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Vo Tio!" Nos 2" Agont 197S smPosI0 LA MEDICINA EN LA ANTIGUEDAD CLASICA * I EL NACIMIENTO DE LA MEDICINA EN FL MEDITERRANEO Jax Somounos Pauencrs La presencia griega Sentimos la presencia priega desde nuesteo comiienzo. La creacién de Grecie concieme 1 nuestro Universo, a este mundo aceiden: tal Cuando descubsimos Grecia, revelamos los origenes de occidente; se nos abre un paisaje sencillo, accesible, que involucra todas questras manifestaciones de culeue. La predominancia helénica se ha im pussto y sobrevive a cualquier cambio. Paceciera que aquel concepta de Hometo, fuese una teilidad. Pensaba el autor “que el mundo es otigen y expansién de pode- tes divinos, operantes desde dentro y crea dores de la variable seproduccién de los * eseada en le Academia Nacional de Me cing, e113 de noviembre de 1974 1 Acsdenien numeri, Clinica 64 del Istituto Maxicigo del Seguto Soi Fenémenos". Advertimos que Is civiliza ida se dirige a cambios. considetables, pero siempre descubrisnos esos. poderes divinos que Homero menciona. Encontramos a Greci: insertada en nuestra religin, en nuestra orgenizaciin social, en In politica, en la economia; Grecia, en materia Filoséfica y artistica; ‘mantiene una posicién ejemplas, sus mo: delos son insuperables, no han perdido su frescura, Nadie ignors cl valor de Ia filo- sofia helénica y, detris de ella, la clencia y Is investigaciéa, Ta filosofia griega no tiene a sus espal- das ninguna tradicién, es decir emerge de una situacin mamana concreta. El pense ienta helEnico se Fundé en tzes tézminos decisivos: teorta, logos y ser, Para mante- ner una nocién cdsmica, los gtiegos com: teimplaton Ia realidad y vivieron un smun- * do ordenado, El hombre griego interprets su mundo como naluralezs y principio. EL cosmos fue una realidad precisa donde las variantes eran el antagonismo —lo opues- to—: lo blanco y Lo negro, [a luz y lo cxcuro, Io positivo y fo negative. Gracias | estos contratios, el griego manej6 sus conceptos claramente y redujo los proce- dimientos migicos que le llegaron de antas. No hace falta profundizar mucho para ddescubric la herencia, depurada y entique- cida de nnestras creencias, Sin despegarse del misterio, [a religién gricga no se rc- dujo a une’ simple mitologla, Fue vida cotidiana, calendario. de festividades y profesiin doméstica —cada familia goar- 6 su propio ritual—. Pero en conjunto fue Ia expresién costumbrista de hibitos yf devociones. Nadie desconoce el valor del arte gric- ‘gp. Todos lo admiramos; es proporcién que siempre se busca, que se aplica como medida de todas las cosas. Grecia provocé tuna conmocién, Su concepto de arte do- rina y somete todos los intentos. Para el hhombze de hoy, ¢s usual el arte y el racio- nalismo griego, no ast el conocimiento de su economia y de su raz6n social; pero sambas son preocupacién constante para los historiadores. No es facil desglosar tantos siglos de positiva cultura, sobre todo si se busca un tema como la medicina. Al ser esta profe- sién un fendmeno hibrido, de arte y pen- samiento, de técnica y espiritu, de ciencia Y carictes, de costumbee, se la encuentra ifilerada en toda la cultura. Descubrir Iz ‘medicina en Grecia es aprender el com- plejo griego. En Grecia estin cimentadas todas las especulaciones de la. medicina actual —de auestea mediciaa— cambian- tc, mecanicista, tecnol6gica, que olvida 80 ‘con frecuencia la especie y el género al que esté dedicada. La medicina de hoy, no obstante su avance, si igido caricter cientifico, su ‘exactitud, reserva y guardaré para siempre un lado toméntica y misterioso, Antigus brerencia donde [os elementos mezclados nos hablan de asombro, de ilusidn, de con fianza y empirismo, sin los cuales se pri varia del valor humano para transformarse ‘en una técnica inflexible, estéril, rigarose, severa, fila y falta de los ideales con que fue crenda. En todos los tiempos y los imbitos, la medicina ha realizado su labor; lo mismo hoy que en la épaca clas ca, su misin ser acompanar al ser bumano inientras exist, preservar su salud, aliviar su dolor y alar- ‘gar sa vida. En lo clisics cobra la medici na su sentido espiritual, Grecia es una especie de nacionalidad leve, volitil, que nos encierm en sus entrfias. De cémo Grecia emprendié a medicina En una Grecia arceica, dispersa, de con- Formacién doméstica y fatemnalista, n0 ci ‘bia una nacién unida, aglatinada. ;Ni en los momentos inés impcstivos de sus ciur dades! Los intents conquistidores de las per ‘8s, originaron a unided politica de los griegos, pero s6lo en la: circunstancias de emergencia; al pasar el asalto, el pueblo _griego se refugiaba en su desuniéa. Una ‘demostracién de esta fragmentaria Grecia, se tiene en las constantes guerras que al- gunos esiadas de [a héade mantuvieron Contra sus vecinos, sus hermanos de raza Este hecho ligado a los afos transcurridos, Gificulta encontsar la sscuencia evolutiva de Ia medicina griega sobre todo si se SOMOLINS, GUARNER Y eanTiNEZ-8AKz concibe Ia medicina helénica como el con- junto de formas que le dieron pequetios ‘grupos e incluso individuos, La medicina hhelénica no fue por lo tanto ane unidad, TLos expertos han intentada varias clasifi- aciones pero siempre coinciden en con: siderar tres 0 mas etapas, antes y después de Hipscrates. El tema que shora nos ecupa, se sitda precisamente antes de Hipécrates. El ori- Gusdro 1 Afos AC, Cronologla de la civiltacién open 00 seo Sito saa 300 CCataens minoiccelicie cielo Nealtcn griego Nesitio Zitense cio Brows 2400 34m 24m 2300 Minoico ewprano ETE Helico erpesno cI ‘Minoicn met ‘Betidico medio 160 (eTerremoto de 15702) Destrcciéa ATES ton tenet Hiero (elaciéa con Ein Mos nae) 1300 Minoco wedi LLIN Toa Helio taro 403 iyo ices 1200 Germ tle Troya ~Invasidn donia Tien Sebmicence io Submigens si S00 omer? pe Heo 0 Bonsraién risa Sm Bali ii 1s MEDICINA EN LA ANTIGUEDAD CLASICA, ‘gen de la medicina en Grecia es sin duda fl mis oscuro y desconocido de esta mate- Fla, Las fuentes sobre ete punto no man: tienen un criterio, se pierden en asuntos particulares y en persenajes legendaios, En varias obras, los canceptos de enfer- medad y terapéatica, sesitian en distintas etapas de Ia historia. Otras, disponen sus hallaagos hist6ticos médicos, paralelamen- te a la religién, Perc es claro que Ia religiéin y la medi jncorporan a una evolucién del conocimiento; el conoci- ‘miento humane es inseparable de su vida EL hombre stimula su saber y éste 2 su ver lo hace vivis.