NACIONES UNIDAS CONSEJO ECONOMICO Y SOCIAL CONISION ECONOMICA PARA AMERICA LATINA Décimo perfodo de sesiones Mar del Plata, Argentina, mayo de 1963 GENERAL, B/CN412/646 10 de febrero de 1963 ORIGINAL: ESPafoL CONSIDERACIONES SOCIOLOGICAS SOBRE EL DESARROLLO ECONOMICO DE AMERICA LATINA por José Medina Echavarrfa” % Aunque el autor es funcionario de 1a Comisién EconSmica para América Latina, el presente trabajo ha sido escrito a tftulo personal y, por lo tanto, las ideas en 61'contenidas pueden no coincidir con las de le organizacién a que pertenece,I. Il, LOS DISTINTOS ENFUCUE AY Be LOS DIAGNOSTICUS .e.eeseeseeee A B. G. INDIGE Las:exigeneias de 14 praxis . 1. Inversiones econémicas e inversiones hu- manas . 2. ‘Las tipologfas como instrumentes de cono- cimiente y. de. accién ...4+ has exigencias del conecimiento . 1, BL punto. de, vista analftice . 2, EL punto de vista-histérice . La denominada situacién revolucionaria ....+.+4+ 1, Velidez y limites del dualisno estructural 2, ba trivle mudanza Seeeeeeg: a) Transformaci6n’ econémica b) Integracién’ nacional . c) Integracién supranacional .. El_ocaso de la vieja estructura .... 1, De 1a hacienda a la empresa . 2, Paternaliswo, angustia y organizaci impersonal .....+ 3. “Urbanizacién: acelerada" y "explosién demegréfica” .. . La disolucién ideelégica . 1, Liberalismo-e-independencia . 2, La “clase polftica tradicional” ...sseeseee 3. Las élites cwsmopolitas y la formpacién de las nuevés capas dirigentes . ; 4. Digresién acerca de 1a Universidad y de los "Zntelectuales' 5. La transformacién del liberalismo-...ssseee a) Las experiencias eurepea y latinoamerica- TA eeeeeees b) La gran paradoja, Del Fondo de Cultura Econénica a la obra de la CEVAL ..seseee wo Ow a3 15 7 is lg 19 20 22 23 2s 32 35 7 37 40 4a AS 55 56 8B /6. EL ecase6 Te TII, HACIA LA NUEVA SOCIEDAD .. las dos pregui A. Las clases medias emergentes ... 1 2 3. B, La politica: como impulse y canalizacién lL 2. 3. lL El ocaso de los ideologies ....ssee+ Digresién final sobre la juventud ...+++.++ tas fundamentales ... Los Llamados estudios de estratificacién social . Las clases medias y 1a polftica Sobre un enigna en el desarrolle actual de América latina ..... . a) - Interpretaciones econéxicas ... b) Hipétesis y problemas seciclégices .... Tecnologfa y politica ... El problema del cambio secial.... a) Una nueva estructura de poder ....sseee b) Las formas de gobierno y les sistemas electoraies .. c) Liberales y conservadores ....+ d) La quiebra del sistema ...,....6.+ @) El vacfo polftico y la crisis de legiti- midad . f) Digresién sobre los militares ... Las nuevas masas y la atraccidn demagégica, a) das poblaciones expelidas y su desarraigo b) Las "situaciones de masa" .sssseeseeee c) La persistencia de la imagen paterna~ Lista ....seeeeenes - d) Los partidos populistas ......... La ideologta del desarrollo y los nueves partidos . gExiste una sola férmla de desarrolle? a) El desarrollo como problema téeni: Jas opciones econémicas . >) El desarrello ceo problema politi- co: las opciones sobre el sacrificie 100 102 103 104 106 ne 113 /c) Bl desarrelle2 3. B/ON 612/646 Page Pégina ¢) El desarrollo como problema seciolégico., ls d) Las diferentes opciones y su articulacién en la ideologfa de los partidos ...seeeee... U5 eeeeeee LIT a) La progresién ascendente de la econonfa soviética .. Acerca del modelo soviétice ...+..64 ny b) La convergencia en les aspectes materia~ les de los sistemas en pugna ... c) La convergencia en la estructura secial,.... 120 d) Paréntesis final sobre la "legitimidad" y La Meficacial yesssseesecesceserscseeenceene 12h Consideraciones sobre 1a férmula occidental..... 127 a) La tradicién del liberalisme y la demo- cracia formal . ») La nueva bibliograffa y las reuniones in- ternacionales sobre el tema . c) La supuesta correlacién de riqueza y demo- cracia ... seeveeeee 133 d) La inestabilidad polftica ..ssseesesseesseee 136 e) Las deficiencias de la democracia w 139 f£) La estabilidad denocrética norteamericana... 