1. Amor a primera vista.

“Pero tú eres el que me sacó del vientre; El que me hizo estar confiado desde que estaba
a los pechos de mi madre. Sobre ti fui echado desde antes de nacer; Desde el vientre de
mi madre, tú eres mi Dios”. Salmo 22:9-10
Introducción
Podemos definir el amor a primera vista como ese “Enamoramiento que se produce en el
primer encuentro” entre dos personas, y aunque muchos chicos y chicas confiesan haber
experimentado este tipo de “amor”, en el que la emoción, los sentimientos
experimentados al ver esa otra persona, son tan evidentes que es difícil disimular, en la
realidad esto tiende a ser un momento intenso que luego pasa y que puede ser producto
además de los cambios emocionales y hormonales que son muy comunes en los jóvenes
en general.
Sin embargo hay un amor que perdura más allá de una primera mirada, un amor que no
solo es expresado y experimentado en un primer o primeros encuentros, sino que va más
allá del impacto que la apariencia física, el olor de un perfume, el color de los ojos, la pinta
u otros factores pudieran ocasionar de momento, sino que trasciende aun a pesar de
nuestras debilidades y defectos. Un amor eterno.
1. Nadie te va a amar como yo, Jeremías 31:3
En un mundo donde hemos estado acostumbrados a la incredulidad y la dureza,
donde en una cadena interminable hemos fallado y nos han fallado, donde la
verdad no es el común denominador y el amor aparece envuelto en la
superficialidad y la mentira, nos cuesta creer el gran ofrecimiento de amor que
papa Dios pone a nuestra disposición, porque creemos no merecer tanto amor, de
hecho nos cuesta creer que alguien nos ame de esta manera pero su sobrenatural
amor permanece, sigue amando “a pesar de”. Su eterno amor es lo único con
peso suficiente para que desarrollemos la confianza y la fe que tanto necesita
nuestro corazón.

2. Más allá de la primera mirada, Salmo139:16

Este pasaje nos explica que cuando estábamos siendo formados en el vientre de
nuestra mamita, tuvimos un primer encuentro con sus ojos de amor. Imagínate ese
primer momento donde fuiste formado, perfectamente diseñado por sus manos de
amor, donde cada pequeño detalle de esa vasija preciosa que representa tu vida
era meticulosamente cuidada para hacerte tan especial, tan único, tan diferente a
todos y todas. Sus ojos de amor, no solo en el momento de la concepción fijaron
su mirada sobre cada uno de nosotros, sino aun antes de la fundación del mundo
y aun en el futuro siempre estarán ahí para cuidarnos y amarnos, no para
señalarnos (Salmo 32:8).

3. Te escojo a ti, 1 Pedro 1:1-2

Amor y escogencia están inseparablemente ligados. Somos especiales porque
somos elegidos. La Trinidad entera, Padre, Hijo, y Espíritu Santo están
involucrados en amar y cuidar a cada uno de los que le abren la puerta a su amor.
No necesitas luchar más por ser reconocido y aceptado por los demás, cuando
desde la eternidad ya fuiste amado y escogido, puedes sentirte seguro y confiado
que Papa Dios tiene un plan y un propósito perfecto diseñado para ti.

Aplicación Teoterápica

Qué bueno saber que nuestro primer y gran amor permanecerá a nuestro lado por
siempre, no debemos permitir que ninguna situación o persona le quite el lugar al
ser más importante de nuestra vida, al amor más bonito y duradero que jamás se
podrá comparar, experimentar el amor de nuestro buen Dios nos dará la seguridad
para seguir creciendo de la manera más sana y feliz. No te lo pierdas.

