El poder de la seduccin de una mujer la puede hacer llegar al poder
poltico, el ejemplo perfecto de esto es la reina de Egipto, Cleopatra, quien tuvo dos romances con roma, conquistando a Julio Csar y en otra ocasin a Marco Antonio. Sucedi que Ptolomeo era el hermano y esposo de Cleopatra, y el no permitira que conociera a Csar. Pero Cleopatra se las ingenia, para de alguna manera llegar al palacio en el que se encontraba Csar, envuelta en una alfombra que llevaban al palacio. As ella asombr a Csar, no solo por su osada, si no por su fsico, aunque se dice que tena una nariz aguilea. El romance que tuvieron estos dos emperadores, no fue bien visto en Roma, tanto como por ser ella egipcia y porque Csar, atrapado en los encantos de esta mujer, descuid sus deberes en Roma e incluso le puso una estatua en el templo de Venus, lo que represent un escndalo y seguramente despert la indignacin del pueblo. Una vez que muri Cesar, no le bast con uno y Cleopatra busc a otro general Romano. As que nuevamente el emperador de Roma se enamora de Cleopatra, pero ahora se trataba de uno de los integrantes del triunvirato, Marco Antonio. Algunos historiadores dicen que al pensar que Cleopatra estaba muerta, Marco Antonio se clav una espada. Cleopatra muri cuando se dej morder por una serpiente venenosa, para que de que Augusto la encadenara.
La sensualidad de una mujer es un arma muy poderosa, utilizada desde la
antigedad. Tanto as, que cuando Menelao haba enfurecido al punto de la locura, como cuenta Homero, decidi matar a Helena pero simplemente no pudo hacerlo cuando ella se desnud ante l. La seduccin no es una ciencia si no un arte que dominan a la perfeccin las mujeres. Desde la antigedad las mujeres complementaban la seduccin con maquillaje, vestido, peinado y perfume, pero los hombres no deban saber acerca de estas, eran confidencias de las mujeres. Si las mujeres son consideradas el sexo dbil, hay que mirar dos veces antes de asegurarlo, ya que con una simple sonrisa pueden tener a los hombres poderosos a su voluntad, tal como lo hizo Cleopatra.