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Lecturas adicionales Blackham, Harold John, Six Existentialist Thinkers, Routledge, Londres y Nueva York, 1991. Camus, Albert, The Outsider (The Stranger), traduccion al inglés de Joseph Laredo, Penguin, Londres, 2000, Cox, Gary, Sartre: A Guide for the Perplexed, Continuum, Londres y Nueva York, 2006. — Sartre and Fiction, Continuum, Londres y Nueva York, 2009, Detmer, David, Freedom as a Value: A Critique of the Ethical Theory of JeanPaul Sartre, Open Court, La Salle (Tllinous), 1986. Earnshaw, Stephen, Existentialism: A Guide for the Perplexed, Continuum, Londres y Nueva York, 2006. Frankl, Viktor E., Man’s Search for Meaning, Rider, Londres, 2004. Index Librorum Prohibitorum (indice de libros prohibidos de la Iglesia catélica) y las obras prohibidas en él de Bacon, Galileo, Descartes, Milton, Pascal, Locke, Voltaire, Hume, Rousseau, Flaubert, Zola, Sartre, ete. Laycock, Stephen, Nothingness and Emptiness: A Buddhist Engagement with the Ontology of Jean-Paul Sartre, SUNY Press, Albany (Nueva York), 2001. Loy, David, Lack and Transcendence: The Problem of Death and Life in Psychotherapy. Existentialism and Buddhism, Prometheus, Nueva York, 2003. Panza, Christopher y Gale, Gregory, Existentialism for Dummies, WileyBlackwell, Oxford, 2008. ‘Warnock, Mary, Existentialism, Oxford University Press, Oxford, 1992 York, 1974. — Thus Spoke Zarathustra, traduccién al inglés de Graham Parkes, Oxford University Press, Oxford, 2005. Platn, The Republic, traduccion al inglés de Desmond Lee, Penguin, Londres, 2003 Sartre, Jean-Paul, The Age of Reason, traduccién al inglés de David Caute, Penguin, Londres, 2001. Véase también Roads to Freedom. —, Being and Nothingness: An Essay on Phenomenological Ontology, traduccién al inglés de Hazel E. Barnes, Routledge, Londres y Nueva York, 2003. The Childhood of a Leader», en Sartre, The Wall, traduccién al inglés de Lloyd Alexander, New Directions, Nueva York, 1988. —, Existentialism and Humanism, traduccién al inglés de Philip Mairet, Methuen, Londres, 1993, — The Family Idiot, 5 vols, traduccién al inglés de Carol Cosman, University of Chicago Press, Chicago, 1981. — In Camera (No Exit or Behind Closed Doors), traduccién al inglés de Stuart Gilbert, en In Camera and Other Plays, Penguin, Harmondsworth, 1990. — Nausea, traduccién al inglés de Robert Baldick, Penguin, Londres, 2000. — Roads to Freedom, trilogia novelistica compuesta por The Age of Reason, The Reprieve e Iron in the Soul, Penguin, Londres, 2001, 2005 y 2004 respectivamente. — The Transcendence of the Ego. A Sketch for a Phenomenological Description, traduccion al inglés de Andrew Brown, Routledge, Londres y Nueva York, 2004. — Truth and Existence, traduccion al inglés de Adrian van den Hoven, University of Chicago Press, Chicago, 1995. —, War Diaries: Notebooks from a Phoney War, 1939-1940, traduccién al inglés de Quintin Hoare, Verso, Londres, 2000. van Deurzen-Smith, Emmy, Existential Counselling and Psychotherapy in Practice, Sage, Thousand Oaks (California), 2002. Bibliografia Allen, Woody, Side Effects, Ballantine, Nueva York, 1991 Belkin, Gary S., Introduction to Counselling, W. C. Brown, Dubuque (Iowa), 1988. Camus, Albert, The Myth of Sisyphus, traduccion al inglés de Justin O'Brien, Penguin, Londres, 2006. Cox, Gary, The Sartre Dictionary, Continuum, Londres y Nueva York, 2008. de Beauvoir, Simone, The Ethics of Ambiguity, traduccién al inglés de Bernard Frechtman, Citadel Press, Nueva York, 2000. Dickens, Charles, Bleak House, Penguin, Londres, 2003. Donne, John, «Meditation XVII», en Donne, Selected Poems, Penguin, Londres, 2006. Dostoyevski, Fiddor, Crime and Punishment, traduccién al inglés de David Magarshack, Penguin, Londres, 2007. Flaubert, Gustave, Madame Bovary, traduccion al inglés de Geoffrey Wall, Penguin, Londres, 2003. Golomb, Jacob, «Nietzsche on Authenticity», Philosophy Today, vol. 34, 1990. Heidegger, Martin, Being and Time, traduccion al inglés de John Macquarrie y Edward Robinson, Blackwell, Oxford, 1993 Kierkegaard, Soren, Concluding Unscientific Postscript, waduccidn al inglés de Alastair Hannay, Cambridge University Press, Cambridge, 2009. Laing, Ronald D., The Divided Self: An Existential Study in Sanity and Madness, Penguin, Londres, 1990. McCulloch, Gregory, Using Sartre: An Analytical Introduction to Early Sartrian Themes, Routledge, Londres y Nueva York, 1994. Merleau-Ponty, Maurice, Phenomenology of Perception, traduccién al inglés de Colin Smith, Routledge, Londres y Nueva York, 2002. Murdoch, Iris, Sartre: Romantic Rationalist, Fontana, Londres, 1968. Nietzsche, Friedrich, Beyond Good and Evil: Prelude to a Philosophy of the Future, traduccién al inglés de R. J. Hollingdale, Penguin, Londres, 2003. —, Ecce Homo: How One Becomes What One Is, traduccion al inglés de R. J. Hollingdale, Penguin, Londres, 2004. —, The Gay Science, traduccion al inglés de Walter Kaufmann, Vintage Press, Nueva como algo peligroso o una condicién neurética. En lugar de ello, la angustia se considera una condicion fundamental de la existencia. La tarea del consejero es ayudar al cliente a aceptar la angustia como parte de su ser fundamental» (Introduction to Counselling, p. 113). Aceptar cierto grado de angustia bien puede salvar a una persona de una espiral creciente de ansiedad en la que el hecho de sentirse ansioso le provoca atin mds ansiedad. La meta final de la consejeria existencial es ayudar al cliente a descubrir el sentido de su vida. A primera vista, pareceria una meta extrafa para una forma de orientacion respaldada en una filosofia que sostiene que la vida es basicamente absurda y sin sentido. Pero lo que ha de entenderse es lo que se deriva de esta creencia en el sin sentido esencial de la vida, a saber, que solo las personas pueden darle significado a sus vidas a través de las metas que ellas mismas se fijan, las elecciones que hacen y las acciones que levan a cabo. La consejeria existencial tiene la meta optimista de buscar mostrar al cliente que su vida es un libro por escribir que solo él 0 ella puede escribir. La vida sdlo tiene el sentido que tu elijas darle. que se perpetta a si mismo, el cliente deberia finalmente comprender que, en realidad, no hay por qué tener miedo a las araNas domésticas comunes. sin embargo, si viviera en Austrailia, donde viven varias clases de arafias venenosas, incluida la letal viuda negra, acaso seria mejor que conservara su aracnofobia. Las fobias y las neurosis no siempre son malas, pueden protegernos e inclinarnos en direcciones ttiles. En la misma medida en que el consejero existencial busca poner al cliente en contacto con su propia libertad y capacidad de cambio, intenta reconciliarlo con ciertos hechos basicos de la condicion humana tal y como. los identifica el existencialismo. Por ejemplo, del hecho de que siempre nos encontramos en un proceso de devenir constante se deriva la conclusién de que nunca nos sentiremos completamente satisfechos (ni siquiera gandndonos la loterfa, nadando con los delfines 0 conduciendo un tanque por encima de un autobts). Siempre habré algo mds que desear, algo que sentimos que nos hace falta, porque anhelar lo que no tiene, creer que el césped es mas verde al otro lado de la colina, es fundamental para una criatura que carece de armonia consigo misma en el presente y vive esforzéndose por alcanzar esa armonia en el futuro. La consejeria existencial trabaja desde el supuesto de que las personas pueden ahorrarse asi mismas una gran cantidad de sufrimiento adicional con sdlo entender este hecho, en lugar de continuar pensando