Está en la página 1de 72
MN COMI eze aCe B ALLIS Cees sees BRA. La vida cotidiana en Grecia y Roma ‘Traduccion: Isabel Monin y Miguel Mordn ‘Titulo original: Greek and Roman life © British Museum 1986 Para todos los paises de habla hispana (© Ediciones Akal, S. A, 1998 ‘Sector Foresta, 1 28760 Tres Cantos ‘Tels: 91 806 19 96, Fax: 91 804 40 28 Madrid - Espafia ISBN: 84-460-0826-2 ‘Depisito legal: M-30.175-1998 Impreso en Orymu, S.A. into (Madrid) Mustracton de cubterta: Dos figuras de terracota representando a una mujer ‘moliendo grano ya otra amasando pan. Grecia, siglo Vac. Portadilla: Relieve de terracota representando una carrera de caballos. Una cusdriga de cuatro caballos se acerca ‘alas cuatro columaas que indican el ‘extremo de la pista. Un jubilator, jinete ‘que anima a los participantes, ha girado ‘ya, mientras el cochero frena su tiro. Un ‘Cochero eaido se acurruca al pie de las ‘columnas del final de la espina de Ia pista, Relieve romano, hecho en Italia, siglo 14.C. Em esta pdgina: Nada més Uegar a casa de ‘su marido, la novia es conducida por éste hasta un altar. La pareja va acompafiada por un flautista y varias mujeres Portando antorchas encendidas. Junto al altar se encuentra otra mujer coa un. baiculo en su mano izquierda y un objeto sacrificial en Ia diestra; se trata, quizd, de ‘una personificacién de Hestia, diosa del coraz6n y del hogar. Mediante su participacién en tn sacrificio ante el altar, la novia queda colocada bajo la roteccion de los dioses de Ia casa y se Ia Aacepta como nuevo miembro de Ia familia de su marido, Escena perteneciente a un pxis (caja de tocador) de fondo blanco fabricado en Atenas hhacia el 470-460 a.C. y atribuido al pintor Splanchnopt. Contraportada: Figurilla de plata representando un pastor que Hleva a una ‘oveja a sus espaldas dentro de un saco. Estatuilla romana. Fechable probablemente en el siglo 1 .c. indice Pretacio, pag. 4 La casa, 5 La familia y el papel de la mujer, 15 El vestide, 23, Los nifios y su educacién, 30 El matrimonio y la muerte, 38 Los juegos atléticos. Los festivales draméticos en Grecia, 44 Los juegos romanos y los gladiadores, 55 exNeee ep a Trabajo y esclavitud, 62 Bibliogratia, 71 Citas tomadas de autores clasicos, 71 Créditos fotograticos, 71 indice de nombres, 72 1. La casa 1, Reconstrceién de una tipiea domus, Se suele decir que “la casa de un inglés es su castillo”, pero, probablemente, ésta era una afirmacién que resultaba atin mas cierta entre los antiguos griegos y romanos, dos pueblos profundamente conscientes de os limites, tanto fisicos como sociales, que separaban la vida privada de la pablica. La mayoria de las casas griegas y romanas, grandes y pequenas, cen la ciudad y en el campo, por razones de intimidad tanto como de seguridad, estaban construidas hacia el interior, con sus habitacio- nes abriéndose en torno a un patio central Durante todo el periodo clisico, la mayor parte de las casas se construian de iadrillo, un ‘material barato, manejable y Ficil de fabricar. Una mamposteria ms solida resultaba ms costosay dificil de trabajas, quecando reservada, normal- mente, s6lo para los edificios civicos y religiosos, Los romanos hicieron un buen uso de sus carac- teristicos ladkillos cocidos no s6lo para construc- ciones domésticas, sino también para obras piiblicas de gran envergadura. Sin embargo, to ms normal, y especialmente en Grecia, era que las casas se consiruyeran simplemente con ado- bes secados al sol, reforzados a veces con madle- ra, sobre cimientos de piedra. El adobe es un material perecedero que se degrada rapidamente; por eso, muy a menudo, los arquedlogos que fntentan reconstruir una casa antigua se encuen- tran con unos restos, Lo mais frecuente es que no se conserve nada sobre el nivel del suelo y, quiza, la Gnica sefal que indica dénde se encontraba construida una casa sea una linea més oscura marcada sobre la tierra; tan s6lo algunos escombros. esparcidos alrededor pueden indicar como eran los muros y las cubiertas. Aquellos elementos de la casa que podirfan haberse conservado, probablemente fue- ron alterados ya en la propia antighiedad. Las pi dras de los cimientos, por ejemplo, solian ser reutilizadas en otras construcciones posteriores. Tucididles, el historiador griego, cuenta como, a finales del siglo V a.C, y como consecuencia de la guerra con Esparta, los campesinos atenienses se vieron obligados a abandonar sus hogares, buscando refugio en el interior de las murallas de iad, y nos consta que llevaron consigo las puertas de madera y las contraventanas de sus casas porque la madera era un bien escaso en el Atica, y se podia transportar y reutlizar con fi lidad. “Asi empez6 el proceso de desmantela- mienio de aquellas casas que nunca mas iban a ser ocupadas; la naturaleza y el tiempo se ocu- paron del resto. La casa romana Los restos arqueol6gicos nos dan menos informacin sobre la casas griegas que sobre las romanas, que constituyen nuestra principal fuen- te de conocimiento sobre como era la distribu doméstica en el mundo clisico, Hay pocas as mas devastadoras que las de la erosion paulatina; por eso los arqueblogos.prefieren ‘encontrar un lugar que haya sufrido una destruc- i6n repentina por causa de un terremoto, un incendio 0, en el mejor de los casos, una erup- i6n volcénica, y en ningtin sitio como en las cit dades romanas de Pompeya y Herculano se ha demostrado de manera mas drammitica las venta- jas que, para la arqueologia, supone este ‘iltimo wofes. En el breve espacio cle unas sosto del aio 79 cle nuestra era, ‘erupcién del Vesubio destruyé ambas ciudades ¥y varios kilometros de tierra a su alrededor. El suceso se puede fechar con toda exactitud gracias 5 «una carta de Pini el Joven al hstoriadorroma- ‘no Tito, en la que describe de manera muy ge fica los acontecimientos, en ella, Plinio cuenta c6mo la gente, enloqueckla por él miedo, huye de sus casas y villas, abandonando no slo sus hhogares sino tambien, en ka mayor parte de los casos, todas sus pertenencits personales. Jamas Volvieron a ella fa abido que esperar hasta el Siglo XVIII para que Pompey y Herculano fue- ran descubienas de nuevo, continando atin hoy én dia los trabajos de excavacion,reconsruccion Yy conservacion del conjunto, Tn el ano 79, Pompeya, como cualquier ota ciudad con una larga historia asus espalds, era tin conjunto ‘urban constituido por casas de reciente construccion que se alineaban en sus Calles unas junto a otras mucho més antiguas. En iuchos casos resulta posible comprobar como, on el paso del tiempo, el ncleo de una anti- fa vivienda ha ido ereciendo y adaptindose a lis muevas circunstancias, Algunas casas pompe- yanas, evacuadas en el afio 79, se encuentran Construdas sobre otras mas