140 h) Las mudanzas en la estructura de la demo~ &) El caso de Alemania .. CLACLA sesssecesecscecesenececcererssecroess Ui6 i) La democracia pluralista ...csseeeeeeerecere 150 5) Vemecracia y planeaci6n ..sesseesecrereeeee, LOL k) ¢Existe una sela forma de democracia? . 5 1) La democracia como fenémeno de partici.pa- eign... ss eeeeeeee 19 m) La integridad moral. Nuestra América "Gard da 6" ..ceesececseeesees woven 162E/0N 612/646 Page 1 I 10S DISTINTOS ENFOQUES Las pégines que aguf se inician tienen por objeto considerar el desarrollo econémico de América Letina en sus aspectos sociales, Pero apenas escrita esta frase cae sobre elle como un #lud el enorme volumen de palabras que se escriben y pronuncian en estos dies sobre el tems, Esa frecuencia, a veces excesiva, no puede menos de producir alguna perplejidad, pues indica que nos encontremos de pronto frente a un'tépico. Y ante un t6pico sélo cabe una de tres posturas: aceptarlo resignsdamente tl como se presenta y contribuir sin mayores preocupsciones a su continuacién; tretar de perforsrlo pure dur tras 61 con sus supuestos fundementeles-y por tanto encubiértos; 0 esforzarse por poner al menos un poco de orden en la confusién de sus mezcladas significeciones. No es posible entre- gorse @ la comodidad de le primere postura, ni tampoco caer por hoy ante la fascinscién de le segunda. Sé6lo queda como disereto y hacedero aceptar el imperativo de cluridad de a tercera, Se impone declarar, por eso, como punto de partida, que le expresién "aspectos sociales del desarrollo econémico" es en extremo ambigue. Se Justifica com el recurso litersrio de un especislista deseoso de cole- borer armonicamente con otros honbres de ciencis, #1 entrar a su propio riesgo en terreno acotado como ajenos Pero induce peligrosamente, tomado a le letra, a la idea de que pudiera tratarse con el término "aspectos" de simples epifenémenos 0, lo que es peor, de notas secundarias y quizé accidentales. Ahora bien, si el sustentivo es equfvoco, 1a equivocidad del adjetivo no es menor y de puro sabida olvidads, aunque se delete una.y otra vez en los Gltimos tiempos por le frecuencie con que lo social aparece siempre en simple unién copulative con lo econémico. Esa indica~ eign de epéndice le imprime una naturaleza residual que multiplica todavia nfs las dificultades de un buen entendimiento. /Sin embargo,B/0N,12/646 PAg.2 Sin embargo, lus bases pera ese buen entendimiento no son descono— cidas ni diffciles, Baste recordar un lugar comin de 1a metodologta cientifice, El "tema", en efecto, "sociedad y desarrollo econdmico" puede ser enfocado — como todo lo que se refiere 2 la vida humsne ~ desde my diversos puntos de viste, y ninguns de esas perspectivas es en principio ilegitima e incorrecta, Sélo que algunas son més adecuedes que otras, Pero lo que determina esa myor o menor adecuacién es el interés del cientifico en el momento, 0, dicho en otra forms, le natureleza del problems que se trata de resolver. ;No convendrfa bosquejar una orden- cién de las perspectivas fundementales? A, LAS EXIGENCIAS DB LA PRAXIS La clave para una primera separacién de esas perspectivas, susceptible en su relatividad de enriquecerse luego con diversos matices, esté dada por el impulso primario que las determine. Es decir, segtin predominen en ellas las exigencias de la préctica o las exigencies del conocimiento. El predominio de las exigencias de le préctica es evidente en las orientaciones de le politica sociel tradicionsl urgides como estén por deficiencies flegrentes en la vida de uns sociedad. Lo que en un prin cipio tuvo un 4mbito limitado - le "cuestién social" en les dltimes décadas del siglo XIX - ha ido extendiéndose haste comprender toda la gems de los "problemas sociales de un pais", o sea todes las insuficien- cias y desajustes de su estructura. Reforma sociel, asistencia social, politics social, son los nombres con que se encubre esa actividad en distintos paises y momentos, y pura muchos no se trata de cosa diferente cuando se habla de los aspectos socivles del desarrollo econémico: educscién, selubridad, seguridad social, niveles de vide familiares, etc., lo que explica sin més su carécter residusl y ependiculer. 