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Captruvo TeRceRo ‘TRAYECTORIA DE LA EMERGENCIA INDIGENA EN LOS ANOS NOVENTA La emergencia indigena, tal como lo hemos sefialado, pudie- se ser entendida en cuatro periodos: el primer periodo se desarrellé en los afios ochenta y consisti6 en la aparicién de nuevas organizaciones indigenas la mayor parte de las veces ligadas a la actividad de Organizaciones No Gubernamenta- £”. El segundo perfodo esta marcado por ‘elebracién de los 500 afftos del Descubrimiento de América” que comenz6 con los preparativos en los tiltimos cinco afios de la década del ochenta y culminé el afio 1992 con las fiestas organizadas por Espaiia. La tercera etapa es propiamente la emergencia indigena de los noventa que tiene en los levantamientos del Ecuador y Chiapas sus puntos ‘més altos, No sabemos bien si esta etapa se habré terminado 12 se relomnd con Fuerza Inesperoda a una cin haber sido superada de incuenta, cuando se impuso sélo ablar de ‘ermpesinas’ y de ‘sindi- fear a tants millones de ie BF seamen ve a xcincn ot a cusmnon motaens 87 Ey 10 ha comenzado una aueva etapa de negociaciones & {nstitucionalizacién 0 continuard por un period més largo. |. La COYUNTURA DE LA EMERGENCIA INDIGENA: FE 05 500 AROS DEL “DESCUBRIMIENTO” DE AMERICA idi6 con el fin de la Guerra Fria el Aniversario de los 500 “fos de la legada de Cristobal Colén a América conocido ‘como el “Descubrimiento de América”®. La Espafta moderna, ritosa, nueva socia de la Comunidad Europea, traté de E fefundar la vieja idea de “Hispanidad” (et Imperio Espafol F perdido) sobre bases culturales, econémicas y comerciales 7 ovdernas” y, ademés, poitcamente socialdemécrats = 78, Se usaron muchas maneras de nombrar‘este “Aniversario”. Los: 1g | Siseiminador envenenado ps pes y pronunciamientes, op ct, p. 276 (na et objetivo econémicn extésiendo eumplido con bastante éxito, La Emprese TelefGnica de BxpaAa se ha comprado, a precio de liquidaciér, 89 [ACERCA DE LA EMERCENCIA DE LA CUBSITON INDIGENA 88 1a EMERGENT WI INAEN AMERICA LANA Las reuniones y declaraciones de repudio sobre el Des- © eubrimiento de América contribuyeron decididamente a la ‘gjeacién de la conciencia indigena moderna. Las declaracio- fueron una a una subiendo de tono, legando a no reco- er ningiin aporte, de ninguna naturaleza, a los 500 aiios presencia espafiola-occidental en América Latina. Para E muestra sdlo algunos pérrafos marcados: Frente a la ruptura de la bipolaridad, la nueva Espafa de la comunidad europea, traté de reconstruir una nueva fuerza de “habla hispana’. La multipolaridad, dijo el Rey Juan Carlos en Reptiblica Dominicana en 1990, necesita de una fuerza Hispano-americana con una clara y definida presen- cia mundial, Por esa razén Espaia traté de celebrar con grandes solemnidades y mucho de América”. también de celebrar los 500 affos de evangelizacién en América Latina, para lo cual viaj6 el Papa Juan Pablo Il a un gran encuentro eclesisstico, por los Reyes de Castilla y Aragon, y c © tébal Coldn desembarcaron en nuestro continente, inaw- rinado de los ‘descubrimientos’ de genas americanos aprovecharon la oportunidad de los “500 afios del Descubrimiento de América”, para expresar los "500 afos de Resistencia Indigena”. Expresaban que eran pueblos fan que habja una continu dad entre los puel icos y los pueblos indigenas del siglo veinte y del ventiuno que pronto vendria. Fue el contexto necesario y adecuado para que emergieran nuevas identidades indigenas, nuevos dik nuevas organizaciones y nuevos movimientos™. Junto con catalogar de “aventureros” a los “conquista- os indigenas ecuatorianos establecen que a la Ue- 308 sobre etnicidad, los principales bancos de e ipal banco exteanjero {LA EMERCFNCTA ENDIGENA EN AMERICA LATINA, complejas formas tradicionales de organizacion socal, econé- mice y politice, portadoras de sfmbolos, rituales y costumes expresadas en una cosmovision original..." Los in s no hacen grandes perfodo colonial y el perfodo republicano en América Lati- nna, mostrando la continuidad de las politicas contra el indio: Los indigenas sefialan que el racismo es el fundamento icanas, incluso y a pesar de los ACERCA DELLA EMFRGENCTA DELLA CUESTION INDIGENA OT taka concepcién de indio que surge en la Colonia y que lo ser inferior y diferente al blanco europeo se que propugna- on a ‘re egracién a la sociedad nacional, no kan resuelto los problemas fundamenta- Jes de nuestros pueblos”. -Y agrega que: renas se han constituido en et niicleo ms ad del futuro, ast como del surgimiento EI "Manifiesto de la Campafia 500 afios de agresior stencia y por la emancipacién de los puebl Como se puede observar se iniciaba un discurso de con- tinuidad histérica, de la mayor impoctancia para el estable~ to de una nueva conciencia étnica. La historia de la dad se estableci6 en Tos 500 atios de explotaciones al de la CONAI del Ecuador redactado en 1988 para I Campana 500 aiios de Resistencia India. racial, la explotacién social y la exclu. Yar que es un discurso de una gran fuer. 2a interpretativa y movilizadora. ‘os gobiernos latinoamericanos junto a Espara no com- Prendieron la agresién que implicaba al mundo indigena la deeanilts celebracisa del Descubrimiento de Américe tes declaracin dice: {Son precisamente estos sectores los que ahora retenden ACERCA DE LA EMERGENCIA DELA CUESTION INDIGENA 93. A lujo todo lo