antiguas, edificadas incluso algunos siglos antes, Este es cl cas0, por cjemplo, de la lamada Casa de Salustio, cons tmuid en piedra caliza a finales del siglo 1 a. © printipios del siguiente: aunque ea el rmomento de ls enupcion la distbucion interna Original se habia alterado ya, atin resulta posible TeconstruircOmo era ésta en un principio. Fa tratado de arquitectura, escrito en toro al ano 25 a.C., Vitruvio se reflere a este tipo de casas ‘on la palabra domus. La domus primitva con. Sista en un patio central, Ilamado atrium, en yo alrededor se disponian varias habitaciones, ‘cada una de ellas con una funcion especitica. En ‘lgtin momento del siglo IT.C. en la techumbre del atrium de la Casa de Salusto se dispuso una Abertura o compiurium, vin. vano recangular “que, al mismo tiempo que la uz, dejaba pasar el ‘igua de la lluvia que se deslizaha por los cana- Tones del tejado y caia en un estangque o ipl tim, desde donde pasaba, a través de una Caneria, a una cisterna dispuesta en la parte de dts de la casa donde los miembros dela fami ase abastecian del agua necesaia para su con- sumo diario. Tn el atrium se encontraba el altar familiar © lararium, donde se conservaan las nes de los doses prot fares y los penates, yl 6 + tablinsm tok (Cl IL ABCD = doxtorios tienda bién la caja fuerte de la familia, A él se Hega- ba a través de una entrada (vestibulum) y un corto pasillo que se abria tras ella (en el siglo Ml a.C. se remodeld la fachada de la Casa de Salustio para adaptarla a una fila de tiendas) ‘Alrededor del atrium se disponian los dormi- totios y detris de ellos dos alae (alas) daban ‘acceso a tres habitaciones de mayor tamao. De las tres, la que se encontraba en el medio era el tablinium, donde, originalmente, se encontraba la habitacién del dueno de la ca y se conservaba también el archivo familiar. Parece que al principio las comicas formales tenjan lugar en el atrium, pero a partir del iglo IL aC. en la Casa de Salustio se habilité ‘como comedor, 0 triclinium, una de las dos habitaciones que flanqueaban el tablinium. El nombre de triclinium deriva del nombre grie- ‘g0 del canapé (kliné), y parece que los roma- nos habian tomado de los griegos la costum- bre de comer reclinados, normalmente en tres ‘canapés dispuestos a lo largo de las paredes de la habitacion. La domus tradicional satisfacia a la perfec- ‘ion la doble necesidad de intimidad y seguri- | sarin c D 2. Planta dela Casa de Salustio cen el siglo ac. 3. (derecha, aba) Un Tararium dea Casa de Tos Veti, Pompeya, cuyas pintiras representa Tos doses de a casa, en el mech, el genius Ssosteniendo una taza sacrificial Yuna caja de ofrendas; a su lado se encueniran los lanes cad uno de ellos con un ‘euerno para beber Y un cubo Fitual debsjo cogiendo una olrenda del ala 4. Dioses del hogan un far, (que somtiene un cuerno para breber en su mano derecha y ‘una tiza par ibaciones Fituales en la izquierda: un ‘enius con la cabeza cubienta ‘Como los sacerdotes cuando fet efectuando un steiico tuno de los penates espiius prctectores asociads ‘specalmente con la fdespensa, scsteniendo una ‘comucopia y una taza para libaciones;¥ una serpiente ceiguida. Romano, tos ellos probablemente del siglo! dad, aunque a veces a costa de una atmosfera interior un poco oscura, Aqui era donde el cabe- za de familia romano, | paterfamilias, reinaba sobre su reino privado; aqui era donde ejercia celosamente su poder de vida y muerte sobre Jos miembros de su familia y los esclavos de su casa, Sin embargo, los austeros interiores de la ‘domus no se encontraban completamente cerra mundo exterior: la casa, y en particular el um, eran el centro de una compleja red de relaciones sociales que salvaban la separa- Gi6n entre la vida pablica y la privada, Durante toda la historia de Roma exist la costumbre de ue los ciudadanos libres pero pobres se colo- caran hajo la proteccién de un patron rico y politicamente influyente, al que los. clientes, como se llamaban, le brindaban su lealtad y apoyo como pago’a sus didivas diarias y a la promesa de su ayuda legal. Diariamente cum- plian con el rito de la salutatio, vistando a su patron cada mahana. Podemos. imaginarle pasando por la oscura entrada hasta el atrium, quiz’ esperando aqui su turno para ser recibi- dos. En el tablinium el patronus escuchaba sus agradecimientos y exponia sus propios deseos. A pesar de estar abierto sobre el atrium, el tablinium podia cerrarse y convertirse en’ un espacio privado con biombos, como los que se han encontrado en la llamada Casa de las Mam- paras en Herculano. Después de su visita, los ‘clientes desandaban su camino y volvian a salir «1a luz. del dia, sirviendo como emisarios en el ‘mundo exterior del buen nombre de su patron. Probablemente es en los clientes en quienes esti pensando Vitruvio cuando eseibe que “Ios hombres de fortuna normal no necesitan entra- das. amplias en. sus casas, ni tablinia ni un atrium construido en un gran estilo, pues tales hombres suelen cumplir con sus obligaciones sociales yendo a casas ajenas mas que recibien- do en las propias 1 Casa de Salustio es un buen ejemplo de ‘como era en Italia el tipo tradicional de casa de ‘una familia acomodada durante los tiltimos afios del siglo m a.C. Después de este periodo pode- mos detectar un cierto ngimero de mocificacio- es hechas sobre esta planta original, que se uuentran disectamente Vinculadas a la historia de Roma y que reflean las nuevas ideas cultura- les legadas a Malia desde otros lugares de su naciente imperio, especialmente destle Grecia La Grecia del Este era rica, material y cult ralmente, y la expansion de la politica y de los intereses econémicos de los romanos hacia el Oriente hicieron que en Roma hubiera mucho dinero y muchas cosas en las que gastarlo, Los sectores mis conservadores cle aquel momento ‘denunciaban este lujo creciente, que considera: ban contrario a la austeridad de caricter y cos- tumbres propias del pueblo romano, EE] impacto de la influencia cultural griega no fue menor en los puertos de la bahia de Napoles, y sus consecuencias se 27,1 Ariogatore {Gradon, Viste una nica sin mangas y sobre ela leva una toga semicicule Bronce cisco de finales del siglo aC. Florencia, Museo Arquedtoxic. La toga, Ievada sobre una tinica, era el vestido nacional de los romanos, y todos los iudadanos nacidos libres tenfan derecho a lle- varla, Aunque era majestuosa, también resulta ba incomoda, y por ello unicamente solian tusarla de continuo los miembros de las clases altas, mientras que los trabajadores preferian utilizar una simple «nica. Los funcionarios importantes Hevaban en sus togas una banda piirpura, y también los ninos la llevaban en las suyas hasta el momento de cumplir los dieciséis aos, edad en la