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LOS SISTEMAS \ .. ECONOMICOS ee Joseph Lajugie INTRODUCCION I. Sistemas, regimenes y estucturas econdmicas lean, indifi 05 sistema y réeimen. para designar el cuadro general en cuyo seno se de Sarrolia la actividad econdmica. Se habla ya de sistema, ya de réginen capitalista, se exaltan o 5e ponen en la picota los sistemas o los regime- _¢@ nes colectivistas: se evoca con emocian o con Segunda ecicién: 1994 desprecio el sistema o el régimen de economia —Segunde edictin--cuaria-ceimoresion: sil de 1999 Segunda eaizien, ieiio de 2001 Asimismo vemos emplear frecueniementa, en un sentido andlogo, el término “estructura” puesto de moda por los autores contempordneos, y to- davia a menudo mal definido. Estructuras capi- talistas 0 colectivistas son, para muchos, sindni« mas de sistemas capitalistas 0 colectivistas, La 1 estructura de la economta, por oposicién a la co- yuntura, designaria, a juicio de algunos, el siste- ma econdémico mismo Contra estas prdcticas ninguna critica es poca. Se trata de naciones conectadas, si, pero muy diferences, y cutya confusin conduce a asimilay las partes 9 el tado En efecto; de estos tres concepios, el de sistes es e! mds amplio y abarca los otros dos, in entrar en discusiones de escuelas, que nd podrian tener cabida aqui, adoptaremos Ia siguientes definiciones. Janos Aires aimacenamienss an un siscama inlormatico, ni su transmison-en saualquier forma o cor cualquier macio, el Definiremos el sistema econémico como un conjunto coherente de instituciones juridicas y sociales en el seno de las cuales son puestos en préctica para asegurar la realizacidn del equil brio econdmico, ciertos medios técnicos, orga- nizados en funcidn de ciertos méviles dor nantes, En consecuencia, el rérmino sistema_econd- mico abarca, a la vez, [os cuadros jurtdicos (de- recho, ica.y derecho privado) de la actividad econdmica y su cuadro geogréfico, las formas de esta actividad, los procedimientos técnicos utilizados, sus modos de organizacién y, por il- timo, un factor psicalégico, el mévil dominante que anima a los agentes de la produccién, Encontramos, pues, al mismo tiempo, en este andlisis, los elementos del sistema subrayados por el esquema cldsico presentado por Werner Sombart: elemento psicolégico, elemento técni- “ca, elemento politico-social y los componentes mas complejos aislados por los autores contem- poréneos (Walter Eucken, R. Clemens, M. W. ter); cuadros geogréficos, nivel técnico, formas de actividad, régimen politico, régimen econd- mico, tipo de organizacién ideolégica.. El término sistema asi concebido podrd apli- carse a los cuadros més amplias de la actividad econdmica. Se podrd hablar de sistemas de eco- nomia cerrada o de economia de intercambio, © de sistemas capitalistas 0 colectivistas, de los cuales sefalaremos en seguida los caracteres _propios. Esta obra tendrd esencialmente como MWe precisar su s olucién. El régimen econémico no es mds que un ele- mento del sistema. Lo definiremos como el con- junto de reglas legales que, en el seno de un sis- “emia ecoriémico dado, rigen las actividades eco- Tidmicas dé’ los hombres, es decir, sus hechos y ~aéciones en materia de produccién y de cambio. ~ ~~" “Estas reglas pueden tener un doble objeto. Las relaciones de los hombres con los bienes. fe nes plantea el problema de el régimen de los bi “apropiedad. Las relaciones de los hombres entre st: el ré- gimen de las personas plantea el problema de la libertad econémica. —Verémos que el régimen de propiedad priva- da, al que estamos acostumbrados hoy, es una simple categoria histérica respecto del régimen de los bienes. Es el resultado de una lenta evolu- cién y, para algunos, una simple etapa de esa evolucién ———Exeiidos todo juicio de valor -y toda apre= ciacién sobre su legitimidad o sobre su eficacia, Ia propiedad privada no es fa nica base posible de una sociedad econdmica. En otras épocas hubo sociedades que cono- cieron —y algunas conocen incluso en nuestros dias-— regimenes juridicos en los cuales el titu- lar del derecho de propiedad no es el individuo, sino un grupo mds 0 menos extenso. A la propie- dad privada puede oponerse la propiedad co- Téctiva. En lo concerniente al régimen de las perso- nas [as'rélaciones condmicas de los hombres. “enire si plantean tres cuestiones fundamentales: Ta dé la eleccién de la actividad de cada uno, la soa a de las condiciones del ejercicio de esta activi- dad y la de ias relaciones entre empleadores y empleados. ;Serd esa eleccidn libre o limitada? {Serd ese ejercicio libre o reglamentado? ¢Es- tardn esas relaciones determinadas libremente 0 controladas? Aqui radica todo el problema de ta libertad econdmica. A este respecto veremos cémo se ha produci- do una de las evoluciones en espiral, tan frecuen- tes en las instituciones