contrario de “El festefo del V Centenario produjo to. Boor propaicron as oplenlota Soe et De esa forma combinada, cruzando por localidades cu- yos nombres se remontan al tiempo de los aztecas y otras a la colonizacién espafola, as diversas columnas de in fueron agrupandose para legar a la ceremonia del Qu Centenas Indigeistn, México, 1 MA BMERGENCIA INDICENA EN AMERICA LATINA Continuando con el relato de Joaquin Flores Félix: 12 de octubre de 1992, en ta Basiice de Guadalupe se celebré una Misa para pedir perdén a los pueblos indi las atrocidades cometidas en el proceso de evangel on nombre de ta fe catélica y por la libertad de los indi que sufren creel y persecucién mente, Oficiarom sacerdotes con arraigo entre la poblacién india, El lugar se lend, més de cinco mil personas escucharon las lengua ban presen ‘es: zoque, ndhualt, zapoteco, maya, chinanteco, olomé.... Des. ues wna serpiente humana, con muisica de dianas, cantos a la Suadalupana y la Marcha de Zacatecas, empezé a desplasarse por la Calzada de Los Misterios rumba al Z6calo. La presen 410s contingentes indios que hy de origen”*, lugares Nacia quedé de las Celebraciones, Recuerdos en Espaita {de gastos extraordinarios y poco rentables. En Santo Domine 80 un Faro gigantesco con el que el Presidente Balaguer quiso conmemorar sus “dilatadas presidencias” y aus seBtin dicen, cada vez que se enciende gasta el equi- Nalente de la electricidad de todo Santo Domingo y dein « Cscuras el resto del pafs. Los indigenas lograron un buen as y dances peedén y ome la hal ‘marcha al Zécalo fue de /ACERCA OE LA EMERCENCIA DE LA CUESTION INDIGENA 95 lina de opinicn publica en casi todos los paises ce Amnérica FMitibo una reflexién al revés. No habia nada que celebrar, 2. UNA SINTESIS DE LA TRAYECTORIA DE LA EMERGENCIA INDIGENA DE LOS ANOS NOVENTA F Numerosos son los hechos que constituyen la trayectoria de It emergencia incigena en América Latina a partir de los ‘tfios noventa. Solamente analizaremos algunos hechos se F Mecionados. 4) La dignidad reciperada smado “Levantami mayo y junio de 1990. L _sfste movimiento en el conjunto de los movimientos indige- se realizé la conferencia “500 inauguré una serie de reuniones en Ja misma linea y sentido, culminando quiz, con la que se entre otros, por ja reciente nominada Premio Nobel de la Paz, Rigoberta ‘Menchii, La prensa ecuatoriana fue eco de la sorpresa de lo que se denominé “La sublevacién de los cabildos”®: *n 1992 en Guatemala convoca %6 [A EMEXGENCIA INDIGENA EN AMERICA LATINA “AI meio dia del miércoles 6 de junio més de treinta mil Indios de la Provincia de Cotopai se dieron cita en la Plaza de El Salto en Latacunge, lugar de realizacién de la tradicional rin de tos stbados, La marcha sobre Latacunga fue impresoe ante especialmente en el caso de los indigenas de Tigua, Zumbagus, Guangaje... mis de 7.000 naturales aoanzaron 4 Pie por la carrera asfltada hacia ta eapital provincial forma los en fila de 20 personas, marchaban en silencio, en actitad idad recuperada. Paracnidistas transportados en dos ¥ tres jeeps vigitaban la. marcha a unos 500 metros ae distancia, Los indigenas controlaban la situacién y sus dirigentes impedtan que tos portcipantes fuerm dos. El miedo de las blancos mestizos de Mula Pujile, Sa Slo aplaudieron el paso elo comuneros sino que ademas les ofrecieron refrescos, pan, Los curiosas: se. pres 0s indias. L a los Cabildos de las comunas y de ls Cabitdas mayores que se reunieron en Mulalilo afin de apoyar la lucha por la tevra Nevada a adelante por tas organizaciones fraternas”™ hecho gue un agiladores profesionales se haya toma- Fdfgena del levantar 88, Diatio Punto de OpaK:. 2 de junio de 1990, ACERCA DE LA EMERGENCIA DE LA CUFSHION INDIGENA 97. a Los diarios constatan la sorpresa y la pregunta de todos Ecuador: zquién reunié a tantos indios?, y el con- _nigiiente “miedo de los blancos”. El corresponsal en Lata- ‘unga, pueblo fundamentalmente compuesto por indigenas igrantes, realiza la distincidn entre el miedo de los blancos Togales, clase alta local generalmente en relaciones de tratos EPcscislespor lo general injustos, con las comunidades ipesinas y la reaccién de la gente de Latacunga. Algo “Parecido ocurri6 en Quito cuando entraron dias despus las | lumnas provenientes de todo el pais. ___ Es interesante en el andlisis de este movimiento constatar E Guie al mismo tiempo que hay cortes de caminos en él cam. 72 Produce la ocupacién de la iglesia de Santo Domingo © nel centro de Quito, la capital de Ecuador. De esta manera sonstataba que no se trataba de un movimiento campe- no. sino de un movimiento nacional, con acciones en la dad y en el campo, Mercedes Jiménez. al iniciarse el levantamiento recorda- ba en la prensa que se trataba del “sexto levantamiento in- gers”: “No se trata del primer leoantamiento indigena, los hubo ya en 1578, 1599, 1615, 1766 y 1392. das. $i analizamos desapasionadament idos desde la Wegada de los esparioles indios en lo sinico que han progresado es en miimero, ya qi ahora sobrepasan los tres millones, hecho que en iugar de fa vorecerlos ha acentuado su miseria”™. 