Capitulo 1 LOS PRECEDENTES DEL PERIODISMO EN ESPANA. FORMAS PRIMITIVAS DE COMUNICACION COLECTIVA 1. Los origenes del periodismo. Informacién oral y manuserita Los historiadores de la prensa no estin de acuerdo respecto all mo- mento de la aparicién del perioisino. Para algunos como Weill 0 Pltes de Guzmén, s6lo puede hablarse de periodismo a partir de la invencién de la imprenta. Otros autores ereen, por el contratio, que se pueden ras- trear en la Antigiedad formas de comunicacién que ya presentan algunas caracteristicas propias del futuro periédico. G. Gaeta, historiador del pe- riodismo universal, sitéa el origen de estas formas de comunicacin en las comunidades de pueblos primitivos '. De hecho esti comprobado que exis tian estructuras informativas en Egipto, Persia, Grecia, Roma, etc., y rece que entre los romanos se desarvollaron formas organizades de com ‘La complejidad de la estructura social y politica exigia cierto grado abide cn Im tlacionea de comnivedion entre aoa al Se ‘6 entre los grupos sociales privilegiados. Funcionaba la comunicacién ex: tracomunal, basada esencialmente en la existencia de corteos, y la intra. ‘comunal con métodos bastante elaborados de difusién de noticias como el -edloum>, muro blanqueado con cal en el que los romanos encontraban el nuncio o la noticia de cada dia, efimera ¢ inmediata. En Roma se redac- taban ademés cada afio los Annales Maximi, especie de crénica de sucesos destacados, los Acta Senatus y los Acta Diurna Populi Romani, diatio de 1 Chr, Giuliano Gacta, Storie del giornaixmo, t 1 26 Tos precedentes del petiodismo en Espatia 2 acontecimientos de Ia vida de Ia ciudad, donde se reflejan les nacimientos, aoniec ier defunciones, viaje, ete, de In compleja y apitada sociedad romana. was de estas formas de comunicacién pasaton a las colonia, donde ya existan ottos sistemas informativos previo y se fundieron fom ellos. Fe aatad Media, In legada de los bitbaros, el desasollo de In vide ital, I fragmentacin politica y el estancamiento cultural relegaron st, wartioe de comunicacién al mbito de los monastetios. Tuvo que pasar metho tiempo hasta que los juglares, soldados y mercaderes volvicroo. @ craton 9 reerear las viejas f6rmulas de transmisién de las noticias. Ta prchistoria del periodismo expafiol comprende una Targa ctape de se catiende desde la época Iejana e imprecisa en que aparece la primera Fee Sosmanicacién organizada entre grupos de individuos hasta el mo vormgo en que se consolidan las publicaciones impresas con una, cietta revered. La immprenta y el correo hicieron posible la periodcklad ¥ cas itge dos clementos determinantes de la tansformacién del medio Hee? Ot iglo x, fecha en la que muchos autores sin Ix aparicién de Praee vunicacion’ manuscrita con cierto matiz periodistico, hasta cl si Ho src, se extiende un largo perfodo de tentativas que euojan paulate se mae ea formulas nuevas de comunicacién. Para F, Aguilar Pil: La pevidicidad de las publiccones es un fenémeno rcativamente, modern on et eemente tudo, No hace si aparicion hasta que Ta sociedad £9 todavia nsafieerndes cleo ubanes,sustiyendo las ancetals relaones ie we trac ror madi mks efcaces de commuicacion de mesas, Ente ei hay ules Wer coniunente, los impresosperiéicas, que comienzan con iniges Sve eres de un medio rtenaal, propio del Antiguo Régimen, arn desarllse con Pree rojanca merced fa revolucion industrial del siglo 0c? Fin Fspafia, lo mismo que en cl resto de Europa, ln aparicin de Je prensa periica estélgada a condicionamientos sociales, poliisas Y eo” Pemicos y al desarrollo de los medios técnlcos. eos Ye anacho tiempo, 1os investigadores ignoraron a existencin de ana grenea en Espaia en Ia etapa anterior al siglo x0x. E. Hatin, el gran historiador de la prensa francesa, escribia en 1859: opal es wn pats en el ave Ta prensa pica permanesé rere dure ene es "hnnee de la revolucén de, 1820 no habia en Madrid mis cat ome macho GeO muy poco verde, que daiaba de mediados del silo rv ines set, fii rian a amanci de Is fiestas cesistias, de Tas vents et» © ae aa fieacign y precio de los productos y ef boletin de ventas? TF Aga Pita ela prensa epafla en ol siglo xvi, Diario, revsts ¥ Pro éstiooor Cuadernos Bibliogificar, XXXV, p. VIL 1 ci ae bistorigue et critique de La presse priodique frances pp, CHILCIV.Historia del periodisino en Expaia, 1 embargo, que en Fspafia se empleaban formas efi ceaces de comunicacién, incluso antes de la apaticién de la imprenta. Por una parte, existia le informacién oral, método espontineo de transmisién de noticias vinculado a sectores sociales muy amplios: elérigos, estudian: tes, nobles, soldados, mercaderes Juslares y peregrines que aspan de inguietud némada y religiosa los mapas de Ja dpoca, traladan oralmente informaciSn, Narran y refiren noticias en los castillos, cn las posadas, en los caminos, en ls atrios de las iglesias, en los corraes escénicos, 0 fos lugares, en fin, donde Tas gentes cootineas se congregan para escucharlos + Y junto a la informacién oral se desarrollaba un tipo de comunicacién ‘manuscrita que en un principio adopts forma epistolar. Algunos investi- sadores consideran que la correspondencia mantenida entre algunos abades y priores de monastetios y conventos constituye ya una forma primitiva de periodismo, Ripoll, en Catalufia, fue un centro de conservacién de Ja cultura clisiea y un