* La civilizacion egea y creta Pocos son los testimonios de una Grecia primitiva; tres periodas inicigles, y una etapa neolitica se confanden ¢ integran fa civilizacién. egea (euadro 1). Ea st distribuci6n, este complsjo no siempre fue uniforme, Las costumbres egeas tuvieron claras diferencias con las del continente eriego y Ia desigualdad se debié a las Consfantes relaciones esiablecidas entre di- epee ete tia. ees a ee Bos 2A errs ate a bests iio nomrds g ie eae lili aio as tag Bi ‘ersas cultura, De agai la mezcla confusa de las tradiciones griegas. La cultua egea fue ua fendmeno particular, dstinto al egipcio, aunque en ocasiones dendor de cate tltimo, Su estudio, aun ewando indi- recto, descubre asi mismo influencia exip tias, de los hititas y babilénicas, como puede ser confirmado en Ios restos fol Llércos de ls islas, en las reminiscencias dle los poemas de Homero y en Ja obra de los historiadores como Tucidides y Hero- doto. Todas estas coferencias exhiben ua impreciso Iegado a la civilizacié griega Puede afirmarse que Grecia, es la herede- 1m inconsciente de la revelacion ees. Seguit en detalle las emigraciones que pmuneanon fa expanciin y prrdijennn Ta seaparicion de esta civilizacidn «s muy complicado, Se sabe que al tezminar la talasocracia minoiea, el poder macitimo fue abserbido por los fenicios y los erie ‘0s, La competencia entre estos pacblos fue tradicional, pero no dej6 de provocas influencias mutuas. La deuca que los gric~ {gos tuvieron para sus predacesores se ma- Difiesin entre otros detalles, en Las pal bras griegas de origen extrano, etudiadas timoldgicamente, que revelan su raf criental; 0 el mismo alfabeto griego, pro- cedente del fenicio. La civilizacion del egeo es enigmitiea; la arqueologia aclaes 0 prosperidad, Creta fue base y arraque de eata civilzaci, y mis tae en Chip, al petiodo minoico sobrevivis a otzos la- sates. Creta hizo de su historia un complejo caltural, un muestratio; allt se confundie- ron las costumbres de’ Africa y Oriente. Representd el enlace de todas los grupos Y civilizaciones de entoaces, Aunque de Tacga vida, Ia cultura cretense se encaen- tra unificada en la figura semilegendaria del rey Minos que da osigen toda una 82 cera, Ia era minoiea y a su continuacién A través de Micenas, fos griegos adop- taron las costumbres y cultos religiosos de los cretenses. Hesfodo y Herodato nos fos recuerdan al relatar el origen de los dlioses.griegos. Fue en Creta, donde se _gesto 1a vieja historia de Cronos y Rea. En esa isla naci6 y murié el primer con- eepto de Zeus. Ahi esti todo el legado ‘mitolégico que conforma después la reli gin griega, Creta concretb su florecimien- fo en la tradicional y neoltica ciudad de Caossos In que sucedieron oteas foceli> dades: Faistos, Mallia, Magasa, Palaicis ro, Carfi y Heraclibn. La devastacién de estie cudades cainciié con los movimien. tos slsmicos y Ias invasiones de los afios 1500 a.C. Bi apogeo y lx decadencia de sta isla, se confunden entre In historia y In eyenda. Desde los deubrimientos de Evans, la incesante bisqueda arqueolég ca ha testado de reanir les piezas de esta gran. cultura Ea un principio los investigadores al descrifar algunas tableins cretenses, de los periados minoicos, quisieron encontear ‘una similitud con Ia hieritica egipcia. No ‘obstante, en Jos tltioos 10 afios, Ventris y Chadwick han intentado aplicar a los signos una sistema experimental de valo- rcs silibicos, pero la iniégnita no esti resuelta, Creta, pas6 por la edad del bron- Al fina de adn ern de ocho aio, Minos se ‘ea une fenporaia al orale Ge monte ia sesponi en. comnitey com Zeus dando ach alr mando eebiedamuecn Coes rt Ecnovas en podsts eatalae y Ie convo Enel ion Al mismo tempo ex Ie oBtancén Ena Conon ted dees Fats sr devoragos por ct minoiiry 9 al ment Eeaisidn Ene orga se mentee [supe ‘aca diy ta dependence one Bucs Sh didn SOMOLINOS, GUARNER y MARTINEZ BAEZ ce, por la del hierro, para mis taede decaet Y cerear su primitiva historia EL conccimiento en ef egeo Macho mis que los vestigios materiales, importan en este punto las especies intan sibles de la cultura. Las demosteaciones dena cclacién entee as dvilizaciones del Oriente, del Egeo y Grecia, permiten se sui el rastro del eonocimiento Iamano, y {su vez, de la seligion y la medicna, La vigencia de alguacs conceptos pric 405 hizo que algunos investigatores obs- tinados, antepusieran Ia cencia racial de Ios griegos, al conccimiento aplicado, vulgar y empitico de los egiprios y mesee potimicos; pero aquel que se docamente sin apasionamientos, descubrist el admi- rable conocimiento\cientfico de estos pueblos. Gran parte de aquella ciencia arcaice fue real y de un aivel superior a Ia cienia primitiva de los griegos. No es justo exaltar y confundis los axpectos cionales de la ciencia oriental y Ia ciencia sricga En el curso de fos afos, el hombre fue acumulando expetiencias, Con intentos y recuerdos aprendié a saber lo que ocurtas su conocimiento empixico ceecinte fue organizando su material y desacrllé el 130 de varias téeniexs para alters el amn- Bieote y hacer cambios en su modo. de Vida, Se ditigié al porqué? EL hombre primitivo fabricé utensilios y fue cono- Giendo animales, plantas, lenguaje; cte6 aan simbolismo, tos, mitos y con estos elementos, lew a forjar un pensamiento tientifico. El hombre de entonces no se conform con la observacidn y ls descrip= ida directs, quiso compreader el fun- ionamiento de alguna parte del medio ambiente. LA MEDICINA EN LA ANTIGUEDAD GLéstcA Y¥ Io propio ocurri6 con el pensamiento abstracto, El conocimiecto de la cviliza- cién. egea permitié el desarrollo de la religion griega. La religion y la mitologia son una amalguma, y el problema espect- fico de su origen s# ha querido resolver en vocablas cientificos. El fetichismo se consider6 fuente probable de la religiéa, pero en realidad ¢s el objeto asociade « un. alto. También se ha hublado de animis- ‘me como medio para invacar los espec: tos, pero In mitologta, con Ia personili- cacién de os cuespos cdlestes se opone a se animism, sin olvidar Ia idea arcaica del Totem en que se reouerda donde se bused la procedencia trisal, muy cercena a la de ciertas espories de animales. Algo gun6 la religién en el Exeo: los viejos ‘misterios contienen elementos importantes scbre la comunién con & Dios y Ja salva cidn del alma, Construyé ua coacepto su perior a la creencia en el poder y Ia in- Fluencia de ciertas personas u objetos inanimades. La medicina egea Entre tanto, con ef desairollo del saber y In herencia de otras culeuras, la eivilizacién ‘egea dio espacio a Ja msteria médica. La medicina fue vulgar y dela misma manera que el conocimiento, evolucioné hacia el empirismo, se adopt6 una actitud objetiva ante la realidad. Los cinc> sentidas fueron cl instrumental def médico de entonces; su te catenas celbeaban festivals, donde ie eercie