que tienen un problema realmente grave por ser incapaces de sentirse felices y satisfechas a tiempo completo. En cierto sentido, la consejeria existencial busca mostrar a las personas que no tienen que aguantarse tal y como son. Por otro lado, busca mostrarnos que el hecho mismo de estar vivos nos plantea a todos los seres humanos ciertas dificultades inevitables. Considera la actitud de la consejeria existencial respecto de la angustia, segin la expone Gary S. Belkin en su libro Introduction to Counselling. Ya hemos visto que, segtin los existencialistas, la angustia o la ansiedad es una caracteristica ineludible del comprender que somos libres. Escribe Belkin: «El consejero existencial, a diferencia del psicoanalista 0 el terapeuta conductista, no ve la angustia cambiar, el consejero existencial busca animarlo a que empiece a formular estrategias de superacion y empoderamiento. En este punto, el orientador puede aconsejar al cliente sobre pautas de conducta que podria adoptar con el fin de obrar cambios positivos en su relacién consigo mismo, el mundo y otras personas. El consejero existencial, Viktor Frankl, nos ofrece el ejemplo de un hombre al que el temor a sudar en presencia de otros lo hacia sudar. Frankl Je animé a elegir una actitud de orgullo por su capacidad de sudar, a decirse cuando se encontraba con personas que desencadenaban su ansiedad: «Antes apenas sudé un litro, jahora voy a sudar por lo menos diez!». Segtin Frankl, esta estrategia le permitié a su paciente liberarse con rapidez de su fobia. En muchos casos, un cliente puede no necesitar el consejo del orientador para desarrollar estrategias. Las estrategias se le ocurrirén como consecuencia de la comprensién del hecho de que es libre, de que un cambio radical es posible, etc. El hecho mismo de que el cliente proponga sus propias estrategias demuestra que esta realizando progresos. La consejeria existencial siempre invita a sus clientes a tomar la iniciativa. Esto no es sorprendente en vista de que su principal objetivo es el empoderamiento personal. Lograr una consciencia intelectual de la propia libertad puede ser, por ejemplo, un primer paso para que el cliente venza su aracnofobia. (El ex presidente estadounidense George W. Bush y el ex primer ministro britanico Tony Blair sufrfan de Iraknofobia, un mal para el que no existe cura.) Al comprender que no necesariamente tiene que ser una persona con miedo a Jas arafias, el cliente comprende que, en cierto sentido, debe de estarse eligiendo como una persona que no tiene otra eleccién que tener miedo a las arafias. Reafirma esta eleccién cada vez que reacciona con miedo a las arafias matandolas. La solucion a su fobia es abstenerse mediante un acto de voluntad (que, se reconoce, sera inicialmente dificil) de todo comportamiento que confirme su falsa creencia de que el miedo a las arafas es algo consustancial a él. Al abandonar este proyecto de miedo irracional convertiria en un exitoso doctor como su padre. Gustave sentia una profunda envidia por el sabelotodo Achille. Apaciguado, subestimado como persona, el desarrollo intelectual del futuro escritor fue dolorosamente lento. A la edad de siete afios era todavia incapaz de leer. Y su familia reforzé la baja autoestima que habia en el nucleo de su apatia tratandole como un idiota, de allf el irénico titulo del libro de Sartre, El idiota de la familia Un sacerdote local finalmente ensefié a leer al pequefio Gustave Aunque todavia pasivo en su comportamiento general e inclinado a estupores meditativos que le hacian parecer un tonto, Gustave aproveché su nueva habilidad y a la edad de nueve afios habia empezado a escribir relatos. Sin preguntarle a su hijo qué pensaba de ello, Achille-Cléophas decidid que Gustave seria un abogado. Pasivo como siempre, Flaubert se plegé al plan de su padre al mismo tiempo que desarrollaba un desorden nervioso psicosomatico. El momento decisivo de la vida de Gustave ocurrid en 1844 cuando sufrié una crisis nerviosa, posiblemente un ataque epiléptico. Incapacitado por esta crisis, no pudo continuar la carrera que su padre habia elegido para él. Su crisis, posiblemente autoinducida, fue la oportunidad para que Gustave finalmente se liberara del dominio de su padre y se convirtiera en escritor. No siendo bueno para nada mejor, se permitié al invalido dedicarse a escribir. Por fin el idiota goz6 de la libertad para transformarse en un genio. Para Sartre, la crisis de Flaubert fue una conversién radical a la autenticidad, un acto de autoafirmacién en el que finalmente se libré de su pasividad, su elegir no elegir, su mala fe. A través de un acto que tuvo la apariencia exterior de un colapso mental, pero fue en realidad una afirmacién positiva de su libertad, Flaubert dejo de existir principalmente para los demas y empez6 a existir para si mismo. Al hacer al cliente consciente de su libertad inalienable, al ayudarlo a descubrir que, como Flaubert y como todos los seres humanos, no es una entidad fija, sino el producto de una eleccién fundamental que es posible Flaubert. No obstante, para que este libro siga teniendo una brevedad compasiva, tendremos que conformarnos con una version resumida, controlada, de la historia familiar de Flaubert. Si como yo eres de los que con frecuencia creen que la culpa es de los padres, incluso antes de conocer los detalles del triste caso de juventud desperdiciada que tienes delante, oir la historia de Flaubert sdlo servira para reforzar tu confianza en un prejuicio particularmente manido. Sin embargo, al arruinar la infancia de su hijo como la mayoria de padres incompetentes, los padres de Flaubert le ayudaron sin proponérselo a convertirse en una de Jas grandes figuras de la historia de la literatura. La abuela de Gustave murié dando a luz a su madre, Caroline. Su abuelo quedo destrozado. La culpa que Caroline sentia por la muerte de su madre se vio reforzada por la muerte del padre cuando tenia diez anos. El padre no amaba a su hija lo suficiente para querer seguir viviendo. Caroline resucité a su padre, y alivié su culpa, casdndose con su doble, Achille-Cléophas Flaubert, un doctor acartonado, dominante y prdospero varios afios mayor que ella. Al principio el matrimonio fue feliz. Carolina adoraba a su marido y tuvo un hijo, Achille. Sin embargo, para cuando Iegé Gustave las cosas habian cambiado y mientras Caroline habia perdido varios hijos, su esposo tenia amorios con varias amantes. Caroline queria una hija, una compafiera femenina que compensara la soledad de su infancia, de modo que Gustave fue una decepcién. Y, peor atin, en vista de que los dos hermanos que le precedieron habian muerto, no se esperaba que el bebé Gustave sobreviviera. Poco afecto hubo en el cuidado diestro que recibié el decepcionante bebé sin futuro; el objetivo era tmicamente apaciguarlo. Sartre identifica la pasividad de Flaubert como su eleccion fundamental de si mismo, al menos hasta que experimento su conversién radical. No se le animé a responder, a sentir que tenia un propésito, que podia ser algo mas que el objeto que su madre estaba obligada a empolvar y mimar. Con su padre no le fue mejor. Sus atenciones y esperanzas estaban centradas en su hermano mayor, Achille, quien llegado el momento se fundamental y original de si misma efectuada en respuesta a un acontecimiento particular de la infancia ocurrido en los albores de la autoconciencia. En si mismo, el acontecimiento puede haber sido trivial (una pelea con su hermana por el tiltimo trozo del pastel, por ejemplo), pero su respuesta es enormemente significativa en el sentido de que es el comienzo de