nticleo en el que se elaboraron las mis importantes erénicas de tn época, En toda Europa las primitivas formas de comunica- cin colectiva estén inspiradas por un profundo espftit pragmético. G. Weill ha aludido af carécter utilitario de la noticia Es imposible asignar una fecha de nacimiento a la noticia manuscrita. En Ingle terra una ordenanza real de 1275 contra los propagadores de falsas noticias confirmada fen 1378, es invocada en 1682 por el Consejo privado contra un periodista absuelto por el jurado. En este pals la noticia manuserita ex objeto en seguida de una vesdaders industria, ejercida por profesionales que se encargan de informar a Tos jefes de las familias nobles. Se han couservado los nombres de Laurence Minot, en el reinado dle Ealuardo TI; de Lydgate, en el de Enrique VI; otto Fenn fue especialmente soi sitado durante la Guerra de'les Dos Rosas, en Ik que se jugaba la suerte de la ati tocracia inglesa. La noticia manuscrita en el siglo xv tuvo todavia més importancia en los paises mis dividides, los més agitados de Europa: Alemania e Italia! En Ia Baja Edad Media, la presién de la burguesfa con su demanda informative contribuys a la creaciéin de nuevos cauces de comunicacién. Los grandes comerciantes venecianos deseaban conocer Ios pre rmereados. europeo las condiciones climé ios en los 1 estado de las comunicaciones, In situacién politica, 8, los movimientos de sus competidores, sus viajes; iva, cualquier noticia encaminada a conseguir el éxito de la gestién econdmica. Las noticias manuscritas —efogli d'avvisi» en Italia y zeitungen» en Alemania— fueron el medio utilizado para cubrir esta informaciéa. Alguna familia como los Fugger absorbié de tal modo el 4 J, Alabella, «Petiedismo, en la obra colectiva Ef libro de Madrid, p. 370. 5G. Well, HY periddien, p! . Los procedentes del periodismo en Espana 2» mercado informative que Heg6 a conseguir uno de los impetios econé- micos més potentes de su. tiempo ; Ta aide informative origins wn amotio merendo de nova, Por toda Europa surgieron los profesionales de Ja informacién y se erearon centros dedicados exclusivamente a su elaboracin y distribucién, En es tas oficinas no sdlo se acumulaban noticias, también se reproducian y copiay ban algunas de expec imerds econsnio © polio, Lo Fogger ener ban copia de algunas noticias, ¢ incluso Hlegaron a creat ellos sus pro- pits ofieinas, Parece que ya en estos aioe previos Ja aparicién de la jmptenta existian servicios informativos organizados con corsesponsales cn los principales centros de interés de Europa: Colonia, Viena, Parts, ete En Espaiia existié también este mercado informativo a base de noti- cias tmanuseritas, Contenian informacién sobre asuntos de caréeter priv do 0 de tipo oficial, relacionados muchas veces con Ia economia y Ia po- litiea. Kastner ha estudiado esta primitiva informacién manuscrta: se tataba evidentemente de una informacién corsiente unilateral, bien fuese pagadke G basada en ottas obligaciones. Ademds exist ya desde épocas muy temotas un inter- ambio epistolar corrente entre particulares que babitaban en lugares alejados y en el Sue junto a Tos aston pesonales o comecfes se tataban sin otc puntos Alignos de ser conocidos. Ast los comerciantes se comunicaban mutua y regulaemente tos los acontcimienes inersantes (., Tambien low hombre de Estado ams tumbreban a sostener un abundante intercambio epstolar de esta naturaesa. Asi un tl Tureano Pérez, que fue enviado en diversas Cortes espaiolas, dei vatos cents pares de cartas cuyo contenido es puramente polticoinformativo, cambiadas con principales y eaballeros con cardcter privado, fuera de su cometido oficial, y co las ‘que reciia informacién y Ia daba a su vez”, it ods: Para algunos autores, como A. Asenjo, Ia promitiva {6rmula period tica expafiola exté emparentada con las primerss manifestaciones de nuestro romancero, sobre todo con los romances fronterizos y de la guerra de Granada : ara Menéndez y Pelayo ninguna forma de periodismo politico-satirico puede compararse con el que ejercfan mosén Diego de Valera, Alonso de ahem i Page, bE Hi, en oe ya So a eee ea i sh eee Sra el Bi rt Pe re le Prensa Espaiiala, afio 11, aim. 9, febrero 1943, p. 343.30 Historia del periodismo en Espaia, 1 Palencia o Hernando del Pulgar y los autores de las Coplas del provincial, La Panadera y Mingo Revulgo', 2. Los origenes del periodismo impreso El paso de la Edad Media al Renacimiento supuso una etapa decisiva para la aparicién del periédico. Se inicia entonces un largo proceso de si- slos que culmina en el xrx cuando se consolida la burguesfa, se sustituye la sociedad estamental por una sociedad de clases y el sistema de pro- duecién capitalista desplaza al modelo de produccién feudal. En el si- alo xv, la burguesia preocupada por problemas econémicos y politicos te- clama el desarrollo de los medios de comunicacién porque necesita la in- formacién para su propia subsistencia. Las mensajerfas, las postas y, sobre todo, los correos, son entonces los medios adecuados ‘para la transmisi6n de la noticia: sin ellos, el mensaje hubiera quedado telegado para siem- pre al medio en el que surgi. La fundacién y consolidacién del correo constituye un factor decisivo para el desarrollo del periodismo. En la Edad Media, cuando el mercado de noticias no estaba ain estabilizado, se producfa un cierto desfase entre la