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    sa FERNANDEZ MENDEZ rma; se ha habituado « la Tinea curya, quith por no haberle ido Siempre bien eusndo ha marchado por Ia linea recta, THe aqui a grandes raagos apuntados Tos caractéres més sa- jntes de las condiciones morales del eampesino puertorriqueto, Por ellos hemos podido ver que no ea un malvado. Adviértese, por el eontrario, que posee clertas virtudes, que tiene un Indole Denigoa, que existe en dla tendencla al bien, aungue mateada por clrcunstancias que estudiaremos; rérmenes que silo experan para desarrollarse una eduesckin racional. La tierra esté dis- puesta; slo falls el Jardinero que venga a sembrar las flores (y Djalé sea pronto) para poder aplicaries aquella belisima frase ‘Ge une fAbula orlental citada por 8. Smiles: “arella vulgar era Soantes queen ati hubleran serbrado ross.” FRAGMENTOS DE LA CRONICA DE LA GUERRA HISPANOAMERICANA EN PUERTO RICO, POR ANGEL RIVERO, CAPITAN DE ARTILLERIA. ARO 1698. 1, Toma de: Crinie de le Guerra Hinpanoaneican ex Puerto Rie, suenrtn de Rivadncpre, Madr, 12, pe WVU; 6; 11D. (Gnry Cabot Ledge Sader nortoaericate (lain 108- The wor with Soin, LA GUERRA HISPANOAMERICANA sefisla una época ‘memorable para Rspafa, los Estados Unidos y Puerto Rico, Como resultado de els, la bandera que Colén ¥ tus compaferce ‘pascaran por et Nuevo Mundo te celts, como ae cculta an sol 1s Jornada gioriosa que eomenzara el 19 de noviembre de 1493, cuando las naves eapaioas abordaron Ins costes virgenes de esa isla tuvo su epilogo doloroso el 18 de octubre de 1898, 9 mitad de ese dis, cuando en los eastilos y palacios de San Juan ‘ots, con arroganeias de vencedor, el pabellin estrellado de la Unién Americana. Para Puerto Rico la eamparia que narrames representa un cambio de soberanis, una nueva ruta a seguir, un nuevo horizante ‘que explorar un fardo tremendo de deberes y respontabilidades. a guerra con Espafa marca, para lot Estados Unidos, el nacimiento de su politica imperialista: Pilipinas, Puerto Rico, bueblos de alts civlizacién y refinada cultura, a quienes prote- ‘er, gular y entender; otras razas, otras costumbres, tron con- ceptos dela vida que estudiar con amor y eon interés, En cuanto af arte military al de Is guerra, eta eampata es ‘un eonjunto de saludables ensefanzas. Americanos y espatles oy FERNANDEZ MENDEZ tenen mucho que aprender y mucho que olvidar desde aquelaffo memorable Los grandes buques de acerados blindajes, reins torres y Jargos cationes de retroearga eran, por entonees, tna interroga clén. Destroyers y lorpederos, os torpedos mlsmos y las minas, tun nuevo problema a resolver. Desi el 21 de cetubro de 1805, en que Nelson pagé com su Vids le vietoria de Trafalgar, eafoneando a thro de plchn las raves de trea puentet de Gravina, muy poco hablan adel ‘marinon de as potenciae navales hasta que en ln tu ‘ana, de Norte contra Sur, bills el primer destllo de loa moder- nos blindados y de las piezas de fran libre, “Aguel famoso Monitor, eonstruido por Joh Rrieston, y qe, en la matiana del 9 do marzo de 1862, en la bahia de Hampton Roads, batio en Drecha con sus macizos proyectiles de once pulgadas al Merrimas, corgallo de los sudistas,fu6 el precursor de los mismos tne res que bombardearon & San Juan el 12 de mayo de 1898 y de los caflones vayados de 13 piilzadas con que eh acorszado Indiana ‘urb6 la paz de estas playas an aquella madragads, Espa poseis tres destroyers, ingenios de guerra verdadera ‘mente formidables que, pésimamento utiizadoe entoness, pusie- ron a raya, alos después, manejados por ingleses ammerieenos, ‘os submarinos, la mas legtima y fundada esperanaa