sociales 0 econdmicas, como lo hemos mostrado en otro volumen de esta coleccién, dedicada a las Doctrinas econéimi- cas!, Se partié de regimenes donde no existia ni libertad de eleccidn, ni libertad para el ejercicio “de las profesiones, ni libre discusién de las‘con- __diciones de trabajo, para llegar en_un primer momento, a la situacién opuesta de libertad in- controlada y volver, en nuestros dias, a un régi- men intermedio de libertad reglamentada Esto equivale a decir que un mismo sistema econémico puede ir acompaiado de regimenes econdmicos diferentes, y en este sentido, por ejemplo, se puede hablar de régimen liberal 0 de régimen dirigista en el seno del sistema ca- pitalista. La nocién de estructura econdmica, fina!- mente, estd a mitad de camino entre la de siste- ma y la de régimen. . Designa, para retomar la definicin clasica de F. Perroux, “las proporciones y relaciones que caracterizan aun conjunto econdmico localiza- do en el espacio y en el tiempo", es decir, las particularidades que dan su fisonomia propia @ una unidad econdmica determinada. ’ Conviene subrayar también, con Wageman y Ackerman, que se trata sobre todo de los elemen- 10s caracteristicos que aparecen con wa estabi- liddid relativa'én el conjunto econdmico conside- ado; y, en este sentido, estructura se opone’a covuitura. ert "Eta fiocién de estructura es valida para dades econémicas de diversa magnitud: el ma- irimonio, la empresa, el sector, la nacion, el gru- po internacional 0 supranacional. Lo es también, en un nivel de absiraccion superior, para el sis- tema econdmico. Estos elementos estructurales son sumamen- te complejos y variados: elementos fisicos 0 ge0- graficos (clima, relieve, riqueza del suelo y del subsuelo); elementos demogrdficos (nivel de la poblacion, reparticién por edad, sexo, profesion); elementos morales (creencias, hdbitos mentalés, comportamientos psicoldgicos); elementos inst mucionales (cuadvos politico y juridico; aqui vol- vemos a encontrar el régimen econdmico); ele~ mentos sociales (naturaleza, importancia, acti- vidad de los grupos sociales); elementos econd- micos (proporcion de los factores de produccién, proporcién de las principales actividades, rela« ciones entre las cantidades producidas y las can= tidades consumidas, entre consumo interno y eX portacién, entre sector piiblico y sector privado, entre las diversas formas de @ Vemos asi cémo se relacionan las tres nocio- nes que hemos procurado analizar y disociar. El régimen econdmico no es mds que uno de los elementos caracteristicos de la estructura de una unidad econdmica dada. El sistema econd- ‘mico, por su parte, es, segun la expresién de André Marchal, un conjunto, una combinacion de estructuras diversas, ligadas por relaciones relativamente estables; es “un complejo coheren- te de estructuras” II. Los distintos tipos de sistemas econémicos Se pueden concebir distintos sistemas econd- micos que, de hecho, han funcionado en el curso del tiempo. Se los ha clasificado, ya sea segiin criterias historicos (List, Hildebrand, Biicher, Sombart), ya segtin criterios econdmicos (Wagemar Eucken), ya de acuerdo con la importancia con- cedida a tal o cual elemento juzgado como particu- larmente caracteristico. Dado que nosotros también tenemos que ele- gir, dentro de esos elementos, aquellos que nos parezcan mds especificos, tomaremos como pun- to de partida la definicién antes propuesta: “El sistema econdmico es un conjunto coherente de stituciones juridicas y sociales en el seno de las cuales son puestos en prdctica, para asegu- rar la realizacién del equilibrio econdmico, cier- 10s medios téenicos, organizados en funcién de ciertos méviles dominantes Por tanto, para no salir de lo esencial, carac- térizariamos el sistema econdmico mds 0 menos Zomo Sombart, por los cuadros juridicos y so- ciales, los mediés téenicos y los méviles de la “actividad econdmica, es decir, de una actividad destinada a asegurar el equilibrio entre la pro- nire los bienes y las ne- aiecIon ¥ él consumo, cesidades’ ~ Y, baséndonos en esta idea central de_equili- brio econdmico, nos esforzaremos por clasificar “los distintos tipos de sistemas, ya que todos tie- nen como fundamento una cierta concepeién de ese equilibrio y como objetivo tiltimo, su rea- lizacién. Esto nos lleva a una divisién dicotémica muy simple. O bien este equilibrio es buscado en el seno de un grupo cerrado (familia, dominio rural), don- de les productores tratan-sélo-de-asegurarta-sa~ tisfaccién de sus propias necesidades produ- ciendo todo lo que le es necesario sin preocupar- se por vender los productos de su fabricacion ni por comprar otros (es la concepcién de la eco- nomia de necesidad, que corresponde a siste- mas de economia cerrada ) O bien, por el contrario, se procura la adapia- cién de la produccién a las necesidades en el cuadro