que los jovenes ofrecian sus vestidos infantiles a los dioses del hogar en medio de una ceremonia que marcaba una ‘etapa importante de su crecimiento y se vestian con la sencilla toga vinlis, ‘Otro tipo de vestido alternativo era el ppailium, la version romana del bimation grie- go, aunque durante la epoca de la Repablica esta prenda no resultaba aceptabl te por quienes consideraan al ves antirromano y afeminado. Escipion, el gran general que derrot a los cartagineses, de {que habia sido censurado por llevar pailitum y sandalias en el gymmasizum de Sicilia Las mujeres se vestfan con la palla, un velo de Jana, rectangular, colocado alrededor de los hombres y con el que a veces se cubrian la cabeza; junto con la sfola, una tinica 25 28, Petros ries 26 holgada parecica al chiton griego, constituia el vestido tradicional de las mujeres romanas. En la antigua Grecia y en Roma las mujeres 2 levaban, invariablemente, el pelo largo; llevarlo corto, en el mundo griego era signo de escla- vitud’o de duelo, en cuyo caso Io levaban recogido en un mofo. Las mujeres griegas libres raramente dejaban caer libremente sus Jargas trenzas, sino que las recogian en moos y peinadlos segtin las modas de cada momen to, En las decoraciones de los vasos griegos se encuentran las mejores representaciones de como eran los peinados femeninos. Con mucha frecuencia utilizaban una cinta ancha y larga rodeando la cabeza para mantener el cabello en posicién. A veces el cabello se reco- xia dentro de una redecilla (sakkos), para cuya 2 confeccién se utilizaban varios hilos paralelos que se tensaban mediante dos travesanos horizontales incluidos dentro de un pequeno 2 bastidor en el que se trenzaban entre si para formar un tejido solido. Donde el arte del peinado consiguié sus crea ciones mis elaboradas fue en las cabezas de las mujeres elegantes de la Roma Imperial, y algunos de estos peinados que encontramos en los retra tos escultéricos dle aquel momento, verdaderas obras de arquitectura, resultan casi inereibles. Los interminables padecimientos de las mujeres, que permanecian durante horas bajo las manos de sus peluqueros, formaban parte de los temas habi tuales de los eseritores satiricos romanos, y, pro- bablemente, muchas mujeres conseguian lucir los caprichosos peinados que imponia la moda por a el sencillo expediente de utilizar una peluca, Los hombres no eran menos vanidosos, y tanto Grecia como Roma tuvieron su buena por- ion de “dandys’. Ya nos hemos referido al lujo de los vestidos masculinos en el siglo vi a.C., y el mismo deseo de ostentacion que manifestaban se reflejaba tambien en el pelo, que se llevaba largo ¥y sujeto con un broche de oro, especialmente entre los miembros de la aristocracia que, en este tiempo, se distinguian por la longitud’ de. sus ceabellos. Los griegos se deaban crecer la barba y xno utilizaban la navaja de afeitar, que se conside raba un objeto de tocador més propio de las mujeres que de los hombres, Por el contrario, en Roma los hombres acostumbraban a afeitarse la barba hasta que, en el siglo ud, la puso de moda el emperadlor Adriano, 29, (derecha) Mujer tejiendo ona tedecilla para el pelo sobre un bastidor as redecilas se hactan sin sedimbre tensando hilos Ssujetos entre dos barras horizontales. Procedente de tun felythos Gartta de aceites) de seis téenicas fabricado en Atenas hacia los aos 480-470 2.6 30. (exes Recato de una mujer con un einade muy elaborado, derecho) 31. Dos frascos de perfume Ge terracota com la forma de pies calzados con sandalias Pabricados en Grecia oriental De la misma forma que cuidaban su eabe llo, las romanas elegantes intentaban dar a sus rostros el mejor aspecto posible a base de maquillaje, y esta manifestacion de vanidad femenina fue objeto de buria entre los poetas, como podemos ver en este texto de Lucano: Si pudieras ver a las mujeres cuando se levantan por la manana, te darias cuenta de que resultan menos deseables que una mona, Por esa raz6n se mantienen aisladas y no se muestran jams ante los ojos de un hombre. Algunas viejas brujas y una corte de servidoras, no mis atractivas que sus propias amas, las rodean, emplasteciendo variedad de remedios. De van a lavarse simplemente con para borrar de su rostro las huel suefo, y marchar a enfrentar los importantes diarios. En lugar de ello, para pués de todo, no fria del tratar de embellecer su poco agradable aspecto, utilizan innumerables potingues pomadas, y como los participantes en una procesi6n publica, cada na de sus sirvien- 27 32, Conjunto d toeador (cle izquieréa 2 dderecha) spandae romana de pata que prabablemente se ttlzabon para aplicar on escenas en relieve en spate exterior, siglo m <4.C; peine romano en el gps gt ero “Adn Modestina 33, Un grupo de sirvientas wenden 4 su ama, sent ‘enn silon de mimbre. sua eva una jaa de agua, Relieve romano de mirmol procedente de Neumagen, Siglo uC Ther, Rheinsches Landestnuseum, tas lleva un objeto diferente.: un recipiente de plata, un jarro, un espejo, todo tipo de ccajas, propias de la tienda de un quimico, polvos para los dientes y productos para ‘oscurecer sus parpados. Juyenal es otro escritor que tampoco pudo resistirse a Ia tentacion de burlarse de los extremos a los que estaban dispuestas a He- gar las mujeres para embellecerse. Sus simpa- tias estin con el marido mortificado durante la noche por la crema mal oliente con la que su mujer se ha untado la cara y el emplaste que mantiene el color de sus mejillas, pre- jue tomaba no para seducirle a él, sino para seducir al amante con el que iba a encontrarse al dia siguiente. Las mujeres griegas, incluso a pesar de su vida recluida, también utilizaban. maquillaje; algunos de sus maridos lo desaprobaban y no andaban descaminados al hacerlo si tenemos que uno de los métodos mas comu- aclarar el color de la piel era utilizar polvo de plomo, una sustancia que era poten- Gialmente peligrosa 20 4. Los nifios y su educacion Uno de los aspectos mis chocantes del arte y la literatura griegos es el interés que muestran por representar nifios y jOvenes. En el texto que reproducimos a continua. ion, perteneciente a la segunda de las tres obras dedicadas por Esquilo a la Orestiada, Orestes, el hijo del rey de Micenas, ha muer- to de miedo y esto sirve a su vieja nodriza para hacer la siguiente reflexién sobre el pasado; Yo le crié, le tomé, recién nacido, de los brazos dle su madre {Y oh! en un tiempo me llamaba durante la noche, me hacia levantarme y me marea- ba con esto y con aquello, IY todas mis esperanzas en vano! :Por qué no lo entiende Un nifo no sabe qué es lo mejor; hay que cuidarle, al contrario de cualquier animal, que por toxpe que sea, siempre parece saber qué es lo bueno. Un nifto en la cuna no puede decit