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B ic. tutosucers a Ya hi Brag. 2 HEA. Marky 5 eee ita. Forihra La voz humana La fisiologia de la voz no empezé a conocerse bien hasta el advenimiento de técnicas innovadoras, 8racias alas cuales contan ademéds, con una mejor atencién » tratamiento de ese recurso humano inte afios atrés, Ia vor huma- V ‘na constitufa todavie un mis- terio. Se conocia muy ‘mal su fisiologia_y no se sabia cémo cuidarla, pese a siglos de fascinacién de la sociedad ante las demostracio- hes excepcionales de cantantes y ac totes, por no recordar la importan« decisiva de la comunicacién oral en- tre‘los hombres. Los estudios sobre la voz. y, en particular, sobre el cui. dado de ta voz profesional eran es. ‘casos; ademés, en Ia exigua biblio. sgrafla existente apenas si se aborda. ba la fisiologia de la vor, ‘Magra era también la situacién de la terapéutica. Se cuestionaban los tratamientos extraquirdrgicos de los problemas benignos suftidos por las Cuerdas vocales, por cuya razdn se solfa extirpar las capas superficiales de Ia cuerda vocal para eliminar pro- e805. patol6gicos benignos, dando or supuesto que un tejido sano neo. Yormado repararfa la’ extirpacién, ppero el resultado eran ronqueras per” ‘manentes, En esa época aparece una nueva especialidad médica, Espoleados por el interés en los problemas de Ia voz de cantantes y actores, los avances cientificos y téenicos elevaron el nie vel de atencién a todos los que te- nfan complicaciones en la voz. En ‘ese paso hacia delante intervinieron profesionales de origen dispar, que hablaban, a primera vista, lengusies ‘muy distintos. La Fundacién para el Estudio de Ia Voz, instituida por el médico neoyorquino Wilbur James Gould para fomentar esa convergen- cia, celebré su primer simposio en profesor de torrinolaringologéa en la facultad de ‘medicina de ls Universidad Thomas Jefferson de Philadelphis, dicige The Journal of Voice. Pertenece al oto ani. versitario y ensena canto. Ha publicado més de 1S0 artculos cientificos yuna deceas de libros sobre su especialidad 50 Robert T. Sataloff 1972; participaron en el mismo larin- g6logos, patdlogos, fisidlogos, macs. tos de‘ canto y otros profesionales del canto y del teatro. Del intercam- bio de ideas allf ocurrido salieron Auevos proyectos conjuntos de inves- tigacién, nuevas colaboraciones y notables’ progresos. ‘Transcurridos veinte afios, pueden recibir ya una esmerada atenci6n médica y terapéutica el cantante con problemas, el politico en periodo electoral, el fumador afénico 0 el vendedor de voz fatigada, Asistencia gue es resultado del conocimiento cada vez mayor que se va adquirien- do de la fisiologia de Ia voz, La emisién de la voz se debe a la accién coordinada de muchos miscu- los, 6rganos.y otras estructuras del abdomen, t6rax, cuello y cara. En realidad, ‘casi todo el cuerpo influye en la voz, directa o indirectamente, Para hacernos una idea de la patolo- fa del Grgano vocal, se impone un breve viaje por este complejo y de- licado mecanismo. La primera estas cin, y la parte mas conocida, es la laringe u érgano de Ia voz La laringe consta de cuatro com- onentes anatémicos bésicos: el es. Queleto cartilaginoso, los miisculos intrinsecos, los mdsculos extrinsecos ¥ la mucosa o capa blanda. Las par tes principales del esqueleto laringeo son el cartlago tiroides, el cartilage sricoidesy los dos cariflagos rite. noides. Los misculos extrinsecos onectan estos cartflagos a otras es. fructuras del cuello; los masculos in- trinsecos se alojan dentro de los mis. mos cartflagos, 2 Un par de miisculos intrinsecos se extiende desde los cartilagos arte. hoides hasta el angulo del cartilage tiroides, justo debajo y detrés de la fhuez de ‘Adin. Estos misculos tiroa ritenoideos forman la masa de las cuerdas voeales; el espacio entre elias es la glotis. En las cuerdas Yocales se halla normalmente el ori. gen de Ia vor humana. Los miisculos intrinsecos cambiar tas posiciones relativ Jos cartlagos y tirar de ellos vés de una gama de movim. Estos cambios