de toda la sociedad. En este caso los pro- ductores se especializan en ciertas actividades. No.fabrican mds que una categoria 0, a lo sumo, algunas categorias de productos, pero, como con- trapartida, fabrican mds ejemplares de los que * 2 ellos mismos pueden utilizar. Con el excedente de esa produccién personal, se procuran los otros objetos que necesitan. Estamos aqui frente a los sistemas de economia de intercambio, entre los cuales, po otra parte, es necesario hacer una distinct6n, segiin el modo de adaptacién prac- ticada. En efecto, si en la economia cerrada la adap- tacion de la produccién a las necesidades no pue- de hacerse mds que por via de autoridad (el jefs de ta familia o-el sefior del dominio interpreta soberanamente las necesidades del grupo, desig- na qué bienes han de producirse y atribuye a cada uno Su tarea), en la economia de intercambio el problema es mds complejo y puede ser soluciona- do de dos maneras. En un primer caso, las necesidades pueden ser expresadas en el mercado en forma de una cieria ~-demanda que, por su presién-sobre-ios precios, orienta la oferta, es decir, el esfuerzo de los pro. ductores: es el mecanismo de la economia de mercado capitalista, En un segundo caso, las necesidades de la co- lectividad son estimadas por una autoridad cen- tral que establece entre ellas una cierta jerar- quia y decide qué bienes han de producirse: es el mecanismo de la economia planificada colecti- Vista, inecanismo bastante similar en el fondo al de la economia doméstica, pero que funciona en una escala completamente distinta 2Es necesario precisar que, en la prictica, es- fos sistemas existen rara vez en estado puro yque no se suceden en forma brusca? Todo sistema concreto comporta elementos de épocas y tipos diversos que son, ya super- vivencias del sistema anterior, ya anuncios del 14 | | i | siguiente. El pasaje de la economia cerrada a le economia de intercambio no se realizé de golpe sino por la lenta transicién de la economéa art. sanal, de la que subsisten atin importantes vesti- gios en los paises mds evolucionados. Por eso dedicaremos la primera parte de esta obra al estudio de esa evolucién progresiva de la economia cerrada a la economia de intercambio. La segunda y tercera parte estardn dedicadas respectivamente a las dos formas de economia de intercambio: economia de mercado capitalis- 'a y economia planificada colectivista, sin que este orden implique una jerarquia de valores, ni la afirmacién de una sucesién irreversible que, como veremos, no es de ninguna manera una con. clusién permitida por la historia i i | & PRIMERA PARTE DE LA ECONOMIA CERRADA ALA ECONOMIA DE INTERCAMBIO La economia del mercado capitalista En el estadio primitivo de las sociedades y durante un largo perfodo de su evoluci6n, la acti- vidad econémica es muy reducida porque sdlo es tina actividad de produccién sin intercambios. ~ Cada ciial provee’a sus necesidades (alimen- tacién, vestido, alojamiento) produciendo todo lo que necesita y solamente eso. Esta situacién co- rresponde, como es facil concebir, a un grado de civilizacién poco evolucionado, que comporta,_ jiecesidades escasas y una técnica radimentaria. ‘A medida que se desarrollan paralelamente las necesidades y la civilizacién, la actividad eco- hémica se intensifica, se diversifica y hace sal- tar, poco a poco, los cuadros geogréficos estre- chos en cuyo seno se desarrollaba en un princi- pio. Se pasa de la economia doméstica a la eco- nomfa sefiorial y a la economia urbana, etapas_ que corresponden, respectivamente, al predomi- nnio de la actividad pastoril, agricola y artesanal “En esta ultima etapa, por otra parte, la econo- mia de necesidad tiende, cada vez més, a dar lu- Gar a uria economfa de intercambio que florecer4 después de los largos, siglos de gestaci6n de la Edad Media. : : ( Si 17 Este esquema general de evolucién correspon- Ge al registrado con variantes, en todos los af S28 de Europa.occidental, Nunca se insistird ie: uiasiado, sin embargo, en el hecho de qute esta Sucesi6n no es lineal, regular y continua, Ha side cortada por numerosas altemancias, por antici Bactones que quedaron sin confirmacién inme. diata, pero también por retomos temporatios Giemplo, el retomo de Europa occidental, ate pe Sigles Vy Viti, a una economia de necesida, ne uy cerrada, cuando ya el mundo antigua ee oe una economia de intercambio CAPITULOT LA ECONOMIA DOMESTICA PASTORIL La economia doméstica pastoril es la de lag sociedades primitivas. Dado su cardcter tan fragmentario e inorgdnico, hablar en este caso de sistema econémico constituye casi un abuso. Us acne acaseanatecnnsoncdene I. Los cuadros geogrdjicos y socialeg ~———~F baunidad-econémica. La céluta de la ac vidadeconmica es la familia. La adaptacién de ‘la produccién a las necesidades de los miembros” del grupo se realiza bajo la