89, Diario Hoy, 25 de junio de 1990. | [LA EMERGENCIA INDICENA EN AMERICA LATINA \i6n” como la de los indigenas. C odré discutir la continuidad entre gena ocurrido en el €1 ocurrido en pleno si discuzso indigena, c ce una fuerza argumental importante”. jento se produjo en todo el Ecuador. Las reivin- Ievantamiento indi niciarse la Colonia y indigenas, para el r con siglos de antecedentes produ- El movi dicaciones gentes indigen: dirigir su movimiento, sino de “jugar” con la que estaban creando. Las Asambleas p\ eran generalmente alegres, llenas de risas, con muchas bromas a las autorida- de sorpresa os de comuni ign, capacidad de tomar distancia de los hechos en que se participa y, sobre todo, capacidad de creatividad en los, [ACERCA DE LA EMERGFNCIA DE LA CUESTON INDIGENA 99) “taétodos 4 @ Aura en general. disectores de serv erin los movimientos in guestra la sutileza y capacidad creativa de ese movimiento “ay sus dirigentes tha, utilizando simbolos indigenas y de la cul- acuerdo que obligaron a firmar a los 08 puiblicos es un manifiesto de lo que enas de los aos noventa y 1s fenemos, exigimos ser respetados coma dato por la defensa de ta vide y los La diseiminacin conta los indigenas ocr en la r- jones tienen cuando acuden Tos FF scones ex ‘te servicios 100 {LA BMERGENCTA INDIGENA EN AMERICA LATINA ciudad. No conozeo otro antecedente de un movimiento so- al que exija solamente “dignidad en el trato” como prin- cipal demanda, Es evidente que se trata de la demanda fun- damental: no discriminacién. Estos movimientos estén Iejanos en sus métodos y sus demandas de los movimientos agraristas 0 de las “revoluciones imaginadas” a través de las ideologias marxistas leninistas, por lo general, lenas de so- Jemnidaces y autoconciencia del rol histético que estén ju- Bando. En este caso, que seré relomado en la misma linea Por el movimiento zapatista, se une la claridad de objetivos, decisién y votuntad de cumplirlos, con una enorme creati. vidad de métodos de accién y por qué no decirlo, un cierto ‘margen a las acciones hidicas, propio sin duda del periodo histérico que les ha tocado vivir, marcado por el “fin de las ideologies” y, como se suele repetir, de los megarrelatos y las visiones globales de la historia. Han pasado ya varios afios después de este alzamiento indigena y parece que nada ha vuelto a ser igual que antes en el Ecuador. Quizé la coyuntura internacional que vive América Latina ha afectado a esa sociedad, pero los analistas emos no pueden menos que observar un “antes” y un “después” de esa fecha. La emergencia de los indigenas Provoca profundas transformaciones en las formas de con- vivencia, en los sistemas de dominacién interno y en la gobernabilidad de una sociedad, en la que muchas veces los indigenas son mayorfas. 8) El careter indfgena del zapatismo de Chiapas Mucho se ha escrito y se continuard escribiendo acerca del levantamiento zapatista en Chiapas, México el 1 de enero de ACERCA DE LA EMERGENCIA DE LA CUESTION INDIGENA 101 Quienes més han escrito en este caso son sin duda, los sPropios zapatistas, transformandose el Subcomandante i suerte de lider mediatico de condiciones arias y comunicativas nunca anteriormente |Pasados cinco ais del levantamiento podemos com- ptender con mucha mayor nitidez el carécter indigena del wimiento ocurrido en Chiapas. Ciertamente Marcos y inos otros dirigentes no son indigenas y ast lo reconocen, ‘muchos otros silo son y la base que se ha movilizado foes mayoritariamente. Se trata de indigenas en su mayor parte desarraigados ides originales. Por multiples razones his- Limos treinta afos, nuimerosas familias i #s han debido emigrar desde sus tradicionales comuni- 5 a lo que se conoce como la zona de Las Cafindas en Selva Lacandona, en el estado mexicano de Chiapas, La | ciistruccién de represas motivé la expulsiGn de indigenas de sus habitat tradicionales, la sobrepoblacién en las co- inidades, las invasiones de tierras comunales por parte de atenientes, en fin un conjunto de problemas, muchas 102 [LA EMERGENCIA INDIGENA EN AMERICA LATINA. veces sobrepuestos. Hay que mencionar también planes de colonizacién del propio gobierno del estado de Chiapas, con el objeto de “bajar la presién social” existente en las éreas mas densamente pobladas. A lo largo de los aos esas far lias se reasentaron y solicitaron a las autoridades titulos de dominio sobre sus nuevas tierras. No,se les dio y lo que es peor se les dijo que se les iba a dar y luego se les negs. Se fue creando un ambiente de incertidumbre cada vez mayor, cuna de numerosos movimientos reivindicativos”. ‘Como es bien sabido la mayor parte de los movimientos campesino-indigenas en América Latina estén ligados a des- plazamientos forzosos de poblacién. Fue el caso que hemos itado de La Convencién y Lares en Quillabamba en la ceja* de selva del Cuzco. Alli el sistema de “terra a que los campesinos abrieran el terreno sel " conducia ico, sembra- ran café, lo cosecharan y luego debjan abandonar el campo hacia otra frontera de selva. Por cierto que esa manera de trabajar provocé grandes contradicciones y condujo al mo- vimiento de Hugo Blanco. No demasiado diferente era la situacion de los guajiros de la Sierra Maestra en Cuba que ‘eran permanentemente desplazados de sus cultivos, lo que fue activando una situacién de rebeldia y alzamiento de la que Fidel Castro supo aprovechar para instalar all rista demands -memente entre las comunidades, (San Cris no de ales y Selviticas bosque que a la distancia aparece evada, faja de vegeta ACERCA DE LA EMERGENCIA BELA CUESMON INDICRNA 103 B guartel general. En Lit rebel Carlos Tel ‘Diaz relata en detalle este proceso