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i [16/7 i fe A A [4 EN eae Bde sclcericee pe te Nc: PEL I REICH EN ~ ass PERFILES RITA HAYWORTH O EL PRECIO PARA SER ESTRELLA EN HOLLYWOOD ‘ GOLDEN yf (ef fe ae le ug/puente PP ees \\Trazos de la Hist El Africa Korps, la Guerra de Crimea, la Divisién Azul. Una apasionante coleccién escrita y dirigida por Carlos Canales y Miguel del Rey donde se abordan los tiempos y acontecimientos que la Historia ha sefialado como «grandes momentos» y que han tenido lugar durante los ultimos siglos. Grupo Edaf - Jorge Juan 68, 1 - 28009 Madrid - Tel. 91 435 8260 - www.edafnet- edaf@edaf.net, HISTORIA — DATION SOV) EL OTRO REINADO DE FELIPE II Circe eases ARTICULOS Leénidas El valor suicida del rey de Espar- taante os persas en la batalla de las Termépila blebres de 68! Felipe Il, rey ids leelederts Nocsoo trespe de Mate aot eI fue previamen- EUTOpa. C Load, itoriedor 76! Ciencia an parte hoy dela lista de Patrimonio Mundial de la RICHARD OWEN ELGOLDENGATE Elmitico puente Art Déco de San Francisco cumple 75 ai este mes. lade, perodste, SUMARIO SECCIONES | Anécdotas | Noticias | Correo | Perfiles | Agenda | Libros y cine nazi perfecto, = Uttimas pasiones del caballero Almafiera. Conquistador “The Monuments Men, Terrase sangre “La diosa del amor” nos dejé ha- ce hoy 25 afios. atts pedi, | En imagenes Shakespeare situé su célebre drama en el palacio de Kron: borg, en Dinamarea, Arqueologia “as chicas dela 6 plane, “ame Chang. | Temas clave No son pocostosinterroganes gueatirperduranen | Foto con historia Elpus que ete ao acoge Bro. Chhea] ecara Aq i La arqueologi a servicio del visién es, desde 1991, una dicta: presenta? ‘Armenia anuncié que no partciparia en Euravisin por cuestiones de seguridad. del siglo xx, La evidencia mas flagrante ces la perpetuacién del régimen de Aliyev (reelecto con fraude en 1998 y falleci- do en 2003) en su hijo Ilham, el caso mis ostentoso de nepotismo de todas las antiguas reptiblicas soviéticas. Serd este heredero de un sistema corrup. to el que presida entre sonrisas la sede, este afo, de Eurovisién, mientras mu: cchos de sus gobernados sufren cércel, palizas ycensura por sus ideas, desampa- 10 legal y otros atropellos a los derechos humanos. Aunque esta imagen doble, como el autoritarismo, no resulte nada ‘nuevo en un pais que desde hace tiempo es una democracia en los papeles y una dictadura dindstica en la realidad.« FOROND LAGRANESFINGE Pese a que la descomunal escultura lleva en pie mas de cuatro mil afios, atin son varios los misterios que la rodean. Los expertos buscan pistas para resolverlos. od re CRISTINA GIL PANEQUE, ECIPTOLOGADELAUAM VISTAACTUAL de impresionante Granting «con una dela tes pdms de ia de fon, nel marco excepcional de la necrépolis de Giza, a pocos ki Iometros al sudoeste de El Cai- ro (Egipto), se yergue impo nente la Gran Esfinge. Fue la primera escultura colosal y la més gran- de erigida en el pais del Nilo. La visién de esta criatura fantastica la esfinge con cuerpo de leén y cabeza humana, marcé Ta imaginacion de los antiguos egipcios y de los que les sucedieron. No es de extra ‘Rar que su recuerdo se mantuviera vivo = LEONES POR DOQUIER La plaice de Giza debi de ser un lager ‘muy concurida desde el Reino Nuevo (1550-1070 a. C aprox}. Gracias a su cercania con el palacio de Menfis, fue ‘una zona de recrea en la que los princi pes se entrenaban en el manejo de los {aos y cabalosy practcaban eto al arco. Muy pronto, ademas, la caza de leones, abundantes en los arededores, se conven el deporte real precilect. = MENSAJE AL PRINCIPE. En TBIB Giovanni Cavigla descubrié una estela de granito rosa de 3,60 m de ature entre as patasdelanteras de la Esfinge (a la dcha), anal. Tutmosis V la hizo ergir en el primer af de su reinado coma parte se una pequeracapila Se la conace como “a estela del suefio" pues su texto cuen- ta qué le revelé la Esfinge al adn principe Tras una jomada de caza, ste se durmib.a la sombra del manumenta, que se le apa reciden sues. La Esfinge le prometi el trono de Egipta a cambio de lberarle de las arenas que ya cubian gran pate desu base. Convertido en rey, Tutmasis mandé limpiara y protegeria con un muro de I~ durante milenios. Su genialidad reside en que fue enteramente esculpida en un enorme macizo de caliza. Su debilidad, en lacalidad de la roca que la compone. Pero ni siquiera la Esfinge se salvé del de- clive de la civilizacién que la venerd. A merced de las arenas, pasé desaperci- bida. Su rostro inerte ha intrigado desde la Antigtiedad, y avin hoy la identidad de su constructor sigue siendo un mis- terio. La arqueotogia ha necesitado si- slos para adentrarse en sus secretos. Doble personalidad La construccién de la Esfinge se remonta ala dinastia IV (2600-2487 a.C. aprox.), artifice tambien de las tres pirdmides que la escoltan. La cabeza representa a un rey, reconocido como tal por el patelo real, o nemes, y los restos de la cobra er- guida sobre la frente. Convertido en un ser hibrido, el gobernante adquirfa una dimensién divina que le alejaba de los mortales. Cual leén del desierto, se alza: EL SUENO DE UN FARAON Una estela revela una promesa de la Esfinge al futuro Tutmosis V chile de 8 m de altura. Esta historia, con tints legitmadores, recuerda mucho a re- lato que nos defé su padre Amenofis len cota estela, Siendo ain un joven yheroica principe, Amenofis als con sus caballos por los complejos de Keops y Kefrén, ‘quedé imaresionado por las relquias de su pasado gloroso, Una vez rey, constr youn santuario al nordeste de la Gran Esfinge, donde levant la este, ba en protector de su complejo funera- tio, vigilando el horizonte oriental. Este hecho concede ala Esfinge un simbolis ‘mo solar que por aquella época comen- zaba a despuntar en la religién egipcia. ‘Su imagen se asocié al dios Aker, repre. sentado bajo una doble forma: una esfin ‘ge que guardaba el lugar por donde na- cia el sl y otra que hacfa lo mismo con la entrada occidental al subterréneo. Durante un siglo y medio el cementerio real siguié activo, y luego fue abandona- do, Enla soledad de la planiciela Esfinge cayé en el alvido. Solo mil aos después, durante el Reino Nuevo, los faraones volvieron a percatarse del poder de la imagen, Para entonees, la memoria his- t6rica era demasiado vaga para tiempos tan remotos, la Esfinge pasé a ser vene- rada no como un hombre, sino como una divinidad local, Perdi asi toda relaci6n con su pasado. Seguin algunos autores, fue en ese momento cuando see aiadié una barba divina acorde con su nuevo “ARQUEOLOGIA. status. Los restos de este postizo se hat 's esparcidos por el suelo. -vo nombre era “Horus en el hori Harmachis en griego, Transformada en un dios piadoso, la Es finge era uno de los pocos monumentos accesibles en que contemplar el rostro de tun dios tan de cerca. Pronto se convirtié en un punto de peregrinacién que per- duré hasta época romana. Testimonio de esta devocién popular son las nume- rosas estelas dejadas por particulares cerca de la estatua. Algunas representa. ban ala Esfinge como una gran orejaa Ja que se dirigian las plegarias Herencia faraénica La espectacularidad de la Gran Esfinge contrasta con el mutismo que la rodea. No lleva ninguna inscripcién significa tiva, y ningtin documento posterior reve- la el nombre del faraén que presté su imagen. Para resolver este enigma la ar queologia busca otras pistas. En el mo- mento de su construccién, la necrépolis, de Giza empezaba a tomar forma en un lugar entonces vacio, Habia sido inaugu- rada por el faraén Keops para albergar su complejo funerario, centrado en la Gran Pirdmide. Su hijo Kefrén, que accedié al trono tras el fugaz reinado de su herma- no Djedefra, construys el suyo al lado. La Esfinge era la guinda de un proyecto arquitecténico nuevo y religiosamente osado que encarnaba la capacidad esta tal de gestidn de recursos humanos y materiales. Ambos monarcas tenian los medios para hacerlo. Los metros que la separan de la pirdmide de Keops eran en realidad una zona explotada como can- tera para el yacimiento. Fue un promon- torio estratégicamente situado en el limi- te sur el elegido para tallar la escultura, ELDEBATE SOBRE SI ‘Tradicionalmente se ha considerado que representa a Kefrén, puesto que se alza Justo al lado de la calzada que une su templo bajo con su templo funerario, Sin embargo, la teoria de queeel colaso ya estaba alli antes parece convencer a un gran miimero de especialistas. Esto expli carfa que Kefrén tuviese que desplazar el eje de su rampa hacia el sur para sortear elobstéculo. El arquedlogo aleman Rai- ner Stadelmann ha aportado reciente. ‘mente nuevos criterios, sobre todo de in- dole artistico, para considerarla una obra maestra del reinado de Keops. La forma de la cara, la ausencia de barba postiza 0 TODAVIA SIGUE ABIERTO el tipo de nemes solo se apreciarfan en sus esculturas, y no en las de su hijo. Si Keops la integré como parte de su com- plejo funerario, cuyo nombre era preci- samente “el horizonte de Keaps”, la Es. finge encajaria como encarnacién del Monarca en el horizonte. Pero la falta de pruebas contundentes deja abierto el debate, Por ahora, la primera esfinge real segura data del reinado de Djedefra Con la de Giza, se colé en la iconografia del arte egipcio para no desaparecer. Pifiasy retoques A principios del Reino Nuevo, se realiza ron los primeros trabajos de limpieza y restauracién, a instancias de Tutmosis IV. Para entonces, la erosién habia hecho fuerte mella en el cuerpo. Ello obligaria a futuras intervenciones, especialmente enel siglo via, C. y en época grecorro- ‘mana, Distintos emperadores construye- ron variopintos edificios delante de la