autoridad del padre de familia, en el marco de la unidad familiar. Para tener una idea exacta del sistema, no hay que olvidar que la familia antigua (genos aqueo, gens romana) constituye un grupo més amplio que !a familia moderna, Comprende, en general, a todas las personas que descienden de un mis« mo antepasado comtin alin en vida; y se acreciens_ ta, ademés, por la poligamia y Ia esclavitud, 2. La divisién del trabajo. El padre de fami- lia distribuye autoritariamente las tareas y Log productos entre los miembros del grupo familiar, Es €] quien asigna a cada uno su tarea en funcién del sexo, de la edad, de la fuerza fisica, de la aptitudes naturales; él fija los objetivos de la pr duccién y reparte los productos obtenidos, cot forme con las necesidades de cada uno. Por otra parte, las tradiciones, las creencias Teligiosas 0 magicas desempefian todavia un pa- pel preponderante en la organizacién de la pro- ducci6n y el consumo. La actividad econémi- ca no es siempre el resultado de un célculo re- flexivo. IL Las formas de la actividad econdmica Esta actividad es muy escasa, muy rudimenta- May se desarrollaré muy lentamente. La ganade. s durante mucho tiempo su tinica forma, ¥ Seguird siendo predominante incluso cuando ia familia comience a dedicarse a otras actividades 1. Ganaderia y cultivo. Numerosos historie- dores y sociélogos estiman, de acuerdo con un esquema muy simplista y cayo valor cientifico debe ser tomado con reserva, que los pueblos Primitivos han pasado por tres fases sucesivas, La recoleccién. En un principio viven funda- mentalmente de los recursos que la naturaleza les ofrece en forma espontanea. Es la etapa de la re- coleccién de los frutos naturales de la pesca, de la caza de animales salvajes. La ganaderta. Un primer progreso consistird en no contentarse para su alimentacion con ani males que crecen y se multiplican libremente, sino én seleccionar las especies més interesantes, do- mesticarlas y criarlas en forma racional, La ganaderfa constituiré durante largo tiempo !a Unica actividad productiva de los pueblos pri- nitivos; lo es atin en las tribus némades La agricultura. Se dara un paso més adelante, indo el hombre trate de reemplazar los frutos 20ST RE ER CORAM ofrecidos por una vegetacién esponténea por los productos de un cultivo sistemstico del suelo, se= leccionando ciertas semillas como ha seleccionado ciertas razas animales. Este cultivo es, por otra “parte, muy rudimentario, ya que se trabaja la tie- ra superficialmente, a mano o con instrumentos de madera. 2. Industria. La produccién industrial surge todavia més lentamente y ser4 atin més escasa. Toma Ja forma de una industria artesanal muy pequefia. \. Los aitésanos especializados en ciertos proce- dimientos industriales, aparecen como conse- cuencia de las guerras. La captura de prisioneros revela la diversidad de aptitudes de los pueblos vécinos y son extranjeros quienes se instalan como artesanos, formando asf el primer nucleo de actividad profesional. 3. Comercio, El intercambio no existe durante largo tiempo; se establece dificilmente y permane- ce trabado por ritos y formalidades complicadas. El comercio interior. La primera forma es el intercambio ceremonial entre miembros de la tri- bu. Un individuo le hace a otro un regalo sin pe- dir nada en cambio. Pero la costumbre obliga al beneficiario a aceptarel regelo y a su vez regalar algo de valor equivalente. Estos dones recipro- cos estén separados por un intervalo de tiempo y se hacen con motivo de las fiestas. No consisten en objetos de primera necesidad sino en objetos de lujo, simbolos de poderfo, como las armas, 0 élementos de prestigio, como las alhajas. / consecuet ae » MO Son intercambios de ca rae ente econdmico =r verdad ico que respon a pfeocupaciones utilitarias. Pero no por eso dejan de desempefiar un papel importante en el despertar de la vida econémica, creando una cient, Circulacin de riquezas y acostumbrando a jos hombres a apreciar el yal 0 or relai productos. tivo de los vel El comercio intertribal. Un poco més tarde aparece el comercio mudo entre tribus diferon. tas. Exige un formalismo complicadé debido'a gai ores habituales entre esas tribus son El miembro de la tribu A leva ala zona fron- teriza la mercaderia de la que quiere desprender- se, la coloca y se retira. El miembro de la tribu B- llega enitonces, examina el objeto ofrecido, colo- ca al lado lo que él esta dispuesto a dar en cam bio y también se retira. A vuelve y si la contrao- ferta le conviene la lleva dejando su propia mer- caderfa a B, que s6lo tiene gue ir a retirarla. $i la contraoferta le parece insu iciente, vuelve a Ile- varse 10 suyo 0 deja todo en el mismo estado para que asf el otro comprenda que debe au- mentar la oferta : Este Mecanismo, largo y complicado, traduce una ciefta confianza, puesto que los objetos