un proceso en el que el individuo elige acciones que afirman o niegan su forma de verse a si mismo como cierto tipo de persona. Las acciones que una persona elige en respuesta a esta eleccién fundamental constituyen su proyecto fundamental. La eleccion fundamental de una persona es arbitraria e infundada, pero no obstante es una eleccion de si misma que establece el cimiento para todas sus elecciones posteriores. Vale la pena repetir aqui que Ja eleccién fundamental de cada persona es tinica y solo puede descubrirse a través de una exploracion detenida de su historia personal. Sartre, Laing y otros psicoanalistas existenciales sostienen que toda persona tiene la posibilidad de realizar una conversién radical en la que se redefine a si misma, con la intencion de mejorar, efectuando una nueva eleccién fundamental de si misma. La capacidad de cada persona para lograr una conversién radical tiene una importancia inmensa para el proceso de asesoria existencial. Pregunta: gcuantos consejeros existenciales se necesitan para cambiar una bombilla? Respuesta: uno, pero tanto el consejero como la bombilla deben creer que el cambio es posible. Segtin Sartre, Gustave Flaubert, el autor de Madame Bovary, tuvo una conversion radical antes de cumplir veinticinco afios que cambid por completo la direccidn de su vida. Lo que la provocd, sin embargo, no fue el trabajo de un consejero existencial, sino los acontecimientos que tuvieron lugar en un momento critico de la vida del escritor. Para entender la conversion radical de Flaubert, es necesario que sepas un poco acerca de su contexto familiar. De hecho, Sartre piensa que necesitas conocer absolutamente todo acerca del contexto familiar de Flaubert para entender su conversion radical, lo que explica por qué escribié uno de los libros mas largos nunca escritos en el que disecciona hasta el mas minimo detalle conocido de la vida, la época y el aprendizaje del control de esfinteres de cliente de que es libre en la forma descrita y que, por ende, tiene la capacidad de superarse. Este proceso implica cierto debate filosdfico de acuerdo con el nivel que el cliente pueda soportar, pero sin forzarlo de ningtin modo a afrontar las crudas verdades existenciales antes de tiempo. He ahi la gran diferencia entre este libro y la consejeria existencial. Este libro sencillamente ha expuesto las crudas verdades existenciales sin rodeos, suavizantes 0 bafios de burbujas. Un buen consejero existencial, sin embargo, es como un buen amante, lento y delicado. Como anota Emmy Van Deurzen-Smith en su libro Existential Counselling and Psychotherapy in Practice: «Se da por sentado que se posee las habilidades basicas del consejero, como la capacidad de escuchar atentamente en lugar de hacer conjeturas, de reflejar el significado de lo que dice el cliente en lugar de tergiversarlo o de infundirle confianza en lugar de confundirlo» (Existential Counselling and Psychotherapy in Practice, p. 236). Como es evidente, siempre es beneficioso para los intereses financieros del consejero proceder con lentitud y delicadeza, ayudar a sus clientes al ritmo de una babosa que cobra unos honorarios excesivos y va a tope de tranquilizantes. La consejeria existencial atribuye una enorme importancia a hurgar en el pasado del cliente, a reconstruir su excepcional biografia. Sartre ilustré el método del psicoanalisis existencial que esta en la base de la consejeria existencial escribiendo varias biografias psicoanaliticas en extremo detalladas de famosos escritores franceses. Ademas de sondear en las escabrosas honduras psicologicas de Charles Baudelaire, Jean Genet y Gustave Flaubert, estas biografias muestran como deberfa llevarse a cabo el psicoandlisis existencial. Y como Sartre con sus escritores franceses, el consejero existencial no escatima esfuerzos para preservar la individualidad de su cliente en lugar de encasillarlo y explicar sus problemas empleando un puiiado de etiquetas psicologicas universales para describir lo que en realidad es una personalidad unica. El objetivo no es decir si el cliente es depresivo 0 neurotico o lo que sea, sino descubrir la eleccién fundamental unica que ha hecho de si mismo. Las elecciones de una persona pueden rastrearse a una eleccién EN UN CAPITULO ANTERIOR Mencioné la consejeria u crientacién existencial, un lucrativo servicio en el que personas que saben escuchar y poseen cierto conocimiento del existencialismo presumen de poder ayudar a otras personas a empezar a vivir sus vidas de forma mas honesta, positiva y libre de remordimientos. Dado que este libro es una especie de ejercicio de consejeria existencial, aunque sdlo sea en el sentido de que ofrece consejo sobre como ser un existencialista, he pensado que a modo de conclusi6n deberia volver sobre el tema de la consejerfa existencial y decir algo mas al respecto. A fin de cuentas, quizas estés sintiendo que después de leer el libro necesitas cierta orientaci6n, 0 tal vez estés considerando la posibilidad de dejarte crecer la barba (damas incluidas), adoptar una expresion sabia, poner una placa metélica en la puerta y agenciarte un divan de cuero para establecerte tt: mismo como consejero existencial. En términos generales, la meta de la consejeria existencial es ayudar a las personas a realizar cambios en sus vidas 0 en si mismos con el fin de mejorar. El consejero animara al cliente (como se conoce al paciente o consumidor del servicio) a explorar lo que é1 mismo entiende por «hacer cambios con el fin de mejorar». Durante el proceso de orientacion, las ideas del cliente sobre lo que es mejor para él pueden muy bien cambiar. Al hacer hincapié en que no hay nada fijo en lo que somos, en que tenemos la libertad de al menos esforzarnos por superar nuestros actuales habitos, actitudes, defectos y complejos, el consejero existencial animara al cliente a reconocer que el mejoramiento personal es en general un objetivo alcanzable. $i somos lo que somos sin més, entonces no hay esperanza de poder cambiar de forma deliberada nuestras vidas: somos lo que somos y ya esta; sin embargo, si somos el producto de nuestras elecciones, entonces siempre habré esperanza de que podamos superarnos y cambiar lo que somos en la actualidad. Una de las principales tareas del consejero existencial es convencer al Consejeria existencial mortalidad ha conseguido hacer que su vida sea suya de forma unica, ha alcanzado la autenticidad, al menos en el sentido heideggeriano de ser auténtico para la muerte. Un verdadero existencialista nunca deberia vivir como si fuera eterno, malgastando su tiempo y posponiendo indefinidamente las cosas que de verdad quiere hacer. Con todo, no voy a afiadir que deberia vivir como si cada dia fuera el Ultimo dia de su vida, porque una persona no puede lograr gran cosa en la vida si no hace planes a relativamente largo plazo y espera el mejor momento para actuar. Una vez conoci a un tio que siempre intentaba vivir el momento y no se negaba ningtin placer o gusto que pudiera satisfacer de inmediato. Rendia culto en el altar de la gratificacién instanténea y desdefiaba por completo la paciencia, la prudencia y la moderacion como formas de posponer el placer. Regularmente usaba la expresion «gratificacién aplazada» cuando se burlaba de las personas que limitaban su consumo de alcohol, ahorraban dinero o se iban a la cama temprano. Su fidelidad a su filosofia era admirable e hizo algunas locuras, pero antes de los treinta se habia alcoholizado y muri6 en un accidente. Si una persona realmente viviera cada dia como si fuera el tiltimo dia de su vida, se pasaria todos los dias yéndose de