además otras palabras como
‘contar’, ‘dar a conocer’, ‘poner al descubierto’, ‘traer a la
luz’ para expresar el mismo concepto. Con referencia al
acto de Dios de revelarse a asimismo y revelar su voluntad y
propósito para la familia humana, estas palabras adquieren
una nueva profundidad de significado. La esencia de la
revelación divina puede resumirse así: Dios se revela en
palabras y actos, a través de muchos canales diferentes,
pero más plenamente en la persona de Jesucristo.” Peter
M. van Bemmelen, “Revelación e inspiración”, en Tratado
de teología Adventista del Séptimo Día (George W. Reid ed.;
Florida, Bs. As.: ACES, 2009), 27.

105 “La palabra ‘inspiración’ e ‘inspirado’ no aparecen como


tales en los idiomas originales de la Biblia. Derivan del

73
ASÍ DICE EL SEÑOR

características peculiares en su prefacio que lo


distinguen del resto del canon bíblico. La datación
de este evangelio puede inferirse alrededor del año
58 d.C., esta fecha más o menos concuerda con el
tiempo del encarcelamiento de Pablo en Cesarea
(Hechos 27:1).106 Roberto Hanna señala que fue
escrito en un griego sumamente literario. Pero una
vez forjado el prólogo, Lucas continúa su evangelio
en griego koiné.107 Por su parte Josef Schmid,

latín y aparecieron en la traducción de la Vulgata de 2


Timoteo 3:16 y 2 Pedro 1:21. Su significado básico es
‘infundir aliento’”. Ibid., 40.

106 Alberto T. Platt, Estudios bíblicos ELA: Verdadero hombre,


verdadero Dios (Lucas Tomo I), (Puebla, México: Ediciones
Las Américas, A.C., 1993), 6; Fitzmyer sugiere fechar el
Evangelio de Lucas antes de los años setenta. Otro detalle
interesante es que en el prólogo a su narración evangélica,
Lucas confiesa abiertamente que su relato depende de los
representantes de la primera generación cristiana y la
segunda pudiendo ser los testigos oculares y los servidores
de la Palabra. Joseph A. Fitzmyer, El Evangelio Según Lucas.
(Madrid: Ediciones Cristiandad, S. L., 1986), 100-101.

107 R. Hanna, K. S. Arroyo y E. Alvarez, Ayuda gramatical para


el estudio del Nuevo Testamento griego. 2a ed. (El Paso, Tx.:

74
ASÍ DICE EL SEÑOR

indica que Ireneo alega que Lucas, camarada del


apóstol Pablo, dejó por escrito en un libro el
evangelio predicado por éste. Describiendo a
Lucas como médico, discípulo de Pablo y, autor
del tercer evangelio y de Hechos de los
apóstoles.108

Ev id e n c ia s d e o t r a s f u e n t e s e s c r it u r is t ic a s

Darrell L. Bock destaca que la selección lucana


de información referida a Jesús, no es una novela.

Editorial Mundo Hispano, 1993), 77, “Pero aunque es


verdad que Lucas, como escritor de elevada cultura,
escribiendo en un elegante griego sin tachas, adapta el tipo
de introducción que se acostumbraba entre los escritores
de su tiempo y era, su prólogo está más hermosamente
equilibrado que cualquier otro y además de tono más
amable que algunos de ellos”. William Hendriksen,
Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio Según San
Lucas. (Grand Rapids, Mich.: Libros Desafío. 2002), 68.

108 Josef Schmid, El evangelio según San Lucas. (Barcelona:


Editorial Herder, 1968), 11; Alberto T. Platt, Estudios
bíblicos ELA: Verdadero hombre, verdadero Dios (Lucas Tomo
I), (Puebla, México: Ediciones Las Américas, 1993), 5-6.

75
ASÍ DICE EL SEÑOR

El tercer evangelio tiene paralelos estilísticos con


trazados pretéritos. Los escritores gustaban mostrar
que lo que hacían tenía precedentes. Lucas se
sirvió de fuentes testimoniales, escrituristicas,
oculares y sincrónicas.109 Los temas teológicos, así
como los detalles del contexto histórico,
lingüístico y textual, son relevantes para una mayor
aproximación a las expresiones lucanas.110
La narrativa del Evangelio de Lucas y Hechos es
el ejemplo más temprano de la historiografía
cristiana.111 Bock considera a Lucas un historiador,

109 Darrell L. Bock, Baker Exegetical Commentary on the New


Testament; 3 A. Vols. 1, (Michigan: Baker Books, 1994), 54.

110 Ian H. Marshall, The Gospel of Luke: The New International


Greek Testament Commentary (Grand Rapids, Mich.:
Zondervan, 1978), 609.

111 Ralph P. Martin y Peter H. Davids, Dictionary of the later


New Testamen and its Developments. (Leicester, USA: Inter-
Varsity Press, 1993), 7; “El Evangelio de Lucas y el libro de
Hechos de los Apóstoles pueden considerarse como los
tomos 1 y 2 de una obra que bien podría titularse ‘Origen
y desarrollo del cristianismo’”. Francis D. Nichol ed.
Comentario bíblico adventista del séptimo día. 5 vols. Trad.

76
ASÍ DICE EL SEÑOR

al examinar el uso que hace de las fuentes.


Aunque se ha debatido fuertemente el tema. Pero
parece indicar sus escritos que era meticuloso con
la información recabada.112 Otros habían escrito
acerca de ciertos aspectos de la obra de Cristo.
Otros habían sido testigos presenciales del
ministerio público de Jesús y dieron a Lucas su
testimonio oral.113 En el proceso de recabar
información el autor derivó en una selección
terminológica precisa y objetiva.

T e r m in o l o g ía s ig n if ic a t iv a e n e l p r e f a c io

DEL TERCER EVANGELIO

En la literatura antigua, prooimion significa


principalmente el “prefacio” de un discurso,

Víctor Ampuero Matta. (Boise, Idaho: Publicaciones


Interamericanas, 1978-1990), 649.

112 Joel B. Green y Scot McKnight, Dictionary of Jesus and the


Gospels (Leicester, USA: Inter Varsity Press, 1992), 497.

113 A. T. Robertson, Una armonía de los Evangelios (Lc 1.1-4)


(Bellingham, WA: Logos Bible Software, 2011).

77
ASÍ DICE EL SEÑOR

forense o político. En este contexto oral tiene una


función precisa. El orador debe presentar un breve
relato de su tema y por lo tanto una concisa
explicación de su argumento.114 En Lucas 1:1-4, se
confina el prefacio, el cual contiene una notable
carga teológica al encerrar algunos términos
distintivos.
La intención de todo el evangelio queda
expresamente afirmada, en la escritura de un
relato fidedigno, real, minucioso, ordenado y
verificado después de haber investigado lo
sucedido con la llegada de Jesucristo, el Hijo de
Dios. Aunque muchos intentaron hacer el relato,
Lucas asume la tarea con la inspiración para
realizarlo de tal manera que su destinatario,
Teófilo115, tenga plena seguridad de las cosas que

114 Loveday Alexander, The Preface to Luke’s Gospel: Literary


Convention and Social Context in Luke 1.1-4 and Acts 1.1
(New York: Cambridge University Press, 1993), 17.

115 “Teófilo (Amado de Dios, o amigo de Dios). Personaje al


cual Lucas dedica su Evangelio y el libro de Los Hechos
(Lc. 1:3; Hch. 1:1). Es evidente que se trataba de alguien de
cierta categoría social. El tratamiento que le da Lucas: “Oh
excelentísimo Teófilo”, sugiere la posibilidad de que

78
ASÍ DICE EL SEÑOR

ya le habían enseñado.116 El término ao^áX sta117


le transmite al destinatario la seguridad de recibir
la “verdad”, “certeza”, “estabilidad” que el autor
quiere imprimirle al relato.
El historiador Eusebio interpreta
equivocadamente el prefacio lucano al colocar en
boca del autor lo siguiente: “Remediaré lo que
otros han tratado de hacer con imprudencia.”118

ocupara alguna posición oficial o, por lo menos, que fuera


miembro de aquella clase especial en la sociedad romana
llamada “la orden ecuestre”. Lucas registra el uso de este
tratamiento en otras tres ocasiones: “Al excelentísimo
gobernador Félix” (Hch. 23:26). “oh excelentísimo Félix”
(Hch. 24:3) y “excelentísimo Festo” (Hch. 26:25).” Alfonso
Lockward, Nuevo diccionario de la Biblia. (Miami: Editorial
Unilit, 1999), 1008-1009.