alteran 1a. form sicién y tension de las cuerd: cales suspendidas, El musculo tiroideo, por ejemplo, participa control ‘de Ia agudeza de to reforzar la tensién longitudinal Famiento) de las cuerdas voce, Los miisculos extrinsecos aul bajan el esqueleto laringeo. El « de acordeén resultante cambi ‘éngulos y distancias entre. los lngos y altera Ia longitud en de los miisculos intrinsecos. L tinge presenta una tendencia ni 4 subir y bajar a medida que el de vor ‘asciende y desciende ajustes de posicién, muy grande: ficultan el control adecuado t las cuerdas vocales que se req cen Ia voz normal, Por esta raz6y cantantes de piezas clésicas que educado su vor aprenden a usa ‘miisculos extcinsecos para man! el esqueleto larfngeo a una a constante, sin tener en cuenta la deza de ia voz. Esta técnica pro cciona una calidad vocal uniform toda Ia gama del cantante. L%)tcticados telidos que reeu el interior de Ia laringe son 1 complejos. La mucosa forma la perficie, delgada y lubricada, de Cuerdas vocales; las pone en con to cuando se cierran, La mucosa tapiza las cuerdas vocales difiere la que reviste el resto de la lari ¥ el tracto respiratorio: se trata lun épitelio escamoso y estratifica 1. LA CIRUGIA de tas euerdas vocs rolongé la carrera de Elton John. Ty Probiemas con su vor durante una ¢ por los Estados Unidos en 1986. Pade tuna lesion benigna, extirpada con és 4 principios de 1987. Un alo despe reanudaba sus concertos IsvESTIOACION Y CENCIA, febrero, 19 idéneo para soportar el trauma del ‘contacto de fas cuerdas vocales. Pero no pensemos que la cuerda vocal sea un simple misculo prote- ido por una mucosa. En 1975 Mi- horu Hirano, médico de Kurume, re- conocié cinco capas distintas de {ejido en la estructura, Debajo del epitelio delgado y lubricado de la superficie, se hallan las capas super ficial, intermedia y profunda de la ‘lamina propria”; bajo esta dltima yace el miisculo tiroaritenoideo 0 vo; tal. Las cinco capas poseen diferen- tes propiedades mecénicas que pro- ducen los suaves movimientos de corte, esenciales para las vibraciones normales de las cuerdas. ‘¢ Cuando las cuerdas vocales vibran, producen sélo un sonido bésico que Fesuena, sin embargo, por todo el facto Vocal supraglético; abarca éste la faringe, 1a lengua, el paladar, la ccavidad ofal y la nariz. La reson ‘cia aadida produce parte del timbre y carécter percibidos, 0 calidad vo- tal, de todos Jos sonidos del habla y el canto, ‘La fuente de potencia de Ia voz resi- de en el tracto vocal inragl6tico —Ios palmones, caja torécica y misculos de la espalda, térax y abdomen, que generan y dirigen una corriente de faite controlada entre las cuerdas vo- cales. Conforme Ia_glotis se cierra, se abre y altera su forma, cambia sin apenas solucién de continuidad su resistencia al aire. La fuente de po- tencia debe hacer ajustes répidos complejos para mantener una calidad ‘voeal uniforme. Los cantantes y ac~ tores acostumbran llamar al complejo dde potencia su “soporte” 0 “diafrag- ma”. La verdad es que Ia anatomfa del complejo de potencia, complica da, no acaba de conocerse bien ni suelen referitse a lo mismo quienes echan mano de tales expresiones. NASOFARINGE OnOFARINGE HIPOFARINGE Los principales misculos de 1a inspiracién son el diafragma (miscu- Jo en forma de cépula, que se ex- tiende a lo largo del fondo de la aja torécica) y los misculos inter- costales externos. La espiracién es tuna funcién pasiva durante la respi- racién tranquila: las propiedades me- efnicas de los pulmones y caja tord. ica expulsan el aire fuera de los ulmones sin esfuerzo después de luna respiracién plena. Cabe tambicn luna espiracién activa, y muchos de Jos miisculos que engloban este pro- eso se usan para apoyar la produc. eién de voz © fonacién, Dante 8 espiracisn activa, tos imiisculos pueden aumentar a Presién dentro del abdomen y, por tanto, forzar el diafragma hacia’ ari ba;‘o ‘bien pueden bajar tas costillas ¥ el estemén para reducir las dimen. Siones del t6rax. Los misculos. pris cipales de la espiracién son