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Universidad Central del Ecuador

Facultad de Ciencias Médicas


Catedra de Medicina Tropical
Nombre: Jaramillo Merino Juan Andrés
Curso: HEE1 (P2)
Fecha: Quito, 2017-10-30
Ensayo sobre influenza
La influenza es una enfermedad endémica de país altamente infecciosa compuesto por
virus de influenza A (H1N1), AH3N2 y B, miembros de la familia orthomyxoviridae. El
virus tipo A causa pandemias y epidemias1. El B causa epidemias mientras que el C causa
leves infecciones respiratorias. Se estima que un 20-40% de la población se afecte2.
Desde su aparecimiento en 2009, la influenza se mantiene en el país como uno más de
los virus estacionales3. Hasta el jueves 25 de julio del presente año se registraron 6 casos
de personas fallecidas y 91 afectados por el virus de la influenza AH1N1. El Ministerio de
Salud prohíbe la comercialización de medicamentos antigripales, antiinflamatorios y
analgésicos clasificados en el registro sanitario como de “venta libre”, estos solo son
expendibles con receta médica, para evitar la automedicación y posibles
complicaciones2.
Afortunadamente, gracias al Ministerio de Salud Pública con un sistema de vigilancia
epidemiologia para el control de influenza, el país posee campañas de vacunación que
se realiza de octubre a diciembre de cada año, enfocadas principalmente en los grupos
de riesgo: mayores de 65 años, menores de 5 años, enfermos crónicos, embarazadas y
personal de salud, las cuales confieren protección contra los 2 tipos influenza A y B 2.
Otros virus respiratorios co-circulan en el país, principalmente entre los meses de enero
y abril presentándose un aumento de casos, mostrando un patrón estacional que
coincide con la época invernal3. El MSP también suministra medicamentos a todos los
centros de salud y hospitales del país2.
La influenza posee dos glicoproteínas de superficie, que ayudan a categorizar el subtipo
del virus: la hemaglutinina (subtipos H1 a H17), encargada de fusionar la membrana
celular al virus, mientras que la neuroaminidasa escinde esta unión para que el virus
penetre en el organismo2. Existe una nomenclatura para diferenciar el virus en el cual
se incluye el tipo de virus, origen geográfico, número de cepa, año de aislamiento y
subtipo de virus1.
En 2009, el virus de influenza pandémico empezó en abril y en agosto del 2010 paso a
ser cepa de influenza estacional, al igual que H3N2 estacional y virus tipo B. Estos
presentan cambios antigénicos mayores (shift), son cambios abruptos en sus
glicoproteínas que “forman un nuevo virus” al intercambiar grandes segmentos de
genoma viral entre virus. Da un nuevo subtipo y tienen el poder de generar pandemias.
Y los cambios antigénicos menores (drift) son mutaciones puntuales en los antígenos de
superficie de virus A y B que no tienen mayor repercusiones en el virus1. Generan
epidemias. Estos cambios súbitos permiten al virus infectar nuevos huéspedes entre
especies, incluso saltando entre ellas y rápidamente sobrepasar a la inmunidad de los
individuos3.
En conclusión, desde un punto de vista de salud pública, las epidemias de gripe se
propagan rápidamente, de manera descontrolada y de difícil control. Un individuo
puede ser contagioso y asintomático al mismo tiempo, por lo que las técnicas de
cuarentena no son una forma efectiva se intervención4. Además, el tiempo de
generación hace que las epidemias lleguen a un pico a los 2 meses, por lo que las
decisiones y acercamientos tienen que tomarse de manera temprana y rápida, a veces
con información incompleta5. Debemos vigilar de manera constante y minuciosa a los
diferentes tipos y subtipos de virus que afectan a nuestra población, pues no es buena
idea confiarnos y tomarlo a la ligera pues cualquier momento podrían mutar, afectar a
la población y aumentar la morbilidad-mortalidad rápidamente6. Incluso, estudios
estiman que una cepa de virulencia similar a la gripe española de 1918 emergiera hoy,
mataría entre 50-80 millones de personas7.
Bibliografia
1. Longo, Dan L. "187: Influenza". Harrison's principles of internal medicine.(18th
ed.). New York: McGraw-Hill. 2012.
2. MSP. Actualización Nacional Vigilancia de Infección Respiratoria Aguda Grave
(IRAG) SE-29. (2017). Dirección Nacional Vigilancia Epidemiológica. [online]
Available at:
http://instituciones.msp.gob.ec/images/Documentos/irag/2013/BoletinIRAG-
SE29.pdf [Accessed 19 Nov. 2017].
3. Weekly Epidemiological Record No. 9, 2009, 84, 505–516 disponible en
http://www.who.int/influenza/surveillance_monitoring/updates/latest_update
_GIP_surveillance/en/
4. Lozano, R. "Global and regional mortality from 235 causes of death for 20 age
groups in 1990 and 2010: a systematic analysis for the Global Burden of Disease
Study 2010.". Lancet. 2012. 380 (9859): 2095–128.
5. Whitley RJ, Monto AS. "Prevention and treatment of influenza in high-risk
groups: children, pregnant women, immunocompromised hosts, and nursing
home residents" J Infect Dis. 2006. 194 S2: S133–8.
6. Bridges CB, Kuehnert MJ, Hall CB. "Transmission of influenza: implications for
control in health care settings". Clin. Infect. Dis. 2003. 37 (8): 1094–101.
7. Murray CJ, Lopez AD, Chin B, Feehan D, Hill KH. "Estimation of potential global
pandemic influenza mortality on the basis of vital registry data from the 1918–
20 pandemic: a quantitative analysis". Lancet. 2006. 368 (9554): 2211–8.

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