lo que le reocupa; si quiere comer, beber u orinar. El interior de un nifio no admite drdenes; es demasiado joven. Con frecuencia puedo hablar; también, preveo las cosas malas, y luego puedo conjurarlas Una nodriza y una lavandera tienen un mismo par de manos, Por eso yo tuve un trabajo doble; si, yo presente a Orestes a su padre. Y ahora, oft esto, {Orestes muerto! menudo, Estos versos constituyen una de las mani: festaciones mas emotivas de los sentimientos que el tema del nifio pequeao podia desper- tar en el mundo griego. Nosotros hemos encontrado un testimonio visual de ello en las escenas infantiles pintadas sobre las ceri- micas de figuras rojas, y especialmente en las representadas en un grupo de copas de vino llamadas choes, Estas copas se daban alos niftos durante una fiesta denominada la Anthesteria. Parece que se entregaban, con- cretamente, a los nifios de un edad determi- nada, quiz para significar que acababan de 30 abandonar la infancia, Una de estas copas muestra a un nifio sentado dentro de un ori nal de barro que hace sonar su sonajero ante alguien situado a su izquierda, quiz4 para indicarle que *ha acabado" y que quiere ser sacado de alli para jugar con el andador que se encuentra a la derecha, apoyado sobre la pared. En los aos cincuenta de auestto siglo aparecié un tipo de orinal semejante en unas excavaciones que se hicieron en el mercado de Atenas, El artista ha representado el orinal con pin- celadas rapidas y su inmediatez contribuye de manera notable al éxito de la imagen. Otra cescena de tema infantil, pintada sobre una vasi- ja conocida como pelile, esté mucho mas ela- borada pero resulta mas confusa, Muestra ‘cémo una mujer, la madre o la nodriza de! nifio, le anima para que se alce sobre sus pics yaprenda a caminar. El hombre que se encuen- tra de pie es, quiz, el abuelo del nifo, que, retirado ya de la vida piiblica, se encuentra mas inclinado a interesarse por los progresos de la 34. Una ninera enirega el nfo a su sefora, que se encuentra sentada en ‘una sila sin brazos Ghismis)y 2 cuyos pies se encuentra un feeble pe lana). Procede de una drs Garea para ua) de figuras rojas scha en Atenas hacia 140-430 ac 35, Conjunto de juguetes infantile (De taquierda & derecha) peonza de terracot, siglo vl aC. bailarina con castaiuelas en sus manos hecha d terracoa, falmicads en Corinto hacia el afi 350 2. biberén de cerimiea negra con una inscripcién en griego que dice: “Bebe, no lores! hecho en el sur de alia en el siglo w a hous (arta de vino) en nino gat mesa, hecho en Atenas hacia los aos 425-400 a.C sonajero de cerdmica fen forma de cerdo, hecho en CChipre en los siglos mat aC 236. Fichas de juegos. En el ‘sentido de las agujas del elo ese la inquierda) Fichas romanas de marl con las inseripciones tor, nugator (necio) y males mal suerte asragal bas) de bonce, vidio y dice se tiaban como dados y cada cara tenia distin valor; dos canicas de vidro romans procedentes de Egipto y otra faniea de barto minoica, 2000-1700 aC; dados romanos en peda verde facetada, vidtio y 4gata; dado de plata romano en forma de figuras scurucadas, siglos tu dC fichas romanas,siglos rnd; ¥en el centro) fichasromanas de mérmol representando a las Musas, una lebre, un ‘camera y una langosts (probablemente del siglo dc) 31 137. Qhones (jar de vino en miniatura de figuras ros ‘ostrando a un nino sentado en un oral, Elona, igsids sani eel cea a Foe honda en la que se sienta el nio con las plemas colganda a través de sends agujros, El no est agitando Su songjeo, quiz como serial de que scabado". Conta la pared de la derecha se enc poyado una nied para arasira, uno de Tos juguetes favoritos de la antigua Grecia, Hecho en Atenas hacia los aos 440-430 a, {38 (en ls pigina opucss, aba) Murteco actual sentido fen un antiguo orinal encontrado en el agora plz) steniense durante unas excavaciones, Hecho en Atenas hala el ao 580 3. Atenas, Musco del Agora nueva generacién. Por el contrario, el padre del nifo, en este momento, se ocuparia muy poco de su hijo, delegando la tarea de educar al nifto a su mujer mientras que él se ocupaba de lo asuntos fuera de casa, El hombre de edad representado en la cerimica podria ser consi- derado también como el paidagogos, casi siem- pre un esclavo al que, eventualmente, se enco- mendaba la misi6n de supervisar la educacion del nino. Los romanos se preocuparon mis que los .griegos en conseguir representaciones precisas de los diferentes tipos humanos; ellos perfec- cionaron el arte del retrato, y nos han legado las imagenes mas evocadoras del mundo infantil que se hayan creado en todo el mundo, Estos temas encantadores no debers embargo, oscurecer los aspectos mas desagra- dables de la actitud de los antiguos frente a los nifios. Leemos, por ejemplo, que los esparta- nos miraban atentamente si los recién nacidos presentaban sintomas de poseer alguna enfer medad mental o fisica, y si descubrian alguna, mataban al nifio arrojindolo desde lo alto de un acantilado. Esparta, hay que admitilo, representaba un caso extremo de una sociedad totalitaria en la que la vida familiar se encon- traba rigidamente subordinada a las necesida: des del Estado. El espiritu castrense de los espartanos no era, sin embargo, el tinico res- ponsable de estas pricticas infanticidas, aun- que los métodos que se empleaban en otros lugares eran probablemente menos violentos, 32 39. (pina opuests, zquierda) Nino aprendiendo a cami, de an pele Garr) de figuras ros, Hecho en Atenas hacia Ios aos 40. (pégina opuests,derecha) Retrato de nino. Busto romano de mare, siglo dC EH mis comin soa consistr en abandonar a Koma se dice que fue fundada por dos ninos un nino, perdido, en u 3 nul 10; Segtin la histo- al Tiber, pero as ‘olinas sobre las que ps encontré una loba 33 41. La muerte de Priamo. EL Viejo rey se enctentra caida Sobre el altar de Zeus, donde cesperaba encontrar rls: Neptolemo, con anadira completa, esti junto al ey, ignotando el derecho de asio que tena ol santuario, bande el cuerpo de Astanacte,nieto de Priamo, ‘con el que golpear al fanciano hasta la muerte. Fscena procedente de un ‘ampbors de figuras negras fabricada en Atenas hacia el ano 540 2.6. literatura el lamento de “Quién cuidara de mi cuando legue mi vejez”" es un grito que se repite a menudo entre los padres aturdicos y acongojados que han visto morir a sus hijos antes que ellos. No hay padre mas desgracia- do que Priamo, el rey de Troya, que crié Cinco hijos, el mayor de los cuales muri6 combatiendo contra el héroe griego Aquiles. Priamo mismo murié violentamente a manos de Neptolemo, el propio hijo de Aquiles. La cerimica pintada que representa la muerte de Priamo anade también la de Astianacte, el hijo de Héctor (y nieto de