los. ab. dominales pero también contribuyen los misculos intercostales internos: y Stros misculos del trax y espalda, Un traumatismo o cirugia que al- tere la estructura © funcionamiento 2 SECCION TRANSVERSAL DEL PLIEGUE v ePIreUo, Luvana ppoma( SUPERFICIAL. (APA Mesa weno igeAy PROFUNDA. Muscuto. CCAVIOAD NASAL CCAVIOAD ORAL LeNGUA SECCION TRANSVERSAL DE LA LARINGE (VISTA SUPERIOR) Muscu.o, ‘cAICOARLTENOIDES, PosTenion Aateneess couicuo vFRANERSS atonis ‘CARTLAGO cAICOIDEO. MUSCULO VOCAL CARTLAGO TIROWES de estos misculos reduce Ia fuente mdsculos del tracto vocal puec de potencia de la voz; lo mismo se convertirse en fuentes de probless diga del asma y otras enfermedades Los dos laringeos recurrentes. que hacen irregular Ja espiracién. La gobieman la mayoria de los ais, gente suele compensar las deficien- los intrinsecos de la laringe, ven. Gias registradas en el mecanismo de nervio izquierdo sobre toder's tan apoyo sobrecargando de trabajo a los . del cuello hasta el trax y selon ‘midsculos laringeos, que no estén di- después hacia la laringe; se lesion fefiados para servit de fuente de po- pues, fécilmente por golpes 0 + tencia vocal. De esa conducta se re- cirugia del euello y trax siente Ia funcién, amén de causar fatiga répida, dolor e incluso proble~ L% tevios aporan también inf mas estructurales, como nédulos en Ly macién al cerebro sobre le cn las cuerdas vocales sién de voz. La informacién audit Igual que el sistema muscular y el que se transmite desde el ofdo esquelético, también el sistema ner- través del tronco cerebral haste Vioso,interviene en la emisién de la corteza permite que el emisor ajus Vor. La “idea” de un sonido de voz el sonido producido con el dead Se origina en 1a corteza cerebral y La informacion tictil procedents Yiaja a los ndcleos motores del tron- cuello y los muisculos ayuda tambit ¢o ‘cerebral y espina dorsal, Estas al afinamiento de la emisida, at bie reas envian complicados mensajes no acaba de entenderse del. tel para coordinar las actividades de la cémo se desarrolla este proceso. Lt laringe, la musculatura téracica y ab- cantantes y oradores que han educa dominal y las articulaciones del trac- do su voz aprovechan cl adiecn, {0 roca. Las sefiales procedentes del miento para sacarle el maximo’ pe tracto extrapiramidal y del sistema tido a la informacién téctil, pues so Rervioso aulénomo patticipan, a su conscientes de que unas condicions vez, en esas operaciones, aciisticas deficientes, unos instrumet Los nervios que controlan los tos musicales chillones y los nado InvEsTioActON ¥ CHENG, febrero, 199: ‘canmiaco Ghicowes ; Br Sic pat aa mite in egulerda nests fg’ de lcabeca. An deecha se ghee Blativos ala larnge 6 cue de'sen ign vertical de la estructura con ia region frontal de In masa contrarrestran 1a informa- cién auditiva, «Durante 1a fonacién, todas esas es- tfucturas anatémicas y sistemas de- ben trabajar de forma coordinada. La fisiologia de Ia emision de vou es ‘muy compleja, si bien podemos com. pparar esta ditima a una trompeta. La otencia del sonido se genera en el ‘6rax, abdomen y musculatura de la espalda, que producen una cortiente de aire de elevada presién. Los la- bios del trompetista se abren y cie- man en la boquilla para crear un sonido similar al generado por las ‘cuerdas vocales, que resuena a través del resto de la trompeta, afin al trac- to vocal supraglético, E progreso'registrado a lo largo de os ltimos 20 aflos ha veni- o, en buena parte, del estudio sobre el origen y 1 composicion anatémica en cinco ca pas. la cuerda se comporta, des Panto de vista mecanicor SOmO-st IvesToacto y CieNcta febrero. 