Actividad de finalización: El líder MJC debe previamente inflar globos/bombas e

introducir papeles que tengan mensajes de lo que es el amor (de acuerdo al tema).
Hacer dos grupos. Escoger un joven de cada grupo y pedirles que corran juntos al
lugar designado para las bombas para que ambos la exploten al mismo tiempo
sentándose sobre esta. Luego se les pedirá a todos los jóvenes que se sienten en
un círculo para leer lo que dice su papel y al final pegarán los papeles en una
cartulina que tendrá como título AMOR ES... Dibujar o recortar corazones para
pegarlos alrededor de la cartulina.
 2. Especialista en seducción
“Me sedujiste, oh Jehová, y fui seducido; más fuerte fuiste que yo, y me venciste;…”
Jeremías 20:7ª
Introducción
Indiscutiblemente la relación más importante, por sobre todas las demás, es nuestra
relación con Dios. Dejarnos seducir por su amor es cultivar una relación contante,
permanente, libre y muy cercana con nuestro gran amor. Si esta relación no se cultiva
como prioridad, cualquier otra relación que tengamos no tendrá un fundamento sólido.
Sólo en la medida que cultivemos la intimidad y transparencia con Dios, podremos
proyectarnos de una manera más libre y sana no solo con quienes nos rodean sino
también con todo lo que nos rodea.
1. Rendido a sus pies.
Por lo general los jóvenes tienen la tendencia a dejarse seducir por situaciones,
lugares, cosas o personas que en ocasiones pueden ser altamente nocivas para
su mente, su corazón e inclusive para su cuerpo, rendir cada área de nuestra vida
a Dios antes que a todas estas cosas, es fundamental para establecer relaciones
sanas, libres, y edificantes con los demás, aprendiendo a establecer límites y a ser
cuidadosos de nuestros principios y de nuestro ser. Solo rendidos a sus pies
seremos fortalecidos para no sucumbir a lo que nos hace daño.

2. Seducidos para ser sanados, Hebreos 12:13

El objetivo de Dios es formar nuestro carácter, y Él no desistirá de su propósito,
aunque esto implique pasarnos por situaciones de decepción e incomodidad.
Siempre habrá a nuestro alrededor personas cuya forma de ser “choca” con la
nuestra, y no faltarán así mismo personas para quienes compartir con nosotros
puede resultar difícil. El rechazo y los conflictos con otras personas, muchas
veces, son el reflejo de nuestra propia incapacidad para amarnos y aceptarnos a
nosotros mismos, y la necesidad que tenemos de ser entrenados por Dios para ser
sanados y amar como Él espera que lo hagamos.

3. Seducido para establecer relaciones sanas, Jeremías 15:19

Todos deseamos y buscamos relaciones con otros, pues tenemos necesidades
personales que se pueden llenar interactuando con los demás. El éxito en el
estudio, la familia, en los proyectos, etc., depende mucho de la capacidad de
relacionarnos con otros, de enriquecer las relaciones ya establecidas, lo cual trae
más significado a nuestra vida. Nuestro crecimiento social, intelectual, aun nuestra
identidad, crece con la calidad y naturaleza de nuestras relaciones con los demás,
pues en la medida en que interactuamos, somos renovados.

4. Vuélvete un especialista en seducción, Mateo 7:12

A continuación tendremos en cuenta algunos tips importantes para establecer
relaciones de compañerismo sano, edificante y productivo, basado en las
enseñanzas de nuestro maestro en seducción, nuestro buen Dios.
  Conocimiento: implica compartir con otros nuestros sentimientos hacia las
personas, y a sucesos del pasado o del presente. Una persona nos conoce y nos
comprende, conociendo nuestras reacciones ante ciertas situaciones, y no
necesariamente conociendo nuestro pasado

 Confianza: la cual descansa sobre la auto aceptación, e implica correr riesgos y

aprender a creer en las otras personas. Mostrarnos tal y como somos; libertad que
tenemos cuando hemos aprendido a aceptarnos a nosotros mismos.

 Comunicación: comunicar es la habilidad de emitir un mensaje que se entienda

debidamente por el oyente, y la habilidad de recibir y entender el mensaje del otro.
La comunicación implica aprender a escuchar y prestar atención, antes de
preocuparse por pensar en cómo va a responder.

 Aceptación y apoyo: estas son dos actitudes básicas en las relaciones

interpersonales. Una atmósfera de aceptación y comprensión fomenta la libertad
para ser uno mismo, y para comunicarnos con el “corazón abierto”.

 Solución de conflictos en una relación con otros: los conflictos son algo normal y
natural en el desarrollo de cualquier relación con los demás. Estos surgen por
tener diferentes opiniones, valores o forma de ver las cosas. El arte de resolver los
conflictos que surjan es clave para mantener relaciones saludables con los que
nos rodean y es muestra de madurez en el proceso de desarrollo de nuestra vida.

Aplicación Teoterápica
Déjate amar para aprender a amar, solo en la medida en seamos inundados por el rio
de agua de vida de Dios y cargados de su incondicional amor, estaremos capacitados
para volvernos como Él, especialistas en seducción. Deja que te venza su amor.