Priamo). Neptole- ‘mo enarbola el cuerpo de Astianacte como tuna porra con la que golpea hasta la muerte al pobre viejo, que habia buscado refugio en el altar de Zeus, La fuerza de esta imagen y de su peculiar horror radica, para el pensa- miento griego, en la extinciGn simultinea de dos generaciones: Priamo, el venerado patriarca, resulta destruido por el cuerpo de Astianacte, en quien se encarnaba la esperan- za del futuro, Las relaciones entre abuelo y nieto resulta: ban especialmente estrechas en el mundo antiguo. En Grecia los nifos recibian, normal- mente, el nombre de su abuelo, y se les daba mediante una ceremonia conocida como ampbidromia, pues las mujeres de la casa I vaban al nifio corriendo alrededor del hogar Asi, el recuerdo de las viejas generaciones per- manece vivo en las nuevas, y tanto en Grecia ‘como en Roma la ceremonia en la que se daba el nombre marcaba la aceptacién del nifio por parte del grupo familiar. Entre el nacimiento y la imposicién del nombre transcurrian entre siete y diez dias, durante los cuales los padres podian decidir siel nino tenfa posibilidades de 42. Escenas en las que se narra el crecimiento de un nfo. En la parte de la Jquierda una madze da de smamara sa bebé ante la stenta mirada desu marido Después el padre aparece sosteniendo en ss brazos 3 su hijo, quiza como prueba de st aceptacion en el seno Ge i fara, En la siguiente fscena el nif aparece jugando, guiando un carro trado por un burro. Finalmente el nino asste sus lecciones escolares Relieve de mairmol procedente de un sarcofago romano de mirmol del siglo w dG. Paris, Museo dl Louvre. in criarlo 0 ceplacion fisica del nino por parte de sus padres tenia lugar mediante la ceremonia del sublatus, cuando el padre levantaba al bebé en sus brazos. Este tipo de actos rituales se encuentran documentados en el relieve de un sarc6fago en el que se repre- sentan varias fases diferentes del crecimiento de un nino romano. En el mundo antiguo, la escolarizacién resultaba un hecho mucho mis fortuito que en el mundo actual, y tnicamente los hijos de familias acomodadas recibian algo que pudie ra considerarse como una educacion comple- ta. A los pedagogos podia contratirseles con un sueldo o elegir para ello a alguno de los esclavos de la casa. No habfa unas normas fijas sobre cuando debia comenzar la instruccién escolar, pero lo mis habitual, tanto en Grecia como en Roma, es que ésta comenzara en tomno a los siete aos de edad, La educacién tradicional habfa consistido ‘en una preparacin para la guerra. Aquiles, el héroe homérico que, en muchos sentidos, constituye el arquetipo del joven aristocrata perfectamente educado, habia aprendido miisica y atletismo con su preceptor, el cen- tauro Quir6n. Las competiciones atléticas for- taleciah el cuerpo y desarrollaban el espititu de competicién que resultaria tan necesario Para un guerrero victorioso; mientras que la miisica, de la que formaban parte la poesia y Ja danza, constituia un medio de asimilacién de los valores culturales de la aristocracia. En el siglo v a.C. cada ciudadano era un soldado en potencia. En torno a la edad de dieciocho anos todo joven ateniense se encontraba sometido a un entrenamiento militar intensivo, y en Roma, durante los iiltimos aos de la Repiiblica y'los primeros del Imperio, el haber cumplido el servicio militar era una condicion previa para desempefiar un cargo politico. Sin ‘embargo, no habia ningin lugar en el que la ‘educacion se orientara de manera mis dirigida hacia la guerra que en Esparta, Alli, a la e de siete afios se arrebataba a los nifios de familias y se les llevaba a vivir a unos austeros barracones en los que se encontraban sujetos ‘una disciplina rigurosa, Incluso siendo nifos, los espartanos eran endurecidos continuamen- te por sus educadores. Asi es como el escritor Plutarco describe el trato que estos nifios reci- bian de sus insensatas nodrizas No fajaban a los nifos y les dejaban libres los miembros y el rostro; ademas pensaban que les hacian felices ensendndoles a prescindir de golosinas en sus comics, a no tener miedo a fa oscuridad ni a la soledad, y haciéndoles despreciables las rabietas y los lloriqueos. fstas son las razones por las que algunos cextrinjeros contrataban.& veces 2. nodrizas espartanas para sus hijos, y, por ejemplo, sabe- mos conceetamente que Amycla, la nodriza del ateniense Alcibiades, era espartana, La insuccién militar espartina _culminaba con Ia krpieia cuando se obligabs a los jovenes espartanos a vivir aislados de la comunidad, reti- riindose a vivirsolos en el campo, Hambrientos y solitaros, su existencia era similar a la de los Iycanthropos 1. hombreslobo, viendose obliga- dos a sobrevivir a base de su astucia, robando comida y capturando durante la noche esclavos espartanos (ilotas), de los que, al menos, debian matar a_uno. Este tiempo durante el que se ‘encontraban al margen de la vida normal podria ponerse en relaci6n con los ritos iniciiticos que, ‘en muchas otros pueblos, marcabuan el paso de la infancia ala vida adulta, Ni siquiera las mujeres espartanas se encon- traban libres de esa obsesin nacional por la preparaci6n fisica, y las futuras madres de los ‘guerreros espartanos competian entre si en pruebas atléticas, Fsta era una costumbre que resultaria inconcebible en Atenas, donde las nnifias se encontraban recluidas, como sus ‘madres, y, aparentemente, no recibgan la misma educacion que los nifios. A las nifias atenienses se las educaba para ser unas buenas amas de casa; y si acaso recibjan una educacion mas esmerada, lo mas habitual era que la recibieran de una de las esclavas de la casa, ‘También los nifios, como el heroico Aqui- les, podian tener un preceptor particular, pero cen el siglo v a.C. se establecieron en Atenas un buen ntimero de maestros profesionales que abrieron escuelas especializadas en diferentes materias. Los grammatistes ensefaban los rudimentos de Ia lectura, la escritura y quiz también de la aritmética; los kitharistes ense- aban miisica; y los paidotribes, que se ocu- paban de la formacion fisica. Ningtin padre ateniense podia permitirse enviar a su hijo a las tres escuelas, y, probablemente, la mayor parte de los muchachos no recibieron mas que las lecciones de los grammatistes, pero, des- pués de todo, éstos eran los que ensefiaban las disciplinas més titles para la vida. Sin embar- 0, entre las clases acomodadas se consicera- ba indispensable una formacién atlética y musical. En las ttimas fases de la adolescencia los hijos de las familias pudientes solian recibir una educacién més profunda en distintos cam- pos de la filosofia, Normalmente se trataba de Clases de retdrica, pues aquellos que deseaban dedicarse a la politica o la abogacia necesita- ban