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EL CONCEPTO DE ESTADO DE LA SOCIOLOGIA COMPRENSIVA * Hans KELsEN También el trabajo sociolégico mas importante, desde la aparicién de la Sociologia de Simmel, la acuciosa investigacién de Max Weber sobre Economia y sociedad+ confirma que todos los esfuerzos por asentar la esencia del Estado sobre bases extrajuridicas, especialmente en el terreno sociolégico acaban siempre, en mayor o menor medida, en una identificacion falsa o una confusion de conceptos. En Max We- ber esto se observa —involuntariamente~ en la singularidad de su método sociolégico, desde sus inicios, aun cuando la contradiccién de su “sociologia comprensiva” se acentéa con firmeza frente al cono- cimjento juridico. La sociologia debe —de acuerdo con el especifico punto de vista de Weber— comprender lo social, o sea el sentido del comportamiento y Ia accién de otros, y por su intermedio explicar causalmente su desarrollo y consecuencias.* En cuanto este analisis esté dirigido al sentido inmanente de la conducta humana, trata de dilucidar este comportamiento indagando acerca del sentido de éste. Debe, por lo tanto, remitirse necesaria~ mente a otros sistemas de conocimiento, diferentes. Puesto que los * Bste ensayo es parte de un trabajo de mayor amplitud y de préxima apari- cién: “El concepto de Estado, sociolégico y juridico”. (Publicado en Zeitschrift fiir Votkswirtschaft und Soziologie, 1921, pp. 104-119). Nota del traductor: Vertir al castellano un texto de Hans Kelsen representa un desafio maytisculo, toda vez que la riqueza y profundidad de sus andlisis tie- nen bases sélidas en la precisién de Ja lengua alemana, Hemos optado por poner entre paréntesis el término aleman, cuando asi lo hemos estimado conveniente. Varios de os vocablos utilizados por Kelsen constituyen ya arcaismos (verbi- gracia, perhorreszieren, oktroyieren). Lo miismo sucede con algunas palabras com- puestas (verbigracia, Anstaltsbetrieb} que ya no se usan y han perdido, por lo tanto, el significado original, Hasta donde ha sido posible, hemos tratado de “actualizar” el texto para darle cierta fluidez y evitar una meta transcripcién. Traduccion de Ivan Witker, para el Centro de “Traducciones de la WAP. 1 Borrador de la Economia social YI, tomo, Ira. parte: La economia, ordena- mientos sociales y los poderes, Tubingen, J. C. B, Mohr, 1921. 2 Economia y sociedad, PCE {en adelante “E y S"), p. 5. 267 268 HANS KELSEN hombres unen su accionar a algin objetivo, cuando se trata de un quehacer racional, debe corresponder su contenido al contenido de su pensamiento, el que —a su vez— se enmarca dentro de diferentes procesos de pensamiento. Un fisico que Ileva a cabo un experimento, el comerciante que vende un articulo, efectian una labor guiada por un saber 0 pensamiento determinado, situado en un contexto de re- flexién. En el primer caso se trata de una ley fisica, en e] segundo de normas juridicas a las que se debe aplicar la “‘interpretacién”. A causa de semejante punto de vista de “comprensién interpretativa” inmanente hay. por consiguiente, un criterio esencial que conduce a una delimitacién de la “sociologia comprensiva’. Es suficiente constatar que la “comprensién interpretativa” no es en absoluto un asunto especifico de la “sociologia” postulada por Weber y que tiene un caracter no auténomo, toda vez que esta “so- ciologia” debe recoger su principio interpretative 0, mas bien, sus principios interpretativos, de otros 4mbitos disciplinarios, EI “sentido” de una accién, en cuyo campo de investigacion en que se pone la interpretacién de la sociologia ‘‘comprensiva”, no es el objetivo realmente pensado por quien realiza la accién ni aun una idea conceptual en el sentido subjetivo.