Oración Final: Ambientar con la canción de Jesús Adrián Romero. Te dejo ganar.
Tema para movilización.
3. Enamórame/te

“Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé; daré, pues,
hombres por ti, y naciones por tu vida.” Isaías 43:4

Introducción
La necesidad más grande del ser humano es amar y ser amado, cuando no se suple esta
necesidad, se producen heridas y vacíos emocionales, que necesitan el tratamiento del
amor de Dios. La gran mayoría de personas hemos recibido a lo largo de nuestra vida (y
sobre todo en la infancia), algún tipo de rechazo, cuyo efecto, ha generado una cantidad
inimaginable de disturbios mentales y emocionales que nos han convertido hoy, sin
darnos cuenta, en “paralíticos emocionales”, incapaces de dar y recibir amor.
Esta serie de trastornos los resumiremos bajo el título de “El Síndrome del Rechazo”, el
cual definimos como la conducta obvia o explícita que le transmite a un niño el mensaje
de no ser amado. Descubriremos a lo largo de este tema, cómo pudo afectarnos este
síndrome y también cómo “enamorarnos” puede ser el mejor antídoto para todo lo que
este ha ocasionado en nuestras vidas.
1. Experiencias de rechazo
 Etapa prenatal: la ciencia ha demostrado que él bebe en el vientre
materno, no solo tiene vida física sino también vida emocional, la cual está
íntimamente ligada a la vida emocional de la madre, por lo cual los
recuerdos del bebe están conectados con sus experiencias y reacciones;
situaciones como el rechazo al embarazo, intento de aborto, depresión
profunda, enfermedad o maltrato físico de la madre condicionan la vida
emocional del niño aun antes de nacer.
 En los primeros años: la imagen que se forma el niño de sí mismo es un
reflejo de lo que sus padres piensan de él. Hay muchas experiencias que le
hieren emocionalmente condicionándolo negativamente: maltrato físico y
verbal, padres ausentes por divorcio o por muerte, padres dominantes y
crueles, comparaciones entre hermanos, abuso físico y sexual, maestros
crueles y exigentes, etc.
 En la adolescencia: en esta etapa que se caracteriza por la búsqueda de
identidad, sentido de independencia, cambios físicos y emocionales
bruscos, dependencia del grupo de amigos, entre otras situaciones, se
tiende siempre a llenar los propios vacíos y carencias afectivas, cayendo
en experiencias que le pueden herir, como adicciones, promiscuidad,
abortos provocados, decepciones amorosas, dependencias emocionales,
relaciones homosexuales, etc.

2. “Enamórate”, el mejor antídoto para el rechazo, Efesios 3:17-19.

Ninguna relación humana de amor, por grande que sea, dejara satisfecha nuestra
alma, hasta que no nos encontremos con el inconmensurable amor de Dios. El
verdadero amor, el de Dios, hace que experimentemos salud en nuestro espíritu,
 alma y cuerpo, seguridad de ser amados y aceptados incondicionalmente y
seguridad del perdón de nuestros pecados. Es por esto que los siguientes pasos
son necesarios para experimentar la sanidad del impacto del rechazo que produce
este amor:
 Reconocer la necesidad de ser sanados. La separación de Dios es la
principal causa de las heridas emocionales (Mateo 5:6).
 Confesar actitudes y pensamientos negativos. Pedir a Dios que saque el
dolor guardado durante tantos años (1 Juan 1:9).
 Perdonar a los que nos han herido. El perdón es un proceso largo, hasta
que el dolor desaparece y obra como purificador, de todas las heridas
(Mateo 6:14-15).
 Apropiarse del amor restaurador de Dios. Permitamos que su amor toque
cada área de nuestra vida y cada recuerdo (1Corintios 13:4-8).
 Apropiarse del perdón de Dios. Perdonarse a sí mismo (Juan 8:11).
 Renovar la mente. Las heridas nos programan para el fracaso, renovar la
mente nos reprograma por Dios para el éxito. Dios no hace basura.
 Cultivar una comunión diaria con el Espíritu Santo.

Aplicación Teoterápica:

Por muchos años nos acostumbramos a vivir de conflicto en conflicto, resultado de

los trastornos ocasionados por el rechazo en nuestra vida. Cuando aceptamos al
Señor Jesucristo en nuestro corazón, iniciamos un proceso hasta que nuestra
alma se acostumbra a recibir amor, este proceso genera crisis pero para progreso
y gran bendición, no para derrota. Por ello la invitación que te hacemos es… que
tu petición a Papito Dios sea: “Enamórame, pero de ti”, y su invitación siempre
será “Enamórate”…pero de mí. Ten por seguro que lo demás viene por añadidura.