sre pais coumlenet ise si ij en nti fet on sobs ton freneucon teprenenebes Ie ones fos anes lo habla tala para dese Tvl y eendeeio. Der de ext sta mito, stew fe fourteen) in nomad el ala 8 experiencia desenibrié desde muy antiguo Ja accién terapéutica de ciertas plantas, y 1 valor calérico de algunos alimentos, ppero Ia secuencia de los conceptos de enfermedad y terapéutica, sobrepasaron 1 empirismo y Hleguron a un petiodo de incertidumbre, No se ha encontrado en In medicina egea, un solo testimonio del primitive conocimiento cientifico, Su de ‘ostracién se ha hecho a otros niveles, tal vex en los métodas ingeniosos para llevar ‘agua fresca a las habitaciones y eliminar Tas aguas de uso y los residuos; es posible que las instalaciones de algunos cuartos de bailo, muestren un talento cientifico, Ta medicina, en su esencia, se mantuvo fa la magia au eterna campafiera— No import6 el conocimiento aportado a Ia ‘materia médica; por encima de él, la ma gia dispuso los procedimientos a. seguir La medicina egea fue vulgae, empirica, indgica y sagrada. En sus manifestaciones hoallames las diferencias, ninguaa de estas cexpresiones fue pura; se entrecruzaron hnasta encontrarse estrechamente asociadas La medicina empirica, pletrica de uses migicos y Fervores religiosos, dificult6 un estudio por separado, Se sabe que la magia parte de un senti- miento de superioridad, de una convic- cidm del saber y de una confinaaa ilimi- tada en el poder bumano, En su evolucién cultural es anterior a la religion, La fuerza que mueve ol pensamiento migico, no es comparable con la devacién del hombre religioso. En la magia se ponen en juego los poderes ocultos de Ia naturaleza; en cambio en la religiosidad, por las siplicas llega el Favor de los sexes divinos, La me- dicing sagmada usa Ja oracién, en cambio la migica emplea el canjuro, No obstaate, ambas pricticas se confundieron para for mar una medicina empfrica, donde le a“ enfermedad fue eoncebia como un casti- 40, como la expiacién de una culpa TE padecimiento se inaginé como o- sualidad 0 propensién, pero sobre todo fue el juego de una culpa y su condena A Ia enfermedad por cstige, se contra pone una cueacién que va de acuerdo con dl proceso que originé el mal. La curacidn fue por contacto y trsmisién, tatamientos de limpicza, palabras petsuasivas y la ex traccién demoniaca. La terapéatica bused Ja prevencién en Ia purificacién, la abst nencia y el ayuno. La medicina en Creta Tae conceptes anteriores san camenes, c& repiten en todo el orbe y resumen el pro- ceiler de In medicina ezea. Lo cierto es que para canfitmar estos conceptos, henos de recurrie una vez mis a crisal de la a tura cretense, La medicina en Creta, al igual que lz cegea, fue vulgar, empitica, magica y sa- ‘geada, En esta confusida de formas, Creta Foe la época de una medicina en jerogl ficos, el momento en que el hombre creé tuna serie de seres sobremturales a los que mediante peédicas y sacificios, ofrendas Yy exvotos, solicité In prevencién de cual quiet mal, El cretense ador6 objetos 0 seres esti tics con poder divino; ms tarde los re- peesenté con formas de animales. Ea la religion minoica, las creencias se vieron encasnadas en el Aguila, el toro, el pesca do, De alli salié la eepresentacién ibrida, a meacla de hombre y fiera, donde el poder sobrenatural era mayor. En Creta se diviniaacon los asteos, ¢ les dio forma Inumana; se adoraron en grutas y santua ros domésticos, se simbclizaron coa figu ras obesas, ideal de belleza, simbolo de SOMOLINOS, GUARNER ¥ MawriNEZ BAEZ abundancia y fedtilidad, El signo filico realzdo, fue demostaciéa de feeunda- ci6a y poder sexual, Un hallazgo de siete figuras ilustré el desarrollo de un. parto y, en los sintuasios, Ia medicina se mani- Fest6 con Ia reproduceién en piedea 0 etuco de miembros bumanos a manera de exvotos (piers, pies, roncos, sens, ojos, ofejas). Simple alusién a la enfer smedad, y la paste afectada,* Entre ls deidades minoicas que trai- cionalmente s¢ relacionan con la medici- ta, recordamos la dios de las serpientes (as lamada. por los arqueélogos).. No es seguro aljudicarle un significado directo con la materia médica, pues parece ser que sa poder se ejescié en pequelios adonato Fios de casas y templos; fle antecesora y reemplazo a fa diosa del hogar. Hay du as sobre el valor fetichista de las ser pientes que sostienen sus manos, pero la interpretacién de la serpiente por los ere- tenses fue moy diferente a la que mis taede se dio en Grecia. 1a serpiente en Creta fue vigilante de las casas, coincide esto con un alto a la serpiente guatdiin y existen deveciones patecidas en oteos lugares, como La diosa se las serpientes de Palestina, que a sa vex, se relacionan coo algunas costambres follddeicas de la actuatidad Ua see de repesetaionesen ebjetas vt vos» fgunilt nox seen sobre a polos del puublo cecansa. Se him destubierty fous elise de Gratsesafecndes per ls ealeedad waa pict fom sos eridentes de ekfartasis, la detorms {Sin des Srganos sexusles de" uaa sinjer Yi heen de om pie maculae Tas site Fgura munenadas muctean ua pao gemelr, ustiag deste Ie posician Tlie Pads Fs a resentocsgn occipital de ft0.¥ ln ‘spain de" placenta a apes, Ie igust ‘uae exhib al feruode feo mastanio le abe sepoe al cuell el ero ments que dos Sls Sten i tty ol scr ‘ima igure” tpresentan ly expulida de" Picenta ylos ciladoe prodgadon a lacus LA MEDICINA EN LA ANTiGUsDAD cLAsicA En el desen de encoatrar un sentido al cspiritu de Ia diosa de las serpientes, se hha querido compararla con Palas Atenea, [pero no con la ficreza guerrera, con que Jn presenté Homero, sino con la calma y Ia sabiducia con que la esculpié Fidias. Sin un significado directa sobre Ia salud, la diosa de las serpiences fue una impor- tante deidad doméstica, ‘Al igual que todas las culeuras primi- tivas, Crete busc6 su terapéatica en las plantas. De algunas de ellas, se discute todavia el valor aromitica o farmacoldgi- ca. Se sabe que las cre-enses hicieron uso cotidiano de la menta, la calamenta, el ajeajo, ol sésamo, el szafrin, ol tragacan- to, el acénito, y tantas atrae cuyo testimo- rio aparece representaco en toda clase dé objetos, estatuas y frescos minoicos. Tam- bién se conoce Ia presencia simbs lecorativa de la amapcla y dete los efectos opisceos, el poder somnifero que mis tarde fue representado por el dios Hipnos; pero la amapola, es una planta cuyos efectos pueden desviarnos del sentido médico, para acercarnos al rmisterio religioso.