es- tatu, como un anfiteatro o una entrada ‘monumental, muy del gusto helenistico, més en la linea de una atraccién turisti- cca que de un lugar de culto. Justamente, debido a este interés por la Esfinge, sor- | ____ameiansa FORO prende que ninguno de los primeros via jeros griegos la mencione. El célebre historiador Herédoto estuvo en Giza ha- cia 440 a, C, Si bien incluyé la pirdmide de Keops en su lista de maravillas del mundo, no asila Gran Esfinge. Ningiin otro autor clasico la cita hasta Plinio el Viejo, en el siglo1d.C. cUnsilencio pact ddo? Para otros, la razén seria que ningu- no se percaté de su existencia por encon- trarse total o parcialmente enterrada, Durante la Edad Media ya solo se veia la cabeza. Los autores drabes la describen con el sobrenombre de Abul’, “padre del terror", recelosos de los poderes del {dolo pagano. Los viajeros del siglo xvut Ja dibujan derrochando imaginacién. In- cluso hay quien dulcifica su imagen al verla como una mujer asociada con los, signos de Virgo y Leo, Pero fue gracias a AISLADA DEL TERRENO CON CAPAS DISTINTAS COMO FUE EN REALIDAD? la expedicién egipcia que Napoleén Bo- naparte dirigié en 1798 que la Esfinge fue redescubierta al mundo. En aquel primer acercamiento cientifico se proce- dié a la ardua tarea de medir la cabeza con la simple ayuda de una plomada, Aut asf, los pintores nos ofrecen sus ver- siones, y algunos no dudaron en dibu- Jarla con rasgos negroides, de acuerdo ‘on una Europa inmersa en el polémico debate sobre las razas. No obstante, fue el misterio de su nariz rota lo que mas intrigé, Para algunos, los causantes de ello fueron los mamelucos que conquis- taron Egipto; para muchos, las balas de cafign de los artilleros de Napoleén. Lo cierto es que en el siglo xrv el historiador abe Makrizi ya menciona la mutilacién del rostro como obra de un acto vandé- lico de un sufliconoclasta en 1378. Unlavado de cara La restauracién dela Esfinge ha supues- to un desaffo. La primera excavacién la emprendié en 1817 el explorador Gio- vanni Battista Caviglia (1770-1845), gracias al financiamiento del cénsul in- slés Henry Salt, El genoves liberé parte del cuerpo y hallé los fragmentos de la barba, hoy expuestos en el Museo Egip- «io de El Cairo y el Museo Briténico de Londres. A élle siguié la desafortunada intervencién de Richard H. Vyse, que utilizé pélvora para abrir la parte trase- ra de la cabeza, En su interior esperaba encontrar alguna cdmara. ‘Auguste Mariette, en 1853, encabez6 los trabajos efectuados con metodologia mo- ddetma, continuados tres decenios después por Gaston Maspero y Emile Brugsch Entre 1925 y 1936 las excavaciones de {Emile Baraize sacaron a la luz el cuerpo Ieonino al completo. El descubrimiento frente al coloso del lamado “templo de la esfinge” aiiadié, si cabe, més confu- sin, pues ain se discute si realmente te- nia una relacién directa con la estatua, Desde 1979 os trabajos de restauracion corren a cargo de la Organizacién de An- tiguedades de Egipto, hoy Consejo Su- premo de Antigiiedades. Bajo la direc cién de Zahi Hawass se efectuaron varios programas de conservacién, no exentos de polémica por el uso abusivo del ce- ‘mento, Las nuevas tecnologias han resul- tado decisivas para analizar la Esfinge Mediante su uso, el Proyecto Esfinge de RCE (Centro Americano de Investiga- cin en Egipto), liderado por Mark Leh- ner, ha trazado un mapa de las distintas capas de la escultura a partir de la cali- dad de su piedra y ha aislado las fases de restauracién, Todo para descubrir los seeretos del mayor simbolo de Egipto. = carhioco Sphine Lor | gardens de Egypte Bross: Fence Kiar 2007 Er rants Trsors des pyrami- des. Vercelic White Star, 2008, En francés Giza Archive Project. En ings LOCOSxDD LA HISTORIA MAS INSOLITA GLORIA DAGANZO, HISTORIADORA ANECDOTARIO Versos para arder EN UNA FRIA TARDE DE INVIERNO, Voltaire (1694-1778) se vio obligado a atender a un poeta novato. EL muchacho le recité todos sus poemas y, al final, le pregunté su opinién. El maestro no se and6 con rodeos en su respuesta: “Sencillamen: te, sihubierais puesto més fuego en vuestros versos o los hubie raistiado la chimenea, no hubiésemos pasado tanto fri” a “TODOS SOMOS MUY IGNORAN- TES. LO QUE OCURRE ES QUE NO TODOS IGNORAMOS LO MISMO.” Albert Einstein (1879-1955), cientifico aleman nacionalizado estadounidense. ALCOHOL 1, MODALES 0 PARECE SER QUE, en el transcurso de una fiesta, Winston neo cu ea oe i ce talmente ala diputada laborista Bessie Braddock (arriba). Esta no dud6 en encararse con el premier briti Paper rcer ener sara lengua, Churchill le contest usted es muy fea, pero.a mi'se me habré pasado mafiana”.m a : 2UNICASTILLO ENCANTADO? Matisse, incomprendido |NAaaARE REE aud eee tot ee ee ee ee ee EN UNA OCASION, UNA SENORA que asistia a una exposi cin de Henri Matisse (1869-1954) recriminé al pintor:‘Dis- ARERR a Ra eb SU ELC RCO OME el mismo que en Nochebuena hundlrs Egeskov en el foso si artista, ya famoso por el uso expresivo del color, le espon- ao AMS sors dié: "Madame, no es una mujer, es un cuadro”. = ers tare eee Sy Pere tats Peet UN PEQUENO GRANIMPERIO eC sh ee rg afios y 170 dias (de 1621 a 1665), el reinado de Felipe IV ener de la casa de Habsburgo y el Seco Felipe V y el de Alfonso Xill one eee eres coer ast que marcé el inicio de la de- eee es Coe eter ans do unos cortesanos califica- ee ee narca’, el escrtorafirmé: “Si, los, pero a la manera de los oe al CRS eae melones, 5 higos, 10 melo- “i cotones, 6 ostras y medio kilo de uva componian el ment del desayuno del emperador romano Clodio Albino (147-197) iEI que se va soy yo! LA REINA ISABEL DE FARNESIO, nacida en Italia en 1692, quiso colocar en puestos estratégicos de la corte espafola a ccompatriotas suyos. De ahi que se quejara a su esposo, Felipe V, natural de Versalles, de que sobraban franceses en palacio. De inmediato, el Monarca mandé que le prepararan su equipa je. La Reina, desconcertada, le pregunté adénde se dirigia. “A Francia, que yo también soy francés”, le contesté el Rey. a CARTAS PARA ESCRIBIR A LA REV a2. | 1% la siguiente direccién: HISTORIA Y VIDA, av. Diagonal, 662-664, 28 planta. 08054 Barcelona (Espafa). CORREO DELLECTOR OPINION m VICTORIA EN LA DERROTA En marzo de 1919, Paul von Lettow-Vorbeck [1vv 529, arti bal regresé a Alemania convertido en un hérve nacional. Du rante la Primera Guerra Mundial sus compatriotas habian seguido sus hazafias en Africa. De ahi que, en el momento triste de la derrota, tuvieran al menos un idolo al que venerar. Ello explica por qué el general tuvo el honor de llevar a cabo el tinico desfile de la vietoria celebrado en Alemania. A lo- ‘mos de un corcel negro y encabezando un grupo formado por 120 soldados germanos de la Schutztruppe, vestidos con sus destrozados uniformes de campafia africanos, Von Lettow-Vorbeck desfild bajo la puerta de Brandenburgo en Berlin, que fue decorada en su honor. Manuel Vilaverde, vse LAS HUELLAS DE MUSSOLINI EN ARAGON ‘Me gustaria afadir un dato mas al articulo “El culto al Duce” [11vv 528} precisando que Aragén estuvo en la Guerra Civil espafiola bajo el poder de legionarios italianos. Las huellas due éstos dejaron en la comunidad siguen presentes en mu: chos lugares en forma de placas,cruces o monuments fune- rarios. Su actuacién militar fue dura, con agresivos ataques aéreos, aunque también prestaron ayuda sanitaria y vitua- lls, Fruto dela convivencia,surgieron noviazgos y matri- ‘monios con évenes aragonesas. Dimas Vaquero Pele, vse-nal m2UN ANIMAL PIROMANO? Sobre las causas del Gran In cendio de Chicago de 1871 [avy 529], existe una ver roseno, que al instante oca- sioné el incendio. La noticia provoed una reaccién xen6- sién pintoresca, Un periodis-foba contra los irlandeses y tadel Chicago Tribune, Mi- se acusé a OLeary de halla chael Ahern, sefialé que el _se en estado de embriaguez, fuego se produjo en el esta- Sin embargo, mds de veinte blo de la inmigrante irlande- _afios después, Ahern reco- sa Catherine O'Leary, cuan- nocié haberse inventado el do ésta ordefaba una vaca. rumor. En 1997, el Ayunta- Al parecer, el animal tiré al miento de Chicago exculpé suelo una limpara de que- a O'Leary. R. Martin, vaemail CONSULTAS = ME GUSTARIA SABER POR QUE DESPUES DE LA UNI: FICACION ITALIANA DEL SIGLO XIX PUSIERON EL NOM- BRE DE ITALIA AL NUEVO ESTADO. Siva Tores, neat Porque ése era el nombre del terrtorio. Segtin Antioco de racusa, historiador griego del siglo va. C., el érmino “Italia” procede de los italos, las tribus que habitaban en el sur de la peninsula. Tres siglos después, la denominacién abarcaba hasta los Alpes. Sicilia y Cerdefia no se incorporarian admi- nistrativamente a Italia hasta el siglo mid. C. Otra teorfa, for- mulada también en la Antigiiedad, apunta a la palabra vitu- lus, ternero, el animal sagrado de los talos, (Arriba, lafontana de‘Trevi, en Roma, capital de Italia,] Frandsco Martner Hoyos LOCOSXDD CARTA DEL MES ‘Mis alla de ser un icono histérico-artistico escocés (de ahi su empleo en la pelicula Harry Potter y la piedra filosofal, 2001), el ajedrez de Lewis [vv 527, arriba] prue- ba, en opinidn de gran n\imero de historiadores, los profundos vinculos entre las cculturas vikingas escandinavas, celta briténicas y europeas. Unidos a través del mar, pueblos de Islandia, Escandinavia, las islas Briténicas, la Bretafa francesa o el norte yoeste de la peninsula ibérica intercambiaron durante siglos algo més que comer- Cio. Los ornamentos presentes en estas piezas, sobre todo en la parte trasera del rey y lareina, muestran una clara mezcla de elementos celtas y vikingos. Elaboradas en Noruega o Islandia en el siglo xu, curiosamente su destino no fue la vecina