* En este iltimo caso, la sociologia construye un tipo ideal que se corresponda con una accién estrictamente racional, es decir, como esquema de interpretacion. Todo lo que sea considerado distinto del fin perseguide —comportamiento humano irracional— sera entendido como “desviacién” de lo considerado actualmente como racional. Sien- do precisos: “comprender” Ia conducta humana sélo cuando esta do- minada por el intelecto, es decir, cuando posee un objetivo y esta enmarcada en un determinado sistema de objetivos. La “desviacién™ de un determinado sistema puede significar correspondencia con otro sistema de objetivos. Entonces, se puede “comprender” slo un de- terminado sistema de objetivos, vale decir, un contexto légico. En relacién con Weber, esto se puede entender sélo porque el “Estado”, en el sentido de la "sociologia comprensiva”, aparece como “tipo ideal, una construccién conceptual de un quehacer severamente ra- cional, o sea un sistema de objetivos ideado previamente que se puede utilizar como esquema de interpretacién del accionar humano. “Comprender” el comportamiento humano, como estado, es posible ‘inicamente conforme con este sistema ideado, “construido”. Cuando se analiza el auténtico comportamiento humano en los marcos de este 5 Ibidem, p. 5. EL CONCEPTO DE ESTADO 269 sistema, como esquema interpretativo, se deduce que los hombres en general actian con propésitos racionales. De no ser éste el caso, surge la “desviacién”. La “sociologia comprensiva” esta, tal como lo resalta Weber, orientada al real comportamiento de los hombres. Pero, “comprender” este comportamiento —por lo menos alli, donde se trabaja con tipos ideales— responde al sistema ideal de objetivos tinicamente desde el punto de vista del contenido. Finalmente, todo depende de la percepcién que se tenga de este sistema de objetivos, y en especial del problema del Estado, tratandose unica y especifica~ mente de comprobar cuél de los sistemas de objetivos puede funcio- nar como esquema de interpretacién, es decir, como tipo ideal. Esto parece ser el punto cardinal, a pesar de las enfaticas indicaciones de Weber acerca de Ja autenticidad del sentido de la sociologia. Los “complejos” sociales (sociale “gebilde”) en general y el Es- tado en particular, dice Weber, serian para la interpretacién com- prensiva dei quehacer, a través de la sociologia, tan sdlo “desarrollo y entrelazamientos de acciones especificas de personas individuales, ya que tan sélo éstas pueden ser sujetos portadores de una accién orien- tada por su sentido” Lo “especifico” de esta accion radica apa- rentemente en la significacién con la que pudiera estar relacionada realmente esa accién, o bien con la que pudiera llegar a estar rela- cionada mediante la realizacién de un tipo ideal de accién racional. iCual es, empero, el sentido de las acciones que le imprimen a una relacion el caracter de Estado? Weber nombra un comportamiento de si (Sicherhalten) de varios en una relacién social ajustada y orien- tada, una sobre otra, a su sentido (Sinn gehalt) ® y agrega, en rela~ cién especifica con e] Estado: La relacién social consiste sola y exclusivamente —aunque se trate de “formaciones sociales" como “Estado”, “Iglesia”, “‘corporacién”, “matrimonio”, etcétera— en Ja probabilidad de que una forma de- terminada de conducta social, de caracter reciproco per su sentido haya existido, exista o pueda exitir. Cosa que debe tenerse siempre en cuenta para evitar la sustancializacién de estos conceptos.* La esencia del Estado ~a diferencia de la Iglesia o del matrimo- nio— radica aparentemente en los elementos constitutivos de conteni- dos especificos de ciertas acciones, y no en acciones mecanico-corpo- 4 Ibidem, p. 12. 5 Tbidem, p, 21. * Thidem, p. 22, 270 HANS KELSEN rales, vinculados solo a contracciones musculares y desconectadas de sti “objetivo”. El Estado es el sentido especifico de ciertas acciones, no cualquier accién o un conjunto de acciones. Ciertamente, es de importancia y valor revisar las posibilidades y probabilidades que realmente tienen lugar cuando se da una accién con sentido. Sdlo a través del sentido se diferencian Jas acciones validas pare el anilisis de la naturaleza de los “‘entes sociales’ y, obviamente, sdlo a este contenido de sentido debe dirigirse el analisis que pretenda abarcar Ja naturaleza del Estado, Iglesia, matrimonio, etcétera. Es, por