Está en la página 1de 6
vir LAS MAGNAS ERUPCIONES DEL VOLCAN DE SANTA ANA 1) Durante el régimen colonial, ef hermoso Volcén de Santa Ana fue conocide indistintamente con los nombres de Volcan de las Izalcos, Voledn de Fuego 0 Volcan de Sonsonate. Dicha eminenaa se eleva a 2.365 m. sobre el nivel del mar, constituye individuaimente la masa orogréfica ms voluminosa del pas y pose en su cma el mas espacioso crater central, en cuyo fondo reposa una laguneta de aguas azufradas color azul-verdosa y un agujero profunde, que no es otra cosa, que e! extremo de la chimenea volcérica, Hacia el NO., en direccién de Chalchuapa, se abre paso una falia radial que contiene el cono de cascajo e El Retiro y los maares de Plan del Hoyo, E| Pozo, Laguna Seca y Cuscachapa; hacia el E., la pared exterior del crater central es un corte a pique, que- muere en el doble créter de explosién que ocupa la laguna de Coatepeque; y hacia el S,, verte numerasos manantiales de aguas frescas y calentes. 2) En juno y julio de 1524, cuando pasé por ta regién de los [zalcos el conquistador D. Pedro de ‘AWvarado, este volcén estaba en un periado de gran actividad. "Adelante de esta (dudad de Guatemala) -dice a D. Herrin Cortés- sesenta leguas (hacia Cuzcatlén) vimos otro voicin que echa humo muy espantable que sube al ceelo y de anchor de compas de media legua el buito de humo, Todos los rios que de alli descienden no hay quien beba el agua porque sabe a azufre y especalmente viene de ali un rio de caudal muy hermoso tan ardiente (el Rio Ceniza) que no podian pasar ciertas gentes de mi compafiia que iba a hacer una entrada; y andando a buscar vado haallaron otro rio frio que entraba en éste; y all donde se juntan hallaron vado templada que lo pudieron pasar Por 1526, segiin el oidor Lie, Diego Garcia de Palacio, este volcén inicé un perlado eruptivo que ain festaba en su apogeo cincuenta afios més tarde. En'dcho lapso, hubo épocas de gran actividad y ‘tras en que aminord o se extinguié aparentemente. Asi, en un Ms, de 1549, se indica que “el voicén de las Izalco-s (Volcan de Santa Ana) se apagé de dos afios a esta parte", esto es, en 1547, 3) El menclonado oidor Lic. Diego Garcia de Palaco, en su carta al rey espafiol Felipe IT databa en Guatemala el 8 de marzo de 1576, dice: stan situados (los pueblos de los Tzalcos) en la falda de un voicén (el de Senta Ana) que std humeando; que segiin afirman se ha consumido y ha bajado de 50 aos a esta parte (esto es: 2 partr de 1526) més de 20 estados de altura (3.5 Kms.) y algunos afios arrojado y expedido de si tanta ceniza que ha cubserto la tierra muchas leguas al rededor, y hecho gran dafio a las nuertas del cacao. Vierte la parte del Sur, como més baja, muchas aguas, algunas muy buenas y otras malfsmmas y hediondas. Hace un rio que llaman de le Ceniza, por el mucho y gran hedor que lleva. Sale asimismo de él, otro arroyo de tan mala y viscosa aque (el Shuteca) que en poco tiempo cubre y hace pledra cualquier cosa que en él cae. ¥ aconteaé que habséndosele caido aun indio un machete, al cabo de dos afos se hallé cubrerto de mas de ppalmo (mas de 21 cms ) de piedra por todas partes. Y fuera de estos Tzalcos (en la provincia de San Salvador), en un lugar que se lama Tecpa (San Juan Tecpén), sale del dicho voledn (de Santa Ana) otro arroyo (€l de La Joya) de la misma calidad! “Extremadamente cerca del dicho (lugar de Santa Ana) esté un lugarjo que ss lama Coatén (Coatepeque), y en sus términos una laguna en la falda del dicho volcén (de Santa Ana), hondisima y de ‘mala agua, muy llena de caimanes (lagartos)" Fray Antonio Vasquez de Espinosa, en su "Compendio y Descripatn de las Indias Occidentales". Ms. c. 1625, anota: “En este distito de la Villa (de Sonsonate) hay un volcdn (el de Santa Ana), que ha echado mucho fuego Y ceniza, e! cual esté en una sierra (a Sierra de Apaneca), y por toda ella en sus faldas hay muchos puebios de indios. La sierra es de mucha montafia y arbolede, es muy féti" Durante un siglo mas 0 menos, tal vez desde "antes" de 1524, tal vez hasta "después" de 1625, el volcdn de Santa