del pice bo alemén. ‘A partir del bombardeo de Alexandefa por ls blindados ingle ‘08 con aus cafiones Armstrong, nada serio se habla intentado por mar ni en Europa ni en Amériea, Ta bruses acometida del Almirante John Sampson, el 12 de mayo, fu6 el primer stave ‘ero a una plaza por buques modernos y eon srmamentos moder. nos. Laos acorazados que bombardearon « Santiago de Cube poco Alespués y a los Dardancios mas tarde, indudablemente que uti- \iearon en su obre de destruccion leeiones aprendidas frente a Jos castilos del Morro y de San Cristal Acorazados, destroyers, torpederot, minas torpedos;fusies de largo aleance con trayectoria casi rectilinea y con mecanismo de repeticién y palvora sin humo; asi como los canes, obuses morteros rayados, de retrovarga y de grandes ealibres, fueron miquinas de guerra que debutaron el 12 de mayo de 1898. Arrita: Foto lomaia durante te defense de San Juan, Guere Hi Destraid en m bakin de La Habana en 18 te feera de 1898. Fe tl neem cof bien 46 FERNANDEZ MENDEZ El arto militar, ¥ sobre todo el de Ia guerra, encontraron nuevos problemas que estudiar y resolver. Las tropes invasoras del Goneralisimo Biles srmadas de Springfieds, con pélvora ‘negra, no podian medirse con loa soldades eapailes que mane- Saban Mauser de repeticion, a cinco tires, eon pélvora sin humo; {06 preciso cambiar el fuil en plena eampafia. Otro aspecto interesante fué el de que combatieron frente a frente tropes repulares, profesional, xpafolas, muchas de elias fogueadat en ln guerra de Cuba, contra voluntarios bisofos de lnols, Ohio, Pensslvanin y Massachussets ‘La moderna ambulencia eon su cortajo de murses, médicos, cenfermeros, métodos y material moderne para ls exra de heridos: 1 la misma respetada Cruz Roja, que presté tan sofalades serve tos, fueron novedades, fin de siglo, que también hicieron su début on aquella guerra Esta breve campatia de 1898, de dlecinueve das, es un modelo de guerra cults, moderna y humanitarla. La invasién de Miles reviatis todos los caracteros de un paseo triunfal, debido a su politiea de guerra sabia y humenitaria; se respetaron las cos- tombres, leyes yreligi de los nativos; se mantuvo en toda su fueraa al brazo del autoridad civil, a pesar del estado de guerra to se utiles el abusivo sistema de riquesas, sino que todo era ‘ado, incluso e trreno donde levantaban sus tindas, a precio {de oro. Su prociama, sabiemente urdide y habilmente circulada, ddespereé en todo el pais anholos de libertad y progreso que en tendieron lon corazonen de Ton mds timidos campesinos. Lago Vita, Carbonel, Mateo Fajardo, Nadal, Luzunerisy otros poco, penetratan a un tiempo mismo en os pusblos y en el eorazdn de fus habitantes como precursores de un ejécito que batia marcha de honor ante las damas, besaba y repartia candies los nifios, 2 Neln Avnleton Mls, Comandante General de as rope de eps lon notsmeieatae ‘a Walle Piel Vales Je Yar, Antoni Mata Laver se ieuabet e Sacnabe Suede Non, Le Cable, desde Marchant y Antonio age CRONICAS DE PU "RTO RICO ie Soldados que se batian y hacfan jornadas de trelnts millas bajo tun aol de fuogo del mes de julio, y uogo en Hormigueros, de ro. dillas anto el padre Antonio resaban a la misma Virgen de la Monserrate, tan venerada por todo el Osste de la Iss. Esta politica de la guerra; esta cultura militar; «! hombre detrta det cafén — the man behind the gum — y los numerosos ‘acon de oro acuiado que trajeron Mile, Brooke y Wilson, alla- ‘aron su camino, Timplindolo de obstctlos Bl capitan Vernou, poniendo flores en Yauco sobre la tumba de un soldado eepafol muerto en el combate de Gusnies,recor- ddaba hazafas quijotescas