tanto, por lo menos una terminologia erratica o, cuando menos, una traspo- sici6n inadmisible de conceptos, cuando Weber ajiade: “Un ‘Estado’ deja pues de existir sociolégicamente en cuanto desaparece la proba- bilidad de que ocurran determinadas acciones sociales con sentido”. Aqui Weber ha trastocado la nocién de Estado, de un contenido de sentido especifico, de una determinada forma de accién orientada con sentido, a una factualidad de accién. El Estado ya no es el sen- tido de una accién, sino la accién por si misma y sin sentido, o bien Ja posibilidad de una accién. Weber ha traido al léxico cotidiano una nocién funesta. Habla de una “existencia” del Estado exactamente como de la existencia de un objeto o suceso perceptible sensorial- mente, tinicamente como sentido, como sistema de objetivos o esque- ma de interpretacién, es como se puede analizar el Estado, segin el concepto “accion” de Ia sociologia comprensiva, “existe” el Estado, tanto mas tanto menos que el axioma pitagérico: su “existencia” es su validez, y solo por eso, es radicalmente distinta, de la factualidad de las acciones, que es e] sentido de éstas. La existencia esencial, lla- mada Estado, se comporta como cuando se piensa, pronuncia o di- buja ef axioma pitagérico, Y menos aun que las “posibilidades” de que los hombres o algunos hombres elaboren esta ley matematica y logren expresarla de alguna forma, puede el Estado ser identificado con la posibilidad de que una accion se desprenda de su sentido. Se reconace que el orden juridico es un sistema de objetivos 0. un tipo ideal de accién racional, que bien puede ser aplicado como es- quema interpretativo para abarcar cualquier sentido del acontecer so- cial, lo que a su vez, delinea al ente social “Estado”. Este puede indicar un ordenamiento juridico como sentido de todo tipo de accio- nes, cuyo desarrollo probable Weber denomina existencia del Estado, sefialando con ella lo que comtnmente designamos como factibilidad (Facktizitat) del derecho, en contraposicién a su normatividad.? ‘Weber precisa que el desarrollo de una accién, ast como Ia consideracién EL CONCEPTO DE ESTADO 271 Se encuentra en Weber, asimismo, Ja misma tendencia que suele encontrarse en otros. E] Estado como realizacién del derecho, como su implementacién. El ordenamiento juridico es el amado contenido de sentido de toda accién, cuyas posibilidades de desarrollo implican la existencia sociolégica del Estado en Weber. Es, por tanto, el Es- tado, en esencia, idéntico al ordenamiento juridico, 0, por lo menos, un orden de rasgos definidos, todo lo cual se deduce facilmente de la exposicién de Weber. Como derecho, explica Weber, entendemos un orden de rasgos de- finidos.* Orden, sin embargo, es un “contenido de sentido” determi- nado de relaciones sociales, Y este contenido de sentido puede —cuan- do se tienen todos los elementos en consideracién~ tal como Jo formula Weber, raramente ser caracterizado de manera distinta, pero si con mayor dlaridad, utilizando el concepto de Weber, o bien, regla del deber o norma, La “validez’” de un ordenamiento, precisa Weber, “significa algo mas que una regularidad (Regelmissigkeit} en el desarrollo de la accién social simplemente determinada por la costum- bre © por una situacion de intereses”. Naturalmente, y debido a gue la sociologia “comprensiva” trata el “sentido” de la accién, todo sentido gue el actuante vincula a su accionar, o que de alguna manera debe vincular, debiera parecer racional. “La validez de un ordena- miento” radica tnicamente, en tanto que el proceso de la accién esta garantizado (proceso de una accién orientada al ordenamiento) me- diante la “validez” de este dltimo, en ef “mandato cuya transgresién no sélo acarrearia perjuicios sino que (normalmente) se rechaza por el ‘sentimiento del deber’”, cuya violacién no sédlo trae consigo des- ventajas, sino que —normalmente~ también es rechazado con repug- nancia fperhorrezieren) por el racional y valérico ‘sentimiento del deber'”, La idea represiva basica expresada en la constante referen- cia