1. Inversiones econdmicas e inversiones humanas En la evolucidn de 1s polftica social - como puede verse my bien en su historia europea = ha de darse un momento reflexivo en el que las metas huminitarias de la politica sociel tienen que ponerse en relacién con los /fines deE/CH 12/646 Page 3 fines de le politica econémica, o si se quiere con lus posibilidades de “una situacién econémica dada, “Es decir, 16 que ‘hoy se plantes en otra forma en los paises menos desarrolladcs, existié ya como problenid en Jos paises ms industrializados, y le variacién en el plentéamiento =. condicionada por lus preocupsciones del desarrollo ~ he sido'la sit guiente, expresada en au mxima simplificucién 1égica: todo desarrollo econémico supone un proceso de continuadas y sucesivas ‘inversiones. Ahora bien, pudiera suceder que no sélo importen las de carécter éconémico en estricto sentido, sino asimismo las que hin veriido @ denominarse inver- siones humenas. Bolivia necesita inversiones en su petréleo y en su sector agricola, pero zquién duda que el desarrollo econémico ‘de este pots depende no menos de una mejora en la mutricién y salud de sus habitantes, de ura "castellanizacién" répide de’ sus grupos indfgenss? La categorta de "inversiones hununas" ha permitido la tecnificaciéa del problema y la posibilided de inserterlo en los-cuadros de 1a programacién o pléneacién. Pero, como todo\avance en le recionslizecién, tiene tanbién sus ledos de sonbra, “Su meyor logro hy,.consistido en vigorizer le conviceién de que el desarrollo econémico es un proceso social total y en-plantear, en consecuencia, #1 esfuerzo ¢. imaginucién humanos un nuevo probléme: el de 1a planeacién sociel de mano con lu pleneacién econémica., Sus ver~ tientes negativas o al menos probleméticas son, por un lado, haber subra- yedo @n exceso ‘como meta un elenento utépico, el del desarrollo eqilibrado, y por otro lado el de haber ateruado de ese nsnera, sin quererlo quiz4, el cardcter himuniterio de'le politica scciel tradicionel, que es ante todo = pura decirlo-en su Lenguaje més noble — una lucha ‘contra lw injus~ ticia y el dolor humnos, : La eepiracién subyacente. en el lems del desarrollo econémice y sociel “equilibrado" se apoya en dos concepctiones concretas: a) la de que existen inversiones:de carSeter soci#] que tienen tarde o temprano rendimientos econémicos 0 que influyen positivemente ‘en una mayor-produetividad future, y b) 1a de que en todo plan de desarrollo débe heber una determinada proporeién - por motives tito humaniterios como de.rendimiento - entre el crecimiento econémico y la.mejora o progreso socisles, sungie no sea ésta /sino uneB/0N.12/646 Pégek sino una entre las varias proporciones 4 cuya satisfaccién debe sspirersed/ Las exigencias de integracién y proporcién no parecen ser discutidas, y sf en cembio, el término de equilibrio, que es shora #1 purecer el de mayor circulecién. La primera objecién quedé antes insinuada: con le idea de equilibrio se inserté en 1ss concepciones del desarrollo un elemento utépico que le presta un carécter "ideolégico" - en su sentido técnico - y esto es algo que repugna a le sobrieded de 1s considerecién cientifica, La segunds objecién sostiene que de esa msnera se prejuzgs 1s teorfa misma del desarrollo econémico; o se#, que para algunos es my problemAtico que el desarrollo econémico pueda derse en forms equilibrads, y sus mecanis- mos consistirfen my al contrario en una serie de sucesivos desequilibrios, ereadores cada vez de situaciones més complejas y ricas. 