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Bunsany Mans ‘ocasién se tratase de los mismas ciudadanos, La asumblea era iden tificada con el pueblo no porque acudieran todos los ciudadanos, sino porque todos padian acudlir y por variar constantemente st ‘composicidn. En cuanto alos tribunales, hay caras pruebas arque- ‘ol6gicas de que los dikaseavaraban sobremanera™. Por consiguiente, tanto desde el punto de vista teérieo como prictico, la democraciaateniense estaba organizada en gran medi- dda alrededor del principio de la rotacin. Este principio fanda- rental hacta de la seleecién por sorceo una solucién racional: como en cualquier caso un aiimero substancal de ciudadanos ‘ocupaban cargos, un dia u ott, se podia dejar en manos del azar el conden de su acceso & los mismos. Como, ademés, el ndimero de ciudadanos era bastante reducido en relacién con el nimero de cargos a ocupar, el requisto dels rotacién hacia el sorteo preferi- ble a la eleceién, La elecién, en realidad, hubiese reducido ain iis el niimezo de magistrados potenciales al limitarlo al de las personas que fuesen populares entre sus conciudadanos. Podzia decirse que los atenienses no podian permitese reservar los cargos de magistrados y consejeros a aquellos eiudadanos cuyos iguales considerasensuficientemente capaces 0 dotados para elegilos: ese tipo de restticci6n hubieseimpedido la roracin. Pero hemos de avancar algo mds: entce el principio electivo ye de rotacién habia un conflicto potencial. El principio electivo comporta que los ciudadanos son libres de elegir a quidnes asignar los cargos La libertad de eleccién supone, no obstante, libertad de reelecci6n. Puede que los ciudadanos quicran que la misma perso- ‘a ocupe un cargo particular afo tras afo. ia de asumirse incluso que si un cindadano cuvo éxito en atraer voros en una ocasién, vueliaa tener en ot. El nico modo de conseguir una garanta absoluta de rotacién en un sistema electivo es limitando la libertad de eleccién del electorado mediante la decisién de que determina- dos ciudadanos no pueden ser elegdos por habetlo sido ya con anterioridad. Puede hacerse, desde luego, pero supone establecer % Hansen, The Aten Dery 9313, 46 Los rancitios ps. conteano aEPRESENTATIVO tun compromiso entre dos principios que implican consecuencias potencialmente opuestas: la combinacién de la rotacién obligato- fia con la selecida por sorteo no presenta, por el contrario, esos riesgos: el roquisito rotatorio no genera el riesgo de minimizar la lbgica del sorteo. Los atenienses cran conscientes del conflicto potencial encre el principio elective y el de rotacién, por lo que no éstabe prohibido ocupar consecutivamente la misma magistratura cdectiva. El sistema de prohibiciones se aplicaba solamente a las Imagistraturas a cubrir por sorteo. En la democracia ateniense, centonces, a designacién por sorteo reflejaba, ante todo, la prior dad concedida ala roracién. ‘Segundo, la combinacién de rotacin y sorceo procedia de una profunda desconfianza hacia el profesionalismo. La mayorta de los Iagistrados, y también de los consejeros no eran profesionales, sino s6lo ciudadanos cortientes. Los atenienses reconocian én algunos casos a necesidad de poscer dotes profesionalesespecial- zadas, peto la presuncién general era la concraria: reconocfan que cualquier funcidn politica ert realizable por no especialsts salvo {que hubiera poderosas razones para pensar lo contrat. La ausen- cia de expertos 0, en cualquier caso, su resttingido papel esaba ddestinada 2 silvaguardar el poder politico de los ciudadanos La presancién era que si intervenfan profesionales en ol gobierno, inevitablemente, lo legarian a dominar. Es probable aque los atenienses sintesen que, en Ia toma de decisiones colecti- vas, el contar con preparacién y conocimientos que ottos no tuviesen constcufa por sf mismo una fuente de poder, dando una ventaja comparativa a quienes poseyesen la preparacién sobre quienes caceciesen de ela, independientemente de obmo estuvie- sen definidos sus poderes respectivos por ley. Un consejo de pro- fesionales 0 magistrados profesionales cendeia ascendente sobre ia asamblea; la presidencia de expertos en los tribunales habia reducido la impoztancia de los otros dikastai. Los historiadores * sun, Gand on og 9 38, Ai cle om aestitr, ole hess Soileo : "y (3 coi ae Hap, of Grokairwims

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