de la endante caballerfa, muy del gusto de los puertorriquefios, descendientes de aquellos eaballeros ddantes conguistadores de Indias, Los hechos fueron factores que ‘contribuyeron «inelinar le balanza del lado de Washington, Bs recia y dict! la obra que aspiro a realizar, he puesto en ella todo mi buen deseo, y, ademis, evento pude aprender en Jas escuclas militares de San Juan, de Toledo y de Segovia, du- trate mis ocho afies de estudio profesionales, Desde que me hice cargo de las baterias y fuerte de San CCrstabal, shri un diario de guerra, géneais de eate libro, donde hhora por hora y dia por dia anoté cuanto me parecié de interés para los futuros lectores. Ms tarde, ol general Ortega me pro- porcioné documentos de gran valor, por su autenticidad indscu- {ible y asuntos en ellos consignados. En Washington, en Ins Seeretarias de Guerra y Marina, mi rmodetta Inbor encontré amigos benévolot; el mismo setial se- ceretario de a Guerra acaba de dispensarme favores que agrader «> vivamente, ‘Un artista de valer, que fué antes soldado de valor distin ‘euide, Rafael Colorado, abendoné todo por venir a mi auxiio; durante varios dias segulmos paso a paso Tas huellas, aun im- horradas, de lo soldadoa eapaioles y ameriennos, ‘Subimos al CGuamant y al Aeomante: bajamos al Guasioy al Puente de Svs, 4, en todas eitow ition memorable, campos, riot, montaias y 1 lrron de Hermie oa PERNANDEZ MENDEZ pueblos fueron eapturados por el lente para Hevarlos a mi bro, Bin la ayuda de Colorado, esta Crénien de ta Guerra Hispanoame. ricena seria un libro aspero, opaeo; él lo torné lieido, trans rent, casi vivo. Graclas debo a este gentl artista que aun palpa sobre su epidermis de amateur y sperteman las cleatrees ae Iabraron, en 1898, los arroos militares “Mario Brau, el mago del pineel y del lass, también puso su ‘mano con inteligenciay eon earito en esta Crénia. Tales favores ni ee pagan nite olvidan, EI pueblo, en general, colsbors conselentemente a mi obra on gus informes, con documentos y con juiclosas advertencian Yo afirmo haber escrito slo lo que vi o excuché, y también lo ‘que me consta por documentos auténtions © deslaraclones pro Inndas de testgos presenciates, de honorablided intachable, Este Iibro no et una Histor; sas detalles y el hecho de haber tomado parte su autor en Jos sueesos que narra lo convierten en Cries, ‘Veintitrés aflon de repose han templado y east destruido mis juveniles arrestos. No santo reaquemores ni aspiro a levantar ‘ronchas; relato hechos cuyos aetores, muchos de elle, wan viven fen Puerto Rico o fuera de le isla, Si alguien, al recorrer eat ésinas, se siente mortiicado, no me euipe; mite ncerca de sus actuaciones en el afo 1898, y,entonces, jzirado su conducta {ymillabor de cronista, gard la conclusion de qe ln verdad en Toque es, y nada més. Ruin acelin os la de mentir,¥ mentir seria, eavirtuar hechos para satisfacer convenienelas o ammistades per- sonales Detvs de cada hecho, detras de ncn afirmsctén, queda en mi srchiva una earts, una deelaracién jursds, tm report offi; y ‘veces, un simple papelito firmado con lapiz, pero eon letra tal clara y legible, que su autor puede ser fécilmente identified, Muchas covas ntimas que tengo anotadus no salen a luz; eate es tan libro de guerra, de re militare, v no wn padrén de excndale fl una gxceila para solar de eurogos o desocupados. ‘Dios pagard el buen deseo de tados aquellos que, dexpuss de leer este Prilogo, axancen con Snimo sereno por los eapituls de tan libro donde se narran actop herleos, otros de caballerosas ya- llevan y no peeks flaquezas de hombres que en aquellos tiempos cloearon su honor por debajo