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(© 2009, Fla Sordo (© 2009, de a prscae einen catllano para soo el mundo de habla spans Geupo Edtrial Norms Monjas 527 piso 17 Sancago de Chile ISBN: 978936-300-238-6 1 186074 ce: 28002143 2 cdc, febrero 2010 Imprese por Geathika Copy Center lnmpreso en Chile Pine in Chile veliberanormacom Diageamacisn y Disehos Sasha Laskowsky Ninguna parte de esa publcaién, indo el dteo de a cuir, pede ser eproducda, amacenada tuned «ea manera alguna ni po ingin medio, sea elective, quimieo, mesic, Spica, de grabaciin ode foocopi, in permis previo del ero. pi NO QUIERO CRECER VIVA LA DIFERENCIA orde para padres con hijos adolese e o @ 3 GRuro norma ‘Bogor Baresi Buenos Aes Caracas Guatemala Lima México Panam (Quito San Jos San Jan San Salar Santiago de Chile Santo Domingo A Oscar, elamory a fuerza de mi vida Amis hijos, el centro y la conexién con el presente... micable a tierra INTRODUCCION vizés o muchos de ustedes cuando vieron por Q primera vez este libro les llams Ia atencién el titulo No quiero crecer. La verdad es que no deseo responder todavia por qué elegi este nombre; lo vames @ descubrir juntos en la medida en que el libro se desarrolle. Pero spor qué los adolescentes no querrian crecer? Esa es una pregunta para los adultos. Tenemos que reflexionar sobre el tipo de testimonio que estamos siendo para nuestros hijos, come para que ellos de verdad quisieran crecer. Sia mi, que tengo 43 afos, me preguntoban cuando chica qué me gustaria ser cuando grande, yo siempre queria ser grande... por iltimo, porque © NO QUIERO CRECER a Pita Sorbo me habjan contado fa historia de que los adultos hacian lo que querian. Al final, uno descubre que es0 no es verdad, pero, al menos, cuando yo miraba hacia adelante habia algo que me parecia atracti- vo. Crecer implicaba tomar decisiones, hacerse res- ponsable, disfrutor de cosas en forma auiénoma, sin preguntarle o nadie que parece estar en crisis en los jévenes. éPor qué un Viva la diferencia para jévenes? Porque creo que el concepto de la diversidad hoy « Y hoy, justamente, es lo dia es un tema fundamental pora la sociedad en general. Es acepiar lo distintos que somos, y cémo desde esa diferencia contribuimos a que todos po- domos vivir en un mundo mejor. Ese implica respetar y entender la diferencia entre el nifio que estudia mucho y el que no Io hace tanto; entre el que tiene déficit atencional y el que no lo tiene; entre el que sufre de bullying y el que lo ejerce. Respetar también la condicién sexual de los jéve- nes. Tolerar Ia diferencia en los suefios y en las vo- caciones de nuestros adolescentes, porque cada vez hay més diversidad profesional. Ya no existe, como en mi generacién, la busqueda de las famosas 12 carreras importantes. Hoy dia hay més alternativas. También existen diferentes tipos de familias, que tienen evidentemente consecuencias directas en ge- nerar distintos tipos de jévenes. Debemos ser capa- ces, como sociedad, de incorporarlas, respetarlas, folerarlas, acepiarlas y, por qué no decirlo, que- rerlas. Creo que Chile es particularmente un pais que folera muy poco los diferencias; no nos gustan mucho las minorfas. Por lo tanto, asi como en Viva la diferencia se invit6 a vivir Ia diferencia de género y a decir “qué bueno que hombres y mujeres somos distintos", este libro también es unc invitacién @ decir “viva lo di- ferencia entre los jévenes” para que cada uno, des- de su propia realidad, desde su propia constitucién familiar, clase socioeconémica, condicién fisica 0 intelectual, tengo lo posibilidad de aportor a la so- ciedad, de sofiar y sentir de verdad que si puede cambiar el mundo sies capaz de asumir ese compro- miso en forma vital. Escribirles un libro o los jévenes -y también a los padres- con el fin de encauzarlos o educarlos para que sean buenas personas no es fécil. En general, cuando les hablo o les escribo a los adolescentes se me preducen dos temores. El primero es preguntor- NO QUIERO CRECER nD Pitar Sordo me cémo hago para romper con el peor mal que tienen los jévenes, que es la soberbia y la sensacién de que no tienen nada que aprender, porque todo lo saben, y, por lo fanto, cualquier persone que llegue @ decirles 0 a contarles algo de sus propias vidas parece ser una late, alguien extrafio, ajeno, que vie- ne a dar érdenes 0 a indicarles todo lo mal que lo estén haciendo, El