116 Samuel Díaz, Comentario bíblico del continente nuevo: San


Lucas. (Miami, EE. UU.: Editorial Unilit), 2007.

117 Alfred E. Tuggy, Léxico griego-español del Nuevo Testamento.


(El Paso, Texas: Editorial Mundo Hispano, 2003), 138.

118 William Hendriksen, Comentario al Nuevo Testamento: El


Evangelio Según San Lucas (Grand Rapids, Michigan: Libros
Desafío. 2002), 69.

79
ASÍ DICE EL SEÑOR

Infiriendo una intención no correspondida con el


pensamiento lucano. Por lo que el prólogo reza: me
ha parecido también a mí, después de haber investigado
con diligencia todas las cosas desde su origen,
escribírtelas por orden, oh excelentísimo Teófilo (Lc 1:3).
Peter Van Bemmelen refiriéndose al verso
mencionado dice:
Así que la investigación histórica cuidadosa y el
criterio literario fueron importantes para la
composición de los libros escritos por Salomón
y Lucas. Hay razones sólidas para creer que tuvo
lugar un proceso similar en la composición de
otros libros bíblicos, aunque ese hecho no está
declarado explícitamente.119
Sin embargo, Lucas se refiere a ércixstpéro120,
con la idea de realizar una revisión exhaustiva,
verás y compatible con los hechos acontecidos en
relación a las profecías mesiánicas correspondiente

119 Peter van Bemmelen, “Revelación e inspiración”, 44-45.

120 Tuggy, Léxico griego-español del Nuevo Testamento, 366.

80
ASÍ DICE EL SEÑOR

a la hermenéutica121 bíblica de la primera venida


de Cristo.
El segundo término érctxsipéro “poner”
indicaría la necesidad advertida por Lucas al
seleccionarlo. Además analizó todo con atención y
comenzó una “narrativa” completa,
ordenada y razonada sobre el ministerio terrenal
de Jesús.122123También es significativo el interés que
coloca en que Teófilo “conozcas”, érciyvro^ (Lc 1:4)
el cumplimiento mesiánico en la persona de
t - 123
Jesús.

121 La hermenéutica bíblica “es el estudio de los principios y


procedimientos básicos para interpretar fiel y exactamente
la Palabra de Dios”. Richard M. Davidson, “Interpretación
Bíblica”, en Tratado de teología Adventista del Séptimo Día
(George W. Reid ed.; Florida, Bs. As.: ACES, 2009), 70.

122 Albert T. Robertson, Una Armonía de los Evangelios (Lucas


1.1-4).

123 “Para los rabinos el conocimiento es conocimiento de la


ley, y si bien el término puede denotar a una persona
pensante, dotada o culta, la ley y la tradición son la base y
el tema de la instrucción. En este sentido la obediencia es
reguladora, aunque litúrgicamente Dios es siempre alabado
por otorgar el conocimiento. El judaísmo helenístico
encuentra en el conocimiento un reconocimiento de los

81
ASÍ DICE EL SEÑOR

O r ie n t a c ió n p r o f é t ic a e n l a u s a n z a je s u a n a

La orientación profética en el tercer evangelio


alberga tres puntos relevantes: (1) implicaciones
neumatológica en la búsqueda inspirada y selectiva
de la información; (2) la señalización profética
progresiva de los hechos vinculados a la primera
venida del mesías; (3) la relevante orientación
teológica realizada por Jesús a sus discípulos de
camino a Emaús, citando las enseñanzas mosaicas
referidas a los sucesos mesiánicos (Lc 24:13-58).
En este episodio puede advertirse el
reconocimiento del don profético a través del
conocimiento escrituristico y práctica jesuana.
Con relación a esto, Marshall señala que para la
realización de una investigación teológica debe
considerarse el contexto histórico, lingüístico y

actos de Dios y una percepción de sus caminos, pero ahora


con un énfasis especial en la confesión que hay un solo
Dios. En un estilo más helenístico, se plantea en este
campo la posibilidad del conocimiento de Dios (cf. 2 Mac.
7:28).” Gerhard Kittel y Gerhard Friedrich, Compendio del
Diccionario teológico del Nuevo Testamento. (Michigan, EE.
UU.: Libro Desafío, 2002), 123.

82
ASÍ DICE EL SEÑOR

textual.124 Herramienta metodológica que


seguramente Jesús conocía y dominaba.
Con relación a esto último puede verse el uso
lucano de algunos verbos tales como: XuxpoñoGat,
“redimir”125 (Lc 24:21), junto con Xúxproot^ y
anoXúxprooi^, pertenecientes al mismo grupo de
palabras. Contando con un fuerte vínculo con
Isaías (Is 41:14; 43:14; 44:24) y su utilización al
expresar la decepción de los discípulos camino a
Emaús que esperaban por la redención de Israel:
“Pero nosotros esperábamos que él era el que
había de ‘redimir’ a Israel; y ahora, además de

124 Ian H. Marshall, The Gospel of Luke: The New International


Greek Testament Commentary (Grand Rapids, Mich.:
Zondervan, 1978), 609; Joel B. Green, The Gospel of Luke
(NICNT; Grand Rapids, Mich.: Eerdmans, 1997), 581­
586.

125 “El tema del rescate o redención es parte importante del


enfoque que presenta el médico Lucas, quien muestra un
gran interés en mostrar la gloriosa obra de nuestro
Redentor. Es en su evangelio donde encontramos por
primera vez en el Nuevo Testamento el término
‘redimido’” (Lucas 1:68). Alberto T. Platt, Estudios bíblicos
ELA: Verdadero hombre, verdadero Dios (Lucas Tomo I), 7.

83
ASÍ DICE EL SEÑOR

todo esto, hoy es ya el tercer día que esto ha


acontecido” (Lc 24:21).126 El Evangelio de Lucas, a
diferencia de Hechos se caracteriza por exhibir un
especial énfasis soteriológico a través de la persona
y hechos de Jesús. De este modo se convierte en el
centro de los escritos lucanos. Concibiendo como
misión final, que la salvación es de carácter
universal.127

C o n c l u s ió n
Al explorar el prólogo del tercer evangelio, se
encuentra el uso de ciertos términos que
puntualizan la necesidad de realizar una búsqueda
exhaustiva acerca de la vida, obra, muerte y
resurrección de Cristo. El modelo lucano de
revelación e inspiración enseña que Dios se revela
al hombre a través del conocimiento de su Palabra.

126 Gert J. Steyn, “Soteriological Perspectives in Luke’s


Gospel”, en Salvation in the New Testament. Perspectives on
Soteriology (NovTSup, ed. Jan van der Watt; Leiden: E. J.
Brill, 2005), 72.

127 Ibid., 67-68; Joseph A. Fitzmyer, El Evangelio Según Lucas.,


36.

84
ASÍ DICE EL SEÑOR

El capítulo 24 del evangelio de Lucas registra el


uso jesuano de los escritos veterotestamentarios
con el fin de dar a conocer su ministerio; estos
textos ilustraban al creyente versado en la biblia
hebrea sobre la derrota del pecado a través del
sacrificio expiatorio de Cristo.
El don profético nos enseña que “Dios visita a
su pueblo en búsqueda de librarlos de las
dificultades o poderes que ponen en peligro su
• 128n 128
existencia.

128 Ivan T. Blazen, “Salvación”, en Tratado de teología


Adventista del Séptimo Día (George W. Reid ed.; Florida, Bs.
As.: ACES, 2009), 308.

85
ASÍ DICE EL SEÑOR

El Don de Profecía en el Libro de los Hechos


Javier A. Holm

El libro de los “Hechos de los Apóstoles” es


una fuente amplia de referencias a la forma que
Dios se comunicó con la iglesia primitiva. Por eso,
no es de extrañar que sea una excelente fuente
para analizar el funcionamiento de la revelación de
Dios a sus siervos los profetas y al pueblo en
general. A lo largo del libro se hallan varios
encuentros que Dios tuvo con sus profetas y es
emocionante ver la dinámica utilizada.