Esco- tisr08IY vok premiardla prOxima cartadelmes con|adtima novela de Lorenzo Sih, Ninos feroces, de Destino. Enlacarta, de un de diez lineas, debenconstarel nombre completo, lacirecciény Uunteléfone de contacto, Pree} ite cia, donde més tarde se hallaron, sino la ms distante Iranda. Néstor Quintana, vae-nal Rsaura Vilalba, vae-nal Si. Algunos autores han apuntado que la chica més sexy de los dibujos animados en los aiios veinte esta ins pirada en la actriz Mae West, debido al sensualismo de ambas. No obstante, el refe- rente real es la cantante nor- teamericana Helen Kane. Kane, consu cabello rizado y faldas cortas, era el prototi po de las flappers, las chicas modernas de la época. La Paramount la fiché en 1930, y Fleischer Studios, su filial de dibujos animados, creé ese mismo afo a Betty Boop, primero con forma de pert: tay, dos aos después, hu: ‘mana (a la dcha.). Kane de. mandé a Fleischer Studios por apropiacién de imagen, pero la compaiiia movié hi los para demostrar que su personaje podria estar basa- do en otras cantantes. Pese alla evidencia, Kane perdié cel caso, Eva Melis . Margarita Calvo, veal ‘Tras su descubrimiento a perfecta, aunque, en reali- principios del siglo xx, lara dinctividad se puso de moda por el simple hecho de aso ciarse a un avance, Diversas firmas no dudaron en em plear elementos radiactivos en sus productos, como el Doramad, una pasta de que prometia una sonrisa dad, provocaba caries, lagas o tumores. La radiactividad no tardé en revelarse noci: va, Un caso sonado fue el de ben M. Byers, un millonario estadounidense que murié intoxicado por el Radithor, un supuesto medicamento rmilagroso. Gscar Lozano Gracia Javier Milln,vse-nsit EL nfante Felipe Antonio (1747-77) suftia de e traso mental. Cuando su padre dejé el trono de Ni psia y re- ‘poles y ‘ocup6 el espatiol, una junta de médicos dictaminé su incapa- cidad para reinar y le excluyé de la sucesién. Su hermano Carlos se convirtié en el nuevo principe de Asturias, mientras, ltercero en discordia, Fernando, asumfa la Corona napoli- tana. Ambos reinos no podian unirse. Octavie Ribera Lépez Objetivo Birmania eee ed Te ese sche ets Tay tres a) ‘Suscripeiones: 902 122 565 - suseripionesly @prismapublicaciones.com 7) ae DOSSIER ANP ce) @ah py ots) 9)- 102) 32)) LA COLONIA GERMANA 42] UNNIDO DE ESPIAS LA COLONIA Durante la Segunda Guerra Mundial, los alemanes residentes en nuestro pais se vieron dominados por el Reich, al que la Espafia de Franco prestaba su apoyo. EME Cao DOSSIER orria el 25 de marzo de 1943. A eso de las cuatro y media de la tarde, el féretro con el cuerpo del embajador Hans Adolf von Moltke abandonaba la capilla ardiente al son del himno nacional ale- man, Sobre un armén de artilleria, apa- reefa cubierto con la bandera del Tercer Reich y varias coronas de flores, entre las que destacaba la enviada por Hitler. Tres cafionazas marcaron la lenta mar- cha del cortejo fiinebre, en el que figu raba el gobierno en pleno. No en balde, al difunto se le habian otorgado los ho- nores de capitén general con mando en plaza. A pesar del frio y la intermitente lluvia, las principales calles de la capi tal estaban abarrotadas por una acon- gojada multitud que saludaba al paso de la comitiva brazo en alto, mientras los soldados que cubrian la carrera pre: sentaban armas, Més parecia una ciu: dad alemana que una espafiola. ¥, sin embargo, se trataba de Madrid. El embajador briténico, Samuel Hoare, protests por los excesivos honores ren- Gidos al diplomiético alemén. Se le res pondié que lo mismo habria ocurrido de tratarse del propio Hoare. ;Habria sido asi? Es dificil de saber. Para buscar una posible respuesta a tanta parafer- nalia como la que se puso en escena aquel dia en torno a Moltke, debemas bucear en las singulares relaciones his panoalemanas dle aquellos tiempos, Ladécada de los treinta ‘Acomienzos delos fos trenta, la comu: nidad alemana en Espafa rondaba las treinta mil personas, tas el incremento representado por quienes vinieron hu yendo dela Primera Guerra Mundial Los hhabia de todo tipo, pero eran muchos los téenicos y profesionales que prestaban sus servicios en empresas, preferente mente de capital germano, como la fac: toria Siemens Industria Eléctrica,S. A de Comnella de Llobregat (Barcelona) Solian ser admiaclos por sueficaca y st preparacién, aunque se les achacaba un cierto aire de superioridad., Su escasa permeabilidad, as{como su tendencia a frecuentar sus propias asociaciones es: cuelas (cuando no a agruparse en colo- nias, caso de la Electroquimica de Flix, Tarragona), generaba esa imagen. ELFERETRO con osrestos det. A yon Mate, ‘rbsjadorlramen Espana Madi 133, La proclamacién de la Segunda Repii blica espafiola no supuso un cambio de escenario significativo. En lo politico, las relaciones entre ambos estados eran cortectas. Desde el punto de vista eco- ‘némico, resultaban deficitarias para Es- fico, Sin embargo, la legada de Hitler al poder en 1933 s{ comporté cambios en lavida de la comunidad germana. Desde hacia algtin tiempo, as ideas na- cionalsocialistas habjan hecho mela en la colonia. En especial era as{ entre los EN ESPANA, DURANTE LA SEGUNDA REPUBLICA, pafia, que solia exportar materias pri- ‘mas y alimentos a cambio de productos quimicos y manufacturas. En el aparta- do cultural, con el intelectual José Or- tega y Gasset como abanderado, lo ale- man pesaba mucho en determinados ambientes, como el filoséfico y el cienti is jovenes, influidos por la seccién ex- terior del partido nazi, que, a todo esto, estaba prohibido en Espafa. La llegada de Hans Hellermann en 1934 trajo consi {go.un auténtico control politico. Teérico colaborador de agrupaciones profesio- nales alemanas, se encargaria de elimi- jencia mediante el nar cualquier d sentencias de extradicién forzada de los alemanes considerados recaleitrantes, ntencias dictadas porlos lamados “tr ales nacionalsocialistas stallido dela Guerra Civil en 1936 y el casi inmediato apoyo de Hitler a sublevados complicaron la permanen de la colonia alemana en la zona rept blicana, Temiendo por sus vidas y pro piedades, yal amparo de la volverian a sus hogares y ocupaciones 10 aliados de los vencedores, aunque ya un convenio de colaboracién p del afio anterior permitfa un férreo con. trol del partido nazi sobre todos ellos Espafia y la guerra mundial ‘Acabada la Guerra Civil, la der Espafia de Franco mantenia una doble moral, por el , porque la ayuda material as. cendia ala nada desdefiable cifra de 378 millones de marcos. Para los méximos tes espafioles, la Alemania nacio- nalsocialistay la Italia fascista aparecfan smo sus aliados naturales, de la ma forma que Francia e Inglaterra eran vistas como potenciales enemigas. En la primera reunién de la Junta de Defensa 1 [eye wey lida por Franco a finales vya se presentaron operativ« aque para el sur de Francia y el Ma- rruecos francés, y planes para bloquear elestrecho de Gibraltar en caso de gue- 11a, No obstante, al tiempo que Lond [BOE publicaba un decreto por el que i neutralidad a ss vigentes y a los principic recho Publico internacional” Larealidad era muy diferente. Al menos hasta finales de 1943, las autoridad« pai ante das de los briténicas. Al trol de los mares, Londres podia cortar cen cualquier momento las vitales impor taciones de combustible y alime tanto necesitaba Espana a tra de sus navicerts (certifi sar las frecuentes inspecciones buques de guerra bri Tr estaba asegurada, También Franco, que comenzé a esbozar el papel de Espaiia cn el nuevo orden europeo que se ba gestando, un papel que pasaba inde- Jemente por su participacién en la mntienda, Casi todo el mundo enten: 6 que el giro de Espaia, en jui 1940, de la neutralidad a la no belige- rancia (figura no reconoc recho Internacional que permitia cierto apoyo a un bando manteniendo todas las ventajas de un pais neutral) era el paso previo a la guerra La inmediata la de la zona interna: nal de Ténger y el acuartelamiento as en el Protectorado de Ma- rruecos reforzaron esa impre 'MIEMGROS ELA DIVISION AZUL enn partido eftolenre Alemania yEspata, Berlin 1342 ‘costa de las posesion« elnorte de Africa, en un momento para Hitler prevalecia la colaborac con la Francia de Vichy. Por otro, por el precio econémico y militar que supon- dria para el F una Espafia 0 que establecia la en. spafia en guerra cuando se la TODOS ENTENDIERON QUE EL GIRO DE ESPANA ALA NO BELIGERANCIA ERA EL PASO PREVIO ALA GUERRA Mientras grupos de jévenes falan, rian las calles de las principale ibraltar esps crementaron hasta culminar en la entre- ta entre Franco y Hitler en Hend: en octubre de aquel afio. Sin embat lider alemein perderfa el interés en la par pacién espafiola en el conflict. un lado, por Hitler aparcé la cues a mediados de 1941, dela Di ila combatir junto a la Wehr- macht (las Fuerzas Armadas alemanas) cen Ja URSS representé una forma de acallar las continu nes alema: ras de implicacién en la guerra. Si bargo, la postura de Franco tan proclive como el aio anterior. A ssarde las victorias alemanas, la contien- da se adivinaba ahora larga y, tras la entrada en ella de Estados Unidos, in- cierta, aunque todavia no se dudaba del triunfo final del Bje. Convenia nadar y guardar la ropa, lo que equivalia a bus- car complejas explicaciones para algu- nos actos. Como el pretexto dado al em- bajador americano Hayes en 1942 en torno a la actuacién de tropas espaiolas en la URS: nuestro pais no era neutral ena lucha contra el comunismo (de ahi la intervencién en Rusia), pero silo era respecto al conflicto que enfrentaba al Bje con las potencias occidentales... Alemania en Espafia Durante la Guerra Givi, las ayudas eco- nnémicas alemanas