a la factualidad del proceso de accionar es la siguiente: la esencia de lo que nosotros denominamos orden imperante es: norma del deber © deber. Quien actiia asi, porque debe actuar asi; o sea hay que orientarse a un orden como a un mandato. Los demas planteamientos de Weber son similares. “Al ‘contenido de sentido’ de una relacién sociolégica del Estado, podria tener diversas etapas, exista o no un precepto legal (E y S. pp. 22 y 23). Se puede hablar de que un Estado existiese mas o menos por el hecho de gue se pueda juzgar que se observan mayor o menor cantidad de ac- clones con arreglo a un sentido determinable en su término medio? Para el Estado, centro de la teoria del Estado, es valida la alternativa, que Weber niega para la sociologia y establece para las normas juridicas. SE y S, pp. 23 y 25. 272 HANS KELSEN social le Hamamos: 2) ‘orden’ cuando la accién se orienta (por tér- mino medio o aproximadamente) por ‘maximas’ que pueden ser sefia- ladas". (Estas maximas son, por cierto, analogas a “normas” y re- Presentan, por ello, el “ordenamiento"; al comienzo del parrafo se habla de que el guehacer pudiese estar orientado a las suposiciones que se tienen de lo que esta vigente en el ordenamiento). Podemos, &) hablar de la validez de un determinado orden, cuando la orienta- cién rea] sigue a todo tipo de maximas, por lo menos... debido a que también son validas, de alguna manera, para el quehacer, obligatoria © representativamente. En realidad, la orientacion del quehacer a un orden, conforme a su naturaleza, tiene lugar por diversos motivos.” Pero la circunstancia de que por diversos motivos el ordenamiento sea Propuesto como valido, por lo menos por una parte de los actuaates, aumentan las posibilidades naturales de que el quehacer se oriente hacia él en alguna medida. En cuanto mas vinculado esté el asunto al sentido de la accién —de acuerdo al concepto weberiano del orde- namiento— pasara a segundo plano el transcurso mismo de la acci6n. En el fondo, de lo que se trata es de Jo siguiente: para que el sentido de una conducta pueda ser considerada como “ordenamiento”, tiene el actuante que Mevar a cabo una accién conforme a una norma gue plantea esa accién como deber. Si ordenamiento, como sentido, es idéntico a norma, es, por tanto, la validez del ordenamiento idéntica a deber. En Ja nocién, que vincula una accion a un ordenamiento, es la “validez” de este ultimo su deber. Aqui la diferencian ~mas 0 menos— grandes pasibilidades, de que se orienten efectivamente a un ordenamiento. Estas posibilidades encuentran su expresién en una re~ gla del ser con mayores o menores excepciones; yo la denomino —en contraposicién a validez— reaccién y eficacia de una norma, Se trata nuevamente de una traslacién inadmisible de conceptos en Weber. cuando él, precisamente las posibilidades de eficacia, las sefiala como “yalidez” del orden, aun cuando caracteriza este orden como sentido y éste, a su vez, como norma del deber. De todas maneras, y asi, se observa el caracter normativo del concepto de ordenamiento en la ® Por ello no es idéntica, como se presume en el concepto de "‘sociologia”, la comprension interpretativa de un quehacer con fundamentos causales, En cuanto yo utilizo el ordenamiento juridico como esquema de interpretacién, puedo explicar interpretativamente el correspondiente ordenamiento juridico. como ordenamiento juridico orientado. El principio interpretative es unitario; [os motivos, empero, como también las causas que determinan una conducta humana de acuerdo al ordenamiento pueden ser muy distintas y permanecen en estos métodos interpre- tativos totalmente desconocidos, siendo, por tanto, indiferentes, EL CONCEPTO DE £STADO 273 sociologia “comprensiva’. De este ordenamiento, se dice que esta com- puesto de “reglas”, 0 mas claramente, que contiene normas clasifica- das, significando en definitiva tan sélo un acto normativo, un esta- tuto de normas (Soll-Satzung von Normen) por lo que siempre se estara hablando de “cumplimiento” y “violacién” dei ordenamiento, Jo cual no tendria