1/ Més de una vez conviene prestar un minimo de autoridad a las opiniones propizs ~ quisiéremos creer — apoydndose en le reconocide de otras ajenas. En este punto voy a hacer uso de una clara férmle del profesor de Berna, Richard F, Behrendt. (Die Wirtschaftliche und Soziale Revolution in der Unentwickelten Lundern, 1959, indo se trata de formular los criterios de prioridad necesarios en toda pluneacién de desarrollo, conviene distinguir los tres problemas siguientes: 1. El problema de ia proporcién entre lus mejoras propismente econé— micas y lus mejoras de ear4cter social; 2. Bl problema de la proporcién, por una parte, entre ls calculabi- lidad (Rechenhaftigkeit), que se esfuerza por alesnzer los rendimientos méximos con los mejores procedimientos técnicos disponibles y, por otra, la meditada pléneacién de un desarrollo gradual y duradero que tiene en cuenta la continuided y estabilidud sociales. Importa en este caso evitar en lo posible ruptures demasiado violentas de les tradiciones e instituciones del medio de que se trate, con la consiguiente secuela de las inseguridades y. conflictos - psicolégicos, sociales, politicos e incluso materiales - que por tal motivo pueden resultar, 3. El problems de la adecuada proporcién entre las actividades ¢ sectores primrios, secundarios y terciarios. Pues bien, en ls medida en que puedan valer ciertas distinciones académicas, precisa reconocer: a) que el primer problems incumbe de modo singuler a los especialistes en politica o asistencia sociales; ») que el tercero es patrimonio indiscutido de la actividad del econo~ mista; ¢) que el segundo, en cambio, corresponde de particulsr manera a lo que son las preocupaciones esenciales del sociélogo y del hombre de Estado. Nadie niegs ~ sin embargo ~ que alguien pueds, por su excepeional formicién, abarcar por igual y conjuntamente los tres problemas. /Por otraE/CN.12/646 Pag. 5 Por otre parte, le transformscién de los objetivos de 1 politica social en “inversiones humanas"', siendo parcielmente legitima, pudiera conducir a un desliz peligroso: el de considerar semejantes objetivos como "rigurosas funciones" del desarrollo econémico, cosa que no son en mode alguno. Las deficienciss que en forma de problemas humanos enfrenta la politice social son independientes en principio de toda repercusién econémica y se acude a colmarlas en méritos de’ valores que se tienen como permanentes y supremos. ¥ la primera escela es sin’ duda alguna la de su perentoriedad. Bl hecho es notorio en aquéllos que se muestran con curdcter dramético ~ hacinamientos miserables, persistencia de enfermedades dominables ~, pero no lo es menos en otros que permiten une mayor pausa, Caso privilegiado el de ly educacién, El estado educutivo de un puts es de suma importancia para su crecimiento econénico; los indices educstivos y econémicos son convergen- tes y toda proyeceién de desarrollo econdmico permite sefislar los huecos ocupacionsles que es necesario rellenar con la ensefianza, Pero 1a educacién no puede considerarse como simple funcién del desarrollo, Hs euténoms en sus metas y tradiciones y en sus preocupsciones ltimas, que atufien al ser del hombre, y m4s'que con el desarrollo ~ mecunismo neutral ¢ intermedio -, se encuentran en relscién con el tipo de sociedad a que aspire o habrd de producir ese desarrollo, Por lo demfs, las deficiencies que corrige la asistencia social son ejemplos tipicos de desequilibrio, y no estd dicho que ésa su ccrreccién no sea el origen de’nuevos desequilibrios posteriores, Toda "reform", toda mejore tiene sus peculiares "costos sociales". La determinacién de esos costos no es siempre teres ffcil, ni a veces puede tenerse el coreje de algunos darwinistas sociles de fines de siglo, inexorables en sefialer determinadas consecuencies selectivas del’ progreso médico, Pues bien, son estos costds ~ consecuencias secunderias ~ de le intervencién en las condi- ciones biolégicas y psicolégicas del hombre, ‘lo que hace en principio incom parable la pluneacién social a 1a econémica y diffcil de imaginer, por ejemplo, un cusdro de insumo y producto de un conjunto de fectores humanos, No obstante, 1s nevesidad de la pleneacién conjunta sociel y econdmice incita a la imaginacién creadora y quizé sea posible un préximo adelanto.en este terreno dentro de ciertos 1fmites. Todo hace sospechar que el camino se /encuentre en“E/CM,12/646 Fag. 6 encuentre en 1a denominada "investigacién operative" y que ls aplicacién de sus técnicas a las "decisiones" socivles pueda ofrecer al menos una gufa eficaz. Pero se trata de una terea de los préximos afios y siempre las dificultades de la valoracién cualitetiva de las variables en juego dejarén ~ més atin que en lo econémico - 41 lado del consejo técnico una wltima Ndecisién" polttica. 