se habian canalizado através de varias empresas que acabaron ‘dando forma ala sociedad de cartera So- findus-Rowak, cuya presencia aumenta- ria en los afios posteriores. Su funcién primordial consista en controlar el flujo econdmico entre ambos paises y, en es- pecial, en hacerse con materias primas (hierro vizcaino, mercurio manchego, wolframio gallego..), de las que tan ne- cesitada se hallaba la industria bélica del Reich, Las empresas de Sofindus solian estar presididas por testaferros espafo- les, dado que la legislacién no permitia que el capital extranjero fuese mayorita- rio en las compafifas nacionales. Parte de sufinanciacién corsa a cargo de partdas de metales precioso, algunos de dudoso origen, que llegaban de Alemania Elwolframio, también llamado tungs- teno, es un metal escaso utilizado sobre todo para endurecer el acero, en espe- cial el de los blindajes yel de lo proyec- tiles perforantes, por lo que se convirti6 en estratégico en tiempos de guerra, Siendo Espafa la principal suministra- dora del Reich, sus agentes libraron una verdadera guerra para hacerse con la mayor cantidad posible de él, tanto de forma legal como ilegal. Sus homélogos briténicos persegufan lo mismo, no tan- to por necesidad como para evitar que la produccién cayera en manos germanas Los gobiernos aliados presionaron al es- pafiol para que limitara las exportacio- nes, que nunca cesaron del todo. Los intereses alemanes en nuestro pais no se limitaron a las materias primas. POR CONTROL REMOTO La autoridad nazi a través del Servicio de Control Portuario ‘= EL HOMBRE FUERTE Una de as funcones dela Gestapo era el contol de las colonia alemanas ene ex- ‘ranjero, donde muchas dsidents del ré- simen nazibuscaban refigia La Gestapo contaba con a ayuda de la Section Exte- rior del Patio, que en Espafa no esta- ba resutardo muy efca. Pra enderezar la situacin, en 1936 se puso al frente a Hans Helermann, jefe local del partido nazi en Barcelona (ara, el puerto de la ciudad, a cuya colonia tenia en un puto. ‘= VIGILANDO EL REBANO ‘Su principal instrument fue el Servicio de Control Pertuari (SCP, una organiza- idm destinada a meter en vereda alos salemanes que se mostraban reticentes ante las diectivas de Berlin También se extendieron ala mano de obra. Ya antes de la invasién de la Unién Soviética, el gobierno de Hitler pidi el envio de trabajadores espafoles para cubrir en la industria los puestos de quienes empufiaban las armas. Las au- toridades hispanas lo consideraron co- ‘mo una oportunidad de reducir el des- empleo existente, y se legé aun acuerdo enel verano de 1941. Los periddicos pu- Alfred Engling comandaba el brazoeje- ‘eutor, que contaba con 4 agentes dela Gestapo y un centenar de colaboradores en toda Espana, Recibian su suelo de las empresas en las que tericamente traba Jaan Tas varios avisos, el SP aislaba 2 Ia victim del resto de ls colonia hacindo- le perder su trabajo, y en tia instancia laextraitaba subrepticiamente al Rech, donde sola ser juzgada por actividades antialemanas y encarcelada |= REPATRIADOS POR MAR El medio de transporte habitual fueron los buques de carga alemanes que reca- laban en puertos espariles, de abel nombre del SCP. Sus actuacones se vie~ ‘07 favorecidas por el acuerdo polcial fierado con Esparia en jlo de 1938, blicaron amplias informaciones sobre las condiciones de trabajo y los salarios. Los voluntarios que se inscribian debian comprometerse a enviar la mitad de su ‘némina a sus familias en Espa. La situacién con que se encontraron los cemigrantes, aunque variable en funcién de los patronos, resulté en conjunto peor de lo esperado: deducciones sala- riales, alimentacin insuficiente, aloja- OROND) mientos precarios y dureza en el trato, Todo esto, unido al peligro de los bom- bardeos, hizo que el interés inicial de- cayera, y resulté cada vez mas dificil encontrar voluntarios. La iltima expe- dicién salié de Espafa el 5 de julio de 1943, y los que marcharon a partir de entonees lo hicieron a titulo particular. En total, sumaron unos diez mil, lejos de los entre 50.000 y 100.000 solicita- dos por las autoridades germanas. Legién Céndor, habia permitido estable. cer lazos de profunda amistad que des- pués se revelarian muy titles. La Alemania nacionalsocialista se habia convertido en un referente en muchos Zwolle ate HOLANDA, 5 ees, 4Armhem Breda B0(eleDig-D > z 4 Ms ALEMANIA “gt Hoogstraten % f 82 Og SiMe” Seria Dortmund i polite POaveon J . jermonde 20 @ Nanas 20 FLANDES 9, O-Diest_ 2Disseldort Lite +f “Bruselas' Loraine gSint-teiden ‘ Magtrcht Colonia Valenciennes.» \ghaiteroi >) pétcica Tongro pasche Namur Lisa [Aquisgrin}* Benn Combat + vatonia 2 ae FRANCIA % . een 21200 ee eee Nera. MY suyémburge 9 ln 2 Reims a Lostece bests que fermanpe del protestant exiiron dsbesteris en Patrimonio Mundial de I Unesco estén ‘emplazados en Flandes, a mitad norte se Bélgjca. Estas istituciones sin er: bbarga fueron propias de todo el pas, as coma de las regiones calindantes de Francia , en menoe medida, de Holanda Enestattima nace, ese a que antafio cantaron con la oposiién de la mayorla de herejes. Algunos beaterios se confi guraron con calles convencionales, como los que pueden verse en Malinas 0 Lovai- 1a, Otros, caso de Brujas, consistian en tun gran plaza rodeada de casitas. El primer beaterio del que existe men. cién, en 1230, fue el de Aasche, ciudad alemana colindante con Holanda y Bél gica, antafio conocida también como ‘activo hasta ben enrado el siglo xx en ‘Amsterdam y Breda. En un primer mo- ‘ment, el mavimienta beguial se exten cid con fuerzaa través del Rin po tira cgerménicas, con importante presencia en Colonia y Bases, peo la fueron durarente persequidas por hee Jiay se extinguieron pronto, Aquisgran o como Aix-la-Chapelle. Ré- pidamente, en afios sucesi ron los de Cambrai, Lovaina, Gante, Namur y Valenciennes. La regién de Flandes, gracias a lo bien conservado de su patrimonio y ala designacién de la Unesco, pasea el legado de los beate- ros por el mundo, pero éstos fueron un fenémeno de todo el terrtorio de la ac WANA DECONSTANTINOPLA,condesa de Flandes Cuaiade lots Ris, 1S, tual Bélgica, asi como de las regiones francesas y holandesas colindantes. Las beguinas ylos beaterios estan perfec: tamente enmarcados dentro de un es- ponténeo fervor de disidencia espiritual que recorrié Europa entre los siglos x1 y xin, Por todos los puntos cardinales sur gieron predicadores laicos 0 de los esta tos més bajos del cero, con ideas y estos de vida que retaban a los ejemplarizados y defendidos por las altasjerarquias ecle siisticas. En Roma se llevaron las manos alacabeza, yalgunos de estos mavimien- tos acabaron perseguidos y aniquilados por herejfa: los cétaros son el ejemplo ‘més sangrientamente famoso. Lazona que en un futuro constituiria las provincias del sur de los Paises Bajos era tun campo abonado para la disidencia re ligiosa, El territorio estaba formado por un enrevesado puzle de sefiorios, conda- dos y ducados que, sobre el papel, ren: dian vasallaje al rey de Francia o al em- perador del Sacro Imperio Germénico, aunque ni el uno ni el otro lograron ejer cer demasiado poder efectivo, Un tercio de la poblacién residia en ciudades (una tasa altisima, solo comparable a algunas zonas de Italia), yun elevado porcenta- Je estaba alfabetizada, Ello dio origen a ‘unas urbes con mucha personalidad, fie- ramente independientes, con potentsi- ‘mos sectores textil y comercial. Entre los feligreses de estas tierras ylas dos lejanas sedes arzobispales de las que dependian, Reims y Colonia, no existia demasiada sintonia y, en algunos casos, ni siquiera hhablaban la misma lengua, Que el movimiento religioso popular que acabé prendiendo fuera uno feme- nino, el de las beguinas, se explica por la peculiar demografia de las ciudades de estas tierras, donde residian mas muje- res que hombres, y por unas costumbres que eran mucho més permisivas hacia la iniciativa femenina que las de otros puntos de Europa. Las mujeres aqui po- dian heredar casi en las mismas condi: ciones que sus hermanos y se involucra- banamenudoenlos negocios familiares, Los historiadores de antafo ereian que Ia mayor poblacién urbana femenina respondfa ala elevada mortalidad mas. culina en guerras, disturbios y cruzadas, pero hay los estudiosos defienden que se trataba de una cuestién estructural: las mujeres emigraban del campo a las ciudades en mayor medida que los hom- bres, pues alli tenfan mayores oportuni- dades de trabajo, fuese en la industria textilo en el servicio doméstico. Unrretiroa medias La creacién de un beaterio requeria una sigantesca inversién, un terreno y recur 50s para urbanizarlo, Por ello, muchos contaron con el patrocinio de pudientes CONTABAN PANADE! ELEX VINEDO DEBRUJAS Ce eens famoso entre los visitantes de Flan des, tal vez porque es el que ofrece la Pee eee tafo fue. En las dos puertas de entra eee rer cetera y Brujas. A finales del siglo xv estas tie- rras quedaron agrupadas bajo el ducado de Borgofia, de donde pasarfan a engro- sat los territorios del imperio de Carlos V \Ninguno de estos cambios politicos fre A, CERVECERIA EINCLUSO PEQUENAS GRANJAS Y EXPLOTACIONES AGRICOLAS bolsillos para arrancar. Dos sucesivas condesas de Flandes del siglo xm, Juana y Margarita, fueron las grandes impulso- ras del movimiento, y estén asociadas a la fundacién de beaterios en, como mi- nimo, ocho ciudades, entre ellas Gante 1né el movimiento beguinal, que se ha- ba convertido en parte integral del tej- do social de las ciudades, Se llegaron a contabilizar en un reduc. do territorio -la superficie de Bélgica es comparable ala de Galicia hasta 77 ba: puentes sobre canales (en las pp. 