sentido, si “ordenamiento” fuera tan sdlo fa ex- presién de la regularidad, Ante todo, sin embargo, el sentido especilico del ordenamiento sera caracterizado en tanto “‘exigiese validez’’, “qui- siera ser valido’, lo que en definitiva es la descripcién psicolégica del deber. Este concepto normativo del ordenamiento es uno de los prin- cipales componentes sestenedores del sistema de la sociologia com- prensiva; por ello y puesto que esta dirigido y acorde con los métodes especificos del sentido de la accién, o sea que debe transmitir el sen- tido que vincula al accionante con su accién, es un “deber", una obli- gacién, un “mandato” admitido como tal, ya que ademas, es una conducta orientada al ordenamiento, Sin esta permanente relacién con el sentido seria imposible fa sociologia, puesto que todo lo social esta conforme con el sentido mismo del accionar humano, frente a lo cual Jas citcunstancias especificas o regularidades de la accién en si tienen tinicamente un ecatacter secundario. En Ja duplicidad peculiar del ob- jeto de estudio y de la direccién visual se puede aceptar que radique la esencia de la sociologia ~tan problematica como ciencia o, quizds, por Io menos que alli radique la esencia de la sociologia comprensiva. Por ello no es una pedanteria terminolégica, cuando en los siguien- tes pasajes de Weber no concuerda totalmente que: Entre {a validez y Ja no validez de un orden no hay pata Ja socio- Jogia, como existe en razén de sus fines, para Ja jurisprudencia una alternativa absoluta. Existen mas bien transiciones fluidas entre ambos casos, y pueden valer, como se ha indicado, unc al lado de otro, érdenes contradictorios, en la amplitud en que alcance la pro- babilidad efectiva de una orientacion real de la conducta por ellos,’” Correcto es que la exclusividad de la validez (normativa) de un ordenamiento se enfrenta con la compatibilidad que existe entre dos or- denamientos distintos (con mayor precisién: de ja presentacién, de Ja proporcién y del accionar de acuerdo con dos ordenamientos dis- tintos). Incorrecto es, por el contrario, que para la sociologia compren- siva Ja validez de un deber en un ordenamiento y, por consiguiente, el Ey Sp. 26 274 HANS KELSEN concepto normativo del orden, sea necesario definitivamente tomarla €n consideracién y, por tanto, exprese su diferenciacién respecto de Ja jurisprudencia. Esta diferencia, que Weber, de manera caracte- tistica, no puede resaltar con Ja frecuencia suficiente, es altamente dudosa. La sociologia “comprensiva” debe ser también jurisprudencia, o bien ver con ojos de juristas para poder —en resumidas cuentas~ ver, ya que el sentido de Ia accién social, que ella transmite, es fre- cuentemente el derecho. Asi debe ser, sobre todo si se propone coni- prender el fenémeno del Estado. Un “orden” es “Estado”, de acuerdo con Weber, “cuando esta ga- rantizado externamente por la probabilidad de la coaccién (fisica 0 psiquica) ejercida por un cuadro de individuos instituidos con la mi- sién de obligar a la observancia de ese orden o de castigar su trans- gresion”,”? La diferencia de esta definicion sociolégica del derecho, de Ja juridica usual, es dificil de matizar. La acentuacién de la uns~ tancia “posibilidad” se pierde en cuanto el concepto de derecho ad- quiere bases reales y concretas, o sea de contenido de norma. Llama Ja atencién que esta definicién sociolégica del derecho no sea sufi- ciente en absoluto para calificar al derecho como ordenamiento de coaccién, sino que ‘‘para nosotros, la decisién en el concepto de ‘dere- cho’, es existencia de un cuadro coactivo".!* Una relacién social... se llama “abierta” al exterior cuando y en la medida en que la participacién en la accién social reciproca que, segiin su sentido, la constituye, no se encuentra negada por los ordenamientos que rigen Ia relacion... Por el contrario, llamase “cerrada” al exterior cuando y en la medida en que aquella par- ticipacién resujte excluida o sometida a condiciones. El derecho debe, aunque no se haya dicho directamente, ser exa- minado como una relacién social “cerrada”. En caso de que ef con- junto tenga un determinado caracter, o sea cuando Ia participacién en las relaciones sociales esté regulada, se denomina ~segtin Weber— “compafieros” a todos los involucrados.