de desalojos forz0s05, F podria decir, al que fueron sometidas las comunidades int Pyenas chiapanecas y que constituyé el caldo de cultivo para : fo noventa y cuatro”! if insurreccisn det © £1 contexto de la campafia de los “500 aos de resisten- ‘a’ y la marcha de las organizaciones indigenas de Chiapas fila Ciudad de México en 1992, es vista hoy dia como un tlemento crucial para explicar el levantamiento de [Zapatista de Liberacién Nacional del primero de enero de © [801 E Sabcomandante Marcos en una entewsta del E oviembre de 1995 en que explic Hee os taettales nj [UA BMERGENCIA INDIGENA BN AMERICA LATINA las ACERCA DEA EMERGENCIA DE LA CUESTION INDIGENA 105 influys en lo que fue 1 de enero de 1994. Eso desperts lo sobre su pasado, pero también manejo que el poder hacia de esos 500 jaba el encuentro de dos mundes. Para las indigenas ese encuentro habta sido brutal. Real- ee 0 eae desde hace 500 aifos una cam- run comunicado en inglés, “lingua franca” del actual Aa cuestién simbélica es quizé la més importante de ‘nuevos movimientos. El 12 de octubre de 1992 en la weha de la ANCIEZ a San Cristobal de Las Casas se habia doval suelo la estatua de Di lor y fundador de esa villa considerada tradicional- te como el enclave “chapetén”, esto es, hispdnico en los de Chiapas. La similitud entre este “sacrilegio” his- y los derrumbamientos de estatuas de Lenin y otros en esos mismos dias en las “reptiblicas socialistas ana coincidencia a ston historia que relata el Subcomandante Marcos sefala i ate después de esa marcha a la Ciudad de México, que fue récticamente desconocida por las autridades, comenzé a tire en Las Cafadas Ia necrsidad de la inst armada, La novedad de Chia i crmata™ La novedad de Chiapas no e6 por Io ta peas”, no puede ser menos fahotae Pesadas estatuas de bronce cafan al piso estrepitosa- Smite amarradas por sogas y tiradas por descendientes de fantiguos ofendidos™ © Los planteamientos suscritos en los acuerdos entre el Bstado mexicano y el zapatismo en San Andrés Larrainzar Milan una serie de puntos en torno al “reconocimiento de de los derechos indigenas, de ciertos fa regional en la toma de decisiones. Se mnal de los pueblos sabido el primer com en un caso y tzeltal en otro, trope de ones gules ea de Sierca de Cissy, ho bbl un fences de actividad guer ra. La guer : a angi grupos dermoid ron por diversas partes del pals. Montemayor, op. Pinta yenas entre los ‘su presencia y funcién on ese lode 98, La prescecia de los han expl movimiento. P debate. Lo que este autos p 106 (A EMERGENCIA INDICENA EN AMERICA LATINA asegurando la unidad nacional”. Agrega que “podrén deci- dir su forma de gobierno interna y sus maneras de organi- zarse politica, social, econémica y culturalmente. El marco constitucional de autonomia permitira alcanzar la efectivi- dad de los derechos sociales, econémicos, culturales y poli- ticos con respeto a su identidad”™, El asunto no ha resultado sencillo. Saber a ciencia cierta el significado de esa demanda de autogobierno y autonomia ha provocado diversas posi clones, interpretaciones y divisiones, También empanta- namiento. La conclusién del documento suscrito por el EZLN ¥ el gobierno de México es sin duda certera: “El conflicto que se inicié el 1° de enero de 1994 en Chiapas Produjo en Ia sociedad mexicana el sentimiento de que es nnecesarin una nueva relacién del Estado y la sociedad con los pueblos indigenas Y agrega que: “uel gobierno asume el compromiso de constrair un nuevo Pacto social que modifique de raiz las relaciones. con los pueblos indigenes” Aunque declarativo, este documento, sin dud tuna nueva etapa en la ya larga trayectoria de los ¥ los Estados nacionales en América Latin: En el documento del Foro Naci idigena sobre “Co- munidad y autonomia” se dice que somos pueblos, no 9. Luis Hemndnder Navarro y Ramén Vera He Acuerdes de San Andrés, Ediciones Era, México, ACERCA BELA FMERGENCIA DE LA CUESTION TxDIGENA 107, isto pblaions al consemas come tes, co os hos colectivos que nos corresponden da, se crean las condiciones para poder disfrutar todos Pog derechos yIbertades que nos corresponden como perso Iyas’", La autonomia se percibe como un espacio propio “nos sentimes F indigenas, lo que no impide decir “nos sent fanart mesanas, pesado quel ferdadores ;odos los gobiernos que les siguieron Laimpresién que entregan los documentos, tanto de una [gotta parte y tos acerdos acanzados en San Andrés es que una necesidad de establecer “un nuevo pact”. Sie es demasiado claro en qué consistiria, En algu- mbargo no es dema etn ee ie ya's tiene, en otros se la observa a nivel de un det ee gadnind se insinia an cambio isteina administrativo, en ottas partes €l sistema federal. No cabe duda que el Estado mexicano hha visto absolutamente conmovido con la insurrecci \ga en prictica las de- la esencia del Estado y sociedad mexicana, basada en sinidad nacional” y sustentada en la “unidad racial, 100. Este documento se refiere [ indigenos deben ser eonsideredos les “indigenous Fa ese” fue denominada le dis fe Viena sobre Derechos Fi “cartels com la letra en di . TOL. Acuerdos de San Andrés, ya citado, p. 137 108, LA BMERGENCIA INDICINA EN AMERICA LATINA, étnica y cultural”, La propuestaindigena zapatista impli- carfa una revisin muy profunda de las bases constitutivas de la Nacién mexicana. Sin embargo tampoco esta demanda se conereta en un conjunto de