de tus conveniencias CRONICAS DE PUERTO RICO 58 Origen de ta guerra. Voladura del “Maine”. — Declarackin de severra — El primer eafonazo. Al comenzar ol afo 1898 eran muy tirantes lan relaciones tntre los Gobiernos de Washington y Madrid; la Prensa, tanto 1a espafiola como la norteamerieana, no eotabn de srrojer lf sl fuego. BI Gobierno americano dispuso que el erucero prote sido Maine hiciera una vista smistose al puerto de le. Habana, EI Sr. Sagasta corresponds el agaaajo enviando al Visca comandante Bulate, sl puerto de Nueva York, donde fondeé 18 do febrero, y e125 sali para la Habana Ese mismo a, del mes de enero, fondeaba ol Maine en este puerto, y, amarrado a Ia boys nimero 4, saludé «la plaza con sus caiones, Le buterla de aalvan devolvis, acto semvido, el aa Ido, Era-el Maine un erucero proterido de segunda clase, con faja Dlindads, de 6.650 toneladas, y un andar do 17 millas y medins ‘montsba cuatro eafones do 10 pulgadas en dos torres aeoraza- das; sei, de sels pulgadas; ocho, de un, y muches pleas mis de iro répido. Fue eonstruido, en 1895, en el Arsenal de Nueva ‘York, y su tripuacion se compente de 25 oflelales y 354 clases yy marineria. Mandaba este buque el espitin C. D. Sigabee, Bl 15 de febrero, a las nueve y euarenta de ia noche, uns terrible explosion, seguida de otra menos inten, destry’6 eon pletamente toda Ta proa del erucero, que ae hundié de aquella parte, asta tocar fondo, en 11 brazas de agus. La explesiin, que fe oy6 en toda la Habena y ou puerto, causd Ia muerte de dos ofieises y 258 hombres da In triplacién’ Los sobrevivientes fueron rocogidos por los botes del Alfonso XIII y Ciudad de Paris, que estaban fondeados en paraje eereano. Los heridos faeron curados en los hospitales de a eludad, y autoridades pueblo rivaizaron en exterlorizar au profundo sentimiento por {an tremendo desactre EI 17 tuvo higar el solemne entierro de 15 cadaveres, que {uoron extraidos de le behis, resstando un seto imponente, Por 50 FERNANDEZ MENDEZ ln gran maltitud que acompa8 al cortajo fGnebre hasta el co- rmenterio de Colin. ‘La Reina Regente y ol general Blanco, gobernador de Cuba, telegrafiaron su pévame al presidente MacKinley. Bn las pri rmeras horas nadie pensé que aguel desnstre pudiora ver resultado de un criminal comple, y si slo un fatal acidente El Goblerno americano nombré, en 21 de febrero, une com sim, para investigar el caso, compueata de cuatro miembros, ¥ presidida por uno de ellos, el capitan William T. Sempson. El {general Blanco hizo lo propio ‘Los comisionados amerieanos permanecieron dex y ocho dias fen el puerto de la Habana, a bordo del Mangrove, y cinco més fen Key West, alojadosen el Towa. Estos perits, de comin scuer~ do, delararon, después de largas consideraclones: “Que el Maine {ni deatruido or laexplosién de una mina submarine, la cual ‘ausé las parcinles de dos o més pales det buque.” ‘Los comisionades espafioles produjeron un lominoso informe, ‘que fu leldo més tarde en el Congreso de Madrid, demostrando ‘que: “La explosion foé interior, y producida, ya por la caldereta ‘de la dinama, ya por combustion e2pontinen del algodén-pélvora, ‘on que ae eargan los torpodos.” Peritos imparciales, como el vieeslmirante norteamericano BBrven y ol capitan Buck, combatieron, por abaurda, a opinion de la supuesta mina. La Prensa europea y sudamericana elama- zon en igual venti, y l Gobierno de Madrid no tuvo respuesta fun eable en que proponia al de Washington someter el caso a tan arbitraje laternacional, Ms tarde, en Paris, cuando se fir. ‘aba el Tratado de Paz yafos despuds en la Habans, al azearse los restos del Maine, el Gobierno expafolinsistis