Recomendaciones: Orar con los MJC, aplicando los pasos anteriormente expuestos, en
un tiempo muy bien preparado y bien especial, de sanidad.
Canciones sugeridas: “Enamórame”, Abel Zabala; “Quiero enamorarme más de ti”,
Marcela Gándara.
 4. Del amor y otros demonios.

“Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte.”
Proverbios 14:12

Introducción
Del amor y otros demonios es una obra literaria escrita por Gabriel García Márquez y
publicada en el año 1994 que describe la historia de “amor” entre Cayetano y Sierva
María, personajes principales de la novela quienes después de envolverse en una
relación tormentosa al final del libro son separados por las circunstancias que derivan de
la misma historia y cuya conclusión del autor es que Sierva María “muere de amor”.
Cuando vivimos alejados del verdadero amor (de Dios), llamamos amor a cualquier
sentimiento, y es por esto que hoy y en todos los tiempos por amor se hiere y por amor se
frustran los más grandes propósitos; cuando desde la infancia se ha experimentado la
ausencia de amor, se presentará a lo largo de la vida una serie de efectos que se
manifiestan en todo nuestro ser integral a tal punto que impiden un desarrollo emocional e
intelectual saludable, y por ende una personalidad equilibrada. Y como en la historia de la
novela, se convierte el amor en una tortuosa experiencia, cuando realmente es la base de
todas las sanas relaciones humanas.
1. A mí también me ha pasado
Veamos algunos ejemplos de infinidad de situaciones que muchas veces vivimos sin
que las entendamos, pero que son producto de nuestro propio desequilibrio y faltante
de amor.
 Estar a la defensiva en nuestras relaciones con los demás, como creyendo que
todo el mundo quiere aprovecharse de nosotros.
 La incapacidad de amar equilibradamente, lo que nos lleva a “enamorarnos
perdidamente”, haciendo de la otra persona el sol de nuestra vida, y llevándonos a
derrumbarnos emocionalmente cuando ésta falla.
 La sensación de “sentirnos solos” a pesar de saber que no lo estamos y que
tenemos alrededor personas con las que podemos contar.
 El sentimiento de inadecuación que nos hace sentirnos “que sobramos” o
“estorbamos” en algunos lugares o con algunas personas, lo que nos lleva a huir y
mantenernos sólo en el pequeño radio de acción que creemos dominar.
Si has experimentado alguna de estas situaciones o todas ellas, es hora de buscar un
equilibrio personal e interpersonal.
2. Buscando el equilibrio
El amor no tiene por qué doler o por qué ser una experiencia traumática, es por esto
que antes de buscar felicidad o realización en el grupo de amigos, en una relación de
noviazgo, en dependencias emocionales o en relaciones virtuales que pueden
volverse tan peligrosas, mejor toma nota y ten en cuenta estos aspectos
fundamentales para aprender a ser feliz y no morir en el intento:

 Busca la voluntad de Dios para tu vida, Proverbios 3:7.

  Disfruta de estar completo en Cristo: ninguna relación nos hará sentir más
satisfechos y completos que lo que significa estar en Cristo Jesús
(Colosenses.2:10).
 Deposita todas tus expectativas de ser amado, solamente en Dios.
 Haz de Dios y su reino tu máxima prioridad: muchos por alimentar una prioridad
equivocada, pierden oportunidades, descuidan el presente, y se les olvida que la
provisión de Dios fluye de una manera natural (Mateo 6: 33-34).
 Vive el presente con intensidad: si continúas tu andar diario por fe, te ubicarás en
el lugar que el Señor determinó para ti (Salmo 37: 23).
 Disfrutar de los beneficios de ser un joven soltero: la libertad en la agenda de un
soltero, le permite una gran flexibilidad para servirle a Dios y desarrollar sus
intereses (1 Corintios 7: 32).
 Organiza tu tiempo: vive por prioridades. El aburrimiento y la soledad vienen
cuando no se tiene “una pista donde correr” (Efesios 5: 16).
 No te dejes presionar: tu vida y tus tiempos son únicos. No hay porque correr.

Aplicación Teoterápica
Ahora nuestra vida le pertenece a Dios, en mejores manos no podemos estar. Nuestros
problemas no son más nuestros, son de Él. Si descansamos en su cuidado tierno y
delicado, todas las demás cosas nos serán añadidas. Dejemos que su precioso amor nos
llene y nos sane de tal manera que se manifieste en nosotros una vida con sentido y
felicidad. Vive el amor como verdaderamente es.