medidas que puedan ser le, vadas a cabo por una administracién proclive a solucionar 7 problema indfgena planteado. La autonomia de los indi nas chiapanecos es un marco que fja el horizonte hoe! donde se trata de caminar. Pasaran ‘por eas hasta que se concreten formas de autogobiemo eficientes que permitan el autodesrrollo indigena, No obstante Incevtet ta zapatista ha puesto en la mesa la nueva agenda, ©) El protagonismo ind@gena: los Tratados de Paz en Guatemala No cabe duda que la insurreccién zapatista es el punto mas alto en la emergen ha influido en ‘muchos movimientos en otfos piss. La firma de los Trata- ; de Guatemala y en especial los acuerdos sobre los Pueblos Indigenas, estén intimamente ligados a la experiencia de las negociaciones de Chiapas y a la compren- sign continental de las nuevas caracteristicas de la “cuestin ata Nacional de Dis Igacién, 1986, Ver Guatemaln afer the peace accords, Univers 1998 y de ia misma autora, Customary mala, University of London, Institute of Latin Azerican ACERCA DE LA EMERGENCIA DE LA CUESTION INDIGENA 109 * indigena’. Como es bien sabido, los acuerdos a los que legs el gobierno guatemalteco con la UNRG, para pacificar el pats, “contuvieron diversos capitulos 0 tratados especificos siendo uno de ellos, ef mas importante segrin algunos, el que se tefiore ala politica y relaciones del Estadio guatemalteco con E jos Pueblos Indigenas. Este tratado recoge la discusi nacional que sobre estas materias se ha venido dando [ ltimos diez afos. El Acuerdo contiene siete partes. La primera se refiera a > la “identidad de los pueblos indigenas” y en ella se reconoce In identidad del pueblo maya y de otros pueblos de Guate- | mala y, on particular, “Ia descendencia directa de los a guos mayas’. La segunda parte trata de la “Lucha contra la discriminacién” y la tercera, que es bastante extensa, versa Sobre los “Derechos culturales”, reconociendo los idiomas, Jaeducacién, la espiritualidad, el traje de la mujer y numero- | gos elementos de las culturas indfgenas, La cuarta parte se icos, sociales y econdmicos autoridades indigenas. Pare- [cera que los aspectos mas concretos se refieren al reconoci- a del “papel que corresponde a las comunidades en el co de la atitonomia municipal para el ejercicio de los © fpiicbios indigenas a decidir sus propias prioridades en lo «fie ataie al proceso de desarrollo, la salud, la cultura, et Es dicho Acuerdo el Gobiemo "se compromete a afirmar la LF capacidad de dichas comunidades en esta materia”, Estes disposiciones van asociadas a una reforma munict- ‘pal que establecerd las formas de autogobierno al interior de © estas unidas administrativas del pais. Pareciera ser éste uno “de los acuerdos més importantes ya que, a diferencia de Io Le que hemos visto en los casos anteriores, en el caso guatemal- -feco la cuestiGn general de Ia autonomia se radica a nivel [LA EMERGENCIA INDIGENA EN AMERICA LATINA. municipal, Io que es coherente en un primer momento de experimentacién de este tipo de transformaciones. Es tam- bién coherente con la realidad indigena de Guatemala. Como es sabido, muchas veces entre un municipio y otro, los in- digenas hablan diversos idiomas o tienen costumbres ¢ iden- tidades muy diversas, El capitulo acerca de los derechos sobre las tiertas es muy avanzado en comparacién con situaciones semejantes en Latinoamérica y se enmarea en la misma relacién de las comunidades a nivel local. Se establecen diversos sistemas de propiedad tales como la comunal y la privada y sistemas de restitucién de las tierras indigenas. Sin embargo, la ma- Yor parte de estas normas qued6 sujeta a posteriores proyec- tos legislativos, muchos de los cuales no se han realizado en los afios posteriores a estos acuerdos. La puesta en préctica de estos tratados sobre la cuestién indigena atin est en suspenso. Juan Led fensoria Maya de Guatemala (Copmag Grupo de Trabajo, en 1998, diversos aspectos de este asunto. Las Actas sefialan lo siguiente “Se refiere al acuerdo de 1996 que intents al trato iatorio a los indigenas. Dice que existe un proceso de az frégil despues de la guerra civil, que dejé a la poblacion a de Guatemala que apruebe las Reformas Constitucionales planteadas por el ‘Pueblo Maya’. Dice que ACERCA DE LA EMERGENCIA DELA CLESTION XDIGENA 111 No cabe duda que el cumplimiento de los tratados y en. special del Acuerdo sobre Pueblos Indigenas de Guatemala Se5 un asunto “muy delicado” y que debe ser observado en Jos préximos afios. Hay diversas opiniones tespecto al resul- ‘fado practico de los acuerdos de paz, pero en la linea de lo que este libro trata, no cabe duda que expresan un intento ide establecer “un nuevo pacto” entre los Pueblos Indigenas say los Estados en América Latina". 