1998 ‘wuscuLo GRICOARTTENOIDEO Postenion mecanismo vocal abarca miisculos ‘cas ‘iaoroes? TRAQUEA Anatomia de la voz Y Grganos del vot ov rem of x ance | Muscuto ARITENDIDEO Gauicue AAITENGIDEO ‘TRANSVEREO ‘MuscuLo CRIESTIROIDEO MuscuLo, GRICOARITENOIDEO Bostenion jphuez de Adén— mirando hacia abajo. Los dos muiscu- za, El dibujo de los vocales constituyen los cuerpos de las cuctiosy Sganeargants cima de ta representacion de le laringe eparece un algunos detalles corte transversal de un pliegue. Los tres dibujos res. en una orienta: tilagos laringeos Qs, constituida por una cubierta (epitelio y capa super- ficial de la “lamina propria”), una capa de transicién (capas intermedia ¥ profunda de la “lamina propria”) y lun cuerpo (mdsculo tiroaritenoideo) © La observacién y el delos han sacado a I las cuerdas estén en contacto y cerrada la glotis. Cuando los pulmones expulsan aire, Ia pre~ sidn infraglotica es de un nivel’ de siete centimetros de agua para une conversacién normal. Esta presién empuja progresivamente las cuerdas vocales separéndolas del fondo, hasta abrir la glotis y franquear el paso al aire. Hay fuerzas elisticas y de otro tipo que se oponen a la. separacién del margen superior de las cuerdas vocales, "pero no pueden vencer la lateral del aire causada por ef movi miento hacia delante, El efecto tien de 4 mantener cerradas las cuerdas vocales, en el mismo sentido que las Propiedades eldsticas de los tejidos, tantes (arriba) ils potencia de la corriente deaite. menos ‘deli cartlas vovsiec® tie ese brodueslsisa Ty oa : una cdida de ln preston pes tran los principales miisculos y car. La presién infraglética de 1a corrien- te de aire también disminuye a me- ida que la glotis se abre y deja salir el aire © Por culpa de esos factores, los bordes inferiores de las cuerdas vo- cales empiezan a cerrarse casi inme- liatamente, aun cuando sigan separa- ddos los bordes superiores. El cierre relaja todavia mAs la fuerza de la corriente de aire. Los bordes supe- Flores de las cuerdas vocales se jun lan otra vez en la linea media y ocluyen la glotis, De nuevo, empieza 4 formarse la presiGn infraglética: y se itera el proceso. (Entiéndase que existe presién directa y que las va- Tiaciones alternantes raramente dejan caer hasta cero la presién infragloti- ca, Dato éste que reviste su interés a la hora de explicar las fuerzas do- minantes implicadas en los movi- El “desplaza- fento ondulatorio del revestimiento de la cuerda vocal produce un mo: vimiento ondulatorio en la capa mu: cosa. Si la compleja vibracién de la fonda de la glotis yerra, se puede producir ronquera y otras alteraci nes de la calidad de la voz. fe Las cuerdas vocales, a diferencia ‘de las del violin, no hacen vibrar el aire, Se crean, en cambio, remolinos de aire en el tracto vécal a través es un tono complej | Asi nace la voz E controlado por est del tracto vocal epiglético —donde se inscriben la fari Pr Bilidad’ téctil, el orador o intérprete irdn afinando su tono de voz. AREA De. LENGUAIE EN EL Gortex SERS FERPORAL | tRacTo. conTiCoBULBAR TRONCO ENCEFALICO edo Ho10Eo cARTHAGO TiRQIDE: INUEZ OF ADAN} CARTLAGO CRICOIDE habla y el canto, o incluso la emisién de un mero Sonido vocélied, entrafia una compleja orquestacién de acciones menta- y.lilas. La idea de producir un sonido se origina en la cortera cerebral —en el érea del lenguaje. Fl movimiento de la laringe, ‘rea, se transmite a la laringe por diferentes nervios. En cumplimiento de ello, las cuerdas vocales vibran y ge- | neran’un zumbido. La resonancia de este sonido por toda el érea e, la lengua, al paladar, la cavidad oral y la nariz—, confiere al sonido las cuali- jes percibidas por el oyente. Merced a la autoescucha y la sensi- or_sorprendente que pa- zea, todos, hayan 0 no educado su ne de, 1a tainge yguelconsta dé vor, producen los mismos. espestos de cuerda vocal, . jundberg y Gunnar i, del Instituto Real de Tecnolo- gia de Estocolmo, han demostrado que, en los cantantes el ‘minuye uniformemente a través de su espectro de frecuencia, excepto en las frecuencias de los’ formantes, nde alcanza su méxim Las. racto vocal; pueden que los hombres, poseen en conse ccuencia frecuencias de los formantes ‘més altas. Lo cual no empece que podamos ajustar, de forma voluntaria y hasta cierto punto, as dimensiones del tracto vocal; el dominio de esos ajustes resulta decisivo para educar la vor. La frecuencia resonante que ha re- cibido justa atencién es el