2. Las tipologtas como instrumentos de conocimiento y de accién Las exigencias de ls préctica en le consideracién de los aspectos sociales del desarrollo econémico han Llevado ast a planteamicntos sumamente teéricos. Pero atin antes de alcanzar ese nivel, son ya visibles otras derivaciones teéricus, en paralelo contraste con les consecuencias précticas - como hubr& de verse luego - de posturas iniciales de puro conocimiento, sin duda como si la realidad quisiere mostrar una vez m4s 1s relatividad de las distin- ciones conceptusles naturalmente tajentes. En efecto, la exacta determinacién de las "deficiencias sociales" exige el maneje de indicadores o indices cuantitativemente precisos. Por eso, la necesided de contur en el campo internacional con unidades homogéneas de medida del nivel de vida de los distintos pafses llevé en afios recientes a un grupo de especislistas a fijer un cuadro de los principles indicsdores que sirve hoy de base a las tareas de las Naciones Unidas. Lo que importa ahora es ver cémo han sido utilizados esos y otros indicadores en otros paises, para resolver en principio una cuestién teérica: 1a de 1a construccién de una tipologia de 1s situacién econémico-sociel de Anérica Latina. La necesidad de contr con esa tipologte era patente, para romper el peligro de generalizaciones referidas a toda la regién; pudo realizarse de maneras diversas, pero no cabe duda que la formy en que se ha emprendido huste ahora presente un aspecto original, al ofrecer un puente entre las puras exigencias de la "prexis", que enfrentan de modo inmediato la politica social, y la aspiracién a un conocimiento interpretativo del desarrollo econémice como preocupacién esencivl del sociélogo. Dos ensayos valiosos de construccién de ess tipologias se encuentran ya a disposicién del lector interesado, Sus autores mismos son los primeros en sefialar algunos aspectos probleméticos y no es cosa de utilizar shora sus /propias palebrasE/cN.12/646 Pég. 7 propias pulebras como trampolin de una mayor discusién metodolégica, que hebria de empezar por analizer la distincidn hoy ya corriente entre indica- dores ¢ indices (Lazarsfeld).2/ Baste con recordar #lgunos puntos. En primer lugar, el problems tanto de 14 "fidelidad" como el de 1s velidez de os indicadores elegidos, y, en segundo lugur,le cuestién de su convergencia mayor o menor y de su significado, En efecto, cuando se trata de’my pocos indicadores, ls convergencia parece clare, pero né en cambio cusndo esos indicadores son numerosos. En tercer luger, el problema de 1s imputecién causal; las convergencias o correlaciones nada nos dicen por si soles de la conexién causal de los factores medidos, y, en definitiva, esto es lo més importante per la interpretecién. La correlacién casi evidente por si entre los {indices de educacién y los fndices de desarrollo a qué se debe? El problema causal se complice aun més, evidentemente, si son muchos los indicadores utilizados, Sin embargo, estas observaciones nada aminoran el valor de los resultados alcanzados por les tipologias mencionsdss, La del Padre Roger Vekemens es singularmente eleccionadora por doble razén: ‘porque en la ordenscién de los paises en ells realizady viene a mostrar en qué forma por el simple juego de los fndices se llege @ conclusiones muy préximas » los que darfa otro tipo de experiencia, lo que significa uns reletiva confirmscidn; pero, ademds, porque pone de relieve muy