de un corazn buscando que Dios sea un escudo en contra de quienes se levantan e contra de su iglesia o nosotros. Su interior est lleno de maldad, hablan engaos, por lo que ah el salmista le pide a Dios que castigue a quienes hacen estas cosas como: hablar groseras, mientes, hacen dao a otras personas, esto no agrada a Dios. Por el contrario, nosotros debemos confiar en Dios, alabarle y amarle porque es quien estar con nosotros como poderoso gigante para protegernos de todo y de todos, y pedir que Dios les perdone y no que Dios los castigue.