formante del cantante. Se le atribuye la res- ponsabilidad sobre el timbre de la 5 si existe diferencia, si es ay, entre quienes han educa- do su voz y quienes no han seguido ese entrenamiento, adbaaaallt ies del can se presentan, en los bajos, alrededor de 2400 hertz; en los baritonos, en tomo a los 2600 hertz; en los teno- res, a 2800 hertz; en mezzosopranos, 2 2900 hertz, y, en sopranos altos, & 3200 hertz, El formante del cantante es mucho menos pronunciado en los por la laringe, A medida que sube Ia presiGn, explica la mecénica, las cuerdas vocales tienden a separarse yy juntarse con mayor celeridad y fre- ‘cuencia. Los cantantes aprenden a compensar esa tendencia; sin tal do- ‘minio, elevarfan el tono cada vez que cantasen més alto. La técnica més eficaz para alterar cl tono de voz suele consistir en cam- biar 18s propiedades mecénicas de las euerdas vocales. La. contraccién del_misculo cricotiroideo provoca que los cartilagos tiroides y cricoides giren en tomo a las cuerdas y las tensen. Esa conformacién sirve para cexponer mayor superficie de cuerdas vorales al flujo aéreo y aumentar su sensibilidad a la presién de aire. Se tensan con ello también las fibras clisticas de las cuerdas vocales y se refuerza su eficacia vibrando juntas EL tono aumenta porque los ciclos de apertura y cierre en la glotis (ciclos fonatorios) se acortan y repiten con ‘mayor frecuencia, las cuerdas vocales se distancian més y se juntan con mayor agilidad. En ‘onsecuencia, durante este ciclo fo- natorio palmada, En las paittat! de flujo de cada ciclo fonatorio hallamos un valioso indicador biofisico del rendimiento aleanzado por las estrategias del con- trol vocal. Un intérprete podria pre- tender redoblar Ia intensidad de su vor teforzando desmesuradamente la presién del aire y la resistencia de la glotis al flujo del aire, con los rmisculos del tracto vocal infraglé- Tico y las fuerzas aductoras de las cuerdas vocales (cierre glético). Pero semejante combinacién de fuerzas da x resultado la fonacién bajo pre- sida, condicién en que la amplitud de la frecuencia fundamental de la vou es baja, no obstante el notable esfuerzo fisico empefiado, La amplitud de la fuente de vor seré también baja, si por debilidad de las fuerzas aductoras las cuerdas vocales no entran en contacto y la glotis no opera debidamente: 1a con- dici6n en que tal fendmeno ocurre se denomina fonacién respiratoria. Sin embargo, una tercera condiciéa, 1a fonacién' de flujo, se caracteriza por Ia baja presién del chorro de aire y escasa fuerza aductora; ello aumenia Ja intensidad de Ia frecuencia funda- mental y produce una entonacién mds fuerte. Para identificar la fona- cién bajo presién, respiratoria o de flujo, los expertos idean cambios en el flujo de aire a través de Ia glotis, que se recogen en un grafico 0 glo: tograma de flujo. Sundberg ha demostrado que el in- térprete eleva la amplitud de la fre~ cuencia fundamental en 15 decibe- lios 0 mis con el trénsito de la fonacién bajo presién a la fonacién de flujo. Ast pues, Ia gente que fia en la fonacién bajo presién realiza tun esfuerzo innecesario para aumen- tar el volumen de la voz. Las fuer- zas y pautas de uso muscular invo- cadas para compensar esa deficiencia podrfan datiar Ia laringe. Conocidos los mecanismos de con- trol vocal, los médicos pueden detec- tar y corregir los problemas de los busos de la voz y traumatismos de las cuerdas vocales, La identificacién de los diversos componentes del tracto vocal facilitan, asimismo, la creacién de estrategias Sptimas. para rehabilitar voces dafiadas, No menos crucial para’ el desarro- No de la ciencia de Ia vor ha sido a innovacién instrumental. Hasta Principios del siglo x1x, los médicos S6lo podfan apoyarse en el ofdo para apreciar la calidad de la vor y su funcionamiento. No habia técnicas con las que observar y mensurar las durante Ia produccién de un sonido sim ple. Nos sitramos en la laringe. Antes de empezar el proceso (7), las cuerdas estan Juntas. Se separan cuando el aire ascien- de a través de Ia