A los 21 años, Braulio Muñoz (Chimbote, 1946), emigró del Perú para
continuar su preparación académica en las más prestigiosas
universidades estadounidenses (donde además ahora dicta), donde
estudió filosofía, antropología, psicoanálisis y crítica literaria,
obteniendo un Ph.D. en Sociología por la universidad de
Pennsylvania. En el 2004 publicó “Alejandro y los pescadores de
Tancay” en Italia y en el 2005 en Chimbote (Río Santa Editores), libro
que le diera el premio Latino Book Awards de la Feria del Libro de
Nueva York en el 2009.
a storyteller.
El Misha.
Plaza mayor.
El Misha:
Edilberto Isaac Peres-Benayón siempre quiso ser escritor, pero postergó sus
aspiraciones literarias a favor de lo que se esperaba de él. Se convirtió en
capitán de la Marina y trabajó para el Servicio de Inteligencia contra el
terrorismo. En 2005, retirado y atormentado por el «zumbido sedoso» de sus
demonios, emprende la tarea de reconstruir la historia de su familia, en
especial la de su hermano mayor, Benjamín Elías, pieza clave en los
movimientos subversivos del Perú de mediados de los ochenta. La trama está
tejida por diferentes voces (algunas cercanas a la familia Peres-Benayón, otras
ajenas y las del propio Benjamín), a partir de testimonios que Edilberto recogió
en 1985, además de documentos y grabaciones que recopiló para un informe
de inteligencia durante esa época. Esta saga familiar, ligada a las
circunstancias políticas y sociales del Perú, se remonta a los primeros años del
siglo XX, enfatiza en las luchas sindicales de los años sesenta en el puerto de
Chimbote y tiene a esta ciudad y Lima como sus principales escenarios.
Hijo del Coronel Joâo Amado de Faria y de Eulália Leal Amado. Cuando
tan sólo tenía un año de edad, se trasladaron a Ilhéus, donde pasa la
infancia.
Relatos
Para niños
El escritor brasileño construye una historia que tiene como eje central al mulato Archanjo,
autodidacta y humilde bedel de la facultad de Medicina de la ciudad brasileña de Salvador de
Bahía, pero que actúa en un medio social y cultural variopinto, complejo, contradictorio y lleno
de vida. Objeto de investigación por una eminencia extranjera, el doctor James D. Levenson, es
el poeta Fausto Pena quien acaba escribiendo sobre la vida de Archanjo, convirtiéndose así en
el narrador de la historia.
En la novela aparecen personajes inspirados en otros reales que Amado se atreve a utilizarlos
para ofrecernos un friso humano donde se mezcla lo real y la apariencia de un mundo entre
mágico y extraordinario. Entramos así en la catalogación literaria de la obra: ¿pertenece al
realismo mágico?; ¿lo es del conocido como real maravilloso?; ¿acaso a los dos o, si se apura,
se trataría de lo mismo? No pretendo hacer una disertación acerca de los dos estilos, pero
quizás puede ser más adecuado incluir la novela en el segundo de los estilos, en la medida
que, siguiendo a Alejo Carpentier, "lo real maravilloso nuestro, es el que encontramos al estado
bruto, latente, omnipresente en todo lo latinoamericano. Aquí lo insólito es cotidiano, siempre
fue cotidiano".
Archanjo nació en el siglo XIX y vivió casi la mitad del siguiente, y a lo largo de su vida no dejó
de pertenecer a los estratos sociales inferiores. Apodado Ojuobá, es un personaje lleno de
vitalidad, producto del mestizaje racial creado en Brasil desde el siglo XVII con la colonización
portuguesa y abigarrado desde finales del siglo XIX con la llegada de oleadas de inmigrantes
europeos. Pese a ello Amado lo dota de una inteligencia que fue cultivando en un contexto de
resistencia social y racial, donde el elemento afroamericano cobra cuerpo de una cultura
multiforme, pero llena de una solidaridad interna robusta.
En la otra parte no faltan tampoco quienes desde su posición blanca transgreden las reglas
sociales impuestas, participando en los incipientes movimientos políticos, forzando lazos
matrimoniales mixtos, defendiendo la igualdad.