4) Reformas legates y emerge igena La reforma constitucional de Colombia en que se incor pporaron los derechos territoriales indigenas (“resguardos E indigenas”) es también uno de los hechos importantes en ‘gianto al reconocimiento de derechos indfgenas. En esa re- Horma realizada en 1991 se establecié la incorporacién de senadores indigenas al Congreso Nacional, marcando de ese | modo Ia diferencia de estas poblaciones con la poblacisn general del pafs. Afios antes en el marco del proceso de ‘pacificacidn se firmé la paz entre el gobierno y el frente 5 10 de origen indigena Quintin Lame, poniendo como una de las condiciones la suscripcién y ratificacién del Convenio 169 de la Orr. Las organizaciones ind | golombianas han tenido la fuerza necesaria para continuar fon el desarrollo de los “resguardos” y de las autonomias proceso del mayor interés para las perspec- icas en el continente. de 1998, Ses de la tarde LA EMERGENCIA INDIGENA EN AMERICA LATINA Hay numerosas otras situaciones que expresan la emer- gencia étnica en América Latina. La discusién constitucional ‘en Brasil también debié considerar las demandas indigenas incorporando algunos pérrafos al texto constitucional. Las movilizaciones de los indigenas del Amazonas fueron famo- sas en el mundo entero al final de los afios ochenta y pu- sieron de relieve un discurso en el que se juntaba las ame- nazas a la ecologia con la amenaza a pueblos indigenas en ®. La Cumbre Mundial de la Tierra ada en Rio de Janeiro en 1991 y en particular la reuniGn paralela de los indfgenas en “Kareoca” puso el tema del ecologismo indigena en el centro de las discusiones. Como es bien sabido, los indigenas lograron ingresar sus deman- das y t miento ‘Marcos Terena, uno de los més imy de Trabajo de Naciones Unidas sus preocupaciones por la efectividad de las politicas que hoy dfa se aplican en su pais: “EL reciente cambio legistativo atin no ha mejorado las peno sas condiciones de vida de los pueblos ie defienden los derechos de que a las puertas del Tercer ACERCA OF LA EMERGENCIA DF LA CUESTON INDIGENA 113 indigenas... Subraya que ta tierra es la vida y que los pueblos indfgenas quieren vivir en paz y ser respetados..."" > La constitucién de la “autonomfa de la Costa Atléntica” fen el marco de la Revolucién Sandinista de Nicaragua puede " ger entendida como concesién a la creciente oleada de _gidad existente en el continente, Los sandinistas no pos hhingiin discurso sobre la cuestién indfgena y se vieron obli- | gados por las cizcunstancias a aceptar una situacién de he- ‘ho. El resultado posterior de esta politica aparentemente “indigenista moderna esté por verse". |). Peri, 1o hemos seialado varias veces en este trabajo, ha Yeido un caso aparte por la existencia de un elemento tan “ Geterminante en Ia vida del pais como fue la guerrilla de Sendero Luminoso. Un movimiento guerrillero formado por “muchos jévenes indigenas pero cuyos planteamientos no | eran indigenas. Una vez “terminada la guerra”, como se dice en el Peri, ‘han comenzado nuevamente a reaparecer Jas “banderas indl- genas’, En el Cuzco (Qozgo), desde el 2 al § de diciembre de 1997, se realiz6 la primera asamblea de la Conferencia Perma- “nente de los Pueblos Indigenas del Pert. Es interesante mos- ¥ ig 7 war que esta asamblea fue inaugurada por el Dr. Jorge ; “utonomia politica” de la Costa At fos recursos que est ocurtiendo es un ejemplo de que ally 4 [LA EMERGENCTA INDIGENA EN AMERICA LATINA Santisteban, Defensor del Pueblo del Peri (Ombusman) y por el afamado tedlogo de la liberacidn Padre Gustavo Gutiérrez. Esta Conferencia Permanente ha tenido su segunda reunién en julio de 1998 y, recientemente la tercera en 1999. Se ha realizado también en el Cuzco, en 1999, el Primer Congreso de la “nacién quechua” que reunié a dirigentes de Ecuador, Per, Bolivia y Chile, Claramente, como sefialan diversos autores, la cuestién indigena, en la perspectiva etnicista que aqui he- ‘mos anotado, auin tiene bastantes dificultades para ingresar a la sierra andina y por eso mismo es liderada, en general, por los indigenas de la selva que viven en Lima o que tienen muy buenos contactos urbanos!, Finalmente lo ocurrido en la Vicepresidencia de Bolivia, en la que el dirigente katarista Victor Hugo Cardenas realiza en 1992 una alianza con el sector modemizador del em- presariado boliviano™, es una muestra més del nivel contra- dictorio alcanzado por la emergencia indigena e ‘Conap (del Amas (ambas de los mars) y numetosas agrupaciones igena. Lauer, en el 997, y Montoya en el mre de 1997. Agradezco a Javier re estos temas, 12 MNRisias? Le sorprendente eudaz OAV UNITAS, La Paz, 1998 a de estas negeciaciones ha ian- lel frente gobesnante.. con el ala mds eontista de Is antigua izqulesda, venta Al nivel simbélico no cabe duda que el hecho fue inque al parecer segtin diversas je una gran importancia, aunque al p ‘ = ‘evaluaciones criticas, a nivel préctico y politico concreto fue mayormente productva, Sin embargo su presencia en la jmdxima magistratura de la nacién, su permanente auto- ACERCA DE LA EMEXGENCIA RELA CuESNON iNDIGENA 1S F definicion y adscripcisn étnica, pusieron la cuestion indigena ‘un pie diferente en ese pals, o cual se expresa en el tono F de los debates que hoy dia (1998) se estén produciendo en BBotvia, Las teyes indigenas que se han propuesto en el Parlamento boliviano, han sido detenidas por diversos mo- \do el principal el de cardcter constitucio- iacionalidad que la del Sin embargo en el ultimo proyecto de ley into con decir que " el tema J \ndigena es crucial para el Estado boliviano y soslayarlo s6lo eo discriminacién y marginacién”, establece que: ica del Estado refo srintero que Bolivia es Foxes, ms ald de ocet usa diversi Aaiversos.", Peoples and democracy in Lat pp. 55 082. [UA EMERGENCtA INDIGENA EN AMERICA LATINA de la legistacién nacional que proteja y esclarezca los derechos y obligaciones de los Una vez reconocido este hecho, agrega: “Conceptos como tos de libre dete cho consuetudinario, derechos