traquen (2-7); vuclven a juntarse en cuanto cesa el sonido (8) angen SORERIOR angen INFERIOR ar UEDA Yoent’ de uz y un espejo dental colocado en Ia boca del estudiante para observar las cuerdas vocales. La laringoscopia indirecta se convirtié de inmediato fen herramienta imprescindible de los médicos, y todavia se sigue emplean: do. (Aunque sustituida, obviamente, la luz solar por la eléctrica.) ‘Sin negarle su indudable valor, la técnica oftece, empero, muchos in- convenientes. No son féciles ni la ampliacién de las cuerdas vocales ni Ja documentacién fotogréfica sobre su estado, La iluminacién normal tampoco permite distinguir las vibra- ciones, complejas y rdpidas, de las cuerdas vocales, La principal técnica de que dispo- nnemos para estudiar Ia vibracién de las cuerdas vocales es la video-larin- go-estroboscopia, que se vale de un ‘micr6fono colocado cerca de la la- ringe para activar el estroboscopio iluminador de las cuerdas vocales. Si la frecuencia de la luz estroboseépi- ca se desfasa en unos dos hertz de la vibracién, el médico puede ver en su exploracién las cuerdas vocales con un movimiento lento simulado, Esta técnica, que se insinué ye en el siglo pasado, no aleanzé su esplen- dor hasta los dltimos diez afos, ‘cuando, la estroboscopia consiguié el brillo suficiemte y las videocamaras una sensibilidad adecuada para su uso. rutinato, El efecto estroboscépico facilita la Ponderacién minuciosa del estado en que se halla el borde libre de las cuerdas. Podemos ver pequenas ma. sas, asimetrias vibratorias, sleeras, cereinomas incipientes y otras ano malias laringeas, muchas de las cua les se hurtan a la luz normal. El andlisis digital de las imégenes com- plementa la observacién éptica;_ si bien la pobre resolucién de las imé- genes y otras limitaciones han con- icionado hasta la fecha las posibili- dades de la técnica, Para seguir el comportamiento de Jas vibraciones de las cuerdas conta: ‘mos también con Ia electroglotogra- fia. Entre dos electrodos instalados fen_el cuello se produce una corta diferencia de potencial que atraviesa la laringe; los cambios operados por el voltaje’ medido generan una onda en el cledtriglotégrafo que ilustra el contacto entre cuerdas vocales. La informacién acerca de la apertura glotica se infiere de la fotoglotogra- fia, que mide la luz que pasa debajo mismo de las cuerdas voeales, 0 de la plotografia de flujo. La medicién de la funcién aerodi némica consta de pruebas funciona les respiratorias y del flujo aéreo de Ja laringe. Se trata de un pardmetro 56 3. VOCES SANAS Y VOCES ALTERADAS, comparadas en estos sonogramas re- alstrados du flaeidn de importante, y ambas pruebas revelan fen su conjunto el funcionamiento de Ja fuente de potencia vocal y la efi- cacia de los repliegues vocales en su control del flujo aéreo, La medicién de la capacidad fonatoria —o capa idad para producir sonidos— sirve, en su simplicidad, para cuantificar las disfunciones vocales y evaluar los resultados del tratamiento. Los tests determinan la gama de frecuen- cia y de intensidad de la vor, cuanto tiempo puede mantenerse un’ sonido ¥ ottos factores, Liigisstomiceratia laroges, ote técnica para estudiar Ia funcién vocal, consiste en insertar unos finos electrodos en los misculos leringeos, En determinadas circunstancias es util para conocer la integridad neuromus- cular y su funcidn; a modo de ejem- plo, 1a medicién de Ia actividad elec triea de los musculos de la laringe podria indicar la recuperacién de un paciente con pardlisis de cuerda vocal, fen cuyo caso el médico, antes de roceder a una intervencién quirirgt a, recomendaria esperar por si ocu- rriera una recuperacién esponténea. Del propio sonido, el laringologo experto sacaré sus propias conclusio nes. Pero esté claro que los clinicos © investigadores necesitan equipos capaces de cuantificar las caracteris. ticas vocales de interés acustico Existen equipos, aunque habrin de perfeccionarse, Pensemos asi en la espectrografia actistica, que muestra la frecuencia y el spectro arménico de la voz