60-61 puede verse uno de estos accesos), el vi- eee et ats eee ee a els Parte de las casitas blancas acogen, des- Par eta dde monjas benedictinas. El resto se alqui- eee See ee co, con el eésped central, donde crecen rrios de beguinas, algun tescos. El de Saint-Chr albergaba a unas mil inquilinas a medi dos del siglo xin, mientras que en el de Sint-Elisabeth de ntabiliza ban mis de seiscientas a finales misma centuria. Elrécord: Malinas, donde habitaban 1.900 beguinas al término Lo de que eran ciud mucho n ies de mujeres es jue una metéfora. Tenfan glesia ocapilla propia y se erigian en pa. dente, atendida por un rroquia ind Ce cee eee Poet een eens Gran Bretafa en la Segunda Guerra Mun- Peete eens rolaé pintando el recinto. El cuadro resul- eee ene ns eee css Dag neC Pane rr ree ¢Por qué hicieron furor los barr guinas? Los historiadores tod: tan construyendo teorfas, pue lun campo muy nuevo, Por su doble con- d y laicas, p un atractivo practi in dot n restringidos ad ¥, por tanto, mas nobles si sucedia, terios, Algunas mujer pendiente una orden 1 a Va 1000 el beaterio en honor a su uso previo, fue tee reer ee eer eet cios actuales son posteriores, la mayoria Pee en aero nse ors Sere ee Set eee ee eens formaban Ia casi totalidad de las 150 be Pee ae cone labor del retiro total del mund ferian la situacién intermedia que les ofrecfan los beaterios: podian salir d¢ ellos durante el dfa y, muy important fo podian abandi ypre vocacién religiosa, el bea gunas huian ¢ se tomaban muy en serio su tatea de proteger a n br que tenian oncertados no deseados. Lo asa la fuga, so- derecho OVERBOOKING BEGUINAL EN GANTE En el momento dlgido de la fundacién de ee ea Perens rosa fuera de Italia después de Paris. En- ean eee ee ee eet eee On) Ce ental ee ac erie (Pequefio Beaterio), y Poortaker. ee eg ee ee CC De tis eae ead pes eee ne eet ri eae ener Cee eC ay Dare re) En su rescate acudié el duque de Arem- peer ers 1 tha eet cro ‘Amandsberg. Este, también conocido con erent ene ere ees Ceara ee oe er eres eet ee atauntek ed rneogético. En 1990, en Sint-Amandsberg, Sai ee es Peer a Ee eee) eee es eee eco Cet hd Bees LUNGRUPO DE BEGUINAS con pers de abranza van actvarelhuets de unbeteiode Gant 150, secuestrador pllado in fraganti fue des. pojado de todas sus posesiones y conde. nado a cien altos de ostracismo. Otras mujeres, sobre todo las de menos recur s0s, consideraban el beaterio como un modo de vida, A través dela institucién podian conseguir trabajo, y en ella te- nfan un lugar protegido donde vivir. En cuanto al extracto social de las begui- nas, las mas pudientes tenian una casa para ellas, ean atendidas por sirvientas NMOMENTO MAS POBRES P) y podian vivir de rentas. Las més pobres trabajaban y compartian domicilio. En momentos de depresién econémica, es tas iltimas podian quedar desempleadas, y para tales circunstancias se creé un fon- do comin conocido popularmente como “la mesa del Santo Espiritu” o “el cofre” Sanidad e industria Cada beaterio tenia sus propias normas y érgano de gobierno. Al frente se situa- ba una Grande Dame, en muchos casos asistida por un consejo, Todos estos cat- 0s eran rotatorios. La desobediencia de las reglas estaba penada con la ex- pulsidn. Aligual que la de las monjas, la vida de las beguinas se regia por la cas- tidad, aunque ello no constituia nece sariamente una situacién vitalicia: era completamente normal que las mulieres religiosae abandonaran la institucién, se casaran y tuvieran hijos. Algunos beaterios mostraban una enorme com- prensién con las inquilinas a las que un desliz habia dejado embarazadas. Se las expulsaba durante un afio, tras el cual, si demostraban buena conducta, eran readmitidas, tanto ellas como su bebé. Ello evitaba que la madre soltera se viera abocada a la prostitucién. Ha- bia algunas excepciones: el retorno se S ECONOMICA, LAS BEGUINAS N RECL RIR AUN FONDO COMUN hacia imposible si se descubria que el padre estaba casado o era un clérigo. Las diferencias sustanciales entre monjas y beguinas radicaban en que éstas podian acumular propiedades, aunque sin hacer ostentacién de ello, yen el hecho de que ‘muchas trabajaban para ganar un sueldo con que pagar su manutencién, Sus s das laborales mds frecuentes eran la en- sefianza, el cuidado de enfermos (tantoa domicilio como en hospitales, que solfan estar cerca de los beaterios) y, sobre todo, el importantisimo sector textil de estas tierras. Las beguinas eran mano de obra vital para algunos procesos de preparado de la materia prima y de acabado de las telas, en muchas ocasiones por debajo del salario que marcaban los gremios, de cu- yajurisdiecién escapaban. No es de extra far que en algunas poblaciones se creara “hina de Anbres répidamente un beaterio nada més insta lrse en ellas la industria textl Las revueltas contra los espafioles, las ‘guerras de Religién y movimientos ico- noclastas que segaron estos dominios desde mediados del siglo xv fueron el primer mazazo contra el movimiento be- LOCOSKDD UNA ALIANZA ANTI GUA eee Re oe ne Ae eR lca} Caen eee terra como contrapeso a una cada vez See See pees ee eee sel castellano Pedro |e Cruel (en su eee et Principe Negro) y los Tras eee Seer etree ees Sey tear apreere ere erences Poet aoe enorme tamafio. Segtin algunas fuentes, se trataba de la Peregrina, la misma que, cuatro siglos més tarde, el actor Richard Burton adquiriria para regalarla a su es- posa Elizabeth Taylor. Entre las labores positivas que realizé el rey consorte figuré el refuerzo de las de- fensas costeras y navales de pais. Le mo- via el interés politico y militar, pues si Inglaterra se convertia en aliada en el cerco contra Francia, la isla debia poder defenderse de potenciales invasiones francesas. Hasta ese momento, Inglate- rra apenas habia desarrollado nuevos galeones, pues no habia abordado atin el MAS PARECIDOS Y SURGIO Atldntico, Sus naves estaban pensadas casi exclusivamente para las cortas tra vesias al continente. Felipe, percibiendo esta debilidad, sugirié a Maria activar Iaconstruccién de modernos galeones adaptados a las turbulentas aguas del mar del Norte. Irénicamente, aos des pués, esta politica naval expansiva se volveria en su contra, Fue la responsable parcial del fracaso de la Gran Armadaen su intento de invadir la isla, asi como de la activa politica de pirateo que desarro- arom los ingleses en el Caribe po en 1489. La princesa Catalin imagen), hija de los Rey Pee ee ponsales, pero Arturo, enfermizo, oe Sere ey Pee ee ena Troe Ee eee Peer eee ea Cuando éste anuléafios después el mati- monio, een eee ese a esta fea accidn contra su tia, ar aa oie Ceo ee eee a Esperando al heredero Entretanto, el objetivo del matrimonio no se cumplia, A pesar de todos los es: fuerzos, Maria no quedaba embarazada ysuestado de salud empeoraba, Era tal su deseo que llegé a creerse en estado, Ciertamente, no menstruaba, su vientre se habia hinchado, sufria mareos y ase- guraba sentir moverse al feto. incluso an- ticipé que el nacimiento tendria lugar en abril de 1555. Estaba tan ansiosa que se pasaba horas sentada en el suelo, con las. rodillas apretadas, para acelerar el part. ‘Asu hermanastra Isabel le hacia calcetar ropita para el futuro bebé. Pero sobrevi- C ERAN LASIMPATIA ENTRE ELLOS no la fecha, el vientre se deshinché y le- 6a desilusién, Algiin fanatico catblico, como el obispo Bonner de Londres, quiso ver en ello un castigo divino por no ser suficientemente dura con los protestan- tes, y ella aumenté la represion, Durante afios se pensé que aquellos em- barazos psicolégicos se debfan a una nnaturaleza histérica, En la actualidad se considera que respondian a procesos tumorales que afectaron a los ovarios 0 alos intestinos, y que estaban acabando Ientamente con su vida. Especialistas oe ee como Antonio Villacorta y Manuel Fer- nandez Alvarez hablan de hidropesta, es decir, de retencién de liquidos, que en el caso del vientre puede estar moti- vada por, entre otras cosas, tumores en elaparato genital femenino. Felipe, por su parte, viendo que el here- dero no llegaba, se sintié protagonistade una farsa. A finales de agosto tuvo que partir de nuevo a Flandes, donde iban a tener lugar una serie de actos con motivo de la abdicacién de su padre, el empera- dor Carlos V. Antes de su marcha pidié a stLesposa que tratase bien a Isabel. Orde- 16 asus ayudantes velar por su cuada e informarle si estallaban rencillas entre las hermanastras. Maria prometié cuidar de Isabel, pero nada més partir Felipe in tenté deshacerse de ella, Quiso enviarlaa Espaiia para que perfeccionara su catoli- smo y, de paso, casarla con el hijo de Felipe, el enfermizo principe don Carls. Le movian tanto los celos personales co. mo los politicos, pues la Reina veia en su hermanastra tanto una rival sentimental ‘como una amenaza politica y religiosa. En cuanto o supo, Felipe se emples a fon- do para disuadir a su esposa. No solo pre- tendia evitar el envio de la joven a pafia, sino también que se a volviese a encerrar en la Torre de Londres. Pero, ‘ademas, luché para que el Parlamento no aprobase un decreto en que se la decla- = UN SECUAZ DE SU PADRE Cuando Felipe fue a casarse aInglate- ra le acompanaba el duque de Alba (aa derecha). Era mayordomo real, y Carlos V habia dejado en sus manos la cxganizacién del viaje y la supervisién ela seguridad de su hijo. El aristécra- ta fue muy eficente, pero enseguida se evidenciaron las diferencias de talante paltice con el Principe, en parte por la ‘iferencia de edad, = DEMASIADO DOGMATICO El duque era un “haleén” partidario del poder real absoluto. No poda aceptar ‘que el ey consorte de Inglaterra estuvie- se sometido por el Parlamento inglés. Elo indignaba