humanos, y su relacién con los nas y los derechos colectivos merecen sina espe propio destino en al que prtenece Por tanto Ia autonon Fete fe ferpretada como una re- tuna distribucion tute un proyecto de justicia para los pueblos indi- genas en que “ el concepto central en la normal ls s pueblos y comunidades indigenas y campesinas y les permiten resolver sus conflictos de acuerdo a sus valores, cost necesidades ¢ intereses” No es fécil determinar el curso que tomard este nuevo protagonismo de la cuestin indigena en Latinoamé 1. Mini de junio de 1998, ri, proyecto de 1998, [ _ AcwacA DE LA BMURGENIA DE LA cuESTON NOIGENA 117 Puna breve pasada de revista podemos ver que hay debates g iniciativas parlamentarias en casi todos los paises, acuer- 0s suscritos, y demandas que obedecen a una misma ma- de mayor presencia de la cuestin indigena en cada uno de los paises. Hay numerosas otras experiencias que deben {eer analizadas, pero que en su conjunto tuestran la existen- Faia de un proceso complejo, no lineal, muchas veces contra- Aletorio, al que denominamos genéricamente la “emergencia ffidigena en América Latina”. @fica. En los afios ochenta surge un nuevo movimiento iidigena en el sur de Chile que se opone a la division de las fomunidades mapuches. Hl gobierno militar de Pinochet ‘pra mostrar que es pos ‘autogobiemo y autogestién de los recursos indigenas. us [LA EMENGENCIA INDIGENA BN AMERICA LATINA postulé la propiedad privada en las comunidades indigenas y la divisién de las tierras. Si bien esa politica se realizé y las tierras fueron divididas, los indigenas desarrollaron un nuevo discurso y presencia en la sociedad que les permitié firmar pactos con las nuevas autoridades de la transicion a la democracia y obtener una “nueva ley indigena” que reco- noce sus derechos y diferencias con respecto a la sociedad chilena. La construccién de una serie de represas hidroeléc- (Alto Bfo Bio) ha puesto en tensi la validez de estas politicas. Hoy dfa se discute si el ze: Por el asentamiento tradicional de unas pocas familias genas, puede ser motivo suficiente para detener una de Jas mayores obras de infraestru is, i Ja importancia que ha asumido Ia “cuestién indigena” que Puede ser motivo para detener una inversién de mas de 500 millones de délares. ') Los indfgenas chilenos en la transicién de la democracia genas mapuches del sur de Chile. Durante 10 afios el Estado lividi6 esas tierras en parcelas fam tftulos de dominio a los jefes de hogar, hombres 0 mujeres, segtin el caso. Las organizaciones indigenas se opusie! esa ley y a esa politica la que de todos modos se re la presidencia, Patricio Aylwin, para realizar la transicién democratica en el ambito indigena. Se le conoce como el Acuerdo de Nueva Imperial, por haberse [ACERCA DE LA EMERGENCIA DE LA CUESTION INDIGENA 119 Ese acuerdo consistia en la ‘en 1990, se formé esa co- isin con participacion igualitaria de miembros del gobier- 9 y de los indigenas elegidos de acuerdo a un sistema de iaciones por parte de las organizaciones. Esta Comi tuvo a su cargo la igreso Indigena y la postetio to. La ley se firmé al finalizar el gobierno de Aylwin, en misma ciudad de Nueva Imperial. sne como principales asuntos los si- fate) Rromoc ss fevers ee ue Maye e juridica a las comunidades indi- erie de aspectos. b) Protege las tierras de los in rohibiendo su venta a personas no indigenas. Las igenas solamente pueden se formado familia’. c) Establecié un Fondo de Tierras ‘komprar tierras a las comunidades y personas indigenas. jos se han comprado mas de 35 mil para fome sarrollo de las comunidades indigenas. e) Establec Indigena”, tendientes a focalizar en un te ia. E Estado 0 "ENA EN AMERICA LAI educaci6n intercultural bilingie. g) Establecié un sistema de de “conciliacién” que permit. fe manera sencilla, h) Cons- nal de Desarrollo Indigena justicia especial, un sistema e indigena en el pais. El Consejo esté forma. lo POF personeros de gobierno que tienen relacién oon los Bienes nindigenas (Ministerios de Agricultura, Educacin, Henes Nacionales ete,), por tres re representantes del Presiden. te de la Repiiblica y por igen nidades el afo 1995 y una nueva eleccid 'a nueva eleccién se realizé en 1999, ay un Consejero aymaré, uno atacamefio, uno de los indigenas de Santia le Santiago, uno de los Ja VIM Region, dos de la Res uno rapa nui, : atribuciones probaci6n de las permutas de tierras ue Solicitan los indigenas, nica forma de transferittierras Segiin la Ley Indigena vigente. . 1a Ley Indigena en sus aspectos de protecciin se ha Nansformado en una herramienta de defersa de los dene hos indigenas y ello la sacan a relucir en cada moment, En el caso de la Represa Ralco del Alto Bio que inunda fiestas indigenas, la nica posibilidad de que la empresa NRA adquiera esas tierzas es mediante una permuty que deben solicitar los propios indi ‘Opics indigenas y que debid aprobar el Consejo de la CONADI. a | ACHRCA DE LA EMERGENCIA DE LA CUBSTION int y Segiin el tiltimo Censo Nacional de Poblacién, reali- fio en 1992, casi un millén de chilenos se aut @ dominante es la mapuche. Los mapuches vivian en ‘Amplio territorio que hoy pertenece tanto a Chile como sigentina. Se mantienen sus tradiciones, en un alto por- faje su lengua, formas religiosas y una fuerte identidad 7 Hay diversos subgrupos mapuches, uno de ellos son los yuenches 0 gente del pehuén, érbol de las