cleremente el nuevo puso que estas tipologius demandan, el de su interpretacién. El caso ms claro - al que luego se ha de volver - podria formularse liter#lmente con las mismss palsbras del Padre Vekemans, y es sin duda el més diffcil de cuantos presenta la realidud ectual lutinoamericana 8 1a interpretacién histérico-sociolégica. En efecto, ieémo explicer lus diferencias en la situacidn de los componentes del grupo III ~ México y Brasil - frente # le del grupo VI ~ Argentina y Chile muy en particuler? ;Céno interpretar el hecho de que los dos paises del cono sur, que ofrecen un complejo econémico-social, relativamente elevado, estén sin embergo sufriendo un "cierto estancumiento"? Es decir, cémo explicar en 2/ Véase Henri Guitton "Indices e indicedores", Reviste de Economfa y Estadisticas, Universidsd de Cérdoba, Afio IV (1, 2, 3y 4). 3/ Véase Sintesis de_la tipologis socio-econdmics de los paises latino- americanos (UNESCO/SS/SAED: LA/A-3) . Jesse casoB/CH.12/646 Pag. 8 este caso la falta de convergencia entre los indicadores socio-culturales y los indices del crecimiento econémico? A partir de aqui lws interpretaeciones comlenzen y éstas pueden ser de distinta neturaleza. B, LAS EXIGENCIAS DEL CONOCIMIENTO Son de tal’ urgencia las exigencivs précticus de la polftica socivl en América Latina que de suyo se comprende la legitimidad del punto de vista antes examinado y que encuentra en ells su impulso y acicate. Pero tal orienta- cién no es 1s tinica ni quizé 1a més adecuada ante las exigenciss del conoci- miento. Desde la perspective de éste, los "aspectos sociales" del desarrollo econémico tomen necesurianente my distinto.cerécter. Ye no se treta de "deficiencies" sociales o de. inversiones tumanas, sino de ver el proceso econémico en el todo sociel de ‘que forma parte. En este sentido, de igual manera que el saber econdmico se ha visto forzedo en los Ultimos sfios a elaborer, en todo én parte, una teorfa del desarrollo que - #1 menos en forma explicita - no ers tema de. preferente atencién en tiempos anteriores, el saber sociolégico se ha visto impelido 4 interrogerse tumbién sobre si podf decir slgo acerca del asunto, con ayuda o con independencia de log esfuerzos del economista. Lo. elegante cientificemente serfa,une teoria nica, Pero si ésta falta, se espera al menos del sociélogo que. sea capaz de elaborer una concepcién sociolégica del desarrollo, es decir, una teorfa desde la perspectiva de 1a estructure social en su conjunto. Y asf como el economiste ofrece, o puede ofrecer, midelos de desarrollo que son. por Yo menos uns paute clara’ en ‘las tareas de le préctica, se ha pedido al sociélogo que ofrezca iguelmente modelos de los procesos estructurales que acompafian o preceden #1 proceso econémico mismo. Estas exigencias del conocimiento,ahora formilades en la plenitud de su ambicién, se conienzeron'en forma més modest. Es significativo que los esfuerzos inicivles por enfrentarse con el tema haysn preferido ms bien Preocupsrse por lus "condiciones" o por los "obstéculos" sociales del desarrollo econémico, En este punto, el interés por sefialer los obstéculos delta de nuevo la “infiltracidn de las’ urgenciss de la préctica y triduce sobre todo, de parte del economists, wlgo asf como una enfadosa impeciencia ante los tropiezos de su activided.. Pero como 2 14 postre los obstéculos Jno sonB/CN 612/646 Pee 9 no son nds que un vacfo en el sistema de coniiciones, 1a teorfa volviendo por sus fueros trata de cefiirse 4 estas iltimas simplemente, ahora bien, este esfuerzo tebrito se ofrece o puede ofrecerse en dos planos distintos, entre los que existe,-sin embargo, contima commicacién, Uno e8 el plano analftice de la sociologfa econémica; otro, el histérico de la inteleccién o interpretacién de un proceso singular. 