® Fue notable, y sobre ello se ha escrito mucho, el conocimieno en materia de higiene. Pero sin Hlegar a exageraciones, todo ha sido ea relacién con Ins canaliza cones y drenajes, sistemas de entradas y salidas’de agua, bafios, piscinas, que ha- blaa de un hibito higitnico, Ea las cons trucciones minoicas, Ia orientacién, los * Desde 1936, en que Maroatos descbvié ea sanae ce’ Gna figura conoid cre “ig de as amapole" se Lea da ste rélicn, La dow mics, lavados en ix cabesn, tren alieres ojos. ue Seren ted Ig agen del iu de wot tmntSbe Anos actin Yon Std Sabre el: eplee semalfer de Ta aapola fs pain acto, el ap Sian itn costa Bree i emia que cde 2 parti de ipSerate es faerie ars eet. tran fod Tos seeder mains 85 cubos de luz y la ventilacién, asi como su disposici6n urbana, son Fuente de asom- bro e inspiracién actual, Hasta agui lo referente a Ia medicina cretense. Puede aceptarse que, en Ia civi- lizacién egea, las especies del conocimien fo se abonan entre sf, y aunque exisia el empetio sistemético de buscar las cosas fuera de su recinto es dificil delimitar las aportaciones particulares y seri preferible dejar a otros interesades, con mis fuentes ¥ posibilidades, que realicen este trabajo quiparac no es una falta, mezclar es una bacbaridad, Cada vez que se cava en el terteno sriego, se descubren con més claridad sus antecrdentes. Fs verdad que Grecia aacié de las ciecunstancias de otras culturas, pe- 10 también es verdad que Grecia se ve por si misma, Los griegos crearon en su i ginacién la mitologia de su prehistori. Ocras medicinas primitivas Las nuevas fuentes para el estudio de la ‘medicina helénica, tras Ja ruina de la ci villzacién egea, son los efectos del mito délico y la obra homérica. Ambos pueden encadenar algunas ideas reconstructivas. En Delos surgié poderosamente una medicina relipiosa; Ia isla de Delos, det {grupo de las cicladas, obtuvo su fama de | mitologia, fue una isla flotante que Zeas condiciond como lugue de descanso pata Ia diosa Leto, quien a su ver dio a luz dos gemelos, Apolo y Artemisa, Ea Delos nacié Apolo, dios de la salud'y fae por tanto, lugar de peregrinaje. Sélo unas ‘uantas cisternas marcan Ia existencia y posicién del periodo clisico. Cercano a cesta isla se encuentea el islote de Rencia, que sirvid de cementerio y Iugar de mas temidad para Jos habitantes de Delos, ppues estaba prohibido el nacimiento y Ia muerte del hombre en esta isla sageada, Su leyenda alcanz6 In realidad, tal parece que aquella probibicién de nacer y morit en Delos ahora se cumphese. Delos pet~ imanece desolads, Al Fenémeno délico, se une la obra de Homero. ¢Qué obra de Homero 0 ha sido objeto de numerosos estuios? En sus poemas épicos, Ia magia no eepresenté hinggin papel, el origen de todas las en- ermedades, fue responsabilidad indirecta de los dioses, En La Tifada, Homero ha- bl6 de Asclepio, pero como médico insig- fc, sin divinizary apareci6 como padre de Macaén y Podalirio, a ellos les comunicd Jos conccimientos caratives que aprendié de su masstro el centuuro Quitén. Macaén. y Podalirio obran, operac, peso también ‘combaten, BL mismo Macan eesulté heti- do por una flecha de Paris Homero representé la cuintaesencia de la medicina empirica, y asl, con las tradi- ciones délica y la homética, se configura ton las medicinas griegas —a sagtada y I empfrica. Ambas definen clarsmente sus derroteras y dejan ateds a vetusta medicina egea, cargada de teadiciones po- palares y de magia, Grecia en conjunto nos dejé una gean leccidn, En el examen de la mentalidad griega, ctitica y especulativa, de sa vida religioss y politica, encontramos bs causas y el ‘rigen de la libertad de jnicios de obser- vvacion y de investigacién. Fenémeno que ppetmitié flosecer las ideas libremente y garantiz6 el desarrollo y evolucién de la medicina, SOMOLINOS, GUARNER Y MARTINEZ-BAEZ MLA RIGURA DE ASCLEPIO EN LA ACADEMIA NACIONAL DE MED) Vicente Guanes ® Desde hace cerca de 50 afios, a partie de 1927, Ia figura austera de Asclepios, dei- dad griega de la medicina, contempla Jas sesiones de nuestra Academia. En efecto, cen esa época, el doctor Florestan Aguilas, miembro honorario de esta Corporscién, ddoné Ia escultura que se encuentra, hoy dia, en cl auditorio, En la sesién def 3 de agosto de 1927, Exerardo Landa,” presidente de la Aca emia, aprobé Ix colocacién de la stata yel dia 1u. de octubre de 1927, en sesida solemne, Tomis Perrin” hizo entrega de la eseultura en un diseurso del mis brillante estilo literario, Hablaron también fen esa ocasién y en prueba de agredeci miento, el doctor Luis Viramontes * y ef propio doctor Everardo Landa. Em el doctor Florestan Aguilae, profe- sor de odontologla de la Universidad de ‘Madrid y al parecer un miembro destaca- do de su especialidad, que habia sido designado Doctor Honoris Cansa de la Universidad de Pensilvania y Presidente del Congreso Intemnacional de Odontol: gia de Copenhague, En 1922, el doctor Aguilar, dotado, sein se dice, de un ca ricter verdaderamente filaatr6pico, reco ri§ el mundo civilizado, pidiendo un bolo para ayudar a sus colegas rusos, que habian sufrido los infortanios de lk revolucidn ocurrida en su pals, Fue con motivo de este viaje, cuando el donador de nuestra estatua visité México, A partir del afio de 1927, In imagen de Asclepios constituye el ormamento de la © Aualiwio sumerstio, Cato Médico Le Ret. lastalo. Mesiano del Segero Seca EA MIDICINA EN LA awnicUsDAD cLAsIca “Academia. Su aire grave y viel refleja una fisonomia que probablemente Je fue ad- judienda, al resultar uno de los primeros fn entrar en contacto con el dolor y el saftimiento del hombee occidental EI simbolismo Cuando estudiamos Ia medicina griega, resulta muy dificil sefalar con precisién sus origenes y considera como una me- dicina propia del pats helénico, uv como ‘un conjunto deconocimientos formandaua sistema particulary distinto. Tampoco po- demos contemplarla en forma aislada, co- ‘mo una amma especifice del florecimiento de In Hélade, sino forrsando parte de ese asombroso ayge cn otros campos del arte yr del conocimiento humuno, la literatura, In filosofia, Ia arquitectura, Ja escultura, Todos nuestros datos sobre medicina siege en el aflo 1000 4.C, los debemos a los poemas homéricos. El poeta, aunque ciego, describe as lesiones ocisionadas por lanzas y flechas. En el Canto XI de La Ifada,* podemos leer que Néstor con- duce a Macaén Iesionaio, pita cuzaelo y que Foripilo, herido yor una flecha en un musto, ruega a Patroclo que le extiai- gr el dardo y lave la sengte de la herida ‘on agua tibia, aplicindole a contimuacién, los bilsamos que Quirén, el mis justo de los centanros, habia sevelado a Aqui- Ies, Las deidades griegas que poseen un ca- sleter protector de Ia medicina son aume- rosas, Puede decirse incluso, que en una remota époct todas los dioses helénicas a7 posefan cierta capacidad carativa y no €s sino algin tiempo después, cuando