Ha b l a b a p o r la b o c a se su s p r o fet a s

En el libro de los Hechos de los Apóstoles se


usa con frecuencia el termino 5lá oxópmo^ “por
boca de” cuando se hace referencia a la persona
que Dios utiliza para dar su mensaje. Esta forma
divide la procedencia del mensaje (Dios) del
instrumento que comunica (el profeta). De esta
manera el Espíritu Santo habla a través de la boca
del profeta que elige, y en el libro de Hechos
podemos encontrar referencias a profetas del AT
siendo utilizados de esta manera (Hc. 1:16; 3:18,

86
ASÍ DICE EL SEÑOR

21, 25);129 Estas alusiones al AT muestran, no solo


el alto concepto que en Hechos se tiene por las
Escrituras sino que también deja ver que toda la
Escritura fue inspirada por el mismo Espíritu (2 Ti
3:16), hablando por la boca de David como de los
demás profetas.130
En (Hc. 1:16) menciona que “era necesario que
se cumpliese la Escritura en que el Espíritu Santo
habló antes por boca de David acerca de Judas” al
decir que era necesario, pareciera declarar certeza
de Pedro de que lo que el Espíritu Santo habla se
cumple obligatoriamente ya que es Palabra de
Dios.
(Hc. 3:21) vuelve a mostrar la seguridad de
Pedro en el cumplimiento de las profecías, y lo

12 Gerhard Kittel y Gerhard Friedrich, Compendio del


diccionario teológico del Nuevo Testamento. (Grand Rapids, MI :
Desafío, 2002), 850.

130John F. Walvoord y Roy B. Zuck, El conocimiento biblico, un


comentario expositivo: Nuevo Testamento, tomo 2: San Juan,
Hechos, Romanos (Puebla, Mexico: Ediciones Las Americas,
A.C., 1996), 135.

87
ASÍ DICE EL SEÑOR

hace citando lo que los profetas hablaron en el AT


para dar veracidad a sus propias declaraciones.131

Ha b la e n v is io n e s a s u s p r o f e t a s

Es sabido que Dios habla con sus profetas a


través de sueños y de visiones (Nm. 12:6), pero es
interesante ver los distintos aspectos que podían
tener estas visiones. En Hechos encontramos no
menos de diez veces la palabra opapa, estos diez
casos son (Hc. 9:10, 12; 10:3, 17, 19; 11:5; 12:9;
16:9-10; 18:9) y se los traduce como “visión”.132
Al analizar cada uno de estos textos se encontrará
un panorama para comprender este fenómeno de
una manera más clara.
Del episodio de (Hc. 9:10, 12) se puede obtener
una vislumbre interesante de la dinámica de la
inspiración. En el (V. 10-11) habla de un discípulo
llamado Ananías a quien Dios habla en visión, en
la misma se le detalla la persona que debía buscar,

13 Simon J. Kistemaker, Comentario al Nuevo Testamento:


Hechos (Grand Rapids, MI: Libros Desafio, 2007), 145.

13 Kittel y Gerhard, Compendio del diccionario teológico del


Nuevo Testamento. 548.

88
ASÍ DICE EL SEÑOR

en este caso Saulo de Tarso, donde buscarla, y qué


hacer con él; Por la presentación que hace en el
(V.13) y por la adición de la palabra óvópmt junto
al nombre de Ananías en (V. 12), demuestra que
no se conocían previamente con Saulo.133 No
obstante en el (V. 12) muestra que Saulo también
a través de una visión supo que Dios enviaría a
Ananías y cuál era el objetivo de su visita. De esta
manera el Espíritu a través de visiones va uniendo
a las personas y dirigiendo a cada uno en la misión
que les encarga.
En el relato de (Hc. 10:1-20) se pueden
observar muchas similitudes con el caso de
Ananías y Saulo. Pero se pueden destacar algunas
diferencias que aportan algunos aspectos nuevos
sobre las visiones en el libro de Hechos. El
primero que se puede destacar está en (V.3). Según
este texto a través de la ópápmt (visión) vio y
escucho a un ayysXov (ángel,) lo que podría
parecer indicar que Dios envía un ángel a hablar
en la visión sin embargo en el (V. 14) Pedro llama
al mensajero KÚpis aclarando que el que le estaba
hablando era Dios; por lo tanto en las visiones,

133 John Peter Lange et al., A commentary on the Holy Scriptures:


Acts (Bellingham, WA: LogosBible Software, 2008), 168.

89
ASÍ DICE EL SEÑOR

Dios se puede presentar con distintas morfologías.


Esto lo confirma John Peter Lange diciendo que
visión era un proceso de la cual Dios era el autor,
pero, en otros aspectos. 134
(Hc 10:10) explica que Pedro experimento un
SKOxaot^, este término no es sinónimo de
ópápa xt, sino que la puede acompañar. SKoxa ot^
se refiere a los estados excepcionales del alma, en
el sentido más estrecho denota el ser lleno de una
sustancia o persona.134135 Esta palabra es utilizada en
el libro de Hechos cuatro veces, una como
asombro (3:10) y tres como éxtasis (10:10; 11:5;
22:17). Nótese que la NVI en (Hc. 22:17) no tiene
en cuenta esta distinción traduciendo SKOxaot^
como visión.
(Hc 12:9) no relata una visión, pero arroja un
poco más de luz a los aspectos de las visiones. Este
texto está en el contexto de la liberación de Pedro
de la cárcel por un ángel, sin embargo al decir que
no sabía que era verdad lo que estaba viviendo,
aclara que pensó que era una opapa, demostrando
que las visiones los profetas las experimentan

134 Ibíd., 192.


135 Kittel y Gerhard, Compendio del diccionario teológico del
Nuevo Testamento. 174.

90
ASÍ DICE EL SEÑOR

como una realidad. Él ya había tenido una visión;


y creyó que estaba viendo otra.” 136
En (Hc. 16:9-10) podemos encontrar una
referencia a las opapa 5ta [rqq] vukto^ (visión
nocturna). A primera vista la mención de que la
visión fue nocturna parecería que es una
referencia de que fue una visión mientras Pablo
dormía; es decir que la comunicación de Dios aquí
sería por medio de un sueño. Sin embargo la
evidencia textual no permite tal interpretación. En
el NT se encuentran diferentes palabras que se
traducen como sueño.
swTCViaoGpoovTai se utiliza en referencia a los
sueños que profetizara Joel para los postreros días,
pero en el NT solo se encuentra una aparición de
este término y es en (Hc. 2:17).
onvoq se utiliza para referirse al descanso y
simplemente dormir; es utilizada seis veces en el
NT, en (Mt. 1:24; Lc. 9:32; Jn. 11:13; Hc. 20:9 y
Rm. 13:11).
o pa pa se la utiliza para referirse a las visiones
en las que Dios habla con la persona; con este uso
se encuentran diez referencias (9:10, 12; 10:3, 17,

136 Simon J. Kistemaker, Comentario al Nuevo Testamento:


Hechos (Grand Rapids, MI: Libros Desafio, 2007), 465.

91
ASÍ DICE EL SEÑOR

19; 11:5; 12:9; 16:9 y 18:9). Y aparece dos veces


más, una en Hc. 7:31 donde se refiere a una
teofanía y Mt. 17:9 donde hace alusión a la
transfiguración de Cristo
De esta manera podemos afirmar que en (Hc.
16:9-10) opapa 5ia [xpq] vukxo^ (visión nocturna)
no se refiere a un sueño, sino a una visión que se
dio durante las horas de la noche. Un ejemplo de
este mismo situación se la puede encontrar en la
LXX en (Dn. 7:7) peía 5s Tama éGsrópouv év
ópápaxi xp^ vukxo^, (Dn. 7:13) éGsrópouv év
ópápaxi xp^ vukxo^.
Esto lo afirma claramente John Peter Lange, al
decir que la visión dirigida a Pablo en la noche, no
es un sueño, que no hay ningún rastro que dé a
entender esto, y que de ninguna manera está
necesariamente indicados por las palabras opapa
5 ia [xpq] v ukxo^.137

Ha b la a u d ib l e m e n t e a s u s p r o f e t a s

(Hc. 9:3-7) es una referencia que hace un nuevo


aporte a la comprensión de cómo se comunica
Dios Con sus profetas.