son dejados temporariamente sin temor al robo, pero. una coftfianza limitada, pues ambas partes evi, tan cuidadosamente el encuentro para que no se despierten sus instintos belicosos. En estas con- diciones —es facil concebirlo— los intercambios son forzosamente muy limitados y no pueden dar lugar a una activa circulacién de riquezas 22 : III. El régimen econdmico 1, Régimen de los bienes. Los autores no es- tan de acuerdo sobre la cuestidn de saber si todas las sociedades han conocido, en determinado momento de su historia, un periodo de propiedad colectiva. El historiador del derecho Sir Henry Maine y el socidlogo belga de Laveleye sostie- nen que si, pero Fustel de Coulanges, por el con- trario, en su hermoso libro La ciudad antigua, 0 Thumwald en L’économie antique, estima que 5 menos seg nada Propiedad colectiva. Sin entrar en esta discu- sién, recordemos aqui los ejemplos de propiedad colectiva conocidos, en ios cuales el titular era yael pueblo, ya la familia, Por otra parte, en ge- neral solo la tierra era propiedad comuirrdet gru= po; los derechos individuales sobre los otros bie- nes variaban segiin los pueblos y sus costumbres Propiedad privada. Sélo con el derecho roma- no se consagraran definitivamente los diversos atributos que forman la propiedad individual derecho de usar los bienes a titulo privado ha sido el primero en admitirse. El derecho de disponer de ellos_entre vivientes, de yenderlos, se consideré durante largo tiempo como anormal. Para vender era necesario cumplir formalidades excepcionales. La mancipatio romana exige la presencia de cinco testigos; la venta in mallo ger- midnica es sdlo posible frente a la asamblea del pueblo. El derecho de disponer por causa de muerte, de transmitir los bienes por herencia, aparece todavia més lentamente. En Roma sé lo desconoce antes de la ley de las XII Tablas. Se la 23 admitiré después, pero con solemnidades extraor- cinarias: es valido tinicamente el testamento he. cho en presencia del pueblo durante los comicio El final de esta evolucién sera la propiedad guiritaria, que comporta derechos casi ilimitados Para su titular: ius fruendi, utendi, abu fendi, és decir, derechos de percibir la renta de los bienes, de usar de ellos, de disponer de ellos en vida y después de muerto p 2. Régimen de las personas, En las econo- mfas antiguas, sino en las sociedades primitivas, eltégimen aplicable a la eleccign y al ejercicio de.las actividades profesionales es, ya un régi- men de coaccién absoluta, de trabajo forzado: la esclavitud, ya un régimen de profesiones cerra- das: el de castas. 4a esclavitud, Bajo el régimen de la esclavi- tud, ciertos individuos son propiedad de otros hombres y estén obligados a trabajar para su dueiie ~En-ta-antigtiedades-el regimen comiente de trabajo, en virtud de la concepcidn segiin Ia cual cl trabajo manual es indigno del hombre libre Es ésta también la concepcién de los filésofos gtiégos? Platén, Arist6teles, Toda la actividad econdmica, la produccién de riquezas agricolas ¢ industriales, era considerada como una tarea inferior, reservada a esclavos, pues los hombres libres, pensadores y guerreros, tenfan que consa- Srarse a las artes y a la defensa de la ciudad. Este régimen desaparece en Europa.con el eris- tanismo, que proclama la igualdad fundamental, de todas las personas y la imposibilidad de que un hombre pretenda tener un derecho de propiedad. + 24 sobre otros, pero subsistiré hasta el siglo XVIIL en algunos terttorios coloniales: ~~" Régimen de castas. En otros paises, sin llegar ala ésclavitud —por ejemplo en el antiguo Egip- to y, en nuestros dfas, en pafses como la India—, el derecho de ejercer tal o cual profesion esté estrictamente reservado a ciertas categorias so- oe aevidad profesional de cada uno est ri- gurosamente determinada por Ja herencia. Bl miembro de una familia ligada a la casta 7 ss bevesoe no puede set sa yup asrar y slo & puede ejercer ese oficio. Por otra parte, oe una jerarqufa muy estricta entre las castas, ag cada profesién es juzgada mas o menos 7 Un régimen tal conduce a una cristalizacién de ln divisién del trabajo, incompatible con | necesidades de una economia progresive. Las profesiones no corresponden a las necesidades, | ————dado-que sus-efectivos dependen tinicamente de Ja tasa de natalidad de la casta, Se adaptan mal a los progresos técnicos por la imposibilidad de crear nuevos oficios cuando los gustos 0 la técni- ca se modifican. | | | CAPITULO IT LA ECONOMIA SENORIAL AGRICOLA En un estadio ulterior de la evolucién de las sociedades, Ia célula de la actividad econémica se ensancha un poco. Ya no ¢s la familia, sino un cuadro mas amplio: el solar feudal. Al mismo tiempo, la actividad contintia diversificandose, a pesar de que la técnica sigue siendo muy rudi- mentaria. Es la fase de la economfa sefiorial 0 solariega, ya