produccién y emisiGn de la noticia y su recepeién, Las ferias y mercados alemanes decidieron la petiodicidad de las primeras.publicaciones: anuales, semestrales y, finalmente, sema- nales’. Cuando Jas mensajerias ceden el puesto a los correos se estabil la periodicidad de las publicaciones. La regularidad del correo determina puntualmente la regularidad de la informacis El correo tiene que desarrollarse —escribe Gémez Mat— causa, primeramente, de Tas concentraciones estudiantles ereadat en lat universidades, Después son, Tos reyes de Francia © Inglaterra quienes erean ofganizacioncs postales piblies, A fines del siglo xy, el conde italiano Tassie incia una serie de cotteos de tipo inteanaconal que legaron a unit a toda Europa. En Espafa se inicia esta familia con la inaogura- idm, en 1504, de una red postal que une a Espaiia con Holanda, Alemania y Francia, De Granada « Brusclas las comunicaciones Hlegaban en dos semanas M La Corona debfa pagar, a cambio de esta rod de informacién, 24.000 libras anuales. La organizacién del correo hizo posible y rapido el inter cambio oficial en el plano politico, militar, diplomético, ete. SM. Menéndes y Pelayo, Antolosis de lor poetas liricos castellanos. Desde la lormacién del idioms basta mucrtros dias, tomy V, p. VI. 43 Existe una estrecha relacién entre la periodiciiad. de Bsanizacion del Correo en Europa. Las ferias de Franctort y Leipzig provocan el nach tiento de publicaciones anuales o bianuales y Ia reorganizacion de las fevias ¥ mor cados origina Ia aparicién de una incpicnte prensa semanal, E. Hatin, considera que el primer periédico impreso en Furopa es el Nientoe Tidinghe de Amberes de 1003 José Gomez Mar, La aparicién de le prensa (El euario. poder), p. TT. a informacién y ta reor. u Los precedentes del petiodismo en Espatia Las class sociales peas, el cleo yt nobles wlsaron tam: én Ia prensa para defender su estatus tradicional, aunque los princi ie, Mauer contra sus privlegies se iban a product predsamente desde ese medio algunos siglos después. oa A lado de ln burzosia I Tels apareia como una importante foe za social a comienzos de la Edad Moderna. Su papel slo se tambalea tuando © produce la teforma de Later y as guetras de relign. Ea pre sa desempefa un importante papel en cl conflicto. La otra gran fuerza social del Renacimiento a constituye la nobleza. En el siglo xv se consolidan Jas nacionalidades, y la autotidad real se extiende sobre tierras en las que dominaban los vicjos esqumas feudal, Al mio tempo, ave © Pro luce Ia pugna entre las principales fuerzas sociales, se suceden una serie SE onineno ge cotribje deforma dec desl de Ts medios de comunicacién: el despegue econémico que provocs a demanda informativa por parte de comeriantes y banquros, In reform Inerana Is guest mcinaes © intermionaet fos descents gop cos, entre otros. En el aspecto téenico, nuevos inventos como la aguja eS Peace sa y las guarniciones de caballeria facilitan y perfeccionan los transportes. A todo ello hay que afadit la invencién de Ue ioretwidenca dela fmprenta ha sido sefaladn por todos ls et dliosos de los medios de comunicacién. MeLuhan, por ejemplo, ha els- borado una sugestiva teorfa en tomo al papel de I imprenta como cle- mento modificador de pautas de comportamiento social y politico, capaz de crear «ptblicese inexistentes en el periodo de la esctitura manus- aia”. 3. La coexistencia del periodismo manuscrito e impreso Uno de los hechos que llama especialmente la atencién en esta Le de Ja prehistoria del periodismo es la coexistencia de las formas manus- = yrenta representa la conjuncién Fase ected fdmete routed con a ivereiga eum male de trons, oe Le perm product leas scparadas nacho mis pris ye mayrescasdades32 “Historin del periodismo en Espati, 1 critas © impresas. La aparicién de la imprenta no proxlujo la desaparicién del periddico manuscrito. Cada férmula tenia su propio pablico, Los gran- des sefiores preferian la noticia manuscrita, y hay nazones que apoyan esta preferencia: In informacién manuscrita era minoritatia, selcctiva, bien claborada y libre de Ia vigilancia que ejercfan sobre los impresos. la Iglesia _y el Estado. Los nobles, banqueros y altos dignatarios eclesids- ticos tenfan acceso directo a la noticia a través de las hojas manuscritas que escapaban al control del poder civil y religioso. Las hojas impresas se dirigian, por el contrario, « un piblico mayoritario, obligado a tolerar Ja censura ejercida desde el poder. AA la cocxistencia de la noticia impresa y manuscrita contribuyeron también las dificultades econémicas que su- ponia el establecimiento de una imprenta, con una importante inversién fen recursos téenicos y humanos porque el trabajo del impresor era duro y requeria una cuidadosa.preparacién. Ademés ln noticia manuscrita se- guia sus propios cauces de produccién: contaba con redactores ¢ infor- adores especializados y con su propia red de oficinas de distribucién ®. El petiddico manuscrito disponfa de una clientela fija, y tuvo que pasar mucho tiempo para que este modelo informative fuera desplazado por las nuevas formas de comunicacién En Espafia las relaciones, primero manuscritas y luego impresas, rec! bieron diferentes nombres: Hojas Volantes, Avisos, Hojas de Noticias, Cartas Nuevas, Los «menanti> en Ttalia, como Tos autores de «nouvelles a la maine franceses 0 los «relacioneros» espafioles, mancjaban una am- plia temética que abarcaba desde el pequefio asunto doméstico hasta no- ticias sobre acontecimientos politicos o militares. Las primeras hojas im- presas a fines del siglo xv contenfan una sola noticia, descrita minuciosa- mente y encabezada por un titulo relative a sa contenido —forma primi: tiva de cabeccra—, al que se afadieron en seguida grabados; eran hojas de pequefio formato, de 20 por 15 centimetros, 6 15 por 10, y tenian de 4a 8 paginas, Los géneros literarios empleados en estas hojas impre- sas eran la gacetilla y Ia exGnica, y respondian a Ia demanda informative del piblico; sin embargo, la répida sucesién de los acontecimientos del siglo xvr amplié el interés del paiblico hacia temas cada vez mds com- plejos. Los asuntos politicos y militares sustituyeron paulatinamente a las noticias econémicas. Weill ha descito la eistenci un importante admero de ofcinas dsbuidas 1 tole Batepe sJegent Rear igs unm ons de ent cise en Augsbura, ae Be Stina ssp de gu este por Schill os dow tabaaban par ios Parsee fare ton lentes, Los elctores a Surin papa memerosoncorcsponsaes (emt Tere fue aert Lan) pare gure cov a ie Come 12 conscara netalente Dro C2) Ha Veneca se vendanpblimete en el Kilt cn son tends, cam momerosos en esta cad los potesiones Slvamente menanh oe rapport, gnctant.», Ge Well El pr Loe precedentes det periismo en Espefia 3 En las postrimerias del siglo xv, muchas eausas de tipo econémico, social y politico —fin de ta reconquista con la toma de Granada, unided peninsular, descubrimiento de América— contribuyeron a la ripida di fusidn de Ia imprenta en Espaiia. Se habla de 1468 como el afto de la primera impresisn en nuestro pais de la Gramsética de Bartolomé Matés, aunque en opinién de algunos autores ya existian en esa fecha otras publicaciones impresas. Segiin Pérez de Guzmén: io més, afio menos, la imprenta se establecis como por ensalmo isi al mismo tiempo en Roma y en Veneca, en Amberes y en Paris, en Colonia y en Avgsburgo, yen varias ciudades de Espafia y en Lisboa, en la Peninsula, Nosotos tenemos incunables hasta de Cotia, lugar excéntico, de 1468 ¥ Los primeros impresores, Juan de Nuremberg, Tomas Glogner, Mag- nus Herbst y Jos espafioles Antén Martinez, Bartolomé Segura y Alonso Puerto, aparecieron en Espafia por estos afios, despertaron Ja curiosidad ‘general y fueron incorporados en seguida al séquito de los reyes y de los grandes magnates, fvidos de divulgar nuevas sobre Ia conquista de Gre nada. M. Harrise, en su obra Bibliotheca Americana Vetustissinea, dese be un papel impreso sobre la toma de Granada, fechado en 1493 y tre ducida del castellano al latin y al francés: In laudem serenissi/mi Ferdi- andi Hispaniarum Regis Bethi/cae et regni Granathae obsidio, victoria et sriunphus, cuyas versiones aparecen unidas a una catta de Colin: De insulis in mare Indico nuper inventis. En la tltima década del siglo xv se imprimieron varias importantes relaciones dedicadas al tema de la Recon- ‘quista: una Relacién de la conguista de Mdlage, y dos sobre la conquista de Granada, 4. Crénicas y relaciones primitivas El descubrimiento de América y las conquistas espafiolas fueron te ‘mas habituales en las crénicas y relaciones que se publican en los il timos afios del siglo xv y a lo largo de todo el xv1. Las Cartas de Colén de 1493 fueron reimpresas varias veces, y algo parecido ocuttié con la carta titulada Conguista de Méjco, escrita al parecer por el propio Cortés. Las descripciones de Américo Vespucio sobre su extraordinario descubrimiento, Ia Relacién de Alvar Yéiiex Cabeza de Veca sobre la Ar. mada en la que‘iba como gobernador Panfilo de Narvdez, impresa en Za mora en 1542, la Verdadera relacién de to sucedido en las provincias y reino del Perd desde ta ida del Virrey Blasco Neiiez Vela, impresa en ¥ Péecz de Guzmn, «Origenes histSrics...», p. 215.Pn Historia del periodismo en Fspafa, 1 Lisboa en 1549, y la Narracién de la batalla de Lepanto de 1373, son al- unos de los titulos més importantes, al lado de las relaciones sobre Tes Conquistas norteafricanas de Ximénez de Cisneros". Las, primeras re- Taciones se ocuparon también de los viajes y hazafins reales: Fernando f Isabel habian conseguido Ja unidad peninsular, y los escritores pro ximos a la corte todearon su obra de una abundante literatura apolo- gética, Una de las més antiguas relaciones impresas se titula: Tractado fn que se contiene el recibimiento que en Sevilla se bizo al Rey Don Fer- nando, de 1477. Por esos mismos afios se publics una Relacién la entrada de Fernando V en Saona, los Tratados del doctor Alonso de Ortiz, las Narraciones de la berida del Rey Fernando, etc. Existen también numero- sas relaciones y cartas sobte acontecimientos del reinado de Carlos V, como la Carta que el muy ilustre seior almirante de Castilla escribié a 1a muy noble y muy mas leal ciudad de Sevilla, En la qual da entera relacién de las cosas sucedidas con la junta de las comunidades, et 1a carta et reque- rimiento que les a embiado et la respuesta. E otras cartas que embio a To- edo et a otras partes, 1520™, Desde 1488 a 1526 desarrolla su obra petiodistica un interesante personaje, el lombardo Pedro Mirtir de An- fleria, «andante en corte de los Reyes Catdlicos» y autor de un periédico de noticias redactado en forma epistolar: Opus epistolorum, dividide en 812 niimeros. ‘Los