cardilleras del Gpir de Chile conocido en castellano como araucaria HAraucoria Araucana). Bl fruto de la araucatia es el pindn y @ os recolectado por los pehuenches siendo la base tradicional 'de su alimentacién y una importante fuente de recursos ya Pique son intercambiados por otros productos. Por habitar en Pas condilleras, en lugares muy apartados, los pehuenches wn permanecido hasta tiempos muy recientes aislados y * con pocos contactos con la sociedad chilena, constituyendo Aina sociedad muy tradicional, Sin embargo, desde hace unos Fireinta afios a esta parte, han estadé sometidos a cambios F fnuy acelerados los que se han acentuado con la construc- ‘in de las represas. En el Alto Bio Bfo hay siete comunidades tradicionales ;pehuenches y varias agrupaciones de campesinos chilenos ‘no indigenas, que fueron legando hasta esos lugares a tra ® ‘vés del tiempo. Esas comunidades se han establecido en los Jugares més protegidos de las inclemencias de la naturaleza, Por lo general han buscado los pocos ¥ pequefios espacios 12 {LA BMERGENCIA INDIGENA EW AMERICA LATINA de ter a Tos hordes de os ros que por estar ene! fondo ders guts nos Henn tan cde se nl nero ‘ombinan numerosas actividades siendo las princi s ganaderia y la recc Eaivanar de los pifiones en el au los bosques de araucaria se encuentran en las cubes de los cerros. Hay muy poca agricultura y en muchos casos no se realiza ningtin tipo de cultivo. Durante el verano los pehuenches suben con sus anima- les a las partes altas de la cordillera donde hay buenos astos y recolectan los pifiones. Bajan en el comienzo del otofio y pasan el invierno en sus casas de los valles. Muchos a a seabaiar como peones asalariados y hay pleadas domésticas a capital de Chile. que emigran a trabajar como em- a Santiago, la ili) Bl Proyecto Hidroeléctrico Alto Bio Bio Desde hace varias décadas la Empresa Naci cidad (ENDESA) ha estado realizando es de construir una cadena de Centrales curso del rio de Electri- trica Jos fs, su cercanfa con los centios industri. la répida caida de altitud que ler de caudales les més impor tienen esto La Empresa era de propieda ada Aurante el régimen militar, pasando sus administrativos y funcionarios principales a ser los nuevos propietarios. Esta empresa construyé la represa Pangue, ubicada aguas abajo de la represa de Ralco, hoy dia en cuestdn, Pangue comenzs ACERCA DE LA EMERGENCIA DS LA CUBSTION INDI x disefiada al final de los ochenta y su construccién se li entre 1992 y 1996, poniéndose en funciones en 1997. [Cuando se construyé esa represa no habia en Chile exigen- elas ambientales al no estar aprobada la legislacién al res- ppecto. El Banco Mundial, financista de esta obra, exigié una [erie de medidas de mitigacién del impacto que produciria Hen la zona, en los habitantes y en la cuenca del Bio Bio. En Jajmedida que la poblacién directamente afectada, esto es thundada, no era muy grande, este factor no jugé un papel ‘muy importante en el debate que se geners el que estuvo ecunscrito principalmente al dafio ecolgico que provocaria “represar el rio mas importante del pais. En el caso de Ralco se trata de una gigantesca represa que inundaré précticamente todas las éreas bajas de esa ona, dejando bajo las aguas las tiertas de cul Jos pas- los animales durante el inviemo (invernadas) y {ro familias pehuenches. izales p: Flas casas de ochenta y \cién de las comunidades ‘Ls necesidad de retocalizar a un mimero importante de fa- Trilias que pierden précticamente todos sus bienes es quizd F fel asunto més complejo de la construccin de esta represa. El dafio ecoldgico al rio Bio Bio, esto es la intervencién de fu caudal, ya ha sido realizada por la tepresa Pangue en fancionamiento. Es por ello que en este caso de Ralco no ha {dorla principal discusién. La cuestiGn indigena ha sido y 6 la cuestién principal La poblacién directamente afectada pertenece a dos co- tnunidades denominadas Ralco Lepoy y Quepuca Raleo. Las _ personas de estas comunidades han sido poco informadas, 14 UA BERGEN INDIGENA EN AMERICA LATINA. sin haber tenido la oportunidad de conocer desde un inicio el conjunto de situaciones a las que estardn sometidas. Se he Producido una situacién de tensiones que ha conducido a dividir a las comunidades entre si", La empresa hidroeléctrica ha adquirido tres “fundos” Para trasladar a los pehuenches. Uno es el Fundo el Barco que estd ubicado aguas arriba de Ralco. Se trata de un cam. Po cercano al actual asentamiento indigena pero que es cri. fcado por ser de muy duras condiciones invemales por estar to que el actual lugar donde habitan los Pehuenches. For esa razén, acogiendo las citcas, la empre- 5a ha adquirido dos predios ubicados en el valle, bajando la cordillera i bien la empresa ha gastado mucho dinero en el plan zacién, a simple vista puede verse que no hay una muy seria respecto al habitat y caracteristicas cul- turales de los pehuenches, Numerosos son los analistas que Se preguntan acerca de la capacidad que tendrén de sobre. vivir de manera auténoma en las condiciones en que sern reasentados"s TA CUESTION INDICENA ACERCA DB TA EMERGENCIA DE a Afios atrés un conflicto de esta hhabrian sido trasladadas en silencio y sin reclama- 6s. Hoy dia un puftado de familias indigenas tienen de- 125 iaturaleza habria sido inversiones mas importantes para el

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