Ana estuvo vomitando por su crater central hermosas columnas de humo negro y espeso, con fuerte olor a azufre, e inclusive materas fragmentanias que cubrieron las terras arcunvecinas al centro de temisin y causaron no poco davio en las ncas huertas de cacao de los Ezalcos. Debido a esta accién hipogénica, por otra parte, las aguas de los rios: o bajaban muy calientes, o sabian 2 azufre, 0 eran incrustantes o impotables; pero el volcdn, segin las pruebas documentales pertinentes, nunca arro}5 mantos de rocas en inion o lavas. (Tomado de “El Diario de Hoy’. de 13 de julio de 1977) vin PROLEGOMENOS DEL VOLCAN DE IZALCO 1) Alrededor de un siglo, de c. 1625 a 1722, no existen documentos que seftalen actividad hipogénica en a mole majestuosa del volcén de Santa Ana y todo hace suponer que entré en un prolongado rep0so; eto el 19 de matzo de este Gitmo afio, en la base suroriental del mismo, tuvo efecto un suceso {geolégico extraordinario: la foracién de un nuevo crater por donde vomits fuego, lavas y cenizas. El alcalde mayor de Sonsonate D Francisco Antonio de Carrandi y Menén, decia en 5 de enero de 1732, que en la provincia se expenmentaba gran escasez de cacao y que los naturales daban “por causa de dicha escasez y esterlidad las cenizas y demés excredones que arrojé el volcan (de Santa Ana), que arruinaron todo este contorno" y que "parece fue bastante el suceso de dicha reventazén, experimentada en el afio de 1722, por haber vciado la terra el aluvidn de dichas cenizas" El nuevo créter, protoplasmna del modem Voloén de Izalco, hizo otra importante erupaién de 1745, sequin versiones tradicionales que recogié en Sonsonate, en 1825, el Sr. Jorge Alejanciro Thompson. E15 de marzo de 1753 el agnmensor real D. Juan Antonio del Bosque y Arteaga, colocado en la Cruz de San Marcelino, en ef camino que de Sonsonate conduce a Santa Ana, inicié la mediaén de las terras, eiidales de Tealco con direccién S. 79 45' Wy manifiesta, en el Acta ‘respectiva, que dey6 fuera de la ‘comprensién de las tierras comunales "el 6valo que forma el volcdn (de Santa Ana) del terco de él para la punta ...por totalmente infructuosas, pues que se componen de la arena quemada que el volcén brota Ge Si (feshcal o malpais) y aun comprendienco en este tio algunas puntas infructuosas (de lavas)" Agrega, ‘cue deyé "las puntas de los cerros y volcan (de Santa Ana) a la derecha y que llegé "a una barranca profunda de piedra y arena (quebrada del Espafiol) que baja de la punta de dicho Voleén de Fuego (de Santa Ana)" EI 6 de marzo de 1753, el agrimensor real caminando siempre de Onente a Poniente, cubrié la distancia entre la barrance del Espafol y la Cruz Gorda 0 Cruz Gruesa, punto tnfinio entre los ejidos de Juayla, Nahuizalco e Izalco, y dice que en ese trayecto dejé "las terras del malpas del volcén (de Santa Ana) a fa derecha, baldios y realengos'. De tal suerte, que para 1753, en el flanco suroriental del Volcén de Fuego -asi se ilamaba el de Santa Ana-, no sélo exstia un manto de teshcal o malpais, de alguna consideracién, pues ya habia interceptado el curso natural de la quebrada del Espafiol, Gnica barranca profunda de piedra y arena que baja de la ‘dma de la referida eminenda, sino que en él existia un crdter en acuviaed, pues de Basque y Arteaga afirma que ese promontorio lavico se ha formado y aumenta "con la arena quemada que el volcén brota de st 2 En 1834, un mulato de Juayia refind al ingeniero inglés D. Juan Bayi, que el voicén de Izalco se formé en un hato de ganado, por 1754 6 1755, y que él "se acordaba perfectamente del tempo en que la terra cempez6 a arder, arrojando llamas", pues cerca de este lugar viva su novia, con la que se casé. i Lc. Antonio Ipifa, tustre sonsonateco, recogié la versién de que en 1762 habia hecho "sus primeras erupciones" el volcan de Izalco, "pero tan suaves que ningin pueblo se alarm"; y que, en 1765, hizo otra “gran erupeén" En 1854, el anaano D. Franasco Castillo conté al viayero alemén Dr. Moritz Wagner, que "su padre le habia relatado a menudo, cémo se abné {a tierra con tremendos ruides, y