aprender a exponer sus argumentos de 36 forma pausible y metédica, pero habia tam- bien algunos pedagogos que enseaban mate- rias mas abstractas, como geometria o filosofia moral, Entre estos tltimos se encontraba Sécrates, cuya insistente biisqueda de la ver- dad y la insistencia con que cuestionaba las opiniones tradicionales, le valieron un proce- 80, ¥ su posterior condena y ejecucién, por impiedad. El poeta romano Horacio decia que "Grecia, conquistada, acabé conguistando a su propio conquistador’. Y no hay mejor prueba de la verdad de esta afirmacion que en Ia forma en que, entre los romanos, evolucion6 la pedago- ‘gia, completamente helenizada ya a principios del siglo 1 d.C. La conquista del Mediterrineo oriental por Roma mares el inicio de la profun- dda influencia de los griegos en Italia; muchos de 48. Conjunto de excoms rocedenaes de a turba de una ‘ia, Pod tate de aguetes Uldizados por elit en vids, peo pod epresena tambien, aa pita como ura mur cada, ‘conoediendole ast que a mene lear negad. Estos objets ‘nchayen una munecs canes bras ariculados (uno de los ha ‘desaparecdo) un silo, un par de boas en minis, un spinon (ters aad en repiacin dea na) en ‘mina yun oes gms eas se bed), tami en mina, ‘ue se uizaba en as cerernenas upc. Grieg, bicado en ‘Aenas hacia e sh 420 aC. de lauta doble: arto‘ el precepxon ue ha icompariado a su puplo por le, Escena toma de una 1a) de pride Dyna (aera para cellos habfan recibido una educaci6n por encima mal, y sus conocimientos y sus siste~ de ensefianza, sobre todo en literatura transformaron ripidamente los métodos utiliza. dos por los romanos. Los nios romanos cre- seeder a los autores griegos les abrié. unas perspectivas. inconmensura blemente mas amplias que las que habian teni- do hasta aquel momento. Como su colega griego, el alumno roma: no tenia que comenzar su formacion por aprender las cosas mais elementales. Los lit- terator, equivalentes romanos de los gram matistes, ensehaban los rudimentos del saber; pero, sin embargo, en este caso, parece que a sus lecciones podian asistir también las aifas, Para denominar a estas escuelas se utilizaba la palabra /udus, la a significar el ste doble uso lingiiistico ha supuesto algo que ha sido subrayado tanto por los antiguos como por un etimologista roma- no, pensaba que se habia elegido este not bre para engafar a los nifios y hacerles pen: sar que ira la escuela era algo mas divert do de lo que era en realidad; sin embargo, una hipotesis mas moderna, y probable mente mas exacta, supone que el ermino se n6 en aquellos tiempos en que los juc , entendidos como una forma de entre- namiento fisico para la guerra, constituian el niicleo de la educacién romana. El ejercicio fisico siguié constituyendo entre los roma- nos una parte fundamental de la educacién infantil, que incluia también la misica y la danza, aunque le daban menos importancia que Ia que tenia entre los griegos, de un temperamento més arti 37 5. El matrimonio y la muerte a 45, Escena procedente de un pysix ( figuras roms que muestra una procesién upc: kx nv, acompanada por su novi, es levada en un carro st evo 1. Aubuida al pintor de Marly hogs, Grieg, siglo 38 En Grecia resultaba normal el hecho de que fuera en el dia de la boda cuando muchas novias se encontraran por primera vez con su marido. El ‘matrimonio se negociaba como una transaccion comercial, y inicamente los paces y sus resp tivos testigos tenian que estar presentes. As cuando el dia de su boda, al anochecer, la novia se veia obligada a abandonar el ambiente famil de la casa donde habia transcurrido su infancia, y aa dirigirse a la casa de su marido, el matrimonio, lejos de ser un acontecimiento feliz -o al menos agridulce-, podia llegar a ser algo espantoso, & incluso una experiencia traumitica, Antes de la boda, quiz el dia anterior, la novia sacrificaba sus juguetes infantiles a Arte misa, una diosa virgen ¥, por tanto, adecuada para’ que una doncella ‘le ofreciera aquellos ‘objetos asociados con su propia pureza. Proba- blemente, también en ese mismo dia, se tia en tuna vasija conocida como outbropas el agua para el bafo ritual que debia tomar la novia Cy, segtin parece, también el novio), y en las pintu- ris de muchas cerdmicas que representan esce- rnas de bodas podemos reconocer la peculiar forma de esta vasija, de cuellos largo, boca amplia y asas delgadas; aunque podria tratarse también de una escena fiinebre, pues algunas veces se colocaba un loulropboros sobre la tumba de aquellos que murieron antes del ‘matrimonio y es que los griegos, como muchos ‘otros pueblos, crefan que el alma de quienes habian muerto sin contraer nupcias permanecia en un limbo poco deseable, pues, en el caso de Jas mujeres, éstas no habian podido desempenar como esposas y madres, y en el de ss, porque no habian podido enger rar hijos ni proporcionar un hogar a sus anci nos padres, Por eso el louthrophoras consttuia un simbolo sustitutivo de esa vida matrimonial que les habia negado la muerte. ET mismo dia de la boda se celebraban sacri- ficios y banquetes en la casa de la novia yen la del novio, El encuentro de la pareja nupeial se producia al anochecer, cuando el novio, aco panado por sus “mejores hombres”, iba a usc: a la novia, En la cerimica pintada aparecen con frecuencias escenas que recogen este momento fn las que se representa a la pareja, especial mente si se trata de una pareja divina, montados en un carro; sin embargo, en la vida teal este tipo de vehiculos se utilizaban exclusivamente en las bbodas mis aristocriticas, mientras que en el resto lt 46, Una novia se dirige hacia su nuevo hogar en uns carta de mulas coped por el rovio, que se encuenira sertado junto a ell ts ellos se sienta el padino del aovio (earccbes) Leas rasta de eet) de igur frecho en Ateras hacia el 540 aC. Nueva York, The Metropolitan Muscum of Ar negrs atid al Pitor de Ams, de las bodas solia utilizarse simplemente una cearreta de labor tirada por mulas 0 bueyes, Como hemos dicho antes, en el momento de cruzar el umbral de su casa y subir al carro, los sentimientos de la novia podian no ser par ticularmente alegres; y quiz podamos tomar como punto de comparacién las lamentacio- ‘nes que atin hoy dia siguen haciendo las novias en las ceremonias nupciales griegas: ‘Ociiliame, octltame madre, para que este extraio no me Hleve consigo”, a las que la ‘madre replica: “Como podria ocultare, queri- da mia, si ya le perteneces a 6 El carro nupcial se dirigia ya de noche hacia la casa del novio, donde la recién casa- da se encontrarfa con la madre del novio, que a esperaba fuera, con antorchas para iluminar el cruce del umbral. El novio conducta a la novia a través de la puerta hasta el interior del hogar y al legar al lugar