137 John Peter Lange et al., A commentary on the Holy Scriptures,


303.

92
ASÍ DICE EL SEÑOR

En el episodio cuando Saulo se encuentra con


Jesús en el camino a Damasco, dice el (V.4) que al
caer en tierra Saulo oyó una voz ^ kouosv ^rovqv.
Al preguntar quién era la respuesta que recibió fue
que era Jesús. De ese episodio se puede aprender
en primer lugar, que Jesús mismo se puede
presentar en la visión, también nos muestra que
puede hablar de forma audible, y se entiende que
el mensaje no fue mentalmente para Saulo porque
en (V. 7) se dice que los hombres que lo
acompañaron también escucharon, aunque no
vieron a Jesús; y no entendieron lo que la voz decía
según se ve en (Hc. 22:9).138
En Hc 10:19 al terminar la visión del lienzo,
dice el relato Bíblico que Pedro quedo pensando
en la visión, y mientras pensaba escucho la vos del
Espíritu. Esto es una referencia de como Dios se
puede comunicar con su profeta sin la necesidad
de estar en visión. Aunque no aclara si fue audible
o si Pedro solo oyó la voz en su mente como
propone John Peter Lange;139 sin embargo muestra

138 John Peter Lange et al., A Commentary on the Holy


Scriptures: Acts (Bellingham, WA: Logos Bible Software,
2008), 164.
139 Ibíd., 195.

93
ASÍ DICE EL SEÑOR

que Dios se comunicó con los profetas sin


necesidad de que este se encuentre en visión.

C o n c l u s ió n
Frente al análisis del libro del Hechos se puede
observar que se hace una distinción clara entre la
procedencia del mensaje profético y del
instrumento que lo trasmite. También deja claro
que toda la Escritura fue inspirada por el mismo
Espíritu. Y deja claro que los mensajes revelados a
los profetas son considerados infalibles ya que
proceden de Dios.
Del análisis de los distintos episodios se puede
afirmar que no existe una sola modalidad de
inspiración profética, sino que la misma es
dinámica. En el libro de Hechos habla con sus
profetas en visiones, con y sin éxtasis, habla
audiblemente, con y sin visiones; en las visiones
puede presentarse con distintas morfología, como
un hombre un ángel o directamente
presentándose Jesús mismo. Es interesante notar
que las visiones eran vividas como situaciones muy
reales para los profetas.
Por lo tanto si bien libro de Hechos no muestra
todos los aspectos de la dinámica utilizada por

94
ASÍ DICE EL SEÑOR

Dios para comunicarse con sus profetas, nos deja


un panorama lo suficientemente claro para
entender el funcionamiento de la inspiración
divina.

El Don de Profecía en 1 de Corintios:


Teología y aplicaciones pastorales
Daniel A. Vergara

95
ASÍ DICE EL SEÑOR

Pablo escribe la carta conocida como 1 de


Corintios con un claro objetivo pastoral. Conoce
la inmadurez, las divisiones y las crisis de la iglesia,
e imposibilitado a hacerse presente, enfrenta los
problemas de la misma con una misiva.140 Entre
tantos temas importantes que trata el apóstol a los
gentiles está el de los dones espirituales. Y este
trabajo será una mirada a la teología y a las
aplicaciones pastorales del don de profecía en 1
Corintios 12 al 14,141 pues en esa sección se tratan
temas como el origen, alcance, propósito, ámbito
de influencia, etc. del don profético; así como
también el uso adecuado de dicho don en el
contexto litúrgico. Hacia el final del trabajo se

140 Por una breve descripción de esta situación véase:


Raúl Quiroga, Comentario a las epístolas de Pablo, ed. Raúl
Quiroga y Horacio Quiroga (Libertador San Martín, Entre
Ríos, Argentina: Editorial Universidad Adventista del Plata,
2006), 59.

141 Casi todo lo referente al don profecía en 1 de


Corintios se halla en esta sección, con la excepción de alguna
alusión en 1 Corintios 5:3 y 11:4-5. Para un análisis más
exhaustivo sobre esta temática, véase por ejemplo: Robert L.
Thomas, Entendamos los dones espirituales: Un estudio versículo
por versículo de Primera de Corintios 12 al 14 (Grand Rapids,
Michigan: Editorial Portavoz, 2002).

96
ASÍ DICE EL SEÑOR

tratarán los peligros resultantes del mal uso del


don profético.

Su m a r i o t e o l ó g ic o y a p l ic a c io n e s
PASTORALES BASADAS EN 1 C ORINTIOS 12

El apóstol introduce la temática de los dones (1


Corintios 12:1-7) y rápidamente sienta las bases
espirituales y los alcances del dones. Seguidamente
postula que la diversidad de dones es producida
por el mismo Espíritu para dar sustento a varios
ministerios (1 Corintios 12:4-6). Aclarando de esta
manera el origen divino de las manifestaciones, su
propósito ministerial y, amén de la singularidad, el
alcance de cada manifestación: buscar el bien
común. Luego insiste que la variedad de dones
presentes en la iglesia son facultad del Espíritu,
quien reparte dones de acuerdo a su voluntad (1
Corintios 12:8-11). Esta repetición es destacable
porque una iglesia compuesta por feligreses
inmaduros tiende a tener disputas y celos por las
manifestaciones de los dones. Pablo dice que si los
dones son dados por el Espíritu no hay razón para
vanagloria, disputas, ni celos. Es la voluntad de

97
ASÍ DICE EL SEÑOR

Dios la que opera y el ser humano simplemente el


canal usado por la divinidad.142
La lista paulina de los dones que encontramos
en 1 Corintios 12:28-30 es de tal naturaleza que se
destaca una jerarquía de los dones y
consecuentemente de los ministerios asociados.
Pablo menciona que Dios143 ha puesto o designado
(gr. S0STO del verbo t Í G ^ i)144 a los líderes de la
iglesia. Los cuales son: “primero apóstoles,
segundo profetas, tercero maestros, después
operadores de milagros, después dones de sanidad,
los que ayudan, los que ministran, los que tienen
don de lenguas”. Salta a la vista que hay un orden
específico entre los primeros tres ministerios,

142 Quiroga tiene una idea similar en su comentario y


asevera “no es cuestión de decisión humana sino divina.
Entonces, ¿por qué tanta vanagloria y discusión en las
iglesias? Hay que entender y aceptar que Dios es el conductor
de la iglesia a través del Espíritu Santo.” Quiroga, Comentario
a las epístolas de Pablo, 86.

143 En el versículo 11 es el Espíritu el que da los


dones, aquí es Dios. La divinidad siempre trabaja en
conjunto.

144 Es la voluntad y el designio soberano de Dios


quien coloca a los líderes y les da la jerarquía que Pablo
menciona a continuación.

98
ASÍ DICE EL SEÑOR

implicando una jerarquía de índole


organizacional. Y los profetas fueron considerados
en el AT y el NT como portadores de los mensajes
de Dios y por lo tanto sus mensajes la voz
autorizada para guiar al pueblo.145 Evidentemente
Pablo valora el don de profecía por sobre
cualquier otro don. Sólo el apostolado está por
encima, por designio de Dios.
Entonces la jerarquía, como se ha dicho, tiene
como objetivo la organización de la iglesia como
una comunidad que tiene dirigentes, propósitos,
metas, y no es una masa que no se sabe dirigir.146

145 Hay muchas referencias al respeto por los profetas,


por ejemplo en: Jueces 4:4-8; 1 Samuel 7:3-6; 2 Samuel 7:8-
29 y Mateo 14:5. Y también hay dramáticas referencias al
desprecio al profeta y a la voz de Dios, por ejemplo en
Jeremías 7:23-28 y Mateo 23:34.