habia arroyado al aire, por Su abertura, una inmensa masa de piedras incandescentes y cenrzas, no lejos de otto cerro que antes se llamaba Tzalco (e! Volcan de Santa Ana) y que se consideraba un volcén apagado. También se veia ‘entonces mucho "mal pais", esto es, cornentes de lava, Antes de la sorprendente elevacin del cerro, no sabia él nada". Las versiones tradiconales de D. Francisco Castil, nacido en 1769, concuerdan exactamente con el tesimonio irrefutable de! agnmensor real D. Juan Antonio del Bosque y Arteaga, quien encontré en la falda sur-onental del Volcan de Santa Ana un “évalo” constituido de cenas, cescajo y lava quemade, esto es, un teshical o malpaisera que no habia caido de los santos celos ni del créter mayor de dicho cono platénico, sino que se habia formado alrededor de un nuevo aréter o centro de emisién, ongen del volcén de Izalco, De tal suerte, que es totalmente faiso que este oélebre volcan naya aparecido sittamente, en la haciend los Cucufates, el 23 de febrero de 1770, como se creia antiguamente. Sobre esta cuestién han hhecho meridiana luz histénca, primero «1 Br. Juan Francisco Santillana, luego los ingenieros Ricardo Arorai y Santago Ignacio Barberena, y finalmente con el mayor acomnd de documentos los profesores Jorge Lardé y Jorge Lardé y Larin. (Véase: "Izalco*, en la Toponiinia Autéctona de E! Salvador Oceidental, pags 227-347), (Tomado de "El Drano de Hoy", de 15 de julio de 1977). IGLESIA PARROQUTAL DE METAPAN Comenzé a edifcarse en 1736 y se inauguré ef 11 de ‘uno de 1743 Sal indemne del cavoreso incendié que en 1763 destruyé 2 Motapén. En su pila bautismal fue bautizdo el Pore Dr. y L'c. Isidro Menéndez. Sélida ‘constructin de manposteria que ha sido poco afectada or los temblores de terra Foto c. 1900, Puvticaco en “ta Quncena’, Afo Il, Tomo JV, N°43, de 19 de enero de 1905. 2B x ESPECTACULARES ERUPCIONES DEL VOLCAN DE IZALCO EN 1770 1) Son tan raros los volcanes que en América se han formado en los tiempos histércos, es decir, desde la llegada de los espafioles hasta nuestros dias, que sblo se registran como tales los de Jorullo y Paracutin, en México; el de Las Plas, en Nicaragua; y los de El Playén, Iralco y Cerros Quemados del Tlopango, en E! Salvador. El vigero y diplomético amencano D, Jorge E, Squrer, en sus "Notes on Central Amenca’ (Londres, 1856, vol. I, pigs. 312 y 313), apunta: "Se levanté (el voleén de Izalco), en 1770, en medio dela planicie que se extiende al pie de la gran masa del volcan extnguido de Santa Ana, y recubre hoy fo que fue en otro tempo una bella hacienda de genado, Hace el fin de 1759, los’ propretenos de esta hacende fueron alarmados por tos ruidos subterréneos, acompafiados de choques terrqueos, que continuaron para aumentar de intensidad hasta 23 de febrero de 1770, momento cuando la tera se estremecié a una media milla poco més © menos de ios exifiaos de la hacienda, emitiendo raudales de lavas, acompariados de fuego y de hutmo Los habitantes huyeron espantados, mas los vaqueros, 0 quardianes del ganado, que continuaron a vistar dianamente la hacienda, reportaron que las llamas y el humo no hacia més que aumentar, y que las eyeculaciones de la fava era de cuando en cuando suspendda, siendo reemplazada por grandes cantidades de cent, de lopli y de piedras, que formaron un cono en pleno desarrollo, alrededor det iter. Este modo de accionar continu durante un largo periodo, pero muctos afos después el voledn no ha echado mas lava. No obstante, se ha mantenido en un estado de erupadén constants, y ha reabido, 2 causa de esto, el nombre de Faro de El Salvador. Sus explasiones se producen con una grande regulandad, a intervalos de diez a veinte minutos, con un ruido semejante a la descarga de una bateria de artillerfa, acompafiadas de una espesa fumaria asi como de nubes, de Cenizas y de predras, que se acumulan sobre los flancos del cone, aumentando progreswamente su altura, que se puede evaluar hoy dia (1853) en 2.500 pres poco mas o menos" 2) El vajero alemin Dr, Moritz Wagner, en 1854, fue el prmero en consderar que la fecha 23 de febrero