en igual sentido viendo siempre detirados ss esfverzos. Pero es preciso consignar que ef Maine vol, como vuelan cada sfo en Buropa y América mis de 20 almacenes de dinamita Y de pélvora; como volaron, en Miraflores" numerosas cajas de Pélvora, por descudo de los hombres o por reacciones quimicas, ‘esconocides, entre los componentes de los modernos explosivos, CRONICAS DE PUERTO RICO ssi He leido luminosos articulos de marinos norteamericanos, | ‘dos refutan el que la explosion del Maine fuese exterior. Todon ‘onvienen en que el slgodén-pélvora, carga de los torpeds, s¢ ‘escompone en climas callentes, deepidiendo gases capaces de ‘combustion expontinea. Asi, y por eso, ol6, en un puerto del ‘Tapbn, el famoso scorazado Mikasa. Bl viceslmirante amerieano Mr. George W. Melville, ingenie- ro Jefe de In Armada, publicé en la revista North American Review, enero 29 de 1902, una larga earta, anaisando cientif- camente el desastre del Meine, y, a terminar,sienta la conclu. in, Ligieamente deducida, de que Ia explesiin fué Interior; fnote Ta clase de minas y torpedoes que uisron lot eepaioles du: rante Ia guerra, y sefala el caso de Santiago de Cuba, donde, después de la rendielén, al levantarse los torpedos, 2 vi6 auc eran inofensivor; unos, por la mala calidad de sua explasivos, yy otros, porque estaben mojados por el nua filtreds. No habia, fn toda Ia isla de Cuba torpedo ni mina bastante efiea: para volar, totalmente, un buque amarrado, como el Maine, la bay imero 4, y que, ademas, se hiciese la operscién de manera tan, ‘ovulta, que nadie pudiese verla, sobre todos los eubanos, enemigos de spat Et lustre marino terminé su earta con estas palabras: “Te- nemos hoy una opinién ms clevada del eardeter y la virildad del sokdado espatl. I valor del almirente Cervera,’ de 818 oficiales y tripulaciones, al salir a una inevitable derrots, en un supremo estwerzo para sostener ol honor de au banders, noe Prue ba, fuera de toda duda, que tales hombres mo son eapaces de haber cometido el erimen que tan gratuitamente se les ha acha- ado. Durante toda la guerra han demostrado los eapafoles no sancionarian, y mucho menos tomarian parte en acto indigno de militares que saben combatir con valor y morir con honor Y¥ aunque el Gobierno de Washington se mantavo en gran reserva sin sostener ni negar el informe de sus comisionados, no abe duda que el desgraciado accidente del Maine precipits la declaracién de guerra 7 Poon! Cervera, Almirante de la ecunira expt, ss2 FERNANDEZ MENDEZ Romamber the “Maine"! fué el grito de guerra amerieano, y ‘bajo In presidn del pueblo y de la Prensa, el Congreso aprobs quella célebre Resolucién conjunta, que ert, y asf fa tomada fen Madrid, una declaracion de guerra Hee aqui el texto de dicho documento: ‘"Conalderando que el aborrecible estado de cosas que ha exis- tido en Cubs durante los tres sltimos afos, en Inla tan proxi- ‘ma & nuestro teritorio, ha herido el sentido mora} del pueblo 4e los Estados Unidos: he sido un desdoro para la evilzaciin ctistiana, ha legsdo a au periodo ertico con la destruceiin de tun bareo de guerra norteamericana y con la muerte de 268 de fentre sus oflelaesy tripulantas, cuando el buque vistaba amis: ‘nanmente el puerto de la Habana. “Considerando que tal estado de cosas no puede ser tolerado ‘por més tiempo, segtin manifesté ya el Presidente de los Estados Unidos, en menaaje que envig el 11 de abril al Congreso, invi- tando « éste a que adopte resoluciones; EI Senado y Ia Cimara de Representantes, reunidas en Congreso, seuerdan: "Primero. Que él pueblo de Cuba es y debe ser libre e inde pendent: “Segundo, Que es deber de los