** Por asociacién (verband) debe entenderse una relacién social con una regulacién limitadora hacia afuera cuando el mantenimiento de su orden esta garantizado por la conducta de determinados hom- nt aaOS. Ey S, p. 27. By S. p 28, 3 Thidem. p. 35. EL CONCEPTO DE ESTADO 275 bres destinada en especial a ese propésito: un dirigente y, even- tualmente con cuadro administrativo que, llegado el caso, tienen también de modo normal el poder representativo."* Sin embargo, en la definicién conceptual de asociacién falta una mencién concreta al momento de coaccién y, en este contexto, al “cua- dro de coaccién”, Pero las siguientes descripciones de Weber no dejan lugar a dudas, respecto a que el “cuadro administrativo” es un “cuadro de coaccién”. La existencia de un jefe, cabeza de familia, pre- sidencia de una asociacién, gerente, principe, jefe de Estado, perso- nero eclesiastico, cuya accién esta orientada a la realizacién del orden asociativo debe ser suficiente, puesto que esta accién especifica, de hecho afiade una nueva caracteristica —sociolégicamente— a los in- tegrantes de la “relacién social” cerrada, a través de un accionar orientado no sélo al ordenamiento, sino a la coaccién. Realizacion” e “imposicién coactiva” del orden, a través de un cuerpo determinado (desde el punto de vista sociolégico: erigido para ello), son idénticos. Asimismo, tiene importancia, el concepto de “accién de Ja asociacién”, que significa la accién del cuadro administrativo mismo y, ademas, toda otra que, siendo para la asociacion, esté dirigida y plenamente planeada por el cuadro administrativo’> Una accién vinculada a una asociacién es una “‘accién orientada al ordenamiento de esa aso- ciacion”, por parte de hombres-participes (exceptuando al cuerpo di- rectivo). Un ordenamiento que reglamente la accién de Ja asociacién debe ser llamado ordenamiento administrative. Otro tipo de ordena- miento, que reglamente otro tipo de accién social, debe ser llamado ordenamiento regulador. En cuanto una asociacién esté orientada ex~ clusivamente a un ordenamiento del primer tipo debe ser llamado asociacién de caracter administrativo, y en tanto que orientada al segundo, asociacién de caracter regulador.* En primer lugar es nece- sario constatar que el derecho debe ser ordenamiento administrativo, toda vez que regula el accionar del cuadro de coaccién, que es un cuerpo de direccién y, por ende, supervisa el accionar de Ja asociacién. El ordenamiento juridico es un ordenamiento administrativo, mientras que una asociacién juridica, es una asociacién administrativa. Por ello es necesario subrayar con absoluta precisién, que la diferenciacién establecida por Weber, entre ordenamiento administrativo y regula~ 14 Ibidem, p. 39. \ Tbidem, p. 40. 26 Thidem, p. 41, 276 HANS KELSEN dor, es inviable. Otra accién social reglamentada por un ordenamiento es el del cuadro de coaccién. Sélo asi, el ordenamiento juridico ze- glamenta el accionar de un juez o funcionarios del ejecutivo, regla- menta el comportamiento de un deudor que debe devolver un présta- mo, Justamente, la conducta del deudor es la que parece tener entre cejas Weber cuando habla, aparte del cuerpo administrativo y de la accién vinculada a la ascciacién de un accionar reglamentado por Ja asociacion: “E] orden vigente puede también contener normas por las cuales debe orientarse entre otras cosas la conducta de los miembros de la asociacién (por ejemplo, en el Estado toda accion de economia privada —es decir, no dirigida por la imposicién coactiva del orden vigente— debe regularse por el derecho civil)”.