se co- rmienzan a seleccionar aquellas divinidades alas que se atribuye este poder migico. El inventor del arte de curat es el dios Apo- Tol que flaman Alexicacos, “el que Jogra expulsar todos los males". Asclepios que los romanos amarian después Escalapio ¥ que con el tiempo se convertiria en el dios de In medicina, era hijo de Apolo. Tas Fuentes mitolégicas que se refieren al nacimiento del culto 2 Asclepios, nos di- cen mis al respecta que los descubsrimien: tos arqueolégicas FB] culto del dios procede de Tesalia, ext parte septentrional de Grecia, donde Las teibus heléoicas, entiacon pos primera vez en contacto con el mundo mediterri neo y fue la poblacién de Trike, la que hacia el afto 1260 a.C.), ostenta prioridad en el nacimiento, del que las mujeres laman en el poema de Herondas el “mé dco olimpica de los Doses". Segiin el gedgrafo Estrabon ,Asclepios nacié en las rillas del Leteo, donde las sombras beben el agua para olvidar el pasado, aunque hasta el momento actual no ha sido posi ble realizar en estas zonas excavaciones tan amplias y fractiferas como en Cos 0 en Epidanro, La poblacién de Trifeka © Triftkala, como se Je lama en nuestros dias, fue bizantino-cristiana en una oct sién, después turca y hoy en dia pertenece 1 Grecia, se encuentra emplazada sobre Io que era en 1a antigiledad el santuario del dios y las piedras de sus cuinas fueron tilizadas en distintas épocas, pasa la cons- tnuccién de la ciudad actual, En este fuga, cl cars del agua describe una media circunferencia y rodea toda esta zona en sus puntos oeste, sur y este, donde el rio recibe el nombre de Letais 0 Letco; nom bre que deriva de Ia palabra “olvido” o “retiro”, alusién verdaderamente mitol6: agica, ya que “ete” significa aislamiento y Leteo o Letais es el rio que pertenece « Aislamiento,* definiéndos: de este modo, desde un punto de vista geogrificn, a la regién donde Asclepios vio Ia luz prime- ta, La leyenda tesilica, Ik mis auténtica, sin duda, nombra a Ischys hijo del rey de Elatos come su padre y a Coronis como su madre, Sin embargo, el tema aparece con diversas variantes, ya que machas ve ces, la mayorla de ellas, son mis leyendas mitologicas heredadas coa los siglos que Fucates inventadas con fines literacos. Para algunos autores, el mito serpentario que acompafia a Asclepics, debe ser bus- ado en la evolucién de tlgunas deidades infernales. Puede vislumbrarse en ello una relacion con esas fébulas de Ia serpiente, cn los antiguos mitos biblicos, ea los que cl reptil era considerado como cepresen: tante de fuerzas subterrineas y por tanto de los poderes infernales. En una épaca anterior, Ja deidad médica aparece como tuna serpiente a quien los enfermos pee- sentan oftendas votivas.® Quizh este culto tuvo otigen babilénico, 0 incluso evoca el episodio biblico del ofidio tentador y tam- biéa curndar de enfermedades, Ta serpiente sagrada de Asclepios es la Coluber longissimus, que habita ex. los Arboles en los paises de la Europa meri dional y Mega a alcanzar una longitad hasta de dos metzos Segin la fibula de Hesiodo,® que al parecer fue difundida en toda Grecia, ef ey Flegias de los lapitas dio en matrimo- nio a Isehys, hijo de Elatos a su hija Corcnis ya encinta de Asclepios, frutos Ja medicina, en cuyas maaos més tarde se ‘encuentra todo el poder de las plantas SOMOLINOS, GUARNER ¥ Mantinez-RAxZ ccurativas, que le dieea a conocer el. cen- ‘auto Quirén, cuando le adiestré en el arte de curar enfermedades. Por otra parte el nombre Elatos, sigai- ficaba en griego antiguo "pino” y Quieéa que era cl mis afable de los centauros, maestro de dioses y preceptor de Aquiles, 1 en el Pelida o bosque de ppinos. Existen relaciones mitologicas especia- les entre Elatos y Quirén, La flecha de Heracles ditigida contra Elatos, hiere mor- talmente 2 Quirén en la gruta de Malea, Ast Quirén refine todo elemento apoléni= co. En efecto, 1 pesar de su cuerpo de caballo, que define a aquellos seres libri os creadores y destructores que fueron Ins cantausos, @s el maestro de le medici rma. Apolo retita del vientre de Coronis a Asclepios, en ef momento en que el cuer- po de su madre, muerta por las flechas de Attemisa, va a set incinerado y lo confia a Quirén, al que mis tarde volverfa a la vida a Glauco, a Tindaro y a Hipélito y @ el centauro quien Io lleva a su caverna del Pelidn, para educarlo y trasmitisle st ciencia terapéutica. Apolo fue primero en el culto curatotio y, mnitol6gicamente ha blando, era el padre de Asclepios, Quedé tambiéa asi, en Ja leyenda popular, que Coronis, la comeja, que inicialmente era blanca, se convirtié en aegta a pastir de si delito amoroso, Asclepios abandonado en el monte al nacer, fue alimentado por tuna cabra y guardado por el perso de un pastor, que lo ador6 como todo el pacblo, por su aureola, Quiréa lo ened, enseién: dole las hierbas que sanan y mataa y los censalmos que alejan las dolencias EL culo al Dios Ta medicina griega de esta época se lle- vaba a cabo en los tempfos. A los mages 1A SBDICINA EN LA ANTIGUEDAD cLAsica aislados de la época prehomésica que la pucticaban, les sucedieron Ios sacerdotes del aio 800 a.C. En La Ilfada, Asclepios no es un dios. Es un médico irrepracha- ble y, mucho mis tarde, cuando Asclepios serd divinizado, a los sacerdotes que ejer- tan su rito se fes Muna Asclepiades Aquellos lugares mas antiguos del calto al dios fueron Titano cerca de Sieyone, tome, Hecalia, Epidaure, Totorte, Caide, Gyrene, Todas, Tantox » Pérgazno, ‘Los enfermos acudian a1 templo para ser curados por la deédad, al que Ia anti gut literatura greg daba los titulos de Tatros (médico), Orties (enmendador, enderezidor) y Soter (stlvador)." Rev tian estas curaciones, segén las inact ciones de las estelas del templo de Epi dauro, un carfeter comoletamente mila Br0s0, Ta verdadera medicins tenia muy poct cabida en los templos griegos, No se iba, 1 Epidauro a consultar a médicos, sino a jnvocar a un dios compleciente, que cura- ba 0 aliviaba los sufrimientos de fas homn- bres, Sin embargo, si lo: Asclepfades no poscfan inicialmente nociones médicas, es probable que Ins visitas constantes de pa- cientes, acabaran por desirollar, en algu- ‘nos de ellos, el conocimiento detallado de clertas enfermedades, De este modo se fue ‘reando poco a poco una medicina empi- rica, elemental, que bajo el amparo del divino Séter 0 salvador les asegurabs cf favor populas, Ta colonia de Emporiéa a estatua original de Asclepios, de donde fine tomada esta copia de nuestra Aca demia, fue hallada in si en el abo de 1909, ea la colonie griega de Emporion, al noite de Catalufa y figura en el Museo 89 Axqueoldgico de Barcelona en Ia actuali- dad, aunque unos afos antes estaba en cf Museo de Arte Barcelonés, que habia suspiciado las excavaciones realizadas por é Puig y Cadafalch, Manuel Cazutso y Emilio Gandia, Los resultadas de ellas fueron public dos en el Anuatio del Tastituto de Estu- dios Catalanes en 1909-1910 (vol. II, pig. 286), bajo el titulo: "Los hallazgos excultéricos en las excavaciones del Am- ypurias”. La estatua fue encontrada en una cisterna romana, cerca de un pequefio templo emplazada en la Nebpalis Después del florecimiento de Sicilia y de la Magna Grecia, establecieron los _griegos grandes relaciones comerciales con los etruscos de Toxaaa y con Ia Roma primitiva, y extendieron sus colonias para poder explotar las riquezas metalirgicas de Espasa.