146 Esta jerarquía ha sido comentada por varios


autores, entre ellos nótese a Barrett, que piensa que
probablemente se implique que los apóstoles estaban a cargo
de la iglesia universal, y los profetas dirigían las iglesias
locales: Charles Kingley Barrett, A Commentary on the First
Epistle to the Corinthians, Harper’s New Testament
Commentaries (New York: Harper & Row Publishers,
1968), 293. Un desarrollo más extenso se puede encontrar
en Thomas, quien es categórico al afirmar la jerarquía de los
tres primeros dones y considera como una descripción

99
ASÍ DICE EL SEÑOR

El don de profecía tiene preeminencia porque


transmite al resto del cuerpo de la iglesia la visión
de Dios para su pueblo. ¿Cuáles son las otras
razones para la preeminencia del don de profecía?
En el comentario a 1 Corintios 14 se tratará
específicamente este asunto.

En t e n d i e n d o e l d o n d e p r o f e c í a en
1 C o r i n t i o s 13

El don de profecía es uno de los principales


dones del Espíritu, pero no puede trabajar en un
vacio. Es más, según Pablo, carece de valor si no es
acompañado por el más excelente de los dones, el
amor (1 Corintios 13:2). La exaltación del amor en
esta sección obedece a un pensamiento quiásmico,

general y menos exhaustiva la de los cinco dones siguientes:


Thomas, Entendamos los dones espirituales: Un estudio versículo
por versículo de Primera de Corintios 12 al 14, 73. Véase
también a: F. F. Bruce, 1 and 2 Corinthians, New Century
Bible Commentary (Grand Rapids, Michigan: Wm. B.
Eerdmans Publishing Co., 1971), 119, 122-123. Y a: A. B.
Rudd, Las epístolas a los corintios, Segunda edición (El Paso,
Texas: Casa Bautista de Publicaciones, 1952), 148. Y la lista
podría continuar extensamente.

100
ASÍ DICE EL SEÑOR

colocando en el centro lo más importante y en la


periferia lo que está subordinado. Es decir, el
tratamiento de los dones en 1 Corintios 12 y 14
tiene su importancia, siempre y cuando se
comprenda que en el centro tiene que estar el
amor.
Pablo está diciendo enfáticamente en este
capítulo que todo don, toda virtud, toda proeza o
todo sacrificio, si carece de amor, nada es. Este
pensamiento se reafirma en el vs. 8 cuando el
apóstol consolida su argumento diciendo que los
dones, aún los preciados dones de profecía y de
lengua, algún día cesarán. Pero el más
encumbrado de los dones, el amor, jamás dejará
de ser.

Id e a s y a p l i c a c i o n e s p a s t o r a l e s d e r iv a d a s
d e 1 C o r i n t i o s 14

Sin perder de vista la preeminencia del amor,


otra vez entran en escena consideraciones respecto
de los dones de lengua y de profecía. Pablo sigue
abogando por la búsqueda de los mejores dones,
destacando el de profecía (vs. 1) y relegando en de
lenguas, que era el favorito de los corintios.

101
ASÍ DICE EL SEÑOR

Además de lo anteriormente expuesto, el don de


profecía aporta a la iglesia edificación, exhortación
y consolación (vss. 3-4). Y lo hace a través de
revelación, ciencia, profecía y doctrina (vs. 6). Los
siguientes párrafos expandirán estas ideas.
Todos los dones tienen su valor, su lugar, su
esfera de influencia. Pero el de profecía es
singularmente incisivo (nótese lo que dice Hebreos
4:12 respecto de la palabra de Dios). Este don
edifica porque muestra como seguir avanzando en
la dirección que Dios quiere. Un profeta puede
exhortar adecuadamente si el Señor le da la
revelación precisa de las necesidades de una
persona o grupo. Y un profeta lleva consolación al
transmitir exactamente lo que el supremo
Consolador (Juan 14:16, 26; 15:26) quiere que sea
expresado.
El don de profecía es versátil, pues su
Originador lo utiliza para poner en lenguaje
humano, a través del ministerio del profeta, lo que
se esté necesitando para la edificación del cuerpo
de Cristo. Por ejemplo: (1) en el vs. 6 se menciona
la revelación (gr. anoKaXúysi). Pues hay misterios
que necesitan ser develados (Colosenses 1:26); y
aún más, este término se relaciona con la
manifestación de Jesucristo en 1 Corintios 1:7,

102
ASÍ DICE EL SEÑOR

idea presente en tantos textos


neotestamentarios.147 También (2) el profeta
transmite ciencia y sabiduría, aumentando el
conocimiento de la vida práctica para el creyente.
Asimismo (3) a veces es habilitado para dar
profecías propiamente dichas, o sea, revelaciones
futuristas. Y por último, (4) doctrinas o
enseñanzas, encaminando en el correcto camino
cristiano a cada sincero hijo de Dios.
Pablo retoma este tema en el vs. 22, donde
reitera que el don de profecía sirve a los creyentes,
pues los nutre. Y agrega un aspecto testimonial y
evangelístico, pues un incrédulo puede ser
convencido al presenciar esta manifestación
carismática (vs. 24).
En el vs. 26 otra vez aparece la expresión
revelación (gr. anoKaXúysi) en el contexto
litúrgico. Pablo enseña que en un se pueden
manifestar otros dones, como el canto y la
instrucción, y que puede estar la revelación. Pero

147 Aquí se hace referencia a la manifestación plena,


visible y gloriosa de Cristo en el día de su segunda venida.
Véase por ejemplo Mateo 14:27, 30, 31; Hebreos 9:28, 1
Pedro 1:7, 13; 4:13; Apocalipsis 1:7; y especialmente 2
Tesalonicenses 1:7

103
ASÍ DICE EL SEÑOR

ésta última tiene que ser siempre para la


edificación. Otras reglas paulinas para los profetas
son el exponer en orden (vs. 29) y el que las
profecías sean juzgados por otros (vs. 29). Tal
como lo asevera también 1 Juan 4:1, no se puede
creer ciegamente a todo el que se dice profeta. Hay
que evaluar y juzgar al profeta, para luego aceptar
el mensaje si pasa el juicio.148
También es destacado por Pablo que un profeta
tiene que reconocer a otro profeta. Los vss. 37-38
demuestran que quien tiene profecía no puede
estar desoyendo o ignorando a otros profetas.149 Y
por último, Pablo anima a jerarquizar el don
profético (vs. 39). Claro está, profetizar siguiendo
las pautas anteriormente explicitadas. Tantas
instrucciones a los corintios hace pensar que el
don de profecía era común en la iglesia de
Corinto. Pareciera que esto se debe a la inmadurez
de la iglesia. Por lo tanto ésta necesitaba 1)
instrucción y guía para seguir creciendo y 2)

148 Por ejemplo aquí hay algunas pruebas bíblicas


(aunque no todas) a los profetas: Deuteronomio 18:21-22;
Isaías 8:19-20; 1 Juan 4:1-3; Mateo 7:15-20, conjuntamente
con Gálatas 5:21-22.

149 También se ve esto en Isaías 8:19-20

104
ASÍ DICE EL SEÑOR

manifestaciones del Espíritu para afirmarse en la fe


y reconocer que Dios los estaba guiando.

Co n c l u s io n e s
La iglesia de Corinto experimentaba grandes
crisis, entre ellas estaba su comprensión de los
dones. Pablo realiza varias cosas: 1) jerarquiza el
don de profecía y coloca en perspectiva los otros
dones. 2) Ordena y organiza la iglesia, la liturgia y
pondera la necesidad de la revelación para la
edificación de la iglesia como conjunto. 3)
También pide que se juzgue al que se dice ser
profeta, para evitar la introducción de mas y
mayores errores. Su análisis tiene validez actual.
Hoy también necesitamos creer en la voz del Señor
a través de sus profetas, pero estar atentos porque
abundan los falsos profetas. 4) Enmarca los dones
y los ministerios en el cuadro del amor. Sin el
amor de Dios, el verdadero y trascendente, toda
manifestación y toda obra carece de valor. 5) El
don de profecía es una manifestación divina para
revelar cuestiones actuales y futuras, así como
fortalecer la doctrina, siempre con el objeto de
preparar al pueblo de Dios para el encuentro con
su Señor.