iiltimos afios del siglo xv y buena parte del xvi, marcan un mo- mento de apogeo en el desarrollo de esta forma primitiva de periodismo. La coyuntura politica internacional permitia el protagonismo hispano y facilitaba el interés por las noticias que publicaban nuestras relaciones. En estos primeros momentos, las publicaciones espaiiolas «... constitufan fuentes especialmente codiciadas, de las que sacaban su matetial los im presores extranjeros, Los periédicos espatioles eran los que daban la panta th lo teferente a todo lo que se desarrollaba fuera de Europa, ya que Tas noticias solamente venian a éta por medio de barcos espafioles par 7 Wy de Guin ba cat que a, fo Tver’ pe Fema, oli i ce oe wdc non Teryentes expecones por divercs it band. de lo eon Sue amos biblical wn deo sombre sales i Earns cep sett fopdador muchos de cies popes. ome Calembinn (2) Mpc Jeanna me doy sane, Un gran nine sgn Ref A ict dea eons dels ports por Afi AME Sen ps Ue Foti» Stas rele Pa a oma sea eas ect, mines cares uae anton toe mises fons castellano, portugues et Lisboa, Salamanca, Medina del Campo y aun en Zamora, en cuyos ciudades habian sido impresas...», Origenes bistéricos..., sik Pk ‘Asenjo, La prensa madrilema: eee los. ees (Agee pes ‘su bistoria ese oh ato yee td a ite Clbarn de Ciedaba petenceen cede ne i nar sneda em la Corte de Espate desde 1399 best 16k Los precedentes del petiodismo en Fspafia 3 tiendo de puertos hispénicos, para tomar el camino de Ia prensa, difun- diéndose asi por todo el pais y salir luego a los emis Estados» ”, Los centros de confeccién y difusién de las primeras noticias impre- sas espafiolas se extendian por toda la geografia peninsular: Coria, Zamo- 1a, Létida, Salamanca, donde se imprimié la Oracién Latina de Garcilaso de la Vega —embajador de los Reyes Catélicos cerea de Alejandro VI—, en Ja que el autor cuenta al Papa la muerte del principe don Juan; Valle dolid, donde se publied la Relacién de fo sucedido en el cerco de Galera, cserita por Bernardino Domingo, etc. La mayorfa de los investigadores parecen coincidir en la ausencia de publicaciones en Madrid durante-el reinado de Felipe 1; el silencio parecia inspirado, en opinién de algunos autores, por la Bula IV de Gregorio XIII, Contra fumigeratores nuncupatos Menantes de 1572, Sélo con motivo dé su campaiia contra Inglaterra permitié el rey la impresién en Portugal de tuna relaci6n titulada Relacién verdadera del Armada que el Rey, nuestro Seitor, manda juntar en el puerto de la ciudad de Lisboa, en el Reino de Portugal el aio de 1588; de ella mandé hacer varias reimpresiones en Madrid, En Valencia la primera relacién impresa aparece en 1536; su autor cera Jorge Castella y se titulaba Cuarta relacién que Fernando Cortés, Go- bernador y Capitin General de su Majestad en la Nueva Espaia del mar Océano escribié al muy alto y muy potentisimo, invictisimo sefior don Carlos, emperador semper augusto y rey de Espaka nuestro sefior, en la que estin otras cartas y relaciones que los capitanes Pedro de-Alvarado y Diego de Godoy environ al dicho Capitin Fernando Cortés. En, 1586 se publica Ia primera relacién de noticias en valenciano: ILH.S, Brew des- cripcio dels mestres que anaren a besar Les mans de Sa majestat del Rey D. Phelipp. AI Real de la Ciutat de Valencia, a 8 de febrer any 1586. Durante el siglo xv1 Sevilla era el centro més activo de publicacién de relaciones de Espaiia; los impresores sevillanos no sélo_ imprimian textos originales, sino que teimprimfan cuantos enfan en sus manos. Sevilla cera un importante puerto comercial, con una situacién privilegiada, y estas condiciones hicieron de la ciudad un centro ideal de claboracisn y distribucién de noticias; América era, sin duda, su principal mercado. En el siglo xvi se publican ya en Sevilla una serie de relaciones anuales 7 Kasiner, «La historia de la prensa expaila desde 1500 a 1800», Gacete de te Prensa Espafola, ato IL, nim. 9, febrero 1943, p. 544 TL bala Ices fecha de de’septiembee de'1572, pero en los sis afos anteriores, desde la introduccén de Is imprenta en Madtid por Piere Cossin y Alonso Gemez, tampoco se producen noticias impresas. Péter de Gurmén alude también a esta ausen da'y eita unor romances imptesos en Madrid en Francisco Sinchet, con el titulo de Historia” Parece que, efectivamente, existla una cierta resistencia por parte de Fe- Tipe Ta dar a le publicidad los asunios publics, sobre todo fos rlaivos sa policca portuguesa.36 Historia del pesiodismo en Esp que reciben cl nombre de avisos. Sus titulos eran largos, complejos y Teiterativos: Nuévos avisos venidos de Roma por et licenciado Rodrigo de Olia de Osizenaga, al P. Fray Alonso de Aguilar, en que se da cuenta de las cosas que pasan en Turquia y det principe Cardenal en Francia y en otras partes (Sevilla, pot Rodrigo de Cabreta, 1597), Avisos nuevos ve- vidos de Roma en 8 de enero de 1598, en que se da cuenta de ta venida 2 inundacién que las Unvias y el rio Tiber ban causado en dicha Ciudad (Sevilla, por Rodrigo de Cabrera, 1598) y Nuevos avisos venidos de Roma delo sucedido eri el Ejército Imperial de lo que ha hecho el principe de Transilvania y de otros avisos de diversas partes (Sevilla, por Rodrigo de Cabrera, 1599). Rodrigo de Cabrera debié ser uno de los impresores mis importantes de Sevilla cn la segunda mitad del siglo xvi a juzgar por la amplitud de su