* Hacia el atio 600 aC, fundaron ‘Massalia (Marcella); Ilegaron a Tartesos ca el Guadalquivir, en los comienzos del siglo viy finamente a las colonias de Mai rnake (Milaga). En sus viajes de Massalia A Tartesos, se vieron en 1a necesidad de exteblecer una escala que les sirviera de refugio, y In encuentran en el golfo de Rosis, primero en una isla formada por Ia antigua desembocadura del rio Flu- via, punto conacido como In Paleépolis 0 vieja ciudad de Emporién, término este timo que traducido al griego quiere de- fir “In factoria” nombre, que como dice Bosch Gimpera, pone de manifiesto la lntensidad de su vida comercial, Otra es ala obligada que hacia Ia_navegacién agriega desde Marsella hasta Tartessos fue Zacinto (Sagunto), ‘A fines del siglo vi con el crecimiento de la poblacién, intensificada por nuevas linmigraciones de Jos foceos, Ia colonia de Emporioa se extendit hacia el lado coati 90 rental del golfo, y asf qued6 constituids la nueva ciudad 6 Nedpolis. Fue sin dada cn éta, donde se realizaron el mayor nie mero de construcciones, entre ellas pode- ‘mos considerat el templa de Asclepios * y mis tarde cl “Baleaterion” o lugar de deliberacién de los magistrados y una pla- za piblica destinada al mercado y 1 las asambleas populares. Desde fines del si plo wv a mediados del im a.C,, el comercio de Emporion se extendié por toda Cata- 1 Bitoa de Atcleplot de in Aawenia de Me dicin SOMOLINOS, GUARNER ¥ staTINEZMAZ Jufa, © influy6 considerablemente en Ia poblacién. indigena. Mas tarde sefala ef mismo autor, en su articulo "Croaologia € Historia de Emporién", que durante las gucrras plinicas Ja poblacién se convirtié en alizda de Roma y constituyé una buena base naval de los romanos. Es Eimporiéa ‘0 Emporiun el lugar donde desembarca- ron los Excipiones, con su ejército, para rescatar la peninsula del poderfo cartagi- nés siendo recibidos al principio los roma. ‘nos por Jos ibéticos y las colonias griega como amigos y aliados. De la parte antigua de Emporién, la Patedpolis, no quedan al parecer mis res- tos arquitecténicos que un capitel jénico y el fragmento den relieve, arasc. del temple de Artemisa, De la Nedpolis se conocen: un recinto amurallado, toda Le disposicién antigua de la ciudad y diver- s03 monumentas, Como menciona Bosch, la prosperidad de Emporién se refleja en sus hallazgos, Ademés de la estatua de Asclepios, han sido encontrados: una bella cabeza de Ar- temisa y una figura de mfrmol de Afro dita, de estilo praxitélico, La cerdimica ppettenece a todos los estilos de los siglos vy vac. yal mis puto arte helénico, La escultura ‘La estatua de Asclepios mide 2 metros 15m, de alto y fue esculpida en. mizmnol pentélico, como ha sido comprobado por Philadelpheus (fig. 1). Une prueba alu dda por ef citado arquedlogo gricgo, cs Ja de que al somper el méemol pentélico, Se percibe su earencia de olor, mientras ue el marmol de Paros y otros materiales anilogos griegos, tieten wa olor azufros. EI dios es representado como un. hom. bre ya maduro, con cuerpo robusto y IA MBDICINA EN TA ANTIGUEDAD CLASICA -isculos atlticns, en posicién erguida, apoyada Ia figara sobre su pie inquierdo, con sa pie derecho un poco ateis camo se dbserva en la obra fidisica, que propor ciona un cierto movimiento y geacia &to- da Ja figura, incluso a la ropa que cubse parte del pecho y deja al descubierto Ia mitad derecha del to10 y el beazo del ‘mismo lado. Represents 1a tela el manto de lana o bimlion, que llevaban todos los ciudadanos grieges, repreventativos de cierta clase social coma los filésofos, los ancontes y ottos personajes importantes, y fue Iabrada en Ja esatua, como sefiaia Philadelpheus, al estilo Fsico," buscando In transparenca de la tea adimieablemente frarach Ta espelda de la figuss, en con traste con el sesto de la escultura, tiene Ja apaticncia de estat mucso menos trabaja- do (fig. 2), lo que hace suponer st ubicaciéa delante de ua muro, Lx cabeza 2 Estas de Asclepios, dtl, 91 nportante y majestuoss, pero tiene al smo tiempo una inefable dulauca que queria representar la misericordia y la ca- sidad en la antigiedad pagans. Esta cx bean reeuerda el Poseidén del friso del Partendn y también se asemneja mucho & Ia cabeza dé Asclepios de la isla de Milo, aque es muy posterior gla de una estatua aselépica de Epidauro. La barba, como el pelo, se hallan dispuestos en una serie de brucles argos y paralelos, Jo mismo que cocurre en otras esatuas como el Escalapio de la Galeria de Uffizi de Florencia, bea romana del siglo m d.C., que es ob jeto de gean admieacién por su excelente terminado y por ef grado de conservacibn ‘con que ba llrgndo a nosoteos. También guarda parecido con el Esculapio ¢ Higia ddel Museo Vaticano. La tela que cubre el torso del Asclepios de Bmporiéa, ha sido estudiada detalladamente por Carpenter, quien la describe corriendo diagonalmente dol hombro izquierdo a Ja cadera derecha, donde forma varios pliegues; transmiten estos pliegues, en Ia parte posterior de la figura las lineas de delaate hacia el hom: bro izquierdo, Carpenter lo compara con cl Hiparco del friso del Partenén y Phi- ladelpheus con el joven efebo, que conde ce los toras al sacificio." Un aspecto notable de la escultura es, sin dude alguna, el de su conservacién, pues aunque fue encontrada en vatios Fragmentos, representan al unislos un con- junto de gten belleza. Lo tinica que le faltan son parte de las extremidades su periores, en el Inda derecho desde el braz0 yen el izquierdo a partir del codo, a estatua ha sido ubicada cronolégica mente por Bosch Gimpers, Carpenter y Philadelphens, a fines del siglo v, o prin Gpios del rv &.C. y constituye, muy pro Dablemente, una de las figuras de Ascle 92 pos mis antiguas que conocemos. El culto al dios de la medicina fue introducido ea Atenas a partir del aio 429 a.C. y desde tentonces se expandi por toda la Hélade, Laos sicerdotes de Bpidwuro enviaban Ia ‘estatua con [a serpiente a codos aquellos Iugares donde iba a ser srigido un nuevo