marcha muerta de panico y con rapidez quedaria reducida a un despojo nervioso, borracho e insolvente. No obstante, toda persona deberia vivir su vida reconociendo que cada momento, cada dia, es precioso e irremplazable. Dejar de fumar, comer fibra, ponerse el cinturén de seguridad y evitar que te maten probablemente le permitira ganar algo de tiempo, pero ése no es el punto. Aunque es sensato hacer lo que puedas para prolongar tu vida, no tiene sentido ganar mas tiempo si no lo aprovechas al maximo. Como supuestamente dijo Abraham Lincoln, un gran hombre que sin duda aprovecho al maximo sus cincuenta y seis afios, un mes y veinticuatro dias: «Al final, lo que cuenta no son los afios que vives sino cémo vives tus afios». Sé un verdadero existencialista, sé auténtico, aprovecha tu libertad, aprovecha el dia. Carpe diem como solian decir los nobles romanos. propia persona. Es solo cuando una persona comprende plenamente que ha de morir y acttia en consonancia con esa comprensién que de verdad empieza a existir y vivir por derecho propio. Al asumir la responsabilidad de su propia muerte, asume la responsabilidad por su propia vida y la forma en que elige vivirla. Comprender y afirmar de verdad nuestra propia mortalidad es superar la mala fe. Esta concepcién casa perfectamente con la afirmacién de que la autenticidad implica vivir sin remordimientos. Si afirmar la libertad implica que la persona afirme su vida en su totalidad sin remordimiento, entonces debe también afirmar su mortalidad. Esta afirmacién no implica deleitarse en la perspectiva de la muerte (no es un deseo de muerte suicida), pero si implica reconocer que nuestra vida es finita y las implicaciones que ello tiene para la forma en que vivimos nuestra vida. Una caracteristica clave del superhombre nietzscheano es que reconoce y acepta su propia mortalidad. El superhombre es una persona que, a pesar de ser plenamente consciente de su propia mortalidad, no se deja petrificar por el miedo cuando piensa en ello. No permite que su miedo ala muerte le impida tomar ciertos riesgos y vivir su vida de forma plena. En La ética de la ambigiiedad, Simone de Beauvoir argumenta que esta actitud hacia la muerte es una caracteristica esencial del individuo intrépido y audaz que valora la afirmacién de su libertad por encima de la timida supervivencia: «Incluso su muerte no es un mal dado porque es humano sélo en la medida en que es mortal: ha de asumirla como el limite natural de su vida, como el riesgo implicito en cada paso». Las personas que carecen de audacia y son incapaces de vivir plenamente por temor a la muerte al final tamb' mueren. Mueren, sin embargo, sin haber vivido nunca realmente; mueren habiendo muerto, metaforicamente, muchas veces. Esto es lo que Shakespeare queria decir cuando escrib veces antes de su verdadera muerte; el valiente sélo prueba la muerte una vez» (Julio César, II, ii). La vida de la persona que ha abrazado su mortalidad quizds no sea en apariencia distinta de la de su vecino que no lo ha hecho, pero al abrazar su n : «Los cobardes mueren muchas experiencia limitada de la vida, los jovenes estan repletos de gilipolleces, no pueden evitarlo, o como dice la Biblia con mucha mas elocuencia: «Cuando yo era nifio, hablaba como nifio, pensaba como nifio, razonaba como nifio. Al hacerme hombre, dejé todas las cosas de nifio» (1 Corintios 13:11). Los jovenes tienden a verse como un grupo distinto también, como seres inmortales que siempre serdn jovenes, en lugar de hacerlo como personas que inevitablemente se haran viejas y moribundas si sobreviven el tiempo suficiente. No cabe duda de que esta actitud forma parte de la arrogancia de la juventud y puede disculparse con el argumento de que los jovenes son precisamente inmaduros e ingenuos. No pensar en la vejez y la muerte es el privilegio de la juventud y sin duda las personas viejas e ilustradas envidian este privilegio. No obstante, su actitud es mala fe en la medida en que implica considerar la juventud y la vejez como estados fijos, en lugar de entenderlas como fases del mismo proceso implacable. De hecho, incluso es mala fe de parte de los jévenes pensar en los ancianos como personas mas moribundas que ellos mismos. De acuerdo, es cierto que nadie vive mucho mas alla de los cien afios en estos dias, asi que los ancianos estan mas cerca de la muerte en cierto sentido, pero la muerte (el proverbial autobiis que puede atropellarte mafiana) es una posibilidad omnipresente para las personas de cualquier edad. E] septuagenario podria muy bien sobrevivir al joven que se burla de él por haber alcanzado su edad, en especial si ese joven conduce una moto. Sartre describe la muerte como un limite elastico que puede estar mas cerca o mas lejos dependiendo de las circunstancias. Si wna persona tuvo ayer una fiebre altisima, puede decirse que ayer estaba mas cerca de la muerte que hoy, cuando se ha recuperado. S6lo al comprender que ella es la posibilidad completamente tinica de su propia muerte la persona deja de considerarse a si misma como una copia de su pr6jimo y de todos los seres humanos. Para Heidegger, éste es el verdadero significado de la autenticidad. La persona auténtica, como el artefacto auténtico, es un articulo genuino, original, no una reproducci6n o una réplica. Aunque su vida puede asemejarse a las vidas de muchos otros, ella es, no obstante, su propia persona y se identifica a si misma como su nuestro presente. E] ser auténtico para la muerte implica que una persona reconozca plenamente en la forma en que vive su vida que su tiempo es finito y su muerte inevitable. Al reconocer ante si misma que ha de morir, en jugar de meramente aceptar que la gente muere, una persona deja de verse con mala fe como un simple Otro mds y comprender que existe como la posibilidad completamente Unica de su propia muerte. Dice Heidegger: «Lo irreferente de la muerte comprendido en el “precursar” singulariza al “ser ahf” en si mismo» (El ser y el tiempo, p. 287). No es sorprendente que a medida que las personas se hacen mayores tiendan a adquirir una actitud auténtica respecto a la muerte: «yo he de morir». Ser conscientes de la propia mortalidad es un aspecto clave del proceso de crecer y convertirnos en verdaderos adultos. Las personas jovenes, en cambio, tienden a tener una actitud inauténtica: «los demas mueren». Las generaciones acaso estan mas separadas por su actitud hacia Ja mortalidad que por el hecho de que a los ancianos les gustan los jerséis de Jana y la tranquilidad mientras que los jovenes prefieren los jerséis con capucha y el rap. Las personas jévenes, al menos en las sociedades occidentales, tienden a ver a las personas mayores como un grupo totalmente separado del resto de la humanidad, criaturas mas bien repulsivas que siempre han sido viejas y deterioradas y moribundas, en jugar de considerarlas personas que en otra época fueron jovenes y sencillamente han sobrevivido el tiempo suficiente para volverse viejas y moribundas. Esta actitud de desdén y desprecio que con frecuencia los jovenes exhiben ante los viejos refuerza esta separacion al tiempo que es un sintoma de ella. En una ocasi6n, un joven se burlé de un hombre por haber alcanzado la edad de setenta afios. «No me molestes», replicé el anciano, «estoy seguro de que esperas vivir tanto como yo». Por supuesto, existen algunos adultos jovenes que dicen cosas como: «Yo me mato antes de envejecer; jmejor quemarse que marchitarse!»; pero lo cierto es que no quieren decir lo que dicen, son como los nifios pequefios que sin saber de qué estan hablando dicen: «yo no voy a morirme, yo viviré