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AL EXCMO. AYUNTAMIENTO DE MURCIA.

Servicio de Plazas y Mercados.

Don Fulgencio Barba Espinosa, con NIF: 27.438.688-X, en nombre y


representación de la ASOCIACIÓN DE VENDEDORES AMBULANTES
DE MURCIA Y PEDANÍAS, como presidente de la misma, con
C.I.F……………, Y CON DOMICILIO SOCIAL EN Murcia C/ La Gloria nº
29, 1ºD, C.P. 3000, comparece, y, por medio del presente escrito.

EXPONE

PRIMERO.- Que la Asociación que representamos, agrupa a la gran


mayoría de los pequeños comerciantes ambulantes que desarrollan su
actividad en término municipal de Murcia y pedanías.

Esta Asociación, en defensa de los legítimos intereses del colectivo


que representa, desea transmitir a la autoridad municipal competente, la actual
situación de incertidumbre, zozobra y preocupación que en dicho colectivo se
ha generado con motivo de la reciente entrada en vigor de la nueva
Ordenanza aprobada por el Pleno del Ayuntamiento de Murcia, en sesión de
fecha 15 de diciembre de 2009, y publicada en el BORM de 26 de febrero de
2010, reguladora de la actividad del comercio ambulante en el término
municipal de Murcia.

La Asociación que representamos considera que constituimos un amplio


colectivo, del que dependen directamente gran número de familias, la mayoría
de nosotros, con una larga y acreditada trayectoria en el ejercicio eficiente y
profesional de la actividad; todos rigurosamente cumplidores con nuestras
obligaciones de índole tributaria y de seguridad social y, todos, asimismo,
abnegados trabajadores que, con inusitado esfuerzo, desarrollamos un duro
trabajo sometido a prolongadas jornadas, a las adversidades climatológicas y
con la escasa protección social propia del Régimen Especial de Trabajadores
Autónomos, que, como es sabido, carece de cobertura en caso de desempleo.
Que desde la atalaya que constituye la dirección de la Asociación,
fundamentada en el profundo y directo conocimiento de las particularidades
propias de este colectivo, queremos resaltar, además, que la mayoría de
vendedores que representamos se dedica al comercio de artículos de primera
necesidad a precios mucho más bajos y asequibles que los que encontramos
en los grandes centros comerciales, por lo que, en cierto modo, entendemos
que también desempeñamos una labor de indudable interés social; más aún si
cabe, en los actuales tiempos de crisis.

SEGUNDO.- Que dicho lo anteriormente expuesto, esta Asociación


desea manifestar su profundo desacuerdo con varios aspectos regulados en la
nueva Ordenanza, y muy concretamente, en lo referente al procedimiento de
concesión de autorizaciones de venta, su vigencia y su carácter improrrogable,
establecido en el artículo 7, por considerarlo contraproducente y lesivo para
los legítimos intereses del colectivo que representamos.

Que más concretamente, consideramos que en la elaboración del citado


procedimiento no se han tenido en cuenta aspectos fundamentales que atañen
al ámbito de la Política Social y del Interés General, tales como el relevo
generacional y el mantenimiento del nivel de empleo en el sector.

Que, asimismo, consideramos como flagrantemente insuficiente el periodo


de vigencia máximo de dos años -establecido para las autorizaciones-,
para la amortización de inversiones y para la remuneración equitativa
de capitales invertidos ya que, en la mayoría de los casos, las inversiones
efectuadas se refieren a elementos de transporte, cámaras frigoríficas,
traspaletas y demás maquinaria, que suponen una elevada inversión y que, de
ningún modo, son susceptibles de amortizarse en tan breve período de tiempo;
en este sentido consideramos que hubiera sido mucho más razonable valorar
y establecer períodos mas amplios de amortización, mucho más ajustados a la
realidad y que, tal y como establecen entre otros, los artículos 30 del
Reglamento del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, la Orden
EHA/99/2010 que desarrolla el método de Estimación Objetiva en el IRPF y
el art. 2º del Reglamento del Impuesto de Sociedades, estarían entre un
mínimo de cinco y un máximo de dieciocho años para activos fijos de similar
naturaleza.

Es por ello, por lo que consideramos como escasamente motivada,


fundamentada y absolutamente desconocedora de la realidad social, la
adopción del citado periodo de vigencia máximo de de dos años para las
autorizaciones y su carácter improrrogable.

No podemos por menos que reiterar la innecesariedad del carácter


improrrogable de las autorizaciones establecido en el artículo 7.3 de la
ordenanza, ya que en otras comunidades autónomas, y más concretamente en
la de Madrid, se estableció por medio de una modificación de la Ley 1/1997
de 8 de enero reguladora de la venta ambulante de la comunidad de Madrid,
en el apartado cuarto de su artículo 9 que “ las autorizaciones serán
transmisibles, y tendrán una duración mínima de cinco años, con el fin de
permitir la amortización de inversiones y una remuneración equitativa de los
capitales invertidos, y prorrogables expresamente por idénticos periodos.”

Que en este sentido, queremos resaltar el hecho de que muchos


miembros del colectivo iniciaron importantes inversiones en elementos
como los anteriormente citados, poco antes de aprobarse la nueva Ordenanza
y sin conocimiento previo de la futura entrada en vigor de la misma;
inversiones ya materializadas que no admiten marcha atrás y que requieren,
a todas luces, de una ampliación del periodo de vigencia de las autorizaciones
que permita la amortización real y efectiva de las mismas.