obra, De su imprenta salieron en 1596, 1598 y 1599 obras tan importantes como la Relactén de los sucesos det archiduque cardenal Al- berto de Austria de Flandes, en 1596. Idem de la jornada y toma de Ca- les; Relacién y forma del recibinsiento que la villa y ayuntamiento de Ma- drid bizo al Rey Dom Felipe,-nuestro Seftor, tercero de este nombre a la entrada que su majestad bizo en ella et domingo 8 de noviembre de 1598, J Relacién de los casamientos del Rey nuestro Sefor con la Reyna Doha Margarita nuestra Sefiora, y de los Sefiores Archiduques Alberto ¢ Yn fanta Doia Isabel”. ‘Una de las ciudades en la que las relaciones impresas aleanzan gran importancia en el siglo xv1 es Barcelona, En opinién de Torrent y Tasis ‘dla Cataluda de los primeros afios del reinado de Felipe 11, cuando cl interés por las cosas del mundo no habia sido todavia aniquilsdo por Tas luchas intestinas de las facciones y del bandolerismo, acogié con mu- ‘cho empedo el nuevo invento. traido a Europa por los alemanes> ®. No esta comprobido que Ia geamética de Bartolomé Matés fuera im. presa en Barcelona; sin embargo, sabemos que ya existian en la ciudad th el siglo xvr grandes libreros, impresores y grabadores ", En el afio 1557 aparece [i primera hoja de noticias en Barcelona: Copia de les moves de Talia per letres de Génoca, Est fechada el 9 de mayo de 1357 y tiene ‘cuatro, péginas en cuarto: las tres primeras estén dedicadas al texto, ¥ PA. Asn, La prense madre « tots de los sgl. pp. 17 ¥ 8 a eee ee Fass, Historia de fa premsacatelang, 9. 2% 3 ghost! 2 Scion caplendorosamente. con libros impress en Barcelona por Niclas Spindles Carles Amorér tutes gabdores, ontnuart con nombres por Nicola Spine 2 Como Partolreu Aguiar, ferom! Dac, Dimas Bllster, EURO HOE cat, Jaume Covtey, Rafal Dauder, Jaume Galvin, Hobert Glan Hornet, Jauer ere Montperat, Toa Rosembach, part, acabar con In gloriss Ga eects y Ws Mahceat, Torment y Tass, Historia de fa prema... pagina 2 {Los precedentes del periodismo en Espafia 37 la hima tiene una cubierta en Ia que aparece el escudo de Espaiia y un grabado, No conta el lugar de Impreisn, sungue ext eclt en etldn Y parece Iégico pensar que fuera impresa en Catalan, Veintinueve aiios antes habfa aparecido una de las primeras relaciones de la Peninsula dedi- cadas a politica internacional: Relacién de lo que ba passado sobre el desa- fo partiaay entre ol Emperator il re de Praca, de 1328, Ente wn y otra relacién se imprimieron muchas en Barcelona, en Sevilla y en otras ee ee 1a ES ge eons impress en dil ents als favors ia aparicién de una interesante forma de comunicacién oral. J. Altabella fat hicass cea aacauia tal sae ae desis Coe alo largo del siglo xv1. Se trata de un petiodismo oral, elaborado a base de nots del exer, de pequcos sucess de I vil y de acntec mientos cotidianos del tundo del teatro y la politics; era un periodismo de muti eosumbris, precursor de un aéney que i & fener gran éxitn cen épocas posteriores: «En el siglo xv1 erepita en todo su apogco, cf vide madi, ln formula del perodsmo oral en tes eee alles urbanistico que va, aproximadamente, desde la plaza de Santa Ana a la plaza de Oriente puso por ly Puerta del Sl. Son fs wes eles mentideros de Ia Villa y Corte: el de Representantes, las Losas de Pala- Ssh siGuisulas rise aimee aan ate 5. La consolidacién de las relaciones en el siglo XVII. EI contexto histérico Las relaciones espafolas se consolidan en el siglo xvity estén fatima- ment vnc Te evluin de La via pelt de I cena, Tex mina I fase de apoaeo del perio se ida un pesody de pron lcadencia, Mientras cl siglo xv1 habia sido para Espafa una etapa de rmadurez y podetio, en el xv11 se produce Ia desintegraciin territorial y se consagra wna decadencia que hunde sus raices en los errores del pasado. «La hegemonia espaiiola del Quinientos —ha escrito Reglé Campistol— estuvo apoyada por el aumento demogréfico y la expansin econémica, que su vez, condicionaron un cierto equilibrio social. Sin embargo, las cre- cientes obligaciones en el émbito de la politica internacional rebasaron rauy pronto les posibilidades reales del pats, El esfuerzo que se reali (...) puesto pote papel hegeménico en el mundo, erg Ia més ala ten si6n espritual y los mayores sacrificios econémicos, que suplieron la de comaedanl ete x welln marae yin bites ropes ¥ cumplidos» 3, TTY A tein ss ys pofie, TL" ec, p. 309.38 ‘Historia del perioismo en Espaa, 1 Domfnguez Ortiz ha insistido en las causas de esta crisis y ha clarifi cado alguno de sus aspectos més complejo a poli vn eosin teen ds 28 es tt etaldes sree, Nunca hiceon quer de congun, | menos Fe em eintarom a elender To que eta su, conforms 2 ls ides Feo that a pensar i el interés capafol coincide con el iterés dink ae res pemabar paar conerando Peru o Tandes 10 perdan en Me Rene de Caal, Ain afiacads en Mads nunca wveron ona deta paola de Tos bechos; sgueton prsancros de sis oblizaconcs Seige naman kato (en menor grad. den calidd de dfeosores de a Teles) ini ae Far al rnin. de silo con ss dominios heveditarios no muy Tusmimadas pero coneletanente exhausts. ‘A los factores politicos que provocaron Ia decadencia espafiola es preciso afiadir los Peblemas sociales y econémicos: el descenso demo brifico, la erisis econdmica, el caos fiscal, el desequilibrio social, Ia inet facia de las instituciones administrativas y cl desgaste