por siempre». Debido a su abrazar la formula para la grandeza de Nietzsche. Una decision dificil, por supuesto, pero asi es como son las cosas, acaso eternamente. Heidegger sobre la autenticidad: ser auténtico para la muerte Otro filésofo existencialista que tiene mucho que decir acerca de la autenticidad, incluso a pesar de que fue tristemente incapaz de ser auténtico debido a sus inclinaciones derechistas, es Heidegger. Heidegger sostiene que el proyecto de la autenticidad implica que la persona afirme las verdades ineludibles de la condicion humana. En esto es muy similar a Sartre, lo que no es sorprendente, pues (mas alla de la cuestion politica) fue la segunda mayor influencia de Sartre. De paso, la mayor influencia de Sartre fue Husserl, que fue maestro de Heidegger pero no de Sartre, aunque éste lo estudio a fondo durante una estancia de nueve meses en el Instituto Francés de Berlin. En cualquier caso, como hemos visto, la explicacién de la autenticidad de Sartre hace hincapié en asumir y afirmar la libertad. La explicacién de Heidegger, por su parte, hace hincapié en asumir y afirmar la mortalidad. La autenticidad para el filésofo aleman es principalmente ser auténtico para la muerte. Todo esto quizds suene bastante morboso, pero lo que Heidegger reconace es que las personas pueden tener una actitud auténtica o inauténtica hacia el hecho de que van a morir. Heidegger se refiere al ser de cada individuo como Dasein, en aleman «ser ahi». Fl «ser ahi» alude al hecho de que cada persona tiene una situacién espacial y temporal tnica. Dice Heidegger: «La muerte es la mds peculiar posibilidad del “ser ahi"» (El ser y el tiempo, p. 287). La posibilidad constante de la muerte en el presente, la inevitabilidad de la muerte en el futuro, es fundamental para la existencia misma del Dasein. El presente de una persona es lo que es debido a su cardcter finito, una finitud derivada de la promesa de la muerte que acecha perpetuamente también esta arafia y esta luz de luna entre las ramas y asi también este instante y yo mismo. El eterno reloj de arena de la existencia es dado la vuelta una y otra vez —iy ala par suya tl, polvito del polvo!». zNo te arrojarias al suelo, rechinando los dientes y maldiciendo al demonio que asi te habl6? ¢0 quizds has vivido una vez un instante infinito, en que tu respuesta habria sido la siguiente: «/Tii eres un dios y jams of nada més divinol» Si esa nocin legara a dominarte, te transformaria y tal vez te aplastaria tal y como eres. La pregunta ante todas las cosas: «:Quieres esto otra vez e innumerables veces mas?», jpesaria como el peso mas pesado sobre todos tus actos! ;Oh, cémo necesitarias amarte a ti mismo y ala vida para no desear ya otra cosa que esta tiltima, eterna confirmacion, este sello! (La gaya ciencia, 341, p. 250). El pensamiento inflexible de Nietzsche es que si no quieres volver a vivir tu vida de nuevo, entonces no has vivido tu vida bien. La pregunta que te hace es: «;Por qué estas haciendo ese trabajo ahora si no quisieras tener que volver hacerlo en tu proxima vida?». Desde un punto de vista metafisico el eterno retorno es problematico: si el eterno retorno es cierto, esta vida deberia ser idéntica a las infinitas vidas que has vivido y vivirds, no puedes cambiar nada, y si no puedes cambiar nada, entonces no eres de verdad libre. El que Nietzsche de verdad creyera que vivimos nuestras vidas de nuevo un numero infinito de veces es discutible. Podria decirse que lo que le importa no es si el eterno retorno es o no una realidad, sino la corrosiva prueba moral que plantea la sola idea del eterno retorno. La respuesta de Nietzsche a la imperecedera pregunta moral «gCémo debemos vivir?» es: aspira a vivir de tal forma que quisiera el eterno retorno de todos y cada uno de los momentos de tu vida. Nietzsche llama a esto su ‘formula para la grandeza: «Mi formula para la grandeza es el amor fati [amor del destino]: que no queramos que nada sea diferente de lo que es ni en el futuro ni en el pasado ni en toda la eternidad» (Ecce Homo: How One Becomes What One Is, p. 68). Al rechazar y descartar su pasado como un viejo par de botas, Raskolnikov se revela incapaz de adoptar la férmula para Ja grandeza de Nietzsche. Ni que decir tiene que para convertirte en un verdadero existencialista, para lograr una existencia autentica, tienes que crimenes a si mismo. Por desgracia, a diferencia de Napoleon, Raskolnikov carece de la audacia para soportar su atroz acto y despreocuparse de él. En palabras de Nietzsche, carece del coraje para «redimir el pasado, y transformar todo “fue” en un “asi lo quise”» (Asi hablo Zaratustra, p. 204). Dado que el ego de Raskolnikov es insuficiente para asumir la enormidad de su crimen, su unico medio de escapar a su culpa es caer en una actitud de mala fe en la que reniega de si mismo renegando de su pasado. No estoy diciendo que para ser auténtico tengas que ir por ahi matando ancianas mezquinas con un hacha sin que te importe un pito, sino que para ser auténtico debes asumir la responsabilidad por todas tus acciones cualesquiera que sean en lugar de intentar renegar de ellas a través de la mala fe y la confesion y la creencia en que puedes «renacer». Renegar del pasado de mala fe y redefinirlo asumiendo su responsabilidad son dos respuestas radicalmente diferentes. Si quien aspira convertirse a la autenticidad ha de vencer la mala fe, debera asumir la responsabilidad por su pasado sin remordimientos. Una persona que tiene remordimientos 0 se arrepiente de algo desea que su pasado hubiera sido diferente, desea no ser la persona libre que es y ha sido. Una persona con remordimientos es incapaz de afirmar la totalidad de su libertad y, por ende, Ja totalidad de su vida como la creacién de su libertad. Nietzsche sostiene que la afirmacion mas elevada de la vida es el deseo del eterno retorno. Para afirmar de verdad su libertad y su vida como creaci6n de su libertad, una persona debe abrazar la posibilidad de vivirla de nuevo en su totalidad, detalle por detalle, un numero infinito de veces. Nietzsche es un escritor estupendo, de modo que vale la pena citar por extenso su pasaje mas famoso sobre el eterno retorno: El peso més pesado. ,Qué ocurriria si, un dia o una noche un demonio se deslizara furtivamente en la mas solitaria de tus soledades y te dijese: «Esta vida, como tt ahora la vives y la has vivido, deberds vivirla atin otra vez e innumerables veces, y no habra en ella nunca nada nuevo, sino que cada dolor y cada placer, y cada pensamiento y cada suspiro, y cada cosa indeciblemente pequefia y grande de tu vida deberd retornar a ti, y todas en la misma secuencia y sucesién — y asi imagen de los soldados rubios de ojos azules de las tropas de asalto nazis desfilando por la puerta de Brandeburgo en formacion cerrada haciendo el paso de la oca, pero literalmente significa «superhombre»: el hombre que se ha superado a si mismo. En tanto creador de sus propios valores, el superhombre se crea a si mismo; es el artista o autor de su propia vida. En un articulo titulado «Nietzsche on Authenticity», el fildsofo judfo Jacob Golomb (asi es: Golomb no Golum) dice: «La voluntad de poder se corresponde con la btisqueda de la autenticidad: la voluntad de convertirse en un autor libre (dentro de los necesarios limites) del propio ser. La voluntad de poder éptima se expresa a través del idealmente auténtico Ubermensch» («Nietzsche on Authenticity», p. 254). El artista o autor de su propia vida, cuya meta es afirmar positivamente la totalidad de su vida, identifica como experiencia de aprendizaje que le ayuda a ser mas fuerte