de 1770, como correspondiente a la del aparecimiento del Izalon, es un dato "sin duda falso". No obstante, el Cnel. y Lie. D, Manuel Feméndez, no sélo lo acepté como auténtico sino que agregd, de su propia cosecha, lo siguiente: "Por otra tradicidn acreditada en Lzaico y Sonsonate se refiere que efectivamente hubo, como una mata al 5. SO. del sitio que hoy ocupa el voleén, un hato de ganado perteneciente a una familia mestiza de Izalco, apelidada Cucufate; que en este mismo sitio existia un respiradero situado sobre una roca rida Notablemente realzada del suelo, por lo cual sala de continuo un chorro delgado de vapor ardiendo con el aspecto de columna de humo o nubealliz, que de repente un dia, a eso de las 6 de la tarde, hubo una fuerte detonacién como de pieza de artillera de grueso calibre, que sorprendid y causé mucha alarma a los vecinos de ambas poblacones, espantando aun los animales, que aullaban y grtaban como en sefial de creerse estar amenazados de un grande e inminente peligro; que sin embargo de es0 no se sintié temblor alguna, y solamente se noté que el volumen de la columna de humo habla aumentado considerablemente y que de la grieta dal resprradero, muy ensanchada, salian borbotones de lava en todas direcciones; que hasta después de algunos dias hubo temblores violentos y dabléndose entonces la ‘antidad de lavas y acumulindose unas sobre otras en contorno del crater, fue que se formd gradualmente el cono; que hasta pasado un largo perioda de tempo hubo una erupcién més fuerte en que las matenas abrasades que vomit el cono, dispuestas en forma de correntada, caminaron en, irecadn del pueblo de Izalco, abriendo una ancna calle en la arboleda, y no se detuvieron sino @ una mila de dicho pueblo, que entonces fue que quedaron destruidas las casas del hato de ganado, pues la comente pasé sobre ellas”. En un informe municipal de Asunaén Izalco, fechado en diciembre de 1859, se indica que “la histona de ‘este gran coloso, que de tempo en vempo amaga con .sus grandes erupdiones y retumbos a los rzalquefios y pueblos comarcanos, sin embargo de ser tan recente su extstencia, que segiin noticias no ‘uenta mas que 87 afios", 0 sea, que su origen se remonta, segin ese documento, al afto de 1772, es, en verdad, desconocida, Indudablemente, fa tradicién habia conservado el recuerdo de una de las més grandes y espectaculares ‘erupaiones: la del 23 de feorero de 1770; pero no de la pnmera: la que dio existencia geolégica al "Faro del Salvador’, "Faro de la América Central" o "Faro del Pacifico’ En 1775 se edité en Londres el Mapa del cartégrafo D. Tomas Jefferys, inttulado: "The Bay of Honduras", ¥en él aparece el Volcin de Santa Ana con el nombre de “Volcén de Sonsonate” y su hiuelo con la denominacién de "morro de los Izalcos" En 1775, pues, a raie de las erupdiones de 1722, 1745, 1753, 1754 6 1755, 1762, 1765, 1770 y 172 y de otras muchas no registredas en los documentos ni en las tradicones, el volcén de Izaico ere perfectamente visible desde la lejania como un cono distinto del volcan de Sonsonate (hoy voledn de Santa Ana), (Tomado de “EI Diano de Hoy", de 18 de julio de 1977). x UN VOLCAN QUE ASOMBRO AL MUNDO 1) De todos las volcanes del globo, en concepto del barén Alejandro de Humbolat, es el de Izaico uno de los mas notables bajo el punto de vista vulcanolégico, pues en su obra: "Cosmos", el sabio alemén espeta lo siguente "En vez de engolfarse en hipdtess... prefiero detenerme en seis puntos de la superfiae del globo que en la histona de la actidad volcénica, son parncularmente instrucivos y cunios0s. Estos puntos son: El Estrémboli, la Quimera de Lida, el antiguo volcdn de Masaya, el moderno de Izalco, el de Fogo en las 'slas Cabo Verde, y el colosal Sangay". EI Dr Monitz Wegner, reconstruyendo los origenes de este cono pluténico, con base en tradiciones que recogié en Izalco en 1854, apunta: Francisco Casbllo, jo mismo que otros vies testigos preséncales,afrman categénicamente que sobre a incinade superficie el cero fue creaendo y ensanchéndose poco poco por medio de su prop lava" “Cuando mio (hacia 1780) fue l a menudo con sus camarades a la proximided del volo, por criosidad, a ver el hermoso fuego del crater, Cuando deyaba pasar algin tempo entre sus wsitas, crea él notar qUe cero habia aumentado en tamajio; esto acontecle, do el vej, especialmente después de las grandes erupciones, de las cuales él recordaba sdlo tres. La cifra del afio de las dos primeras grandes erupoones, no podia indicarias exactarente: la primera fue durante su niez, y Guré como tres meses, todos los airededores estaben completamente alumbrados por una luz wwe, urate la nocne, por i columna de fuego que habia sobre el crate. La corinte de ava cori cerca de dos leguas al Norte, con drecaon de ‘Santa Ana. Mas o menos treinta afios después, tuvo lugar una nueva y mayor erupcién”. Estas dos erupciones, a las que aludia ef anciano D. Francisco Castilo, fueron las de 1770 y 1798, y como en la primera de esas asevera que la lava corrié dos lequas hacia el Norte, o sea, hacia la falda del voleén de Santa Ana, preciso es conclu que para tal época el "Faro del Pacifico" ya tenla un cona (tesheal o ‘malpais) de alguna altura Carlos von Seebach habla de una erupaién en 1783; D. Martin Gulllen informé en 1880 al gedtogo W. 6. Goodyear, que hacia 1785 el volcan de Izaico habia hecho grandes y pequefias erupcianes, las cuales lo dotaron de un cono perfectamente visible desde largas distancias como diferente del volcan de Santa Ana; y Sues, en su obra "La Fase de la Terre” le atnbuye una erupcisn el 29 de marzo de 1793. EI Pbro. Domingo Juarres, en 1808, dice: "Es famoso en dicha comarca (la provincia de Sonsonate) el volcén de Izalco, por sus repetidas erupciones’ la que hizo por abni de 1798 fue muy copiosa, se continud por muchos dias” 1, Juan Bayli escrbia en 1849: "Muchos afios hace que las matenias arrojadas han consistdo prnepaimente en cenizas y piedras calcnadas, pues no ha habsdo ninguna fuerte erupcén desde el afto Ge 1798, en que brot6 une cornente de escona negra, que se extendié a més de una legua de la base de Ja montafia, y se ve aun ahora desde lejos, @ pesar de la gran frondosidad de la vegetacin tropical de ‘uno y otro lado" D. Juan L. Stephens, quien visit nuestro pais en 1838, anota: "El cura de Sonsonate, todavia en plenrtud de vide, me do que & recordaba cuando el terreno donde se eleva este volcan no tenia nada que lo distingulera de cualquier otro lugar alrededor. En 1798 se descubné un pequerio orficd que soplaba ppequefias cantidades de polvo y guias. Entonces él vivia en Izalco y, como muchacho, tenia la costumbre de ira verlo; y que lo habla observado, y marcado su creamiento de afio en affo, hasta llegar al tamafio ‘que tiene en fs actualidad”. En 1854, el anciano D. Francisco Castilo cio a D. Montz Wagner: *Més 0 menos 30 afios después (en 41798) tuvo lugar una nueva y mayor erupexin. La Corriente de lava se extend hasta tres lequas mas alld del pie del volcén, La lava de cenizas alcanzé hasta la aldea de Tzalco, de donde muchos habitantes ‘emprendieron la fuga". "La Giltima gran erupcién de la cual se recuerdan (ademas de D. Francisco} muchos otros habitantes fue ‘en 1802; la columna de humo se levant6 otra vez a una altura increible, la ceniza cubrié el campo cuatro leguas a la redonda, las detonaciones fueron tan fuertes que en Izalco y Sonsonate las casas trepidaron hhasta su base, la lava com lentamente al Este, dejando a su espalda espacios de 60 varas cada dia, y ‘comé cerca de tres meses continuamente” De 1805 a 1807 hubo otro perfodo de recrudescencia eruptiva, segin el barén Alejandro de Humboldt, y ‘nuevamente, en 1825, volvi6 a incendiarse su igneo aréter. (Tomado de "El Diano de Hoy", de 22 de Julio de 1977). IGLESIAS DE ASUNCION DE IZALCO Ale izqwerd, tras la cba desnurla y secur, Se alza la nueva Iglesia de Nuestra Sefiora de la Asuncién, maucureda en 1815; af derecha, uedan las rusnas de la antigua parroquia que fu destruc pore teemoto del 29 de ho ve Publicado en la "Geografia Eemental de la Repaiblca del Salvador" por D Guillermo J Dawson (Pars, 1890, Pag. 23).

También podría gustarte