y Tegistra épticamente el sonido. El equipo describe la sefal actistica ¢ informa sobre la calidad vocal. tim bre y volumen. Se puede imedic una gama entera de calidades: la estru ura del formante y la fuerza dela voz, la frecuencia fundamental. esp te Ia exposicién de sendos conferenci ‘a” ablerta, El tiempo transeurre de iequler segundos aproximadamente. Las lineas horizontales seh tes y relativor a ia pronun- ‘derecha durante dos 1a frecuencias en herte raci6n, la razén de armonia a ruido (0 claridad de Ia voz), asf como per- turbaciones de la amplitud ciclo a ciclo ("brillo") y de la. frecuencia cielo a ciclo (“ritmo”). Otras carac- terfsticas més sutiles se escapan a la deteccién; a modo de muestra: en los estudios de la voz fatigada de profesionales con buena formacién, la diferencia entre una voz descansa: da y otra cansada resulta obvi para el ofdo, pero ni siquiera los equipos mds refinados descubrirén cambios apreciables de manera persistente Revisten su interés las influencias psicolégicas en la voz; carecemos, sin embargo, de téenicas desarroll das y normalizadas para mensurarlas Los cuestionarios bien preparados, las grabaciones en cintas’y el teco- rnocimiento de la voz por distintos observadores han disparado la utili- ad de tales eximenes. De semejante muestrario de herramientas se sirven los médicos para detectar y registrar, ccon seguridad y flabilidad, la infor. macién contenida en el sonido de la En la medida en que la técnica reforzaba los aspectos diagndsticos y terapéuticos de Ia medicina de la vor, decrecfa la necesidad de la in tervencién quinirgica. Para ciertas condiciones basta la prescripcién me- dicamentosa, aunque conviene no ol- Vidar que hasta Jos medicamentos sin receta obligatoria comportan efectos secundarios que afectan al funciona miento de la voz. Los antihistamini 08, por ejemplo, provocan sequedas en la mucosa vocal, con resultado de Fonquera y tos. Las propiedades aa licoagulantes de la aspirina pueden contribuir & pequeiias hemorragias en las cuerdas vocales. Hay téenicas para rehabilitar tas voces datiadss por un empleo inade cuado. La terapia facilita la respira srén con euerdas vocales . El sonograma de le tzqulerda corresponde & males; el de la derecha, a un varén con nédulos ‘cuerdas vocales. Esta vor tlene ruidos adiclonsles en el nivel de los S000 hertz y ha alterado y debllitado sus arménlcos entre 2000 y 4000 hertz. cién y el soporte abdominal, amén de climinar la tensién muscular necesaria de laringe y euello, Puede incluso curar problemas estructurales de las cuerdas vocales, de manera sefalada nédulos (formaciones callo- sas_y duras). La terapia ensefia a utilizar cada componente del tracto cortectamente —para evitar la violencia y el abuso sobre la voz—, ‘a mantener los niveles correctos de thumedad y mucosidad en sus tractos vocales ya mitigar los efectos del humo y otros pstigros del entorno, Pero no. siempre basta con una buena higiene y una educada técnice vocal. Encontramos problemas ¢s- tructurales de la laringe que deberdn pasar por el quiréfano. Me refiero, por ejemplo, a los nédulos que no han respondido a la terapia de le voz, pélipos (neoformaciones de los tejidos blandos), quistes (masas Ile- ras de liquido) y otras alteraciones. Li ners de las patologias be- nignas son superficiales. Los ex- Pertos en fonocirugia disponen de un abanico de técnicas microquirirgicas ara extirpar lesiones del epitelio o capa, superficial de la “lamina pro- pria” sin rajar las capas intermedia © profunda del tejido, 1o que provo- caria cicatrices. En buena parte, Ia ci- rugia se realiza a través de la boca, inenras el ceyano observa I lr ge a través de un tubo de metal llamado laringoscopio rigido, Un mi croscopio amplia 1a imagen; entre el utilaje advertiremos tijeras_micros- cépicas, léser y otras, Los nédulos, pélipos y quistes det ‘margen vibratorio de las cuerdas se extirpan mejor con el armamentario tradicional. "Las operaciones. pueden sleanzar un nivel de precisién alt. En algunos casos podemos incluso