y mas sabio todo aquello que una persona negativa 0 una persona de mala fe identificaria como una mala experiencia que debe olvidar o negar. E] autor de su propia vida no se arrepiente de nada porque toda experiencia ha contribuido a hacerle ser lo que es. De hecho, en opinién de Nietzsche, ni siquiera lamenta sus cualidades malignas, 0 lo que otras personas etiquetarian como cualidades malignas. En tanto fuente de sus propios valores, reevalia sus cualidades malignas como sus mejores cualidades. Su capacidad para hacer esto es el sello distintivo de su autenticidad: «Las grandes épocas de nuestra vida son aquellas en que nos armamos de valor y rebautizamos el mal que hay en nosotros llamandolo nuestro mejor bien» (Mas alld del bien y del mal, 116, p. 100). En Crimen y castigo, la brillante novela del escritor existencialista ruso Fiddor Dostoyevski, Raskolnikov, el personaje central de la obra, mata con un hacha a una anciana usurera y mezquina y su hermana en un intento de escapar a su pobreza. Habria sido més sencillo solicitar algin subsidio asistencial, pero en el San Petersburgo de la segunda mitad del siglo xx no habia mucha seguridad social. Después de cometer el doble crimen, Raskolnikov se dice a si mismo que debe esforzarse por ser como Napoleon, un hombre que posefa la fuerza de carécter necesaria para justificarse sus libre. No niega ni reprime su libertad sino que la disfruta y es consciente de ella constantemente, algo que consigue actuando de forma decidida, superando dificultades, asumiendo la responsabilidad, negandose a lamentarse y, lo més importante, eligiendo sus propios valores. Para Nietzsche, la libertad positiva es expansiva y en ocasiones incluso implacable y violenta. Triunfa en su propia fortaleza como voluntad de poder positiva. La voluntad de poder, una idea clave de la filosofia de Nietzsche, puede ser positiva o negativa. La voluntad de poder positiva es el poder como se lo entiende comtnmente: un poder que es expansivo e incluso explosivo. Su opuesto, sin embargo, es también voluntad de poder. Un ser que se niega a expandirse sigue teniendo voluntad de poder. Los soldados que realizan una retirada ordenada rehiisan expandirse pero eso no significa que hayan perdido su voluntad de poder. De forma similar, una persona que conserva sus fuerzas detras de una barricada ejerce su voluntad de poder al invitar al enemigo a gastar sus fuerzas atacando esa barricada. Para Nietzsche una persona no puede no ser una voluntad de poder, del mismo modo en que, de acuerdo con Sartre, una persona no puede no ser libre, Mientras Nietzsche tiene los conceptos de voluntad de poder positiva y negativa, Sartre tiene los conceptos de libertad positiva, la de la persona responsable y auténtica, y libertad negativa, la de la persona inauténtica que actiia de mala fe eligiendo no elegii Sartre afirma que la libertad puede valorarse a si misma como fuente de todos los valores. Esta libertad positiva implica los mismos principios que el ideal noble de Nietzsche. Es una voluntad de poder positiva. Una persona no logra una conversién radical a la autenticidad rechazando y divorciandose de su antiguo ser a través del ejercicio de la mala fe, lo logra superando su antiguo ser, sus antiguos valores, convirtiéndose en el creador de sus propios valores. La idea sartreana de una conversion radical a la autenticidad implica que la persona se transforme en algo similar al Ubermensch de Nietzsche. Si te has topado antes con esta palabra alemana es posible que te evoque la Nietzsche sobre la autenticidad: no te arrepientas de nada Ha llegado el momento de, como prometimos, examinar lo que Nietzsche tiene que decir de la autenticidad. Como Sartre, tiene muchisimo que decir, y una buena cantidad de ello es bastante similar a lo que dice el francés. Dificilmente es una sorpresa que los grandes filésofos existencialistas piensen parecido, en especial cuando Nietzsche tuvo una gran influencia sobre todos los pensadores existencialistas del siglo xx. Nietzsche es una de esas figuras imponentes de la filosofia capaces de influir en todos los que vienen después, desde D. H. Lawrence hasta Lawrence de Arabia, desde los judios de los guetos hasta los nazis, desde los psicoanalistas freudianos (incluido el mismisimo Freud) hasta los entrenadores mas inteligentes de la Bundesliga alemana. Esto se debe en parte a que sus escritos parecen ofrecer algo a todo el que los lee. La principal razén, sin embargo, es que se trata de un pensador profundo e inspirador que ahonda muchisimo mas en las complejidades y peculiaridades de la vida que el académico medio sin imaginacién, experto en buscarle cinco pies al gato. De hecho, estos argumentadores solian ser uno de los blancos preferidos de Nietzsche, al que le encantaba insultar con ingenio a otros pensadores en sus escritos. Seguramente ésta es otra razon por la que es tan popular entre todos los pensadores que no insulté. La mala fe, nos dice Sartre, es elegir no elegir. Es libertad negativa, una libertad que se niega, frena y reprime a si misma. Ejercer la libertad negativa es adoptar lo que Nietzsche denomina el ideal ascético. El ideal ascético valora la represién propia y la abnegacién por encima de todas las cosas y por si mismas. Quien adopta el ideal ascético, por ejemplo, no valora el celibato por la salud sexual y tranquilidad mental que le reporta, sino sdlo por la abnegacion que supone. Lo opuesto del ideal ascético es la nocion nietzscheana del ideal noble. El] ideal noble implica la afirmacion positiva de Ja libertad. Una persona noble afirma de forma positiva su condicién de ser a este comentario seria que si la guerra realmente le ha puesto en contacto consigo mismo, entonces deberia darse cuenta de que es libre de adaptar su comportamiento a las exigencias de cualquier situacion. Ahuyentar a una esposa a la que todavia ama porque no puede adecuarse a una imagen anterior de si mismo no es el comportamiento de un héroe auténtico, sino el comportamiento de un idiota inflexible y autodestructivo. La autenticidad, se ha sugerido, es un ideal heroico. Como las peliculas no se cansan de ensefiarnos, el héroe arquetipico es tanto um amante como un guerrero y puede amar o luchar segun la situacion se lo exija. Ademas, su capacidad para amar no se corrompe por su capacidad para luchar, odiar y hacer frente a los horrores, del mismo modo que su capacidad para luchar no se debilita por su capacidad de amar. Después de que la segunda guerra mundial les ensefara cudn interdependientes eran, Sartre y de Beauvoir empezaron a reconocer que la autenticidad implica hasta cierto punto adecuarse a las expectativas de otros. Sus escritos de posguerra reconocen que cierto grado de conformidad social es necesario para que una persona satisfaga las exigencias de la mayoria de situaciones porque la mayoria de situaciones son de algtin modo situaciones sociales humanas. Las personas, argumentaron, tienen la responsabilidad de estar a la altura de las expectativas que son consecuencia de sus circunstancias sociales e histéricas. Quien busca evadir esta responsabilidad negandose a ser una persona de su tiempo actila de mala fe. Actua como si fuera una isla estatica y autosuficiente, fuera de la sociedad, la politica y la historia, cuando en verdad es alguien arraigado en la situacién social y politica de su 6poca que sdlo existe en relacién a su época. Es una verdad existencial de la condicién humana que, como dijo John Donne, «Ningtin hombre es una isla, completa en si misma; todo hombre es un fragmento del continente, una parte del conjunto» (Meditation