Estados Unidos exlgle, y por 1a presente au Gobierno exige, que el Gobierno espafal renuncie, inmediatamente, a su autoridad y gobierno en Cuba, y retire sus fuerans, terrestres y navales, de las terras y mares de la isla: ""Tercero. Que se autoriaa al Presidente de los Estados, y s¢ Je encarga y ordena, que utilice todas las foerzas militares ¥ navales de los Estados Unidos, y llame al servicio activo las nici de los distintos Bstades de la Unién, en el ndmero que sea necesario, para llevar a efecto estos acueros: ‘euarto, Que los Estados Unidos por la presente, nferan que tenga ningin deseo ni intoneiin de elereer jurisdecion nl toberania, ni de intervenir en el gobierno de Cubs, sno ex para ‘x pacifencin, vafirman sa propéeita de dejar el dominio ¥ go- bietno de la Isla al pueblo de ésta, una vex realizada dicha pacl- eseidn” a votueion del Senado fué por 35. La de la Cémara de Re- presentantes, $11 por 6, quedando aprobads esta Resolucin, RONICAS DE PUERTO RICO 553 por el Congreso, el 19 de abel, y por el Preskdente, et 20 del Este mismo dfa tuvo lugar la apertura del Parlamento espaol por In reina regente Maria Cristina, la coal declar: “Que aque- Tiss Cortes habian sido convoeadas para defender los derechos de Espa.” BI mismo dla, ef ministo norteamericano en Madrid, Mr. Woodford, reibié el siguiente telegrama de Washington. Abril 20, 1808, “Woodford, ministro, Madrid. Se ha proporsionado a usted el texto de las Resoluciones ‘aprobadas por el Congreso de ls Estados Unldos el 19 del atu}, relacionadas con Ia pacifcacin dela iela de Cubs. Obedectend ‘este acto, el Presidente ordené que, inmediatamente, se communi. ‘quen dichas Resoluciones al Gobierno de Madrid, scompafndo tn aviao de eate Gobierno, al Gobierne de Espafs, para que re- ‘nuncie « su gobierno y autorided en Cuba, y retire sus fuerass rilitares y navales. Al dar este paso, el Gobierno de los Beto ‘Unidos protesta que no tiene inteneiones 0 disposiiones de ejer- cer soberania, jurisdiecién o dominio en la lala, excepto para Decificarla yaflrmar sa propin determinacidn; que euando logre si objeto, abandonaré Ta il, ayuda Iovbitantes, pars la clase de gobierno libre independiente que deseen estableeer Si al dar ls hora dol medio dia del stbado préximo, et din 25 de abril, no ve ha comunicado a este Gobierno una respucsta sa tisfactoria » esta demanda y resolucione, por las cuales se obten: a la pacificacién de Cuba, el Presidente provoderé, ene seto 4 sin mds aviso, haciendo uso do lor fecultades que Te otorea ‘el Congreso en dichas resouciones, a Mevavlas a efecto. — SHERMAN?” Una copia de este documento fu entregada, en sus propias manos, al sefor Polo de Bernabé, ministro de Espata. en ‘Washington, quien, en-elacte, soles aus pasaportes, entrerendo fl Legaciin de Austria los asuntos espatoles; pero autarizabs ‘4M. Cambén, embajador de Prancia, a intervene en dichon Sst FERNANDEZ MENDEZ He aquf el texto de i carta en que ol ministro Polo de Berna- 6 podia sus pesaportes: “Legncton de Bopata Washington, abril 18 de 1898, Sr. Secretaria: Las Reaoluciones adoptadas por el Congreso 4e los Hstados Unidos de América, y aprobadas hoy por el Pre- sidente, son de tal naturales, que mi presencia en Wishington te hace imposible, y me obligan a suplicar a usted me extienda ‘mis pasaportes. La proteccion de los intereses de Espaia se ha ‘encomendade al embajador de Francia y al minlstro de Austria Hungeia. Con esta ocasién, por cierto bastante penoss para mi, tengo el honor de relterar 4 Usted las manifestaciones de mi ma yor eonalderscia, LUIS POLO DE BERNABE {Al Hon, John SHERMAN, secretario de Relaciones Bxteriores 