segundo femor es cémo hago para que los ado- lescentes lean esfe libro 0 para que cuande vayan a una de mis charlas no le hagan con la ¢lésica postura de “qué lato”, “squé me va a decir esta psicéloga que yo ya no sepa?" o “no fengo ganas de escuchar- Ja". Cémo hago, en fin, para llegar a ese grupo de jévenes a través de variables emocionales, porque siento que, al final, el hecho de que ellos lean este libro tiene que ver con mi habilidad pera poder al- canzar sus corazones, que es donde nadie llega donde nadie intenta llegar. Generalmente, las informaciones que fratamos de entregarles fienen el propésito de que adquieran co- nocimientos con los que puedan manejarse en la vider frente a los conflictos que se les presentarén en su proceso de crecimiento. Pero poco nos preocupamos de racionalizar esa informacién, que, en e! fondo, debiera ser una fransmisién de experiencias més que de datos tedricos. Por lo tanto, lo primero que quiero dejar claro es que en este libro no habré teorias psicolégicas; si un compartir experiencias acerca de la preadoles- cencia, adolescencia y adultez joven, que tienen que ver con investigaciones que he realizado en cada una de esas etapas, a través del contacto perma- nente con jévenes a lo largo de Chile y en el extran- jero, con didlogos con sus padres y familias. Asi se han ido desplegando una serie de reflexiones, de miradas, acerca de dénde hay que colocar mayor énfasis en las distintas edades que los adolescentes van pasando. Por ofre lado, creo que es importante mencionar que de acuerdo con la mayoria de los estudios psi- colégicos, incluyendo los mios, todo parece estar corride en dos aiios como promedio; por lo tonto, lo que antes se vivia a los once, hoy dia se vive a los nueve, y asi sucesivomente. Esto hace que para los padres sea més complicada la tarea de la edu- cacién, porque mucho antes de lo que esperaban ‘empiezan a ver en sus hijos conductas y reacciones a NO QUIERO CRECER B Pitar SoRDo pora las que no estén preparados. Tedavia espe- ran @ un nifio de nueve afios relativamente regalén, més casero, con menos necesidad de autonomia, por ejemplo, pero se encuentran con que a los nue- ve afios ~como lo vamos a ver en el capitulo de esa edad- los niffos ya estén en una busqueda de conocimiento de sus propios cambios, de su propio cuerpo, de sus emociones, lo que comienza a gene- rar ciertos dificultades en lo comunicacién con los adultos, ya sean sus padres, profesores © cualquier simbolo de outoridad. Entonces es relevanie establecer que, si bien todo se onticips dos affos, lo que voy @ fratar de reflejar en el libro es el cémo estaria funcionande hey una parte de los adolescentes. Intentoré mostrar tenden- cias, no generalizaciones; tempoco pretendo sacar conclusiones categéricas acerca de! tema. Es sim- plemente una invitacién a reflexionar sobre <émo los padres estin manejande y a veces mal mane- jando el crecimiento de sus hijos, y como éstos se estén aprovechando de este contexto en las distintas etopas que viven, Por otro lado, también es una invitacién a los adolescentes a que se miren a si mismos, ¢ que se vean fotografiades en el cémo funcionan y quizés, sélo quizés, puedan cambiar desde ellos mismos, sin que seon presionados por sus padres. Lo que pretendo es que los jévenes, en forma auténoma, sean capaces de tomar el libro y decir: “Esto a mi me pasa, y si me pasa, écémo lo oriento?, zedmo lo cambio?", y desde alli generar la conversacién con los padres. Por supuesto que también podria ser al revés, pero quiero que sea un libro pore ellos, porque en general no hay libros escritos para los adolescentes en mi pais. Los hacen leer @ Io largo del colegio, pero libros que les muestren lo que ellos, estén viviendo no hay précticamente. No quiero crecer deberia generar discusiones, conversaciones y, por qué no decirlo, discrepancias entre los jévenes y sus podres 0 respecto de los con- tenidos del libro, pero lo importante es que origine el debate para iniciar los procesos de crecimiento que todos necesifamos y que son fundamentales en una sociedad en le que esté todo fon desordenado, donde hay un exceso de informacién, donde cual- quiera puede obtener lo que quiera a través de In- fernet y no necesoriamente bien encauzado. Donde la formacién valérica ha dejado de ser importante an ER NO QUIERO CRECK

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