XVII). Por ende, ser auténtico es reconocer esta verdad; reconocer la existencia y la libertad de otras personas y el hecho inevitable de que hemos de tener relaciones y tratos con ellas. simplemente metiéndome esa idea mundana en la cabeza. Nuestra actitud hacia nuestras acciones es importante y puede influir en el caracter de lo que hacemos, pero no debemos atribuir siempre demasiado significado a los pensamientos casuales y arbitrarios que nos asaltan cuando estamos haciendo lo que hacemos. La autenticidad y los otros Volviendo sobre lo que hemos dicho hasta ahora sobre la autenticidad en este capitulo, parece existir una contradiccién que es necesario solventar. Por un lado, hemos sostenido que para ser auténtica una persona debe realizar su ser en situacién sumergiéndose sin reservas en su situacién. Por otro lado, hemos sostenido que la autenticidad implica negarse a vivir segun las expectativas de otros. Recuérdese el ejemplo de Sartre sobre el otrora burgués aburrido convertido en soldado al que su esposa visita en el frente. Sartre argumenta gue el hombre no puede adecuarse a la imagen que su mujer tenia de él sin caer en la inautenticidad. No obstante, como puede una persona entregarse de lleno a cierta situacion sin adecuarse a las expectativas de otros? Adecuarse a las expectativas de otros es precisamente la respuesta comprometida que ciertas situaciones requieren. Si el hombre ha de entregarse de Heno a su actual situacion, no la guerra sino su encuentro con su amada esposa, habra de satisfacerla y realizar un esfuerzo para estar a la altura de sus expectativas con el fin de confortarla y preservar su relacién con ella. Podria argumentarse que actuar de este modo seria tratarla de forma condescendiente, pero seria mas condescendiente todavia pretender que por haber experimentado horrores desconocidos para su esposa ha de tratarla con superioridad, de forma hosca y severa. Supongamos que el hombre se niega a complacer las expectativas de su esposa y le dice: «Esta guerra me ha puesto en contacto con mi verdadero yo y ya no puedo comportarme como antes lo hacia». Una respuesta razonable precisamente el objetivo del estudio filosdfico. Fl problema con demasiados estudiantes y profesores de filosofia es que piensan que el objetivo del estudio filosdfico es obtener un titulo en Filosofia y a la mierda la ilustracion. Para el fildsofo griego Platén, por ejemplo, el propdsito de estudiar filosofia, en especial su filosoffa, es alcanzar el conocimiento de las verdades fundamentales que permiten a la persona distinguir la apariencia de la realidad. Como antes he sefialado, aunque su concepcidn de la realidad es radicalmente diferente del platonismo, el existencialismo tambien aspira a ilustrar y ofrecer una salida de la caverna oscura de la ignorancia. En su didlogo més famoso, La reptiblica, Platén compara el proceso de ilustracién con el ascenso de una persona desde el mundo de sombras en el que vive en el interior de la caverna ala clara luz del dia. Todo esto esta muy bien, pero no disipa la molesta duda que hemos planteado: gpuede una persona volverse auténtica como resultado de un proceso intelectual? Sin duda el estudio de la filosofia le proporcionara toda clase de intenciones nobles, asi como unas credenciales relativamente utiles, pero, pregunto, el hecho de pensar «soy auténtico», zno echa por tierra en el acto cualquier autenticidad que haya podido alcanzar? Como hemos dicho, una persona no puede sencillamente ser auténtica, tiene que actuar constantemente de forma auténtica y pensar «soy auténtico» no es actuar de forma auténtica. Es posible entonces que mi molesta duda no sea tan grave a fin de cuentas. gCudl es realmente el problema con que una persona que se comporta de manera auténtica piense «en este momento estoy comportandome de manera auténtica»? gDe verdad hace ese pensamiento que su accién sea inauténtica? Consideremos un ejemplo comparativo: Supongamos que mientras ayudo a una anciana a llevar una caja pesada durante un tramo de escaleras pienso: «Esta es mi buena accién del dia», ghace eso que mi accidn se convierta de repente en un acto egoista? Es sélo un pensamiento ocioso. Esto fue algo en lo que una vez me hizo pensar una anciana que en una ocasién me dijo: «Es tu buena accion del dia, joven». Pareceria absurdo sugerir que la anciana transformé la calidad de mi accion. mujeres que insisten en ser optimistas y despreocupadas, cuando sus amigos Je daban sus condolencias ella replicaba que esperaba que a ellos nunca les ocurriera lo mismo. Pero, por supuesto, excepto los hijos que mueren antes, las personas por lo general han de sufrir la muerte de sus padres. Si esto parece algo que no es apropiado mencionar, ello se debe a la influencia de la mala fe. Encontrar ofensiva la dura realidad es una de las expresiones mds comunes de la mala fe. Como hemos dicho, la mala fe es ignorancia deliberada. La mala fe es una estrategia para sobrellevar la vida que ayudaa las personas a evitar lo que de otro modo seria una angustia abrumadora. Y si esto es cierto, habria que reconocer que, irénicamente, existe cierto tipo de sabiduria en la ignorancia deliberada de quienes carecen del valor para enfrentar la dura realidad de la condicion humana. Si la busqueda de la autenticidad fuera necesariamente un proyecto intelectual, entonces sélo las personas educadas podrian perseguir la autenticidad, lo que sin duda alguna no es cierto. La historia muestra que hay personas sin educacién que se esfuerzan por asumir su libertad y, al mismo tiempo, que hay personas como Heidegger, un experto en la teoria del existencialismo, capaces de ceder a la inautenticidad del antisemitismo y unirse al Partido Nacionalsocialista de Hitler. Aunque la busqueda de la autenticidad no necesita ser obligatoriamente un proyecto intelectual, algunas personas se sienten inspiradas a buscar la autenticidad como consecuencia directa de haber estudiado el existencialismo. El estudio del existencialismo resalta las verdades existenciales, pone al descubierto la mala fe y hace hincapié en la necesidad de la libertad y la responsabilidad. Estudiar el existencialismo puede ser un proceso de profunda ilustracién personal capaz de influir en la naturaleza misma de nuestra existencia en el mundo. En una época en la que la filosofia se considera a menudo simplemente una cuestién académica entre muchas otras, afirmar que de su estudio puede derivarse una ilustracién personal profunda quizas suene grandilocuente. Sin embargo, segun los pensadores de la Grecia antigua que fundaron la filosofia occidental, lograr la ilustracién personal es Autenticidad e inteligencia La busqueda de la autenticidad tal y como la conciben la mayoria de los fildsofos existencialistas requiere ser intelectualmente conscientes de ciertas verdades de la condici6n humana. Para afirmar la libertad como meta Ultima, por ejemplo, parece necesario comprender primero la futilidad de intentar sentirnos en armonia con nosotros mismos, de intentar ser cosas que no tengan que realizar elecciones. Cuando los fildsofos existencialistas critican a una persona por su inautenticidad (algo a lo que son muy aficionados) no parecen apreciar del todo la posibilidad de que la persona en cuestion sencillamente no comprenda que es inauténtica. Por ignorancia, puede creer con sinceridad que es posible estar en armonia consigo misma. Es improbable, por supuesto, que esta creencia se le manifieste en términos tan intelectuales, y es muy posible que adopte la forma de cierta fe en la posibilidad de satisfacer todos sus deseos y lograr una