profundamente y le hi- 20 chocar, en mas de una ocasién, con el por entonces pragmatico y moderado principe. Tas nueve meses de estancia enel pals el duque fue relamado pore Emperador para luchar en ali ‘= EL CONSEJERO DESOIDO ‘Anos mas tarde, cuando fe relamado por Felipe II como mano de hierro en Flandes, Alba advité el problema que suponia el apoyo de Inglaterra a los re- beldes flamencas. La flotainglesa era raba bastarda, lo que la incapacitaria pa- ra gobernar el dia de manana. Curiosa- ‘mente, Felipe fue quien més velé por el glorioso fururo que esperaba a Isabel. Pe- ro, al margen de sus simpatias, tenia un argumento de peso para hacerlo. La suce- sora inmediata de Maria Tudor si Isabel quedaba al margen era su prima Maria Estuardo, prometida entonces al herede- ro del trono francés. Habia que evitar que Londres y Paris formaran un frente an- tiespafiol. Seguin las crénicas inglesas, Isabel, aun siendo enemiga acérrima de Espafa, siempre estuvo agradecida a Fe- lipe por su apoyo. Se dice que conservaba ensumesilla denoche su retrato yse refe- ria él como “mi hermoso principe”. Eliiltimo encuentro En marzo de 1557 Felipe volvié a ingla- terra, Durante su ausencia su esposa le habia escrito innumerables veces, lle ELHALCON DEL EMPERADOR La tensa relaci6n entre el joven Felipe y el duque de Alba ya un enemigo formidable, y el duque aconsej6 en distintas acasiones alcan- zar acuerdo de paz con inaaterrasi se ‘quer dominar Ia sublevacin en Flan des, Muré aos antes de la empresa de la Gran Armada, Posiblemente el Rey na le hubiese hecho caso, pera él siempre se habia manifestado en con- tra de guerrear contra Isabel vada por la pasidn, rogdndole por su re- sgreso, El contestaba cortésmente adu- ciendo mil y una excusas. Pero ahora debia solicitar su apoyo a Marfa, Se ave- cinaba una dura guerra con Francia e iba a necesitar que le cediera hombres y dinero, aunque los convenios matrimo- niales lo ponian muy dificil, La Reina le esperaba emocionada en Greenwich con sus mejores galas. Cuan- do desembarcé, ella se eché en sus bra. 20s. Durante el viaje a Londres no le sol {6 la mano ni un momento; Felipe tuvo que dejar el caballo y marchar junto a su esposa en litera. Obviamente, volvieron ‘a mantener relaciones, pero el ya rey de Espaita no tenia ninguna esperanza de procrear. Aprovechéndose del amor que despertaba en su mujer, le pidié ayuda, Burlando al Parlamento, ella le dio lo que pudo de su fortuna personal, que no fue mucho, pero un suceso llegé en su auxilio. Apoyado por los galos, Thomas Stafford, noble inglés protestante exilia- do en Francia, desembareé en Scarbo- rough y tomé su castillo, tas lo que se declaré lord protector del rein y llamé ala poblacién a rebelarse. Pocos le siguieron, y las fuerzas de Ma- ria llegaron pronto, le apresaron, le ahorcaron en la Torre de Londres y des- cuartizaron su cuerpo. Se descubrié, ademés, que el rebelde Stafford se ha bia comprometido a entregar a Francia las plazas de Hammes y Guisnes, que estaban en la costa gala, pero que eran de soberania inglesa. Tal implicacién francesa desbloqueé la oposicién del Parlamento y, en junio, Inglaterra de- claré la guerra a Francia. Felipe pudo asi recibir 70,000 florines y 8.000 sol dados, aparte dela flota de guerra in- glesa, Esta iba a dedicarsea atacar las costas galas de Bretafa y Normandia con el fin de distraer al mayor numero. posible de fuereas enemigas FELIPE NECESITABA DE MARIA RECURSOS PARA LAGUERRA, AUNQUE LOS CONVENIOS DE LA BODA LO PONIAN MUY DIFICIL E18 de julio, con su objetivo cumplido, el Rey volvié a Flandes. Maria estaba hhecha un mar de lagrimas. Le despidi¢ en Dover, entre besos y abrazos, hacién- dole prometer que voiverfa pronto. Feli pe asentia con desgana. Ella no dejé de agitar el pafuelo hasta que el barco se perdié en el horizonte. La conmovedora escena dio lugar a una caneién popular inglesa, Gentle Prince of Spain, come, oh, come again, Parece que Henry Purcell, se inspiraria, mas de un siglo después, nla escena y en el tema popular cuan- do compuso ia desgarradora aria de des. pedida de la reina de Cartago, Dido, en su famosa dpera Dido y Eneas, Nunca mis volvieron a verse. Semanas después, por desesperacién o locura, ella le eseribié diciendo que estaba em. barazada. Felipe envié al duque de Fe- ria para que lo confirmase, pero lo que éste le dijo es que la Reina estaba cada > LOCOSKDD dfa més enferma, Solo el liudano le ali- vviaba unos dolores cada vez. mas fuer- tes, Maria, amargada, tinicamente sabia rezar, lorar y enviar diarias cartas de amor al otro lado del estrecho. Unreinado que se desvanece En agosto, Felipe Il habia obtenido un clamoroso éxito en su campafia contra Francia. Habia vencido en la batalla de San Quintin y tomado la ciudad, aecién en la que participaron las tropas ingle- sas que le habia enviado Marfa. Sus bu- ques de guerra también serian decisivos, meses después, para acabar de destro- zar alos franceses en la batalla de Gra- velinas. Sin embargo, los galos tomaron. Calais, plaza inglesa desde hacia siglos, Jo que supuso un duro golpe para Marfa y complicé todavia mas su estado de sa- ud, Inglaterra perdfa la tiltima de sus posesiones en el continente. El Rey, absolutamente desalentado por la esperanza de procrear con Maria, ha- bia perdido todo interés en volver junto aella, Locierto es que ya daba aquel tro no por perdido, consciente de la oposi cidn del Parlamento inglés. Por su parte, la Soberana no hacia més que invocar el nombre de su esposo. Bajo su almohada guardaba las pocas cartas carifiosas que su marido le habia enviado desde Flan- des. También miraba constantemente su retrato suspirando por su regreso. Feli- pe, aun sabiendo de su agonia, no acu- «iba su lecho a consolarla, Eso si, envi6 otra vez al duque de Feria y su confesor, Francisco de Fresneda, para que le roga- ran que designase a su hermana Isabel como sucesora. Ella accedié, pues en su amor ciego por su marido nada podia negarle,e incluso experimenté una leve mejoria por creer que tras aquellos en- viados llegaria Felipe. Todo en vano. El 17 de noviembre de 1558 la Reina moria yFelipe Il dejaba de ser, automaticamen- te, monarca de Inglaterra, Desde luego, habia sondeado a Isabel so- bre la posibilidad de contraer matrimo- nio, Pero ella, apoyada firmemente por ETON SSPRoLAen Sin (stefan recadeepam los protestantes, que querfan recuperar el control, habia rechazado la propuesta con delicadeza, Elsoberano de Espaiia se conformaba con tener a su cufiada en el ttono de Inglaterra, confiando en que se ‘mantendrian las alianzas polticas y mili- tares entre sus reinos. No sospechaba que, poco después, el estallido de la su: blevacién en Flandes yla creciente com- petencia comercial en los océanos irfan envenenando progresivamente las rela- ciones entre las dos Coronas hasta tor- narlas enemigas irreconciliables. = socraria Felipe a bogra defini, Garson linet 2010 i Maria Jess, Mari Tudor. La gran rena desconocide.23lons Fal, 2008, ‘San Quintin. Ms ig: Agu, 2005, “CIENCIA SP LOCOSDD (XOXO éUN VILLANO DE LA CIENCIA? Menospreciar el trabajo de Darwin hizo perder al anatomista britdnico Richard Owen toda la buena fama y poder que habia alcanzado a lo largo de su carrera. ‘MARIO GARCIA BARTUAL, DIVULGADOR CENTIFICO ni ejemplo de que Ia historia la escriben los vencedores lo hallamos en sir Richard (Owen. Durante la mayor par- te de su vida, este brillante anatomista del siglo x1x recibié grandes clogios por parte de los agentes del po- der con quienes tan bien supo congra- ciarse, Hasta que cometié el error de su vida: menospreciar el trabajo de Charles Darwin. La generacién de jévenes na- turalistas que erecié defendiendo la teo- ria del evolucionismo de éste se encar- 6 personalmente de excluir a Owen de la historia tan pronto como algunos de sus miembros aleanzaron la elite cien- tifica. Owen no solo perdi toda su bue- na fama, sino que también se gané la del gran villano de la ciencia Por caminos alternativos Tachado de “vago e insolente” por su profesor de escuela, Owen no fue un es- tudiante destacado. Con 16 afios decidié ser aprendizdel cirujano de Lancaster, su pueblo natal, que le ensefié a practicar autopsias con los cuerpos de los reclusos de una prisién cercana, El joven se inte- resé tanto en el estudio anatémico que tuna vez incluso soborné a un guardia pa- ralllevarse la cabeza de un preso negro yy compararla con otras de distinta raza. Pocos aos después, ingresé en la presti- giosa facultad de Medicina de la Univer- sidad de Edimburgo. Pero las aburridas y ABANDONO MEDICINA POR CULPA DE LAS TRASNOCHADAS CLASES DE ANATOMIA DE ALEXANDER MONROIII a menudo trasnochadas clases de anato- mia de Alexander Monto Il, catedratico por herencia, le llevaron a abandonar la carrera. Opt6 entonces por seguir las en- seanzas privadas de John Barclay, re- conocidas por el Real Colegio de Ciruja- nos de Edimburgo. En solo seis meses de asistencia, Owen se gané la admiracién de su maestro, que le recomend estu- dliar ciruja en la capital briténica. El mu- chacho siguié su consejo, y en 1826 ob- tuvo el diploma del Real Colegio de irujanos de Londres. A John Abernethy, presidente de esta institucién, tampoco le pasé por alto el ingenio de Owen, El fin del hazmerreir En aque! momento, el Colegio de Ciruja- nos era blanco de la prensa sensaciona- lista por su incapacidad para ordenar la cextensa coleccién de especimenes (mas de diez mil) que atesoraba del legenda- rio anatomista John Hunter. La dificul- tad para identificar Ios ejemplares se de- bia a que la mayor parte de los estudios y notas de Hunter se habian perdido. El encargado de realizar ese ingente pro- yecto