Erase una vez una nia llamada Valentina, que se fue a pasar el da con sus padres al campo.

Era
una nia muy curiosa y un poco desobediente, y aprovechando un despiste de sus padres, decidi ir
a investigar el bosque por su cuenta. Al ver que tardaba en volver, sus padres muy asustados,
decidieron ir a buscarla. Cul no sera su desesperacin, cuando al llegar la noche, Valentina an no
haba aparecido.
Dos das con su dos largas noches pasaron sin encontrar a su querida hija, hasta que una maana
de un soleado da en el que seguan buscndola con desesperacin, oyeron un murmullo que
proceda de una cueva. Cuando llegaron al interior de la cueva, se llevaron una enorme y maravillosa
sorpresa al ver a su pequea Valentina sana y salva en compaa de un perrito que pareca
abandonado.
Al ver a sus padres fue corriendo a abrazarles, y llorando les explic que no haba encontrado el
camino de vuelta y que el perrito le haba dado calor por las noches y proporcionado manzanas y
frutos silvestres que encontr en el bosque para alimentarla.

Sus padres muy contentos cogieron en brazos a Valentina, no sin antes explicarle que tena que ser
responsable y que nunca jams se volviera a ir sola sin avisarles; pero antes de salir de la cueva, la
nia mir triste al perrito y sus padres, en seal de inmenso agradecimiento, no dudaron en cogerlo
en brazos y llevrselo consigo.

El perro haba encontrado un nuevo hogar junto a la nia a la que haba cuidado y sus padres que
tanto la queran.

Al perrito le pusieron de nombre Salvador. Vivieron felices para siempre y Valentina nunca ms
desobedeci a sus padres, puesto que haba comprendido el sentido de la responsabilidad y por
supuesto, del amor.
FIN
Valores del cuento: Amor, responsabilidad, esperanza, agradecimiento.
Moraleja del cuento: Nuestros padres siempre estn ah para cuidarnos y amarnos, y es nuestra
responsabilidad devolverles ese amor.