105
ASÍ DICE EL SEÑOR

El Don Profético en Colosenses y


1 de Tesalonicenses
Emilio D. Mettner

106
ASÍ DICE EL SEÑOR

La carta a los Colosenses fue dirigida a los


miembros de la iglesia de Colosas. No se tienen
referencias de que el apóstol visitara
personalmente esa ciudad.150 Fue escrita por Pablo
desde Roma durante su primer prisión (Hec
28:16, 30),151 alrededor del año 62 ó 63 d.C.
Algunos piensan que Pablo primero escribió un
corto documento y que con el tiempo fue
enriquecido antes de su envío.152
Colosas estaba situada en el valle superior del
río Lico, rodeado por altas montañas. Herodoto la
describió como una gran ciudad en Frigia, en Asia
Menor. Fue importante en su tiempo. Se cree que
fue destruida por un terremoto entre el 60-61
d.C., ya que dicho terremoto también destruyo a
Laodicea. Los habitantes eran frigios, griegos y
judíos. Se estima que fue fundada por Epafras.153

150 Lockward, Alfonso, Nuevo Diccionario de La Biblia,


Editorial Unilit. (Miami, 1999), 232.

151 Easton, M. G., Easton’s Bible Dictionary (New York: Harper


& Brothers, 1893).

152 Lockward, Alfonso, Nuevo Diccionario de La Biblia, 232.

153 William R. Farmer et al., Comentario Bíblico Internacional,


3° ed. (Estrella: Navarra: Verbo Divino, 2003), 1545.

107
ASÍ DICE EL SEÑOR

No se sabe a ciencia cierta quién y en qué


momento histórico fundó la iglesia en Colosas. Se
menciona a Eprafas (Col 4.12) y Filemón (Fil 1;10-
11 y Col 4.9), posiblemente hayan oído en Éfeso el
evangelio desde las predicas de Pablo y llevado a su
lugar de origen, Colosas.
La primera epístola a los Tesalonicenses es
dirigida a una comunidad con cierta estructura (1
Tes 5,12-13), es evidente que contaban con un
sistema de reuniones (1 Tes 5,26) en casa de Jasón
u otro hermano. Entre los eruditos al afirmar que
fue escrita desde Corinto, en esos 18 meses que
Pablo pasó allí (Hech. 18:11). 154
Tesalónica era la capital de Macedonia (Hech
17,1). Era una ciudad de mucho comercio, de
fértiles campos agrícolas, como así también era un
puerto marítimo de gran actividad.155 En tiempos

154 Juan Carlos Cevallos and Ruben O. Zorzoli, Comentario


Bíblico Mundo Hispano, vol. 1 Y 2 Tesalonicenses, 1 Y 2
Timoteo Y Tito., 22 vols. (El Paso, Texas: Mundo Hispano,
2009), 27.
155 Ibid., 26.

108
ASÍ DICE EL SEÑOR

de Pablo se estima que tenía doscientos mil


habitantes.156

DON PROFETICO
El don se entiende como un regalo157 otorgado
por Dios al hombre y éste siempre estaba
vinculado a la comunicación e interpretación de la
Palabra de Dios bajo la dirección directa del
Espíritu Santo.158
Existen tres términos referentes al profeta. El
más usado es nabhi, con 300 veces de usos en el
AT. Viene de una raíz que significa llamar o uno
que es llamado. Los dos siguientes son ra’ah y hazah,
relacionados a ver y vidente.159 El término desde

156 Everett F. Harrison, Introduction to the New Testament


(Grand Rapids: Eerdmans Publishing Co., 1964), 245.

157 Lockward, Alfonso, Nuevo Diccionario de La Biblia,


846; Easton, M. G., Easton’s Bible Dictionary. Menciona
otros sinónimos como dote, regalo, propina, favor y
ofrenda.

158 Cevallos and Zorzoli, Comentario Biblico Mundo Hispano, 1


Y 2 Tesalonicenses, 1 Y 2 Timoteo Y Tito.22:11-12.

159 Fausset, Andrew R., Fausset Bible Dictionary, 1949,


accessed February 20, 2014,

109
ASÍ DICE EL SEÑOR

ambos idiomas bíblicos otorga connotaciones


símiles. El término hebreo sugiere que el profeta es
uno que vierte o derrama las comunicaciones
recibidas de Dios, y el griego da la idea de uno que
habla en lugar de otro, en éste caso, en lugar de
Dios.160
El profeta no solo predice el futuro, sino que,
es un hombre o mujer capacitada para conocer
cosas no veladas.161 Su mayor función es la de
revelar sobre problemas concretos del presente162 y
corregir los abusos morales y religiosas. Un profeta
era un portavoz de Dios, un órgano inmediato de
Dios para la comunicación de su voluntad a los

http://www.studylight.org/dic/fbd/view.cgi?n=2998;
Lockward, Alfonso, Nuevo Diccionario de La Biblia. Swanson
James and Orville Nave, New Nave’s Topical Bible (Oak
Harbor: Logos Research Systems, 1994).

160 Cevallos Juan Carlos and Ruben O. Zorzoli, Comentario


Biblico Mundo Hispano, vol. Ezequiel Y Daniel, 12 vols.
(El Paso, Texas: Mundo Hispano, 2009), 13.

161 José Luis Sicre, Los Profetas de Israel y Su Mensaje: Antología


de Textos (Madrid: Ediciones Cristiandad, 1986), 5.

162 Ibid., 6. El autor menciona algunas características del


profeta como persona social como : un hombre inspirado,
público, amenazado y era un carisma. Ibid., 6-9.

110
ASÍ DICE EL SEÑOR

hombres (Dt. 18:18, 19). El título tiene una


aplicación general a todos los que tienen mensajes
de Dios a los hombres.163
Este don de profeta no se presentaba como una
cuestión hereditaria.164 Podría haber varios
profetas contemporáneos como podría ser el único
en sus tiempos.
A continuación se presentaran algunos textos
claves encontrados en las epístolas a los
Colosenses y 1a a los Tesalonicenses. Se habrá un
sucinto comentario de la implicancia de estos
pasajes al referirse al don profético. Cerrando el
trabajo con una conclusión.
Textos en la epístola a los Colosenses
Colosenses 1:25 Palabra de Dios.
...de la cual fui hecho ministro, según la
administración de Dios que me fue dada para con
vosotros, para que anuncie cumplidamente la
palabra de Dios. (RV 60).

163 Easton, M. G., Easton’s Bible Dictionary.

164 Ibid.

111
ASÍ DICE EL SEÑOR

En la expresión paulina, palabra de Dios, nos


encontramos con el uso del término Xóyoq logos,
que en los dos modos de mayor traducción se las
encuentra como (1) palabra unas 218 veces y (2)
dice unas 50 veces.165 Logos166 envuelve la noción
de que todo lo que Dios ha dicho o revelado, es su
mensaje,167o bien es la Palabra de Dios. Pablo
destaca que el anuncio no es propio de él sino
proviene de Dios. El logos se equipara a Dios.168
Es una expresión del don profético en el
Apóstol Pablo. El es llevado a anunciar, verbal o
escrita, la voluntad divina para las iglesias neo
testamentarias. Claro indicativo de la autoridad
del apóstol como un enviado de Dios.

165 Strong, James, Enhanced Strong’s Lexicón (Bellingham: WA,


2001).

166 Logos fue utilizado en la traducción griega del A T en la


Septuaginta o LXX, para usarlo en el término hebreo
dabar. Un término usado con frecuencia a hablar de Dios.
Achtemeier, Paul J., Harper & Row and Society of Biblical
Literature, Harper’s Bible Dictionary, (San Francisco: Harper
& Row, 1985), 573.