era el naturalista William Clift. Pa raello solo contaba con la colaboracién desu hijo, William Home Clift. Hasta que Abernethy contraté a Owen. El nuevo asistente se aplicé con tesén en restaurat la coleccién del Museo Hunte- iano, Rodeado de miles de frascos, est diaba cada pieza al detalle y la preparaba ppara su exposicién. No es extrafto que al poco tiempo se ganara la estima de Wi- liam Clift, que le describié como una per- sona “sobria y tranquila”, Durante afios, ambos prepararon extensos catdlogos, abordando los més variados asuntos fi- siol6gicos yanatémicos, mientras William Home Clift se centraba en a coleccién de ‘monstruos y partes con malformaciones. El trabajo museistico permitié a Owen IGEDST WY / 0.0500 Opticas muy distantes LOS RETRATOS DE OWEN SEGUN SU PERCEPCION. Pe TT CaN Pao arl Seen eels tre Poets ee eer ears pintura suya. En estos primeros re- or ee hee Se ened Pere ee ty ‘moda por ese entonces. que dibujan aun pe dado a cultivar Richard Owen impulsé la creacién del Museo de Historia Natural Britanico Ra) Peer et ey de un magnifico Museo de Historia Natural, Pee etoencn ei) Pee eee Cee oe publicar importantes articulo cos sobre anatomia comparada jentifi Una oportunidad en bandeja En 1830 una visita ayudé a Owen a ex. presti wier, el mas o para actu f6- eee ee reer iene cr eee ert sent ae een eee eee Breet ers ett rae El siguiente verano, Owen se desplazé hhasta la capital gala. Alli asistié alas fa- mosas veladas cientificas d fa, e inclu sibados participé en al guna nes anatémicas. Pero lo que mas le impresion6 fue acceder al cta sanctorum de Cuvier, el fastuos Museo de Historia Natural de Paris. Owen se dio cuenta de que tras el éxito del fundador de la anatomia comparada se hallaba aque! museo, el m 1 mundo. No hal nparable en Inglaterra ¢Alcanzaria él tanta fama si vertirse en el Cuvier briténico? jor de st nada entonces. ograba con: cee ered Gree inet enc Ea tang Laidea de Owen era que el museo estuviera Boece e i eaters Un ao después, en 1 tuoso afianz6, indirectamente, ign cientifica. La muerte por accidente de trafico de William Home Clift lo con- virtié en el tinico ayudante de William Clift. En paré numer fue nom: brado catedratico de anatomia compa- rada en el Hospital de San Bartolomé y miembro de la Sociedad Real. Ademés, estreché avin mas sus lazos con Clift al aroline. Owen, que studios, supo mover ‘muy bien los hilos para afianzarse en la ciispide de la comunidad un hecho lue- 1 posi ntifica, See oe! ere ee tuviera tiempo de vistarlo, Con medidas ees ee eae) ee ny Poe ee eee ee ees Peace ete rece Ce ocr do de panees informativos. Un debate candente La anatomfa comparada resultaba una poderosa herramienta para acometer los principales temas de debate: el otigen y extincidn de las especies, la posible inter vencién divina en estos dos procesos y la hipotética existencia de una propiedad intrinseca que propiciara los cambios de las especies a lo largo del tiempo. El esta blishment cientifico prestaba especial atencién a las opiniones de Owen, consi derado ya un anatomista de primera cla se. De ahi, por ejemplo, que se le encar gara estudiar la coleccién de fésiles de ‘mamiferos traida por Darwin abordo del Coe nero) Poet een eee eee ee eee eet eee ret del cientifico preside a escalera delves eee eet eee Terns rniesto para buena parte de la comunidad eet = Cee ee ete Beagle. El naturalista y el anatomista se conocieron a través de Charles Lyell, el gedlogo més influyente de Gran Bretafia. ‘Ambos mantuvieron una buena relacién intelectual y de amistad, pese a sus dife rencias de criterio. Mientras Darwin pro- ponfa que las nuevas especies podian surgir como resultado de una descen- dencia con modificaciones o cambios, (Owen sostenfa una interesante, aunque errénea, alternativa: que las especies po- dan surgir como “monstruos” desde el titero, Es decir, una nueva criatura podia ser resultado de una brusca génesis de- forme, no de un proceso evolutivo. OROND| El lado oscuro de la fama Pero no todo eran éxitos académicos y re- laciones amistosas. A medida que Owen incrementaba su influencia, también lo hacia su circulo de enemigos. Cuando, en 1836, fue nombrado catedratico hunte: riano de Fisiologia y Anatomia Compara- da del Real Colegio de Cirujanos, no tuvo ningtin reparo en prohibir a otro anato- mista, Robert Edmond Grant, diseccionar animales exéticos. Vetaba asila carrera cientifica de uno de los investigadores a los que se habfa enfrentado académica- ‘mente en la Sociedad Zoolégica ‘No seria latltima vez que Owen sacara a relucir su faceta més desagradable. Poco después se ensafiaria con Gideon Man- tell, considerado el mejor investigador LA VISITA DE CHARLES CUVIER A LONDRES LE AYUDO A EXPANDIR SU FORMACION Y, SOBRE TODO, SU PRESTIGIO briténico sobre grandes reptiles extintos, como el {guanodon y el Hylaeosaurus, que él mismo habia descubierto y deseri 10. El paleontélogo pasaba por uno de sus peores momentos personales. Su es: posa le habia abandonado, sufria estrés yeestaba tan ahogado econémicamente ‘que habfa tenido que vender su valiosa coleccidn de fésiles. Fue entonces cuan- do Owen, con quien mantenia una mera relacién de cordialidad, se entrometié en su especialidad. No para pisotearle, sino porque los reptiles le podian servir para refutar las teorias evolucionistas (su gra- do de complejidad era similar al de los animales modernos, pese a haber vivido antes de la edad de los mamiferos). Por si fuera poco, la Asociacién Briténica para el Avance de la Ciencia (en cuyo co. ‘ité se hallaba William Clift) descarté a Mantell para realizar un informe sobre fosiles reptiles en Gran Bretaita, De nada valié que hubiese fascinado ala Sociedad Geoldgica con sus explicaciones sobre el Iguanodon, al que describié como un gi ‘gantesco reptil herbivoro muy parecido a Ia actual iguana. Owen, el escogido, es tudié los reptiles mediante novedosas CIENCIA Genicas de andlisis microseépico. Gra cias a ellas, observ que las secciones de los huesos del Iguanodon se parecian més a las de los mamiferos herbivoros que a las de un reptil. La similitud Iguanodon con las iguanas se circunscri bfa solo ala apariencia de su denticién. Lavenganza se sirve en frio Tras esta estocada, Mantell dio a probar su rival un poco de su medicina, Esta 1 lela discordia fue un pe quefio invertebrado marino fil llamado elemnites, de aspecto algo similar al de los actuales calamares. En 1844, Owen. reeibié la prestigiosa medalla real de la Sociedad Real por su trabajo sobre esta criatura, Pero el estudio no era tan o nal como aparentaba serlo. En él, Owen RECIBIO UN PRESTIGIOSO PREMIO POR UNESTUDIO ENEL QUE SE APROPIO DELOS HALLAZCGOS DE UN AFICIONADO § Belemnoteuthis Owen, que estuvo presente en aquel ac to, no solo ignoré por completo citarlo, sino que ademas rebautizé ala criatura pmo Belemnites 0 ecto qi el molusco extinto habia tenido una con- ora, Un detalle me- nor, pero suficiente para rebatir al mis afamado anatomista briténico, El enfrentamier perior estatus académico, wen hizo todo lo que pudo por refutar iciones cientificas de Mantel n resté importancia de forma pt blica y notoria a sus decisivas contribu. nn paleontologia y geologia. Nisi- deMantell, en 1 dié difamarlo a titulo péstumo. Un obi arma trenu ow noe xD) as tuario publicado en la Literary Gazette recordaba a Mantell como un entusiasta ue carecia de los conocimientos de ana- toma necesarios para una actividad in- vvestigadora profesional, para la que de- bia recurrir a expertos como Cuvier, Clift ‘uOwen, Aunque la resefia no iba firma- da, toda la comunidad cientifica reco- nocié en ella el sello de Owen. Sir Richard Owen estaba en la cima de su prestigio académico. Asesoraba al go- bierno en cuestiones de salud piiblica, habia recibido mas de cien distinciones {incluido su nombramiento como caba- lero), impartia un sinfin de conferencias, era tutor de los hijos de la familia real y la propia reina Victoria le habia regalado luna mansién, Gracias a esos recon: mientos y sus habilidades sociales, con- vencié a los poderes piblicas de la im- portancia de poseer un museo nacional dedicado a la historia natural: el futuro Museo de Historia Natural Briténico. Una caida en picado ‘Todo iba viento en popa hasta que, en 1859, Darwin publicé El origen de las es- pecies. La obra conmocioné al sector cle- THOMAS HENRY HUXLEY, APODADO “EL BULLDOG DE DARWIN’, ATACO CON FEROCIDAD LA POMPOSA FIGURA DE OWEN rical dela elite cientifica, pues su autor descartaba toda intervencién divina en el proceso de surgimiento de nuevas es- pecies. Los altos poderes esperaban tuna respuesta contundente. Pero Owen, que habia flicitado personalmente a Darwin por sus ideas, evité pronunciarse pibli- camente durante mucho tiempo. Alfinal, la presién de la prensa y los agentes del poder le obligaron a menospreciar El ori- gen. Dio de ella que contenia demasia- das conjeturas e hipétesis y que carecia de rigor cientifico. Darwin se sintié pro- fundamente traicionado por quien ahora vvela como a un hipécrita envidioso, Su malestar fue tal que incluso se dice que (Owen fue el tinico cientifico al que el naturalista lleg6 a odiar. | Geancespar rinorcpesntede BiosscescttineninrtohaisS0. Un aguerrido circulo de seguidores pro. tegia a Darwin, Entre ellos, Thomas Henry Huxley, apodado “el bulldog de Darwin". Fiela su sobrenombre, este ex- celente naturalista, con una carrera aca- démica fulgurante a sus espaldas, atacé con ferocidad la pomposa figura de Owen, Logré apartarlo de los consejos de direccién de las principales institu- ciones cientificas y promovié campatias de prensa que lo retrataban como a un anciano de ideas tan anticuadas como