*7 Unica- mente las normas del derecho civil no pueden separar de las normas ejecutivas sus normas de coaccién; ellas representan, s6lo en sustan- cial conexién con ellas, normas juridicas, y sin ellas son tan sélo frag- mentos jutidicos, precisamente, porque el derecho, incluyendo el de- recho civil, es en su esencia un ordenamiento de coercién. Y puesto que toda norma juridica, como tltima unidad de un ordenamiento juéidico, contiene las caracteristicas de todo derecho, esto significa que debe exhibie todas las caracteristicas del derecho (tal como una pepita de oro exhibe las caracteristicas de ese metal), cada norma juridica debe contener el momento coercitivo y, por lo tanto, debe aquello reflejarse en la redaccién juridica. Es, por tanto, indefendible una division entre el derecho material y formal (derecho procesal de ejecucién), tan facil de encontrar. Esta falsa concepcién juridica es, ante todo, ei nticleo de la teoria weberiana, cubierta por una termino- logia sociolégica, que diferencia entre accién ligada a una asociacién © regulada por una asociacién, entre ordenamiento administrativo y ordenamiento regulador, entre asociacién administrativa y asociacién reguladora. En el intento por ilustrar esta diferenciacién, mediante un ejemplo, se produce una turbacién de conceptos. Una “‘asociacién tinicamente reguladora seria ‘Estado de derecho’ puro de un absoluto laissez-faire, solo teoricamente imaginable’, Estado de derecho es, de acuerdo al significado semantico tradicional, un ordenamiento que se limita a reglamentar la conducta de los tribunales, o sea de un cuerpo direc- tivo 0 coactivo: deberia, por tanto, una asociacién administrativa no tener Ja calidad reguladora, de acuerdo a la definicién weberiana (que por ello sea también un ordenamiento regulador —que reglamente la 1 Ibidem, p, 40. EL CONCEPTO DE ESTADO 277 conducta de los socios— jes aqui secundario! A la exposicién de We- ber parece habérsele deslizado ~involuntariamente— una nocién de administracion distinta a la de él (en todo caso creada arbitrariamente) ; se trata del concepto de administracién, usual en la jurisprudencia: administracién (Verwaltund} en contraposicion a jurisdiccién, estado de derecho en contraposicién a jurisdiccién civil, a la jurisdiccién con- tencioso-administrativa (Verwalturngsgerichtsbarkeit), a fa jurisdic- cién criminal (Strafgerichtsbarkeit) y no en contraposicién a otras funciones desempefiadas por el Estado. Es evidente que también en este tipo de funciones se trata en de- finitiva de coercién directiva, que se lleva a cabo no sélo a través de juzgados, sino de coercién practicada por autoridades organiza- das de otra forma. La tradicional y sistematica confusion de la juris- prudencia, que se origina en el momento formal en que la coercién se entrecruza con la consecuencia material que se desprende de la ame- naza de coercién. y en especial al expresar una indefendible separacién entre el llamado derecho piiblico y el derecho privado, lo encon- tramos en Weber traspuesto al terreno de la sociologia. “En gene- ral... el limite de los Grdenes administrativos y reguladores coincide con Ia separacién dentro de una asociacién politica, entre derecho “publico’ y ‘privado’”.* La sociologia comprensiva conforma su uni- verso conceptual en estrecha relaci6n con la jurisprudencia. Se denomina esta empresa (Betrieb) un determinado tipo de accién, de propésito continuo, mientras que asociacién de empresa (Betrieb- verband) a la socializacién de un cuerpo directivo de propésito con- tinuo.t? Por lo tanto, el derecho debe tener validez para una asociaci6n de empresa, puesto que a la luz de un analisis concreto parece obvia la continuidad de la accién de asociacién, incluida la coaccién. Por instituto (Amstalt) debe entenderse una asociacién cuyas or- denaciones estatuidas han sido “otorgadas” y rigen de hecho (re- lativamente) con respecto de toda accién que con determinadas caracteristicas dadas tenga lugar en el ambito de su poder.” Se denomina “otorgada” a toda ordenacién que “no derive de un pacto personal y libre de todos los miembros”.*! El ordenamiento es, per tanto, el marco —en cuanto adquiere forma de estatuto— de una 48 Ibidem, p. 42. 19 Idem. > Idem. ot Ibidem, p. 41.

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