En otras ciudades –como Córdoba- se ha establecido un largo periodo de


duración (15 años), de las actuales autorizaciones, que junto con el carácter
prorrogable de las mismas, minimizan el impacto social y la trascendencia en
la pequeña economía familiar de los vendedores ambulantes.

También queremos destacar que el colectivo no fue preavisado, ni


consultado por la administración, del inminente cambio normativo, pese a la
trascendencia de las modificaciones introducidas.

Que, en definitiva, deseamos trasladar y dejar constancia expresa de


dichas circunstancias, sin perjuicio de futuras acciones que, sin duda,
emprenderemos orientadas a la modificación de la Ordenanza en cuestión y
de la normativa en la que se encuadra.

Por ello, vamos a interesar ,en primer lugar, que se suspenda la aplicación de
la citada Ordenanza hasta que se produzca la modificación legislativa
necesaria en el ámbito de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia,
que sirva de marco y de guía para las ordenanzas de los distintos municipios,
y dicha suspensión se interesa con el fin de evitar eventuales y futuras
contradicciones con la norma regional y, sobre todo, por los inestimables
daños y perjuicios irreparables que se pueden producir a los vendedores
ambulantes, que ven peligrar y pueden perder sus puestos de trabajo por una
normativa municipal que consideramos, cuanto menos, bastante precipitada.

Con ello, se atenderían los objetivos de Política Social y razones


imperiosas de Interés General que, expresamente, permite la directiva
2006/123.
TERCERO.- En cualquier caso, queremos hacer referencia a la
disposición adicional segunda de la ordenanza relativa al procedimiento de
selección.

En la misma se establece que corresponderá a la Concejalía competente


por razón de la materia, la elaboración de un procedimiento de selección, en
que se garanticen los principios de imparcialidad, transparencia y no
discriminación. Asimismo, podrá tener en cuenta OBJETIVOS DE
POLÍTICA SOCIAL, de protección de medio ambiente, y CUALQUIER
OTRA RAZÓN IMPERIOSA DE INTERÉS GENERAL para el
otorgamiento de autorizaciones.

La reiterada disposición adicional segunda, en su último párrafo,


establece que el procedimiento de selección deberá aprobarse en un plazo no
superior de tres meses, a partir de la entrada en vigor de la presente
Ordenanza.

No habiéndose aprobado hasta la fecha el citado procedimiento de


selección, queremos poner de manifiesto algunos criterios que consideramos
se pueden encuadrar dentro de los objetivos de política social, que se permiten
expresamente establecer en virtud del considerando 69, y artículos
4.8,10.2.b,c, y d; y 12.3 de la directiva 2006/123, sin que, en ningún caso,
además, supongan ninguna ventaja para el prestador cesante por el simple
hecho de serlo.

Los criterios que proponemos de momento son los siguientes:

1º.- Número de años y experiencia acreditables de dedicación a la


actividad del comercio ambulante (en cualquier puesto de venta, no
exclusivamente respecto del que se pretende la renovación de la licencia).

2º.- Conocimiento de la idiosincrasia particular del mercadillo en el que


se solicita licencia para instalar un puesto de venta ambulante, y de las
características y demandas de consumo del público asistente al mismo.

3º.- Estar inscritos el solicitante en el registro general de comerciantes


ambulantes.

4º.- Acreditar el ejercicio del comercio ambulante en uno o más


municipios o localidades.

5º.- Importe de las inversiones realizadas en vehículos, bajos


comerciales o inmuebles, material mueble o fungible, productos almacenados,
formación o cualquier otra inversión producida en relación a la actividad de la
venta ambulante.

6º.- Periodo de amortización de las citadas inversiones de acuerdo con


la normativa reguladora de las mismas (artículos 30 del Reglamento del
Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, la Orden EHA/99/2010 que
desarrolla el método de Estimación Objetiva en el IRPF y el art. 2º del
Reglamento del Impuesto de Sociedades, entre otros).

7º.- Haber participado el solicitante en cursos, conferencias, y demás


actividades de esta índole que organice la Consejería competente, la
delegación municipal del Ayuntamiento en cuestión o las organizaciones
representativas del comercio ambulante.

8º.- Tiempo de alta del solicitante en el régimen correspondiente de la


Seguridad Social, y al corriente en el abono de tasas y arbitrio municipales,
relacionado directamente con el comercio ambulante en el Ayuntamiento, en
cuyo término municipal se encuentre el mercadillo para el que insta licencia.

9.- Estar en posesión el solicitante de alguno o algunos de los


distintivos de calidad que reglamentariamente se determinen.

Por lo expuesto,

SOLICITO que, teniendo por presentado este escrito, con los


documentos que se adjuntan, sea admitido, tenga por hechas las
manifestaciones que anteceden y por interesada la suspensión de la aplicación
de la Ordenanza Municipal Reguladora de la Venta Ambulante en el Término
Municipal de Murcia, hasta que se dicte la correspondiente Ley, por parte de
la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, y, en cualquier caso, tenga
por referidos los criterios que, entendemos, resulta imprescindible tener en
cuenta en el procedimiento de selección de las autorizaciones, que establece la
Disposición Adicional 2ª de la citada Ordenanza Municipal. También
queremos se tenga por anunciado, el propósito de esta parte de instar la
modificación de la Ordenanza para que la misma cumpla efectivamente con
verdaderos criterios de Política Social, respeto al empleo y, en cualquier caso,
al Interés General, con plena sujeción a la Ley.

Murcia, a 7 de julio de 2010

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