167 Lockward, Alfonso, Nuevo Diccionario de La Biblia, 1047.

168 Ibid.

112
ASÍ DICE EL SEÑOR

Colosenses 4:16
Cuando esta carta haya sido leída entre
vosotros, haced que también se lea en la iglesia de
los laodicenses, y que la de Laodicea la leáis
también vosotros. (RVR60).
Los comentadores coinciden que había una
carta para Colosas como otra escrita para
Laodicea, y que debían ser intercambiadas169 ya
que las dos congregaciones necesitan la enseñanza
incluida en ambas cartas.170 La revelación tiene un
carácter local, pero, puede trascender
universalmente en sus principios espirituales,
doctrinales y morales de la epístola y ser útil para
otro tiempo e iglesias.171 En la epístola a los
Colosenses el tratamiento a la herejías y falsos
maestros nos hace entender que semejantes
problemas había en Laodisea. Pero en cuanto a la

169 Hanna, Roberto, Karen Suarez Arroyo, and Edgardo


Alvarez, Ayuda Gramatical Para El Estudio Del Nuevo
Testamento Griego, Segunda. (El Paso, Texas: Mundo
Hispano, 1993), 325.

170 Burt, D. F., Deberes Domésticos Y Otros Asuntos: Colosenses


3:18-4:18 (Barcelona: Publicaciones Andamio, 2006), 173.

171 Ibid., 178.

113
ASÍ DICE EL SEÑOR

carta a Laodisea hay varias posturas, pero no la


consideraremos en este estudio. Si se quiere
destacar que ya se iniciaba la práctica de
intercambio de manuscritos autorizados para luego
se conforme el canon bíblico.172
Textos en la 1a Epístola a los Tesalonicenses
I a Tesalonicenses 5:20-21
No menospreciar las profecías
No menospreciéis las profecías. Examinadlo
todo; retened lo bueno. Absteneos de toda especie
de mal. (RVR60).
Frente una iglesia naciente, sin la Biblia, sin
una himnologia establecida y con un contexto
agresivo, motivo a las iglesias a no menospreciar
las profecías, pero animó a examinarlos,173para

172 Burt, D. F., Deberes Domésticos Y Otros Asuntos: Colosenses


3:18-4:18, 173-178. Menciona varias opciones: (1) una carta
escrita por los laodicenses, probablemente dirigida a Pablo,
(2) una carta escrita por Pablo estando él en Laodicea, (3)
la Epístola a Filemón, (4) a Epístola apócrifa de Pablo a los
Laodicenses, (5) la Epístola canónica de Pablo a los Efesios
o (6) una epístola paulina que se ha perdido.

173 Ibid.; Nichol Francis, Comentario Bíblico Adventista, trans.


Víctor Enrique Ampuero Matta and Nancy Weber de

114
ASÍ DICE EL SEÑOR

corroborar su validez y no caer en falsos


profetas.174
Donde Dios siembra trigo el enemigo está
sembrando cizaña, donde instaura el don profético
en alguien el enemigo lo falsifica, por ésta y varias
razones más se da el fácil desprestigio al don
profético.
CONCLUSION
El apóstol Pablo defendió y valorizo el don
profético en su ministerio instando a las iglesias a
ser fieles oyentes de Dios, no desechando las
profecías sino examinando todo y reteniendo lo
bueno.
Teología y Profetismo en las Cartas de Juan
Javier A. Badano

Wyhmeister, 1° ed., 7 vols. (Buenos Aires: Casa Editora


Sudamericana, 1996). Pruebas de un profeta verdadero: (1)
confesar a Cristo con su vida y palabras (1 Juan 4: 1-3).
Reconocerá la divinidad de Cristo (1 Juan 2: 22-23). (2)
Sus esnseñanzas y las Escrituras en concordancia (Hech.
17: 11; Gál. 1: 8-9). (3) El fruto de su enseñanza debe ser
bueno (Mat. 7: 18-20).

174Hendriksen, William, Comentario Al Nuevo Testamento: 1 Y


2 Tesalonicenses (Grand Rapids: Libros Desafio, 2007), 163.

115
ASÍ DICE EL SEÑOR

Las tres cartas generales de Juan giran en torno a


dos ejes que constituyen su trasfondo. Uno es el
problema con el proto-gnosticismo. Que en sus
dos vertientes principales negaba la encarnación
real de Jesús175. Y el otro eje, es el recambio
generacional que suponía la muerte de los últimos
testigos oculares de los hechos y dichos de Jesús y
el surgimiento de cristianos que no tenían esa
experiencia176. A partir de todo este marco
nacieron como un problema grave, dentro de la
iglesia, falsos maestros y falsos profetas, que Juan
llama anticristos. Los cuales empezaron a trastornar
las iglesias y a producir efectos negativos entre los
creyentes. Por la lectura cuidadosa de las tres cartas
en su conjunto pareciera ser que 1 Juan es la que
provee el marco teológico desde el cual se deducen
las condiciones del verdadero ejercicio del don
profético. A su vez 2 Juan y 3 Juan parecieran

175 Francis, Nichol. Comentario Bíblico Adventista del


Séptimo Día tomo VII (Boise, Idaho: Pacific Press Publishing
Association, 1990). pp. 643-644.

176 Jon Paulien. Juan (Buenos Aires: Asociación Casa


Editora Sudamericana, 2000). p. 22. Tambien ver Armando
Levorrati. Comentario Bíblico Latinoamericano (Navarra:
Editorial Verbo Divino, 2007). pp. 1151-1152.

116
ASÍ DICE EL SEÑOR

mostrar los efectos del ejercicio del verdadero y del


falso profetismo a través de casos paradigmáticos
cuidadosamente elegidos.
La Teología del Profetismo en 1 Juan
La primera epístola de Juan contiene las
bases teológicas que permiten distinguir la
verdadera acción profética de la falsa. En esta carta
se hacen patentes los conceptos que luego se
pondrán de relieve a través de casos concretos en 2
y 3 de Juan.
El prologo de la carta reemplaza la
salutación epistolar habitual y cumple la función
de destacar la autoridad del apóstol177. Este
prologo de 1 Juan 1:1-4 posee la misma estructura
que el prologo del evangelio de Juan178. Es un
alegato a favor de la verdad del Cristo encarnado y
del Cristo divino. Luego de su introducción tan
oportuna Juan describe las calidades éticas de los
que son contrarios a la verdad. En 1 Juan 1:5-10 el

177 Ekkerhardt, Mueller. Las Cartas de Juan (Buenos


Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana, 2009). p. 21.

178 David, Hubbard. Word Biblical Comentary (Waco,


Texas: Word Books Publisher, 1984). p. 4.

117
ASÍ DICE EL SEÑOR

apóstol califica a los falsos maestros o profetas


como aquellos que tienen valores éticos
contrapuestos a las enseñanzas correctas. Para
estos falsos profetas el pecado no era
importante179. Esto se debía en gran medida al
dualismo que los dominaba, que había afectado su
cristología y su hamarteología180. Para Juan un
verdadero cristiano, y por ende un verdadero
maestro o profeta, debe tener una visión clara del
pecado, de la salvación y de la observancia de los
mandamientos, como se manifiesta en: 1 Juan 2:1-
16, 1 Juan 3:1-10 y 1 Juan 5:16. Los falsos profetas
o anticristos a los que se refiere Juan tenían una
noción desviada y torcida de estos conceptos.
En primera de Juan existen dos pasajes que
se constituyen en el corazón mismo de la teología
sobre el profetismo enseñada por el apóstol en esta
carta. Ellos son: 1 Juan 2:18-29 y 1 Juan 4:1-6, son
pasajes paralelos181, y enseñan la necesidad de no

179 Ibíd. p. 26.

180 Ver Francis, Nichol. Comentario Bíblico Adventista


del Séptimo Día. Tomo VII. pp. 643-644.

181 Ver Ekkerhardt, Mueller. Las cartas de Juan. pp. 65­


75.

118
ASÍ DICE EL SEÑOR

dejarse engañar por falsos maestro o profetas


(anticristos), que niegan la realidad del Cristo
encarnado poseyendo una falsa cristología y una
falsa soteriología. Tal negación contrasta
evidentemente con la realidad de la cual Juan fue
testigo ocular (1 Juan 1:1-4). Tanto en 1 Juan 2:18-
29 como en 1 Juan 4:1-6 se enseña una de las
pruebas del profeta. Que en este caso corresponde
con la visión que el profeta debe tener en cuanto a
Jesús como Señor, Salvador e Intercesor182. Si los
contemporáneos de Juan aplicaban esta prueba a
los falsos maestros y profetas. Que eran dualistas
con influencia proto-gnóstica, los cuales negaban
la encarnación despreciando la materia como
mala183. Seguramente estos falsos profetas
quedaban al descubierto. No solo a raíz de su falsa
Cristología184 sino también por su desprecio a los
mandamientos185 y su falsa soteriología186. Que

182 Herbert, Dougglas. Mensajera del Señor (Buenos


Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana, 2003). pp. 32.