aparecida hacia el final del mundo romano, pero caracteristica sobre todo de la alta Edad Media. T Los cuadros geogréjicos y sociales 1. La unidad econémica. La unidad econd- mica esta constituida por el dominio rural, que comprende el solar sefiorial y la regidn Ilana que lo rodea. El ejemplo tipo es la villa carolingia que agrupa el castillo, el villorrio aglomerado a su alrededor por un deseo de proteccién, y a las tierras cultivadas en la periferia. Estas tierras estan divididas en dos partes: la reserva sefiorial, constituida por las tierras mas fértiles, los bosques y las praderas —regién ex- plotada por el personal ligado al castillo—, y las tierras concedidas a los villanos, quienes las cul- tivan por su cuenta a condicién de cumplir obli- gaciones diversas. El conjunto constituye una unidad econ consiguiente no esté especializada en c cultivos. jertos 2. La divisin del trabajo. En esos tiempos la divisi6n del trabajo no tenfa el cardcter uni- camente profesional, técnica, que le damos hoy. Las relaciones entre los miembros del domi- nio son institucionales y no contractuales, politi- cas y no econémicas. E] sefior es un jefe, igual y més que un propietario, y ese carécter marca pro- fundamente e] reparto de las tareas y de los pro- ductos entre los miembros de! dominio. Obligaciones del sefior. El sefior debe asegu- rar al campesino ayuda y proteccién contra los peligros exteriores, el derecho de juntar lefia y de hacer apacentar los animales en la reserva, el uso del homo y del molino comunes. eoseosos Obligaciones del campesino. El campesino,tie- ne Ja obligaci6n de ejecutar para el sefior un cier- to.ntimero de prestaciones-o jornadas-de-trabajo;— de cuidar los vallados y los fosos, de reparar la casa solariega y las dependencias, de acarrear los productos agricolas Hay, en consecuencia, una desigualdad eviden- te, desde el punto de vista econdémico, en las obligaciones recfprocas de ambas partes; des- igualdad debida a que no hay una verdadera se- paracién de los factores de produccién, del capi- y de la mano de obra, puesto que el sefior, propietario de las tierras, es decir del capital, tie- ne también —ya lo veremos— amplios derechos fa persona de los trabajadores. , por otra parte, que se ma- una evolucién cuando los servicios = 2 @ 2 oe @ « « 7 [RENATO MTT {RRM SOE BERETS SI a t yor los campesinos se trans- personales debidos P\ Se ee td en servicios pecuniarios. Poco s taciones en dinero, por derechos ¢ impuesti’ con la depreciacion progresiva de la m carga se aliviaré sensiblemente L scondmica II, Las formas de la actividad eco! dad econémica dominante es la pro- ntercambios siguen sien- Ja produccién industrial La activ guccién agricola, Los in do poco importantes y extremadamente escasa, 1. La agricultura. Conssitaye la principal an bucién de la poblacién durante Targos sigios © Yaalta Edad Media, Se efecite todavia seein une técnica muy primitiva. En el sol sie i 6 valent la carolingia, el surtid alés equivalente de la vi ‘ Ge herramientas casi no existe, los terrones deshacen a mano después de la labranza efectua- dacon un arado de madera. Se rastrilia-arrastran=— f una gran rama por el suelO. watts material de los campesinos es medion cas poco canfortabls, moblajeinsuficen- toy ropas bastas se unen a una alimentaciOn feo: al, z menudo comprometida por las penurias Sebidas a las guerras, que causan estragos cosechas. 2, El comercio. Los intercambios se han Ii brad ya del formalismo de Ie economia primiti via muy reducidos. La econ cipio, es una economéa sin og miembros del bienes ere va; pero son tod: mia seforial, en prin mercado. Las necesidades de | Gominio se satisfacen por el trueque de los C3 ¥ de los servicios obtenidos en su seno. Esta au- tarquia, como dirfamos hoy, se ve reforzada, en ano interno, por la inseguridad debida a las nvasiones, las guerras feudales, los pillajes, Lo serd en el plano internacional, a partir del siglo VIL, por la suspensién de los intercambios ma timos como consecuencia de la expansién del Islam. El Mediterréneo, vinculo que unfa las po- blaciones riberefias, se convierte en un foso que separa Oriente de Occidente. Sin embargo, la economfa cerrada no es nunca absoluta y algunos intercambios subsisten entre dominios, intercambios en los que la moneda desempefia el papel de intermediario y de medi- da de los valores Aunque este sistema de economfa sefiorial es __ sobre todo el de las sociedades medievales, se pueden encontrar hoy algunas supervivencias en los paises subdesarrollados @ incluso en el seno de los paises mas desarrollados. El aduar argeli- no, por ejemplo, funciona exactamente como el dominio feudal. La mayorfa de las necesidades se satisfacen con los recursos de la aldea y los intercambios con el exterior son muy reducidos En el mismo seno de la economfa capitalista, al_ gunos dominios del campo francés hacen frente a la casi totalidad de sus necesidades; la produc- cidn con miras al intercambio es para ellos com- pletamente accesoria, Por tiltimo, aun en las gran- des ciudades se encuentran restos de economia cerrada en el cuadro familiar. La produccién de numerosos objetos y la prestacién de ciertas ser- vicios estén a cargo de las mismas personas que son a la vez consumidores y usuarios (confeccién de ropa, quehaceres domésticos, etcétera). arenas =e RHE SM Hl. El régimen econdmico 1. El régimen de los bienes. En este estadio de la evolucién econémica, la concepcién roma na de la propiedad desaparece provisionalmente para dar lugar a la concepeién feudal En la alta Edad Media, el conjunto de dere- chos personales y exclusivos de los cuales goza- ba el propietario romano se divide entre dos per- sonas: el sefior feudal, que tiene la propiedad eminente, la propiedad stricto sensu, y el vasa- (0, que tiene la propiedad util, la posesién. Propiedad til, En un principio, el vasallo no tiene més que un simple derecho de usufructo, mientras que el sefior es el tinico propietario, El derecho del vasallo-es -vitativio, acaba-con-ta muerte y no es transmisible. Pero poco a poco se transmitira, por causa de muerte, a los descen- dientes en un primer momtento, a los colaterales luego. Mas tarde sera transmisible entre vivien- tes, con el consentimiento del sefior en un princi- pio, sin ese consentimiento posteriormente. Propiedad eminente. El sefior, sin embargo, conserva sobre esa misma tierra derechos impor- tantes, Percibe una suma cada vez que se efecttia una transmisién. Puede eventualmente retomar la posesién si el vasallo comete un acto que rom- pe el vinculo de vasallaje o si muere sin herede= ros y sin haber dispuesto de su bien. Puede tam- bién recuperar la tierra vendida mientras devuel va su precio al comprador. En consecuencia, en el mismo bien coexisten, dos derechos prdximos al derecho de propieda en provecho de dos personas distintas. La noch ‘eee Possess en Francia esta extran dad, habia Perdido desde hacia ti impo mucho d su aleance préctico. : 2. Régimen de 1 las personas, Media, en ma; El régimen do- ujeto hereditariame e luien debe un cierto forutibuciones y de servicios persay ‘©, Prestacién). A diferencia det escla ispone de su sobi ne a la tien nimero de ales (tribu- V0, el sier- Persona y posee ciertos dese. madeun sefior ag CAPITULO IIT LA ECONOMIA URBA vA ARTESANAL, Dos hechos esenciales provocarén a partir de! siglo XI un cambio profundo en la situacién que acabamos de presentar, Uno es de orden interno el despertar de las ciudades; el otro es de orden extemo: las Cruzadas. Estos hechos se traduci- ran en un nuevo ensanchamiento del campo geo- srifico de la actividad econémica, la que, al mis- mo tiempo, se intensificard y diversificard, Se pasard del dominio rural a la ciudad 0 co- muna, y de una economfa casi exclusivamente agraria a una economia de pequefia industria ar- tesanal, que provocard intercambios de cierta importancia 1. Los cuadros geogréficos y sociales 1. La unidad econémica. La célula base de Ja actividad econémica es ahora la ciudad, que deja de ser una simple plaza fuerte para convertirse en un verdadero foco de vida social. Es la época del surgir de las comunas, que desempefiarin en |a historia politica de nuestro pais (Francia) un Papel de primera importancia. Forman un todo con los campos que las rodean, para los cuales son un mercado y de los cuales dependen para abastecerse de alimentos. 2. La divisién del trabajo. De esto resu divisién del ‘abajo mds avanzad | | | | | En primer lugar, entre la ciudad y el campo. Las ciudades se dedican a la industria y al co- mercio, renunciando a toda actividad agricola Esto comporta para ellas la necesidad de com- prar sus productos a los campesinos de los alre- Gedores y de venderles sus productos elaborados. Eneste momento vernos establecerse entre la ciu- dad y el campo relaciones de cardcter contrac- tual, de cardcter econémico. Desaparecen, o al menos se atentian, la jerarquia y la subordina- cién que existfan en el seno del solar sefiorial y gue generaban obligaciones politicas; éstas van a ser reemplazadas por obligaciones convencio- nales nacidas de los contratos de intercambio con- ———-eluidos libremente-y que-tienenen-cuentretva— lor de las prestaciones recfprocas. La fijacién de los precios pasa, entonces, del estadio habitual 0 institucional a la fase econémica. Mas la especializacién no juega sélo entre la ciudad y el campo; también se desarralla entre productores, entre artesanos. Se observa la crea- cién de especialidades profesionales cada vez mas numerosas. Las profesiones van a dividirse en oficios. En el siglo XI habfa todavia pocas profesio- nes diferenciadas. Cada una correspondfa a un Conjunto de actividades que