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Una metfora sobre Creatividad: el cuento del campesino y el juez

Erase una vez un hombre muy virtuoso, un campesino muy trabajador y querido en el
pueblo, que fue acusado de matar a una mujer.

En realidad, el verdadero autor del homicidio era una persona muy influyente de la Corte
del Rey que la haba matado por celos. Por ese motivo, desde el primer momento se
procur encontrar un chivo expiatorio para encubrir al verdadero culpable.

El hombre virtuoso fue llevado ante el juez tomando conciencia que tendra pocas o nulas
probabilidades de escapar de un veredicto de culpabilidad. Su destino sera la horca.

Estaba claro que el juez formaba parte del complot. No obstante, el juez quiso dar una
apariencia de estar celebrando un juicio justo. As que le dijo al acusado:

- Conociendo tu fama de hombre responsable y trabajador vamos a dejar en manos de la


justicia universal tu destino. Escribir en dos papeles separados Culpable e Inocente.
Despus tu escogers uno de los dos papeles y sers t mismo quien decida el veredicto.
Por supuesto, el mal juez haba escrito la palabra Culpable en los dos papeles. El
hombre virtuoso no conoca los detalles del plan del juez pero intuy que algo raro
pasaba.

El juez orden al hombre que escogiese uno de los dos papeles doblados.

El campesino respir profundamente. Se qued con los ojos cerrados unos segundos. El
juez y los presentes en la sala del juzgado empezaban a impacientarse. Entonces, de
repente, el hombre abri los ojos, cogi uno de los dos papeles, se lo meti en la boca y se
lo trag.

Sorprendido e indignado, el juez le dijo:

- Qu has hecho! Y ahora cmo sabremos el veredicto?


- Es muy sencillo. Es cuestin de leer el papel que queda en vuestra mesa. Dejadme leer la
palabra del papel que queda y sabremos la palabra del papel que me he comido contest
el hombre virtuoso.
De mala gana y con un enfado mal disimulado, el juez ley el papel y no tuvo ms remedio
que liberar al acusado, al que nunca ms volvieron a molestar."

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