insoportable de las jucrras exteriores, Baeta la muerte de Felipe UIT, Felipe IV y Olivares pretendieron ende- rerar la maltrecha administraci6n interior. Sus medidas contra Ia corrup- Gdn resultaron tardias ¢ incficaces. La decadencia espatiola, parecia vitable mientras la prensa, nacida al calor de grandes y gloriosas gestas, tellejaba impotente el desarzolla de los acontecimientos y seguia sus pro- los deroterots 2 eee "A comienzos del siglo xv1t las primitives formas de comunicacién co- lectiva adguieren algunos rasgos_caractersticos del verdadero. periodis: mo, como la periodicidad y una cierta continuidad temética, En esta etapa proliferan sobre todo las relaciones, cuyo contenido ha sido deserito por Kastner: 1 cc aba oo nine nee at ii i eee Uenptatn,rturamens nt Das as hts Te ne cn de mien scores, pan de nde dee Sea enum, nota de gern y eho Sea ait cna eon dundtessocones, Tambien saan fae Sean ae tar ements atl os bes cine me ine ef mario dean sioner, Meta Ia eM eect abe baal oi deg, de ona co cai a aan de noes pds abe ee Sin dc tx Bape DA. Domingues Ortiz, Bl Antigo Régimen. Los Reyes Catlicor 7 tos Austria, seins 345 36 eA. Kastner, «La historia de la prensa...» p. 549. Los procedentes del periodismo en Expats 38 ‘Algunos investigadores de la prensa encuentran una relacién inme- diata entre Ia situacién politica espafola de comienzos del siglo xvit “eatacterizada, a pesar de la decadencia, por su importante proyeccién internacional— y en la abundante produccién de pliegos de noticias: [Natutal ete —ha escrito Pascual de Gayangos— que Fspafa, que tan liga estabd cntonees con %, Todos los historiadores de la prensa han insistido en la importancia de este personaje, Almansa y Mendoza, sevillano advenedizo en la Corte de Madeid. Almansa y Mendoza estuvo vinculado a los mds importantes personajes de Ja politica, y desde su puesto privilegiado supo describir la ajetreada y compleja vida de la Cotte. Fue el primer periodista que realizé una labor tipicamente reporteril. Sus relaciones tienen un tx mafio aproximado al pliego de dos hojas y carecen de lugar y aio de imptesidn, aunque parece que se imprimieron primero en Sevilla y des- pugs en Madrid, La mayorfa de las cartas estén dirigidas a un caballero sevillano, «quien las daba a luz en beneficio del piblico», y también a varios personajes del clero y la nobleza?. Guinard ha aludido a estas relaciones semipiiblicas, semiptivadas, a través de las cuales los publicistas *. Los aos del conflicto despertaron el interés de la gente por conocer noticias sobre 1a marcha de los acontecimientos militares, e hicieron po- sible la produccién de numerosas hojas impresas, sobre todo en 1641, 1642, 1643 y 1644. En relacién con los temas de politica intemacional existe una serie mu- merosa de publicaciones entre las que destacan cuatro ejemplares de 1641 impresos por Jaume Romeu en Barcelona. Todas tienen el mismo titulo general de Novas ordinarias ®. 3A. Domingues Ortiz ha deserito Ia compleja sitwacién de Catalusa en estos afios y ha analiza las causa profundas de la crisis: «...E1 Principado oftecis enton ‘cer una imagen muy distinta dela gue nos es familiar, Novera una regia rica poblada; por eso tuvieron razin aus diputados a reehazat en las Cortes de 1626 y 1632 Fes demandas de Olivares, basadas en una poblacién de un millin de slmas; en realidad no llegaba a ja mitad, st situecién economics era estacionaria y no habia conocido 2 auge de" Castilla ai la fiebre producida por cl comercio indiano, Casi toda sa poblacién era ruta, Slo tenia industrias modestas artsanates. Su jerarquia social Fambidn eta notablemente steaica», El Antiguo Regimen... pp- 388389, Mf Toreent y Re Tass, Le prema... pp. 2227. » Tn estos afgs se produce también ‘ct movimiento revolucionatio portugués, algunos de cuyos hechos! mis notables han sido teflejados en las. hoes” impresss ‘Los. ttulos mis sgnifcativos corresponden a alos cartas: Carta enviada de Portugal ‘on Barcelona « un cavdller devdita Cinta, fentlt rlacié de tot lo que ba succeit al ‘mibaxador de Catalunya a la Ciutat de Lisboa y Carta lealment vertida de Portugaos (on cated, Ua qual wn eabo portugucs escrigue ¢-um religids portugues; dona avis dels Bont succestos que ban tingut las armas del rey de Portugal, don Juan, contra tas srmas del rey de Castella “© Loe ‘ituloe ‘completos de las Novas Ordinarias eran — Novus ordiniias de vint i sineb de maig de mil sis cents cuarente bu, traduida de francés, en noztra lengua catelane, Barcelona, Jauine Roms, imp. Nowa ordiniriss del primer de juny de’ mil siscents quarante bu, Barcelona, Jaume Romeu, imp, S Navas ordiniriae de now de novembre, contenen la retirada de las tropes del uch de Lorena y ts jsticie se ba feta en Amiens del governador de Arras, Batcelona, 1641, Jaume Rozen, imp. Novas ordindtias vingudas ab la estelete de Paris. Contenen las guerras del Pepa, contra fo duch de Parma, Barcelona, 1641, J Romeo, imp., Torrent y Tasis, Historia de la prema... 