tenfan un mismo ob- Jeto general, un cardcter comtin; por ejemplo, las de los camiceros, de los panaderos, de los fabri- cantes de cuero, de los trabajadores de la made- ra, del metal, de los productos textiles: pero, en los siglos siguientes, cada profesién va a dividir- se al infinito. Desde 1315 existirén en la comuna de Paris no menos de [50 oficios. ae Par ejemplo: la profesién textil, que hasta @ tonces constitufa un todo, se dividird en merel deres de lana, de lino, de céfiamo, en peinadorgl hiladores, tejedotes, tintoreros, esquiladores, sa tres, sombrereros, etc. E] mismo fenémeno manifiesta en las otras industrias: cuero, metal madera. Esto produce evidentemente cambios profuns dos en las condiciones mismas de la actividad econdmica. IL, Las formas de la actividad econdmica La agricultura deja de ser en esta etapa la tini= —ca.actividad._Ocupa todavfa-unlugar-de preemi- nencia pero, a su lado, aparecen actividades in- dustriales y comerciales que estén lejos de ser despreciables, y el crédita empieza a desempe- iar un papel importante. 1. La industria. La industria se desarrolla con la forma artesanal o de pequefia industria a do» micilio. Se caracteriza por la reunién de los face tores de produccién en manos de una misma per= sona, que pone a la vez el capital y el trabajo. En un principio el artesano es un simple obre= ro a domicilio que trabaja las materias primas traf= das por el cliente. Se convertiré pronto en un pro= ductor independiente, que trabajar por su cuen tay venderd sus productos. Las dimensiones de esta explotacién artesa- son todavia muy reducidas. El material e: rudimentario: algunos titiles, ninguna maquin El capital es escaso: el necesario para alquilar u tallercito, para comprar algunos instrumentos tun pequefio stock de materias primas. El perso- nal es muy reducido; el artesano trabaja perso- nalmente con ayuda de su familia y algunos co- laboradores, oficiales y aprendices, cuyo mime- To pasa rara vez de la decena. La produccién artesanal est regida por un es- tatuto especial que reglamenta las condiciones de acceso a las distintas profesiones y las rela- ciones entre empleadores y empleados. Es el régi- men corporativo, que estudiaremos més adelante Esta produccién es de calidad mas que de can- tidad, pues la magnitud de las explotaciones y el estado de la técnica le impiden un desarrollo im- Portante. Bastard, sin embargo, para asegurar la expansi6n del intercambio 2. El comercio. Los intercambios se intensifi- can considerablemente, en el plano local prime- To, en el nacional e internacional después. "Mercato toca. Las tindades sé convierten en focos activos de comercio, en mercados donde los artesanos venden sus produetos y los campe- sings sus mereancias. En un principio, los artesanos no trabajan mas Que para ese mercado local y, a menudo, por en- cargo. Fabrican tinicamente objetos vendidos de antemano 0 que tienen la seguridad de una salida inmediata, Es todavia una economia de necesi- dades locales conocidas. En consecuencia, no se corre el riesgo de saturar el mercado. La produc- cion est4 adaptada al consumo y el equilibria econémico esté asegurado Pero, poco a poco, las‘dimensiones de la em- presa artesanal se agrandardn y el mercado se i extenderd. Se pasard insensiblemente del peque- io establecimiento familiar a un taller que reuni- réun mayor niimero de asalariados. Se dejard de producir en pequefia cantidad y tinicamente para clientes conocidos; se aumentaré el volumen de los negocios y se recurriré a intermediarios que comprarén toda la produccién y la revenderén en otros mercados Mercado nacional e internacional. Es enton- ces cuando comienzan a surgir las grandes ferias de los siglos XII y XIII, reuniones periddicas donde se concentran los compradores venidos a veces desde muy lejos. Corresponden a una eta- pa particular de la evolucién econémica, a una vida econémica bastante desarrollada para ali- mentar una corriente temporaria de transaccio- nes comerciales, pero no Io suficiente como para alimentar un comercio permanente. Las princi- pales-ferias_son_las-de-Champagne_(Troyes, ——— Provins, Bar-sur Aube y Lagny) en el cruce de las rutas de Venecia y Flandes. Duran 48 dias y hasta atraen a mercaderes que Ilegan desde Asia Menor La comodidad de los participantes y la circu- lacién de las mercaderias esta asegurada por una reglamentacion especial. Las transacciones con- sisten en compra y venta de sedas, lanas, cueros y pieles. Dan lugar a una forma de pago original: el pago por compensacién, lejano antepasado de los documentos de pago modernos. Al mismo tiempo se constituyen, sobre todo en los paises nérdicos, poderosas asociaciones de mercaderes, las hansas, algunas de las cuales, como la Hansa flamenca de Londres o la Liga res eg 1 37 AG

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