templo. Las Asclepiades de Cos florecen cenite los afios 600 a 400 aC, De las estatuas del dias que se conser van a Ia fecha, hasta donde lege nuestra 3. Fatwa de-Asclepios como joven visera (140 ich SOMOLINOS, GUARNER ¥ MANTINEZ BAEZ informacién, Ia més antigua parece set Ia de Bpidauro, que data. de los ais 370 360 aC. Le siguen la de Milos 340 a, ele Atenas 330.C. y luego el Asclepios como joven viajero (lig. 3) 140 dC, el de Rodas 140 d.C., el de Roma 130.d.C., ingpirado éte probablemente en una fi gua de Akamenes; cl del Palacio Pitti de 130 dC, copiado también de uno antiguo gue es una meacla de Esculapio médico y éscttor y une muy curso, acompatiad® Asclepios de Telésforo (fig. 4), que per tenece probablemente al siglo ny que sc encuentza en el museo Borghese. Gul puede haber sido la raz6n por la que esta Figura esculpida en Atenas, haya sido teasladada » Emporiva en ef Golfo de Rosas? La explication més sencilla, fal vez no la menos cietta, es que los Brieyos Ia hubieran hecho labrae, tala dliniola luego a un templo ubicado en un lugar donde earecian de medios para po- der realizar una imagen in itn. Sin @m- brgo, cabe también preguntas, si la esata esculpida en una época en que el calte de Asclepio se enconteaba en todo su esplendor, hubiers formado parte de tua templo en Grecia y haber sido enviada 1 Emporién en wna misiéa curative, En el aio de 291 a.C. los romanos suftieron una grave epidemia y después de consultae st propio oriculo apolinico, &te les teco- ‘mendé invitar a Rona al dios griego ce la medicina* Oridio cuenta céao, decepcionados por él niimero de fallecimientos, los romanos vieron que los esfucrzos de los hombres y el arte de los médicos resultzban impo- fentes e imploratoa la ayuda de los dios, Primero lt delegacién se ditigié Delios 4 de aqui el ordalo los envié en busea det dios de Epidauro. Ya en aquel entonces el Ajolo medicus baba. sido sustituido por IA MEDICINA EN LA ANTIGUEDAD cLAsica 4. Haun de Ardepon acoopatado de Tele xo (8 IL) a el Asclepios de Bpidaura y el dios fue trasladada e Roma y en a isla de Tiberia- des le fue erigido un temple, El Asclepio de Emporién nunca nos revelari todos sus secretes, pero el hecho 5 que ocupa un lugar prominente entre las esculturas de la antigiedad, junto a fos ‘macmoles del Partendn muy cerca del Her- mes de Praxiteles y del Auriga del Delfos y de Ia belleza hercilea del Poseidén, Nos 98 cextasiamos todavia al advert su aire gra- ye y vitil, de profundo conocedor det do lor humano. Es fa fisonomia de Asclepios ‘médico que Ja humanidad contempl6 en tuna époct, considerada afin en nuesteos dls, lena del mayor contenido espiritual. HL autor hace patente su agredecimiento y rinde homenaje a la memoria del doctor Pedeo Bosch Gimpera, quien en el ano de 192, ba ls ante ests Academia de las excavaciones de ‘Amnpurias y del Asclepios de Emporién en for ‘a Snolvidable "EI doctor Pedro Bosch proporcion6 un buen ndimero de Tas fuentes biblingrificas que con tiene ete ensayo y tuvo [a generosidad de leer cl manvacrito, sos mess antes de mori. Pars dun Pedro el imperscedero. secwcedy del que escribe, [REFERENCIAS 1. Bosch Gimpers, Bs Kian Gree « Citas Barston 1927 c 2, Bow Ginpen, Pe Ewporie, Meo de Ar pest arson, 13 5. Bosch “Giomper Bs" Pridden 0 etpes de Pheielens ea Orient head, des locations ft Baller Let. Pars, 1972 i. Gaming Ri Ler bile scelireas tay Sscuaiowr D'Bnpurar Asmat dl inate ‘Festuistatslann 1.251, 1900. 4: Chuiligion, As Hirtobe de le Medecine Pinte, Pape. 1981, 6 Hesiogo, Ne 12 5. Homero: Wada, Canto XI, Gaznie. 8 Keensy, Chr Le Medrie Dita, Basen Enends Cia, 9. Landa! Diero, Gat, Mtb, Mix. 38 316 19 10, Phaldeipieus, Az Un def Oewre de Pex Fale gregus a V rite 3 Catalog, Aa Pan et niet Dissioie ctalane #60, ism, 12, Extenhon Gengrs X1V/1, 39 15 Wiimaner "Bit Divan, Gac. Mio. Mix a2678, 1957 TL ALGUNAS ENSESANZAS DE HIPOCRATES Manet Manviner-Biar ¢ EL haber aceptido tomar parte en este simposio no significa que me considere con alguna especial competencia en la his- toria de Ia medicina, No tuve [a suerte de cstudiarla cuando todavia era joven, pero iis tarde, al imponerme mis deberes do- centes la necesidad de adentearme en el conocimiento de las cuestiones que expo- fafa ante mis alumnos, precié 1a. conver niiencia de conocer los antecedentes his- téricos de cada una de aquéllas, para mirarlas como imigenes fieles y cubales, como en una tercera dimensién cuyo re- Tieve las tomara ms claras, ms compren- sibles, mis impresionantes. * Acndémics honor 4 Sabido es que la historia de fa medicina, como una disciplina sistematizada, es re lativamente reciente porque, come dice Sigerist en su ensayo iatroductorio a so obra postrera, “hasta hace poco esa his toria era la medicina misma, 0 sea que la medicina antigua estaba vigente todavia hasta hace poco mis de un siglo, como Jo manifiesta el que, en 1804, Laénnec hhaya presentado, como su tesis recepcio~ ral, unas Proporiciones acerca de ta doc win de Hipécrates. en relacién con la medicina moderna, ea Ins cuales compa riba las ideas y Ios métodos del maestro de Cos, con fos de Javier Bichat, su pro- plo maestro, y conciuia en la superioridad SOMOLINOS, GUARIER ¥ adaRriNAZ-84EZ de los primeros". Recordlemos también 4que aqui, en nuestra Facultad de Medi cina, las obras de Hipécrates eran oficial- ‘mente libro de texto atin después de 1830, y que el gran humanista y médioo Litteé ppublicé en 1839 su monumental tradue- cién de la obra hipocritica con el designio preciso de que sitviera 2 quienes se pre- paraban_ para ser médicos, presentindoles los escritos de Hipéceates de manera que pudicran ser leidos como un texto moder. Pasteur, quien ademas de haber sido el senial investigador que siempre recorda- mos, fue también un maesteo distinguido, para lo cual se preparé en Ia Escuela Normal Superior, estimaha en tanin el conocimiento histérico de las cuestiones que investigaba, que en 1858 presenté al Inspector General de la Ensefianza, en Paris, un memoréndum sabiamente clabo- ado sobre "La utilidad del método hist6 rico en la ensefianza”, y entee sus esceitos inéditos dejé una “Nota sobre la historia de los descubrimientos cientifieos”. Por cllo deseo aprovechar esta ocasifn. para ‘encomiar In actitud que en los afios re cieates ha tenido esta Academia al prestar gran atencién a Ja disciplina a la que me he referido, Ia que tanto han ilustrado nuestro colega el doctor don Francisco Femmindez del Castillo y, especialmente, quel caye premataa ausencia nos doleri [pot muchos afos y 2 quien ahora consagto tun recuerdo cordialmente emocioaado, el doctor don German Somolinos dArdois. Se nos ha invitado hoy a rememorar la imedicina de