Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
. Fl doctor Torrey indica que fil-una traduccin fi otra da la plena Tuerza de} origi: inal grico, que significa «en tensida, en Intenso deseon Esta palaba vuelve'a ser usada etiando Jess ora.en ‘Gefsemanf: «¥ estando en agonia oraba mis intensa- mente, y eta si sudar como grandes gotas de sangre engrumecidas que caian sobre la tierra.» (Lucas 22:44.) ‘Sin duda, esto era fervor. zQué desimos de ues tras ocaciones? {Somos Hamados a agonizar enor ‘in? Muchos de fos santos de Dios dicen «{Nol» Creen ‘que esie agonizar por nivestra paste significaria falta de fe, Sin embargo, muchas de las experiencias. que ‘ccurrieron al Sefigr’ han de ser nusstras, Hemos sido crucficados. gon Crista y hemos sido levantados con Cristo. 2No debemos agonizar pos las alas? ‘Volviendo a la experiencia humana. :Podemes de- jac de aganizar en oracion por hijos qucriddos que viven én el pocedo? Yo dudo si algin ereyente puede dejar 100 de tener esta carga en su corazén —una pasiGn por las ‘almas— y un agonizar en oracién. ePodemos dejar de gritar, como John Knox, «Oh, Sefor, dame Escocia o mueros? Aqui otra vez la Bi blia nos ayuds, Vemos claro que cuando Moisés cla- maba a Dios: «Te ruego, pues este pueblo ha cometi- do un gran pecado, porque se hicieron dioses de oro, que perdones abora su pecado, y si no, réeme ahora tu libro-que has escrito», estaba agonizando, ‘No estaba también agonizando en oracién San Pa- blo, cuando dice: «Porque desearia yo mismo ser ana. tema, separado de Cristo, por amor a mis hermanos, los que son mis parientes segiin la carne?» (Romanos 9:3) Podemos estar seguros de que nuestro Sefior, que lots sobre Jerusalén y que «ofrecié ruegos y siplicas ‘con gran clamor y légrimas» (Hebreos 5:7). No se ex- trafard si nosotros derramamos ligrimas sobre los per- didos, ¢No se gozaré, més bien, si ve que agonizamos sobre el pecado de ellos que le’ ofende? De hecho, la teseasez de conversiones en Ia vida de algunos minis. tros es debida a Ia falta de agonizar en oracién. ‘Se nos dice que «en cuanto Sin estuyo de parto, dio a luz sus hijos» (Isaias 66:8). San Pablo estaba probablemente pensando en este pasaje cuando escri- bis a los Gélatas: «Hijitos mios, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en yosotros.» (Gélatas 4:19.) ZY no serd esto verdad de los hijos espirituales? Cuan frios son nuestros cora- ‘ones. {CuB® poco nos preocupamos de los perdides. GY nos atrevemos @ criticar a aquellos que agonizan ppor los que perecen? Dios no lo permita. jNo! Hay Juger para uchar en oracién, no porque Dios no quie-"7 ra contestar nuestras oraciones, sino & causa de la opo- sicién de los «dominadores dees mundo de tinieblas» (Bfesios 6:12). La lucha no es entre Dios y nosotros. El est @ 101cw ldo cn puts dns. La cha ean (algno, a pesar de que es un enemigo venido (U* fun 5:8), El Maligno desea frustrar nesrasoracones, ‘No tenemos licha conta sangre carn, sino con: tea principades, contra potestades, contra tos doming- dares de este miindo. de tiene, contra uestes esp Tituales de maldad en las regioncs cclstes» (Efesios 6:12). Nowotros tambien estamos en estos lugares ce- Testisles con Cristo (Efesios 1:3); y solo Cristo puede salir vicloriowo. Nutsca lucha puede ser de nuestros pensamientor contra las wigerencis de Sat, y en que procuramos mantenerlos fijos en