4e lon Estados Unidos.” Reciidos aus pasaporte, el Sr, Polo de Bernabé se trecadé por ferroearrl al Canada EE] Ministro Mr, Woodford, al recibir e ultimétum telegrafis ‘Momentos antes de pretentar al Gobierno espefal el ultimétum de los Entados Unidos, fal notificado que las relaciones diplomé- tieas, entre las dos naciones, quedaban rotas; he reeibido mi pasaportes, entregando la Legacién al embajador de Inglaterra Yy algo para Paris” Seguidamente tomb el tren para Pari, tren ‘ate fué spedreado por el pueblo en varias estaciones,y asatado tn Segovia por los eadetes de artlleria, que aubieron 8 Ine plats- formas al grito de Viva Espana! us Gacite de Madrid del 25 de abril cuenta al pueblo es ‘paol de la ruptura de hostilidades, y ese mismo dia, el Congreso binercano deel: "Que un estado de guerra exist, y ha exis- ‘do, etre al reino de Bspata y los Estados Unidos, desde et dia 21" El Presidente llamd a laa armas » 125,000 voluntarios, y, fon fechs 27 del mismo mes, lanzé una proclama estableciendo ‘1 blogueo de la costa Norte de Cuba y del pueblo de Cienfuegos fl Sur, Ese dia se hizo « la mar la Escundra americana del ‘Auintieo CRONICAS DE PUERTO. RICO sss B22 de abril, el cafonero Nasheillehebia cafoneado y eap- tarado al vapor espatel Bucnaventura, en Ia costa Norte de Cue, conduciendo st presa a Cayo Hueso, Este acto, de verdaders pirataria, anterior a la declaracién de guerra, fué cause de que 1 Congreso americano retrotrayese Ia fecha de la ruptura de dades al 21 de abril na aan Un n Pore Bice a! Do Cb hay heck ww ram ‘mpreson oles eve ‘Pert Rio an puro lea y pasion, Yolen paren tamteto conn outnomia corde joa made aan ‘aahington Daily Pot se 880. Gestiones de Henna y Todd. — Manifieto dela colonia portorsi- aquein de Nueva York, — Hostos y Betances Muy contados portorriquefs eran partidarios de la anexién dela Tala loa Estados Unidos: los Lugo Vid, Pajardo, Palmer, ‘Amy (D. Francisco), Besoas®y alguns docenas més de médicos © ingenieros que habian eursado aus estudiog en Universidades fmerieanas, eran, realmente, anexionstas y fervientes admira dores de la Repiblien Norteamerieana, A pesar de esto, potos puertorriquenias, estudianten en lon Estados Unidos, tomaben carta de naturaleze. Es necesariofijar,en eate libro de historia, laa razones poderosas que pesaron en el Gnimo del Presidents Mac-Kinley, para que él #0 Gobierno, de modo imprevist, re solvieran eapturar a Puerto Rico, I dia 10 de marzo de 1698, y cuando el pueblo norteameri- ‘ano estaba en el ms alto grade de exaltalén por el deugraciado ‘ceidente ccurride al Maine, el doctor Julio J. Henna, puertorr 556 FERNANDEZ MENDEZ ‘que ilustre ysublo mic, que resis y reside en Nueva York, fe encaming a Washington, vsitando ali al Senador por Massa” husetts, Mr. Lodge, a quien hablé de levar le guerra e Puerto leo al estallabs el conflict hispancemericano, como todo indu cia a ereerlo. Lage oyéle con interés, y le aconsej6 visitase a ‘Teodoro Roosevelt; en aquella fecha Subseeretario de. Marina Reoaevelt, tarécter impetioso y aventurero, reibisafeblemente al doctor; leyé In eartaen que el senador Lodge so lo presentabs, ¥ escuché las sugestionesy probebilidades do una favorable cam: Dafia en este Tala Roosevelt parcel complacido, y eonfidenciatmente doctard aque 1, encargado de toda Te preparacion de la probable guerra, ‘no habia pensado en Puerto Rico 'No hemos concedido «su ils un solo pensamiento, ni tengo tn solo dato sobre ela. Todas nuestra actividades etn recon. entradas en Cub, futuro teatro de las opertelonen:” Estas fue ron sus Polabras memorables, | Doctor Henne, que posein por fu ilustracion y otras