la antigiiedad clisica, Todas fas grandes civilizaciones que se han suce ido, dejaron constancias de los esfuerz0s que en sus épocas haclan para preservar y devolver Ia salud. La medicine. antigua absrcaria, pues, todo el ancha campo de 1A SENDICINA EN LA. ANTIGUEDAD CLASICA la antigitedad, pero fa cue se conviene en. llamar clisica, en cuatto a set modelo, fener autotidad y ser materia de ense- fanza, es sobre todo h griegt, aquella que alcanzé sx mayor esplendor en el siglo V antes de nuestre era. Se practicaba Ia medicina en todas las naciones que integraban el mundo de Grecia y se tiene info:macién de cémo cera csta actividad en las varias épacas de su existencia, Pero sin que ello sipaifique desconocer o menospreciar méritos, no ¢2- be duda de que quien dice “medicina _griepa antigua” tiene en cuenta, ante todo, 2 HipSerates, quien con tanta razén ba sido llamado “El Padee de Ia Medicina”, Snele tener Hipdceates, on nuestra ima. sginaciéa, una realidad conereta y precisa Sin embargo, los historizdores que lo han estudiado eficientemente nos dicen, con buenas sazones en apoyo, que na €s macho lo que de cierto se sabe acerca de ese ppetsonaje y de su obta. En cambio, nadie hha dudado de Ie realidad de su persona, y se sabe de Ios Ingares y de las fechas de su nacimiento y de sa muerte, de sus progenitores, de sus maestros, del ejercicio tivo de su profesién y de cfimo ense- faba a sus discipulos, Olvidando por un ‘momento las dudas que exhiben los sa- bios historiadores, se pusde proceder aho- 13, como lo hace la mayoria cuando piensa en Hipécrates, mirindo.o come una pet= sona real, autor de una obra que lo hizo respetable y atin venerable a través de to- das las generaciones que lo han sncedido, Es com bien sabida que el mérito pri motdial de Hipécrates deriva de haber sido el creador de Iz medicina cientifica, al haber tecoocido y proclamado que 1a salud y las enfermedades no tienen por ‘causa elementos de caricer trascendental, sobrenatural o divino, sino que son fené- 95 menos naturales y que asi han de ser considerados por quienes deben servir a In salud de sus semejantes. Con solo ello huabeia bastado para hacer imperecedeca y univers la fama de Hipécrates, quien no limit6 a concebis, formulae y pro- clamas tal concepto, sino que, médico de verdad, ejerciendo intensimente su pro fesién y ensefindola a sus disciples, se aplicd a organizar una metodologia logics y precisa para estudiar a os pacientes que 2 €1 acudian, con lo cual fue el Fundador de la clinica, al como todavia se lt en Giende ahora, tal como tunca deberia de- jar de entedérsela sean cuales fuerea los pprogeesos que la téenica aporte para aya Aarts Obeervador perspicaz, trabajador cu dadoso y metédico, estudiaba. minuciosa mente Jos casos que atendia, anotabs sus particlaridades y los describia después ante sus disefpalos y en sus esritas, con taata fidelidad y preeisign que es posible reconocer hoy muchas de las entidades nowligicas que €l conoci6. Dejé ast do- cumentos veraces que nos informan ahora de cules eran las doleneias més comunes fens tiempo y en su medio, De ésta,s labor nosol6gica, recordaré algunos cjem plos en seguida. Fn su libro De la: epidenaia, describe Jas citeuastancias que en determinado dodo se preentron on insta tne ratura ambiente, lovias, vientes y-oteos elementos del medio, y Ia. prevalencia cincidente de tales ‘cuales tipos de en fenedades. Asien [a "Sein primers Primern coasitacién”, dice, después de haber descrto los elementos meteorol6gi- ‘os predominates en esa" constitucién’ que “aparecieron binchazones cerca de as prejas, en un lado en varios casos, pero ea la mayotin en ambos dos, acompaia 96 das con Fiebre que no obligaba al paciente 4 encamarse, y que en todos los casos deseparecieron sin que ex ninguno llegs- ran a supurat, como. actece comminmente con ottas hinchazones", Sefala, ademis, que “en algunos casos desde el'principio 4 mis tarde en otros, tales hinehazones se compafaban con iaflamacién dolorose de los testfculos, a veces s6l0 de uno, pero fen otras de ambos, lo cual ocasionaba ‘mucho suftimiento”. Ne es dificil reco- nocer que agui ha descrito los caracteres 1mis tipicos de Ia parotidits infeciosa, de fo “orejones” o “papers” ‘Una enfermedad que fue muy bien conocida por HipScrates es el paludismo, acer del cal Ins cimentos de varias ci vilizaciones antiguas nos aan dejado men- clones vagas 0 imprecisas, pero que en Tos escritos hipocrticos.aperece claramente identifiable. Las alusiores a esta enfer: amedad se encuentran diseminadas en va- fos de los libros del. Corpus Hipocrat- cam, bsi, en el libro titude Aire, agnar 4 legares, menciona a Gertas localidades on detorminadas circuastencias ambiea- fales, en donde las mujeres “son enfer amizas y est sujetas « menstruacién exce- sivas enuchas son estériles por eafermedsd Y no por natuealea, y tienen abortos fre caentemente”, Se puede sospecar que esti sludiendo aqui al paludismo, recor dlando que &te induce a menudo el abor to, Pero mis adelante sus datos al respecto son mis expresivos y precsos, como cuan- dio en ef misino libro se refiere a lugases aque se surten de "aguas que provienen de dlepésitas en los que esti> estancads, co- sno los lagos y pantanes’”, y dice que quie- es Las eben habitualmente"enen bazos jarandes y obstruidos” y “Frecueatemente soften dé fiebtes cuartanas”. Aqui aen- ciooa tees elementos que permniten reco SOMOLINOS, GUARNER ¥ sARTINEZ BAEZ snocer al padecimiento menciovado: aguas estancadas, esplenomegalia y fiebres caat- tanas; se trata, sin duda, del paludismo, En otras secciones de ese libro se vuelve ‘referir alas fiebres cuartanas, y en otro, el De fas epidemias, hay un extenso pir rrafo dedicado 2 las fiebres, en el cual se dice: "Las fiehres son: las continuas, algunas de las cuales se presentan durante el diay remiten por Ja noche, mientras que otras se presentan por Ia noche con remisién durante el dia, y las semitercia- mas las tercianas, las auartanas, las quin- tanas, las septanas y las nonanas". Un ‘alariélogo modemno y eminente comenté cesta asersién diciendo que "parece que las cotidianas han de haber sido en buena parte paludismo por falciparum; no esti claro lo que quiso decir con “semitercia- forma que considers como particu- larmente mortal, aun cuando por esta ‘zn algunos Ja estimatian como de pa- ludismo por falciparam. Sus. quintanas, fanas y nonanas, ce referirfan tal veo a Jas remisiones, con esas dusaciones, de infecciones por vieax"”. Y continfa: "pa rece claro que Hipécrates cnnocia bien a las fiebres intermitentes @ periédicas, y en varios otros pasajes de esos libros men=

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