El proceso de lectura: de la teoria a la practica MARIA EUGENIA DUBOIS AJQUEPresentacion En lostltimos afos he dedicado buena parte de mitiempo a estudiar fos cambios que tuvieron lugar en las concepciones tedricas de la lectu- a, A ello me guid, en primer lugar, el interés intrinseco que el tema re- viste para mi y, en segundo lugar, la consideracién de que él hecho tie- ‘ne una enorme importancia a la hora de analizar las relaciones entre la teoria y la practica pedagdgica de la lectura. En el presente trabajo he tratado de que fos resultados de ese estu- dio aparezcan sintetizados en dos partes. En laprimera se analizan las tres concepciones que. a mi juicio, resumen el avance te6rico ocurrido en el campo de la lectura; ellas se relieren a la lectura come conjunto de habllidades, como proceso interactivo y como proceso transaccionai. A través de estos diferentes enfoques la iectura ha pasado de ser algo tan- gible, capaz de recucirse a sus partes componentes, con un tector y un texto ajenos entre si, a ser un proceso tluido en el que lector y texto se sonfunden en una transaccién que fos desborda a atnbos. El cambio producido no es caprichoso, resporde al desarrollo general de la ciencia que ha tenido lugar en lo que va detsiglo XX, especialmen- teeneldominio de la Fisica y que se relleja por igual en el Ambito de otras isciglinas, por ejemplo, ia Biologia, fa Astrenoma, la Psicologia. Los descubrimientos de la Fisica subatémica cambiaron de manera fundamental nuestra visién del Universo y a consideracion de nuestra propia funcidn dentro de aquél. La representacién del munde como una maquina gigantesca, sujeta en su tuncionarniento a leyes inmutables y analizada por observadores imparciales, hatenide que ceder paso auna imagen del Universo como un proceso en constente evolucién en el que el observador determina de alguna manera las caracleristicas de lo ob- servado. “El universo es fundamentaimente ‘energladanzante” (en We- aver, 1983: 10) y nosolros somos participes de esa danza césmica con- tinua, Elcontraste entre los paradigmas de la Fisica cldsica y la Fisica mo- dorna y las conseouencias que la adopcién de uno u otro tienen para la practica pedagégica en el carmpo de la leclura, es el lena que aparece en la segunda parte del trabajo. La influgncia del modelo mecanicista en los métados de ensefianza de la lectura ha persistido hasta hoy. Solo a partirde los tiltimes anos pre- ‘senciamos e! surgimiento de una nueva actiud pedagégica —basada en las modernas coneenciones de la fectura—que lucha por superar las tra- ciciones a las que se encuentra atado el sistema escolar.Laidea que me ha cuiado en ei tratamiento de estos temas os que los ismos ouedan servir como punto de partida para evar a cabo una re- flexion sistematica y profunda acerca de las relaciones entre la teoria y la practica de la iectura. Con esa intencién dirjo este trabajo principal mente alos estudiantes de la Maestrla en Lectura de ia Escuela de Edu- cacién-Faculladde Humanidades y Educacidn de la Universidad de ios Andes de Mérida, Venezuela, Creo, sin embargo, que los problemas abordados en él pueden ser ce interés para un publica mas amplio, so. bre todo si se toma en cuenta la casi inexistencia de material de este ti po en lengua espafiola. MED. Mérida, febrero de 1987 La lectura: diferentes concepciones tedricas i se observan fos Irabajos sobre lectura aparecicos en ios uitimos cincuenta ahos, es posipie descubrir que ellos se apcyan, a través del tiempo, en tres concepciones diferentes del proceso. La primera, predo- minante mas o menos hasta los afios sesenta, concibea la lectura como un conjunto de habilidades la segunda, desarrollada en las décadas de! sesenta y del selenta, considera que la lectura es el producto de la inte- raccion entre pensamiento y lenguaje’ ia lercera y masreciente concibe 4 la leotura como un proceso de transaccién entre al factor y el texto. La lectura como conjunto de habilidades La concepcién dela leciuracomo conjunto de habilidedes estaba me- ‘nos interesada en explicar el proceso que en resolver los problemas de. Fivados de su aprendizaje. Dada la complejidadde la lectura, la gran pre- ‘Scupacién de los estudiosos del campo era descritir las etapas por las ue debia alravesar el nifio y las desirezas que tenia que adquinr en ca- a una para llegar al dominio de ese proceso. Sibien en las primoras décadas dei siglo los trabajos de dos autores tan sobresalientes com Huey (1808) y Thorndike (1917) se dirigianase- falar la complejidad de la lectura com proceso psicoWsgico, sus ideas No legaron a influ de manera suticiente como para que se abandona- ra la concepcion de que la lectura podia ser desmenuzada en sus ele- Mentos componentes y éstos ordenados segin su grado aparente de di- ficutad. Con esto se pensaba dar solucién 2 los problemas derivados Ge} aprengizaje de a lectura, sobre todo en su etapa inicial El esquema clisico, dentro de esta concepcién, proponia el recono- cimiento do palabras como el primer nivei de la lectura seguido de ta comprensién coma segundo nivel, de la reaccién o respuesta emnocional entercer lugar y de la asimilacién 0 evaluacién como Litimo nivel. A es- ‘te escuema se ajustaron muchas taxonomias con ligeras variaciones en- ‘re elias, debidas en general a hacer o no explicitos los subniveles corres Pondientes a cada etapa o nivel. En especial la comprensién se consi ‘Geraba compuesta a su vez por distinios subniveles je’arquicos que in- clvian, basicamente, la comprension literal o habilidad para comprender ‘o expiicitamente dicho en él texto, Ia inlerencia o hatilidad para com- Prender lo que est impticito y la lectura critica o habilidad para evaiuar la calidad del texto o las ideas 0 propésilos det autor.