los fosites que estudiaba. ‘Tras muchos afios de ejercer un notable poder, Owen no era mas que un simbolo de la vieja escuela que los darwinistas iban a demoler. El “Old Bones’, “Viejos Huesos” ~asi lo bauti26 la revista Vanity Fair no podia competir con jévenes na- turalistas ala vanguardia de su especia- lidad. Lo que Owen habia hecho a Man- tell, Huxley se lo harfa a él. En un golpe final, “el bulldog” se erigié en el nuevo catedrético del Museo Hunteriano del Real Colegio de Cirujanos. "No sé lo que diria nuestro ilustre predecesor", comen- 16 irénicamente a sus amigos. ooo El deserédito cienifico al que Owen esta- baa siendo sometido acabé por recluirlo en abiblioteca desu casa para el resto de sus dias, Cuando muri6, en 1892, los dar- ‘winistas lo excluyeron sisteméticamente de la historia. Cerca de seiscientos tra- bajos cientificos y una vida entregada a Ja investigaci6n cayeron en el olvido, La personalidad de Owen se oscurecié y se condené el trato que habia dado a sus rivales, Una de las estrellas mas brillan- tes del firmamento cientifico se desva- neci6 para siempre. Quizé no fue ni me- Jor ni peor que otros poderosos hombres de ciencia, Pero cometié un error capi- tal: enfrentarse al més grande natura- lista de todos los tiempos. Y eso la histo- ria todavia no se lo ha perdonado. = PARA SABER MAS ‘caoauny, Debora. The Dinosaur Hunters: ‘A True Story of Scientific Rivalry And the Discovery ofthe Prehstorie World. Loo ees: Fourth State, 2000. En inal NTEDE ORO El Golden Gate de San Francisco, una obra considerada imposible en su momento y gran representante del Art Déco, cumple 75 afios este mes. RAFAEL BLADE, PERIODISTA ELCOLDEN GATE artesde concise. Fotos: olen (Gate Bride, Hiohway and ersportaton District. principios del siglo xx, San Francisco se habia quedado atrapada entre las aguas que la rodean casi por completo. La ciudad peninsular depen- dia del ferry para las comunicaciones con las localidades vecinas, hasta el punto de que su Ferry Building, con hasta 50,000 pasajeros al dia, era el segundo nudo de transporte més transitado del planeta, tras la londinense estacién de ferrocarril de Charing Cross. El problema surgié después de la Primera Guerra Mundial, cuando cada vez mas usuarios empeza. rona subir alos barcos a bordo de sus ve hiculos. Un trayecto de treinta minutos se convertia en una pesadilla de tres horas por culpa de las larguisimas colas para embarcar y desembarcar automéviles. ‘Sumamente conflictivas eran las conexio- nes entre la ciudad y el condado de Ma- rin, situado inmediatamente al norte y lugar favorito de los sanfrasciscanos para segundas residencias y excursiones de fin de semana, Era una travesia de solo dos kilémetros de distancia, pero los viernes y domingos parecia que fueran doscientos. ‘Trazar un puente es la primera solucién, ue le viene a uno ala cabeza. No era tan seneillo, La franja maritima que separa San Francisco del condado de Marin es la Golden Gate, la Puerta de Oro, Tras tan bonito nombre se esconden unas de las aguas més temperamentales del globo: areas salvajes, vientos huracanados ‘opacos bancos de niebla. ,Qué puente podia levantarse y subsistir en aquellas condiciones? El Golden Gate Bridge, que cumple este mes de mayo 75 afios, hizo realidad lo que hasta entonces habia sido “un salvaje vuelo de la imaginacién’, en palabras de uno de sus creadores. Un proyecto casi personal Erigir un puente a través de la Golden Ga- te se consideraba una idea de locos. De hecho, uno de los primeros en proponer- la, amediados del siglo xx, fue un singu- larempresario arruinado llamado Joshua Norton que se autoproclamé Norton I, “emperador de estos Estados Unidos y protector de México". La idea floté ala deriva hasta que, inmediatamente des- pués de la Gran Guerra, los atascos de trficooblgaron a tomirsela en serio. La ciudad sonded a varios expertos. que ofecié mejores perspectivas fue Joseph Strauss, un ingeniero de Chicago. Estaba convencido de que el puente era posible y lo convinié ene reo desu carrera. Se embarod en una gigantesca campaiia de promocién y se subié a incontables es- Cenarios para explicar las bondades de aquella construccin para I economia dela zona En 1923, el proyecto rec el espaldarazo de varios entes locales Elego napoleénico de Strauss, que no te- ‘nia muy clara a diferencia entre obra pi blica y gloria privada, levantaba ampo- llas, pero su entusiasmo mesidnico fue fundamental para atravesar los siguien- tes diez afios de escollos. Tuvo que con- vencer al Departamento de Guerra de que la estructura, en caso de ser bom- bardeada por el enemigo, no colapsaria cl importantisimo puerto de San Fran- cisco, Tuvo que demostrar a los ecolo- gistas -una novedosa oposicién por en- tonces- que el impacto ambiental seria minimo, Tuvo que sortear a mil y un grupos de presién, incluidas las compa- fhias de ferry, cuyo negocio caeria en pi cado si se construfa el puente. Y, sobre todo, tuvo que afrontar el cierre del gri- fo del dinero. Dos veces. El primer corte egé con el Grac del 29, El segundo, ‘cuando los fondos federales para obras {que creasen empleo durante la Gran De- presidn se los llevé un proyecto rival, el puente de San Francisco a Oakland. La enorme persistencia de Strauss consi- {guié, por fin, el dinero necesario. LAREDDE SECURIDAD impaled por Joseph Seaus abajo} costs 130.000 dere. Desde finales dels. xix, con el neogético puente de Brooklyn, EE UU vivia una his toria de amor con los puentes suspend dos, estructuras basadas en el equilibrio de gruesos cables tirando en direcciones ‘opuestas. Por todo el pais se alzaban los dde mayor luz (como se denomina la lon- gitud entre dos apoyos) del planeta, con el George Washington de Nueva Jersey (2,067 m) en cabeza desde su inaugura. cidn en 1931. El Golden Gate iba a ser la guinda de esta tradicidn. No solo seria el més largo (1.280 m de luz, no superado hasta 1964 por el Verrazano-Narrows de Nueva York), sino el ejemplo supremo de emo la intervencién del hombre po- dia realzar un ya de por si magnifico pai saje: la bahia de San Francisco. Aquello eran complicadisimas formulas matematicas hechas arte, Diez.voliime. nes de clculos slides, en su mayorfa, de lamente de Charles Elis, un genio al que muchos consideran el verdadero padre STRAUSS, COMO HABIL INGENIERO JEFE QUE ERA, EN LOS MEJO EN CADA DISCIPLINA del Golden Gate, pese a que su nombre no figura en la placa que acreditaa los méximos responsables. ‘Tras haberse pa sado tres fos en un universo paralelo de complejsimas ecuaciones, Strauss e dio unas vacaciones que aproveché para des pedi. La razén alegada: el genio era proclive alos rtrasos. El motivo real que ‘muchos sospechan: Strauss temia quedar ensombrecido por el talento de Elis Strauss, como hibil ingeniero jefe, habia rastreado, contratado y delegado en los mejores. Irving Morrow, por ejemplo, fue el encargado de que el puente seal ONeeD AUTOMBVILES cranial olden Gate Bridge ‘la desuinauguracnel27demayode zara no solo como una prodigiosa obra de ingenierfa, sino también como una Joya del Art Déco. Suyas fueron las dos torres horadadas y, al estilo del Chrysler Building de Nueva York, de grosor decre- ciente con la altura: son el elemento cla ve para que el gigantesco armazén tenga tun aspecto de inusual ligereza, Tarea de superhombres La construccién del puente, que se pro- longé de enero de 1933 a mayo de 1937, fue como una pelicula de Frank Capra: una historia de autosuperacién en un pais, sumido en la Gran Depresién. El acero se fabricaba en plantas de la costa este, des- de las que se transportaba en tren hasta Filadelfia, Aqui se embarcaba rumbo a San Francisco a través det canal de Pana- mé. Los trabajadores in situ afrontaron. tareas herciileas. Desde los submarinis- tas, que se jugaban la vida en unas frias aguas oscuras permanentemente revuel- tas, hasta los obreros que, cual trapecis- tas, se suspendian hasta 230 m sobre el agua en la cispide de las torres, Circulaba por entonces una regla no es- crita sobre la construccién de infraes- tructuras: por cada millén de délares in vertido se perdia una vida humana en accidente, Strauss se tomé muy en serio ‘no cumplitla estadistia, yno solo por ra- zones altruistas: cuanto mas seguros se sintieran los trabaiadores, mayor seria su productividad. El Golden Gate Bridge fue tuna de las primeras obras en insttuir el uso de easco obligatorio, los lunes por la ‘mafiana se repartia zumo de chucrut (col agria) paramitigar posibles resacas, alo largo de la estructura se colocé una red que evitara fatales caidas al mar. La cru- da, y presuntamente positiva, cifra final 11 muertos por 35 millones de inversion, El Golden Gate Bridge ha probado con creces su condicién de obra maestra de la ingenieria. E117 de octubre de 1989 resis- ti6 la embestida del terremoto de Loma Prieta (6,9 en laescala de Richter, el de ‘mayor intensidad que ha azotado el lugar desde el infame terremoto de 1906 (7,9). Sin embargo, el puente arrastra una laera desde el principio: es un iman para los que buscan marcharse de este mundo de ‘manera eficiente (pocos sobreviven ala caida de 67 m) y en un marco belisimo. Hasta 2009, unas mil trescientas perso- nas se habian precipitado al vacto desde 41 lo que lo convertia en el primer gar del planeta en mimero de suicidios.w 1, Kevin. Golden Gate, Lond: leams- bury, 2010. En ings GGoden Gate Bridge 75th Anniversary. Enings [STORIES Y VIDA Suscribete con un 12 nGmeros Hwy por solo 29,50 € 72 nGmeros Hv con promoci6n (DvD o libro) por solo 67 € LLAMA AHORA AL ENViANOS UN MAILA con la referencia HYVMAYO lunesa viernes de 9a14 hy de16a18h

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