1, EL_punto de vista gnalitico La sociologia econ6mica, que apenas ha side cultivada de modo sistemdtica, tiene ahora un poderoso est{milo con la preooupacién por el desarrollo. Ne es de extrafiar que hoy dla economistas y sociélogos se interesen por perfilar el mareo institucional de lz accién econdmica pura y que se estudien las instituciones econémices por sf, mismas: la propiedad, la divisién del trabajo, el sistema de ocupaciones, asi como las formas de canbio y las condiciones sociales de los distintos mercados, Y que na menos interesen los motives de la conducta econémica, ya sea en la produccién o en el consumo, Una vez arulizsdas las instituciones econdmicas es necesario ponerlas en relucién con las dems instituciones y ver cémo funcionan todas ellas en la estructura social de conjunto, Este es el esquema fundamental que, con una u otra articulacién, con una u otra terminologfa, ofrecen las contribuciones recientes de la sociolo~ gia econémica, incitadas por el interés despertado por el tem del desarrollo, Cuando se trata de un anflisis concreto ~ un pais o una regiénjel Ecusdor © América Letina -, s6lo se requiere aplicar en el caso todo'o parte del arsenal de instrumentos que contiene el referido cuadre de conceptos. Y el anflisis seré mds o menos estétice, ms o menos dinfmico, segin sea mayor © menor el grado en que se. ponga al descubierte el proceso funcional, Ni qué decir tiene que el mencionade esquema es el que orienta también, on forma implicita, las mfs de las.yeces, todas las, propuestas de investigaciones empiricas conocidas y de algura seriedad. Como todo 1s anterior toma su-tiempo y no pasa por hoy de ser un programs, las urgencias précticas y les afanes del dfa se han esforzade también aqui por ganar etapas y por unir lus.exigencias de la teerfa y de la praxis, El razonamiento ha tomdo esta forma: desde la perspectiva del (desarrollo oE/CN.12/64,6 Pag, 10 desarrollo 0, si se quiere, de su aceleracién, no todos los elementos institucionales que amliza la sociologia econémica tienen el mismo peso. Unos son seguramente més importantes que otros, Pues bien, en la necesidad de actuar selectivanente sobre ulgunos, eudles son los mfs decisivos? De agui el tem de sabormilitar: zcudles son los elementos sociales "estraté— gices" del desarrollo ecenSmico? qué hacer para influirles en sentido favorable? A ese afén corresponde ya el bosqueje de algin trabaje, en que se han pretendido destacar por su valor estratégico tres elementos fumamentales: a) le disposicién econémica general, como repertorio base de les creencias y aptitudes econémicas dominantes; b) la capacidud de organizacién e inova— cién en el hacer econémico, que no encubre bien el término cl4sico pero equivoco del empresario, y c) la capacided de cunplimiento o ejecucién de las tareas econémicas, Sobre cada uno de esos elementos es posible actuar, tratando de acentuar su dinamismo, Cu4l es su situacién real en América Latina y con qué instrumentos se puede influir en ellos? El estudio de estos elementos estratégicos en el desarrollo econémico tiene asf ¢1 mismo papel de puente, transicién o enlace, que el que antes se usigné al de las tipolo- gtas, s6lo que en sentido inverso, El primero se inserta como exigencia de la préctica en lo que fue en su punto de partida cuestién inminentemente te6rica; el segundo deriva ura construcci6n teérica de lo que en sus comienzos fue un planteamiento par. la accién inmediata. Trater de delinear ahora el rico contenido de todo lo que implica el esquems fundamental del enfoque anal{tico de los denominades "aspectos sociales del desarrollo econémice", serfa incurrir en repeticiones de lo que ya se ha hecho en otros lugares y momentos. Pero menos atin corresoore en este instante, claro est4, su plema y sistemtica elaboracién, Sin embargo, para no abandonar todavia este plano analftico y dar un poco de carne y contenido a las consideraciones abstractas precedentes, serfa quiz conveniente acudir a los esquemis analfticos diferentes del economista y traducir en otro lengua je sus implicaciones sociclégicas. Un estudio reciente de las debili- dades estructurales de la realidad latinoamericuna, hecho como complemente /Ae una