Facultad de Humanidades Escuela de estudios literarios Licenciatura en literatura Seminario de teoras literarias Juan Sebastian Muoz Coronel 1533523
Ojal a m no me pasara lo que a l. Lo ven todos como idiota o genio, pero no
reaccionan ante a lo que yo reacciono. A ese, al tal Seb, es a quien impulsan las furias a mirar de reojo. Yo ya no s que considerar correcto, pues para l ayudar a todos es algo sagrado, como el hroe de todo videojuego o pelcula. En cambio, yo me pudro en mi propia sal. l va por ah sin preocuparse, eso me toca a m. Nos turnamos la nube que el mismo recarga a veces de esperanzas. Es as como flotamos, grande y yo pequeo. Suele frustrarse por sentir la falta de estmulos, de motivacin. Se esfuerza por dejar escapar de su boca palabras, que he encontrado abandonadas en mi palabrera. l odia las maanas sin sentido, a m me gustan las tardes silenciosas, ignorar al mundo y pensar en el amor. Yo no entiendo que fue de su reminiscencia por la felicidad, si fue el quien se enamor por primera vez. Luego, me pidi el favor de amontonar, junto a los sueos, lo que fue un bello y hostil recuerdo. Los hermanos y hermanas de pacto ya son siluetas para el reflejo que veo en sus pupilas. Sebastian los extraa, ya que sin ellos l no es nada, contrario a lo que puedo pensar de muchos, comprendo la angustia por la ausencia de las sonrisas de aquellos. A veces, con la almohada cegndome, siento como todo se detiene. Sigo la estela de algo que no es tangible, ni para m, ni para l. Para los dems, tal vez. Para el otro l, nunca lo fue. Sebas es experto desando lo que yo imagino. Sin m, l no sabra lo que es soar. Yo sin l no sabra lo que es rer. Es muy bueno al contar las historias que en mi habitacin son reales. Replica en estado puro a todos estos seres que veo a diario. De tinta y papel, pero al final son ellos. Compartimos una sonrisa al fantasear para luego entristecer y no saber quien es l.