que constituiria el centro de su futura vida doméstica, los dos se arrodillaban ¢ inclinaban sus cabezas bajo una Iluvia de nueces y golosinas (eatakysmata), simbolos de la prosperidad que su enlace debia llevar a la casa, A los nuevos moradores se les recibia con una ceremonia en el interior de Ia casa y se les ponfa bajo la proteccion de los dioses del hogar Tras la ceremonia de la katakysmata, la novia era conducida hasta Ia puerta de la cimara aupeial entre canciones obscenas. Se consumaba el matrimonio y, al dia siguiente vol arecer la novia, ahora ya como un ‘miembfo mais de la nueva familia. Ese dia, las dos familias se reunian en casa del novic “segiin parece por primera vez durante todas Jas ceremonias nupciales~ part participar en tuna fiesta comtin, en la que los familiares de la novia Hevaban regalos y, sino lo habia hecho ya la novia el dia antes, la dote, en dine ro 0 especias, como garantia de su vida matti monial. Pero si cl marido moria prematura ‘mente 0 e] matrimonio terminaba en divorcio, la novia podia utilizar su dote con vistas a un segundo matrimonio, En caso de que se celebrara un segundo matrimonio, no se volvian a repetir las c monias y ritos realizados en el primero, pues fue entonces cuando se produjo ese aconteci ‘miento trascendental en la vida de la novia de perder su virginicad para convertirse en mujer. 39 47. Anillo nupeial de oro restr I extreme fumetio union de ls mano), Romano, sigs wat LC, 48. Coremonia nupeial romana de la dewrartum lunctia. Relieve procedente de un sareago romano de ‘nirmol del siglo n dC 40 Los autores griegos hablan de la novia como. un ser salvaje que debe ser domado por el matrimonio, y la cerimica pintada representa con frecuencia llevando a la novia cogida por la mufeca como si se tatara de una prisione- ra. En Esparta era donde se manifestaba de manera mis acusada esta idea dle considerar a la novia como cautiva, y asi es c6mo describe Plutarco una ceremonia nupcial espartana: Las mujeres eran llevadas al matrimonio por la fuerza, no cuando eran pequefas e incapaces de contraerlo, sino cuando eran jovenes com- pletamente desarolladas. Una vez que la mujer hhabia sido entregada, la dama de honor, por Ia- mula de alguna manera, la tomaba a su cargo, le contaba el pelo, le ponia un manto y unas sandalias cle hombre y la tumbaba en un jergon en el suelo, sola y en la oscuridad, Entonces el novio, después de haber cenado en su mesa, ‘como solia hacer, ni borracho, ni debilitado por los excesos, sino en plena forma, se deslizaba silenciosamente en la habitacion, le hacia per- dlr la virginidad y la Mevaba en sus brazos al lecho nupcial. Después, tras. pasar un corto espacio de tiempo con ella, regresaba tranqui- Jamente a sus aposentos particulares para dor- ir ali con el resto de los hombres javenes. sta idea de secuestro ritual también aparece en el ceremonial romano, que, en sus lineas generates, sigue un modelo similar al de los ‘matrimonios atenienses. En el momento de mas- char con el novio, la novia se refugiaba en los brazos de su madre, de los que era arrancada a la fuerza. Una vez mis el ritual se consiceraba ‘como un ito de iniciacion mediante el que la novia pasaba de un estado de su vida a otro. Y Jo mismo puede decirse del aclorno de las novias romanas: su vestido consistia en una tinica de forma arcaica, puesta de una forma especial; sobre la cabeza levaban un velo de un color naranja especial, y su cabello se peinaba segin luna moda antigua en seis crenchas separindolas previamente con una punta de lanza. El paso de doncella a mujer solfa resaltarse ‘mediante una serie de ceremonias celebracas ante el umbral de la casa de su marido: cuan- do llegaba la procesion nupcial, la novia roc ba las jambas de la puerta con aceite y sebo y las rodeaba con lana, y s6lo entonces, como en los matrimonios’ modernos, cruzaba el umbral en brazos. En la Antigiedad, el hecho de quedar inse- pulto y no recibir las honras fnebres se con- sideraba una desgracia mayor que la muerte misma. Los ritos funerarios podian ser caros y complejos cuando se trataba de ciudadanos ricos, 0 modestos y sencillos si se trataba de ‘gente pobre, pero en ambos casos su finalidad ‘era exactamente la misma: asegurar al alma del difunto su trinsito a la otra vida. Segin la mitologia, Hermes (Mercurio entre los roma: nos), el dios mensajero, era quien llevaba el alma hasta la orilla de la laguna Estigia, que marcaba la frontera entre el mundo de los vivos y el de los muertos, y era Caronte, el bar- quero, quien la cruzaba hasta el Hades o, en el caso de las mas afortunadas, a la Isla de los Bienaventurados, Resultaria excesivamente simplista pensar que tuvieran un concepto tan ingenuo de la vida y de la muerte, Ni los griegos ni los roma- nos tenfan una idea clara y uniforme sobre la otra vida, mis alla de la que los muertos for ‘maban. una comunidad de almas que, para su supervivencia, necesitaban de las plegarias de los vivos. Tanto en Grecia como en Roma se creia que los muertos permanecian vivos, y en determinados fechas, tras el funeral y a lo 49. Tres lly asquitos de unguentos) con escenas de carter funerar: (Gaquierda) los fanaares| loran al difnto, tendo en. suataid, (centro) Caron, el bharqueo,tlende su mano facia tuna de ls almas alas aque deber levar através de 4a laguna Esti el gran so {que separa el mundo de os vives del de os muertos, (erecha) una mujer est reaizando wn Ho ‘conmemerativo junto @ una tumbs, rodeando con cintas Inestela que marca ol lugar dela sepultura Eljoven represent, quiz, al difunt. ‘Todos ellos fueron realizados cen Atenas en la primera ritad del siglo va.C. El vaso de a inquierda esti atibuido al Pintor de SabouretTy los ‘ros al Pintor de las Caas largo del ait, les ofrecian libaciones y les lle- vaban alimentos, por lo que resulta normal que los sepulcros dispusieran de un conducto a través del cual pudiera introducirse comida y bebida en la cimara funeraria. ¥ a través de ‘esta ofrenda de alimentos era como se incor- poraba el recuerdo del difunto en la vida dia- ria de la familia a la que habia pertenecido. Las poesias y los epitafios dedicados a los jovenes que murieron pronto, antes de poder contraer matrimonio, normalmente hacen referencia de forma simb6lica 2 un matrimonio en el més alld. Ademds, en términos generales, las ceremonias fiinebres, con el aseo y vestido del cuerpo, las guirnaldas y antorchas, los can- tos y el viaje en carro a un nuevo “hogar”, parecen haber seguido unos modelos pareci- dos a los que regian en las ceremonias matri- moniales, Los mismos antiguos eran conscien- tes de este paralelismo, y veian el matrimonio y la muerte, Ia boda y el funeral, como expe- fiencias similares. El momento en que el alma