Cristo nuestro Sal- ‘aor; esto es vgilamos al mismo tempo que oramos (Glesos 6:18); worando . y velando> Somos consolades por el hecho de que «el Espiritu nos. ayuda en nuestra debilidad;. pues, que hemes do reir eémo convene, no To sabemos (Romanos 8:26). .Cémo nos auyda ef Espirit, edmo nos ensefa, sino “Yor el ejeroplS, asi como por el precepto? {Cémo ora el Espiritu? El Espritu mismo intercede por nosotros fon gemidos indecibles. (Romanos 8:26), gonea el Espista en oracién como el Hijo en Getsernant? Si el Espiritu ora em nosotros, eno debemos noso- {ros compartir su. epemidos» en oracin? Si nuestro agonizar en la oracign deblite noesize cuerpo en aquel ‘momento los dngsles vendrén y nos frtalceerin, coms hicieron al Sefor (Lucas 22:45). Quizd, como’ Nehe- ris, Hagaremos y Raremos duelo'y ayuno euando ors mos al Senior (Nehemis (4). ePeros, puede pregun te alguno: ‘No induce on notion sn nga ine cesario 7 que deshonra a Dios nuestro duelo por el pe: ‘edo y fvestro antclo por la salvacion de ottes?> whe Sica una falta de fo en lar promeses de Dios? Quizd sea asf. Pero no hay dda que San Pablo miraba la oracién —por To. menos en algunas verso: aes como un eonflisto (yer Romanos 15:30). Al es: ‘bir a los eristanos de Colosas, die: «Quiero que 102 sepsis qué lucha tan dura sostengo por yosolrs... y por todos los que. no me tan Visto personalmente; para que sean consolados sus corazones (Colosenses 2:1, 2). Sin Guda, oe refiere a sus araciones por ellos. Gtra vez, al hablar a Epafras como «une de voso- tos, servo de Cristo, siempre esforzindose intensamen. te por nosatros en sus oraciones para que estéis Firmes, perfectos y completos en todo Jo que Dios quiere (Co Josenses 4:12). La palabra usada «esforzatse intensamente» es la que hecemnos equivatente @ eagonizar», la usada al hs. blar del Senor en Getsemani «estando en agonia» (Lu- cas 22:48). ET apSstol dice que Epafras, se ha esforzado inte samente por ellos en sus ocaciones. San Pablo le vei orando estando él prisionero, y era testimonio de fa if tensidad con que Epafras orsba en favor de los Colo. senses, Cun asombrado debia estar el guardin a quien Pablo estaba eneadenado —y cus conmovido— al ver 4 estos hombres e2 sus oraciones, Su agitacién, sus Ié- Grimas, sus intensas siplicas al levantar its manos en JQué revelacién debia ser esto para No hay duda gue San Pablo estaba hablando de su propia costumbze cuando estimulaba a los crstianos de Bfeso y a otros cuando dice: «arando en todo tiempo con toda deprecicién y stplica en el Espftitu, velando en ello con toda perseverancia y suplica por todas los Santos; y por mk.. embajador en cadenas» (Efesios 6:18, 20), Este es un cuadro de su propia vida de ors- cién,’ podemos estar seguros. Ast que la oracién vence todos los obstécutos; los elimina. Es esto lo que se quiere decir con Ia expre- sign de «orar hasta que se consiga», Debemos luckar contra las maquinaciones de Setda. Puede ser cansan- cio corporal © dojor, o pensamiento varios que nos z=. 