183 Marilyn, Kunz y Catherine Schell. Que es un


Cristiano (Buenos Aires: Ediciones Certeza, 1974). p.19.

184 Ver 1 Juan 4:3, 1 Juan 4:15, 1 Juan 5:5-9.


185 Ver 1 Juan 5:16, Mateo 12:31-32.

119
ASÍ DICE EL SEÑOR

nacían de una distorsión en cuanto a la naturaleza


de Cristo. En definitivita estos falsos maestros
pretendían ser inspirados pero su mensaje y su
vida contrariaban la fe apostólica186187. En esto
último está implícita otra de las pruebas de un
profeta, que es la producción de frutos acorde a su
categoría188. En realidad esta prueba esta expresada
a los largo de toda la primera epístola de Juan y
ejemplificada en la segunda y tercera carta del
apóstol.
Para Bultmann, cuando el autor de la carta
(1 Juan) escribió sobre falsos profetas tenía en
mente las palabras de Jesús consignadas en Mateo
24: 11 y 24189. Resulta interesante la coincidencia
entre este gran discurso escatológico de Jesús y la
expresión Juanina de que “ya es la última hora”190.

186 Ver 1 Juan 5:10-13.

187 Ekkerhardt, Mueller. p. 71.

188 Ver Mateo 7:15-20.

189 Rudolf, Bultmann. The Joannien epistles


(Philadelphia: Fortress Press, 1973). p.62.
190 Ver 1 Juan 2:18.

120
ASÍ DICE EL SEÑOR

Dicha expresión de carácter escatológico, sirve de


encabezado para uno de los dos pasajes centrales
de la teología del profetismo en 1 Juan. Es decir 1
Juan 2:18-29. En base a lo cual se podría deducir
que las enseñanzas del apóstol en cuanto a esta
temática tienen plena vigencia hasta el día de hoy.
Siendo relevantes para los cristianos de segunda
generación de todos los tiempos191.
Los Efectos del Profetismo en 2 y 3 Juan
Existe una continuidad del pensamiento
teológico entre la primera y la segunda epístola de
Juan192. También sucede lo mismo entre la
segunda y la tercera carta193. Esto se ve bien
reflejado cuando se comparan 2 Juan 1:6-11 y 3
Juan 1:11 con los conceptos vertidos por el apóstol
en 1 Juan. Segunda y tercera de Juan parecen, no
obstante, mostrar los efectos tanto de la enseñanza
de los verdaderos profetas o maestros como los
efectos de la enseñanza de los falsos profetas o

191 Ver Hubbard. pp 27-41.

192 John, Stott. The eplistles of John (Grand Rapids,


Michigan: Eermans Publishing Company, 1971). p. 205.

193 Ibíd. p. 216.

121
ASÍ DICE EL SEÑOR

maestros. Esto a través de la mención y


descripción de casos. Siendo esta una forma
didáctica y catequética típica de Juan ya usada en
el evangelio194. En los casos positivos se advierte la
influencia y los efectos de las enseñanzas más bien
que la influencia y los efectos de la vida personal
Juan195. Aunque fue un ejemplo de verdadera vida
cristiana sobre todo en su ancianidad196. Sin
embargo seguía siendo un pecador. Juan no
pondera a los diferentes personajes como: La
mujer elegida y sus hijos, Gayo y Demetrio por
seguir su ejemplo sino por andar en la verdad (2
Juan 1:1,4 - 3 Juan 1:3 - 3 Juan 1:12). Segunda y
tercera de Juan no solo están hiladas por el mismo
pensamiento teológico o la misma didáctica
casuística, sino que sostienen un mismo mensaje

194 PaulienJon,. p. 22.

195 Ver Roger, Coon. La dinámica de la inspiración y la


Revelación (Libertador San Martín, Entre Rios: Centro de
investigación White, 1997). pp. 30-32.

196 Ampuero Matta, Victor. Comentario Bíblico


Adventista del séptimo Día tomo 7-A (Buenos Aires: Asociación
Casa Editora Sudamericana, 1994). p. 959.

122
ASÍ DICE EL SEÑOR

en contraste197. En segunda de Juan se le advierte a


la mujer elegida198 que no reciba a los falsos
maestros o profetas, 2 Juan 1: 10-11. Mientras que
en tercera de Juan se elogia a Gayo por recibir a
los verdaderos profetas o maestros, 3 Juan 1:5-8.
En estas dos cartas se mencionan cuatro
casos. Tres de ellos, la mujer elegida y sus hijos,
Gayo y Demetrio son favorables. Son los casos que
demuestran el efecto bueno de la buena enseñanza
de un verdadero profeta como Juan. Se dice de
estos, no solo que andan en la verdad, sino también
que son fieles, andan en amor y están dispuestos a
servir. En cambio en tercera de Juan se menciona
a Diotrefes199. Un posible anciano de la iglesia,
quien abiertamente desoye al apóstol, no lo
reconoce, fomentando la división y los puntos de

197 John Stott. p. 216.

198 Para conocer las diferentes posturas interpretativas


sobre la mujer elegida y sus hijos ver: José, Grau. El amor y la
Verdad (Barcelona: Ediciones Evangélicas Europeas, 1973). p.
134.
199 Su nombre significa: nutrido de Zeus. Ver A. B.,
Rudd. Las Epístolas Generales (Casa Bautista de Publicaciones:
El Paso, Texas, 1952). p. 295.

123
ASÍ DICE EL SEÑOR

vista heréticos200. Posiblemente esta reacción fue


ocasionada a raíz de su afinidad con el mensaje de
los falsos profetas (comparar 3 Juan 1:9 con 2
Pedro 2:1). El comportamiento de Diotrefes
contrasta201 de plano con el de las otras personas
mencionadas. El es altivo, autoritario, critico, no
hospitalario, injusto y mal intencionado (1 Juan
1:10)202. Esto refuerza la visión del mismo como
cultor de las ideas cristiano-gnósticas 203.

Co n c l u s i ó n
Juan hace evidente la diferencia entre los que son
verdaderos profetas de los que son falsos profetas.
Y tiene directivas claras sobre qué postura tomar
frente a los falsos maestros (profetas) y dirigentes
como Diotrefes. No hay que orar por ellos, 1 Juan

200 Judith, Lieu. The Theology of the Johannine epistles


(Cambridge: Cambridge University Press, 1991). p. 12.

201 A. B., Rudd. p. 296.

202 Igor, Lorencin. “Hospitality versus patronage: an


investigation of social dynamics third epistle of John”
(Andrews University Seminary Studies, vol. 46, Nro 2, Año
2008). pp. 166-167.

203 Ibíd. p. 165.

124
ASÍ DICE EL SEÑOR

5:16. No hay que darles la bienvenida ni recibirlos,


2 Juan 1:10. Su final será la salida de la iglesia, 3
Juan 1:10. Porque en definitiva desde que
aceptaron lo falso ya espiritualmente salieron de
ella, 1 Juan 2:19 y 2 Juan 1:9. Por todo este cuadro
de situación Juan escribió “Amados, no creáis a
todo espíritu, sino probar si los espíritus son de
Dios; porque muchos falsos profetas han salido al
mundo.”, 1 Juan 4:1.
A su vez Juan muestra tres diferentes casos
que han recibido los efectos de la verdad enseñada
por los verdaderos profetas de Dios. Estos tres
casos son una reafirmación práctica del marco
teológico que el apóstol plantea en la primera
epístola. El que sigue los preceptos de los
verdaderos maestros o profetas demuestra en su
vida esa sana influencia, 1 Juan 5:18

125
ASÍ DICE EL SEÑOR

BIBLIOGRAFÍA SELECTA
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