abandonaba el cuerpo, como aquel en el que la novia abandonaba la casa paterna, se consi- deraba como un momento de iniciacion a tra- vvés del cual se producia el paso de una etapa de la vida a la siguiente. Los ritos fiinebres (como también los matri- ‘moniales) no eran necesarios s6lo para el “inicia do’; también eran precisos para canalizar el dolor yy el sentimiento de pérdida de aquellos a quie- nes habia dejado tras de si, Los deudos se encon- traban intimamente asociados con el hecho ‘mismo de la muerte por la que se consideraban a por el contacto co con el cadaver, que marcaba con un estigma a los vivos. De la misma manera que la muerte habia separado al difunto de la vida y de los vivos, el contacto con él, y aquellos sentimientos que la muerte producia en el corazén y la mente de sus deudos, les situaban a ellos al margen del resto de la comunidad. Las vestiduras negras, el corte ritual de cabellos, los lantos, el desfile’ de los parientes y los lamentos estent6reos servian para relajar la tension de los deudlos y, al mismo tiempo, para marcar su separacin del resto de la sociedad a través de los rtos funerarios los deu- dos experimentaban su propio “ito de la separa -Cavemnct: The Dramaatc Festival of Athens, 2 ed. Oxford, 168. HH, Scrat: Festina and Ceremonies ofthe Romans Republic Londres, 1981 , Stow: Festivals of atic, ‘Wisconsin, 1983 J.-M. Toxvant: Death and ‘Burial inthe Roman Word, Londres, 1971 J. Wa Peas A. Canoe Pompeii AD 79, Catilogo de Ibexposiién. Beso, 176, K.D. Wore: Roman Farming Landes, 197 17. Wineue Grok and Roo lao Loves, 18 1M. Wason: The Clocing of Ancient Romans, ‘alimnore, 1938. RP Warow aun, voz Grock Musi” en el Groves Dictionary of Music and Musicians Landes, 1954 era edicion 1984, Apart de estos bos aoe ba uiliado gran cini- dade culos de esas «specimen ls siguientes H. Guocar Tmo “Weaving Claes to Shape inthe Acint Woe The Tunic and “Toga ofthe Amingstore, Tex file Hesory 13 (982) pp. 325, 1 Jesus “Ts there ie ater Mastage? A Std ofthe ‘Anlution Moin Vase Paintings of he Athenian Wedding Ceremony", Bulletin ofthe site of Casal Sw dies 30 0983), pp. 137A. [Joan aw D. Wun "Sprang Hair Nes: Thee Nanufacure and Use in Ancient Greece", Ameria foural of rcbowolegy, 89 (0985), pp st1-18, JLB, Jones era “An Attic ‘Couatry House below the Cave of aan at Vi’ Arua of the ns Soa of ens, 68 97D), pp. 355482, J. Gow "law, Custom aad Myth Aspeets ofthe Socil Position of Women in Classical Athens", The Journal of Hellen Studies, 100 (1980, pp. 3859, Citas tomadas de autores clasicos Pégina 16: Cometio [Nepote, Prolog a sus Vidas de goneraes emi- renter, Plutarco, Vida de Pompeyo 551-2. Pagina 27 Luciano, Amores, 39. Pagina 30: Esquilo, Las cosforas, 50-763, Pagina 35: Pluareo, Vida de ‘curgo, 16. Pigina 40 Ibidem, 15.54. Pagina 62 Hesiod, Los mabajos os dias, 9698. Pagina 6, Diodor Siculo, 5.38.1 Pigina 68: Petron, Sat! nein, 75-76 Créditos fotograficos ‘Museo Nacional de Ant seas, Leiden: fig 6 Peter Connell: ig 7: Sea, Florencia: fig. 8 Museo Arquedlogico, Napoles: fig 1 Tloopas Takis ig. 17 ‘The Metopolitn Museum ‘of A, Nuew York figs. 20, (Pletcher Fund, 1931), 46 (Walter C. Baker Git, com. pido en 1951) y 39 (Museo Nacional de Fnlan sa, Helsinki fig 23, Deut ches Archeologisches Inst tute, Roma: ig 27; Reis ‘ches Landesmiaseum, Ther fig, 33; American School, “Aes: fg. 38; Réamion des rmuséesnationaux, Pais Figs 42,86 Mansell Collec- ths fig. 5; Michael Hol Ford: 64, parte interior dela cabiera posterior; ‘Onganizacion Turia de Grecia: ig. 66; Robert Har. sling Picea Library fig. 7% m indice de nombres EL nximero de las flguras ‘aparece en negriia Academia 48 Adriano 27 Agamentn 6, 58 ‘Agora 30, 63 Akrotiri 12 Alejandro Magno 20,21 Alfleres (de vesido) 23, 24, 26 Algodn 21 Amphidromia 35, Anfteatr 55.58, 73.78 Androm 16 Anthesteria 30 Apartamentos 11,9 Aquiles 34,35, 36, Aristofanes 48, 53, 54 66-68 Arinotcles 62, 65 ‘Aritoxeno 50 Aspasia 16 Astianacte 34, 41 aileicos 35-37, 14 56-57 arrsum Augusto 19, 55 Bewothal 38 Boas 38, 45-48 Busan’ 57 Cabello 26, 28, 30 Caronte 40, 42, 58, 49 Carers de cuadrigas 55. 57. portadilla, 72 Casandra 53. Casas griewas 1214, 10 (Casas romnas 5-12, 1-2, 5,9,11 hiton 24, 26,25 Ghlamys 25 (hoes 30.35, 37 Cicero 48 Circo 55, 58, 71-72 ‘lions? Cloaea Maxima 11 Gltemnestra 16, 53 Coliseo 58, 74 Comedia 53-54, 65:70 Compluesum 6 Constantino 66 Coro 52 Cubicula 6 72 Danza 49, 51, 65, 67 Deméstenes 14 Diodoro Siculo 66 Dionisos 49, 51 Domus 68, 12 Dote 39-40, Drama $1, 63-70 ipo 33, gina 24 Ehlykiema 53 Esparta 5, 32°33, 35:36, “0 Bpidauro 52, 66 Escipion 25 Esclaves 15, 26, 35, 62, 92 Escuela 35-38 Esquilo 16, 30 Estigia laguna 40, 49 Euripides 50 Familia 15 Fichas 36 Fiestas 44 Friso del Partenon 44 Funerales 40, 49-52, Ghadiadores 55, 75-78 Granjeros 63, 83-84 Grammatisies 36-37 Guerras médicas 23 Gymnasium 38 Gynaikonitis 16 Hombres bres 68 Héctor 34 Herculano 5-7 Hermes conductor de las, almas 40 Herodoto 23, 24 Hesiodo 62 Hetasrat 16,13 Hilary tejer 19-22, 19.23 imation 23,25, 25 Hoffmann, Marta 22 Horace 37 Infantcidio 33 Impluviu 6, 9 Jacdines 89, 7 Juegos 55, 34-56 Juegos de Nemea 45 Juegos Olimpicos 45 ‘Juegos panhelénicos 45-46 Juegos pitcos 45 SJuguetes 35, Julio Cesar 55 Suvenal 29, 35 Katalysmata 39 Kihara 19, 59, 61 Kitharistes 36 Kiné6 Krpiteia 36 Kynosarges 48 Lares 6, 3-4 Lana 20-21 Lefkandi 19 Leneas 53 ino 20 Litterator 37 Louthroproros 38, 50 livciano 27 Ludi 55, 57 Iycou 48 Lykantheopos 36 Manuonision deesclaves 68 Manus 15, Maquillaje 29, 32-33 Mar 12, 65, 87:90 Matrinionio 38 Médicos 63, 79-80 Mineros 66, 94 Moda (en el vestido) 23, 24-27 Mucbles 22-23, 6 Muerte 41, 49-52 Mujeres, papel de las 15, ‘Munera 37-58, 60 Masia 35-36, 14,48, 58, 44, 58-62 Nepote, Cornelio 16 Neptolemo 34, 41 Neron 57 Ninos 30, 3444 Ons 15 Orebestra 31-53, Orestiada 30,53 Orestes 30 tinal 30, 37-38 Ostia 11, 9 Paldoribes 36, $6, 48 Pastores B1-82 Pesca 65, 89-90 Palaistra 46, 48 Pala 2 Vergina 20 Palle 25 Vespasiano 43 Panatenea 44, 46,5456 Vestibulum 6 Pandora 62 Vitruvio 67 Paterfamilas 7,15 Patncios 15, 43 Patronus? Penates 6, 34 Peplos 24, 25,25 Pericles 16 Petronio 6 Polya 54, 69 Pintura moral 9, 8 Pisisrato 23, 24 Plaron 48 Plauto 55 Plinio Plurarco 16, 40 Pompeya 5.9, 7-8 Priamo 34, 41 Prometeo 62 Prosbests 42-43, Porpura 21, 23, Quirdn 35, 69 Redecilla 26,29 Religion 6, 15, 44 Reteato 32 Rito de iniciacion 42, Romulo y Remo 33 Sacrificio 38, 44, 53 ‘Sakae 26 ‘Salutatio 7 Santorini 12 ‘Sericio militar 35,48 Seda 21 skené 53 Socrates 36, 53 Stola 26 Sublanus 35 ‘Symposium 6, 49, 13 Tablintum 6-7 Taco 25 ‘Teatro 31, 63-70 Terencio 35 ‘Then 12 Times ‘Tio 58, 60, ‘Toga 25,25, 2627 Trabajo 62 Triclinium 6 Tucidides 23

También podría gustarte