103claman, o dudas, o aragues directo de huestes esp- Fituales de maldad. Con nosetcs, como con San Pablo, ‘a oracén es algo semejante a un avontitnn, una chao, pur lo menos algunas veces, Io que nes ebliga 9 {stinl's apoyo en Dio» (a 0:7) cEstamon equivocados si suponemos que son pocos Tos que algu- na vez lichan en otaciin? ¢Luehamps nosotros? Como Sea, no dudemos munca del poder de Dies de las Th auezas de se aracin La autora de «4 Secreto del Cristiano de una vida flies sot un eal de emia Paco ane ds maerte un incidente en st propia vida. Una seora amie 48 stya, la visitaba de vez en cuando, y pasaha con ella dos 6 ties diss, To cual gra une verdadera prucha para su paciencia y humor. Cada una de estas visise exgia mucha preparacién en oracién, Legs la ocason en que {& amiga hizo planes entera) La autora mencionada consider6 que no tabria bastante para loricara a menos-que pasara una no- che enteraen orsciin. Asque te procuié un plato con bizooches,y se reiré promo a su cormitoro para pacar Ja noche de roils ante Dios, rogindole que le dra 1a gracia de mantenerse carifosa Y sosegada duraste 1a Visita con que le babia amenazado. Tan pron Como se arrodill al lado de la eama, pasaron por #1 mente las palabras de Filipenses 4:19; 'w¥ si Dios proveerd 4 todas vorsttasnecesidades conforme sus rgezae en lots en Cae Fein Sus toners destacceren, jo: =Cuando comprendl esto, le cl gracias por onda, ye mt a a cama dorm Yoda Ta oc a amiga Ileg6 el dia siguiente, y la semana transcu- ri Telamente» : __ Nate puede tucer reglas rigidas sobre Ia oracién, ni atin para si mismo. EV Esptitu Santo de Dios slo puede dirigienos punta por punto. No\podemos sacar $n mis del asunio. Dios es est Juez mucsto Guie. Pero no alvidemos que la orsciin tiene muchos axpee 108 tos. Como dijo st obispo Moule: «La verdadera ota ida puede ser pronugciada en innumerables circuns- tancias.» Con mucha frecuencia, La oracién puede ser ol peso de un soltozo EL caer de tna légrima, La mirada que hacia arriba se eleva Cuando, séio El, estd cerca, Puede tratarse de hacer conocer a Digs nuestras pe- ticiones y nada més (Filipenses 4:6). No podemos ereer que fa oracion tenga que ser siempre luche y conflict Porque si io fuers acaberiemos agotados, destrozadas, ft un colapso mental y muy pronta nos Nevarian a Ja cumba. Y para muchos es na imposibilidad fisica el pasar un tiempo prolongada en una misma posicién para orar. El doctor Moule dice: «Se puede ofrecer oracién autén. tica y vietoriosa continuamente, sin el menor esfuerz9 fisico o perturbacién; surge a veces en fa mas profunda quietud def aima y det cuergo pata salir a la superti- le. Pero hay otro aspecte de la cusstién. Le oracién rng debe ser hecha nunca de un modo indoleme, por ‘ms simple y confiada que sea. Debe ser una transac- cién infinitamente importante entre el hombre y Dios, Y por tanto, con frecuencia... tiene que ser conside rada como implivando trabajo, persistencta, contflicto, si ha de ser verdadera oraciGn.» Nadie puede dar fGrmulas vatidas para otro. Cade cual debe persuadinse a sf nuistia de cémo debe orar, y el Espicity Santo nos inspira y guia 4 cada uno para saber el tiempo que debemos destinar 9 orar. Y que todos seamos tan lena del amor de Dios nuestro S: vador que Ia oracién, en todo tiempo y en todo lugar, pueda ser un gozo as{ como un medis de pracia.Pastor Divi, supe lo ae necesames Dl di de hoy 9 ates ado fs gues etalon Bana Seer, as de gi iecesoe Pater onc'ch a she tc PeP coe ts Behechore [out ono scot 8 zCONTESTA DIOS SIEMPRE LA ORACION? Legamos ahora # una de tas pregintas mas impor tantes gue podemos haver. Muchicimo en nesta vida depende dela respuesta gue demos, No Watemoy de equiva Ia pregunta, sino consideremesta eon