completa realizacion. De forma similar, si una persona no es consciente de la verdad existencial de que no es otra cosa que su ser en situacién, resulta inevitable que crea que es lo que siempre ha sido en lugar de aquello en lo que de repente se ha convertido. Creera, por ejemplo, que es un civil disfrazado de militar en lugar de un soldado, si la vida como civil es todo lo que conocia antes de su reclutamiento. A las criticas de este tipo, los fildsofos existenciales responderian insistiendo en que basta una inteligencia limitada para comprender las verdades existenciales de la condicién humana. Estas no son verdades misteriosas sepultadas en oscuras obras filoséficas. Cada dia la vida cotidiana nos ofrece una dura leccion sobre el caracter elusivo de la satisfaccién, la contingencia de la existencia, la inmanencia de la muerte, etc. Si las personas no advierten estas verdades existenciales y sus implicaciones, no es porque carezcan de informacion, sino porque se niegan a enfrentarlas, porque animados por la cobardia y respaldados por la mala fe optan por ignorarlas de forma deliberada. Habia una vez una mujer cuyo padre fallecié. Como era de ese tipo de su esposa y resistirse a la inautenticidad impuesta porque el amor es slo la eleccion de estar enamorado. Pero puede en verdad un hombre elegir dejar de amar a su esposa? gTiene Sartre razén en insistir en que los estados emocionales no tienen impulso propio o estamos, una vez mas, ante el viejo Sartre decidido a llevar al extremo sus tesis radicales sobre la libertad y la elecci6n? Voy a eludir la obligacién de responder a estas complicadas preguntas diciendo que la respuesta es atin materia de intensos debates entre los empallones especialistas en Sartre Las dificultades que afronta una persona en su lucha por llevar una existencia auténtica continuada son enormes. En sus Diarios de guerra Sartre reconoce su propio fracaso en este sentido: «No soy auténtico, me he detenido en el umbral de la tierra prometida. Pero al menos sefialo el camino para que ellos y otros puedan alcanzarla». Sartre, sin embargo, no menciona, por qué otros deberian lograr lo que él, entre todas las personas, fue incapaz de lograr. Si el gran campeén de la autenticidad, con su enorme fuerza de voluntad y su superior fuerza mental no pudo llevar una existencia auténtica, qué esperanza tenemos el resto de nosotros? Un rapido resumen: la existencia auténtica es un proyecto que ha de estarse retomando permanentemente. Una persona solo es auténtica en su actuar presente. Incluso a pesar de haber sido auténtica de manera sistematica a lo largo de toda una semana, si no es auténtica en este preciso momento, no es auténtica en absoluto. Dadas las infinitas tentaciones para caer en la mala fe que el mundo nos ofrece, las dificultades de resistir el arrepentimiento y la inautenticidad impuesta, el hecho de que los habitos y las expectativas de otras personas constrifien nuestra vida asi como nuestra capacidad de elegir, es muy dificil para cualquier ser humano mantener su autenticidad durante un periodo de tiempo significativo. La mayoria de las personas probablemente sélo son capaces de alcanzar la autenticidad de forma ocasional. No obstante, la autenticidad es un ideal existencial por el que vale la pena esforzarse. acontecimientos». Se ha convertido en un guerrero y quiere seguir siendo un guerrero incluso después de que la guerra termine. Un hombre que esta preparado para cualquier cosa, un hombre que asume la responsabilidad de su propia vida y no esta dispuesto a justificarse con excusas. Un hombre fuerte, silencioso, noble, digno, que se niega a transigir o decir lo que otros quieren oir simplemente porque quieren oirlo. La resistencia que habra de enfrentar esta noble resolucién no proviene de su interior sino del mundo que le rodea y de su propio pasado. En palabras de Sartre, «la resistencia proviene, no de los residuos de inautenticidad que puedan quedar aqui y alla en su conciencia mal desempolvada, sino simplemente del hecho de que sus situaciones previas se resisten al cambio como cosas». Su esposa, a quien él sigue amando, acude a visitarlo al frente con todas las expectativas que en el pasado él siempre ha sabido satisfacer. Sin esforzarse en absoluto y sin intencidn, él se comporta de forma diferente en relacion a ella porque ahora es diferente. Sin embargo, las expectativas de la esposa le ponen delante la imagen de su antiguo ser inauténtico. Esta es la prueba real de su recién descubierta autenticidad porque «no puede volver a sus viejos errores con respecto a esa mujer sin, de un brochazo, precipitarse de cabeza en la inautenticidad». Su amor por su esposa implica que es probable que ceda a la inautenticidad para adecuarse a las expectativas que ella tiene sobre él: «Pues es de suponer que un ser que espera de nosotros lo inauténtico nos Ilene hasta la médula con inautenticidad al revivir nuestro antiguo amor». Sartre contintia sefialando que semejante inautenticidad «es una inautenticidad impuesta de la que es facil pero doloroso defenderse». Pero si la inautenticidad impuesta es dolorosa de resistir, ;cOmo es posible que también sea facil de resistir? Si el hombre sucumbe a la inautenticidad impuesta debido al amor que siente por su esposa, entonces quizas le resulte igualmente dificil resistirse a la inautenticidad impuesta en la medida en que ello equivaldria a resistirse a amar a su esposa. Sartre replicaria que en realidad es facil para el hombre dejar de amar a personas valientes que, a pesar de mover cielo y tierra y agotar todas sus fuerzas, caen derrotadas ante adversarios realmente dotados, adversidades imposibles de superar, circunstancias que escapaban a su control 0, sencillamente, un tiempo de perros. Sin embargo, nuestra prioridad aqui no es ser justos con todo el mundo ni tampoco evitar ser severos por temor a gue alguien pueda sentirse ofendido, nuestra prioridad es identificar una buena actitud para afrontar la vida; y ciertamente una actitud buena, noble, digna y existencialista para afrentar la vida implica evitar siempre decir chice mi mejor intento», en especial porque es muy probable que en realidad no hayas hecho tu mejor intento y, por tanto, es probable que la proxima vez lo hagas mucho mejor. La nobleza y la dignidad son virtudes auténticamente existencialistas. Sartre reconoce que la mala fe amenaza todo proyecto del ser humano. Para evitar caer en la mala fe una persona tiene que ser practicamente sobrehumana. Una persona cae en la mala fe en el momento en que deja de evitar meticulosamente las infinitas tentaciones que el mundo le ofrece para hacerlo. La mala fe resulta tan conveniente y es tan seductora que es muy dificil resistirse a ella todo el tiempo. Al considerar las infinitas tentaciones de caer en la mala fe que el mundo ofrece y las dificultades a las que tenemos que enfrentarnos para resistirnos a ellas en sus Diarios de guerra, Sartre pone el ejemplo de un hombre de familia al que llaman al frente. Antes de ser llamado a filas, el hombre era un burgués aburrido cuya vida marchaha sobre ruedas segun la ruta dictada por las expectativas de su familia y su profesidn. Se permitia ser Jo que los demas querian que fuera. La cruda realidad de la guerra le abre Jos ojos y le anima a poner su vida en perspectiva. Asume su libertad y se convierte en su propio ser. Dice Sartre: «Se ve levado a pensar acerca de esas situaciones [pasadas], a tomar decisiones para el futuro y establecer directrices para mantener su autenticidad al enfrentar nuevos

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