2. Los precedentes del periodismo en Espafia 45 La gran aportacién de Romeu a Ia historia del periodismo es Ja de haber sido el creador del primer periédico propiamente dicho de la pen- fnsula, Para este autor la importancia y el interés que despettaban los acontecimientos curopeos exigian Ia creacién de una publicacién perié dlica con carécter semanal. El 28 de mayo de ese aio imprimié un periédico de acho péxinas con el titulo de: Gazeta / vinigude a esta / cit tat de Barcelona, per { lo Ordinari de Paris, vuy a 28 de | Maig, any * 1641 [ Traduide de francés, en nostra Uengua catalana, En el primer nd- mero de la Gazeta, y a modo de prospecto, Romeu explicaba el sentido de Ia publicacién: La catiosidad de los impresores de Francia me ha dado ocasién de que tes imite, porgue todo lo que es bueno siempre es imitable, Estas cattas, nuevas verdoderas por tantos tiuloe estén Eechadas y anotadas con Ietra pata que los curiosos puedan Jantar todos los sucess que te desarrollan cada afio en Europa, porque asi tos hist adores puedan ir seguros y advertides, arf continuaré y quien tenga la cutiosidad de Junearlos y encuadcrnatios fo. podeé hacer y quien no conocers los sucesos sequrcs, Impresos ya, enviades cada semana desde Pars. En el siglo xvit_habfa en Espafia otros importantes centros de publi- cacién de gacetas. En Sevilla, donde existfa desde el siglo xvr una rica tradicién publicistica, se imprimié en 1599 una hoja tivulada: La entrada que los Reyes bizieron en Madrid de vuelta de su casamiento de los reynos de la corona de Aragén, domingo veinticuatro de octubre de 1599. Con li- cencia en casa de Clemente Hidalgo, en la calle de la Plata. Halli las bay ®. EL hecho de que Sevilla fuese en estos afios uno de los puertos mas im- portantes del comercio ultramarino la convertfa —como dljimos— en un punto de cita de todos los personajes interesados en las noticias del mun- do, Los aimpresores de molde> acudian a Sevilla a recoger Ia informacién ‘que puntualmente trasladaban a sus gacetas. En el primer tercio del si- glo xvu,, ya aparecia en Sevilla una especie de geceta semanal, ritulada: ‘Avisos de Italia, Flandes, Roma, Portugal y otras partes desde 28 de ju- lio basta 3 de agosto, deste afio de 1625. Dase cuenta de como en el J, Altablla cita unas Novas con el titulo de Novas ordinares, vingudas ab la esta etd de Paris, Contenon lo enterro de Ioan Barrier Senor de Mulbaucar, de Norbas, $e Voerden, Cavller'y Conseller de Estat, ra Mariscal y Generlisioy del exercits de les Argnas de'Suecia, Y donas tambe relacio, de com lo Maraues de los Velez es arvibat Milas y confirma tambe la rebolio de te Andalecia-—-Ab Llicencia: en Barcelona, ex tu'Estampa de lowme Komew, deuant Sant Laue, any 1641, Altabela, «Sintesis cro mnokigicn de Ia historia del petiodismo», en la obra colectiva ditigide por N, Gonzalcz Ruiz El periadismo, Teorie 9 prdctca,'p. 349. "iJ, Horent y R, Tasis, Historia.» p. 29. No se sabe con exactitud Ia duracién gpg vo, puccd; lo mayor dion autres habla de le exten de dee ‘Sp Gascdn de Gotor, «Onigenes y desarrollo del periodismos, Revista Contem- ponines, XXX, WV, 1904, p. 4.ree rere ere Reyna bermana del Rey de Francia, a cuyo acto asistieron y comulgaron mas de 600 catdlicos, Lunes 28 de julio (Sevilla, por Francisco de Lyra, 1625). Eran dos hojas en dos folios y dos columnas. M. Chaves, que ha estudiado la historia de la prensa sevillana, habla de la existencia de un rico movimiento periodistico en la ciudad, y asegura que ya en 1619 exis tla alli una publicaci6n titulada Noticias de Sevilla Parece un hecho comprobado que bajo diferentes titulos: Relaciones, Relaciones breves, Avisos, Noticias, etc., se publicaban en diferentes ciuda- des espafiolas imptesos de periodicidad variable y de contenido similar: politica interior y, sobre todo, noticias internacionales. La aparicién de la Gazeta de Madrid, en 1661, supone —como vere- ‘mos— Ia culminacién del género y representa la més importante aportacién periodistica del sigho xvu. LAS GACELAS EN EL SIGLO AVIT 1. El medio histérico Cuando comienza a publicarse la Gazeta de Madrid, en 1661, Espaiia vive una crisis profunda que se habia iniciado a principios del siglo. Felipe IV permanece en ef trono hasta 1665, pero ya algunos afios antes hhabian desaparecido de la escena politica sus més destacados protagonis- tas: Olivares en 1640, Luis XIII en 1643 y Richeliew en 1642. La si- tuacién nacional e internacional era eadtica en el plano politico, social y econsmico. Los movimientos separatistas de 1640 —saldados con la pér- dida de Portugal en 1668— habian producido un duro golpe en Ta con- ciencia del pueblo, a pesar de la vuelta a la obediencia espaiiola de Catalufia, Jo mismo que de Aragén y Andalucia tras el fracaso de las aventuras de Hijar y Medinasidonia, Népoles y Sicilia redujeron también, de momento, sus impetus revolucionatios originados, en opinién de Rosario Villari, por Ia ctisis econémica europea y la evolucién del Estado en el siglo xvi! Kamen, el més reciente historiador del reinado de Carlos II, ha in- sistido en Ia dramética situacién espafiola en 1665 a la muerte de Fel 3 Clr, Rosario Villa, La seouelts antiespaiole en Népoles. Las origenes (1584. 41647). Ei misao autor Insiste en el fracaso econémico como causa principal de levan: tamiento: «La quicbca de los pequetios inversionistas, el recrudecimiento de as dif cultades comerciales y el caos administrtivo fueron las consccucneias infs evidentes dde la crisis financiera que precedié a Ia revoluciSn» (p. 192). Alude tambien. Villar 4 la general conviccién de los italianos de. que los gastos militares espafoles ea [a “sma fase de a Guerra de los Treints ios corsian cist exclsivamente 4 eatf0 sde'los napotitanos (p. 194) a