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tambin es educar
Malcriar no tiene nada que ver con consolar, con atender necesidades, con apagar miedos o
nutrir con abrazos o caricias. Quien mal cra es quien no hace caso y abandona, quien
comete el error de pensar que la mente de un beb es como la de un adulto que entiende de
manipulaciones o chantajes.
En un interesante estudio sobre inteligencia afectiva se demostr que lo que ms
experimentan los bebs a lo largo del da es dolor psicolgico. Mucho ms que el dolor
fsico. Es sin duda un detalle que vale la pena tener en cuenta: el sufrimiento emocional de
los ms pequeos tiene que ver con factores como el hambre, el miedo o la sensacin de
inseguridad.
Son factores instintivos que implican un malestar autntico, y esto es algo que cada nio va
a demostrar de un modo particular y diferente a los dems. Habr bebs ms demandantes
que otros y por ello, como madres, hemos de entender la realidad particular de cada
criatura sabiendo que quien atiende necesidades no malcra. Que ofrecer seguridad y
estrategias es educar.
Te invitamos a profundizar en este tema que en ocasiones, suscita cierta polmica.
Son pequeas cosas que generan autnticas improntas en el cerebro de un beb que est
madurando y donde cualquier estmulo, as como cualquier carencia, va a determinar su
posterior desarrollo. Veamos ms aspectos de inters.
La sabidura del biencriar sabe que que las consecuencia del llanto prolongado
y no atendido trae efectos no deseados. Desde el punto de vista neurolgico lo que
ocasiona es que haya estrs, y un nivel elevado de cortisol altera la qumica de los
neurotransmisores, se intensifica el miedo y una mayor necesidad de atencin.
Un nio al que se le deja llorar hasta que se agote o al que no recibe abrazos o caricias es
un beb que construye una idea del mundo algo hostil, un escenario del que siempre estar
esperando cosas, un mundo del que defenderse a veces con ira, o del que esperar refuerzos
con los que encontrarse a s mismo.
No es lo adecuado.
olvidar que el primer anclaje emocional se origina nada ms nacer, con ese primer
contacto piel con piel entre el beb y su madre.
Atender las reacciones negativas tampoco es malcriar. El nio de dos aos que tira
un juguete al suelo con rabia o que araa a su hermano o a su madre, esconde una
emocin que lo sobrepasa y que hay que saber canalizar, entender y gestionar.