sneer Gad y franquesa, {Contesia,Dioe sempre In oraién? Natufotmente, todos conetddmos que contests Ta oFe- ion es deci, ue contsia algunas ofactones, ya. ve- Pero, isicmpee contests i ora verdaera AIG SRE Tlamadas oraciones, no las contest», porgue Eno Tas ewucha. Cuando su pueblo estane en bela, dio Cuando molipliqués {a otacién, yo no ol» (ales 1:15), oro un fijo. de Dios debe esperar respuesta a la coracin, Dios quiere dar respuesta a cade oraién, yo InY ing onion verde goede ne et tne ceo. Yon todo exta maravilse declaracin de San Pa bio «Todo es vostro, vossos de Cristo. (12 Corit- tos 3:21, 22)" parece tdeiamentefalsa para muchos retinas, ¥ no fo ex Todo es auestn, pero nosotros fruchas veces no. poscemos netrasposesiones. Los ropintaioe do Mount Morgen, en cfand (Aust 107lia) trabsjron asiduamente en ls laderas iftles de fn montaha durante afos,sacando Glo To bastante para srrasrar una vida miserable, sin saber que debaa de Sus pics habia ‘una de at rminas do oro mis reas del ‘mundo Habis riguezs, 10 sofads, ni Imaginada Mi po- Seda, Era asuyay 9 0 Sua i crtanismo’sabe ge ay viqueeas en Dios, eo le gloia en Jesters, pero no sabe emo Obteneten. EMfora bien, must’ Seior nos dice que podemos tenerlas si las pedis, jQue El ns de citroen is cosas seativas 2 a orelén! Cuando decimgs que 10 fay verdadera oraciin que no sea sentesaddeno que ferwos decir que Dies concede sin falta todo fo que ie pide. Ha habido algin padre tan poco juicioso que haya tratado 4s hijo ss? Nesotos no damos al hijo tn hargén sl rio, porque sabemes que se quemara, por mds que lo pida"O biet, nadie abe dar & un mio Eematiado diner. {Oe pasaria sf Dis nos diera todo fo que pid snos? Pronto estaramos diigiendo el mundo y El ten- dra que contemplai. sin dudn es evidente que no Simos capaces. Ademis, eso serie na imposbiia, orave habria muchos que, simultinesmente, reclame: Fan'el cago de director Dis cts Te on vse con un eS, veces con ut «No». A veces ten «Fsperar, porque Pade rss ples Sn pre Garis i De én mayor ave a que pedimes, ¥ que afecta @ ots Vidas ademée de Ia Suet, ‘ a reapuenta de’ Dios ts a veces «Nov. Pero esto nos por necesidad ona prutba de que hay petado co. nocido 9 eeondido en fa'vide dl que suplea, aunque Hay Ia postilided de que. heya pecado desconoci. Dijo «No» a San Pablo 2 veces (2° Corintios 12:8, 9. Muchas veces ta negaiGn es. debida a seta, ino: rancia o egotimo en le petisin.«Porgu, qu dbemos pedir como convine, né lo sabemos» (Romanos 8:26) 108 Esto era To que estaba equivocado en La peticién de Ia imatre de los hijos de Zebedeo. Fue y adord a Jess y le pidid algo. El contest6 inmediatamente: «No sabes To que pides.» (Mateo 20:22.) Elfs, el gran hombre de ‘oravién, reeibié también un «No» como respuesta, Pero Cuando fue arrebatado ala gloria en un carro de fuego, bbe lament® que Dios fe tubiera dicho «No», cuando él ‘lamnd a Dios: «Oh, Seflor, quitame la vida.» La respuesta de’ Dios es a veces «Esperan. Puede demorar la respuesta porque no estamos todavia pre- pparados para recibir ef don que deseamos, como Jacob Exando luchat, Recuerde la famosa oracién de Agus- tin: «Oh, Dios, hazme puro, pero no ahora.»Gates 23°37) Lo ms ive do todo es que con fre ‘euencia pedimos y no recibimos porque somos indignos de ello, y Haogo aos qusjamos porque Dios no contesta huestrasoraciones, El Sefor Jess clare que Dios da 1