belles cualiades el arte de persuadir, habis largamente; supo halagar al futuro corone, pintindolo como el hombre escogido por Diot para llevar a todo un pueblo las bendicionea de libertad, progreso y prasperidad. Layé des ‘ués un laminoso informe sobre las fuerzne espafolns en Puerto Fico, su armamento, paraves,caminos, puentes y ferrocarriles; sadiendo que, iso de una invasin, sia ellacooperaban él y sus, famigos, el pals en masa tela alzindose eontra el Gobierno de spall, ala vanguardia de las fuerzas americanas. leventindose, eché el brazo por 1 espalda al doctor, y le dijo: “Usted esol hombre que nos hacia falta; Puerto Reo ocuparé desde hoy lugar preterente en los planes de guerra que estamos preparando.” Llama los jefee d2 Darina, Clover y Driggs, ¥ a una taquigrafa, quien tomé notas de ln conferencia, y todos eyeron de nuevo al doctor Henna ‘Atos mis tarde, alguien pudo leer una eopia de ten notable documento BB doctor Henna y Roberto H, Todd, Presidente del Club Separatista Rius Rivera, de Nueva York, visiteron nuevamente ‘Roosevelt, al mismo Presidente Mae-Kinley y a otras personas ‘prominentes, insistiendo siempre en sus proyectos. Roberto Todd Informé durante una hora ante el Comite de Guerrs, presidido CRONICAS DE PUERTO RICO Py ‘por Roosevelt. EI mismo Presidente manifests, otro dia, a lo Sree, Henna y Todd, “que él estaba tan intereaado por Puerto Roo que, of la guerra se decloraba, ol Bjército de los Betados Unie operarta contra cata isla”. ‘Pero ni Henna ni Todd trlunfaron en sus dese, constante- mente expresado, de que ells y otros prominentes puertorrique- fis residentes en los Estados Unidos tomaran parte activa en la invasion, formando parte del Estado Mayor, y con autoridad pera firmar proclamas 9 otros documentos. Solamente ol gneral Stone, de Ingenieros, acedio en 25 de mayo a traer eonsigo un limitado nimero de puertorriquefos, aunque mas tarde, y slo en parte, cumplié esa oferta Mattel Liuveras, Mateo Fajardo y el doctor Rafael del Valle ‘hacia también tanteos de opinién en Washington. Fl 12 de julio se elebed en Nueve York una atamble de portorriquetios en la ‘G00 oe tomé el acuerdo de ofrecerse al Gobierno americano ene ode invasgn,y el lato Henna redacts un manitiesto bastante textenso, que fué entregado por Todd a Alger, Secretsrio de Ia Guerra, quien alab6 el documento, afirmando: “Que estaba muy bien escrito y dentro del expritu de la Canstitucién amerieana” y afadio: "que él no podia firmay ese manifesto, nl erela que fl Presidente Io firmaria; pero que los puertorriquehios podian ‘lreularla por au euents, sin necesidad de otras autorizaciones.” En estoa dias ee sgitaba en Washington un puertorriqaeti itusre, an vardn sablo y bueno, el famoso edveador de los pue blos Eugenlo Maria de Hostoe, Contrario a la anexién, pero separatists convencido, Hostosvoleé todas lag piedras par ant lar los trabajos de Henna y Todd, y quitar valor y eficacla al cilsbre manifesto, Hostos no tuvo éxito; hablan_triunfado Henna y Todd, quienes sefalaron a lo norteamerieanos el rum- bbe de Puerto Rigo; elon, y slo ells, actuando sobre el impetuoso caréeter de Roosevelt Inielaron una sucesion de eventos hstéri- ‘cos que etlminaron el 18 de octubre de 1808 al arse Ia bandera ‘americana en fos eantillos de San Juan. Por este tiempo el doctor Hetances, aeparatlata ferviente, cribia desde Paris al doctor Julio J. Henna “iQue hacen los portorriquefs? ;Camo no aprovechan la oportunidad del bloqieo para levantarse en masa? Urge que al Tegar's tierra las vanguardiss del Rjéreto americano sean re- ssa FERNANDEZ MENDEZ

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