levantar la mucosa de la cuerda, ex- tract un quiste w otra masa y volver 4 colocar la mucosa; sin apenas in- fligir dafio alguno, esta operacién ni siquiera requiere postoperatorio (des. ccanso de Ia voz), y suele recupe rarse en seguida Ia buena calidad det Ia vor. Los léseres Hlevari 1a fama de ins- trumentos revolucionarios de alta tecnologia. Pero-no son siempre la ‘mejor eleccién para la cirugia de la laringe. Con la densidad de potencia requerida para la ablacién, el haz de tun léser de di6xido de carbono esta- tla rodeado de un halo de calor de tuna anchura de 0,5 mm. Si el rayo se dirigiera contra una lesién del borde de una cuerda, el calor podrfa rasgar las capas intermedias o profundas de I propria”, sefiales que crea- sfan un segmento rigido de Ia cuerda vocal, acompatiado de ronquera. Pero el léser de dixido de carbo- ‘no es ideal para determinadas lesio- nes. Esclerosa vasos sanguineos va- ricosos de las cuerdas vocales que odrfan provocar hemorragias. Vapo- Fiza los vasos sanguineos que nutren 8 los pélipos, papilomas y ednceres laringeos. Es éste un dominio, el de la técnica léser, de esperanza para la microcirugia del futuro. Las nuevas técnicas quirdrgicas Para modificar el esqueleto de la la- tinge deben mucho al japonés Nabu- hiko Issiki, Se aplican’al tratamiento de la pardlisis de las cuerdas voca- les, que es una consecuencia normal de infecciones viticas, eirugia 0 cén- cer. Para abordar Ie pardlisis de las cuerdas, el cirujano solia inyectar Pequefias dosis de teflén en la zona afectada de la cuerda, El teflén em- puja la cuerda paralizada hacia ade- Tante hasta la linea media de la glotis Y permite que la cuerda normal se junte. La glotis se cierra entonces y mejora la vor del paciente ‘Aungue el teflén es bastante iner- te, no constituyen ninguna rareza las reacciones de los tejidos, La rigidez que produce el teflén en el borde de Ja cuerda vocal mina la calidad de Ia voz. ¥ $i no satisface el resultado de Ia inyeccién de teflén, se hace muy dificil extraer el material de los tejidos. Lo que explica, por otro lado, que se haya sustituido esa in- yyecci6n por 1g} tiroplastia, en virud de la cual el ‘cirujano abre-una pe- quefia ventana en el esqueleto dela Jaringe y empuja hacia atrés al car- ‘flago tiroides y los tejidos de la laringe. El cartflago deprimido se ‘mantiene en.su sitio con un trozo de silastic. Con esta operacién, la cuer- da vocal se empuja hacia’ la Ifnea in necesidad de inyectar nin- agin cuerpo extrafio en los tejidos; parece ser més reversible que el te- fl6n. Nosotros hemos presentado una técnica de inyeccién que usa, en vez de teflén, una pequeia cantidad de grasa extraida del abdomen o brazo del paciente; e1 método posee la sen- cillez del teflén y carece de sus in- convenientes, pero habré que seguir investigando, Litgitasts el esqueeto de ta ae ringe modifica, si se quiere, el timbre del paciente. El cirujano lo elevaré moviendo los cartflagos tiroi- es y cricoides y cerrando el inter- valo espacial que los separa; con ‘esos cambios, las cuerdas se alargan y tensan. O puede también el médico ‘cortar secciones verticales del cart(- ago tiroides para estrechar los plie- ‘gues vocales, rebajar su tension y, por tanto, bajar el timbre. No se conoce bien el pronéstico de tales intervenciones cuando se buscan por razones puramente estéticas. S{ se ha comprobado su eficacia en ciertas anomalfes y en ajustes del timbre de quienes se han sometido a cambio de sexo. BIBLIOGRAFIA COMPLEMENTARIA (CucaL, MEASUREMENT OF SPEECH AND Voice. RJ. Baken. Callege Hill Press, 1987 ‘THE SCIENCE oF THB SiNoINO Vorce. J, Sundberg. Northern lino University Press, 1987 PRORESSIONAL VoIce: THE SclENCE AND ART OF CLINICAL Cage. RT. Saalof, | Raven Press, 1991 | ‘THE SCENCEOF MUSICAL SOUNDS. J.Sund- | ‘berg. Academic Press, 1991 | ‘THE PRuNciPies oF VOICE PRODUCTION TLR. Tite. Prentice-Hall (en pronss). Voice Suxceny. W. J. Gould, RT. Sta Toff y JR. Spiegel. C. V. Mosby Com- pany (en prensa}

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